Jeremy gruñó.
-Tú serás el único que saldrá jodido de todo esto. - dijo a Andrej, quien sólo sonrió.
Salió seguido por Bassanio.
-¿Dónde lo haremos? - le preguntó.
-Aquí no. Imagínate que viene Schwarzkopf a conectar la cámara... la que se nos arma. Pero, te iba a decir, no es que no quiera hacerlo, pero, ¿hará falta? Había unos emails realmente agresivos de un tal Manuel Cabuli, en uno de ellos decía literalmente "o te volare a vos, tortillera (lesbiana) de mierda".
-¡Vaya! - exclamó Jeremy - ¿Quién es ese tipo?
-Un socio - explicó - el y Miuccia iban a sacar una colección de ropa gótica, Miuccia ponía el talento y Manuel a su esposa.
-No entiendo.
-Manuel Cabuli está casado con Tarja Turmanen, una diva gótica. Les pareció que el mercado gótico estaba sin explotar: los fans de Tarja, unos verdaderos fanáticos, comprarían cualquier cosa que ella les vendiera, y con esa clientela asegurada, el negocio tenía visos de expansión con los fans de la alta costura. Creo que a Miuccia le interesaba sobre todo por el golpe que daría a Channel, quien hasta el momento había predominado en las tendencias góticas.
-Wow, no tenía idea de que fueras un experto en moda gótica.
-No lo soy. - sonrió Bassanio - Venia en los mails e investigué un poco. Ese Cabuli tiene en muy poca estima a los fanáticos de su esposa y a su esposa.
-Cabuli es un cabrón y Tarja una imbécil. - dijo Andrej, sorprendiéndolos pues había salido tras ellos. - Pero no fueron ellos porque están en Argentina.
-Pudieron contratar un matón. - dijo Jeremy.
-Quizá contrataron a la puta siliconada. - asintió Andrej - Pero como no te diga yo su nombre, Cabuli no te lo va a decir. - sonrió.
-No podemos sacar al detenido de la comisaria - dijo Bassanio, mirandolo - seria muy irregular.
-Que nos tiremos al detenido es irregular. - gruñó Jeremy, mirando como Bassanio miraba a Andrej. - Vayamos a mi oficina, se puede cerrar por dentro y si nos sorprenden tendremos tiempo de vestirnos y decir que lo estábamos interrogando o algo.
-¡Ummm! Me gusta la idea. - dijo Andrej - Voy a hacerlo con unos polis de verdad en una comisaria de verdad. Este es el encanto de lo genuino, mis niños. - concluyó levantando una mano, con lo que la manga de su suéter bajo y dejó a la vista una gruesa pulsera de plástico con el logo de Channel en brillantes.
Jeremy gruñó y cerró una pulsera metálica sobre su huesuda muñeca. Puso a Andrej de espaldas, le cogió la otra muñeca y terminó de cerrar las esposas.
-¡Oh sí! - exclamó Andrej.
-Camina. - lo empujó Jeremy.
Bassanio iba delante y tanto Andrej como Jeremy no dejaban de mirarlo. El primero lo desnudaba con la mirada, quitando aquellos jeans chic pero baratos de en medio, quitando también los boxes de pata corta, cuyas costuras se apreciaban por lo ceñido del pantalón. Sus nalgas lucían tan apetitosas que Andrej moría por morderlas y Jeremy estaba nervioso. Miraba la nuca de su amigo, de su mejor amigo, con las puntas de los cabellos castaños perdiéndose bajo el cuello de la cazadora café. ¿Y si la experiencia sexual lo echaba a perder todo? Compartir una chica podía ser o muy bueno o muy malo.
Llegaron a la oficina antes de lo que Jeremy deseaba. Todavía no estaba seguro de que lo fuera a hacer, pero como era un hombre de acción ejecutó los movimientos: mirar hacia ambos lados, echar la llave. Andrej lo miraba. Bassanio lo miraba, y por un extraño motivo no pudo sostenerle la mirada a su amigo. Examinó su pequeña oficina.
-La silla no nos aguanta y ni pensar en quitar las cosas del escritorio, con la investigación en curso. Tendremos que hacerlo de pie.
