-Adelante- KiBum se sentó en el borde la cama, segundos después entro una de las tantas señoras de servicio a su habitación.
-Joven KiBum, lo buscan-
-No quiero ver a nadie- pidió, la mujer asintió, pero antes de salir de la habitación la puerta se abrió dejando ver a TaeMin ¿Qué hacia él ahí? Se cruzo de brazos y alzo una ceja.
-Tu y yo tenemos que hablar- entro a la habitación como si de su casa se tratara.
-Aparte de besarte con esposos ajenos, entras a habitaciones ajenas- el menor sonrió de lado.
¿Por qué TaeMin estaba en su habitación? ¿Qué se supone que tendrían que hablar? TaeMin no tenia por que estar en su casa, y sobre todo ellos no tenían nada de que hablar. En esos momentos su enojo hacia el menor había crecido. ¡Se había besado con su esposo! Y aun así tenia el descaro de ir a verlo.
-Si supieras todas las veces que lo he besado- soltó mirándose las uñas- creo que podría decir que mas que tu- ¡Tan cínico, hipócrita, descarado!
Él no tenía por que estar soportando todo eso. Frunció el ceño tratando de retener las lágrimas, le dolía saber que su esposo le mintió. ¿Por qué tenia que decirle todo eso? No le basto con el beso, ¿Aun debía sufrir más? ¿Aun quedaban más mentiras por descubrir?
-Si es todo lo que tienes para decirme, puedes irte- extendió su mano señalando la puerta.
Quería que se vaya, que se callara, no quería seguir escuchando todo lo que tenia para decirle.
-No, aun falta felicitarte- el menor extendió su sonrisa.
-¿Felicitarme?-
Tantas cosas pasaron por la mente del rubio, pensando en que estupidez estaría a punto de decirle TaeMin.
-Nos ahorraste a MinHo y a mí decirte todo-
-¿Qué?- susurro, no queriendo escuchar lo que el menor tenía para decirle.
¡Es que aun faltaba más! ¿Tanto tiempo lo tuvo engañado MinHo? Por una parte no quería escuchar lo que TaeMin tenia para decirle, pero una parte de él tal vez la masoquista quería escuchar todas las mentiras, quería saber que tanto fue engañado, por cuanto tiempo. KiBum ahora solo quería saber la verdad.
-Por favor KiBum, unos lo sospechaban, pocos lo sabían- ¿De que estaba hablando?- tu y MinHo no se querían cuando se casaron, aparentaban ser “la pareja feliz”-
¿Cómo es que TaeMin lo sabía? ¿MinHo se lo había dicho? No buscaba otra opción, estaba seguro que MinHo se lo tuvo que haber contado de otra forma no se hubiera enterado. A pesar de que la mayoría sabia que las parejas se casaban por obligación, porque ya estaba decidido, los padres de la pareja se habían encargado de asegurar que lo de ellos era amor, y al parecer la mayoría no pensaba que fuera mentira, sus padres se encargaron de dejar en claro que era pareja desde hacia mas de dos años, y nadie sospechaba, la historia parecía tan real y MinHo y KiBum eran muy buenos actores.
-Por eso MinHo me busco- continuo TaeMin- sabia que estaba mal, que estaba arruinando su matrimonio- frunció el ceño, ante la mala culpabilidad- pero simplemente sucedió, amo a MinHo y él me ama a mi, así que hicimos bien-
Sus ojos picaban y no sabía por cuanto tiempo mas podía retener las lagrimas. Cada palabra que salía de la boca de TaeMin era como un golpe para él. Un golpe recordándole lo mentiroso que fue MinHo, y lo ingenuo que había sido él. Sentía su pecho doler, y la tristeza apoderarse de él. ¡Amaba a MinHo! Lo hacia, pero al parecer Choi ni siquiera llego a quererlo y eso tal vez era lo que mas dolía.
-No confíes mucho- trato de hablar sin que la voz se le quebrara- si fue capaz de engañarme ¿Quién te asegura que no hará lo mismo contigo?- TaeMin lo fulmino con la mirada.
-¡No lo hará!- casi grito- por que nos amamos, sentimientos correspondidos, lastima que los tuyos no sean así ¿No?- abrió los ojos al escuchar esas palabras ¿Qué quería decir con eso?
-¿De que hablas?-
-Te enamoraste KiBum- desvió la mirada- cuando MinHo se entere se sentirá tan mal, tan culpable, pero tranquilo no le diré, será nuestro pequeño secreto-
KiBum mordió el labio, evitando así de que su boca saliera improperios hacia TaeMin.
¿Qué tanto sabia ese niño? Toda su vida al parecer. Su enojo hacia él no dejaba de crecer y lo único que quería es que se marchara de ahí. Si antes quería saber que tanto le había mentido MinHo, ahora era lo ultimo que quería saber, y es que cada palabra que escuchaba lo hacia sufrir aun mas.
