-¡Muévanse!- grito MinHo- ¡KiBum hazlo bien!- de nuevo grito.
KiBum suspiro, hoy su maestro, estaba insoportable, más que otros días.
-No te iras, hasta que lo hagas bien- le dijo a KiBum, y de nuevo intento el paso.- ¡De nuevo!-
¡Impredecible! Eso pensaba el menor de su profesor, y es que un día le decía que bailaba bien y al otro ya estaba gritándole, lo mal que lo hacia. Si por que ya iban 3 veces que le decía que bailo bien, claro en privado como siempre, pero esta vez llevaba 2 días seguidos regañándolo, KiBum empezaba a creer que tenia algo en contra de el.
-Otra vez KiBum- y esta vez no lo soporto, y encaro a su profesor.
-¿Otra vez? He repetido este paso más de 100 veces- Se quejo.
-No seas exagerado- se paso el dedo por el puente de su nariz- y hazlo de nuevo-
-¿Me odia?- pregunto el menor, y todos en el aula lo miraron sorprendidos.
-¿Qué si te odio?- el menor asintió- Créeme no querrás saber que es que te odie, tengo cosas mas importantes que hacer que odiarte- sentencio el mayor- ¡Dije acaso que pararan de bailar!- miro a todos cuando se percato que solo prestaban atención a lo que discutía con KiBum, todos en el aula se sobresaltaron y continuaron con su baile.
-Creo que lo hace- susurro el menor, y MinHo pudo escucharlo.
-Empezare a odiarte, sí no te mueves- susurro cerca del menor.
En realidad Choi no tenia nada contra el, ni mucho menos lo odiaba, pero no se podía pasar toda la vida felicitándolo, tenia que hacerle saber cuando algo no estaba bien. Aunque no negaba, que hoy solo lo regañaba solo por un poco de diversión, y es que había encontrado un nuevo hobbie, “hacer enojar al menor”, le gustaba cuando KiBum fruncía en ceño y hacia un pequeño puchero, y es que estas acciones hacían que el menor se viera ¿lindo?, ¿adorable? Ni el lo sabía.
Sabia que le atraía el menor, aunque no lo aceptaba del todo, seguía pensando que en unos días mas, vería a otra persona que le llamara la atención y que lo viera mas lindo que a KiBum, pero esto aun no pasaba, y eso que había visto chicos y chicas lindas en estos días, trataba de negarlo, pero en el fondo sabia que no encontraría a nadie mas hermoso que KiBum.
-Es todo por hoy, pueden retirarse-
¡Al fin! pensó KiBum, tomo una de las pequeñas toallas que traía en su mochila, para secarse un poco el sudor que adornaba su cara, no le gustaba usar las duchas de la escuela, y no por que estuvieran sucias o algo por el estilo, pero el prefería tomar un baño en la comodidad de su casa.
Tomo sus cosas y se encamino hacia la puerta del salón, esperando a Nicole, que se había quedado entretenida con… no tenia ni la menor idea, pero siendo tan curiosa ella podía quedarse embobada con cualquier cosa.
-Listo vamos- dijo la chica acercándose hasta el.
Caminaron en completo silencio hacia la salida de la academia, raro en Nicole que ella no paraba de hablar, pero tal vez estaba cansada, eso pensaba KiBum.
-¡KiBum!- el nombrado miro a Dongwoon que lo saludaba con la mano-
-¡Oh! KiBum, ¿Quién es el? Y lo mas importante ¿Por qué no me lo has presentado?- rio bajito, su amiga era única.
-Te lo presentare, vamos- caminaron hasta llegar enfrente del mayor. - Hola DongWoon- saludo el menor, DongWoon sonrió, y miro a la chica que estaba con ellos- Ella es Nicole, estudia conmigo, Nicole el es DongWoon, es mi mejor amigo-
-Mucho gusto Nicole- el mayor hizo un pequeña reverencia.
-El gusto es mío- saludo Nicole, que se había quedado impresionada ante ese chico, y es que era tan guapo, ¿Cómo es que KiBum conocía chicos guapos y ella no?
Siguieron charlando unos minutos mas, en lo cuales Nicole no paro de hablar con el mayor, hasta el grado de invitarlo a salir, claro con KiBum, pero todos sabían que ella solo quería salir con el mayor, después de unos minutos, Nicole se fue, dejándolos a ellos solos.
-¿DongWoon que haces aquí?- Y es que le parecía extraño, ver al mayor ahí, no le había avisado que lo estaría esperando.
-Necesito decirte algo-
-Dime-
-Podemos ir a esa cafetería- señalo una que estaba enfrente de la academia.
-Pero… tengo que ir a casa a darme una ducha- en verdad quería darse un baño, no le gustaba estar sudado.
-Solo serán unos minutos, por favor- casi suplico el mayor.
-Es tan importante, que no me dejas ir a casa-
-Lo es, así que por favor vamos- el menor asintió, no se podía negar a las suplicas de DongWoon.
KiBum le dijo al chofer que lo esperara solo unos minutos, cruzaron la calle y caminaron hacia la pequeña cafetería, que tenia un ambiente hogareño, según palabras del menor.
