KiBum llego a su casa 1 hora después de lo ocurrido con su maestro en el aula, subió las escaleras, hasta llegar a su habitación. Necesitaba pensar en todo lo ocurrido, pero primero debía darse un baño.
Después de su relajante baño de 45 minutos, se recostó en su cama, ¿Qué debía hacer? necesitaba hablar con alguien, ¿Pero con quien? Con su madre no, definitivamente no, sentiría vergüenza de solo contarle algunos detalles, y no quería ver su reacción cuando le dijera que su profesor lo había invitado a salir.
¿Nicole? No ella tampoco, ella es muy curiosa, y si se lo contaba estaba seguro, que al día siguiente media academia lo sabría, tal vez estaba exagerando un poco, pero a Nicole se le saldría en cualquier momento.
¿DongWoon? Por supuesto que no, antes no hubiera dudado en contarle al mayor todo lo que pasaba, pero ahora no estaba seguro si debía contarle algunas cosas, y sobre todo decirle que su maestro quería salir con el, sabiendo que el mayor gustaba de el, seguro que lo lastimaría y eso era lo menos que quería hacer.
Estaba a punto de rendirse, tal vez se lo debía guardar o solo pensarlo el mismo, pero recordó ¿Cómo pudo hacerse olvidado de ella? Tomo su celular lo mas rápido y marco el numero, sonó 1, 2,3, hasta que al fin escucho la voz de su amiga.
-¡KiBummie!- chillo la chica al otro lado de la línea. Estaba feliz, solo vio el número y no dudo en contestar, había extrañado mucho al chico.
- JungAh, no grites puedo oírte perfectamente-
-Lo siento- rio la chica- ¿Por qué no habías llamado? Te extraño KiBum-
-Yo también- confeso el castaño- Iré de visita pronto, lo prometo-
-Te estaré esperando-
-JungAh- hablo dudoso- Hay algo que necesito contarte-
-Me imaginaba, no llamabas por que me extrañas, que mal amigo eres- rio- Pero dime ¿Que es lo que pasa?-
-Hay un chico…- inicio el castaño- el me invito a salir-
-¿Qué? ¿Por qué no me lo has dicho? ¿Qué te dijo? ¿Qué le dijiste?- la chica estaba ansiosa.
-Bueno yo acepte… o sea creo-
-¿Crees?-
-Si, fue un poco extraño, pero ¿Crees que debería ir? Es que el… es mi profesor de baile- KiBum se imaginaba completamente la cara que debía tener en estos momentos su amiga.
-¿Qué has hecho sin mi?- dramatizo- Esto es tan de película, saliendo con el profesor, al pequeño KiBum le gusta romper la reglas…-
-¡Ya! Es importante-
-Bien, bien, pues no se que decirte, tu eres el que debería decidirlo-
-¿Seria correcto?-
-Al menos que exista un regla, que prohíba salir con los maestros no creo que exista problema, para que salgas con el- KiBum lo pensó uno minutos, no recordaba ninguna regla que lo prohibiera, la mayoría de los alumnos eran mayores de edad, así que creía que tal vez no haya problema.
-Bien lo pensare-
-Ok, ya sabes quiero lo detalles, claro si es que sales con el-
-Bien- ya sabia que se lo pediría- Te llamo otro día, estoy cansado y quiero dormir-
-Esta bien, ven pronto de visita ¿si? Suerte en la cita-
Después de unos minutos mas la llamada había terminado, se alegraba de poder hablar con ella aunque sea unos minutos, aunque tampoco es como si la chica le hubiera ayudado mucho, o tal vez si, ella tenia razón, el debía decidir, que hacer.
Claro que quería salir con Choi, pero tenia miedo, que pasaba si no era lo que el esperaba, tampoco es como si esperaba mucho, en realidad no conocía a Choi en lo absoluto, eran desconocidos, solo maestro y alumno, pero ¿antes de ser conocidos, debían ser desconocidos, ¿no?