-Quítame las esposas. - pidió Andrej.
-Ni lo sueñes. - respondió con más brusquedad de la que esperaba. Lo cogió por la nuca con más brusquedad de la que esperaba y estampó sus labios sobre los labios que tantas veces besara Miuccia. No encontró los lunares repulsivos en lo absoluto. Cuando terminó con el beso "ella" jaló aire.
-¡Vaya!
-Cállate y chupa. - lo empujó para que se arrodillara.
Andrej desabotonó y bajó el cierre con los dientes. Paso su barbilla sobre el bulto, mirando arriba, hipnótico. Se veía hermoso. Parecía una modelo. Nada desmentía que fuera mujer. Con sus dientes muy blancos jaló el elástico de su prenda interior y jaló abajo. La generosa y bien erecta polla fue liberada. Bassanio siguió su rebote como en cámara lenta, con sus carnosos labios abiertos. Vio como Andrej la lamía aparatosamente antes de volverse a mirarlo a él, con los hombros caídos y el torso ladeado en una pose grácil y seductora.
-Acércate.
Bassanio lo hizo, pudiendo ver mejor la polla de Jeremy. No era como que no se la hubiera visto antes, pero no así. Se sacó la suya, bajándose la ropa hasta media nalga. Se paró al lado de Jeremy, que evitaba mirarlo. Bassanio se concentró en la hermosa modelo que engullía su pene, terminando de endurecerlo en pocas y expertas chupadas. Se quedó chupándolo, a él, sus labios apretaban y su lengua acariciaba. Se sentía tan bien. Se bajó el cierre diagonal de la cazadora y la hecho sobre la silla. Mientras se desabotonaba la camisa notó que Jeremy lo miraba de reojo. Desnudo su torso, de músculos no tan trabajados como el desearía, pero el tiempo no alcanzaba.
Andrej dejó de mamar a Bassanio para lamer la punta de Jeremy.
-Si me dejas libres las manos podré hacer esto mucho mejor.
Jeremy sacó la llave del bolsillo de la chaqueta. Andrej se pusó de pie con la facilidad de una bailarina. Se dio la vuelta para ofrecer sus manos encadenadas. Se las acarició una vez fueron liberadas. Luego le hecho los brazos al cuello a Jeremy y lo besó, pegando su cuerpo al suyo. Luego, sin dejar de besarlo, le quito la ropa de arriba, dejándolo en iguales condiciones que a Bassanio, para que éste lo mirara.
Volvió a arrodillarse y los acercó por las caderas, hasta pegarlos. Juntó las puntas de sus pollas y las lamió. Luego, masturbó con fuerza la de Bassanio mientras engullía la de Jeremy. Los amigos procuraban hacer lo que en tales casos manda la etiqueta, esto es, mirar a la belleza que hace la mamada y pretender que el otro no está ahí y que su cercanía y su polla no te excitan.
Pero Jeremy, en una falta de buenos modales imperdonable en el hijo de un oficial inglés no podía dejar de mirar la piel joven de Bassanio, las pequeñas curvas y depresiones de su torso perfecto. Y Bassanio, bajo sus largas pestañas, tampoco podía dejar de mirar furtivamente el pecho amplio, ligeramente velludo, de Jeremy, su cintura estrecha, de la que tanto se enorgullecía, y ese caminito de vellos desde su ombligo hasta la polla que el modelo chupaba una y otra vez. Bassanio se mordía el labio inferior cuando sus miradas se encontraron. Jeremy tragó saliva y Andrej cambió de actividad, masturbándolo mientras felaba a Bassanio. Jeremy se obligó a mirar abajo, como el modelo le hacía a su amigo algo que ya quisiera hacerle él.
Bassanio lo notó, o creyó notarlo, y nervioso, temeroso de ser rechazado, cogió el rostro de Jeremy, una mejilla rasposa por la barba, lo ladeó, acercó el suyo y plantó un breve pero inequívoco beso que era toda una declaración de intenciones. Separó sus labios y miró sus ojos. Jeremy lo miraba de una manera intensa. No podía descifrar su gesto. Entonces sonrió y él sonrió por reflejo, y Jeremy lo tomó en un beso apasionado.
