El puño que se impactó sonoramente sobre el pómulo derecho hizo trastrabillar a Itachi, a su lado Deidara dejó salir un pequeño quejido de dolor y luego vociferó vulgarmente un muy claro “pártele el culo a ese cejotas”, lo que estaba viendo rallaba en lo absurdo, no pensaba que el siempre calmado y bien portado Itachi Uchiha se fuera a prestar para una apuesta como ella, quizás no había medido las consecuencias, por que el moreno de cabello corto, corte tazón, abundante cejas grandes y en exceso grandes ojos, muy a parte de su extraño sentido de la moda, era un excelente peleador, tenia una velocidad increíble y una precisión que parecía sobrenatural, atinaba a darle al mismo punto mas de 4 veces y eso era lo que estaba poniendo e problemas a Itachi
-recuerde cumplir con lo acordado Itachi sempai- dijo rock lee dando unos brincos hacia atrás al mejor estilo de un boxeador experimentado
- por su puesto, un buen hotel y lo que quieran pedir a la habitación- contestó el mayor pasándose la mano por la frente para quitarse una molestas gotas de sudor
-un bonito transporte también y recuerdo que es para tres
-el transporte no lo habías incluido- refutó Itachi asestando un golpe al estomago
-yo no he aceptado ir- se escuchó la queja de un chico de ojos perla en el fondo del salón
-no te quejes neji que siempre terminas accediendo- recalcó de nuevo Itachi recordándole las veces en que se dejó convencer y arrastrar por el inquebrantable espirito de su contrincante
-eso es cierto- sonrió- nadie puede resistirse al deseo que emerge desde los corazones jóvenes, la llama de la juventud no se puede apagar con facilidad
-cállate cejotas que Itachi va a partirte en dos y escupirá en tu jodido cráneo- vociferó de nuevo Deidara saltando insistentemente mientras sacudía a Naruto por los hombros- vamooos ita chan!!! Tu puedes amor!!! Muéstrale quien manda!!!
Unas miradas cargadas de diversión cayeron sobre el dúo de rubios haciendo que el menor se apenara y el mayor decidiera ignorarlas olímpicamente continuando con su bulliciosa porra. La sonrisa de su sempai en el momento en que una lluvia de golpes le llegó directo a las costillas le hizo entender la farsa, Itachi era capaz de aguantar y esquivar los golpes con tan precisión que solo fingía recibirlos, no quería ganar desde un principio y estaba dispuesto a cumplir las exigencias del otro a cabalidad, de ante mano sabia que el desapego del mismo por el dinero era fácilmente explotable, quien mas que el mayor de los Uchiha para invitarle el almuerzo diario a él, Deidara y en su mayoría de veces, Hinata y a Gaara aunque el ultimo nunca se sentase con ellos. Sin embargo ese tipo de cosas hacia que el moreno le simpatizara mas, habían charlado y compartido bastante así que podía leerle con facilidad
-voy a mirar que mas hay por allí- le dijo a Deidara sacándole de su rutina de gritos
-pero Ita chan esta peleando formidablemente- se quejó el mayor intentando hacerle un berrinche
-eso parece verdad’tebbayo- contestó Naruto dándole a entender que se había percatado de la farsa
-bien creo que Yahiko va a hacer un par de tattoos y con suerte encontrará un lugar para perforarse, si quieres ir a ver esta en la habitación del fondo- explicó para continuar con su mirada fija en la pelea- golpea antes de entrar es quisquilloso con su arte- le advirtió antes de alejarse lo suficiente- itachiii que esperas maldita seaaaa arráncale de una jodida vez la cabezaaa!!!
La estructura del sotanillo en donde se encontraban no era diferente a la anterior, una habitación central y varias se dividían de ella, se preguntaba por qué habrían construido esos sótanos, no se veían tan viejos como para estar allí desde el principio, es mas en el anterior Deidara le había mostrado un pasillo que conectaba con otro sótano en un edificio un poco alejado, podía apostar que era una construcción pensada para ser conectada una con la otra, como una telaraña de ladrillos y cemento meticulosamente construida bajo la escuela, y si era así, donde estaba la puerta principal?; neee ya estaba delirando, las clases de programación mezcladas con algunas de economía y finanzas sumadas a pensamiento artístico creativo te hacían pensar en historias extrañas y traídas de los pelos, como la de aquel súper héroe que habían esculpido el martes anterior, capitán yogoso, con el increíble poder de producir y convertir casi cualquier cosa en yogurt de fresa( alerta, copia descarada de las sombrías aventuras de Billy y mandy, demasiado gracioso para dejarlo pasar), pobre capitán, vio el final de sus días por un petardo en forma de cohete que le enterró en el pecho el mas cruel de los villanos jamás existidos, dei el magnifico.
Se permitió soltar una risita, las historias extrañas que habían inventado entre ellos quizás jamás tendrían un éxito comercial, pero valla que si les arrancaba carcajadas a los tres.
Como le había advertido Deidara, golpeó la puerta antes que esta se abriera dejando ver a un chico de cabellos naranjas y múltiples perforaciones en la cara, sus ojos oscuros con expresión vacía le exigieron confesar de inmediato la razón por la cual se atrevía a interrumpirlo
-Deidara sempai me dijo que ibas a tatuar a alguien’tebbayo me preguntaba si podía ver como lo hacías- expresó el rubio esbozando una torpe sonrisa
- por mi no hay problema entra rápido, lávate las manos y los brazos, en el rincón hay tapabocas, ponte uno, pero rápido que dejé a Uchiha a medias
-a Sasuke?- preguntó inquieto- huuuuu si es el, mejor vuelvo para ver después dattebayo
-deja de perder el tiempo y entra que se me desinfecta la habitación- exclamó arrastrándolo sin siquiera escucharle
Ya dentro le señaló la pila con agua y los productos que debía utilizar para asearse como le decía, indicándole la importancia al hacerlo, pues no deseaban adquirir enfermedades que se esparcieran con facilidad por los integrantes del club, es importante la prevención, resaltó antes de girarse y dirigirse a una silla y una improvisada camilla, Naruto alargó lo mas que pudo el tiempo que le tomaba asearse las manos y los brazos y ante cualquier queja de demora o burla por ello respondía argumentando que la seguridad merece cualquier tiempo extra, al terminar y ya no quedarle excusa alguna, se acercó a Yahiko, quien con habilidad pasaba un artefacto, que bien le parecía una mini maquina de tortura, por la nívea piel que cubría el trapecio de Sasuke.
