-… ¡Ella te amaba! ¡Y tú la destruiste! ¡Le quitaste todo de un día para el otro!-
Mi padre se liberó… de mi agarre… su rostro de enfurecido cambió a “adolorido”…
-Tú, tú no sabes lo que en realidad pasó…- Abrí mis ojos… separándome aún más de mi padre… lo miré a los ojos… estaban brillantes… reflejaban tristeza… sus ojos… estaban a punto de llorar…
-¿Padre?...-
-¡Ella fue la que me traicionó! ¡Ella fue la que hizo que le quitara todo al enterarme de que estaba embarazada de otro!-
Mi corazón se detuvo por unos instantes, ¿mi… mi mama estaba embarazada cuando dejó la casa? ¿¡Te… tengo un hermano!?
-¿Qué es… lo… lo que acabas de… decir… padre?-
-Lo que oíste… ¡yo amaba y aún amo a tu madre! ¡Pero traicionó mi confianza! ¡Traicionó mi amor! Ella… ella me imploraba porque la dejase explicarlo todo… pero… simplemente no la dejé… estaba demasiado… demasiado adolorido…-
-¿Por eso la echaste de casa? ¿Por qué te fue infiel según tú? ¡Si tanto le importaba explicarte es porque le importaba conservarte a tu lado…! Si te hubiese sido infiel simplemente lo hubiera aceptado y listo!...-
-Eres Joven hijo… y aún no entiendes de éstas cosas… olvídalo… no lo entenderías… vete… no… no tengo ganas de seguir recordando el doloroso pasado… ya hablaremos sobre ese tal “Key” más adelante… déjame solo por favor…-
-Padre, estoy a punto de casarme… ¿No crees que debería entender lo su-?-
-¡Vete he dicho!-
Dijo con las lágrimas recorriendo sus mejillas… ¿Él podía llorar también? ¿Él sufría también por amor?... Sí… él… él era mi antiguo padre… y recuerdo perfectamente aquellos momentos en los que era feliz a su lado, cuando ambos sonreíamos juntos… cuando jugábamos en el gran patio y nuestra madre nos cuidaba… recuerdo… cuando “éramos” una familia feliz… pero luego de que mi madre “dejara la casa” mi padre comenzó a cambiar… ya no era el mismo padre amoroso que conocía… se convirtió en frío y déspota… comenzó a “internarse” en su trabajo… y nunca tenía tiempo para mi… me crie prácticamente solo…
No dije más nada… y me fui de allí dando un portazo… busqué en la guía telefónica la dirección de mi madre… bingo… la encontré… tomé mi auto… y me dirigí allí… creo que era hora de aclarar todo, de volver a ver a mi madre a la cara… ver lo que el tiempo había hecho con ella.
Siempre creí que mi padre era quien la había “echado” de un día para el otro pero nunca supe las razones… ella simplemente me dijo que se tenía que ir… porque “molestaba a papá” yo en ese entonces no comprendía… tenía cerca de 7 años… ya habían pasado… bastantes años de aquello… 11 quizás… y nunca se me había dado por buscar a mi madre… luego de que fui capaz de entender mejor aquellas palabras… me sentía ahora como un mal hijo… ¿Realmente querrá verme? ¿Me reconocerá?...
Llegué a la dirección… la casa era pequeña… pero acogedora… estacioné mi auto en la vereda de en frente… y me coloqué frente a la puerta… se oía una voz… femenina y muy cálida…
“-¡JongIn deja eso! ¡Lo romperás y te lastimarás!-”
Mi corazón se aceleró y mi garganta se secó… jamás estuve tan nervioso, ni siquiera cuando me le declaré a Key o le propuse matrimonio…
Estaba parado allí cómo un idiota… quería golpear la puerta… pero mi mano no se movía… hasta que la forcé a hacerlo… golpeé…
“-¡En seguida salgo!!-”
Se escuchó aquella voz… y en ese momento quería salir huyendo… mi corazón se salía de mi pecho… ¿Por qué tan nervioso? Se preguntarán… pues hace años que no hablo ni sé nada de mi madre… no sé si aún siga queriéndome, si aún me recuerde…
El sonido de la puerta abriéndose terminó de ponerme nervioso… sentí cómo de mi garganta iba a resultar extremadamente complicado decir un simple “buenas noches”
La puerta se abrió… una mujer algo joven, o quizás de unos 30 y tantos años me atendió… se quedó mirándome… yo la miraba fijamente a los ojos… no me salían las palabras ¡Lo sabía!...
