Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

EunHae: "Angel Of Mine" por ZaffireHeart

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aquí la segunda parte, espero que hasta aquí les esté resultando interesante, lamento la demora, se me cortó el internet u.u anda pesimo, pero ya me volvió n.n

Parte 2:


Su sangre comenzó a llegar a mi boca… por primera vez en mi vida… “bebía” sangre de un hombre y a la vez de un ángel…


Su sabor era realmente delicioso… nada que ver a la de las jovencitas anteriores… realmente su deseo se cumpliría… pues ya no quería volver a probar otro tipo de sangre… éste sabor era único, incluso mejor que el de aquel pequeño al cual si mal no recuerdo respondía al nombre de TaeMin…


Luego de satisfacer mis necesidades, muy a mi pesar me separo de su cuello… y lo miro a los ojos… su cuerpo estaba levemente sudado… sus labios entreabiertos y jadeando… mientras me miraba de reojo pues su cuello aún seguía erguido exageradamente… el clima estaba muy frío por lo que se podía ver claramente… cómo su aliento escapaba de su cuerpo…


Aquello me pareció la “escena” más tentadora que jamás haya visto en mis años como ángel, cómo desterrado, y ahora cómo vampiro… al ver aquella vista… una oleada de sensaciones despertaron en mi interior como un tornado F5 más o menos… revolviéndome prácticamente el estómago y todas mis entrañas… sin dudarlo, sin decir ni dar oportunidad a decir nada… me dirigí salvajemente a sus labios… aquella deliciosa sangre me había causado algo en mi interior… algo parecido a la “Excitación”… parecido no, directamente había logrado excitarme, y esa vista aún más…


¿Iba a tomarlo? ¿Iba a hacerlo mío? ¿Tan pronto y sin su consentimiento? ¿¡Iba a violarlo!?...


Cuando me detuve a pensar en la respuesta a mi última pregunta… me encuentro con que ya lo tenía debajo de mí, sobre la cama, con su camisa a medio desprender… y él mirándome jadeante… suplicante…


¿¡Qué es lo que estaba por hacer!? ¡Este… este no era el plan!... ¡Estas no eran mis intenciones! ¿¡Qué es lo que pensará él de mí ahora!?...


Estaba por decirle “lo siento, me dejé llevar” pero decidí mejor no decirlo… y simplemente comencé a quitarme de encima… pero sus manos me detuvieron… lo miré sorprendido… su mirada suplicante lo decía todo… “por favor, hazlo” o “termina de hacerlo”… pero sus palabras no salían… y a cambio de eso… sus ojos se dirigieron hacia abajo… abrí mis ojos al entender aquel gesto… y me fije solo para confirmar mis sospechas… y al parecer eran correctas… su miembro estaba a medio erguir… estado al que yo pasaré si no me detengo ahora…


-Yo… yo lo siento Hyuk… pero… pero no puedo… no quiero asustarte… no quiero que te lleves una mala impresión de mí…-


Dije totalmente apenado ahora… saliéndome por completo de encima, y sentándome en un costado de la cama… un momento de silencio reinó el lugar… a excepción de que sus leves jadeos ahora, aún se sentían.


Luego de aquel momento de silencio por ambas partes… siento unas manos rodearme… ese leve jadeo en mi oído me hizo erizar, estremecer, me causó escalofrío… su voz se hizo presente… finalmente…


-Con… continúa por favor… me… me siento extraño… y… y… mi… mi interior… ar… arde… por… por favor, a… alíviame…-


Sus manos, inconscientemente comenzaron a acariciar mi cuerpo… y… y eso fue suficiente… para que perdiera… todo rastro de autocontrol, todo rastro de razonamiento… respiré hondo me di vuelta… y una vez más me abalancé salvajemente sobre su cuerpo… besando sus labios, mejillas, mandíbula, cuello, y ahora pecho…


Ya no habría vuelta atrás… ya no podría detenerme, por más que él quisiera…


*****************************


POV EunHyuk


Aquello que dije sin pensar, me había dado algo de miedo, ¿cómo es que llegué a humillarme así frente a este sujeto? Él solo se acercó y comenzó a hablar… y aún no comprendía cómo es que terminamos yendo a su casa en absoluto silencio… yo de arrogante y estar seguro de mi mismo, pasé a estar absolutamente nervioso, y con una leve resequedad en mi garganta…


A pesar de que estaba nervioso, asustado e inseguro de mis actos y palabras, yo seguía insistiendo con que siga adelante, finalmente suspiró algo cansado… y comenzó a acercarse… yo por instinto retrocedía, hasta que me capturó por la cintura.


Besó mis labios, de una manera delicada y cuidadosa… aquel contacto realmente me transmitía algo, que los anteriores no pudieron… su mano libre acariciaba mi mejilla… y luego por una leve sensación de asfixia, él se separó de mis labios… mi cuerpo se sentía algo extraño… era una sensación rara, pero a la vez agradable, luego de unos segundos de separarnos… él vuelve a besarme… una y otra vez… algunas de manera fugaz, y otras de manera un poco más prolongadas… mi cuerpo realmente se comenzaba a sentir algo más liviano de lo normal… cerré los ojos y me entregué a aquella sensación tan agradable… pero cuando quise volver a la realidad una suave punzada en mi cuello, me despierta por completo… solo un pequeño quejido de sorpresa fue lo que liberé…


¿Cuándo es que había llegado hasta allí? Instantes después comencé a sentir como mi sangre drenaba hacia dónde había sentido la pequeña puntada… pero extrañamente se sentía aún mejor que aquellos besos.


-Hae~… DongHae~-


Digo de manera de manera débil… a lo que él no sé si me escuchó o no pero… se separó lentamente de mi cuello, mi cuerpo había comenzando a expedir líquido en pequeñas gotitas, me sentía algo agitado… y mi boca estaba entre abierta… por aquella sensación que me causaban sus labios en mi cuello… sólo me miró y volvió a besarme ahora de manera más feroz que la anterior…


Una de sus manos… comienza a acariciar en forma esférica mi pecho, y en hábiles movimientos desprende aquellos botones que mantenían mi pecho cubierto…  su cuerpo aún pegado al mío… comienza a ejercer fuerza, haciendo que mi cuerpo retroceda de a poco al compás que su cuerpo avanzaba sobre el mío…


 


Me tocas y siento que


Me estoy moviendo en tu interior


 


Choqué con algo… un borde algo elevado… lo que hizo que mis piernas se flexionaran y cayera… en su cama… él se detiene de golpe y se quita de encima de mí, pues al caer él instantáneamente se coloca encima.


