-¡Hola profesor! ¿Qué hace por aquí?...-
-Hola JinKi sshi, ¿yo? Pues ¿no es algo obvio? Salgo de un cine… eso quiere decir que termino de ver una película-
Le dije riendo nerviosamente, pero parecía un tono de burla… él se sonrojó de manera brusca…
-Ti… tiene ra… razón… dis… disculpe… a… a veces ha…hago preguntas es… estúpidas…-
Yo me sorprendí ante su actitud, parecía apenado, y mucho…
-Oye no espera, no me estaba burlando de ti, e…era solo un comentario…-
Dije recobrando mi compostura un poco, él se sonrojó aún peor…
-Oh… lo siento… he… he malinterpretado su… sus palabras… al… al igual que mu… muchas veces en clase…-
Una vez más me sentí culpable por mis palabras, lo menos que quería era hacerlo sentir mal, y cada vez que hablaba, lo hacía aún peor, pues aunque no lo crean, ésta era la primera vez que hablábamos “fuera del ámbito escolar”.
-Oh… no, no te preocupes… tal vez he sido yo el que se ha expresado mal, disculpa por eso…-
-Descuide, está bien, usted no tiene la culpa…-
-Oh, bueno si tú lo dices… eemm, pues que disfrutes tu salida, yo debo irme… nos vemos, hasta pronto-
Sonreí y comencé a caminar, pero me grita…
-¡Espere!-
Me detuve, y volví a él…
-¿Qué sucede JinKi sshi?-
-Es… estoy solo… ¿no… no querría ir a tomar un café con… con migo?-
Me dijo tartamudeando, y volviendo a sonrojarse de manera muy notoria una vez más.
-Oh JinKi sshi, es muy amable de tu parte… pero debo irme realmente, me están esperando… en… en verdad lo siento-
Me miró de repente… algo desilusionado por así decirlo…
-¿U… usted… está… está acompañado?-
-Así es, y me está esperando, por eso… debo irme, en verdad lo… lo siento-
Agachó su cabeza, y tragó saliva… -De… de acuerdo, si… siento mi… mi atrevimiento- Me dijo de manera muy triste, en verdad parecía afectado, desilusionado…
Otro chico, al cual le rompía el corazón… no pude con mi genio, en verdad me hacía sentir muy mal, y demasiado culpable… no pude evitarlo, y lo dije…
-No, no tienes por qué disculparte… o… otro día, si… si quieres… temaremos un café juntos…-
De acuerdo, Jong me mataría de seguro, pero… ¿por qué? Él no es nadie ni nada mío para decirme lo que hacer o no. JinKi me miró una vez más, con una sonrisa en su rostro y sus ojos luminosos, iluminados ¿por la “esperanza” tal vez?
-¿¡Lo… lo dice en… en serio!?-
-Sí, así es…- Sonreí –Ahora si me disculpas, realmente debo irme, he demorado demasiado-
-¡Gracias! Y… y lamento haberlo demorado…-
-No descuida, nos vemos adiós-
Me dispuse a irme sin darle oportunidad a decirle más nada… lo saludé con la mano a lo lejos, y cuando veo que entró al cine con una sonrisa de lado a lado… vuelvo corriendo hacia el cine para irme al estacionamiento el cual estaba al lado contrario al que iba. De acuerdo, no creo que sea un buen profesor, ¿qué profesor le promete un café a un alumno? Solo yo… de seguro lo malinterpretaría y se lo tomaría cómo una cita… realmente… no creo que tenga lo suficiente para ser un verdadero profesor…
Cuando llegué al estacionamiento, me dirigí inmediatamente al coche de Jong, quien estaba dentro del auto cruzado de brazos y recostado en el asiento mientras escuchaba música…
Golpeé suavemente el vidrio de la ventana… y se incorporó rápidamente… de su posición… al parecer lo asusté… me abrió la puerta y bajó la música… entre y suspiré cansado…
-¿Y bien? ¿No sospecha nada verdad?-
-No…-
Dije sin mirarlo y volví a suspirar cansado… el suspira también…
-¿Cómo te ha ido entonces?-
Lo miré ahora sí, con algo de tristeza… él abre los ojos grandes… y descruza sus brazos gira su cuerpo completo hacia mí…
-¡No me digas que se te declaró, y tú le rechazaste, y para hacerlo sentir mejor, también le besaste como a MinHo!-