Le miró tímidamente y el moreno le vio con tranquilidad, luego le dio una sonrisa que solo obtuvo como respuesta por un sonoro “tsk”, era de esperarse, ese sonido era la frase favorita del chico, miró alrededor y vio otra silla, la acercó y se sentó bastante cerca para mirar fijamente como la mano del peli naranja se movía sobre la extensión.
Se veía doloroso, la aguja entraba y salía una y otra vez emitiendo un sonido rítmico, la piel se le erizó al notar la similitud del mismo con el de las fresas de odontología, la tinta negra salía con insistencia mezclándose con la sangre que lloraba de aquella piel de porcelana, miró de nuevo el rostro de quien ostentaría aquel diseño, quedándose hechizado por la leve mueca de dolor que hacia el mismo en aquel instante.
-esta es una de las partes mas dolorosas, la piel en esta zona es muy tierna- expresó Yahiko anticipándose a alguna queja- aparte debo repasar sobre los bordes
-por que quisiste tatuarte teme?- preguntó Naruto imitando la mueca
-por que no hacerlo- respondió escasamente y escondió la cara de la vista de los otros dos
-listo, terminé- expresó con alegría el mayor después de un buen rato en silencio- no estuvo mal para una hora no?
-una hora?-chilló Naruto aterrado -valla tortura dattebayo
Yahiko lo miró frunciendo el ceño y luego soltó una carcajada, casi todos los miembros del club tenían un tatuaje hecho por sus manos, era cuestión de tiempo para que ese chiquillo pasara también por ellas- toma, quedó genial no?- le dijo a Sasuke tendiéndole un espejo para que apreciara el trabajo
Sasuke se veía satisfecho, y Naruto no entendía porque, la piel la tenia roja y se notaba que estaba próxima a sangrar de nuevo, la cicatrización iba a ser dolorosa y algo larga, la extensión de piel afectada no era mucha pero tampoco era poca, y la zona representaría un problema, roces constantes con la tela del uniforme y las camisas oscuras que usualmente usaba el Uchiha los fines de semana no le darían ningún descanso. Si era un diseño que le quedaba bastante bien, las 3 formas similares a unas comillas encerradas en algo parecido a una antigua escritura le daban un aire a demonio cautivo en la tierra, como uno de esos seres sobrenaturales que abundaban en los mangas que solía leer, pero aun así no le veía mayor utilidad
-se be bien- aceptó Sasuke sonriendo satisfecho - toma aquí esta el pago acordado- Yahiko recibió la caja con rapidez, y como un niño que abre un regalo de navidad miró maravillado el interior, macaron, deliciosas macaron, konan había decidido prohibírselas diciendo que lo ponía demasiado hiperactivo, pero ella no estaba en ese momento allí, por eso se permitió olerlas, mirarlas y babear por sabor que se aproximaba a degustar- es un pago muy extraño por un tatuaje
- si que lo es tebbayo- reafirmó Naruto asomándose a ver el contenido de la caja
-cuando llegues a mi edad sabrás lo que uno puede hacer por algo que le gusta- refutó el hablando como un hombre cuyo peso de los años se diferenciaba en mucho de los chiquillos cerca suyo- pero bueno para que no digas que soy mezquino y avaro te haré un regalo- se giró dirigiéndose a su bolso, y sacó de allí una caja de plástico transparente-escoge la joya que quieras- Sasuke extendió la mano y señaló un diminuto tubito plateado con dos bolitas rojas a cada extremo
-vas a obsequiarme una perforación? – Comentó burlón acomodando la espalda- valla generosidad
- bien, Naruto levántate- demandó situándose detrás del rubio- abre la mano y relájate- le dijo poniéndole unas pinzas largas terminadas en dos círculos metálicos en la punta- vamos a hacerle un regalo a tu amigo
Antes que alguno de los menores pudiera quejarse o decir algo para negarse, la pinza ya tenia el pezón izquierdo de Sasuke atrapado en ella, ese pequeño botón no tardó en ponerse de un rosa intenso por la presión, Naruto tragó pesado, Sasuke solo arriscaba un poco la nariz y levantaba levemente un labio dejando a la vista una hermosa línea de blancos dientes
-Esta frio- se quejó y Yahiko en venganza apretó la mano de Naruto para que la pinza ejerciera más presión
-El frio pasará pronto- le dijo divertido soltando la mano del rubio- bien toma esto- llamó de nuevo la atención de Naruto quien solo abrió mas los ojos sorprendido- debes pasarlo por la mitad de los aros, y luego pondremos esta y ya, Sasuke tendrá un lindo regalo de ambos
Nunca había agarrado o tocado el pezón desnudo de una chica y mucho menos el de un chico, sus manos temblaban y su corazón bombeaba con desespero, sentía que su voz interna gritaba descontrolada recordándole una y otra vez que no solamente estaba a garrando con fuerza aquella zona tan sensible del cuerpo de otra persona sino que lo estaba haciendo con una pinza metálica y disfrutaba al hacerlo, se sonrojó al notarlo y enfocó la aguja hueca que tenia en la otra mano, miró a Yahiko y este solo le animaba a continuar, luego vio a Sasuke quien con un ligero sonrojo rehuía de cualquier contacto visual, inconscientemente, apretó mas la pinza, y Sasuke dejó salir un suspiro mezclado con un gemido , haaa maldito Sasuke, gritó de nuevo su voz interna cuando Naruto casi se desmaya por lo sugerente que le había parecido aquella acción.