-Yo… yo lo siento Hyuk… pero… pero no puedo… no quiero asustarte… no quiero que te lleves una mala impresión de mí…-


Fue lo que me dijo de repente, sentándose en el borde de la cama… yo simplemente me quedé en silencio unos instantes… pues quería tranquilizar mi respiración… pues algo entre mis piernas comenzó a incomodarme…


Por un momento el silencio fue absoluto, aunque no del todo, pues mi respiración “adornaba” la habitación…


Cuando creo que me siento mejor, me levanto solo un poco de la cama, y paso mis brazos por sus hombros, ayudándome a sostenerme mejor… y le susurro al oído aún con mi agitación algo alterada…


-Con… continúa por favor… me… me siento extraño… y… y… mi… mi interior… ar… arde… por… por favor, a… alíviame…-


Fue lo que dije… sin pensarlo, pues realmente me sentía extraño… y ya que él decía tener más experiencia que yo, supongo que sabrá cómo quitarme este “malestar” así como lo hizo con el hambre.


Mis manos comenzaron a moverse por un impulso sobre sus pectorales,  circular e irregularmente. Él solo me miro… no dijo nada… y levemente se liberó de mi agarre, me colocó nuevamente de lleno en aquella superficie plana y mullida llamada cama, y se colocó encima de mí, una vez más, sus labios comenzaron a tocar mis labios, mi mejilla, mandíbula, luego el cuello, y descendió aún más hacia mi pecho terminando de destaparlo… pero algo me sorprendió… una corriente en mi cuerpo entero me golpeó, cuando una sensación parecida a la que sentí en mi cuello cuando mi sangre corría, la sentí en mi par de pequeños “puntos” sobresalientes que tenía en mi pecho…


 


Aprecio cada día que pasa contigo


Todas las cosas que he hecho para ti


 


-Aaah~- Salió aquel sonido… al sentir sus labios allí en aquellos pequeños botoncitos de mi pecho… comencé a removerme involuntariamente… justamente por aquella sensación gratamente placentera en mi cuerpo entero ahora, algo en mi entrepierna… comenzaba a reaccionar…


Pequeñas y hábiles corrientes llegaban a aquella zona, haciendo que aquellos sonidos extraños salieran de mi boca… y eran cada vez más intensos a medida que él iba descendiendo por mi cuerpo…


Llegó a la altura de mis caderas, se alejó de mi cuerpo y aquellas corrientes mermaron por unos instantes, pero, yo realmente quería seguir sintiéndolas… pues me causaban una sensación tan agradable, que se me había vuelto adictiva tan solo en segundos.


-Recuerda que tu lo pediste, ya no tendrás oportunidad de retractarte… ya no puedo detenerme… te di la oportunidad de que te arrepientas… pero no la has aprovechado, ahora… ya no hay retorno… te me has vuelto adictivo… ahora serás mío y solamente mío… nadie más podrá acercarse a ti… no lo permitiré… ya te amo con locura…-


No comprendía del todo sus palabras, que era lo que me quería decir exactamente, pero… no voy a mentirles… me causó algo de miedo aquellas palabras… ¿qué era lo que iba a hacerme exactamente…?


No dije nada… pues estaba confundido… él solo sonrío de lado y con ambas manos retiró mi ropa inferior… junto con la interior… permitiéndome divisar aquello en mi entrepierna bastante erguido, me asusté… pues nunca había estado así de esa forma…


-¿Qué sucede con ello?-


Pregunté algo asustado y confundido… él me miró de reojo y sonrío de lado…


-Es algo normal en éstas situaciones, para los humanos…-


Dijo aquel ángel oscuro… seguía sin entender sus palabras y significados… pero un gran grito, no de dolor si no plagado de una sensación totalmente grata… placentera, fue lo que escapó de mis labios, al sentir cómo se introducía aquello en su boca… ¿qué estaba haciendo exactamente?


Mucho no me importaba a decir verdad… se sentía genial… mi cuerpo una vez más comenzaba a removerse retorcerse de placer ante esas sensaciones maravillosas, que me causaban sus vaivenes, cada vez más veloces… mis gritos, ya no eran gritos, sino jadeos, gemidos… que jamás creí soltar…


 


Ángel mío...


Déjame agradecerte


Tú me has salvado una y otra y otra vez


 


-¿Se siente bien no es así?-


Me preguntó volviendo a su personalidad arrogante de antes… la cual ya había olvidado… pero sinceramente no tenía ganas de contestar de esa misma manera… aquello realmente… me hacía sentir genial, no quería arruinarlo con mi comportamiento infantil…


-Si~- Tragué saliva –Se siente muy bien… con… continúa por favor-


Dije entre aquellos gemidos, pues sus manos ahora habían reemplazado a su boca… se detuvo de golpe… lo miré sorpresivamente… sonrío de lado y se acercó nuevamente a mi rostro…


-No creí que contestaras eso, pero… esto no está del todo bien…-


Me dijo algo serio… yo lo miré asustado ahora… él volvió a sonreír de lado y me dijo


-Tú también debes dar, no solo recibir. Esas sensaciones que sientes, y aquello entre tus piernas en ese estado, es molesto ¿verdad?- Solo asentí y continuo hablando –Pues yo también me siento de la misma manera, ¿qué harás para devolverme la calma?-


No dije nada, solo me quité de abajo suyo, él se acomodó en mi lugar… y comencé a repetir las acciones que él había hecho conmigo… o al menos las que recordaba, pues, aquellas corrientes me anulaban…


Quité su ropa, mientras besaba su cuello… respiraciones cada vez más intensas fueron las que comenzó a emitir a medida que iba avanzado en mis acciones… llegué a sus caderas… y tomé aquel miembro también ya algo más erguido que de lo que estaba yo en esas alturas… y sin dudarlo me lo introduje en la boca, intentando copiar sus movimientos… según las sensaciones que aquello me provocaba… Hae emitió un sonoro gemido al sentir mi boca en su miembro…


Sujetó mi cabello… tironeando levemente de él… no me molestaba, es más me gustaba y no sé porqué… hacía lo posible para que su mano sujetara mi cabello con un poco más de fuerza…


Su cuerpo comenzaba a removerse cómo el mío… pero era más su bajo vientre.


