Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Anatomía de Sabaku No por Rukkiaa

[Reviews - 496]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Disclaimer: basado plenamente en la serie Anatomía de Grey, de Shonda Rhimes y con los personajes de Naruto, de Masashi Kishimoto.

Wiii el primer capi de 2013!!

Los pensamientos de este capítulo son de Sasori XD

¿Qué he hecho yo para merecer esto?

A veces, hasta las mejores personas toman decisiones precipitadas. Malas decisiones. Decisiones de las que somos conscientes de que nos arrepentiremos a la mañana siguiente. Bueno...tal vez no del todo. Porque por lo menos, nos hemos lanzado. Pero, aún así, algo en nuestro interior decide hacer una locura que sabemos que se dará la vuelta y nos morderá el culo.

Pero la hacemos de todos modos.

La mañana siguiente. Sasori estaba en su cuarto, sentado con la espalda en la cerrada puerta. Gaara, sin poder pegar ojo, estaba tumbado boca arriba en la cama. Pero ya era hora de levantarse.

A ninguno le apetecía encontrarse con el otro. La situación era muy rara después de lo que había pasado entre ellos.

Lo que quiero decir es que recogemos lo que hemos sembrado. Nos devuelve nuestros actos. Es el karma y lo mires por donde lo mires, es un asco.

Se encontraron en el pasillo. Pero no se dijeron nada.

En los vestuarios, sus compañeros empezaron a darse cuenta de que pasaba algo entre ellos.

-Apuesto cinco mil yenes a que Sasori le pilló con Kakashi Hatake en la cama-dijo Kiba riéndose y recibiendo una colleja de Sakura en el brazo.

-Espero que no-dijo Sasuke que era el único que estaba de pie junto a una taquilla.

-No sé, pero aquí pasa algo-dijo la pelirrosa.

-Lo pilló con el doctor macizo-siguió Kiba y se ganó la mirada de los otros dos-¿acabo de llamarle macizo?

-Soy testigo-dijo el azabache.

Prefirieron abordarles.

-Chicos...-se atrevió Sakura- ¿qué está pasando?

-Nada-dijo Gaara.

-Sabes que nos enteraremos-dijo Sasuke.

-Podríamos ayudaros-siguió la chica.

-No hay nada que contar-dijo Sasori.

-Eso significa que lo hay-el azabache se reía.

-No hay nada que contar-concluyó Gaara y ambos pelirrojos se marcharon.

Hacen la ronda.

En uno de los pasillos, un nervioso Sasori aborda a Sasuke.

-¿Os ha dicho Gaara algo...algo de cualquier cosa?

-No ¿algún cotilleo?

-No.

-Estoy trabajando.

-Mejor, porque no quiero hablar de eso-parecía todo lo contrario.

-Vale, pues no lo hagas.

-¿Me has oído?

Como decía, la venganza es una furcia.

Gaara y Kiba se hacen cargo de un niño que ha recibido un golpe en la cabeza. Sasuke, Sasori y Deidara de un hombre con un aneurisma en el corazón.

Ino vuelve al hospital, ha sufrido un síncope y la traen en ambulancia. Sakura, que está fuera, la ve llegar y se preocupa. Se queda con Deidara que le atiende de urgencia y la pelirrosa no se separa de su lado.

Enviaron a Ino a la unidad de cuidados intensivos y en un pasillo, Deidara habló con Sakura.

-Haruno ¿estás bien?

-Es que...esto no es justo. No me parece justo. Tratamos a idiotas a diario, los curamos y se marchan, se lo merezcan o no. No importa, pero Ino es una buena chica doctor. Es una buena persona con un corazón que falla y...solo podemos esperar.

-Créeme lo sé, llevo muchos años tratándole.

-No se lo merece.

-Se merece el mejor tratamiento cardíaco y se lo damos-la miró uno instantes-te gusta mucho ¿verdad?

-Es que...es que no se lo merece.

De pronto una de las máquinas comenzó a pitar sin cesar. Y Sakura corrió a la habitación de Ino, con Deidara pisándole los talones.