-¿Si? ¿Qué es lo que desea?-
Preguntó rompiendo con el silencio… yo reaccioné…
-¡Ah sí disculpe!... Buenas noches… quisiera saber si aquí vive Park YoungRi…-
-Si… aquí es… ¿Qué se le ofrece?-
-¿Po… podría… ha… hablar con ella?-
-Hmm, me temo que no va a poder ser posible joven… ella está… en… en el hospital…-
Mi corazón se encogió de sobremanera…
-¿Us… usted no es ella?...-
-No, me temo que me confunde… soy su mejor amiga… y estoy cuidando de su hijo… en lo que a ella le dan el alta…-
-¿Sa… sabe si lo que tiene es…es grave?-
-Según lo que me han dicho los médicos no lo parece… pero… ¿Quién es usted? ¿Por qué tanto interés en ella?-
Preguntó extrañada… yo no sabía que responder… por lo que le pregunté…
-¿Hace mucho que conoces a mi ma… digo… a YoungRi sshi?-
-Cerca de 14 años, ¿por qué lo pregunta joven? Por favor explíqueme quien es y por que la busca…-
14 años… eso quiere decir que sabía de mí existir…
-Soy… soy yo, Kim JongHyun…- Sus ojos se abrieron de sobremanera al oír aquel nombre… -Su hijo-
-¿¡Jong… JongHyun!? ¿¡En… en verdad eres tú!? ¡Pe… pero que guapo te has puesto!-
Dijo aquella mujer, la cual no reconocía… pero sin dudarlo me abrazó… mientras sus ojos se llenaban de lágrimas… se separó y limpió sus lágrimas…
-Lo… lo siento… ¿no me recuerdas verdad?- Negué con la cabeza… ella sonrió y continuó hablando… -Me lo imaginaba, en aquel entonces estaba mucho más joven y guapa…- Rio ante su propio “chiste” –Soy… Choi JeRyong, aquella joven de 18 años, que visitaba a tu madre todos los fines de semana…-
-¿JeRyong sshi?- Dije recordándolo todo o por lo menos a ella… recuerdo… que en ese entonces… “estaba enamorado” de ella…-
-Así es… ¡Oh Jong, no puedo creer que has venido a buscar a tu madre! ¡Déjame abrazarte por ella!-
-Me… me gustaría poder ir a verla… necesito que me aclare algunas cosas, que aún están inconclusas en mi cabeza… y tengo mucho de qué hablarle y preguntarle…-
Le dije de manera suave, mientras ella me abrazaba… se separó y me miró a los ojos…
-Seguro que sí, pero… tendrás que esperar a mañana… la hora de visitas ha terminado hace rato… lo siento…-
-Tienes… razón… ¿podrías darme la dirección del hospital y en la habitación en la que se encuentra…?-
Ella respondió con una sonrisa… -Seguro… pero pasa por favor… iré a buscar en dónde anotar…-
-Tía… ¿Quién es él?...-
Preguntó el pequeño niño al verme entrar a la casa… ese rostro… esa luz en sus ojos llenos de esperanzas y alegría… ese niño… no tendría más de la edad que yo tenía cuando mi madre se fue de la casa… el verlo todo el pasado volvía en mi cabeza… JeRyong me miró preocupada… a lo que yo le respondo con una sonrisa…
-Soy un viejo conocido de tu mamá- “La cual es mi mamá también” fue lo que pensé decir… pero me lo callé… él… era… “mi hermanito”… -Gusto en conocerte… soy Kim JongHyun… tu cómo te llamas?-
Le extendí mi mano mientras le sonreía con ternura… él tomó mi mano… una conexión extraña fue la que sentí en su manito…
-Soy Padrk JongIn hijo de mi mamá…-