Dijo algo asustado… lo miré con algo de miedo… y comencé a jugar con mis dedos de manera nerviosa
-¡No me digas que sí lo hiciste!- Dijo aún más alterado…
Suspiré y volví a hablar –No exactamente, pero si algo por el estilo- Me miró nuevamente con sus ojos abiertos… y me dispuse a decirle todo –No, no se me ha declarado, pero casi… me invitó a tomar un café pero le dije que no podía porque me esperaban- Jong suspiro aliviado… y de cierta manera yo también me sentí más relajado, pero volví a tensarme por lo que iba a decir a continuación -Pero…- Volvió a mirarme con algo de sorpresa…
-¿Qué hiciste, ahora?-
-Nada, bueno sí… al oírme decir, que “alguien me esperaba” su rostro cambio totalmente y sentí cómo reflejaba claramente la tristeza la desilusión, cómo “exponía” su corazón roto… por lo que no pude con mi genio… y… y le prometí ir a tomar un café uno de estos días…-
Jong apoyó su cabeza en el asiento de manera pesada, haciendo que rebotara levemente… y suspiró, mientras sonreía… eso me alivió enormemente…
-Key, Key, Key… ¿no tienes remedio verdad? Eres demasiado compasivo… ¿sabías que tu lástima, los hiere peor que tu rechazo o ignorancia? Lo menos que quieren es lástima o compasión, como quieras llamarle. Pero bueno, supongo qué así eres tú y no cambiaras… eso sí no más “besos de consuelo” a nadie… suficiente tuve con lo de MinHo-
-¿¡Entonces no estás enojado conmigo!?...-
Pregunté sorprendido… el sólo sonrío una vez más…
-No, no tendría por qué estarlo… después de todo es sólo un café ¿no es así?-
-¡Así es! ¡Muchas gracias por ser tan compresivo!- Dije eufórico, controlando enormemente mi impulso de abrazarlo con afán…
-Aigo~… compresivo, si compresivo… lo soy demasiado creo, algún día me jugará en contra… estoy seguro… venga te llevaré a casa…-
Dijo mientras ponía el auto en marcha… y emprendimos camino a mi casa…
-Si está bien…-
Dije, para luego sonreír… fuimos todo el camino en silencio pero ambos con una sonrisa, y de vez en cuando nos mirábamos unos instantes, para luego volver nuestra vista a donde estaba anteriormente, él al camino, y yo a la ventana…
Cuando llegamos a casa, no sé por qué lo hice, pero simplemente me nació decirlo… estaba contento…
-¿Quieres entrar a tomar un café? La noche está algo fresca-
Sonreí, él me mira, ahora sorprendido…
-¿Lo dices en serio?-
-Por supuesto, si no directamente no lo hubiera dicho…-
Sonreí… a lo que é también…
-De acuerdo, tienes razón disculpa mi pregunta estúpida, es solo que me…-
-¿Sorprendió?, ¿te sorprendió mi invitación? descuida yo también me acabo de sorprender por ella.-
Ambos reímos, y salimos del coche… ¿qué era todo este comportamiento que estaba teniendo? Se supone que dije que hoy no pasaría nada… ¿¡Y quien dijo que pasaría algo!? Es simplemente un café, se lo toma y luego se va, nada del otro mundo… ¿¡En que piensas Key pervertido!?
-Ven, pasa es por aquí…-
-De acuerdo te sigo… nunca creí que pudiera conocer tu casa por dentro…-
Dijo divertido, solo sonreí… sin decir nada… aunque por dentro dije un “babo”, entramos a mi departamento le dije que tomara asiento mientras yo preparaba café para ambos… el así lo hizo… y mi sonrisa, no se borraba de mi rostro, como tampoco la de él… ¿qué me sucedía?...
Cuando terminé de preparar los cafés, los coloqué en una bandeja, junto a unos bocaditos para acompañarlo, y dejé la bandeja sobre la pequeña mesa que estaba entre medio del juego de sillones…
-Aquí tienes, espero que te guste-
-Muchas gracias, muy amable de tu parte-
Me sonrió otra vez, se acomodó bien en el sillón de doble cuerpo, y sujetó la taza… mientras se la acercaba para soplarlo, pues estaba muy caliente… yo hice lo mismo.