Ordenaron un americano para el menor, y un frappe para el DongWoon, se sentaron en una de las mesas cerca de la ventana, al menor le gustaba ver a las personas pasar.
-¿Y bien?- interrogo, para después tomar un poco de su café- ¿Qué es lo que quieres decirme?-
-Yo… - el mayor se encontraba nervioso- bueno yo…-
-Tu… ¿Es algo malo? ¿Qué es lo que pasa?- pregunto extrañado, ya que el mayor raras veces se ponía nervioso.
-¡Me gustas!- soltó directo y decidido, el menor abrió los ojos como platos.
Había escuchado bien, su amigo le había dicho “me gustas” ¿acaso su amigo se estaba confesando?
-Yo… tu… - ahora era KiBum el que se encontraba nervioso, no sabia que decirle, el dejo de ver a su amigo de esa forma años atrás, el no sentía lo mismo, tenia un cariño diferente hacia el mayor ahora.-Lo siento-
-Te entiendo- dijo con tristeza- no sientes lo mismo- lo podía ver en la mirada y en la acciones del menor se encontraba nervioso y sorprendido sabia que no sentía lo mismo que el
-Lo siento DongWoon- bajo la mirada, ni siquiera podía mirar al mayor, se sentía tan mal, pero solo lo veía como una hermano.
-No estés avergonzado KiBum, soy yo el que debería estarlo- tomo un poco de su frappe, que había quedado olvidado y continuo- Tenia que decírtelo, yo esperaba que me correspondieras, pero te entiendo-
Si bien no aseguraba que el menor correspondiera sus sentimientos, al menos guardaba la esperanza, y ahora se sentía tan mal, por haberse confesado, ¿Qué pasaba si el menor lo alejaba de el?, ¿Si ya no lo quería ni como amigo?, ¿Si jama podrían tener esa relación de amistad? O tal vez jamás volverá tener contacto con el.
Ni siquiera quería imaginar, que pasaría si todas sus interrogante se cumplían, no lo soportaría quería demasiado al pequeño, para estar alejado de el pequeño.
-KiBum, por favor a pesar de esto, no te alejes de mí, por favor- casi suplico DongWoon.- No quiero que nada cambie entre nosotros-
Claro que no, no se alejaría de el, eso pensaba KiBum, claro todo cambiaria un poco y seguro seria incomodo, pero tampoco quería alejarse del mayor.
-No lo hare, lo prometo-
-Hyung- llamo MinHo.
-Oh, esto debe ser importante- susurro Siwon para si mismo, Choi solo lo llamaba así cuando quería algo, o necesitaba desahogarse y hablar de algo importante.
-¿Qué? ¿Qué es importante?- pregunto desconcertado, no entendió muy bien el susurro del mayor, pero escucho claramente “debe ser importante”.
-Nada- Siwon, movió las manos en señal de negación- ¿Qué pasa, Minho?-
-Yo quiero preguntarte algo- era lunes, y Choi había madrugado, para poder hablar con su amigo, sabia que su hyung siempre, llegaba muy temprano y sobre todo los lunes.
-¿Si?- el mayor se moría de la curiosidad, ¿Qué seria tan importante?
-Como sabes si alguien, hmmm ¿te gusta?-
-Pues no se, te gusta alguien cuando la ves linda, hermosa, te parece atractiva- O al menos eso pensaba el mayor, MinHo suspiro, tal vez no había sido buena idea hablar con el , no lo estaba ayudando mucho, o tal vez era por que el no se explico bien.
-Si lo se, lo que quiero decir es ¿Cómo saber que no solo es una atracción? ¿Algo de una sola noche? O tal vez ¿Cómo saber que es alguien importante? O ¿Qué no lo debes dejar pasar?- MinHo hacia tantas pregunta que confundía al mayor.
-¿Te gusta alguien?- el menor mordió su labio, pensando en si le diría la verdad o no.
-… Tal vez-
-¿Cómo que tal vez? ¿Te gusta o no?-
-Bueno si, supongo que si-
-¿Y quien es la afortunada MinHo?-
-Primero contesta mis preguntas-
-Eso no lo puedes saber, de la noche a la mañana MinHo, claro primero debe estar la atracción y no solo físicamente hablando, con el tiempo lo sabrás- el menor lo miraba concentrado- Sabrás si esa persona es la que siempre has buscado, la que quieres contigo, todo a su tiempo pequeño, no te enamoraras de la noche a la mañana-
-¿Cómo intentarlo?- quería saber, por que en este ultimo mes desde que empezaron la clases se dio cuenta que KiBum le atraía, pero que a veces pensara en el lo desconcertaba ¿Significara algo?
¿Sera que el menor podría ser alguien importante para el?
-Bésala- bromeo el mayor.