Encogidamente estiró la mano acercando la aguja al botón ya rojo de aquel blancuzco pecho, lo atravesó de golpe, sin detenerse un solo instante, y de nuevo la boca de Sasuke dejó escapar otro suspiro, aun mas lastimero y sensual a sus oídos, cuanto hubiese querido no estar bajo la atenta mirada del peli naranja para así haberle reventado los labios a ese bastardo de un solo beso
La aguja reposaba entre la carne, dando unos pequeños saltitos a causa de la respiración del moreno y el nerviosismo del rubio, y a Yahiko la situación le parecía una comedia total, guardando la risa que amenazaba por salir, se recordó a si mismo, a konan y Nagato en el instante en que sellaron su pacto de amantes, la dulce mano de Nagato fue la que perforó el labio de konan, konan perforó la parte superior de su nariz y el la lengua de Nagato, ese acto, que tubo mas lagrimas por parte de los chicos que de la chica, convirtió a tres personas en uno solo, y ese par le reviva la situación, el nervosismo y la excitación estampada en sus rostros, el sonrojo y la vergüenza de sentirse dominado y domínate respectivamente.
-Naruto debes continuar o dejaras un hematoma- se permitió interrumpir pues sabia que ninguno de los dos hará nada por si mismo
-si..- musitó susurrante tomando la barra de metal que le alcanzaba Yahiko
-si que se te ve bien Uchiha- alabó el mayor cuando la tarea estuvo realizada y la pinza devuelta en su mano- el remolino rojo es una joya simplemente hermosa
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-es una suerte encontrarte solo- expresó la chica de cabellos lila opaco- o bueno lo “solo” que te permites estar- continuó pasando los ojos oscuros por Kabuto
-eso suena a recriminación Guren chan- contratacó el peliblanco esbozando una altanera mueca
-cállate cuatro ojos ella solo viene a hablar con Orochimaru sama- intervino el que se veía mas joven de los cuatro
-oh Yukimaru que forma de expresarte- participó por fin Orochimaru maravilladlo de la extraña acción del chiquillo – te ha sentado bien estar con Guren
-ah…ah… gracias Orochimaru sama- contestó el menor ocultándose detrás de Guren esquivando así los ojos amarillentos
- Orochimaru sama- llamó la atención del mismo la joven- hace varias semanas que le había dicho a Kabuto que arreglara una cita a solas con usted- expresó ella y viendo que no llegaba respuesta alguna se permitió proseguir- tal parece que no se le había informado, pero, Yukimaru logró sacarle la noche de la iniciación el frasco de pastillas a Naruto, tal y como ud nos pidió- explicó mientras le acercaba dicho frasco- puedo preguntar que tipo de medicamento es este?
- formidable guren!- se alegró el moreno tomando el contenedor amarillento agitando las pastillas en su interior- pero no puedo decirte que son, tómalo como si esto perteneciera a un secreto de confesión
- guren san y yo merecemos una recompensa no?- dijo yukimaru asomando la cabeza por detrás de la espalda de la chica
- por supuesto Kabuto les dará un par de bolsitas
-solo un par?- refutó guren indignada- la ultima ves fueron 10 para cada uno
-pero la ultima vez fue entrar a la computadora de shizune, no puedes comparar ambos trabajos o si? –preguntó el mayor cruzándose de brazos
-no, por su puesto que no- contentó ella alargando la mano aceptando las pequeñas bolsas transparentes con hojas trituradas en su interior- un par de bolsas es lo ideal
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La pelea se dio por terminada y en contra de cualquier probabilidad, rock lee había salido ganador, para nada bien librado pero ganador al fin de cuentas, el golpe que le dio en el pecho al mayor de los Uchiha le logró dislocar el brazo unos centímetros y Deidara, casi al borde de las lagrimas paró la pelea, por esa razón en ese momento el chico sonreía ampliamente tomando la mano de otro, un poco mas bajo que el y de cabellos castaños muy oscuro mientras una chica con un peinado que recordaba un panda, mirada dulce y piel clara le desinfectaba las heridas del rostro, codos y rodillas. Neji y tenten eran bastante cercanos a rock lee, mas de lo que quisiera el hyuga ser, ya que usualmente él era el que accedia primero a las idioteces y excentricidades que se le ocurría al hiperdinamico chico.
-sigo sin convencerme de ir- dijo neji logrando detener los gestos victoriosos del moreno
-pero nejiiii!!! Habías dicho que si reunía el dinero suficiente para un hotel que estuviera a tu altura accederías- chilló zarandeando a tenten
-yo tampoco estoy muy convencida- articuló con dificultad la chica viéndose mareada por las sacudidas
-no se vale ustedes lo prometieron
-si y habías dicho reunir dinero, y no veo, sino una apuesta mal pensada
-toma lee aquí están las ganancias de la apuesta- interrumpió con molestia kakuzo dejando ir con tristeza una gran cantidad de dinero de sus manos- quien diría que le ganarías a Itachi
-solo fue suerte-espetó neji con molestia
-suerte o no fue un movimiento arriesgado apostar al que se creía que iba a perder-comentó para sacar otro monto de su bolsillo - toma aquí también esta tu parte neji- le dijo sin prestarle gran atención al par de chicos que miraban al hyuga con asombro, para alejarse a paso desganado -ha maldita sea debí segur mi instinto y no las estadísticas
- no que no jijiji- bromeó la chica dándole un par de codazos al mencionado - si neji invita una botella de sake me apunto
-claro que lo hará tenten
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Su corazón aun latía sin control y agradecía a la pared por servirle de apoyo, estaba seguro que de no ser así caería al césped, intentaba procesar lo ocurrido minutos atrás, pero nada tenia sentido alguno. Después de la explicación de Yahiko de lo mucho que le había tomado conseguir la joya del remolino rojo, este se había retirado a quitarse los guantes de látex y lavar los instrumentos, dejándolo solo con Sasuke, y sin saber en que momento, terminó besándole mientras lo sostenía con fuerza de la zona del tatuaje; que diablos le había pasado? Que fuerza misteriosa lo empujo directamente a apresar los labios de un chico con tal necesidad, estaba seguro que él fue quien dio inicio al acto, por que el moreno, aunque no se quejó en lo absoluto si daba unos ligeros movimientos por el dolor que le debía producir la presión sobre su marca recién echa, y a el solo se le ocurría salir corriendo en cuanto calló en cuenta del acto, quizás debía creer cuando le decían que era un idiota.