Me dijo serio en una actitud de “chico maduro”, yo sonreí… ante ese “hijo de mi mamá” tan inocente… tan puro… me le quedé mirando sonriendo sin soltarle la manito… estaba tocando a mi “hermanito” por primera vez… al enterarme de su existencia tan solo minutos atrás…
-Aquí tienes la dirección y el número de habitación-
Me interrumpió la voz de JeRyong sshi, con cara de preocupación… quizás por lo que había dicho anteriormente… pero simplemente decidí hacerme el idiota… y me puse de pie le sonreí a ambos…
-Gracias por la información JeRyong sshi.-
Ella alzó al pequeño y sonrío acompañándome a la salida… -No hay de que, ha sido una alegría volver a verte… y saber que estás bien y más guapo que antes…- Me sonrío… de una manera extraña… ¿estaba ligándome?... opté simplemente por sonreír… e irme…
-Gracias por el cumplido… ahora si me disculpas… debo irme… mi novio me espera…-
Dije a propósito… sonriendo de lado al ver su cara de asombro… al oír la palabra novio, jaja lo siento… ya has perdido el tren conmigo…
-Tu… tu tienes… este bueno cómo decirlo… tu e… eres…-
-Sí, y es más me voy a casar… pero luego si me lo permites… vendré a visitarlas con él… para que lo conozcan… es encantador…-
Dije dejándola con la palabra en la boca… me retiré por mi cuenta… ella había quedado helada… así que antes de cerrar la puerta la miro para luego mirar a JongIn…
-Hasta pronto JongIn… quizás algún día vuelva…-
Le sonreí… a lo que él me respondió de la misma manera lo cual me sorprendió… así que luego de eso… cierro la puerta con torpeza, ahora era yo el que estaba algo shockeado…
Necesitaba volver a casa… pero no sé si podría… por lo que en el camino… estuve sumido en mis pensamientos de si volver o no a mi casa… cuando vuelvo en sí… veo que ya me había detenido frente al edificio de Key… le debía una explicación también a él… por haberlo “plantado” así de manera tan grosera…
Pero si lo hacía tendría que explicarle todo… y de seguro quería acompañarme a ver a mi madre mañana… y no quería causarle algún disgusto o algo de ese tipo de cosas… pues no sabía realmente en qué situación se encontraba su salud… así que me quedé mirando el piso de él… aquel balcón en el que habíamos estado horas, si se puede decir, atrás.
Arranqué el auto nuevamente y volví a casa… intentando no provocar ruido me dirigí a mi habitación… la casa estaba toda a oscuras prácticamente… las empleadas ya se habían retirado… y vi la luz del despacho de mi padre encendidas… escuchaba un retintineo de vidrio… abrí mis ojos… y me dirigí corriendo hacia el despacho…
Abrí las puertas de manera brusca… tenía una botella de whisky vacía y otra en mano… mi padre nunca fue de tomar… estaba despeinado… con el traje desarreglado… sentado en la alfombra… y con los ojos rojos… mientras en sus mejillas las lágrimas seguían surcando su piel…
-¿¡Papá que haces!?- Dije de repente asustado… a lo que corrí a “rescatarlo” “socorrerlo”… pero él de manera muy inestable y débil quiso liberarse de mí.