De vez en cuando entre tantos jadeos, él tragaba saliva… yo logré elevar la vista mientras pasaba mi lengua por su longitud ya erguida… podía ver cómo cerraba sus ojos, fruncía el ceño… su pecho bajaba y subía con brusquedad, y su mano libre aprisionaba con gran fuerza aquellas telas que cubrían la cama… se retorcía enteramente…


-Aaah~ ¡Hyuk! ¡Hyuk! ¡Más, más… rápido por… por favor!-


Repetía una y otra vez… y eso realmente me gustaba… me gustaba oírlo desesperado… por algo que yo hacía… por mi causa… sonreí de costado por unos instantes… mientras se me ocurrió pasar mi  lengua por todo su torso desnudo, lo hice… y pequeños espasmos era lo que recibía en respuesta a mis acciones… me detuve en aquellos pequeños botoncitos sobresalientes, tal y cómo lo hizo él conmigo… comencé a lamberlos… succionarlos, morderlos… tironearlos… todo lo que se me ocurriese o que aquellos me permitiera hacer…


De pronto sus manos se posicionaron a cada lado de mis mejillas obligándome a detenerme…  guío mi rostro hacia el suyo… y lo besó una vez más… una y otra vez… e increíblemente nuestras lenguas comenzaban a hacer contacto mutuo… nuestros cuerpos reaccionaban solos, o por lo menos el mío, ya que no sabía muy bien qué es lo que hacía… nos separamos por la exagerada falta de aire… y ambos con nuestros labios brillantes por las salivas ajenas nos miramos.


Una vez más nuestros ojos establecieron aquella conexión tan única e irrevocable con el otro… él me habla, sin quitarme los ojos de encima…


-No lo aguanto más… necesito hacerte mío ya mismo…necesito marcarte como mío… y así poder llamarte con orgullo… “Mi ángel”…-


Sonreí ante sus palabras pero no sé porqué… mi corazón se sintió como lleno y eso me agradó, él tomó mi rostro y me acercó nuevamente al suyo… un nuevo beso fue al que se dio inicio… y mientras nuestros labios se mantenían unidos… él de a poco fue guiándome para que quedase una vez más… debajo suyo…


Sus manos comienzan a recorrer mi cuerpo en toda su extensión pero sin separar sus labios de los míos, o solamente lo necesario, para que ambos recuperáramos un poco nuestro aliento…


No sé cómo es que llegamos a todo esto… pero realmente ahora no me importaba, mi raciocinio estaba casi completamente anulado… estaba disfrutando el hacer esto… sin importarme que es exactamente… pero se siente bien…


Una punzada cerca de mi trasero me sacó de mis pensamientos, de mi nebulosa de sensaciones… al igual que con su mordida, solté un pequeño gemido sorpresivo… él me miró… y sonrío ahora de manera serena y tierna… volvió a besar mis labios y cuando nos separamos… aún sin separarse del todo de ellos me dice…


-Esto que viene ahora es necesario para que cuando pueda llamarte “Mi ángel”… duela menos…-


Otra vez esa pequeña puntada… decidí ignorarla… pues sus besos… me hacían olvidarme de todo, ¿Pero qué era lo que quería decir, con eso de “duela menos?... ¿Acaso en todo esto, el dolor también es necesarios? ¿Es un acto vandálico? ¿Es algo malo o bueno, sentir todas estas maravillosas sensaciones?


Mordí el labio inferior de Hae, al sentir como algo penetraba mi cuerpo y comenzaba a ejercer movimientos circulares ¡dentro! De mi cuerpo… quería gritar, pero sus labios en los míos en todo momento me anulaban la posibilidad de liberarlos con ninguna clase de impedimentos…


Con el tiempo, aquella sensación se me fue haciendo grata, es más, comenzaba a acostumbrarme, hasta que sentí nuevamente esa sensación en mi cuerpo, dolía menos, pero seguía siendo molesto…


-¿Qué, qué estás haciendo exactamente?... Se… se siente extraño y no es muy agradable…-


Aproveché a hablar cuando se separó a una distancia considerable… pero sólo volvió a sonreír de lado.


-Solo deja que lo haga, aguanta un poco, luego me lo agradecerás…-


Dijo con voz traviesa… yo solo elevé una ceja en señal de desconcierto pero, no dije nada… suspiré y asentí…


Sus labios comenzaron a hacer contacto una y otra vez con mis labios… hasta que nos separamos y agitados por la leve agitación que nos provocaba aquella “asfixia” me dice…


-Creo que ya estás listo, prepárate para sentirte extremadamente genial…- Sonrió con arrogancia, yo suspiré aliviado al ver como aquellos intrusos salían de mi cuerpo… -Aquí voy… aguanta solo unos instantes…- Dijo para luego a los segundos comenzar a sentir como algo un poco más grueso se introducía en aquel lugar… en verdad que medida que se iba adentrando, sentía que mi cuerpo se iba desgarrando en dos por dentro…


-¡AAAAH! ¡Du… duele demasiado!-


Dije mientas un líquido se derramaba por mis mejillas, aquello que llamaban lágrimas…


-Tranquilo, respira hondo, intenta relajarte, “el ser indispensable para mí” tiene su precio mí estimado Hyuk…-


Dijo mientras se detenía por fin, sus labios se acercaban a los míos una vez más, lo hacían de manera lenta, lo cual me hacía desesperar, me hacía poner ansioso… por lo que automáticamente, tomé su nuca, y lo atraje directamente a mi rostro, provocando que chocáramos con algo de brusquedadlastimando mi labio, pero no me importaba, además… mi cuerpo estaba incontrolable, reaccionaba más solo, que por mis órdenes…


Besos y más besos, su lengua se trasladaba también a mi cavidad bucal, haciéndome olvidar de aquellas punzadas que en mi interior se desataban… luego de un tiempo de estar así, él se separa otra vez, dejándome con ganas de probar más… y me habla con aquella típica sonrisa arrogante de lado…


-La hora ha llegado, prepárate… estas a minutos de transformarte oficialmente para mí, en “MI Ángel”…-


Sonrió y comenzó a mover sus caderas, arrastrando con ellas aquel miembro que estaba en mi interior… sentía que me desgarraba de a poco, pero solo fueron instantes, cuando aceleró por primera vez sus movimientos comenzó a sentirse mucho mejor de lo que creí…


Mis caderas con el pasar del tiempo, comenzaban a imitar sus movimientos pidiendo más y más de aquellas deliciosas sensaciones, de mi boca comenzaban a salir aquellos sonidos, que me hacían sentir aún mucho mejor…


-¡Aaaaah! Más rápido, mmns ¡más rápido Hae~!-


Él frunció el ceño en señal de que se esforzaría más, y comenzó con aquellas embestidas más y más veloces y fuertes… haciéndome liberar más de aquellos sonidos, rebosantes de una maravillosa y grata sensación; el placer… finalmente era capaz de sentir aquella asombrosa sensación…


Mis manos desesperadas rodearon su cuello, atrayéndolo aún más hacia mis labios, necesitaba probar esos labios portadores del pecado de la lujuria…