De vez en cuando cruzábamos miradas… pero solo eso… dejó su café sobre la bandeja y tomó un bocadito… y antes de probarlo me dice…
-¿Qué es lo que sucede? ¿Por qué tan amble de repente? ¿Qué pasó con eso de “¡No, no puede haber nada entre nosotros, soy tu profesor y tu mi alumno, no debemos relacionarnos más de eso…”?-
Dijo imitando una voz aguda y mordió el bocadito a lo que yo abro mis ojos grandes… era verdad… ¿Qué demonios había pasado con mi postura de profesor correcto y ejemplar?
-No lo sé… hoy… tu comportamiento ha cambiado, por ende también el mío… quizás sea eso… no lo sé…- Fue lo primero que atiné a responder… aunque realmente ni yo tenía una respuesta a esto…
-Hmm están deliciosos, ¿dónde los has comprado?, ¿eh, mi comportamiento? Quizás-
Sonreí al ver cómo agarraba otro de aquellos bocaditos.
-Jeje, no son comprados, son caseros, los he hecho yo mismo, que bueno que te hayan gustado…-
Me miró sorprendido, con sus mejillas hinchadas, pues se había metido uno completo, por suerte eran chiquitos… tragó y habló…
-¿Los has hecho tú? ¿Pero en qué momento?-
-No sé si sabias, pero he tenido todo el día para hacerlos… mientras hago la limpieza diaria cocino “postrecitos” para comérmelos justamente en estos momentos, a la noche con un buen café…, no pienses que cada vez que me dices “paso por ti a tal hora” estaré todo el día sentado en ese sillón esperando por ti… tengo una vida, y lo sabes muy bien…-
-Jeje es verdad, disculpa, es que me sorprendió no sabía que cocinaras tan bien…-
Sonreí una vez más y tomé una servilleta para acercarme a limpiar sus comisuras con chocolate mientras le digo con una sonrisa… él me miraba atento mientras me acercaba…
-Hay muchas cosas, que aún no sabe de mí joven Kim, mi vida no es solo ser profesor de día, mesero de noche, y salir contigo por “premios” que te debo por tal o cual cosa…-
Terminé de limpiar sus comisuras, y comencé a alejarme para volver a sentarme pero su brazo me sujetó y me tiró hacia su lado, y al estar medio agachado, y de cierta manera parado inestablemente… terminé cayendo encima suyo… lo miré sorprendido, a lo que él me sonríe de lado y me dice…
-Tienes razón, y ahora en estos momentos… sabré cómo saben tus labios junto al chocolate-
-¿¡Eh!? ¿Qué? ¡N-!-
¿Adivinen qué…? sí… me cortó nuevamente tomando mis labios, sin darme oportunidad de hacer nada, pues estaba mal ubicado por lo que no podía encontrar un apoyo estable para quitarme de encima.
Ese sabor agridulce del chocolate amargo que había usado en mis bocaditos… llegó instantáneamente… y no pude resistirme en verdad esa sensación era maravillosa, sus labios, en conjunto con el chocolate, era maravilloso… nos separamos por falta de aire… me le apoyé suavemente en su pecho… y pude sentir su corazón levemente acelerado… mientras que su pecho estaba también levemente agitado al igual que el mío por la falta de aire…
-No me equivoqué… tus labios de cualquier manera son deliciosamente adictivos…-
Me sonrío… yo me sonrojé y quise quitarme pero sus manos se colocan rápidamente en mi espalda, e hicieron presión logrando que volviera a caer sobre su pecho…
-Calla Jong… estaba pasándola bien, hasta que tus impulsos lo arruinan…-
Dije de manera quizás algo desganada… apoyado aún en su cuerpo… cuando mis ojos se abrieron sorpresivamente al sentir sus suaves delicadas y cariñosas caricias en mi espalda…
-No, no es así, no sé porqué aún insistes en negarlo, ayer lo dijiste, tal vez no directamente a mí… pero te oí, te oí decir que me amabas, yo también lo hago, ¿entonces? ¿Por qué seguir engañándote a ti mismo con que no es así? Y no me digas porque eres mi profesor, porque no lo tomaré cómo una excusa válida… el que seas mi profesor no cambia nada… solo lo eres en el colegio, y en colegio te trato como tal, ¿entonces? ¿Por qué no te rindes de una vez y decides liberar del todo tus sentimientos y entregarte a la felicidad? Te amo Key, Te amo Kim KiBum, “Lo amo” Profesor, ¿de qué forma quieres que te lo diga?, seas quien seas te amo… y sé que tu también… no me lo puedes negar, sabes perfectamente que es cierto…-
