-No ha regresado a casa en tres días- informo KiBum a Krystal- solo me llamo para decirme que se quedaría con unos amigos-
-¿Qué fue exactamente lo que pasó?- Krystal sabia que habían peleado pero no sabia cual había sido el motivo.
-Peleamos- frunció el ceño al recordar ese día- dijo que estaba coqueteando con uno de los modelos, me grito y me dijo que era un hipócrita y mentiroso-
Aun podía escuchar los gritos de MinHo. Estaba molesto con él, pero quería arreglar el problema, no soportaba no ver ni hablar con MinHo.
-¿Celoso?- negó con la cabeza como respuesta. No creía que MinHo lo estuviera. Aunque si, no negaba que el hubiera hecho lo mismo estaba seguro hubiera hecho lo mismo. Si, estaría celoso que alguien estuviera coqueteando con su esposo, y en parte lo entendía, pero no podía aceptar la actitud de MinHo, debió hablar tranquilamente con él como las personas civilizadas que eran.
-Celoso o no, no debió gritarme y decirme esas cosas- bajo la mirada triste. Las palabras de MinHo lo hirieron, nunca le había mentido a MinHo y tampoco era hipócrita, si por algo se caracterizaba KiBum era por ser directo y siempre decía lo que no le parecía.
Podía ser sumiso con lo que a sus padres se refería, pero con otras personas siempre hablaba con la verdad. Era considerado por la mayoría como caprichoso y egocéntrico, y si tal vez lo era un poco, pero también era una persona amable y educada.
-Toda la razón no debió gritarte ni hablarte de esa manera- la chica estaba segura que lo que MinHo sentía era celos y pensaba que MinHo estaba comenzando a querer demasiado a su amigo.
-Lo odio- dijo minutos después, ganándose un risita por parte de la menor.
-¿Seguro?-
-Me hace preocuparme, no debería de hacerle eso a su esposo-
Lo odiaba por hacerlo sentir mal, lo odiaba por hacerlo preocuparse por él, lo odiaba por quererlo tanto. Lo quería y mucho y por eso es que estaba preocupado, con decirle que estaba con unos amigos no arreglaba nada.
Antes de la llamada de Choi estaba sumamente preocupado, y solo pensaba en si lo habían asaltado, o si estaba herido, o donde se encontraba. Choi lo había hecho casi morir de la preocupación no le contestaba las llamadas y no lo había hablado si no hasta dos días después de que se marcho.
Quería gritarle, pero también quería verlo y abrazarlo y cerciorarse que estuviera bien.
-¿Sabe que te preocupas por él?- se encogió de hombros. Después de la pelea se dio cuenta que Choi no confiaba en él y estaba seguro que pensaba que todo lo que le había dicho eran mentiras.
-No creo, creo que no-
-KiBum ¿Qué es lo que sientes por tu esposo?- pregunto la chica queriendo saber la verdad. Conocía al rubio y estaba seguro que Choi le importaba mas de lo que podía aceptar, por eso la preocupación y el miedo, por eso estaba molesto de que Choi no le creyera nada. Krystal podía asegurar que el cariño que tenia hacia MinHo había crecido.
-No lo se- confeso. Aun no podía decir que es lo que sentía por Choi. Pero quería que todo volviera a como estaba antes, con los besos y los abrazos, con las palabra cursis y lindas.
-No sabes lo preocupado que estaba por ti-comunico el rubio cuando el alto entro a la sala. MinHo bajo la mirada, sabia que no fue correcto lo que hizo pero fue lo único que pudo hacer ese día.
-Te dije que estaba con unos amigos- el rubio frunció el ceño.
-¿Y crees que eso me iba a dejar tranquilo?-
¡Claro que no! No había estado menos tranquilo. No sabia con que amigos y no sabia si estaba diciendo la verdad. Aun que llevaba un poco más de 8 meses casados aun le faltaba mucho que conocer sobre MinHo.
No sabía quienes eran los amigos más cercanos de MinHo, no sabia como era Choi con sus amigos. Desconocía muchas cosas y lo odiaba porque quería conocer del todo a su esposo. Por que en todo este tiempo que se hicieron cercanos se dio cuenta que quería conocerlo por completo, quería conocer todo en él.
-Bien se que no fue lo mejor- reconoció.