-¡Aaah! ¡Aaah~ Hyuk~! ¡Hyuk ya… ya estoy por… por…-


-¡Mmmn! ¿Ya es… estás a… a qué?...-


-Ya… mmns ¡ya estoy por correrme! ¡Por… por mar…marcarte cómo mío! ¡Aaah~ mns~!-


-¡Ha…hazlo! ¡Qui… quiero ser tuyo! ¡Quiero ser tu ángel! Aaahhh~ ¿¡Qué… qué es eso!?-


Dije asustado, luego de que de mi longitud erecta, comenzara a “despedir” una sustancia blanquecina… pero debo admitir que se sintió tan genial, mi cuerpo comenzaba a temblar entero de placer, mi piel se estremecía por aquellas deliciosas sensaciones… inexplicables…


-¡AAAH! ¡E… eso es tu… mns tu esencia! Mns… ¡AAH Ya no aguanto!-


Me dijo embistiendo por última vez, en lo más profundo de mi interior, sintiendo cómo algo cálido se dispersaba en mi interior, y Hae… soltaba aquello sonidos, también llenos de aquella sensación, mientras respiraba agitadamente con su boca entre abierta y su cabeza hacia atrás…


-Aaaah Hyuk~ ¡Fi… final-men-te, e-re-s mío!-


Dijo entrecortado por su agitación mientras de vez en cuando cerraba su boca y tragaba saliva, para luego seguir “jadeando”


 


Ángel mío...


Debo confesar que eres tú quien siempre


Me dio fuerzas y que no sé donde estaría sin ti


 


Cuando pudo recuperar el aliento… salió de mi interior y se tiró a mi lado… me sonrió mientras yo lo veía sonrojado, por lo acalorado y apenado que estaba aún, por lo que habíamos hecho, aparte su sonrisa… realmente m podía…


-No sé si sepas Hyuk… pero debo agradecerte, el que hayas aparecido en mi vida, sinceramente ni yo sabía que era lo que quería, quería morir, pero a la vez no, estaba confundido, pero tu intervención en mi vida, me hizo realmente, darle sentido a mi vida, me hiciste querer vivir para ti, y querer morir en tus manos, me ayudaste a decidir; que era a tu lado en dónde quería estar, no me importaba si vivo o muerto, solo quería estar a tu lado… te amo Hyuk… te amo mi ángel…-


Dijo, con una voz ronca, que me pareció sensual y estimulante, a lo que se acercó con aquel brillo particular en sus pupilas, y besó mis labios de una manera fugaz y cuidadosa…


Cuando de repente la luz se cortó, y un relámpago en seco se escuchó a las afueras… aquella voz estruendosa que tanto conocíamos se hizo presente…


-¿¡Se han dado cuenta del error que han cometido!? ¡Han entrelazado sus almas! ¡Ambos se han contaminado del otro! ¡Hyuk! ¿¡Cómo te has atrevido a intimar con tu enemigo, con el servidor de Satanás!?-


-¡Te equivocas señor! ¡Él aún no tiene el alma podrida! ¡Y si es nombrado como servidor de Satanás es porque le han engañado, no por decisión propia! ¡Aún conserva sus alas, su corazón aún sigue siendo puro!...-


Contesté con rabia mirando a la nada, pues se oía la voz nomás mientras estábamos rodeados de oscuridad absoluta…


-¡Te atreves a contradecirme por éste ángel defectuoso! ¡No te reconozco EunHyuk! ¡Tu corazón y alma han sido podridos por la sola presencia de éste asqueroso ser!...-


-¡No es así! ¡Él no es asqueroso, fue un ángel tuyo antes! ¡Es parte de tu creación! ¡Tu lo hs creado! ¡Tanto a él como a mí! ¿¡Por qué lo desprecias tanto!? ¿¡Por qué cometió un error!? ¿¡Acaso no se puede equivocar, a pesar de haber sido un ángel lo has creado con un corazón y alma, se puede equivocar como cualquier otro ser con la dicha de poseer el don de la razón!-


-¡Ya calla!- Otro trueno se escuchó mucho más cerca y potente dentro de aquella absoluta oscuridad -¡No sabes lo que dices! Quería hacerte entrar en razón al haberte desterrado, pero al parecer solo ha sido peor, por más que me duela, tendré que hacerlo por completo...-


Dijo ahora en un tono más calmado, y con un poco de tristeza tal vez… ¿a qué se refería exactamente?...


-Tus alas… tus alas ya no la necesitarás más, no podré perdonarte jamás lo que has hecho, te has dejado caer en la tentación, envolver en la maldita lujuria, tu cuerpo y alma ya no son puros, ¡arderás en el infierno!...-


Luego de aquella última frase con tono sumamente estruendoso, un dolor agudo e insoportable, fue el que comencé a sentir, mis alas se mostraron a la fuerza, algo misterioso me controlaba, lego de eso, comencé a sentir aquel dolor insoportable, mis alas… ¡Estaban siendo arrancadas! Por una fuerza sobrenatural…


Comencé a gritar del puro dolor que estaba sintiendo, prácticamente, era como si me estuviesen arrancando una extremidad, sin anestesia, pues después de todo, mis alas, son parte de mi cuerpo, de mi ser, y en estos momentos estaban siendo tironeadas y arrancadas…


-¡AAAAHHH Ya deja de hacer eso! ¡Du… duele demasiado!...-


Grité una vez más a la nada misma, pero aquel dolor era incesante.


-¡Si te ha gustado “revolcarte” con aquel sirviente de Satanás, atente a las consecuencias! ¡Sabias que esto pasaría, y aún así, me has desafiado, me has desobedecido y enfrentado! ¡Recuerda que yo soy el creador de todo, todo lo sé, todo lo veo, no se pueden ocultar de mis ojos!...-


-¡AAAAAH~ Hae~ ¡Ayúdame! ¡Ayúdame por favor!...-


Atiné a gritar, mientras comenzaba a sentir, cómo de mi espalda comenzaba a deslizarse un líquido cálido, era mi sangre de seguro… mis alas estaban siendo desmembradas de mi cuerpo… lagrimas de dolor, escapaban de mis ojos… ya no había vuelta atrás… ya todo estaba hecho…


No obtuve respuesta alguna por parte de él… eso me hizo sentir frustrado, ¿Acaso se habría ido? ¿Lugo de hacerme aquello? ¿Me habría dejado a la deriva?...