La chica seguía inconsciente.

-Hay que controlarle el pulso-dijo Sakura mirando un monitor bastante alarmada-su corazón late muy rápido, hay que bajar las pulsaciones.

-Se parará-dijo asustada una enfermera.

-Intentemos una cardioversión sincronizada-dijo Deidara- dádle cinco de morfina.

-Sakura...-Ino abrió los ojos con lentitud y miró a la chica que estaba junto a su camilla.

-Estás despierta...

La rubia sonrió-esperaba verte aquí.

-Nos haces trabajar mucho.

-Lo que hay que hacer para que una chica se fije en ti-rió con dificultad.

-Vamos a darte una serie de corrientes eléctricas en el cuerpo-interrumpió Deidara- espero que los shocks consigan normalizar tu ritmo cardíaco.

-No te preocupes Ino- Sakura le retiró la ropa que le cubría el pecho.

-¿Me va a doler?

-No será divertido-dijo el doctor.

-¿Podrías cogerme la mano?-preguntó a la pelirrosa, que ni lo dudó. Aunque por las descargas, tenía que soltarla.

La primera descarga no funciona, y a Ino le duele mucho. Por fortuna, la segunda si.

-Dios mío...

-Ino, eres una chica afortunada-dijo Deidara.

-Doctor...es para matarle, hacerme llorar como un bebé delante de una chica a la que quiero impresionar.

Esto hizo sonreír a Sakura.

Sasori y Gaara seguían evitándose el uno al otro cada vez que se veían. Así que el pelirrojo mayor se escondió en una sala de espera. Hasta que llegó Kiba.

-¿Qué haces?-preguntó y se sentó en una silla cercana.

-Me escondo.

-Vale, te acostaste con Akasuna No. Supéralo ya.

-¿Te lo ha dicho?

La cara del castaño cambió. Lo había dicho por decir- ehm no. Estaba de coña, aunque no me sorprende.

-¿Por qué no?

-Porque cuando tu vida es un asco te emborrachas y te acuestas con gente inapropiada. Tú eres así, pero bueno, es bonito.

-Tu te acuestas con gente inapropiada cuando estás sobrio.

-Yo no lo hago por despecho. Akasuna No, no va a superarlo.

El pelirrojo le fulminó con la mirada.

-¿Se lo has dicho?-Sasori había aparecido por la puerta y estaba visiblemente molesto-es...cuando me equivoco con alguien...

-No, no, Sasori...

-Me equivoco de verdad-el chico empezó a marcharse.

El castaño y el otro pelirrojo le siguieron por el pasillo.

-¡No es lo que piensas!-dijo Gaara.

-Cálmate-dijo Kiba.

-¡Cálmate!...tu...yo no pienso...calmarme-estaba tan rabioso que ni le salían las palabras.

Sakura y Sasuke llegaron.

-¿Qué pasa?-preguntó la pelirrosa.

-El bebé está que trina-dijo Kiba.

-Oye, ¿por qué te pones así?-Sakura intentó sujetar a su mejor amigo, pero éste se soltó del agarre.

-Crees que alguien es tu amigo ¿sabes? y crees que respetará tu privacidad.

Sasori salió a las escaleras.

-¿Por qué está así?-preguntaron Sasuke y Sakura a la vez.

-¿No podemos hablar?-preguntó Gaara a Sasori.

-¡No quiero hablar!¡contigo no!¡no quería abrir la boca y si no hubieras estado rehuyéndome cada vez que me veías lo habrías sabido!

-Si, tienes razón, pero ¿no podemos hablarlo?

-¡Quieres hablarlo porque le has contado a todo el mundo que nos hemos acostado!

-¡¿Os habéis acostado?!-cuestionó Sakura con asombro.

-¡¿Te has tirado a Bambi?!-preguntó Sasuke de igual modo.

-¿No se lo has contado?-Sasori había metido la pata a más no poder.

-No.