Andrej se sintió aplastado entre las caderas de ambos, y al mirar arriba sonrió él también, complacido de verlos besarse, ese par de machos activos, comiéndose uno al otro, tocándose sus pechos varoniles y sus brazos fuertes.
Juntó sus pollas y las estimuló juntas, frotando los troncos en lo que chupaba las puntas. Se metió la mano bajo el vestido y acarició el triangulito frontal de su bikini. Su hinchado miembro le dolía, apretado entre sus muslos. Se levantó, y acercando su carita hermosa rozó la mejilla de Bassanio con su nariz, abriéndose paso para participar en el beso. Bassanio lo recibió de inmediato, poniéndole una mano encima y sacando la lengua para acariciar sus labios. Jeremy tardó un poco más y pareció sorprenderse cuando al acariciar su pecho se encontró con un pequeño bulto bajo el holgado vestido.
Andrej dio un paso atrás, quitándoselo. Llevaba un precioso coordinado de la marca que el mismo promocionaba, sostén y bikini en rosa claro satinado. El sostén era de relleno, y prometía darle senos hasta a la mujer más despechugada y lo demostraba dándoselos a Andrej. Pero aún más sorprendente resultaba ver que bajo el diminuto triangulito frontal del bikini el bulto no se veía exagerado ni nada. No esperarías encontrar ahí otra cosa que una vulva. Andrej les guiñó un ojo y bajó lentamente la tela de su bikini, por el centro. Un alargado y estrecho corazón de vellos recortados, dejado por una depilación brasileña, apareció. Se veía como un monte de venus. Andrej bajaba y bajaba, y parecía que iba a resultar que era chica. Pero finalmente su miembro apareció. Apretado y bien metido, junto con los testículos entre lo alto de sus muslos y entre sus nalgas.
A Jeremy y a Bassanio les dolió un poco ver sus genitales tan apretujados, pero Andrej, encantado, se los sobó, masajeando sus bolitas perfectamente depiladas y ligeramente rosadas. Sobó su polla hasta dejarla bien dura y extendida. Luego se puso las manos sobre las copas del sostén y sacudió las piernas, deslizando el bikini sobre sus medias hasta que quedó a la altura de sus tobillos.
A pesar de la evidencia de la polla erecta, apuntándoles, los amigos casi esperaban otra sorpresa bajo el sostén. Pero no, al quitárselo, Andrej reveló un pequeño par de pezones y nada más. Lanzó el sostén hacia un lado y caminó hacia ellos como por una pasarela, frotando su pene, y al llegar lo junto con los suyos, y a dos manos acarició tres penes. Buscó los labios de Bassanio y Jeremy, celoso, lo cogió por el cuello para besarlo él.
-Quiero que tú seas el primero. - le dijo Andrej.
Jeremy apretó con sus manos desde sus axilas hasta sus muslos. Tenía unos bonitos muslos, delgados, sí, pero con algo de carne, de carne firme que se unía de tal manera sus nalgas y caderas que de hecho daba la ilusión de unas caderas femeninas. Jeremy lo volteó: sus nalgas eran firmes, extra firmes, y bien formadas, aunque pequeñas. Andrej pegó su espalda a su pecho y su cabeza, con su suave cabello largo, a su hombro, el rostro medio volteado. Jeremy le metió un par de dedos en la boca y Andrej se los chupó. Luego, ante la atenta mirada de Bassanio, se los introdujo por el culo, con lo que Andrej gimió, alzando un muslo, abrazándolo con una pierna hacia atrás. Jeremy besuqueaba su cuello y se veían tan eróticos.
-Bassanio - el joven sintió su nombre como una caricia - ¿Quieres darme un condón, por favor? Están en el bolsillo derecho de mi chaqueta.
-Aquí tienes. - Bassanio se lo dio ya fuera del paquetito.
Jeremy se lo puso mientras Andrej miraba predativamente a Bassanio.
-Acércate. - le pidió de nuevo.