-Jong… yo…-
-Ves ahí lo tienes. Ya no más “Joven Kim” o “JongHyun sshi” solo “Jong” esa es una manera muy informal de llamarme, si estuvieras en “plan de profesor” no me llamarías así… por favor Key… ya deja de negarlo… yo, ya te lo he dicho, te amo… por lo tanto tus sentimientos son placenteramente correspondidos, no hay necesidad de estar inseguro, si es eso, una de las razones por la que te niegas a decir abiertamente “Te amo Jong”-
Sus palabras me habían dejado perplejo una maldita vez más… y más aún por su tono serio, en verdad parecía que lo decía en serio, él en verdad parecía que me amaba, al parecer no soy su capricho momentáneo… lo miré y me ayudó a quitarme de encima y me senté a su lado…
-Jong es verdad todo lo que dices pero tú no entiendes…-
-¿Qué no entiendo?-
-Que no me siento para nada a gusto teniéndome que ocultar cómo si fuera un fugitivo de la justicia, para que los demás alumnos no nos descubran y le vayan con el cuento al director, y por ende hacerme perder el trabajo… en verdad lo necesito…, no me sentiría tranquilo nunca, en alguna de nuestras posibles futuras citas… ya que en vez de disfrutar el momento y relajarme sería todo lo contrario… estaría más al pendiente de las personas que nos rodean… y tenso por temor a que se me escape algún rostro… eso me resultaría totalmente estresante…, a eso no podría llamarlo “cita” sino más bien “tortura…” y yo no quiero eso… quiero poder ser capaz de disfrutar la compañía de mi ser amado, sin ninguna preocupación… quiero poder vivir una vida normal, y… ¿¡y porqué tenias que ser uno de mis estudiantes!? ¿¡Por qué tuviste que deslumbrarme con tu sonrisa perfecta!? ¿¡Por qué tenías que enamorarme con tu madurez y respuestas inteligentes en clases!? ¿¡Por qué tenias que lograr el que te amara a pesar de tus actitudes y sonrisas arrogantes!? ¿¡Por qué Jong, Por qué!?-
Decía mirándolo a los ojos, mientras bajaba mi tono a medida que hablaba, quebrándome finalmente… al hacer aquella primera pregunta… él solo me miraba, realmente sorprendido, apuesto a que no se esperaba todo esto de mí, no sabía todo lo que me atormentaba, lo que me dolía, el amarlo en “secreto”, no sabía el “porqué” de mis actitudes negativas… pues ahora lo sabía… él no dijo nada, sólo me abrazó, y me acurrucó contra su pecho, mientras acariciaba con delicadeza uno de mis brazos…
-Yo… yo lo siento Key, he sido un maldito egoísta, estaba tan cegado en que admitieras que me amabas, que olvidé ponerme en tu lugar, y buscar por mis propios medios, las razones de tus actitudes… al parecer no soy tan maduro cómo tu me crees… mi cinismo ha sido muy infantil de mi parte, lo siento, en verdad lo siento… será mejor que me valla y piense sobre mis comportamientos…-
Dijo serio mientras me soltaba… en ese momento sentí un frío innatural… en mi corazón y cuerpo…
-¡No! No te vayas por favor, ahora más que nunca… necesito contención, necesito de tu abrazo…-
Dije sollozando aún mientras lo miraba estando él de pie, sin pensarlo se sentó una vez más a mi lado y me abrazó otra vez, volviendo a acariciarme cuidadosamente… y haciendo que mi sollozo cesara…
-Sí, lo siento, está bien… esta noche me quedaré aquí, si es que no te molesta… alcánzame unas mantas y frazadas y dormiré aquí en el sofá…-
Quitó mi cabeza suavemente de su pecho, sujetó mi rostro con ambas manos y me atrajo a sus labios, para besarme, fue un beso corto pero tierno…