-Si es todo, puedes irte- y de nuevo KiBum señalo la puerta, desviado la mirada de TaeMin, que lo veía con arrogancia y superioridad. TaeMin camino hasta la puerta, deteniéndose antes de abrirla.
-No te preocupes KiBum tu secreto esta a salvo- sonrió con malicia- cuando lo de ustedes termine de una vez, te mandare la invitación para nuestra boda- TaeMin dejo la habitación.
Las lágrimas que estuvo reteniendo salieron. Grito dejando salir todo lo que tenia adentro, tomando una almohada y aventándola en algún lugar de su habitación tratando de desahogarse.
Fue tan doloroso enterarse de cómo MinHo lo había engañado. Se sentía tan tonto. Seco sus lágrimas torpemente, trataría de no llorar por él, no se merecía que lo hiciera.
Una idea se paso por la mente de KiBum, le costaría un tiempo pero lo olvidaría, le costaría pero lo sacaría por completo de su vida, no quería saber nada mas de MinHo, no quería volver a verlo, no quería pasar el resto del tiempo a su lado. Tomo su móvil haciendo una rápida llamada, sus padres seguramente se molestarían pero no daría marcha atrás. La decisión ya estaba tomada y estaba seguro de que seria lo mejor.
-¡¿Divorcio?!- su madre casi escupe el te que estaba tomando.
-Divorcio- repitió, tomando asiento en uno de los sofás de la sala.
-KiBum no puedes estar hablando enserio- la mujer no podía aceptar eso. MinHo y KiBum debían seguir casados, era lo mejor para todos.
-Por supuesto que no, estoy hablando muy enserio-
¡Claro que no bromeaba! El divorcio era lo mejor para esa relación que nunca tuvo futuro. Su matrimonio comenzó mal y ahora se daba cuenta que siempre estuvo destinado al fracaso. MinHo no lo amaba y ahora estaba con TaeMin, él no podía, ni quería hacer nada.
Aunque amara a MinHo, no podía perdonarle una infidelidad. Era cierto que lo de ellos no era el típico matrimonio, era cierto que nunca pasaron de los “te quiero” pero MinHo le había mentido, y pensaba que no solo una vez, se había entregado a MinHo por amor y él solo mintió. Y aunque KiBum quisiera perdonarlo, no podía hacer nada, porque TaeMin y MinHo estaban juntos y ellos se amaban y él lo único que podía hacer era observar.
Estaba seguro que todas las veces que MinHo llego tarde de su trabajo era por que estaba con él y el tontamente creyendo que su esposo trabajaba mucho. Ahora pensaban que tal vez cuando MinHo tuvo que viajar a Japón por una semana se había ido con TaeMin, y él solo estuvo en su casa esperando ilusionadamente que su esposo regresara.
-KiBum esto no era lo que ustedes prometieron-
-Y que quieres que haga mamá ¿Qué le festeje su infidelidad?-
Si le pidiera eso seria el colmo, ya bastante sufrió teniendo que casarse por obligación, ya bastante había sufrido al enterarse de todas las mentiras de su esposo, para que ahora tenga que pasar la vergüenza de perdonarlo.
-Además, esta claro que él no quiere que eso suceda, esta con TaeMin-
-Hijo, tal vez es una equivocación-
-No lo es mamá- ¡Claro que no lo era!- el divorcio es lo mejor-
-Pero…- la mujer iba a hablar, pero KiBum la interrumpió.
-No, se lo que dirás, no es lo que prometimos, pero no pienso pasar con él resto del año-
Era lo último que quería hacer, ni siquiera se imaginaba vivir con MinHo hasta que los dos años se cumplieran. No seria bueno para él, no lo era tener que ver el rostro de MinHo día y noche, saber que lo ama, pero que MinHo simplemente se divirtió con él.
-¿Tu padre ya lo sabe?- asintió. Era la primera persona con la que había hablado, KiBum siempre se sintió mas cercano con él hombre, este al escuchar las razones, no dudo en concederle ese deseo a su hijo, el hombre tampoco estaba de acuerdo con lo que MinHo había hecho y ya se encargaría de hablar seriamente con MinHo y su familia.
-Esta de acuerdo- comunico- yo me divorciare de MinHo-
Mañana mismo comenzaría con los trámites, y después de eso tenia una llamada que hacerle a JongHyun.
-¿Le has tratado de explicar?- pregunto ChangMin- ¿Hablar con él?-
Era lo primero que intento hacer, sin obtener éxito. Claro que había tratado de explicarle todo a KiBum, pero no lo había logrado.
-Le he dejado miles de mensajes, le he hablado millones de veces, pero rechaza mis llamadas-
MinHo llevaba más de una semana tratando de comunicarse con el rubio, pero este simplemente ignoraba sus llamadas. Después de haber hablado con la señora Park, fue a casa de los Kim para hablar con KiBum, pero le dijeron que este no estaba o lo más probable era que este no quisiera verlo.
-¿Has ido a verlo?- por supuesto, rodo los ojos, hablar con ChangMin no le ayudaba en nada.