Pero lo fuera o no, aquella experiencia no dejaba de ser extraña, excitante y perturbadora, pero mas extraña que cualquier cosa, en la vida, se le hubiera cruzado por la mente atravesar a alguien con un metal por pequeño que fuera, pero vamos a comparación con la zona ese metal era enorme, bien, pensar eso no le hacia sentirse mejor; bajando la mirada se dejó caer al piso notando después de un tiempo que tenia un pequeño problema en sus pantalones, solo eso le faltaba, pero como no podía excitarse aunque sea un poco al ver esos ojos negros vidriosos por las lagrimas que nunca salieron, o la boca fina entornarse en leves gestos de dolor, o los pequeños brincos que daba la aguja al ritmo de la respiración forzosamente pausada a la que se obligaba el Uchiha, nadie en sus cinco sentidos podía hacerse ajeno a alguna respuesta al tener semejantes reacciones de un ser tan jodidamente andrógeno enfrente suyo, daba gracias a dormir ahora con Gaara o no sabría como actuar en un par de horas.
-molesto- dijo alguien muy cerca
-ah?
-que es molesto que pase eso amigo-respondió cansamente dándole una mirada perezosa
-ha el chico de coleta!! – exclamó Naruto luego de meditarlo unos segundos-que haces por aquí tebbayo
-la pelea terminó, Itachi perdió y soy shikamaru- resumió acomodándose mejor en el piso para encender encender cómodamente un cigarrillo
-mucho gusto na..
-Namikaze Naruto, lo se, bien Naruto, no se tu pero yo buscaría una chica para deshacerme de eso- le sugirió apuntado con el cigarro la entrepierna del rubio
-ha…ha… yo jejejej pues
-o si prefieres un chico aquí puedes encontrar varios dispuestos, solo pregúntale antes a los sempais, algunos son pareja
-no, no es eso
-prefieres tu solo… bueno… agasájate entonces.. Que chico tan problemático- respondió levantándose para irse a paso desganado
-haaa por que tienen que ser asi aqui!!!
- a… así como na… Naruto kun?
-ho Hinata!- fantástico solo eso le faltaba
-te… pasa…algo?
-no para nada… solo…hace mucho que no estábamos así tebbayo
-So…solos
Le hubiera gustado decir otra cosa, la situación con su novia quizás no era la mejor, si para él era obvia no se imaginaba para la chica, Hinata era grandiosa, una chica educada, tierna, comprensiva, dispuesta a escuchar sus laaaargas platicas sobre lo mucho que amaba el ramen y lo molesto que había sido, en aquel momento, su compañero de habitación, si, habían tenido una par de discusiones, y todas ellas eran sobre lo mismo, el por que no le quería contar de su vida y los dos largos años que se ausentó de su antiguo instituto, no era que no quisiera contárselo a ella, no quería contárselo a nadie, unas cuantas personas, y podía nombrarlas con los dedos de una mano, estaban al tanto de los cambios de su vida en los 5 años en que todo se fue por el caño, sus días encerrado entre las cuatro paredes que dejaban colar solo un poco de luz en el día y que en la noche no le dejaban ver un centímetro del cielo estrellado, la comida insípida, la total abstinencia de ramen, las inyecciones, los medicamentos, todo, todo aquello aun lo hacia removerse violentamente en la cama por las noches, si, ya no gritaba cuando cada sueño terminaba, pero aun así sentía el corazón latiéndole en la garganta y los oídios, no quería que Hinata supiera de ello, y es que la chica le inspiraba tanta ternura, por ningún motivo y bajo ninguna circunstancia le contaría de ese mundo en el que estuvo preso
Volvió su cara a ella, recordando la razón por la cual le había pedido ser su novia, y esa mirada perla se rodeó por un hermoso color carmín, esa era la expresión que le gustaba en ella, no podía imaginarla sin esa inocencia y timidez, Hinata hyuga se escribía igual que dulzura. Pensó en levantarse del piso, el pantalón se le estaba mojando por el agua retenida en el pasto debajo suyo y quizás caminar un rato junto a Hinata, se lo debía, Gaara no los dejaba hablar con tranquilidad y siempre terminaba ahuyentándola, sin embargo no alcanzó a hacerlo, la delicada mano que se posó en su mejilla se lo impidió y los labios que se acomodaron sobre su boca lo dejaron fuera de combate
La chica, su novia, era tan delicada y suave como lo recordaba, no sabia por que en aquel momento la había confundido con Sasuke, ambos eran totalmente diferentes, el moreno le desesperaba, en todo el sentido de la palabra y con todo lo que ella conlleva, podía en un segundo querer molerlo a golpes, partirle la cara, reventarle las costillas y en otro simplemente, acunarlo en su pecho, besarle, contemplarle y defenderle por lo frágil que le parecía para luego volver a querer reventarle la cara puños, en cambio, Hinata le traía una paz que no creía encontrar, los labios eran tan dulces como la chica misma, se movían con una lentitud ensoñadora que hacia a la chica transparente a sus ojos, podía ver a través de ella, leerla, entenderla y quererla sin ningún miramiento, y para que mentirse a si mismo, quería tomarla del pecho y hundir su rostro entre esos grandes senos que resaltaban a la vista(lo se lose, nada romántico pero vamooos lo chicos no piensan exactamente con la cabeza que deberían)
