CAP 14: ¿LA SANTA CELESTIAL? PARTE DE MI ALAMA
Estaba lloviendo, los dragones dormían entre los árboles, mientras que nuestros viajeros dormían debajo del árbol, hacia mucho frio. El viento soplaba con fuerza, mucha fuerza, las aves ni dormían por la fuerte tormenta, realmente era una gran lluvia, todos estaban acostumbrados a ese clima y dormir afuera, a excepción del príncipe.
No lograba dormir, tuvo pesadillas esa noche, soñaba con una batalla, y todos sus amigos morían… y sobre todo su amado demonio Akihiko, soñó que lo torturaban y lo mataban lentamente.
Entre sus sueños estaba una niña pequeña, que tenía una sonrisa diabólica y se reía sin parar, cuando se da cuenta Misaki no tiene su capucha, se cayó y le salió un hueso de la rodilla, después se rompió el brazo derecho y la columna, le dolía mucho. No lo soportaba, y más viendo como sus huesos se salían de la carne y sufría una hemorragia de sangre, mucha sangre. Lo que más le dolía era ver a su amado torturado y agonizando. Viendo como se acercaban las personas y le pateaban hasta que este perdiera la vida.
-¡USAGI-SAN! ¡USAGI-SAN!- grito dormido despertando a sus compañeros.
-Misaki despierta aquí estoy- dijo Akihiko, Misaki despertó y o abrazo llorando. Akihiko toco su frente, vaya sorpresa, el joven tenía fiebre. ¿O era eso o por culpa del calor se sentía así? No definitivamente el joven estaba enfermo, y para el colmo le salía sangre por la boca. Nowaki lo reviso, era un rayo de luz que logro tocarlo, por suerte sus huesos estaban bien, pero Misaki no hacía nada.
-¿Qué pasa estará bien?- se preocupo Akihiko por su amado
-Te digo que como es una maldición no que le pasa, pero detecte que tiene gripe… eso es todo, además el sol lo toco y sabes muy bien como se pone cuando lo toca el sol, tranquilo por el momento solo hay que cuidarlo y darle calor, tiene gripe… pero estará bien – anuncio Nowaki
-Ire por agua- dijo Hiroki –Shinobu ven conmigo-
-Si- dijo el elfo y los dos fueron a buscar agua
-Yo buscare pues… a ver que me encuentro- dijo Miyagi y se retiro a buscar… pues algo
-Akihiko acompaña a Miyagi-
-No, quiero estar con Misaki-
-De acuerdo… si ves que sangra por la nariz como la otra vez, llévalo a otro lado, no te separes de el… volveré luego- dijo Nowaki y salió corriendo tras Miyagi dejando al prinipe y al demonio.
El joven no abría los ojos y seguía sangrando por la boca, Akihiko lo tapo con su capa y lo llevo a un sitio más oscuro, donde el sol no podría tocarlo. Encontró una cueva fresca y un poco húmeda, pero era perfecta para el enfermo. Lo acomodo y cobijo, le dio un beso en los labios y observo que dejo de sangrar.
Pasaron dos días y Misaki aun tenía fiebre, eso le preocupaba al demonio y a los demás.
-¿Y si buscamos a una ninfa?- dijo Shinobu
-Aquí no encontraremos ni una- respondió Hiroki
-Solo queda esperar, pero estoy seguro que se recuperara- anuncio Nowaki
A la mañana siguiente Misaki despertó un poco mejor, se levanto y se puso la capucha y camino. Afuera de la cueva estaban sus amigos comiendo. Todos voltearon y se alegraron al verlo bien, pero nuevamente Misaki se desmaya.
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Misaki despertó entro los brazos de Akihiko
-¿Qué me paso?-
-Te andas enfermando a cada rato ni el sol te ah tocado-
-Es normal, el frio me daña mucho, en verdad me urge ver a la santa celestial… vámonos-
-ESTAS MAL-
-Quiero ir… ya no esperare mas-
-Esta bien… iremos-
Y si, partieron a Mitsuhashi, el castillo de la Santa Celestial.
Cuando llegaron… uff vaya sorpresa, el palacio estaba en ruinas y era muy feo
-Etto… ¿Seguros que es la dirección?- comento Miyagi
-Según el libro si- respondió Hiroki, cuando todos dieron el primer paso las estatuas bloquearon la entrada, uno de ellos hablo
-Solo tres pueden entrar-
-Solo tres- dijo Nowaki -¿Quién va?
-Yo voy con el príncipe quiero ver a la Santa Celestial y reclamarle que me quito a mi madre- anuncio Shinobu
-Entonces iré con ustedes, - dijo Akihiko
-Shinobu… cuídate- le dijo Miyagi a su amado
-Estaré bien, no olvides que soy un espadachín-
Las estatuas los dejaron pasar, el castillo era enorme por dentro, y en verdad estaba bien arreglado, por dentro era hermoso… TODO ERA DE CRISRAL… aunque por fuera tenía un aspecto feo y grotesco. Encontraron una enorme estatua de la Santa Celestial, Misaki acomodo las cosas, y rezo. A la mitad del rezo una puerta se abrió, y estaba un trono con una niña.
Tenía el pelo blanco como la nieve, un ojo azul y el otro verde, su vestido era pero larguísimo y blanco con listones azules y largos. Misaki se acordó de su sueño… la niña que se reía diabólicamente…
-¿Esa niña es la Santa Celestial?- le pregunto Akihiko a Shinobu
-Si- respondió este –Ella toma varias formas… no se sabe cómo es realmente.