-He ido a su casa, pero me dicen que no esta, y su padre tampoco me deja verlo-
Cientos de veces, pero KiBum se negaba a verlo, había ido a su casa día y noche, sin éxito alguno. Se sentía tan frustrado, necesitaba explicarle todo a KiBum antes de que otros lo hicieran, necesitaba decirle la verdad.
-MinHo como crees que te dejaran verlo, lastimaste a su pequeño- recordó el mayor.
-Pues eso debieron pensarlo antes de casarnos- resoplo- los dos somos adultos, al menos deberían dejarme explicarle- al menos eso pensaba Choi. Si los obligaron a casarse, al menor que le dieran la oportunidad de hablar con su esposo. Se suponía que no querían que se separaran, que querían que el matrimonio funcionara, no entendía a que venia todo eso de padres preocupados por su hijo, simplemente no lo encontraba lógico.
-Ellos no tienen la culpa- comento ChangMin mientras hojeaba unos papeles- o al menos no toda, tú también lo engañaste-
-¡Hyung!- MinHo frunció el ceño- ¡Yo no lo engañe!-
-¿Seguro?- pregunto alzando la ceja, Choi asintió- entonces ¿Qué paso? Y quiero la verdad MinHo-advirtió.
-Yo… bese a TaeMin, lo bese ese día y lo bese antes, él día que me pelee con KiBum- ChangMin abrió la boca sorprendido ¿Qué tanto no le había dicho MinHo?- pero no fui yo… bueno si… TaeMin fue el que me beso primero, no fue porque yo quisiera, yo lo detuve enseguida- aclaro MinHo la ver la mirada del mayor.
-Se lo dijiste ¿Cierto? ¿Se lo dijiste a KiBum?- pregunto alarmado.
-No- y tal vez ese fue su error, no contarle a KiBum lo sucedido ese día.
-Dímelo todo- exigió ChangMin.
-Él día de la fiesta, el día que me pelee con KiBum por haber coqueteado con el modelo ¿Lo recuerdas?- asintió invitándolo a continuar- ese día salí de la casa por la noche, estaba tan molesto que el único lugar al que se me ocurrió fue ir a un bar que hay en el centro- ¿Desde cuando MinHo tomaba?- solo quería despejarme, tome tal vez dos copas, al salir del lugar me encontré con TaeMin, termine en su departamento, dijo que no era bueno que condujera, aunque no había tomado mucho, fui con él solo para no regresar a casa-
-¿MinHo no me digas que le fuiste infiel?-
-¡No!- contesto enseguida- fui a su departamento, hablamos unos minutos, después él dijo que le gustaba que siempre lo había hecho y… me beso, estaba tan sorprendido, pero lo aparte enseguida, no le seria infiel a KiBum- suspiro- trate de alejarme de él, pero es prácticamente imposible siendo el modelo principal de la compañía, prometió alejarse y lo había hecho hasta ese día, el resto lo sabes-
El resto… el día de su confesión, se encontró con TaeMin, hablaron sobre la sesión y después el menor volvió a besarlo, y lo peor de todo fue que KiBum lo vio todo. Estaba tan arrepentido de todo, que necesitaba decirle a KiBum la verdad, sin importar que.
-MinHo debiste decirle desde un principio- asintió sabiendo que tenía razón- si él lo hubiera sabido, no hubiera malinterpretado las cosas-
¡Lo sabia! Pero no podía regresar el tiempo, en ese momento no quiso decirle a KiBum pensando en que se molestaría o tratara de romper con su matrimonio, y ahora era demasiado tarde para decirle, tal vez en estos momentos KiBum no le creería.
-No me digas lo que debí hacer, bastante culpable ya me siento- reconoció bajando la mirada. ¡Culpable! Y demasiado.
-¿Y tus padres lo saben?- negó.
-No, aun tengo la esperanza de poder arreglar las cosas, de reconciliarnos-
Ni siquiera había pensado decírselo a sus padres, estaba seguro que cuando estos se enteraran, lo regañarían, le gritarían y quien sabe que otras cosas. Sobre todo su padre, que estaba seguro seria el más molesto. No quería que se enteraran que habían peleado, pues ellos tratarían de hablar con KiBum o con sus padres, y MinHo no quería eso, él es el que debía hablar con KiBum y explicarle todo.
-Yo creo…- ChangMin se vio interrumpido por los golpes de la puerta.
-Adelante- la secretaria de MinHo entro con un gran sobre en las manos.
-Señor Choi acaba de llegar esto, dijeron que era importante-la chica extendió el sobre- permiso- dijo para después dejar la oficina.
Choi abrió el sobre, sacando los papeles y leyéndolos enseguida. Sus ojos se abrieron sorprendidos, su boca formo una perfecta “o” y su mirada se perdió segundos después.
-MinHo- llamo ChangMin- ¿Qué paso? ¿Qué es eso?- pregunto dirigiendo su mirada a los papeles.
-Son los papeles del divorcio-
La peor pesadilla de MinHo se había cumplido.