-No- Me miró sorprendido… -Dormirás conmigo, será mi premio de tu parte por haberme hecho llorar…- Dije con una leve sonrisa, aunque mis ojos aún estaban colorados e hinchados por el llanto hace segundos atrás… -Hablo en serio Jong, ¿No crees que yo también tengo derecho a obtener “premios” por algo…?-
Dije a lo último ante la mirada totalmente sorpresiva por parte de él… tragó saliva y asintió…
-¿Estás seguro? ¿Eres tú Key?-
-Por supuesto que soy yo, ¿qué no puedo hacer ese tipo de “propuesta” por ser “tu profesor”? ¿No eres tú el que siempre dice, que sólo lo soy en el colegio, que fuera de él no lo soy más?, al final lo has logrado… hacerme “pensar” de esa manera, ¿y preguntas si soy yo, si estoy bien, si estoy seguro? ¿Quién lo entiende joven Kim?-
Dije a lo último sonriendo de manera débil, pues aún seguía algo frágil por todo lo que había dicho antes…
Recogí la bandeja con las tazas a medio terminar, mientras secaba con el dorso de mi mano rápidamente bien mis ojos… llevé las tazas a la cocina. Las dejé allí, sinceramente hoy no tenía ganas de lavarlas… volví al living…
-Jong… vamos, realmente tengo sueño…-
Él se dio vuelta en el sillón y asintió… de manera algo “insegura” se puso de pie y comenzó a caminar hacia mí… yo continué con el camino hacia mi habitación hasta que finalmente entró… de cierta manera me puse nervioso, ¿¡Quién me ha mandado a ser tan osado al pedirle que se quede, y más aún en mi habitación!? Hubiera aceptado simplemente llevarles unas mantas y que duerma en el sofá… ¡malditos impulsos, malditos sentimientos, que se escapan en los momentos más inoportunos!.
-Wow… veo que te gusta el rosa…-
Dijo sin emoción alguna, quizás algo extrañado, al ver la cama con un cubrecama rosado, y unos almohadones en el mismo tono, junto a las pequeñas carpetas tejidas, rosadas también, que tenían las mesas de luces…
-Así es, es mi color favorito, felicidades, sabes algo más de mí…-
-Si… por eso no me extraña el que seas así…-
Dijo susurrando por lo que no alcancé a oír nada, solo el “sí”
-¿Has dicho algo Jong?-
-¡No! Nada jeje.-
-Bueno, pues en ese caso, acomódate, yo tomaré una ducha la necesito…-
-De… de acuerdo… ¡Espera! ¿¡QUÉ!?, ¿¡te ducharás teniéndome aquí!?-
-Sí, de que te sorprendes, ni que fueras a violarme….-
-Ganas no me faltan…- Susurró algo nuevamente que no alcancé a oír…
-¿Disculpa?-
-¡Eh! No, nada…-
-Hmm ¿estaré volviéndome sordo?-
Dije ahora en voz baja para mí, mientras abría la regadera… aquella agua tibia recorrer mi cuerpo… realmente me relajaba… me comenzaba a sentir renovado… y comenzaba a olvidar el mal rato que había pasado hace unos cuantos minutos atrás…
Cuando finalmente salí de la ducha, me coloqué mi pijama y salí del baño… me dirigí a la pieza… y allí estaba Jong sentado a unos de los lados de la cama…
-¿Qué sucede Jong?-
-¿Oh ya has salido? Bonito pijama rosa-
-Gracias- Sonreí -¿Pero no me has dicho que sucede? ¿Algo malo?-
-¿Eh? No, no… o bueno si tal vez un poquito, es que no tenía planeado el quedarme aquí, y realmente una de mis costumbres también es bañarme antes de acostarme, pero esta no es mi casa, por lo que no tengo ropa tampoco, y me siento extraño, es cómo que no puedo conciliar el sueño si no me ducho… y bueno yo-
Le corté tirándole dos toallas, y entregándole uno de mis pijamas…
-Ve a bañarte si quieres, aquí tienes este pijama, está casi sin uso, no me gusta ese color azul tan oscuro… y aparte me queda algo grande, quizás a ti te entre…-
-Gra… gracias, y lamento las molestias que te estoy causando, no debería de ser tan quisquilloso, pero no puedo evitarlo…-
-Descuida, no hay problema, solo dúchate ¿sí?-
Él asintió y se dirigió al baño… yo me coloqué mis cremas para cuidarme el cutis, y me acosté, realmente estaba cansado… él salió del baño y cuando estaba medio dormido, siento que golpean la puerta de la habitación.