Tal vez no sea tan malo, pero había algo que lo hacia temer de nuevo ¿Qué pasa si solo es un juego para el profesor? No estaba seguro si le gustaban los chicos, jamás lo había visto con uno, además todavía recordaba lo de HyoYeon, ¿No se suponía que tenia algo con ella? Si eso era cierto ¿Por qué quería salir con el? Tal vez si era solo un juego, pero ¿Y si no lo era? ¿Y si desperdiciaba esa oportunidad para conocer a Choi?
Decidió dejar a un lado esos pensamientos, ya vería que hacer ese día, todavía tenia 4 días mas para penar si iría a o no.
-¡Otra vez!- grito MinHo, ese día ni el se soportaba, y no sabia el por que, bueno a quien engañaba sabia perfectamente el porque, solo que no quería reconocerlo.
-¿Te sucede algo MinHo?- pregunto HyoYeon.
-Sucede que estoy cansado de verlos hacerlo mal, ¡repítanlo!- sentencio.
Se sentía frustrado, tenia un problema, y su problema tenia nombre y apellido “Kim KiBum” ¿Por qué? Simple, no sabia si el menor iría a la cita, y no es que le importara, bueno no mucho, pero vamos, nadie lo dejaría plantado ¿O si? No lo rechazaría ¿Cierto?
Y para acabarla el menor no había ido ese día a clases, ¿Sera que le había pasado algo? No tenia por que preocuparse, o tal vez si, solo un poco.
Era viernes, al otro día seria la cita, y se encontraba un poco nervioso, se sentía como una chica de 15 años en su primera cita, y casi lo era, Choi jamás había pedido una cita, no muchas veces al menos.
MinHo había estado con muchas chicas, y un chico, solo uno, pero todo era de una noche no más, no había relación o sentimientos, que lastimaran.
Tal vez por eso nunca, quería algo mas, el tenia miedo a que lo lastimaran, si por que MinHo ya había salido herido de una relación, unos 2 años atrás, eso era el por que MinHo, no se relacionaba de mas con una persona. Tenía miedo de amar de arriesgar un poco más, para que al final no todo tuviera un final feliz, como esa vez.
Pero después de que hablara con SiWon, lo pensó un poco, no podía seguir toda la vida temiendo, algún día lo inevitable pasaría, y tal vez se enamoraría de alguien sin darse cuenta, vamos algún día, tendría que salir y conocer chicas, chicos, lo que sea. Por que a pesar de que MinHo parezca una persona sin sentimientos, el deseaba una familia, o una persona que este ahí para el, el no sabia quien seria esa persona, pero mientas llegaba el quería conocer a KiBum, quien sabe tal vez el menor se convertía en esa persona.
-No me has hablado mucho de la academia hijo, ¿Pasa algo?- pregunto su madre, para después tomar un poco de su te.
-No pasa nada mamá- KiBum se levanto de sillón y camino hacia la ventana para abrir las cortinas, le gustaba que el sol entrara en toda la estancia.
-Entonces, ¿Por qué faltaste a clases hoy?- la señora sabia que su pequeño le ocultaba algo, pero no lo obligaría hablar, esperaría que el le contara.
-Estoy cansado- contesto sin mirarla. No mentía, estaba cansado toda la noche no puedo dormir, solo daba vueltas en la cama, pensando.
-Y tu profesor, ¿Cómo es?-
-Ya te había dicho mamá, sigue siendo igual, aunque no negare me ayudado a mejorar- y a veces lo felicitaba y era atractivo, sexy, tenia una bonita sonrisa y… negó con la cabeza, y sonrió, si su madre supiera lo que pensaba de su profesor.
El sábado llego, Choi se encontraba ansioso, quería que llegara la hora del encuentro y que KiBum no lo dejara esperando.
-KiBum- su madre lo sacudió un poco- Levántate, ¿no tenias que salir?-Lentamente abrió los ojos, ¿En que momento se había quedado dormido?
-¿Qué hora es?-
-Las 5:30- se incorporo de golpe, era tarde, con el tiempo que el tomaba para arreglase, seguro llegaría muchos minutos tarde a su cita.
Rápidamente tomo su ropa y corrió al baño, si había decidido ir, al fin y al cabo nada perdía.
