III Simona, la mona.
Esa mañana Lucius había recibido un enorme paquete. También le había dicho a Severus que cuando cayera la tarde, lo visitara en su habitación, así que a las seis, pasada la hora del te -que ni en el colegio dejaba de tomar Lucius- se dirigió a su cuarto, con la tarea ya terminada en la mano por si lo que quería era copiarla a cambio de darle algo.
Cuando llegó a la habitación y entró a ella sin tocar, como siempre, no pudo menos que abrir la boca de la impresión de ver a Lucius montándose a una rubia muy bien peinada, vestida de traje de noche, con unos impresionantes tacones y joyas varias, todo combinaba perfectamente con el vestido color malva.
Apenas iba a mascullar una disculpa para la chica, cuando vio que su mirada estaba mas vacía que la de una supermodelo, por lo que se fijo bien y vio que era la mona inflable, que ahora lucia como la versión femenina de Lucius: platinada y ojos grises.
Tirado por todo el lugar, estaba el resto de la ropa del rubio y unas cuantas prendas que Severus no conocía: las del paquete que llego esa mañana.
-¿Por qué diablos te estas follando una muñeca inflable, Lucius -mascullo Snape, encontrando raro esto ultimo y no lo primero.- y mas importante aun, vestido así?
El mago se volvió a verlo y se hizo una seña con los dedos de que esperara, sin interrumpir su concierto de gemidos e incongruentes frases de ¡oh, si, Simona, oh, si!, restallando el aire con su pelo platinado y haciendo titilar sus propias joyas, a juego con el vestido que usaba, color verde agua.
Cuando terminó y le lanzó un ultimo beso a Simona, se volvió a contestarle a Severus, quien lo veía como dudando si mandarlo o no a la loquería.
-¿Por qué están vestidos así?-inquirió de nuevo, tratando de ser comprensivo.- ¿Por qué tiene un nombre la mona? ¿Por qué no eres normal?
-Ash, Sev,-respondió, como si fuera lo más obvio del mundo.-Le puse Simona por que es mi modelo de ropa nueva y no le puedo decir mona, suena mal. (Suena a chango.)
-¿Y por que están vestidos así?
-Por que cuando veo ultima moda, la perfección de los accesorios combinando con el vestido y lo lindos que son los zapatos, casi tengo un orgasmo de puro gusto por la moda, y así, con Simona, lo acabo de tener sin dejar de ver lo maravillosa que es mi ropa...
Prueba numero uno de que no solo los Black estaban locos.
-...y si quieres,-continua hablando Lucius,-te presto a Simona, Sev, como tu vida sexual es un asco...
Severus lo miro profundamente malévolo antes de responderle.
-Lucius, pregúntale a cualquier alumno del colegio si cree que cogerse a Lucius Malfoy como y cuando uno quiere es tener una vida sexual de asco y veras que te responden...
Lucius, que fingía que lo escuchaba, le pregunto interrumpiéndolo:
-¿Quieres que deje a la mona vestida así, o le pongo otra ropa?
****************************************************************
Lo repetimos para que alcanze el minimo de palabras, disculpe las molestias.
***************************************************
III Simona, la mona.
Esa mañana Lucius había recibido un enorme paquete. También le había dicho a Severus que cuando cayera la tarde, lo visitara en su habitación, así que a las seis, pasada la hora del te –que ni en el colegio dejaba de tomar Lucius- se dirigió a su cuarto, con la tarea ya terminada en la mano por si lo que quería era copiarla a cambio de darle algo.
Cuando llegó a la habitación y entró a ella sin tocar, como siempre, no pudo menos que abrir la boca de la impresión de ver a Lucius montándose a una rubia muy bien peinada, vestida de traje de noche, con unos impresionantes tacones y joyas varias, todo combinaba perfectamente con el vestido color malva.
Apenas iba a mascullar una disculpa para la chica, cuando vio que su mirada estaba mas vacía que la de una supermodelo, por lo que se fijo bien y vio que era la mona inflable, que ahora lucia como la versión femenina de Lucius: platinada y ojos grises.
Tirado por todo el lugar, estaba el resto de la ropa del rubio y unas cuantas prendas que Severus no conocía: las del paquete que llego esa mañana.
-¿Por qué diablos te estas follando una muñeca inflable, Lucius -mascullo Snape, encontrando raro esto ultimo y no lo primero.- y mas importante aun, vestido así?
El mago se volvió a verlo y se hizo una seña con los dedos de que esperara, sin interrumpir su concierto de gemidos e incongruentes frases de ¡oh, si, Simona, oh, si!, restallando el aire con su pelo platinado y haciendo titilar sus propias joyas, a juego con el vestido que usaba, color verde agua.
Cuando terminó y le lanzó un ultimo beso a Simona, se volvió a contestarle a Severus, quien lo veía como dudando si mandarlo o no a la loquería.
-¿Por qué están vestidos así?-inquirió de nuevo, tratando de ser comprensivo.- ¿Por qué tiene un nombre la mona? ¿Por qué no eres normal?
-Ash, Sev,-respondió, como si fuera lo más obvio del mundo.-Le puse Simona por que es mi modelo de ropa nueva y no le puedo decir mona, suena mal. (Suena a chango.)
-¿Y por que están vestidos así?
-Por que cuando veo ultima moda, la perfección de los accesorios combinando con el vestido y lo lindos que son los zapatos, casi tengo un orgasmo de puro gusto por la moda, y así, con Simona, lo acabo de tener sin dejar de ver lo maravillosa que es mi ropa…
Prueba numero uno de que no solo los Black estaban locos.
-…y si quieres,-continua hablando Lucius,-te presto a Simona, Sev, como tu vida sexual es un asco…
Severus lo miro profundamente malévolo antes de responderle.
-Lucius, pregúntale a cualquier alumno del colegio si cree que cogerse a Lucius Malfoy como y cuando uno quiere es tener una vida sexual de asco y veras que te responden…
Lucius, que fingía que lo escuchaba, le pregunto interrumpiéndolo:
-¿Quieres que deje a la mona vestida así, o le pongo otra ropa?