-¡Suéltame! ¡Déjame en paz! ¡Llama a tu madre quiero halar con ella! ¡YoungRi! ¡YoungRi! ¿¡Dónde estás!? ¡Ven aquí mujer!...-
Decía tambaleándose… para todos lados… queriendo dirigirse a las puertas para “ir en busca” de mamá…
-Papá… ¡Papá reacciona! ¡Mamá no está! ¡Deja de tomar!-
Le dije quitándole la botella de su mano… para luego sujetarlo mejor… y comenzar a “llevarlo” a su habitación…
-¿Cómo que no está? ¿¡Se fue y no me avisó!? ¡De seguro me está engañando con otro!...-
-¡Papá!-
-Oh perdona hijito… tu no debes escuchar esas cosas… eres muy pequeño… tienes 7 añitos recién…-
Me decía acariciando mi pelo… de manera algo bruta… pues en el estado en que estaba no podía coordinar sus movimientos… aunque aquellas palabras me dejaron algo petrificado… ¿“7 añitos”? ¿Acaso… había tenido una regresión en el tiempo?...
-Ven papá acuéstate… necesitas descansar…-
Le dije ignorando… aquellas palabras dichas anteriormente… ayudándolo a recostarse en su gran cama… quité primero las sábanas… lo senté con cuidado… y comencé a quitarle los zapatos, el saco, y a aflojarle la corbata… para luego terminar cambiándolo… colocándole su pantalón de pijama… y una remera sin mangas blanca…
-Hijito te amo… a pesar de tener 7 te ves tan grande… tan guapo… me siento orgulloso de ti…-
Me dijo ahora… volviendo a llorar, para luego colocar uno de sus brazos alrededor de mi cuello y llevarme a su pecho… -Duerme con papi hoy… papi está triste…- Aquella manera de llamarme tan cariñosa y cálida… cómo en los viejos tiempos… hiso que se me estrujara el corazón de la angustia…
-Iré a traerte unos paños con agua fría…-
Dije liberándome de su agarre con facilidad… intentando hacerme el duro y serio… pero realmente tenía ganas de llorar… busqué unos paños y los coloqué en un pequeño recipiente con agua… los embebí en ella y coloque uno principalmente en su frente… el suspiró aliviado… y luego con otro… comencé a recorrer su cuerpo… era como una especie de “lavado” pero vestido… él se había dormido… me quedé a cuidarlo toda la noche… hasta que fui vencido por Morfeo…
Al otro día cuando despierto por el cantar de las aves… me di cuenta que me dormí en la habitación de mi papá en una silla utilizando el colchón como almohada… me enderezo con dificultad… un tirón recorrió mi espalda… pero algo me sorprendió… mi padre no estaba en la cama… en su lugar había una bandeja con un vaso de jugo y comida… el desayuno… en conjunto con una nota… la cual leo algo extrañado…
“Disculpa el mal momento que te hice pasar ayer… a pesar de lo mal que te traté tu aún te has preocupado por mí… lo siento hijo… me tuve que ir a trabajar… pero ese desayuno es mi manera de agradecerte…. Lo hice yo mismo… lamento si sabe a carbón o algo peor… ¿sabes? Aunque no lo demuestre te amo. Papá”
En mis ojos las lágrimas comenzaron a surgir sin previo aviso… simplemente comenzaron a salir… y cuando quise darme cuenta… estaba sonriendo… me acerqué la bandeja… y sin preocuparme por el sabor me lo comí todo… estaba delicioso, jamás creí probar comida hecha por mi padre, especialmente para mí… su sabor… era diferente al desayuno de siempre… éste sabía a… ¿amor?...