-Claro que no lo fue-
MinHo sabía que lo que hizo estuvo mal, pero después de la pelea sabia que si se quedaba más tiempo pelearía aun más. No quería saber, no quería que KiBum le mintiera sobre lo que el vio. Tal vez exagero un poco al gritarle y reclamarle. Como había dicho KiBum ellos no eran nada.
Y es por eso que uso esos días, para mentalizarse y aceptar que el mayor no le pertenecía, que lo de ellos era un matrimonio fingido y que al final KiBum regresaría a los brazos de JongHyun.
-MinHo tenemos que hablar- KiBum quería explicarle, quería que MinHo entendiera y que todo volviera a la normalidad, que MinHo siga siendo la persona cariñosa que era con él.
-Estoy cansado- hablo rápidamente para evitar esa conversación.
No quería hablar porque sabía que pelearían. No entendía por que KiBum insistía con explicarle todo, si el mismo lo había visto y sobre todo el había dejado claro cual era su relación.
-Tenemos que hablar- advirtió tomando la mano de MinHo que avisaba con retirarse.
-KiBum- Choi deshizo el agarre- no quiero hablar, créeme has dejado todo claro-
-Pero…- Choi negó con la cabeza, y camino rápidamente para después comenzar a subir las escaleras que conducían hacia su habitación.
El rubio suspiro frustrado. ¿Por qué su esposo tenia que ser tan terco? Le molestaba no poder explicarle la situación. Dejo que Choi se fuera sabia que aun estaba molesto, pero tenia que hablar con él de eso estaba seguro, tal vez tenia que esperar unos días mas, pero lo haría.
No podía permitir que esa situación siguiera así, le dolía que Choi no confiara en el, le dolía saber que es lo que pensaba de él y no permitiría que las cosas siguieran así, tendía que hablar seriamente con MinHo y aclarar cual era la situación con respecto a su matrimonio.
-El señor ha llegado- comunico la señora Park que entraba a la habitación.
-¿Y que dijo?- pregunto KiBum.
-Que almorzara en su habitación- a MinHo ahora le venia perfecto esa excusa, los empleados sabían que estaban peleados y que no estaban durmiendo juntos-como nunca lo hicieron-
El rubio se tallo el entrecejo. Llevaba días haciéndolo todo solo, MinHo llegaba de trabajar y se encerraba en su habitación con la escusa de que tenia mucho trabajo. No le dirigía la palabra y si lo hacia era solamente por que tenia que hacerlo y simplemente lo necesario.
KiBum se estaba cansando de esta situación. Sabia que lo que le dijo a MinHo no era lo correcto, pero también no estaba de acuerdo en la manera en la que Choi lo trato. Ambos eran orgullosos y ninguno cedería tan fácilmente.
Y aunque al principio KiBum decía que él no cedería, en estos momentos se encontraba a punto de hacerlo, pues se había dado cuenta que extrañaba las atenciones de MinHo, las palabras lindas y sobre todo sus besos.
-Perdone la intromisión- hablo la mujer- pero ¿Qué fue lo que paso?- para ninguno de los empleados paso desapercibido el distanciamiento de los esposos. Si bien siempre procuraron que nadie se diera cuenta que dormían en habitaciones separadas, ahora el distanciamiento les venia bien, pues Choi aprovecho la situación y todos se dieron cuenta que estaban peleados.
-Le dije algo que no debía- y en esos momentos KiBum se arrepentía de haber dicho todo eso.
-Espero que arreglen la situación, son una pareja joven y se que se quieren mucho- fingió una sonrisa y asintió.
-Señora Park no le lleve nada, tengo que hablar con él- la mujer asintió y después dejo la habitación.
Minutos después KiBum se encontraba frente a la puerta de la habitación de su esposo, debatiéndose a últimos momentos, si entrar o no. Suspiro y se dio fuerzas, debía entrar y aclarar todo con MinHo. Tomo la perilla tratando de no hacer ruido y entro a la habitación.
-Señora Park, puede dejar la comida ahí- MinHo subió la mirada de los papeles que estaba leyendo encontrándose con su esposo que caminaba hacia el- ¿Deseas algo?- pregunto mientras dejaba los papeles a un lado y se sentaba en el borde la cama.
