¡Hola Ali!
¿Cómo estás? ¿Qué tal tu semana? La mía bastante interesante…
Esta semana la considero de aprendizajes profundos. ¿Aprendizajes profundos? ¿Sobre cosas de la facu? ¡Claro que no! Sobre cosas de la vida (que claramente es más interesante)
Pues la cosa estuvo así, ya ves que te había contado que en unos días es cumpleaños de mi sirena y que estaba rompiéndome la cabeza para encontrarle el regalo perfecto (seguro que te acuerdas, hasta me dijiste que era una ridícula por andarme complicando la existencia cuando seguramente lo que deseaba Sofía era “una noche de harta pasión”) pues resulta que ya supe que quiero regalarle…
En la noche del domingo llegó Omar a retar a mi sirena en un videojuego… lo pusieron en la sala (valiéndole a Omar que ella y yo estuviéramos “no-viendo” una película) y los vi pelear en la pantalla una y otra vez… ya ves que los juegos de ese estilo no son lo mio, así que solo estaba ahí, viendo como mi sirena intentaba ganarle, pero no lo lograba (en realidad a mi me parecían divertidísimos los gestos de “concentración y batalla” de mi hermosa sirena… ¡Cómo me encanta todo de ella!) . Luego de un buen rato, apostaron la cena, ella obviamente perdió, así que me levante a ayudarle a preparar algo… mi sirena se puso un poco de mal humor, pues el ridículo de Omar no paraba de burlarse de ella, yo solo le gruñí y luego lo amenace con correrlo del depa si seguía jugándole al vivo… se rindió al fin, y fue a comprar mermelada para hot cakes que ella y yo nos quedamos a preparar, así que sintiéndome un poco más libre me acerque a ella y la besé como si no hubiera un mañana con el pretexto de quitarle el mal humor… ella me sonrió súper lindo y me dijo que lo había logrado… me quede cerca, Omar volvió y Diana llegó de la facu, así que nos sentamos todos a cenar… el empezó otra vez a hacerle burla a mi sirena (yo tenía planes de aventarle algo.. solo que no encontraba nada lo suficientemente doloroso para usar) y ella respondió que le iba mejor en el play station 1, porque era el que tenían en casa hace mucho tiempo, que pasaba horas jugando con sus hermanos y que le traía muy buenos recuerdos, de infancia feliz pues. Vi como sus ojos se iluminaron cuando estaba contando eso, así que decidí que había encontrado el regalo perfecto…
Puse toda mi atención (fingiendo que no, claro) a los títulos de los juegos que Sofía iba diciendo… terminando de cenar prendí la compu para empezar a buscar… (con ciertas complicaciones por cómo se escriben algunas cosas) vi que si los hay todavía, por internet uno puede encontrar de todo… pero empezó a ser muy frustrante, porque que si “le faltan cables” “el láser no sé qué” “no funciona del todo” “no tiene control” o bla bla bla… entendí que es una consola antigua y descontinuada… iba tomando notas de las mejores opciones cuando al fin el inútil de Omar decidió irse y entonces nosotras nos fuimos a dormir… cuando nos estábamos acomodando en la cama (porque nos fuimos a dormir directamente… si ya se, aburridísimo, pero bueno) mi sirena me vio y me dijo que parecía muy feliz, yo no le dije nada, solo la abrace, derramamos miel un rato más y nos quedamos dormidas.
Ayer en mis divertidas clases administrativas (nótese el sarcasmo) volví a mi investigación sobre la consola de videojuegos para mi sirena… encontré al fin una que prometía, acorde verme con el vendedor en un punto lejano de la facu, pero no importaba… le pedí a Natalia que me acompañara y aceptó de mala gana (no me encantaba la idea de ir sola, podría ser peligroso y esas cosas por las que siempre me regañas)… mi chica tenia laboratorio en la tarde, así que no tenía que inventarle nada.