35 minutos después ya estaba listo, tiempo record para el, a pesar de que el chofer lo llevaría, terminaría llegando unos 15 o 20 minutos tarde.
MinHo miraba una y otra vez la hora, ¡Lo dejaría esperando! ¡Lo dejaría plantado! Se encontraba nervioso, frustrado, desesperado, ¿Cómo hacia ese chico para tenerlo así? ¿Desde cuando una persona provocaba eso en el? Y sobre todo ¡un chico¡ su alumno.
-Hola- un dulce voz lo saludaba. MinHo alzo la mirada, ahí estaba KiBum, había llegado.
-Hola- saludo con una sonrisa. KiBum se sentó, enfrente de el, había escogido una mesa, justo donde le gustaba a el menor, en la ventana donde podía ver a la gente pasar.
-Siento la demora- el menor se sonrojo un poco, en verdad estaba avergonzado había llegado media hora tarde, y sabiendo que a MinHo le gustaba la puntualidad, se sentía peor.
-Pensé que no vendrías- confeso el moreno. ¡Pero que dices! Se regaño mentalmente, eso había sonado un poco desesperado.
-Pensé en no hacerlo- Era verdad, lo había pensado y mucho. Choi lo miro con una ceja alzada.
-Me ibas a dejar plantado- el menor dejo escapar un risita.
Ordenaron y hablaron tanto en tan poco tiempo. KiBum le conto su sueño, que amaba bailar, que le gustaba el rosa, y que odia lo deportes, por que no le gusta sudar, le dijo cual era su comida favorita y hasta su libro favorito. MinHo se percato que el menor podía ser un poco infantil, y que hacia un puchero cada que algo le molestaba.
MinHo por su parte, le conto su pasión también por el baile, que le gustaba el color negro y la mayoría de los colores oscuros, todo lo contrario a KiBum que le encantaban todos lo colores alegres, vivos, que amaba el deporte y que juega futbol los fines de semana, KiBum le había dicho que como podía gustarle quedar todo sudado después de jugar, el moreno solo se encogió de hombros, también le conto que odiaba perder entre otras cosas.
-Parece que no tenemos mucho en común- dijo el moreno, KiBum tomo un poco de su café y asintió.
-Eso parece- Choi sonrió.
-Pero, polos opuestos se atraen, ¿No es así?-
-Eso dicen- contesto el menor.
A pesar de que no tenían mucho en común a Choi le gusto mucho el menor, le gusto su risa, su sonrisa, su personalidad, y el menor pensaba lo mismo, aunque había algo que debía preguntarle.
-Me gustas KiBum- confeso el mayor, el menor se sorprendió- No te estoy diciendo que estoy enamorado, pero me gustas y quiero conocerte-
-Tu… ¿No sales con HyoYeon?- el mayor se sorprendió, ¿Por qué pensaba eso?
-¿Por qué piensas eso?-
-Bueno yo, el otro día los vi muy cariñosos- MinHo pensó cuando había sido eso- Te vi despedirte de ella con una abrazo y un beso- Choi recordó, y comenzó a reír.
HyoYeon aparte de ser su alumna y favorita, era su amiga, y solo la estaba ayudando a darle celos a alguien que le gustaba a la chica.
-Ella es una amiga, y mi alumna, no pasa nada entre ella y yo, solo la ayude a darle celos a una persona-
-¡Oh! No sabia- sonrió el menor.
Se alegraba de oír eso, solo eran amigos, al menos ya no se tendría que preocupar por eso. Salieron de la cafetería, había anochecido ya, y el menor tenia que regresar, había prometido llegar temprano.
-Entonces…- comenzó Choi- la próxima vez ¿Vamos al cine?-
Por que Choi quería una próxima, si ya le gustaba KiBum ahora le gustaba más.
-¿Próxima?- lo miro con la ceja alzada- ¿Qué te hace pensar que aceptare?- dijo con una sonrisa de lado.
-Lo harás- sentencio MinHo seguro y decidido, y KiBum no se pudo negar, claro que lo haría.