-¡Joder!-dijo, y por accidente y no estar pendiente de los escalones. Cayó rodando por ellos. Bajo la atenta y preocupada mirada de sus tres compañeros de casa y de Kiba, que se reía.

Se dislocó el hombro.

Sasori estaba en una habitación y sus amigos lo observaban a través del cristal.

-Dejadme en paz-les dijo y estos le obedecieron.

-Se le pasará ¿no?-preguntó Gaara a los demás.

-Se ha dislocado el hombro, eso no es nada-dijo Kiba restándole importancia y marchándose.

-No me refería a eso.

-Gaara- dijo Sakura- si no lo solucionas, si no puedes arreglarlo con Sasori, quiero que sepas que si hay que ponerse del lado de alguien, estoy del suyo-apuntó y se fue también.

Gaara miró a Sasuke.

-Es el más débil-dijo el azabache-con los débiles yo ni me peleo. Es fácil.

-He hecho algo horrible. He...he hecho algo terrible.

-Está enamorado de ti desde que te conoce ¿cómo no te has dado cuenta?

Gaara se frotaba las sienes. Agotado.

-Todos hacemos cosas así-dijo Sasuke para que su amigo sintiera algo de alivio y se dispuso a marcharse.

-Me eché a llorar-continuó el pelirrojo-mientras lo hacíamos me eché a llorar y no podía parar...

-¿Tan mal lo hacía?

-No...no era por él...bueno, si, era por ser él.

-Era por no ser Uzumaki.

Gaara se cubrió los ojos.

-Me odio por lo que le he hecho a Sasori. Ni siquiera terminamos de hacerlo, se enfadó y se marchó...y no le culpo.

-Lo superará...dale tiempo.

El pelirrojo menor llevaba un par de minutos esperando a que alguien le curase el hombro. Hasta que un doctor joven, de piel pálida, cabellos negros bastante largos recogidos en una cola de caballo y unos ojos violáceos casi blancos, entró en la habitación.

-¿Sasori Akasuna No?-preguntó tras coger su informe.

-Si, hola.

-El doctor Sasori Akasuna No, eres el del ascensor-dijo sorprendido gratamente. Se refería, claro, al tipo que operó de corazón en el ascensor.

-Si, soy yo-el otro no estaba de humor.

-Fue asombroso.

-Gracias. Me he dislocado el hombro.

-Si...ya-el doctor le examinó.

-No es para tanto.

-Si que lo es ¿qué quieres tomar?

-No quiero analgésicos.

-Mala idea-el chico anotaba algo en su historial.

-No, es que estoy de guardia.

-¿Y vas a seguir?, peor idea.

-Solo necesito que me ayuden a colocármelo.

-Pues has venido al mejor cirujano ortopédico del mundo-dijo y...crack!

Sasori soltó un grito. Pero ya tenía el hombro en su sitio.

-Duele menos de improviso-añadió el doctor como si no hubiera pasado nada y le colocó una férula en el brazo izquierdo.

En el ascensor, Gaara y Naruto entraron a la vez. Estaban solos y surgió una conversación.

-No seas amable-dijo el pelirrojo después de que los ojos azules se le habían quedado mirando fijamente-he hecho algo terrible.

-Bueno, a todos nos pasa.

-No, he hecho algo que no puedo creer que haya hecho y...estaba triste y...voy a perder a todos mis amigos.

-Pero a mi no-dijo el rubio y sonrió.

-No eres mi amigo.

-Si lo soy-parecía ofendido-bueno, podría. Soy un buen amigo. Si olvidas el puñetazo a Kakashi.

-No, es imposible.

-Si somos amigos tendrás mucha suerte.

-¿Cómo?¿cómo podemos ser amigos?

-Podríamos quedar. Sacar a pasear a Akamaru por la mañana. Tomar un café, ver como juega y discutir la complejidad de la existencia.

-Claro.

-Sería muy divertido. Podríamos ser amigos Gaara.

-No, no podemos ser amigos-dijo y salió por las puertas del ascensor.

Sakura fue a ver a Ino.

-La presión de tu sangre está estable, te has recuperado y la fibrilación atrial está resuelta.