La otra mano, tímidamente se posó en su espalda halándolo a su dueña y obligándolo a adoptar una mejor posición, un suspiro que se escapó de la boca con sabor brillo de fresa provocó una punzada directamente sobre la zona que se despertaba nuevamente, su mente le repetía menos veces que parara antes que todo pasara a mayores y eso le estaba asustando, no estaba en su lista de fantasías hacerlo por primera vez en al patio de su escuela a media noche y con chicos haciendo de las suyas detrás de la pared a su espalda, pero cada segundo le costaba menos pensar y Hinata se le acercaba mas y mas. pronto la candidez del busto de la chica rodeó su propio pecho, la sensación blanda era tal cual la había imaginado, nada parecido a los globos con agua con la que sus amigos de la primaria comparaban jurando ya haber tocado un par, era mejor, tibios, apacibles, estrujables, tan dóciles al tacto y coronados por un punto que se colocaba mas y mas duro con solo pasar un dedo, su mano a duras penas y agarraba la mitad del derecho pero eso no le importaba, separó su boca y recorrió de nuevo ese cuello blanco y elegantemente largo, dando besos y deteniéndose en la clavícula, las uñas de Hinata se clavaron con fuerza en su espalda mientras era marcada en esa zona y su boca dejaba salir un sonoro gemido, provocado en su mayoría por la fuerza que puso Naruto en su seno, que luego de liberar de la presión excesiva, le sacó y chupó por encima del cuello de su camisilla holgada.
Con menos trabajo del que esperaba, estaba ya encima de la chica, con su cadera enredada por las piernas de la misma y la respiración de ambos entrecortada; botón por botón la camisilla fue abierta y sus sobresalientes pechos saludados ansiosamente por las manos temblorosas del rubio, el cuerpo de Hinata se anticipó al toque mismo y se arqueó rozándole la pelvis con la de ella… hubiera seguido, por dios juraba que quería hacerlo, pero lo vio, Kurama estaba parado mirándole atentamente tan cerca que podía en cualquier segundo tocar el rostro enrojecido de Hinata.
Se le hizo un hueco en el estomago, Kurama se inclinó y le sonrió con complicidad, pasó si mirada por el cuerpo de la chica que gemía apretando los ojos y amplió su sonrisa, complacido y burlón, como siempre lo hacia cuando de niños le pillaba atragantándose a la madrugada con los dulces de la nevera o copiando a ultima hora la tarea que le dejaban de la semana anterior, no le dijo nada, ni se esforzó en llamar la atención de la chica, Kurama se levantó y giró sigilosamente sobre sus pies, levantando la mano en señal de despedida. La voz excitada y notalmente nerviosa de Hinata le obligó a dejar de ver a su hermano que se alejaba cada vez mas, la chica le besó de nuevo, tratando de llamar de nuevo su atención, pero su cabeza había recuperado la razón y dispuesto a parar la situación con el mayor tacto, buscó levantarse de encima, siendo agarrado con fuerza, le miraban suplicante y con la mayor confusión desarmándolo totalmente
Cuanto hubiera deseado levantarse a prisa, acomodarle la camisa a la chica y respirar hondo para que su excitación dejara de verse a kilómetros, hubiera, hubiera deseado incluso no salir corriendo a tomar aire después de besar por cuenta propia a Sasuke, quizás así, los posos negros que lo miraban con desprecio no se hubieran topado con su mirada estúpidamente impactada. Maldijo a Kurama desde lo mas profundo de su corazón, si tan complacido estaba con la escena, por que no despistó a Sasuke para que no le encontrara en esas condiciones. Hinata dio un pequeño gritito sorprendida por el visitante, buscando cubrirse como podía. Sasuke simplemente levantó la mirada, notablemente molesto y continuó su camino, dirigiéndose a la sección de chicos de los dormitorios.
Como pudo Naruto se levantó y se acomodó la ropa, y con un simple lo siento, dejó a Hinata tan agitada como molesta, algo en la mente de la chica conectó por completo y sintió un nuevo sentimiento surgir en ella, sin duda, no permitiría que el sueño de sus años escolares se le esfumara de las manos, era su ultima oportunidad, la única que tendría por el resto de su vida y no la desperdiciaría, mostraría sin duda de que estaba hecha.
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Calificar los trabajos de clase era la parte de la docencia que detestaba, sele era complicado ser totalmente imparcial con respecto a sus estudiantes y es que, como no tener en buena estima a los realmente aplicados?, un 100 perfectamente trazado sobre la composición de Sasuke dejaba pasar por alto los problemas de conexión y lo aburridas que llegaban a ser sus escritos, pero bueno, la falta de creatividad la compensaba con disciplina, calificó unos cuantos mas para luego llegar a su tortura, Namikaze Naruto, de nuevo la objetividad y la imparcialidad se borraban de su diccionario, él era diferente y por ello con otra vara media sus capacidades, aunque se esforzara, nunca terminaba un trabajo suyo, sus historias eran largas, complicadas, emocionantes y envolventes, pero no tenían una conclusión, se quedaban únicamente en el nudo, el clímax máximo de la trama, en cierta forma le recordaba a su Sensei Minato, era muy bueno creando, pero tan poco aplicado como para terminar los proyectos, sino hubiese sido por la intervención de Fugaku el capital de su esposa se hubiese perdido, tomado el lapicero marcó un 79, el rubio cabeza hueca no había llegado al siquiera a un 80 siquiera en su clase y dudaba que lo hiciera.