Luego de terminar de desayunar… me fijo la hora… eran cerca de las 11 a.m si no me apuraba la hora de visita ¡terminaría! Por lo que me levanté corriendo… ignorando mi dolor de espalda… dándome una ducha relámpago… me había dormido para ir al colegio… no iría… tenía algo mucho más importante que hacer… y eso era averiguar la verdad de mi madre…
Tomé mi auto y me dirigí a la dirección que JeRyong sshi me había dado… llegué allí y pregunté si allí se encontraba una paciente con el nombre de mi madre… en efecto estaba en el lugar correcto… la enfermera me guió hacia su habitación…
Una vez más… detrás de una puerta… paralizado… pero esta vez aún con más intensidad que él día anterior… detrás de esa puerta blanca… estaba mi madre… la mujer que me dio la vida… la mujer a la cual “perdí” de un día para el otro… y de la cual nunca volví a saber más nada… y ahora… ya estaba aquí…
Abrí la puerta… una mujer con mirada serena, tejiendo lo que pareciera una bufanda… con leves arrugas en su rostro pero aún pudiéndose admirar su belleza… ella… era mi madre…. Al fin… al fin la volvería a ver…
Mis piernas no se movían… me quedé paralizado luego de atravesar la puerta… estaba observándola embelesado… aquel tarareo suave y cálido… que mis oídos tenían el placer de degustar… en mis épocas de niño… cuando lloraba, o estaba enojado por algo… aquel tarareo… esfumaba mis frustraciones… mis tristezas y miedos…
¿Piensa que exagero? ¿Qué la trato como a una sirena, ninfa o diosa? Pues sí… déjenme decirles que mi madre lo era, es y será todo para mí…
-¡Oh! Jovencito me has asustado… ¿eres un nuevo enfermero?-
Preguntó esa voz tan dulce… me quebré… con apenas oírla dirigirse a mí, me largué a llorar… sin razón alguna… o bueno a decir verdad sí, felicidad… felicidad absoluta…
-¿Por qué lloras jovencito? ¿Te ha pasado algo?...-
-¿No… no me recuerdas? ¿No… no me reconoces?-
Pregunté entre mi llanto… no era una persona a la que le gustara mostrarse tan débil frente a otros, pero… mi madre… era mi mundo aparte… dónde podría mostarme tal cual como soy… tanto interna como externamente… al escuchar mi voz… sus ojos se abrieron y comenzarona brillar…
-¿Jo… Jongie?-
Sus manos comenzaron a temblar logrando que el tejido callera al suelo al resbalar con las sábanas… yo… yo asentí…
-Tanto… tanto tiempo… ma… mami…-
Ella se tapó la boca… y comenzó a llorar… desconsoladamente… me acerqué a ella…
-¡Oh por dios! ¡Hijo mío ven aquí!-
Me acerqué… y sus débiles pero delicado brazos me rodearon el cuello… yo la abracé también… ¡no podía creerlo! ¡Después de tantos años! ¡Volvía a tener la dicha de sentir su abrazo!... Mis lágrimas comenzaron a recorrer mis mejillas con más fuerzas…
Ella deshizo el abrazo pero yo no quería hacerlo… pero no tuve otra opción…
-Jongie… hijito mío, no puedo creer lo mucho que has crecido… lo apuesto que te has puesto, y los músculos que has desarrollado… ¡eres todo un hombre! ¡Mi hombrecito!...-
Sonrío… mientras limpiaba sus lágrimas… a lo que yo hacía lo mismo… comienza a hablar…
-¿Cómo has estado hijo? ¿Tu padre se encuentra saludable? ¿Se ha vuelto a casar? ¿Cómo te va en el colegio? ¿Cómo me has encontrado?-
Sonreí… era y quien venía a satisfacer sus dudas y resultó ser yo quien ahora las aclararía….