-MinHo tenemos que hablar-
-Ahora no, tuve un largo día y estoy cansado- ¡Y la misma excusa de siempre! Pero esta vez KiBum no se iría, había pasado suficiente tiempo y este o no este molesto su esposo, hablaría con él.
-Yo quiero hablar ahora- KiBum tomo asiento a lado de él.
-No tenemos nada de que hablar, creo que no es necesario, tu lo dejaste todo claro- MinHo no quería hablar. Estaba haciendo todo lo posible por no pensar en KiBum y tratar de olvidar todos esos sentimientos que sentía hacia él. Creía que si seguía alejándose del rubio, seria más fácil olvidarlo y al final la separación no seria tan dolorosa, por eso lo evitaba, por eso no le dirigía la palabra.
-MinHo no es así- rebatió cansado de las mismas palabras- siento lo que te dije hace días, si somos algo, eres mi esposo- tomo sus manos- y te quiero-
Estaba arrepentido, si bien ese día le dijo que no eran nada y no tenía por que reclamarle ahora se arrepentía de esas palabras. Estaba molesto ese día y estaba consiente de que ambos se habían dañado con palabras que no eran ciertas- al menos las de él no lo eran-
MinHo era su esposo y no mentía cuando le decía que le quería. El alto cada día se ganaba un lugar muy importante en el corazón de KiBum, era su esposo y lo quería, era su esposo y en estos momentos no quería perderlo.
-Basta KiBum, no tienes por que decir nada-casi suplico el moreno- no tienes por que decir nada que no sientas- a Choi no se le olvidaban las palabras que el mayor le dijo, y dolía mas cuando KiBum le decía que era su esposo y que lo quería.
Estaba enamorado del rubio y le dolía que le mintiera. Por eso se alejo de él, si lo volvía a tratar, si volvía a ser cariñoso con él, el único perjudicado seria él, sus sentimientos crecerían aun mas y al final cuando la separación se llevara acabo el mas destrozado seria él y solamente él.
-No lo digo por que si MinHo- tomo el rostro del moreno, fijando su vista en esos enormes ojos, tratando de demostrarle que no mentía- estaba molesto ese día, ambos nos dijimos cosas hirientes y lo lamento mucho. No me gusto que desconfiaras de mi, jamás te seria infiel, y créeme intente decirle que estaba casado y que estabas conmigo, pero el chico apenas y me permitía hablar- suspiro- lo siento por eso y por lo otro también. Tú eres importante para mí, eres mi esposo y te quiero-
MinHo procesaba las palabras de su esposo, tenia razón, ese día estaba molesto y tal vez las palabras que uso no fueron las adecuadas, tal vez debió dejar que KiBum le explicara, pero estaba tan molesto que no reacciono de otra forma.
-Siento haber dicho todo eso también, no quise decírtelo- reconoció con la mirada en el suelo- pero tienes razón, al final no somos nada-
Y aunque MinHo reconociera que su forma de actuar no fue la mejor, aun recordaba las palabras de KiBum. Y tal vez el rubio también estaba molesto, pero había dejado claro que eran ellos en realidad. Un simple matrimonio fingido que ansiaba por separarse.
-No MinHo, escucharme- pidió, tomando sus manos obligándolo a mirarlo- hace tiempo te dije que no sabia que es lo que sentía por ti, aun estoy confundido, te quiero y mucho eso lo se, pero aun pienso en JongHyun- aunque no con la misma intensidad en que lo hacia antes- pero tu ocupas la mayor parte de mis pensamientos. No pienso en la relación que tuve con JongHyun, solo pienso en la que tengo ahora contigo en ¿Cómo estas? O ¿Si eres feliz? Me gusta estar a tu lado, me gusta hablar contigo por horas, amo que grites al llegar. Me gusto tu beso, me gusta que cenemos juntos y que tengas listo el desayuno en las mañanas, y tal vez lo que te diré ahora suene contradictorio, si bien no pienso mucho en JongHyun el sigue en mi mente, no es fácil olvidar a una persona. Pero todo lo que te dije significa algo y ahora quiero estar contigo-
-¿Qué quieres decir?- parpadeo un par de veces aun procesando lo que su esposo le acababa de decir.
-Quiero decir- KiBum se acerco hasta quedar a centímetros de su rostro y lo beso, suave, lento disfrutando del acto. Se separo lentamente y sonrió- quiero decir que lo intentemos-