Fuimos a la hora que habíamos dicho y el chavo no llegaba… esperamos y esperamos y nada… Nat estaba poniéndose insoportable y yo solo intentaba no ahorcarla. Luego de una hora (donde intente como un millón de veces contactarlo) decidimos irnos… estaba de tan mal humor por la pérdida de tiempo… pero aún con esperanza, contacté a una segunda opción... otro chico que nos citó más lejos… y que adivina… nos volvió a plantar…
Cuando íbamos de regreso, le escribí ya casi derrotada (la aferrada me dicen jajaja) a mi tercer opción y la vendedora me dijo que podría verla en ese momento, así que le pedí al taxista que en lugar de regresarnos a la universidad nos llevara al nuevo punto de reunión… Natalia estaba que se la llevaba el tren (no le había explicado exactamente a qué íbamos). Llegamos y la chica ya estaba ahí, me enseño la consola, unos cables y dos controles… llevaba varias cajitas con discos, al final encontré los que necesitaba, elegí otros que también parecían interesantes, le pague y nos fuimos… yo no podía estar más feliz (hasta olvide por un momento que llevábamos toda la tarde en esto, claro que Natalia no estaba feliz y daba demasiada lata)
Nat me pregunto qué porque era tan importante encontrar la consola… yo solo le dije que era importante para mí y que ella me debe varias, así que no debía quejarse… igual estuvo jodiendo todo el camino, hasta que llegamos al depa… le dije a Nat que le daría de cenar si se callaba… al final, se rindió y como todavía faltaban unas dos horas para que Sofía volviera, me decidí a probar el videojuego esperando que funcione (¿te imaginas la vergüenza y el coraje enorme que sentiría de que mi sirena abriera el regalo, sus ojos se iluminaran… para que el ridículo juego no prendiera?)
Lo conecté según instrucciones de san google, lo prendí y ¡voila! ¡Funcionó! Nos pusimos a jugar y vimos que las imágenes tenían muy poca resolución y que el juego (el mencionó Sofía como su favorito) era bastante simple (un lobo/perro rockero que va viajando por mundos para recuperar unos cristales para sabrá Dios que) pero divertido. Natalia seguía de malas y yo estaba lo suficientemente feliz como para discutir con ella… Diana volvió de la facu y me vio sentada en el piso con el control, se me quedó viendo y de pronto (sin considerar que Nat estaba ahí) soltó un “¡Qué linda eres! ¡Sofía mencionó que quería ese juego y ya se lo conseguiste!” Yo me puse de mil colores… y aunque le hice señas a Diana para que se callara, Nat había escuchado suficiente y empezó a dar lata de nuevo…
Nat empezó con el drama de que no podía creer que todo el show de antes fuera por mi sirena, Diana escuchó el inicio y se fue a su cuarto (cobardemente, claro), yo solo la seguía escuchando… esperando que la tierra me tragara (no lo hizo, por desgracia) y me preguntó ya muy ofendida “¿qué chingados te traes con la hippie?”, a mí me encendió lo de “hippie”, ¡ya le he dicho millones de veces que le deje de decir así! ¡Que me enoja! (me recuerda lo idiota que fui con ella antes), así que empezamos a gritar las dos, perdiendo la cabeza… ella gritaba que porque había cambiado tanto con mi sirena, que qué tenía, ¿Qué hace diferente a Sofía? Porque, aunque yo siempre evitaba el contacto físico con las personas, con mi sirena eso no parecía aplicar, que su cercanía y su mano en mi cintura, en mi hombro o en mi mano no me molesta…me dijo que nos vemos diferente... que en ella no sabe que significa, pero que podría apostar que yo a ella la veo con cariño y me recordó, lo que para ella es “evidencia contundente que algo pasa entre las dos”, hace unos días esperábamos clase y yo estaba sentada en el piso, mi sirena se acomodó acostada con su cabeza sobre mi pierna y “lo peor”, yo respondí acariciando su cabello, sonriéndole…
Nat gritó más fuerte, ¡¿Qué tienes con ella?! Y yo empecé a sentirme acorralada… a pesar de que creí que somos discretas, Natalia notó algo… así que como hago cuando me siento sin opciones… me traiciona el subconsciente así que le dije que es mi novia
Natalia se quedó fría, me vio como si le acabara de decir que como bebés en el desayuno, era como si no me conociera, como si estuviera cometiendo el peor error y hasta algún delito… sin decir nada se fue… Sentí bien feo, horrible, porque no me dejó explicarme ni nada… odio admitir que se me salieron algunas lágrimas… me rompió el corazón un poco, ¡se supone que Natalia es mi amiga, una muy cercana! ¡se supone que está conmigo en las buenas y en las malas! (y esto ni siquiera aplica como una mala) Y eso no es todo, el problema principal fue que Natalia fue a buscar a mi sirena, la encontró de salida ya solo con algunos compañeros y empezó a insultarla… lo bueno es que Omar intervino y defendió a mi chica… le pidieron a Natalia que se relajara y que tomara todo con calma, que nuestra relación es seria y así, no pasó a mayores ni nada, pero no fue algo agradable.