-De a poco madre… una pregunta a la vez… que yo también tengo muchas cosas que me gustaría me aclararas…-
-Sí, tienes razón, perdóname, es que… mi instinto maternal… sale a la luz…-
-Si… puedo comprenderlo- Dije ahora un poco más relajado al ver a mi madre sonriendo… -Pero de todas formas responderé a tus preguntas…- Dije aun manteniendo un tono divertido en mis palabras…
-Primero y principal… he estado bien por suerte, enfermo una que otra vez pero nada de gravedad,-
Sonreí contagiándole el gesto, continué hablando…
–Segundo, mi padre se encuentra bien, aunque, creo que se exige demasiado en el trabajo… lo veo muy demacrado y estresado… y no, no se ha vuelto a casar-
Iba a evitar darle el pequeño detalle de lo que pasó anoche… y de aquello que me dijo de que aún la seguía amando… ya se me ocurriría algo para “volverlos a juntar”
-¿En el colegio? Bien… sólo me falta un año para terminarlo… pero cosas increíbles me han pasado allí, que luego te contaré con más detalles, pues es una historia aparte…-
Reí cómo idiota… al sentir mariposas en el estómago al escucharla… mencionar el colegio… pues mi mente y cuerpo relacionaban inmediatamente la palabra colegio con Key, Key con profesor y Profesor con “amor de mi vida”. Ella me miraba expectante, a lo que seguí hablando.
–Y finalmente, te he encontrado… gracias a la guía telefónica… menos mal que vives sola, sino se me hubiera hecho imposible hallarte….-
-Oh, ya veo… me alego entonces que tú y tu padre estén bien… aunque realmente… me incomoda un poco eso que has dicho de que vivo sola, verás… hay algo que debes saber… yo… yo cuando dejé la casa fue porque-
-Lo sé, estabas embarazada, y ahora tengo un hermanito…-
Dije de lo más tranquilo…
-¿¡Eh!? ¿Pero cómo lo sabes? ¿Quién te lo dijo papá?-
Preguntó sorprendida y a la vez preocupada… yo asentí… ella bajó la mirada y tragó saliva…
-Yo… yo lo siento, de seguro te doy vergüenza ajena… ¿te decepcioné no es así?-
-Yo negué ahora con mi cabeza de lo más normal mientras sonreía…
-No madre, para nada, eres mi madre y hagas lo que hagas lo seguirás siendo y te seguiré amando por igual…-
Ella sonrió y volvió a abrazarme…
-Pero… con respecto a eso… es de lo que quiero hablar a eso he venido… espero no te moleste… “remover” el pasado… pero necesito saberlo…-
-Sabía que este día, en algún momento de mi vida llegaría… así que no le daré más vueltas, adelante… pregunta todo lo que quieras, responderé con la verdad, ya tienes suficiente edad para comprender todo…-
Sonrío mientras se deshacía del abrazo nuevamente y me acariciaba el cabello… me alejé de ella por unos instantes para buscar una silla y sentarme a su lado… ella sonrió…
-De acuerdo, es lo que quería escuchar, pero antes que nada… ¿Qé es lo que tienes? ¿Por qué estás aquí internada?...-
-Oh no te preocupes… es sólo un poco de anemia… pero con el suero… me estoy recuperando rápido… tuve una recaída… por tanto estrés y situaciones que me ponían demasiado nerviosa en conjunto con los grandes disgustos que me agarraba en el trabajo… pero tranquilo estoy bien… me dieron unas 3 semanas de licencia… en lo que me recupero… y relajo un poco…-
Me decía de manera muy tranquila mientras seguía acariciando el pelo… sonreí…
-Entonces me puedo quedar tranquilo de a cuerdo con tus palabras…- Ella asiente.
-Bien ahora sí, al grano… solo espero no causarte más estrés del que tienes… pero me gustaría que me respondieras… ¿Qué fue lo que pasó realmente, para que papá te echara de casa?-
Ella abrió sus ojos algo sorprendida… y dejó de acariciar mi cabello… comenzó a jugar nerviosamente… con sus manos… me miró… preocupada, con miedo…
-Respóndeme madre, no tengas miedo, hayas lo que hayas hecho, aún te seguiré amando… pero por favor, necesito tus respuestas…-
Ella suspiró y abrió su boca para comenzar a hablar…
-Está bien… te lo contaré…- Dijo resignada… -Lo que pasó fue que…- Hizo una pausa… mis nervios, mis ansias… me estaban carcomiendo… comenzaba a desesperar… finalmente continuó hablando…