-Y qué esas cicatrices que quedarán para siempre en tu piel, te recuerden el error que has cometido, ¡esas marcas te atormentarán toda tu vida…de ahora en más!-


Sentenció finalmente, cómo mi condena… aquellos truenos y relámpagos comenzaron a cesar, luego de un rato el silencio absoluto dominaban mis tímpanos…


-¡Hyuk! ¡Hyuk! ¿¡Estás bien!? ¿¡Que te sucede!?...-


Comencé a escuchar esa voz de repente, en forma de eco, que de apoco se iba volviendo más nítida... abrí mis ojos de golpe, mi pecho estaba agitado de sobremanera, sudor recorría por mi frente y cuerpo entero…  la luz… otra vez era capaz de verla…


Giré mi rostro lentamente hacia dónde aquella voz me guiaba… la imagen se hizo nítida, y era a DongHae a quien podía ver absolutamente preocupado… y con aquella voz así quebrada por el llanto…


-¿Un sueño?-


 


De regreso a los brazos de mi ángel


De regreso a la paz que tanto amo


De regreso a los brazos de mi ángel


 


Pregunté casi en un susurro pero logró escucharme, a juzgar por su repuesta.


-¿Sueño? ¡Más que eso fue una pesadilla Hyuk! ¡Santo cielo, no sabes lo preocupado que me tenías, terminamos de hacer aquello, te sonreí y te acaricie, y te dormiste con una sonrisa, pero a los instantes… comenzaste a removerte en la cama, frunciendo el ceño, balbuceando no sé qué cantidad de cosas, hasta que empezaste a transpirar y a gritar demasiado fuerte… ¿Qué… que has soñado Hyuk?...-


Preguntó una vez más con preocupación, agitado, por decir todo aquello de manera rápida sin tomar aire, ¿No habría sido un mal sueño después de todo?... abrí mis ojos… quizás todavía estaba a tiempo de retroceder, no quería perder mis alas, no de nuevo, aquella sensación fue demasiado real, todo fue demasiado real…


Me alejé bruscamente de él… incorporándome de la cama, quise sacar mis alas para irme volando de allí, pero “Oh, sorpresa” un dolor que recorría todo mi cuerpo, fue el que sentí en el lugar de donde supuestamente mis las estarían…


Caí arrodillado quejándome con el dolor claramente visible en mi rostro y cuerpo… Hae se paró de la cama, y corrió hacia mí se agachó y me tomó un hombro, mientras yo me abrazaba el cuerpo, pensando ilusamente que quizás con eso el dolor insoportable pasaría…


-¡Hyuk, por dios! ¿¡Qué te sucede!? ¿¡Estás bien!?...-


Volvió a preguntar… lo miré… y le dije, casi de manera furiosa.


-¡Espejos! ¡Tráeme 2 espejos!...-


Él se alejó un poco de mi cuerpo, elevando un ceja en señal de estar absolutamente confundido ante mis palabras y reacción… volví a “atacar”.


-¿¡Qué esperas!? ¡Ve a traérmelos, hablo en serio!...-


Asustado y aún confundido asintió y salió corriendo en busca de aquellos objetos que le pedí… Volvió con un grande y uno un poco más pequeño…


-¿Pa… para qué… qué los quieres?...-


Dijo acercándose a mi luego de que acomodara el más grande y me entregara el más pequeño, no dije nada, solo me paré de allí con dificultades, el dolor aún seguía en mi cuerpo, y lo aparté bruscamente de mi lado, empujándolo…


-¿Hyuk? ¿Qué te sucede?...-


Preguntó ahora con tristeza… seguía sin contestarle,  estaba de espaldas al espejo más grande… mi mano, la cual sostenía al más pequeño temblaba, no se quería mover, no quería ver… hasta que lo hice, lo levanté suavemente, miré el rostro de Hae, el cual estaba ahora asombrado y horrorizado… mi corazón se aceleró aún más al ver esa expresión… finalmente el espejo llegó a su lugar… con miedo miré de reojo, para luego mirar completamente.


Abrí mis ojos de sobremanera al ver lo que vi… en efecto, las cicatrices estaban, y es más, estaban al rojo vivo, como recién hechas, y no mentían… el sangrado al parecer había parado, pero esas marcar no se fueron… sonreí de lao con amargura… deje caer el espejo al suelo, rompiéndolo en millones de pedazos…


-¿Hy… Hyunk, qué… qué te, te sucedió?...-


Dijo dejándose caer al suelo con todo su peso…


 


Finalmente puedo descansar


Dándote un regalo para que me recuerdes


 


-Él… el muy maldito me las ha arrancado de la peor manera, por… por amarte Hae…-


Dije entre triste e irónico, aunque era más hacia el lado de la tristeza… sus ojos una vez más se abrieron de sobremanera… sus ojos comenzaron a derramar lágrima tras lágrima…


-¡Yo… yo lo si-ento mu-ucho Hy-uk, no e-era mi intención arras-tra-arte a la desgracia!-


-No hay nada que deba perdonar, todo ha sido mi culpa, yo insistí en que me tomaras, en que bebieras mi sangre y me proclamaras como “tu ángel”… aunque… ahora… ya… ya no lo soy más… estoy cumpliendo mi condena por… amarte-


Dije acercándome con una sonrisa débil, nostálgica. Me agaché y tomé su mentón para poder concentrarme en sus ojos, necesitaba verme reflejados en ellos, necesitaba saber, que ahora, a pesar de todo, él seguiría a mi lado...


Él me observaba y lo único que pudo hacer es abrazarme con todas sus fuerzas…


-¡Lo… lo siento mucho!-


Sonreí aun con más tristeza… acaricié su cabello…


-No, no tengo nada que perdonarte, es más, debería agradecerte, a pesar del dolor, ahora me siento libre, ya no tengo límites, ya no estoy atado ni obligado a cumplir  “ciertas” reglas “celestiales”…-


Sonreí ahora con un poco más de alegría, pues era verdad, ya no tendría que cuidarme ni privarme de nada, pues, ya no le debía “rendir cuentas” a nadie…


 


Ángel mío...


Déjame agradecerte


Tú me has salvado una y otra y otra y otra vez


 


-Gracias Hae… gracias por “liberarme”-


Dije en un tono a punto de romper en llanto, pero solo lo abrace aún más, con más fuerzas…


 


Ángel mío...


Debo confesar que eres tú quien siempre


Me dio fuerzas y que no sé donde estaría sin ti


 


Hae; era y es mi todo, me ha enseñado muchas cosas… en el poco tiempo que llevo de conocerlo, pero sobre todo, debo agradecer que me haya hecho abrir los ojos con respecto a “mi dios y mi antigua vida” Aún recuerdo… si él no hubiera aparecido en aquel callejón… en medio de la lluvia no sabría que hubiera sucedido, pues estaba absolutamente solo y perdido, él… él me salvó la vida prácticamente… puede sonar medio irónico tomando en cuenta que tenía vida eterna, pero al haberme desterrado… mi reloj había comenzado a correr por primera vez…


 


Ángel mío...


