You seem to need hope
Capítulo 20
Al otro día, fuimos a la casa de Yixing. Meiling misma había llamado a su celular, y le había pedido que fuera a jugar con ella, exigiendo mi presencia cuando él le contó que estaba conmigo. Lay, como el hermano baboso que era, aceptó sin decir nada.
Jugamos un largo rato a cada cosa que la pequeña proponía, hasta que llegó la mamá de ellos y nos preparó un rico pastel. Nos sentamos todos a la mesa, disfrutando del postre con humeantes tazas de café con leche y, en el caso de Meiling, chocolate caliente.
- Yixing- dijo su mamá -¿Cómo está Suyin? Hace mucho que no la veo por acá.
- No... No sé- frunció el ceño -¿No te dije? Corté con ella.
- ¿De verdad?- preguntó. Lay asintió, comiendo un poco de pastel, mirando curioso como su madre suspiraba -¡Qué bueno!- exclamó, al parecer muy feliz.
- ¿Qué?- preguntó él mientras la mirábamos sorprendidos -Pensé que la querías- comentó frustrado. Recordé que ese era uno de los motivos por el cual no dejaba a su ex-novia.
- Para nada- confesó la mujer, tomando contenta de su café -Nunca me gustó esa chica para vos- finalizó.
***
Salí del baño y me dirigí a la sala donde estaba Meiling dormida. Me fije que estuviera bien, y caminé para volver a la cocina; pero me detuve al escuchar a la mamá de Lay decir mi nombre.
- ¿Y hace cuanto que salís con LuHan?- preguntó a su hijo.
- ¡¿Qué?!- exclamó después de atragantarse con algo.
- Yixing, por cómo lo miras me doy cuenta. Me dice todo la manera en la que se miran y se sonríen sin motivo, sin decirse nada- sentí mi cara enrojecer y, por la risita de su mamá, imaginé que él también se había sonrojado.
- Nosotros... no estamos saliendo- dijo finalmente -Y no nos miramos de ninguna manera en especial- aseguró.
- Ah... me debo haber equivocado- habló con un tono de voz que me dio a entender que sólo lo decía por compromiso, que la idea que tenía sobre nosotros seguía intacta en su cabeza.
Un rato después, la mamá de Lay se fue a trabajar y nos quedamos solos con la nena, que miraba entretenida la televisión mientras jugaba con unos bloques para armar. Estaba en el suelo, con su hermano abrazándola por atrás, quedando ella entre sus piernas. Sentí un arrebato de ternura y las ganas de abrazarlo no tardaron en aparecer. Decidí no reprimirme, ya que él me lo había pedido.
Me levanté del sillón donde estaba, y me dejé caer detrás de Lay. Poniendo mis piernas cada una a un costado de él, me acerqué y lo abracé, apoyando mi mentón en su hombro.
Él giró levemente su cabeza, mostrando una sonrisita y, viendo su mejilla cerca mío, le di un pequeño beso en ésta. Sentí las manos de Yixing tomar mis brazos, que rodeaban su cintura, tirando de ellos para que quede más cerca suyo, con mi pecho bien pegado a su espalda. Volvió a colocarlos alrededor de su cuerpo, dejando una mano sobre mi antebrazo y acariciándolo con su pulgar. Con el otro brazo, rodeó de nuevo a Meiling.
Sin despegar mi mentón de su hombro, apoyé mi mejilla en la suya, y me concentré en el aburrido programa infantil.
***
- Buenos días- dije llegando junto a XiuMin y Chen, dejando escapar un gran bostezo.
- Buenos días- respondió mi mejor amigo.
- Buenas- sonrió Chen.
- ¿Alguno vio a Kai? Está tan raro últimamente...- comenté.
- No... Yo también lo noté, parecería que nos está evitando- MinSeok abrió su casillero y sacó un libro.
- ¿Será por culpa de Lay y mía?- preguntó Chen preocupado.
- No creo- me estiré hacia atrás, haciendo sonar mi espalda. Sentí una mano en la zona baja de ésta y me enderecé asustado. Miré a Lay, que se acercó y depositó un beso en mi mejilla. Se alejó despacio mirándome a los ojos y sonrió. Le devolví la sonrisa tímidamente. Nuestros mejores amigos estallaron en carcajadas.
- ¿Viste la cara de LuHan?- preguntó XiuMin -¡Casi se muere del susto cuando le tocó la espalda!
- ¡Y cuando le dio el beso se puso como un tomate!- agregó Chen -Lay, sos un cursi. ¿Me das un besito también?- le molestó, ofreciendo su mejilla y recibiendo un pellizco en ésta -¡Auch!- exclamó. Yixing dejó caer el peso de su brazo en los hombros de Chen con poca delicadeza, haciendo que su cabeza se fuera hacia adelante -¡Perdón!
- Tarde. Ahora vamos- respondió sin dejar de hacer fuerza hacia abajo, para que a Chen le costase caminar. XiuMin y yo los seguimos entre risas.
***
Era la hora de gimnasia. Me cambié el uniforme normal por el de deporte, que consistía en una remera blanca con un borde rojo en el cuello, unos pantalones cortos rojos y medias blancas. Las zapatillas podían ser negras, blancas o rojas. Yo había optado por unas converse rojas, a pesar de que el reglamento exigía que el calzado fuera deportivo.
Nos habían separado en tres grupos. Dos jugarían al fútbol y, cuando terminaba el partido, el grupo que no había jugado lo haría contra el equipo ganador.
Lay estaba en mi equipo, que era el que no jugaba. Él estaba sentado, hablando con un compañero, Chen y XiuMin se enfrentaban en la cancha y Kai había desaparecido. Decidí escabullirme para ir a buscarlo.
***
Caminé por los vacíos pasillos del colegio. En esas dos horas de gimnasia no había mucha gente adentro; ya que la mayoría estaba en el exterior tomando clases. Algunos alumnos aprovechaban para esconderse en los baños y fumar o dormir.
Entré al baño, notándolo vacío. Me giré al escuchar la puerta abrirse y vi a Kai, que me miraba totalmente quieto.
- Kai- suspiré aliviado -¿Dónde estabas?- pregunté. Pero él no me respondió y se adelantó a pasos agigantados. Por el susto que me dio su mirada y su manera de caminar hacia mí, retrocedí hasta dar con la pared. Me aprisionó contra ésta con su cuerpo y apoyó su frente contra la mía.
- Por favor- dijo bajito.