Bassanio lo vio gemir muy de cerca cuando Jeremy lo penetró. La expresión de placer del modelo lo hizo sentir muy excitado, deseoso de probar aquello que lo hacía poner esa cara. Andrej lo abrazó, acariciando su espalda varonil, pegando su torso al propio. Con la otra mano acercó más a Jeremy, por detrás, y luego junto su polla a la de Bassanio para masturbarlas juntas. Bassanio lo besó, acariciándolo, y como estaban tan juntos, acariciaba también a Jeremy algunas veces, y estas lo electrizaban más.
Andrej se daba cuenta de cómo lo apretaban esos dos machos entre ellos, con mucho frotamiento y mucha caricia. Tuvo la impresión, no del todo agradable, de que parecían querer hacerlo desaparecer para dedicarse uno al otro.
El de más edad se sentía muy bien y sabia moverlo como esperaba, sus embestidas eran vigorosas y certeras, lo hacían ondularse todo entre ambos. Muy rico que follaba. Pero el que más se le había antojado era el joven.
-Ahora tú. - pidió, escurriéndose del abrazo del otro y apoyándose de codos en el escritorio, con su sensual trasero de modelo bien empinado.
Bassanio sacó un condón del bolsillito pequeño del jean y se lo puso, admirando las piernas interminables de Andrej, inconsciente, de momento, de cómo era mirado por Jeremy. Llegó separando las nalgas de Andrej, clavándose hasta el fondo entre ellas, haciéndolo soltar un pujido.
De inmediato se dio a la tarea de penetrarlo, rápido, hondo. Acariciaba sus caderas y su vientre y su pecho plano, más plano que el de ninguna chica con la que hubiera estado. Se apoderó de los pezones y los frotó entre sus dedos. Se hundía una y otra vez en el cálido orificio que lo apretaba, como queriéndolo exprimir. Se sobresaltó cuando sintió las manos de Jeremy sobre su cintura, y su respiración muy cerca de su oído. Pero de inmediato se repuso y volteó el rostro, ofreciendo sus labios.
Jeremy los tomó mientras lo acariciaba con ardor. Bajó sus pantalones y acarició por primera vez las carnosas nalgas de Bassanio. Su cuerpo se sentía mejor que el del modelo. Se veían tan hermosos haciéndolo, jóvenes, exquisitos, vigorosos. Bassanio sobre todo. Dejó sus labios y lamió su cuello, su oreja. Era exquisito. Los músculos de su torso bajo sus manos eran perfectos. Sus firmes y carnosas nalgas, tan cerca de su polla. La deslizó entre ambas y Bassanio se estremeció.
-Me puse otro condón. - murmuró en su oído.
Bassanio asintió y un segundo más tarde la dura punta ejercía presión contra su esfínter. Detuvo las embestidas en Andrej, quien ya se había dado cuenta de lo que pasaba. Jeremy empujó más y el esfínter cedió. Bassanio vibraba por la extraña sensación, ni dolorosa ni placentera, solo nueva y... extraña. Dolió un poco cuando Jeremy siguió empujando, su gruesa polla abría su recto conforme entraba y era un poco... doloroso. Qué larga era, no acababa de entrar. Jeremy se detuvo y succionó apasionadamente su lóbulo, golpeteándolo con la lengua.
Bassanio empezó a moverse, para penetrar a Andrej. Con ese mismo movimiento, Jeremy lo penetraba a él. Acarició al modelo, admirando su habilidad para apretarlo rítmicamente dentro de su culo. Intento imitarlo pero el dolorcito volvió. Mejor lo dejaba flojo. Embistió a Andrej y pronto Jeremy lo embistió a él. No se conformaba con los movimientos del propio Bassanio, sino que empujaba con sus caderas para hundirse entre las carnosas nalgas de su amigo. Había deseado hacerlo durante tanto tiempo, secretamente. Bassanio y sus labios rosados, Bassanio y su culo carnoso habían poblado sus más inconfesables fantasías. Y ahora que finalmente lo tenía era mejor de lo que fantaseara: el estrecho y cálido túnel de Bassanio, tan estrecho. Seguramente era el primero en gozarlo.