¿Puedo agradecerte?


Tú me has salvado una y otra y otra vez


 


-Hae…- Le dije deshaciendo el abrazo, él me miraba a los ojos con los suyo absolutamente brillantes… -Gracias, espero que de ahora en adelante, me enseñes aún más de cómo vivir como realmente lo hacen los humanos… lo necesitaré… hasta el día de “mi muerte”…-


Sonreí… pues me parecía todo tan irreal, ahora si podría decir que algún día iba a llegar mi hora… en verdad me sentía liberado de cierta manera…


-Claro que lo haré y es más… también me desharé de mis alas… ya no las necesitaré…-


Dijo mientras acercaba su mano a su boca… se mordió con sus colmillos, y comenzó a sangrar…


-¿¡Que… qué estás haciendo Hae!? ¡No te lastimes! ¡No hace falta que sufras al igual que yo, sólo por seguirme… o demostrarme tu “afecto”!-


-No, en verdad quiero hacerlo… ahora… tengo un motivo por el cual vivir una vida normal… quiero terminar  con “mi contrato con Lucifer”…-


Sonrió y giró su mano, para que la sangre cayera al suelo alfombrado… por mi sorpresa antes esas palabras dichas con tanta determinación, no pude decir más nada… y le dejé hacer… cuando la primera gota de sangre tocó el suelo, una luz rojiza y negra comenzó a rodearlo… mientras que a sus pies se formaba lo que parecía una estrella “judía”… u hombre de apariencia de muy buen ver, con piel asombrosamente blanca y tersa, tanto que hasta su piel parecía fría… se apareció ante nosotros, su sonrisa de lado, denotando maldad, realmente me asustó…


-Oh~ tanto tiempo mi querido Haenni… veo que te has animado, atrevido a enfrentarme y revelarte contra mí también… ¿no es así?...-


Hae estaba de lo más sereno, no se inmutaba para nada… solo habló con tanta calma que parecía que no poseyera sentimientos…


-No del todo, no tengo intención de pelear contigo o contradecirte en algo… simplemente “quiero ser libre”… ya te he servido bastante, no es así… hay muchos idiotas nuevos y sin rumbo que podrían ocupar mi lugar…-


-Pues~ en… eso tienes razón…- Dijo sin dejar de sonreír de lado con esa maldad… mientras comenzaba a caminar lentamente por alrededor de Hae… quien a su vez seguía cada movimiento de reojo… -Y ya que lo mencionas… supongo que ya no necesitaras ¡esto!-


Dijo sujetando a una velocidad impresionante las alas negras de Hae y arrancándolas de un solo tirón, Hae cayó al suelo arrodillado, emitiendo un sonoro grito de dolor mientras se abrazaba con fuerzas… estoy seguro que si yo no estuviera allí él estaría en el suelo retorciéndose de dolor… salí de mi trance cuando oí sus gritos…


-¡Hae no! ¿¡Qué has hecho!?...-


Dije, corriendo desesperado hacia él, sujetándolo cómo si eso fuera a clamar su dolor… él con un ojo cerrado y el otro “entre cerrado” me mira y con al respiración agitada me dice…


-A…amarte…-


Luego de eso se desmayó… en mis brazos, el dolor era demasiado supongo, pues no era lo mismo que te las arrancaran de a poco y con “cuidado” que de un solo “tirón y con maldad”…


-¡Ja! Menos mal que “ha renunciado a mí” no me sirve alguien tan débil cómo él…-


Rió estruendosamente aquel ser, que supongo era “Lucifer” lo miré de mala manera, frunciendo mi ceño, cómo si eso, fuera a lograr algo…


-Ooow~ ¿estás enojado conmigo porque hice desmayar a tu mascota? No vale la pena… su vitalidad está casi extinta… en cambio tú… tú tienes una muy brillante y vivaz… ¿sabes?  Puedo devolverte tus alas… pero me darás algo a cambio…-


Sonrió de lado… en lo que me miró fijo y luego de un segundo a otro apareció agachado a mi lado tomándome el mentón…


-¡Aléjate de nosotros! ¡No me interesa nada que provenga de ti! ¡No caeré en tus engaños!-


-¿Ah no? Es una lástima tú te lo pierdes… pero estoy seguro de que ya vendrán a mí… será solo cuestión de esperar…-


Dijo, mientras comenzaba a reír de nuevo, de esa manera macabra y desapareció cubriendo todo el espacio de llamas… llamas que… no quemaban…


La espalda de Hae sangraba… y sangraba… no sabía qué hacer, mis poderes curativos, había desaparecido junto con mis las… por lo que… por “instinto”,  lo acuesto en la cama, boca abajo, y con un paño con agua, comienzo a ejercer pequeños golpecitos por la zona dañada, estuve horas haciendo aquello, pues su sangrado no se detenía nunca… hasta que finalmente aquellas heridas cicatrizaron… a un ritmo muy lento a mi parecer.


Una vez que terminé de curarlo me quedé velando por él, pero se ve que el sueño me venció… de repente no recuerdo más nada, solo que desperté por un agradable aroma que se colaba en mis fosas nasales…


-Buenos días Hyuk… antes que nada, gracias…- Lo miré extrañado, dándole a entender que no sabía de lo que hablaba, pues estaba algo dormido aún, con sus ojos señala, el recipiente con el agua teñida de rojo, al igual que los paños del mismo color… él sonrió… -Déjame agradecértelo, de ésta manera…-


Dijo dulcemente… mientras colocaba una bandeja con cosas que se veía realmente exquisitas… lo miré una vez más extrañado de su actitud pero solo sonrió otra vez de manera tierna… ¿Qué había sucedido con aquel Hae de ayer?... no quise pensar en eso, y le devolví el gesto.


-Finalmente, somos “humanos comunes y corrientes” ahora, nuestro reloj ha comenzado a correr una vez más… y espero que la vida… nos ponga obstáculos, para superarlos y unificar y potenciar aún más nuestro amor, porque sé que juntos, podremos superar cualquier tipo de barreras, por más difícil  que sea, que de seguro lo serán… de ahora en más, vamos a experimentar las distintas “texturas” de la vida, “el lecho de rosas, el camino de espinas, las piedras y puede que hasta las montañas… pero todo, óyeme bien Hyuk, TODO será mucho más fácil si lo hacemos de a dos, todo tiene solución, a excepción de la muerte, sé fuerte Hyuk, yo lo seré lo prometo…-


Me sonrió mientras se acercaba a mi rostro y lo besaba con ternura, le sonreí y asentí…


-Supongo que haz de tener la razón Hae…-


-Claro que la tengo, recuerda que tengo “más experiencia” que tú…-


Dijo sonriendo ampliamente y de lado, con un toque de lascivia. Volví a sonreír, mientras negaba divertido con mi cabeza…


 


Ángel mío...