La puerta se abrió y entró Tsunade, como siempre tan preocupada por respetar la privacidad de tras una puerta cerrada, tomó asiento enfrente del excretorio del peli plata
-y bien que me tienes- preguntó mirando sobre la mesa el desorden de papeles y las tazas de café
-no mucho, historias de amor, de criaturas fantásticas, unas cuantas de guerra y un par de súper héroes- contestó el hombre haciéndose el desentendido
-y mi niño que te escribió esta vez?- preguntó mas directo haciendo sonreír a Kakashi
- deberías decir que no terminó de escribir- puntualizó pasándole las hojas de papel
La rubia las chequeó, sorprendiéndose y ala vez alegrándose
-el kyubi eh? Que bonita forma de traerlo a un plano humano
-creativa he de decir, el sacrificio de una madre y un padre por salvar a su bebé haciéndole poseedor de un gran, monstruoso e incomprendido poder, sellando en el cuerpo de su propio hijo un demonio tan temible es una gran historia, lastima que no tenga un final
-no eres tan listo Kakashi- ironizó la mujer – vamos ve mas allá de tus ojos
-bien…. Hace dos semanas fue un poema sobre las dos partes de una semilla que fueron plantadas en dos masetas diferentes, una parte moría lentamente mientras la otra le llamaba con insistencia- recordó- el trabajo anterior fue un análisis de un personaje de una novela literaria, y el escogió Lestat… la verdad no le veo conexión
La risa de Tsunade no se hizo esperar, Kakashi era su docente mas perspicaz, no se le pasaba ni media, y Naruto parecía tan simple a sus ojos que no le veía la verdadera complejidad, subestimaba a su niño y lo hacia de la forma mas descarada, las notas que le daba lo reflejaba, Naruto nunca llegaría a una calificación perfecta con el.
-dime que parte de Lestat fue la mas significativa para Naruto
-si mal no recuerdo la muerte de Nicolás de Lenfent *
-el violinista del diablo no?
-si…hooo entiendo su punto… me ha usado vilmente no Tsunade sama
-me declaro culpable, imagino que se percató que el contenido de las asignaturas a excepción de la suya no ha sido modificado y por eso me disculpo, pero entenderá que debo vigilar a mi diamante y de paso saber que piensa su sombra
-se refiere a Gaara?
-si, ese chico se convertirá en un problema si no nos cuidamos
-bien y sus habilidades deductivas que piensan de esta historia- comentó divertido pasándole a la mujer las hojas que contenían una composición echa por el pelirrojo- a mi juicio es desgarradora y el final sangriento, aunque visceral, deja un buen sabor de boca
-mm interesante- expresó después de tomarse un tiempo para leer- esta celoso.
- eso mismo pensé yo, pero no se me ocurre de quien
La rubia lo miró, dándole a entender que la respuesta era mas que obvia, y entonces solo pudo pensar en una persona, Uchiha Sasuke, quien mas que el compañero oficial de habitación de Naruto, en su conocimiento sobre la relación de ambos estaba lo que Iruka le había contado, Sasuke y Naruto se habían peleado tan fuerte que el ultimo llevaba varias semanas durmiendo en un cuarto ajeno al suyo, al parecer este echo no era suficiente para calmar a Gaara. Curiosa relación entre ellos, ahora lo veía, la hostilidad del pelirrojo era menor solo en lo que refería al rubio, solo se sentía a gusto en su compañía y eso que no se le veía cómodo en ningún momento, la pregunta que venia ahora a su mente era, si Tsunade conocía aquella fijación porque lo había traído al colegio
-por agradecimiento- dijo sin pensarlo dos veces- ese chico estuvo muy al pendiente de Naruto cuando estuvieron en suna, a pesar de sus temperamentos y personalidades lograron congeniar
-entonces… por que no los puso de compañeros de habitación desde un principio
-por que Gaara es algo inestable, y Naruto un idiota-respondió de nuevo acomodándose en la silla- veras, Gaara es mayor un año que Naruto, debía estar en segundo, y aunque se lo ofrecí, lo rechazó de inmediato, su hermano Kankuro se encuentra allí y la relación del chico con su familia es muy mala, debió dar muchos problemas con su mitomanía* y aparte sufre de terrores nocturnos, tiene que ser medicado cada 3 meses para que su cuerpo no colapse, sus pesadillas son tan vividas que se acostumbró a no dormir muy a menudo, se le medica con unos somníferos bastante fuertes solo por unas semanas y luego depende de él, por eso Jiraiya lo tomó a su cuidado y como su padre prácticamente lo regala a quien quiera hacerse cargo no hubo mayor problema - vio que Kakashi iba a preguntarle algo de nuevo, por eso prefirió seguir antes de ser interrumpida- Naruto lo sabe, por eso es un idiota, le estima tanto que le permite decidir sobre algunos aspectos de su vida, no directamente claro, pero se deja influenciar, que estén compartiendo la habitación no es un misterio para mi, lo vea venir, si hubiera puesto a Naruto solo, la situación será la misma pero en menor tiempo del que pasó
-entonces lo pusiste con Uchiha para hacerle ver que era influenciado y decidiera hacer algo
-exacto- exclamó levantándose y paseando la mirada por los muebles cercanos- pero no es toda la razón… si no me das algo de beber no podré seguir contándote… se buen chico y dale algo de tomar a esta mujer
-tengo agua caliente para el café pero si gusta del té puedo ofrecerle…