Los tres se movían y gemían, Jeremy el que más. Andrej estaba excitado de ser parte de un trío y Bassanio disfrutaba de la experiencia de penetrar y ser penetrado por primera vez, y aunque Andrej era bellísimo y muy bueno, lo que gozaba más era a Jeremy dándole por el culo. Jeremy, y sus barbitas que rozaban. Jeremy, y sus manos expertas. Jeremy y esa manera de lamerle la oreja, de penetrarlo. Sus embestidas estaban llevándolo a nuevos paraísos de placer. Se corrió siendo deliciosamente apretado por Andrej, y se quedó quieto, aun dentro de él, gozando de las maravillosas embestidas de Jeremy, de esa fricción por todo su culo que lo volvía loco.
-¡Más, más! - le pidió entre jadeos y Jeremy lo complació, haciéndolo experimentar otro tipo de orgasmo antes de acabar el mismo.
Jeremy también permaneció dentro de Bassanio, acariciándolo mientras recuperaba el aliento. Andrej fue el primero en separarse.
-Genial. - dijo, molesto - Yo también acabé, por si les interesa. - miraba con reproche a aquel par de putos que preferían montárselo entre ellos que con él, un bellísimo supermodelo.
Jeremy se separó de Bassanio, avergonzado. Y el color que inundaba el rostro del más joven ya no era el rubor sexual. Andrej siguió mirándolos, dejándolos sentir su molestia mientras se vestían. Solo los perdonaba porque quedaban muy bien juntos, y seguramente permanecerían luego que él se fuera, y bueno, si él había sido el catalizador para que hubiera una pareja gay más en el mundo, estaba conforme.
-¿Y... la... información? - preguntó Bassanio.
-Vístete. - pidió Jeremy.
Andrej cogió su vestido y se lo puso a pelo. A ver si les provocaba saber que iba desnudo bajo el suave tejido. Sacó el brillo labial del bolsillo de su vestido y se lo aplicó, usando la pantalla apagada del ordenador como espejo. Se acomodó el cabello y luego dijo:
-Miuccia tenía un medio hermano, hijo de su padre y de una modelo llamada Anabella Manchini. Nadie sabía de su existencia, especialmente no la mamá de Miuccia, que era muy celosa y muy rica y estaba casada con bienes separados con el papá de Miuccia, pero mientras estuviera contenta, le dejaba usar su dinero como si fuera de él. El padre de Miuccia le confeóo que tenía este medio hermano en su lecho de muerte, haciéndole prometer que cuidaría de él. El muchacho, Anastasio, resultó ser flojo y tonto. Quería ser modelo y actor, - Andrej se permitió una sonrisa - pero no tenía talento. La única colección que modeló fue la de una tienda web para travestis. Y pronto se dio cuenta que las únicas películas en las que actuaría serían las triple equis. También descubrió que estaba muy en contacto con su lado femenino, así que le pidió a Miuccia dinero para ponerse un par de tetas.
Jeremy elevó las cejas y asintió, invitándolo a proseguir.
-Para esa época, la mamá de Miuccia ya había sido diagnosticada con Alzheimer y la mitad de las veces no reconocía a Miuccia, así que Anastasio, o Ana, como ya se hacía llamar, podría haber entrado a trabajar con Miuccia o ido a la universidad, como deseaba su padre, pero no. Lo que el chico quería era dinero en efectivo para convertirse en una estrella shemale. Y bueno, Miuccia se lo dio. Y también para que se operara las nalgas y los labios y no sé qué tanto más. Creo que si lanzas a "Ana" a una alberca, flota.
Bassanio se permitió una risita. Jeremy lo conminó a que guardara silencio.
-Es una estrella shemale, tiene su página web y todo - Bassanio la buscó desde su celular - pero vamos, el porno no es tan rentable. Por cada copia original se distribuyen treinta piratas. Además es adicta a las cosas caras y horteras como la ropa deportiva de Tommy Heilfiger, el colágeno inyectable y los chulos de Ibiza. Y desde que consiguió al último, un tal Pacholo (todo un personajillo), sus gastos han aumentado. La semana pasada, el miércoles, Ana le pidió más dinero a Miuccia. Ella se enojó y discutieron, ya le ha dado mucho este año y Miu cree que el dinero se lo lleva el chulo. Le dijo literalmente que no iba a mantenerle los proxenetas. ¿Sabes? Realmente a Miuccia no le gustaba que su hermana fuera una puta.