Ino rió-que bien dices fibrilación.

-Fibrilación- repitió divertida la pelirrosa.

-Si-ambas rieron.

-¿Cómo estás?

-¿Crees en el karma?

-Ahm...creo que si. Si.

-Pensé que serías mía-dijo Ino sin rodeos y con esa sonrisa que no abandonaba su rostro a pesar de las circunstancias.

-Habrás sido muy buena para merecerme- Sakura tampoco podía dejar de sonreír como una colegiala.

-Lo he sido.

Sasori y Sasuke caminaban por un pasillo. El azabache llevaba un libro en las manos.

-¿De verdad no te lo contó?-preguntó el pelirrojo.

-No. ¿Es que eso es malo?

-A ti te lo cuenta todo. No lo considera importante para contártelo.

-Sasori la autocompasión no es buena. Si quieres que dejen de pasarte cosas malas tienes que dejar de aceptar la mierda y pedir algo más. De todos modos, ya sé lo que pasó y también la culpa es tuya porque sabes que sigue queriendo a Uzumaki, eso no te pillaba de nuevas-añadió y se fue.

Sasori decide irse de casa, se mudará con Deidara.

-¿Por qué haces la maleta?-preguntó Gaara en el umbral de la puerta de su dormitorio.

-Ya no vivo aquí-dijo mientras seguía con su tarea a pesar de tener el brazo en cabestrillo. Entonces se decidió a mirar al pelirrojo-¿por qué?, solo quiero saber por qué si...si no querías...

-Yo no sabía que no quería. Estabas aquí, y me estabas diciendo unas cosas tan bonitas, y yo estaba triste...así que pensé, 'tal vez no he prestado atención a algo que tenía delante de mi'. Y quise darte una oportunidad, porque eres Sasori y eres tan bueno. No sabía que no quería hasta que supe que no quería.

-Ya...vale.

-¿No podríamos volver a estar como estábamos?

-Eso es imposible. No, esto se ha acabado-dijo y salió por la puerta.

De una forma u otra, nuestro karma nos obligará a enfrentarnos a nosotros mismos. Podemos mirar al karma a los ojos o esperar a que nos ataque por la espalda. De un modo u otro, nuestro karma acaba encontrándonos.

Sakura no tenía guardia. En teoría debía irse a casa. Pero fue a los vestuarios, se puso su ropa de diario, hizo un par de compras y volvió al hospital.

A la habitación de Ino.

-Hola-estaba radiante, incluso se había pintado los labios y ondulado el cabello.

Ino levantó la vista del libro que estaba leyendo-que guapa-dijo sonriente.

Sakura colocó una bandeja sobre la camilla y empezó a sacar cosas de unas bolsas. Un pequeño mantel, un par de copas, platos, una botella de zumo y algunas cajitas de comida china.

-Vaya-dijo la rubia-reconozco que no imaginaba así nuestra primera cita.

-¿Qué dices?, he tenido que esforzarme para que apareciera alguien tan guapa.

Ino la miró unos segundos-¿te parezco guapa?

La otra sonrió-anda cállate y bébete el zumo.

La verdad es que como cirujanos tenemos más oportunidades de que la balanza caiga de nuestro lado. Por mucho que lo intentemos, no podemos escapar de nuestro karma. Nos persigue hasta casa. En realidad no podemos quejarnos de nuestro karma. No es injusto. No es inesperado. Solo iguala la balanza.

Era una locura. Nunca iban a ser amigos de verdad. Ambos se querían aún y así sería durante mucho, mucho tiempo. Pero Gaara no pudo evitarlo. A la mañana siguiente, salió con Naruto y sacaron a pasear a Akamaru.

Incluso cuando estamos a punto de hacer algo, el karma siente tentaciones de mordernos el culo. Aunque nos da igual. Lo hacemos de todos modos.

Continuará...

Notas finales:

Canción: Anna Nalick --> Wreck of the day

http://www.youtube.com/watch?v=CqCCKKQkbc0


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).