-té!- Exclamó simulando estar ofendida- soy una mujer mayor dame algo fuerte, sé que tienes botellas de sake escondidas en alguna parte, he visto a Iruka tambalearse cuando sale de aquí, no me obligues a hacerte una revisión- ante la sonrisa y el asentimiento de Kakashi se permitió proseguir- la cosa es que Gaara se valdrá de cualquier artimaña para que Naruto no se aleje, ha creado una gran dependencia y ni Jiraiya ni yo queríamos tener que ver con un suicidio. Ya explicado un punto, me extraña que no veas por qué Sasuke y Naruto deben llevarse bien
-uchiha’s corp- interrumpió el peliblanco- no crea que soy tan lento, las empresas Uzumaki están protegidas dentro de las acciones de uchiha’s corp, como ultima petición de Minato Sensei, Obito firmó con Fugaku una clausula que protegía la herencia de sus hijos hasta que estuviesen listos y como quien va a heredar la empresa es Sasuke, es mejor que empiecen a conocerse y llevarse bien
-excelente Kakashi, estas al tanto de la situación- alagó la mujer recibiendo el sake en una taza roja- no me extraña de ti, Minato era un hombre excepcional, y Fugaku le debía aquel favor, por mas que odiara a su primo no podía negarse a la ultima voluntad de su querido amigo, Obito hace bien su trabajo, pero Fugaku le exige mas de lo que debiera, sé que se preocupa por el bienestar económico de Naruto, pero por ello, mi pobre niño no ha gozado de una buena niñez
-Obito no tubo la culpa- agregó Kakashi con notorio dolor- las cosas no salieron como lo esperábamos, Rin no debía…
-Rin no debía?- interrumpió Tsunade descargando con rabia la taza en la mesa- Ustedes no debieron, Minato confió en ustedes tres, Kushina les dejó a sus mas preciados tesoro, solo porque eran la esperanza de Minato, sus los niños prodigio, sus mas amados estudiantes- respiró hondo y trató de recobrar la compostura, el tiempo había pasado y no era justo seguir castigándolos por lo sucedido- pero las cosas pasaron, para bien o para mal, y Minato, kushina y Rin esperan que hagamos lo mejor para Naruto, por eso quiero que seas justo con el, alágalo de vez en cuando, cuando se lo merezca claro esta, incentívalo, aprovecha esa hiperactividad que tiene, deja de ver en el la reprocha a tus errores, él no sabe lo que pasó entre Obito y tu, no te juzga
- lo se, pero Minato Sensei
-Minato era Minato y Naruto es Naruto, se parecen pero no son lo mismo, no puedes pensar exigirle ser como Minato, date una oportunidad para conocerlo y dejar de ver a otro en el.
Tsunade tenia razón, en cuanto había visto al rubio en su clase se apartó, lo trataba como a un alumno, pero de aquellos que solo vez llenar un espacio, de esos que te da lo mismo si faltan o no y solo le saludas por mera cortesía, sus ojos azules y mirada afelinada le mortificaban, le hacían sentir melancólico y culpable por dejarle sin el amor de una familia, pero, era justo tratarle así? Que no debía tratar de enmendar en algo el daño dándole por lo menos los medios para hacer de su futuro oficio algo mas sencillo?, por supuesto, no lo había pensado hasta el momento, pero también era su deber como profesor, como Sensei, le daría a Naruto las mismas herramientas que su Sensei le había dado a él.
(Un mitómano es aquel que no puede dejar de mentir, lo hace sin realmente quererlo y algunas veces cree sus propias mentiras. En pocas palabras una patología similar a la cleptomanía
Nicolas de Lenfent: violinista que constantemente se sentía abrumado por la opinión de la iglesia acerca de la música, (que ésta liberaba pasiones y por tanto era instrumento del diablo) fue el mejor amigo de Lestat durante su mortalidad, deja entrever el libro que fue su amante. Los dos se profesaban un profundo amor y amistad, tanto dentro del teatro de Renaud donde trabajan como fuera del mismo; hasta que Lestat es raptado y convertido en vampiro, forzando al mismo desde ese momento a no volver a ver a Nicolás, sin embargo y después de que Nicolás se enterara de la existencia de los vampiros, lestat le convierte para evitar que caiga en la locura, y luego le da el teatro para que se desarrolle allí una nueva asamblea de vampiros, esto solo empeora las cosas, Nicolás pierde poco a poco la razón y luego de llevar el teatro de los vampiros a la cima, empieza a mostrar por las calles los secretos de su naturaleza, por ello le cortan las manos y lo encierran, al tiempo en que se le son devueltas, pide ayuda para hacer una hoguera y se lanza a ella, pidiendo de antemano a una vampira de nombre Eleni que le envíe su a lestat el violín que le había regalado)
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Caminó mas a prisa y lo mas sonoramente posible para llamar la atención del moreno, y sabia que lo conseguía, Sasuke caminaba mas a prisa cada vez que lo escuchaba acercarse mas y por lógica en un momento terminaron corriendo, la agilidad del mas alto era por mucho superior a la de Naruto, pero él no se rendiría, apresuró la marcha, exigiéndole a sus músculos por demás, para luego de unos tortuosos minutos, la ventana de la habitación se cerrara en sus narices. Sasuke cerró las cortinas dejándole con la palabra en la boca, a la larga, lo agradeció, no sabría como explicarle lo que había pasado, de antemano, ambos chicos sabían que su novia era Hinata, y saberlo lo hacia mas culpable, él le había besado sin detenerse a medir las consecuencias, estaba seguro que el moreno pensaba mas claramente que el, estaría tan molesto que prefirió alejarse a romperle la cara enfrente de la chica y mostrarle lo poco merecedor de ella que era.