-Comprensible. - aseveró Jeremy.
-La discusión fue muy fuerte. Ana acusó de tacaña a Miuccia, de robarle la herencia que le había dejado su padre y Miuccia le contestó la verdad, que su padre no le había dejado nada y que lo que daba era caridad, y que era una estúpida porque ni prostituyéndose lograba ganar dinero.
-Uf. - silbó Jeremy.
-Fue una pelea horrible. Miuccia le dijo que no le daría un solo euro más hasta que no dejara a ese tipo y su empresa, la de sus videos porno, produjera dividendos.
-Me parece razonable.
-La verdad que si yo hubiera sido Miuccia le habría dado a esa hortera para su par de tetas y que se las arreglara como pudiera. Miuccia estaba muy alterada por la pelea, tanto que me pidió que nos viéramos el jueves, necesitaba desahogarse - algo en los gestos de Andrej indicaba que Miuccia necesitaba algo más que platicar para desahogarse - y para el domingo en la noche, cuando nos vimos por última vez, todavía no se habían hablado. Ana le habló mientras estábamos juntas. Cuando terminamos Miu le devolvió la llamada y Ana le dijo que lo sentía, que lo comprendía, que quería verla. En fin. A mí me pareció que simplemente quería contentar a la gallina de los huevos de oro pero Miuccia le dio la oportunidad. Le dijo que desayunaría con ella y Ana la citó en una de esas tiendas de franquicia. - nuevo gesto despectivo - No tenía para pagar más. Miu aceptó y quedaron de verse a las ocho y quince en la tienda que le quedaba de camino a Miuccia. Y eso es todo lo que sé.
Jeremy asintió. Se preguntaba porque la viuda no le había dicho nada.
-¿Claire estaba al tanto de esta historia?
-Sí. ¿No te dijo nada?
Andrej sonrió sardónico.
-Entonces, en su opinión, ¿su hermana Ana pudo haber matado a Miuccia?
-Sí. - contestó sin dudar - Estaba convencida de que si Miuccia moría ella estaría entre los beneficiarios.
-¿Y no es así?
-No. El padre de Miuccia no reconoció a Ana legalmente. Incluso si se hiciera la prueba de ADN, un hermano no tiene derecho sobre la fortuna de su hermana. La única beneficiaria de la muerte de Miuccia es Claire. A su madre le puso un fideicomiso en cuanto se la declaro incapaz de valerse por sí misma.
-¿Miuccia tenía un testamento?
-No creo. Pero estaba casada bajo bienes conjuntos con Claire.
-¿Cree que Claire pudo haber asesinado a su esposa?
-Sí. ¿Sabes? Hay un límite para los cuernos que una puede tolerar. Y Claire estaba muy celosa de mí.
-Si Claire mató a Miuccia por celos hacia usted, ¿no la vuelve eso culpable en cierto modo de la muerte de Miuccia? - atacó Jeremy.
-En cierto modo. - concedió Andrej - Uno no legal.
-Pareces halagado.
-En cierto modo. - sonrió Andrej.
-Ahora si me das asco. No como cuando toque tus lunares.
Andrej se llevó la mano al rostro como si lo hubiera abofeteado.
-Veo que la gorda asesina te dio mi descripción.
-¿Sabe dónde puedo encontrar a Ana Manchini?
-Pídeme perdón por lo de mis lunares. - ordenó Andrej.
Jeremy suspiró y meneó la cabeza.
-Lamento lo de tus lunares.
-Oí que iba a quedarse aquí luego de largarse del Hilton sin pagar la cuenta. - apuntó la dirección - Pero no hay garantías de que la encuentres.
-Hay una Ana en el directorio del teléfono. - dijo Bassanio.
Jeremy asintió.
-¿Qué puedes decirnos sobre Manuel Cabuli?