-Pasa Jong, está abierto…-
Dije sin ganas, y quizás algo a penas un poquitito enojado… las luces de los veladores estaban encendidas… y veo entrar a Jong… algo apenado… con el pantalón puesto pero con la camisa en mano…
Abrí mis ojos al ver su cuerpo, sus músculos, mejor dicho, bien definidos… me sonrojé y me di vuelta bruscamente para que no me viera… y haciendo un esfuerzo sobrenatural para que mi voz se oyera al igual que antes le digo…
-Ponte esa camisa, te resfriarás… no quiero hacerme responsable de tu salud…-
-No puedo- Dijo de manera débil, me acomodé en la cama y me senté, lo miré y elevé una de mis cejas… -No me prende, es un poco mas angosta que mi pecho…-
Mis ojos involuntariamente recorrían su pecho, en verdad era algo sumamente tentador, no me imaginaba que su cuerpo estuviera tan bien tonificado…
-Bien déjala entonces, sólo acuéstate ¿sí? Me gustaría dormir…-
-Si de acurdo, lo siento…-
Se acomodó en la cama, y apague nuevamente el velador… el de su lado aún seguía encendido, quise intentar ignorar aquella luz, pero me cabreaba realmente… estaba por decirle que la apagara pero él me habla…
-¿Key? ¿Estás despierto?...- Preguntó con algo de miedo quizás…
.Sí, y estaba por decirte que apagaras esa luz…- Dije acostado dándole la espalda
-No puedo dormir…- Dijo nuevamente con esa tonalidad débil…
-Y no, la luz estorba- Dije irónicamente… aún sin moverme de mi posición
-No, no es eso…- Volvió a decir con esa tonalidad débil…
-¿Qué sucede ahora?- Pregunté, y debo admitirlo cabreado internamente, pues cuando lo dije, parecía un tono normal… algo adormilado…
-Es… es que no puedo dormir si no tengo a Minnie conmigo…- Dijo ahora en un tono avergonzado… me di vuelta y lo miré… sus mejillas estaban levemente sonrojadas… me desperté completamente al verlo por primera vez sonrojado…
-¿Y quién es Minnie, se puede saber?- Pregunté ahora curioso, y divertido…
-Es…es mi…mi di…dinosaurio de…de peluche…- Dijo ahora totalmente apenado, por primera vez lo veía sonrojado de manera notoria… solo sonreí de lado…
-Vaya, ¿Quién iba a decir que el chico “malo, rudo, arrogante, lanzando” tenía su lado infantil, tierno y encantador también?- Dije una vez más irónicamente, pero con una sonrisa en mis rostro imborrable al descubrir esta faceta en él…
-No te burles, no es porque sea infantil es que tiene un valor sentí- Comenzaba a excusarse pero por primera vez fui yo quien lo interrumpió… y sí de la misma manera que siempre lo hacía él…
-¿Ese beso de la buenas noches bastará? ¿Oh Minnie es irremplazable?- Dije en un tono muy cariñoso, como si estuviera hablándole a un verdadero niño…
-Qui… quizás si… si me das otro, podría inten.tar dor… dormirme-
Dijo ahora en un tono un poco más serio… yo solo sonreí y me volví a acercar a sus labios… pero cuando lo hice sus brazos me capturaron, al igual que sus labios… y fue él quien había tomado el control en el beso ahora… uno de mis brazos, estaba apoyado en su pecho… e inevitablemente… me dejé llevar por esa hermosa sensación… no quería pensar en nada… mi brazo automáticamente comenzó a acariciar su pecho mientras el beso aún continuaba, sus brazos comenzaron a recorrer mi espalda de a poco, nos separamos… la falta de oxígeno se hizo presente… nos miramos a los ojos y agitado… le digo…
-Se me acaba de ocurrir otra manera de hacerte dormir- Sonreí con malicia… mientras ejercía por primera vez el poder de mi mirada “felina”