Se sentía miserable, abatido y molesto consigo mismo, nada le estaba saliendo bien, lo ultimo se lo había buscado y era consiente que no obtuvo el castigo que merecía, pero, nada desde que llegó a esa escuela le estaba saliendo bien, tomándose la cabeza con las manos se dejó caer cerca de una de las murallas, no se había percatado de haberse alejado tanto, la cabeza le estaba matando y veía algo borroso, se asustó, no podía permitirse desmayarse a esa hora y menos en ese lugar, quizás Gaara lo buscaría al ver que no llegaba a la hora habitual para un lunes en la madrugada y eso seria peor, el bermejo armaría un escandalo tan grande que estaba seguro que la sangre mancharía mas pasillos de los que quisiera. Acunó su cabeza entre las rodillas tratando de hacer constante su ritmo cardiaco y su respiración, la cosa no estaba funcionando del todo y luego escuchó esa risita que le erizaba los pelos de nuca.
-que curioso el día que decido pasar a ver que hacen en el dichoso club me encuentro con mi hermanito saliendo de su capullo- bromeó el rubio centandose cerca suyo
-vete a la mierda Kurama no me siento bien como para escucharte
-si en efecto te vez miserable- afirmó
-te divierte verdad tebbayo
-para serte sincerooo- empezó dibujando una sonrisa socarrona, para luego suspirar y abrazar a su hermano acercándolo a su pecho- por supuesto que no idiota, cuantas veces te lo he dicho somos uno, tu sufres yo sufro tu eres feliz yo soy feliz.
-nunca eres tan sentimental’tebbayo – afirmó aferrándose al pecho tibio de su par
-neeee, rin me convirtió en una niñita, así como óbito te hizo un inútil
Naruto dejó escapar una pequeña risita, el dolor estaba cediendo y eso le gustaba, el pecho de su hermano siempre había sido tan cálido y su olor le recordaba el perfume que usaba su madre, Kurama por su lado le miraba con ternura, acariciándole los cabellos dándose algunos golpes mentales por ser por segunda vez consecutiva, el paño de lagrimas del baboso de su hermano.
Siempre habían sido así, se apoyaban en todo y se divertían hasta cierto punto con la confusión ajena, en un tiempo, y en el primer año de la primaria, Kurama había optado por hacerse diferenciar de Naruto, por eso le pegaba todas las mañanas una pegatina de zorro en la frente a su hermano, claro que esta duraba solo el tiempo suficiente en que alguno de los dos se metiera en problemas, luego era lo mismo, el interminable juego de ”vamos señala al que hizo la travesura, no puedes castigarnos a ambos” .
Luego de la muerte de sus padres todo comenzó a cambiar, Naruto se la pasaba mas con la “chica fea” y patosa de cabellos rosas y el convencía a rin de llevarlo a jugar al parque del barrio contiguo, sus tutores legales se habían convertido en sus padres, ellos nunca intentaron usurpar el lugar de los verdaderos, pero les querían y cuidaban con tanto amor que era imposible no verlos como tal…luego la separación… solo cuatro años, ocho meses y veinte días duró la fantasía, la burbuja se rompió y tuvieron que separarse. Ambos sabían que el día que todo se acabó estuvieron presentes, se escondieron en el armario tratando de no escuchar la pelea de la pareja, el sonido de la lámpara al estrellarse sobre alguna superficie alteró a Kurama y Naruto le abrazó con fuerza, cantándole la tonta canción par adormir compuesta por su padre, pero ninguno de los dos recordaba el porqué de aquella ruptura
El proceso de separación fue complicado, Obito no quería dejar a rin y ella solo se quería ir lo más lejos posible y llevándose a Kurama con ella, la familia por fin se disolvió.
Pero eso en aquel instante no importaba, ambos se sentían completos al estar por fin y después de tanto tiempo juntos, Naruto sabia muy bien el problema que se armaría si Tsunade se enteraba que Kurama esta entrando a hurtadillas a la escuela, a la rubia amiga de sus padres nunca le agradó del todo su hermano, y Rin no se quedaría quieta al verse tan cerca de Obito, sea como sea el hombre seguía siendo su tutor ante la ley, así que esos encuentros que cada vez se hacían mas frecuentes era el secreto que los volvía ha hacer los hermanos de antes.
-la chica de hace un rato es tu novia no?- preguntó Kurama ayudando a acomodar a Naruto sobre sus piernas
-si lo es su nombre es Hinata
-bonito nombre… es una chica muy linda por lo que vi
-si también es muy tierna
-por que no estas feliz ella se nota que por lo menos te desea
- es mas complicado de lo que parece- explicó tomándose un segundo para continuar- tengo a alguien que se esta metiendo en mi corazón’tebbayo
-eso es un problema?
-ni te lo imaginas…
-pues yo te aconsejaría seguir con ella, por tu cara, la otra persona no es muy seguro que te corresponda
-no puede’tebbayo… es un chico
La risa resonó mas fuerte de lo que debía a esas horas de la madrugada, Kurama se dejó ir de espaldas alargando lagrimones por lo cómica que le parecía la situación, por dios, acababa de ver a su hermano, comiéndole la boca y algo mas a una chica de atributos tan deseables para cualquier hombre y resulta que le gustan también los chicos, Naruto nunca dejaría de sorprenderlo, le miro entre risas y vio su puchero, el idiota era tan adorable que no podía burlarse mas de el
-así que a mi hermanito le gustan también los penes- comentó tratando de no reírse mas
-no me gustan… solo me gusta el-afirmó con pena
-con tal que no sea el mapache cabeza de cerillo todo esta bien
-Gaara?- preguntó después de meditarlo un momento y al ver que su hermano movía la cabeza en señal aprobatoria decidió preguntar de nuevo- que tienes contra el?
-nada, solo no me cae bien- su hermano no le daría una razón, lo conocía y cuando se cruzaba de brazos nadie podía obligarlo a hacer o decir algo
-despreocúpate es otro chico de apellida Uchiha’tebbayo