-Un bicho asqueroso, lo mismo que su esposa. La misma historia de patética dependencia y explotación de Ana con Pacholo, solo que más inexplicable porque Pacholo está bueno mientras que Cabuli es feo como pegarle al Niño Jesús en Navidad. Claro que Tarja no es ninguna belleza, bizca y con una carota así - separó sus manos formando un cuadrado con sus pulgares y el resto de sus dedos formando un ángulo recto -, pero tenía mejores partidos. Igual se casó con este porque la hacía ganar dinero, aunque, que yo sepa, el dinero se lo asigna Cabuli casi todo a sí mismo.
-¿Por eso se puso tan furioso cuando ese negocio de la línea gótica salió mal?
-¿Furioso? ¡Echaba espuma! Paso del - acento argentino - "Che, Miu! ¿nos tomamos algo?” al "¡Eh
vos! ¡Puta de mierda devolveme mi plata!"
-¿Miuccia le robó dinero?
-Por supuesto que no. - Andrej sonrió - Era demasiado lista. La línea gótica va a salir en otoño invierno, se llama Dark Desires by Tarja&Scada, un proyecto muy ambicioso en el que la gritona esa se puso primero aunque no pueda diseñar ni un trapo de cocina. Invirtieron 50% y 50%, y Miuccia les hizo creer que irían en las ganancias 50% y 50%, pero... - sonrisa.
-¿Pero?
-Vamos, era Miuccia la que ponía todo el talento. Le hacía un favor a la bizca esta. Ella solo aportaba una modesta clientela base. Creo que Dark Desires va a tener mucho éxito y si Claire es lista logrará sacarla de la formula, no merece tener su nombre asociado al de Scada.
-¿Pero? - insistió Jeremy.
-Esto es lo divertido. Miuccia creyó que era más justo ir 80% 30% y cambiando el tipo de letra de los porcentajes en el contrato hizo que Cabuli lo firmara así. - sonreía de oreja a oreja - ¿Te das cuenta? Los números parecían 5 pero eran 8 y 3, y Cabuli aceptó ese trato.
-Muy ingenioso - concedió Jeremy - Pero Miuccia también consiguió que le pusieran una bomba.
-Ya. - Andrej se puso súbitamente serio - Miuccia creía que trataba con un patán codicioso, no con un asesino patán codicioso. - pausa - Descubre al que lo hizo. El asesinato de Miuccia no debe quedar impune.
-Lo descubriremos. - aseguró Jeremy - Dame tu dirección, por favor. Por si tenemos que volver a interrogarte.
-Pues a menos que tengas orden del juez, ahórrate la molestia. Saliendo de aquí yo no te conozco. Y más te vale respetar nuestro trato, poli gay. Porque como lo rompas tantito, te demando por violación y por el cuarto de millón de euros que vale mi collar.
-Tu informe se mantendrá anónimo, te lo garantizo. Puedes irte. - abrió la puerta.
Andrej cogió su bikini y su sostén y se encamino a la puerta con ellos en mano. Al llegar a ella se volteó dramático, como de pasarela.
-Adiós poli lindo. Espero que este viejo no te machaque demasiado.
Andrej se fue dejando un pesado silencio tras él. Fue Bassanio quien se atrevió a romperlo:
-Creo que la viuda celosa en combinación con la hermana ambiciosa puede resultar tan letal como la hermana ambiciosa con el socio furioso. - aventuró.
-O la hermana sola o el socio solo. - respondió más duro de lo que pretendió - O la viuda sola. O el amante. - gesticuló.
Bassanio lo miró con los ojos muy abiertos, sorprendido por el tono.
-O ninguno.
-Sí, lo siento. - se frotó las sienes. Eran demasiados sospechosos, y ahora, después de la información proporcionada, sentía que no podía descartar a ninguno. Había sido un error descartar a Claire. Quería confrontarla, preguntarle porque coño no le había dicho nada del hermano o de la fortuna que heredaba en su totalidad. Sentía un deseo físico de ir a verla, de sacudirla, de... Por eso no podía ir a verla. No era imparcial. - Bassanio, necesito que vayas e interrogues a la viuda, por favor. En persona; quiero que tomes nota de todo, su lenguaje corporal, la impresión que te da... - Bassanio asintió - Yo iré por el hermano.
Continuará...