En fin, Sofía volvió a casa prácticamente corriendo, vi su carita asustada por mi y a pesar de querer no tomarle importancia, no pude… me quedé un rato sufriendo (porque a veces soy débil y así jaja) intentamos hacer tarea, pero realmente no podíamos concentrarnos… así que mejor decidimos ir a descansar, había sido un día suficientemente largo
Igual luego de dos tortuosos días aprendí dos cosas:
primera, Natalia puede ser medio idiota, pero al final me quiere (si, se comportó como idiota, evitándome, sacándome la vuelta sin ningún tipo de contemplación, sentándose en otro lugar a propósito…) porque al final de dos días de desaires, llegó al depa a hablar conmigo… mi sirena se puso muy a la defensiva (no quería ni dejarla pasar… se puso muy ruda, se la tragaba con la mirada y la tensión entre ambas era muy grande… nunca la había visto así) al final, Sofía aceptó dejarnos hablar a solas (claro, primero le dijo que como me lastimara más de lo que ya había hecho se las iba a ver con ella –Dios, que dulce… toscamente dulce, ¿verdad?). Natalia se disculpó, dijo que era algo impresionante y raro… que si estaba segura que quería estar con Sofía, yo dije que sí y ella concluyó, a pesar de “pensar que es una locura” iba a seguir siendo mi amiga… Me pidió disculpas por no saber lidiar con la noticia… prometió intentar llevarse mejor con Sofía y bueno, aunque le dije que todo estaba bien, la verdad no creo poder volver a confiar totalmente en ella, al menos no por ahora, en fin.
Segunda, Sofía es más cálida de lo que creí… es demasiado linda, amorosa, súper tierna, hermosa… y mil virtudes más. ¡Estoy tan enamorada! Bueno, has de cuanta que esos dos días fue más tierna y dulce, sentándose conmigo, invitándome a salir para no tener mucho tiempo de pensar en Nat, tomando mi mano, besándome y abrazándome más (claro, siempre a escondidas de todos)… y esa cálida sensación que descubrí hasta que empecé a salir con mi sirena, el sentirme amada todo el tiempo con pequeños gestos, como con una simple mirada, con una sonrisa… el que siento que me ama sin necesidad de tocarme o decírmelo, es perfecto.
Tercero, esto será más difícil de lo que pensé… si Natalia, que es mi amiga (o algo así) que me conoce y que sabe quién soy me salió con esta babosada… ¿Qué me espera los que no nos conocen? ¿Con la gente de mente más cerrada? Mi familia no es precisamente de mente tan abierta… y peor, me choca admitirlo, pero me dolió la situación Ali… mucho… no sabía que soy tan sensible a este tipo de rechazos…
Cuarto… y más importante… esto vale la pena. Estar con Sofía, definitivamente, vale todo.
Y bueno, creo que eso es todo… estoy esperando que mi preciosa sirena llegue de hacer compras con Omar, claro puro pretexto para darme tiempo a hacerle algo delicioso de cenar y preparar algo bonito para festejar su cumpleaños… espero que le guste (al menos para que el mega-drama-semanal haya valido la pena)
¡Nos vemos Ali!
Por cierto, en vista de las nuevas circunstancias, creo que nunca te agradecí suficiente por haber tomado todo con tanta naturalidad, por aceptarme y quererme tal como soy… inclusive por ayudarme a ser feliz aceptándome a mí misma y a Sofía en mi vida… ya lo valoré y no sabes cómo te agradezco que seas una hermana para mi… ¡Te adoro Ali!