Debo confesar que eres tú quien siempre


Me dio fuerzas y que no sé donde estaría sin ti


 


-¡Adelante entonces! ¡Salgamos a enfrentar “LA VIDA”!-


Dije entusiasmado, mientras lo tomaba de la mano y salíamos de aquel lugar… ambos conseguimos diferentes trabajos, teníamos un sueldo, y con el tiempo fuimos aprendiendo más y más de la raza humana… pues ahora increíblemente formábamos parte de ella…


******************************


-¡Tanto tiempo mis rebeldes!-


Escuchamos una voz estruendosa en nuestro nuevo hogar… ambos nos miramos… al parecer si habíamos escuchado aquella voz…


-¿Qué… qué quieres “señor”? Vienes a burlarte de nosotros…-


Dije con absoluto sarcasmo, él rió por lo bajo…


-De hecho… he decidido que ya han estado bastante tiempo castigados… he decidido perdonarlos…-


-¿No te parece que ya estás “viejito” para hacer ese tipo de bromas?...-


Decía un desesperanzado Hae…


-No es ninguna broma… ¡Hablo en serio!-


Dijo algo furioso, cuando sentimos algo removerse en nuestro interior y espalda más precisamente…


-Su hora ha llegado, DongHae… he escuchado tus súplicas de querer dejar de existir, por estar postrado en aquella silla…EunHyuk, he escuchado también las tuyas por depender de Hae… y pues sus “súplicas” han sido escuchadas, para que no digan que soy malo… los he venido a buscar…-


Decía divertido, como si; que Hae estuviera en sillas de ruedas por un accidente automovilístico hace 10 años no hubiese sido nada, y como que yo estuviera cómo un vegetal en una cama, por un “ACV” tampoco fuera nada… ambos teníamos 95 años… ya sinceramente al parecer ninguno quería vivir de esa manera…


-Hubieras venido antes maldito…-


Dije ya sin voz, ni ánimos.


-Ya, ya, dejen de quejarse y vengan conmigo, los estoy esperando…-


Dijo una vez más divertido, de repente ambos nos comenzamos a elevar de la nada… miré a Hae… y tenía… ¡nuevamente alas! ¡Alas blancas! ¡Al igual que yo!


Con dudas, nos tomamos de la mano y nos comenzamos a dirigir, hacia donde aquella voz provenía… las alas, comenzaron a hacernos sentir como energía y vitalidad otra vez… subimos… nos elevamos y atravesamos aquella delgada línea que dividía la “tierra” del “Edén”… cuando pudimos llegar, lo vimos, a “Él” quien nos estaba esperando… su vista se dirigió reprobatoriamente a nuestras manos unidas, pero ambos nos miramos, y nos sorprendimos… ¡Éramos jóvenes otra vez!


Nos abrazamos mientras reíamos felices…  aunque no lo entendía del todo… ¿por qué nos había perdonado? ¿Se había arrepentido?... ¿Qué era exactamente lo que había sucedido?...


-Espero que con esto hayan aprendido la lección… aunque lo dudo… pero de todas maneras no durarán mucho… aquí.-


Lo miramos confundidos ambos, sin saber a lo que se refería… él solo rió y desapareció, en lo que su voz se escucho en un débil eco…


-Aprovechen mientras puedan…-


******************************


Los años habían pasado, nosotros estábamos disfrutando de nuestras compañías mutuas y de nuestro amor recíproco… cuando él se nos aparece en frente…


-Su hora ha llegado…-


-¿Nuestra hora de qué?-


Preguntó Hae, totalmente confundido, al igual que lo estaba yo… “Él” sonrió y dijo…


-De volver a la tierra, y empezar de 0…una vez más-


Ambos abrimos nuestros ojos sorprendidos y nos miramos en sincronización…


-Seguimos sin entender, ¡Explícate! ¿¡No que, ya nos habías perdonado!?-


-Así es, pero eso no quita que tengan que cumplir con sus deberes… ¡Ahora vayan, su hora ha llegado!...-


Sentimos un fuerte viento, todo se volvió blanco…


******************************


En un pequeño hospital, ubicado en unos de los rincones rezagados de la gran ciudad de Seúl, 2 partos simultáneos se estaban efectuando… días antes de las Vísperas de Navidad… aquellas 2 mujeres, eran amigas, se habían embarazado casi al mismo al tiempo, pero ahora estaban dando a luz a sus hijos…


-¡Señora Park! ¡Puje, puje, su cabeza está saliendo, ya falta poco, por favor resista!-


-¡AAAAAH! ¡Aaaaah! ¡MMMMAAAH!-


Escuchaba detrás de la puerta, el padre de aquella criatura viniendo al mundo, iba de un lado a otro, por el nerviosismo y las ansias de ver el rostro de su primer hijo… sus piernas temblaban, estaba pálido… le ofrecieron entrar y acompañar a su esposa, pero él decidió quedarse afuera… ya que sabía, que él iba a ser el primero en sucumbir ante la situación…


Un grito desgarrador por parte de su mujer lo saco de sus pensamientos, y un pequeño llantito, le hizo humedecer sus mejillas con una gran sonrisa…


Las puertas se abrieron, él medico aún con e barbijo puesto, le invitó a entrar… él ya se encontraba con todo el traje de protección… ante las dudas…


-Felicidades señor Lee, ha tenido un hermoso niño…-


Aquel hombre, ahora padre, no pudo evitar que nuevas lágrimas recorrieran su rostro… su esposa, tenía al niño en brazos, quien ahora dormía…


-Mira cariño es hermoso, mira sus manitos… es tan pequeño y frágil… es hermoso…-


-Sí, si lo es… es hermoso nuestro hijo HyukJae…-


******************************


En otra sala de parto, se encontraba la amiga, su marido estaba allí con ella pero, la situación era un poco más difícil, el niño estaba tardando demasiado en salir…si continuaba allí, se asfixiaría…  la mujer estaba grave… su vida pendía de un hilo…


-Lamento preguntar esto, pero tendrán que elegir… sólo podremos salvar una vida…-


-¡El niño!-


Dijo aquella mujer sin pensarlo… respirando con dificultades, aquel hombre ya estaba llorando…


-Cariño, te quiero a ti… si te salvas podremos tener otros niños…-


Decía con todo el dolor del alma, estaba actuando demasiado insensible, aquel niño que tanto habían buscado, finalmente llegaba, pero su esposa pendía de un hilo…


-¡No!¡Salven al niño! Que… querido… no te preocupes por mí… SunHee podrá cuidarlo por mí…-


La mujer, le sonrió y le tomó la mano…


-Te amo, SeungHyo…-


El hombre rompió en llanto…


-Yo también Yoon Soo, también te amo, que dios te bendiga…-


La mujer asintió, y los médicos procedieron… a hacer su tarea luego de que aquel hombre con el corazón hecho pedazos, les diera el permiso para salvar la vida de su hijo.