-¡¿Qué?!-
-Es broma MinHo, debiste ver tu cara- el mayor reía, mientras que el otro lo veía molesto.- No se invítala a salir, conózcanse, tal vez eso ayude, he escuchado que así empiezan la relaciones ¿Crees?- dijo con sarcasmo, lo cual no le hizo gracia a MinHo- pero a todo esto no me has dicho, quien es la afortunada-
-Es… alguien-
-¿Un alumna? Es esa chica, tu favorita, cierto-
-No, no es ella… es un chico…- susurro lo ultimo.
-¿Qué? No escuche nada-
-¡Es un chico!- la boca de SiWon, formo un perfecta “o”, nunca se imagino que el menor tuviera esos gustos.
-No sabia, tus gustos-
-No me gustan todos los chicos, no ahora, solo el… por ahora- y no quería decir que cualquier chico le gustara, pero uno nunca sabe que puede pasar en un futuro, tal vez KiBum sea el amor de su vida, o tal vez no lo sea y tal vez otra persona lo sea.
-Oh pues, espero que funcione- dijo de todo corazón SiWon- Si eres feliz y amas a una persona, sea del sexo que sea, pues adelante.
-Gracias- al menos ya tenia una idea, tal vez salir con KiBum, funcione o no sea malo del todo.
-Otra vez- se repetio KiBum, llevaba media hora repitiendo el mismo paso.
Ese día no había regresado a casa después de clases, se despidió de Nicole y le dijo al chofer que el lo llamaría para que lo pasara a recoger, espero a que no hubiera nadie en el aula y se dispuso a practicar.
Llevaba un largo mes en la academia, y ese paso no lo perfeccionaba del todo, y MinHo siempre lo regañaba ya que no podía hacerlo bien.
Y de nuevo cayo, se estaba empezada a frustrar, cada que hacia ese paso caía al suelo.
-Lo haces mal, el pie lo mueves en otra dirección- KiBum se sobresalto, al escuchar una voz detrás de el.
-MinHo- susurro el menor- me asusto- MinHo camino hasta quedar enfrente del el.
-Hazlo, no nos iremos de aquí, hasta que no lo hagas bien- Choi podía ser todo lo que quieran, pero el era maestro, le gustaba enseñar aunque no lo demostrara, los ayudaba, a veces claro, y no solo a KiBum, también ayudo HyoYeon y a KiKwang, cuando algún paso, no les salía bien.- Primero no veas al suelo, siempre hacia adelante- tomo la barbilla del chico y alzo el rostro.- así, tus pies los mueves en la dirección contraria, es a la izquierda ok- el menor asintió- ahora hazlo.-
Y de nuevo lo repetía, y de nuevo caía, suspiro frustrado al parecer no le saldría no ahora, no nunca.
-De nuevo- y lo mismo se repetía- haber- tomo las manos del menor- yo te guiare, hazlo- el menor asintió un poco sonrojado, tenerlo tan cerca tampoco lo ayudaría, y justo paso, de nuevo el pie fallo, y de nuevo caería la piso, si no es por que una fuertes manos lo tomaron por las muñecas evitando que cayera.
Sus rostros estaban demasiado cerca, el mayor podía ver bien el rostro del más bajo, esa mirada, esos pómulos altos y sonrojados, su pequeña naricita y esos labios acorazonados, que ahora estaba seguro, quería besar.
KiBum podía sentir como se sonrojaba al extremo, ¿Por qué no lo soltaba? ¿Por qué seguía tan cerca del? No sabían cuanto tiempo habían estado así solo viéndose, admirándose, hasta que el mayor soltó lentamente sus muñecas, con cuidado para que el más bajo no cayera.
-Hazlo- sentencio, de nuevo tomo sus manos para ayudarle, el menor suspiro, tenia que lograrlo, cerro lo ojos para no pensar en la persona que tenia en frente, y así poder hacerlo.
Y lo hizo, sin caerse, sin nada, lo había hecho, lo había logrado, casi saltaba de la emoción si no es por que recordó que no estaba solo.
-Repítelo, soltare tus manos- Choi soltó sus manos y se alejo para que lo hiciera. Y de nuevo lo hacia.
-¡Lo hice!- grito sin poder contenerse- ¡Gracias!- sonrió al mas alto.
-Solo practica- contesto el profesor con simpleza.
-Lo hare- tomo sus cosas dispuesto a irse – Hasta mañana- se despedía el menor.
-Sal conmigo- el menor detuvo sus pasos, ¿Escucho bien?- Tengamos una cita-
Lo quería, quería tener la cita con el menor, tal vez vería si funcionaba, y con esto no quería decir que se casaría y serian felices para siempre, claro en Corea no era legal, pero ¿Nada perdía con intentarlo no?
-Yo...- KiBum no sabia que contestar, ¿No era un sueño? ¿Era la realidad?
-El sábado a las 6pm, en la cafetería de enfrente- ya lo tenía decidido, y no quería un no como respuesta.
-Tu… es… yo…- ¿Por qué no podía hablar? ¡Di algo! Se gritaba mentalmente.
-Tomare eso como un si, te veré el sábado-Choi sonrió y se marcho del salón, dejando a un desconcertado KiBum.
¿Qué había pasado? ¿Acaso había aceptado la cita, sin decir si?