Misaki se adorrillo ante ella, Akihiko también pero Shinobu no lo hizo, Akihiko le dijo que se arrodillara ante ella, si no… no lo escucharía. Entonces también se adorrillo.
-¡Párense!… ¡odio que se arrodillen ante una niña como yo!- dijo la Santa Celestial enojada.
Se levanto del trono y se acerco a una mesa de cristal, era muy pequeña, parecía una niña de 6 años. Tomo unos juguetes de cristal y empezó a jugar con ellos.
Los tres chicos intercambiaron miradas, ¿Realmente era su diosa o una impostora?... La niña jugaba con sus caballos de cristal. Misaki miro el techo, se veía muchas estrellas… ¿Estrellas en el techo? Pues si, loco pero es cierto. Shinobu enojado se acerco a la pequeña.
-No sé si eres la diosa, pero si lo eres o no… quisiera reclamar que me quitaron a mi madre cuando nací ¡¿Por qué?! El castigo no afecto al amante de mi madre si no a mi, sus castigos son estúpidos-
-Shinobu cállate- pidió Misaki
-NO ME CALLO, YO EN VERDAD CREO QUE SUS MALDICIONES NO SIRVEN, NO CASTIGA A LOS QUE DEBEN SER MALDECIDOS… SI NO A OTRAS PERSONAS-
La niña lo volteo a ver, su mirada era de una acecina, raro de una niña de 6 años… o al menos eso daba entender su apariencia.
-Cállate y duerme- dijo la Santa Celestial –Dormirás las próximas 24 horas y despertaras con mucha hambre y ganas de ir al baño-
Shinobu se desmayo… más bien… se quedo dormido. El demonio y el príncipe se asustaron.
-No se preocupen, el está bien, solo dormirá un día entero y ya-
-¿Deberás eres la Santa Celestial?- pregunto Misaki intentando de no hacerla enojar.
-No- respondió la niña –
-Entonces eres una impostora ¿Verdad?- se enojo Akihiko
-Soy su hija- anuncio la niña
-¡¡¡¿EHHHHHH?!!!!- se sorprendió el castaño
-Los dioses no tienen hijos- dijo Akihiko
-Ella si, mi nacimiento es extraño… ¿Qué quieren?- se enojo la chamaca
-Si no eres ella ¿Cómo te llamas y donde está la diosa?- dijo Misaki ya muy confundido
-La diosa, mi madre, no se deja ver, ella decidió no hablar con nadie mas desde aquella noche, esa noche mi madre se arrepintió de lo que hizo- dijo la niña mientras sacaba el corazón de dragón de la caja, y se la comió.
-Corazón de dragón, significa valentía, Luciérnagas son la iluminación de la esperanza, tres libros amargos, representa que nadie es perfecto, las fresas… demuestran dulzura- dijo la niña mientras masticaba el corazón.
Un mayordomo de cristal apareció, tomo las cosas y se las llevo.
-Lamento que vengan en vano… me sorprende verlos vivos, nadie logro recolectar esto, ¿Qué quieren?-
-Tu madre me maldijo y…-
-Ah… eres tú, Takashi Misaki hijo del rey Takashi Franco sexto, el rey más egoísta que he visto, lo siento, yo no puedo hacer nada ni menos mi madre, ella está muy arrepentida, tanto que no ha hecho ningún milagro estos últimos 18 años-
-No te entiendo-
La pequeña se dirigió a una laguna donde había un agua cálida y cristalina, jugó un rato con su barco de cristal
-La Santa Celestial, adora mucho a los niños, los niños son su poder, mientras más amor hay, mas poder tiene ella, deseaba un hijo, tener un hijo en brazos, para eso tenía que sacrificar la vida de un bebe y quitarle parte de su alma-
-Sigo sin entender nada de nada-
-¡YA SE ESPECIFICA!- grito Akihiko
-La niña se acerco al príncipe.
-Es que no lo entiendes, ella aprovecho una situación, ella castiga aquellos que rompan sus reglas más sagradas, entre ellas maltratar niños. El rey le quito las cebollas y armas a dos niños yunteros demonios, eso molesto mucho a mi madre, y maldigo al rey….-
-Si eso ya lo sé pero…-
-Misaki, la diosa te quito una parte de tu alma, YO SOY TU LA MITAD DE TU ALMA-
-¡¿EHHHH?!-
-Yo existo gracias a ti, la diosa estaba feliz de tenerme, pero al verte de niño sufrir, se sintió muy mal, porque a pesar de la maldición el rey seguía de egoísta, cuando se dio cuenta que irías a buscarla, se asusto, porque la única forma de quitarte la maldición es que yo muera, ¿O soy yo o alguien más debe sacrificarse?-
-¿Y qué haces aquí?-
-A jugar, y si te preguntas porque parezco niña de seis años… es porque mi madre no quiere que yo crezca, adora los niños, pero yo quiero crecer… no entremos en detalles, olvídalo y mejor sacrifica a alguien-
-YO NO QUIERO QUE NADIE MUERA POR MI… ¿Qué te pasa si vuelves ser parte de mi?-
-Me convertirá en cristal y desapareceré entre el viento, dejare de ser humana y mi madre no me tendrá ¿Quieres que vuelva a ti?