Así lo hicieron… una lágrima escapó del rostro de su esposa, segundos antes de “partir”… el hombre estaba destrozado… le entregaron al niño…


-Lo sentimos mucho señor, pero era la única forma, aquí tiene a su hijo, cuídelo bien…-


El hombre destrozado se lo devolvió al médico para que lo colocara en la incubadora, y él ir a hacer los papeles de defunción… en el camino se encontró con su amigo, quien acaba de ser padre también… con una sonrisa se le acercó…


-¡SeungHyo! ¿¡Cómo te ha ido, lo has dejado con su madre!?...-


Le decía aquel hombre, con una sonrisa de lado a lado en el rostro, mientras le daba palmadas en la espalda, SeungHyo, intentando disimular todo, sonrió con un deje de tristeza, se sentía devastado… acababa de perder a su amada esposa… no podía fingir alegría, cuando aún así el nacimiento de aquel pequeño ser le resultara una bendición…


-YoungSoo… YoonSoo… falleció en el parto… estoy yendo camino a hacer los trámites de… defunción…-


A aquel hombre que había quedado viudo hace tan solo minutos, se le volvieron a escapar, otras rebeldes lágrimas, aquel hombre padre del ahora nombrado HyukJae… empalideció, él gozando de su felicidad y fortuna, y su mejor amigo, sufriendo por la pérdida de su esposa..


-Yo… yo lo siento mucho SeungHyo… no… no sé cómo disculparme…-


-No te preocupes hyung, es compresible tu euforia, pero ahora… si me disculpas, debo irme…-


Él “padre afortunado” asintió y se fue con su mujer y su hijo…


-¡Cariño! ¿Y, has visto al niño de YoonSoo sshi? ¿Cómo esta ella? No puedo esperar a salir juntas, para pasear a nuestros hermosos bebés…-


Decía eufórica aquella reciente madre primeriza…


-SunHee…-


-¿Qué pasa, porqué esa preocupación y tristeza…?-


Miró a su esposa a los ojos.


-YoonSoo… ha… ha fallecido en el parto…-


Aquella mujer rompió en lágrimas a los instantes de oír la devastadora noticia…


-¿¡Qué!? ¿Es… estás bromeando verdad?-


Su esposo negó y le acarició el cabello, sus ojos se veían aguados también, aquella mujer que se había ido, era muy querida por ambos, la consideraban alguien de la familia, y ahora, de un momento a otro enterarse que ya no la vería más, era de cierta manera shockeante…


******************************


Los días pasaron, y luego de que velaran a aquella mujer… SunHee no dudó un segundo en ofrecer sus pechos, para alimentar a aquel hermoso niño, que ahora respondía al nombre de DongHae… SeungHyo siempre pedía disculpas por las molestias que ocasionaba, pero sin su esposa, no se hallaba, no tenía idea de cómo hacerse cargo de un niño él solo, por lo que terminó dándoselo a su mejor amigo, para que le adoptaran, aunque, él decía que seguiría con su rol de padre, no quería que le ocultaran su origen a su hijo, por lo que, con el pasar del tiempo, aquellos niños fueron creciendo juntos, casi como hermanos, pero ambos sabían que no lo eran…


******************************


{18 años después}


-¡Hyukkie~ Haenni~ despierten! ¡Hora de ir al colegio!...-


-¡Ya voy madre!-


Respondió primero HyukJae, quien ya estaba despierto… pues había tenido un sueño demasiado extraño y “excitante” dónde su “hermano” era protagonista…


El menor por tan solo minutos, despertó tallándose los ojos, como si de un gatito se tratase, el pelirrojo, no entendía cómo aquel muchacho, podía ser tan tierno y delicado a la edad de 18 años…


-Ya voy tía SunHee…-


Dijo de manera adormilada, que ni él mismo se escuchaba, el mayor sonreía, siempre tan dormilón aquel “niño”, pero su sonrisa se borró al instante, al recordar aquel sueño extraño, no era la primera vez que lo tenía, era la 3ra noche consecutiva…


-Feliz cumpleaños Hyukkie…-


Dijo luego de despertarse por completo, regalándole una hermosa sonrisa… a su “hermano mayor”… el cual se sorprendió, al recordar que en efecto hoy era su cumpleaños y por lo tanto el de su “hermano” también… volvió a sonreír mirándolo con ternura…


-Feliz cumpleaños Haenni…-


Se acercó para darle un beso en la mejilla como saludo, pero éste por primera vez le corrió el rostro, haciendo que el contacto fuese a sus labios, “el primer beso” de ambos…


-Me gustas Hyukkie, te amo-


Dijo sin ningún tipo de inhibición, mirando a los ojos al pelirrojo, quien se alejó sorprendido por la actitud del menor…


-¿Ha… Hae?... yo… yo también… creo-


Dijo bajando la vista el mayor, mientras su mano iba por inercia a su nuca, intentado ocultar su sonrojo…


Él menor sonrió ante esa respuesta y reacción por parte del mayor… tomó el rostro ajeno con sus manos y se le acercó con intenciones de volver a besarlo…


-¡Chicos apuren van a lleg-! ¿Qué estaban por hacer?-


Dijo la madre del mayor, sorprendida por la escena que estaba presenciando al abrir la puerta de golpe, acariciando su enorme panza, HyukJae… iba a tener una hermanita…


-Nada tía, sólo estábamos intentando despejarnos…-


Dijo de lo más calmado el menor, mientras soltaba con calma el rostro del mayor…


-Eso espero, ahora cámbiense y apróntense que si no llegarán tarde a la preparatoria…-


Salió de la habitación, cerrando la puerta con calma detrás suyo, ambos chicos se miraron y sonrieron… iban a asistir a su primer día en el último año de preparatoria, que a su vez, coincidía con sus cumpleaños… y con aquella declaración tan repentina, por parte del menor.


SongFic: Angel Of Mine - Evanecense

Notas finales:

Aquí termina n.n espero que les haya gustado.

Ojalá y nos podamos leer pronto n.n, y desde ya muchas gracias por leer n.n <3

Bye bye~ ^u^/


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).