JongKey: "Sex or Love?"
Capítulo 6: "Consecuencias"
El “osado” entró sin decir nada, y al cruzarse nuestras miradas, la de él se mostraba desinteresada, y pues cerró la puerta, con cautela, en lo que yo estaba paralizado observando la escena…
-¿Qué- qué haces aquí?-
Él me observó ahora de una manera fija… tragué saliva… comenzó a avanzar a paso firme hacia mí, y cómo si fuera una presa acorralada, me movía automáticamente hacia atrás, pero el respaldar del sofá me detenía, y mi cabeza, no estaba en sus cabales, para ordenarme pararme y salir corriendo. Pues estaba nervioso de una sobremanera, casi inexplicable.
-Necesitamos hablar, ahora mismo.-
-¡Ahora no JongHyun! ¡E-estoy indispuesto!-
¿Indispuesto? ¿¡INDISPUESTO!? ¿¡De verdad!? ¡OH DIOS, MÁTENME!
Me puse totalmente rojo, luego de decir aquel comentario tan apresurado, él vaciló un poco en su paso, al oír esa idiotez, pero continuó acercándose, y llegó a mi sofá, sentándose sin siquiera esperar a que le dijera algo, y pues, de todas formas no le iba a decir nada, pues mi cabeza, no estaba allí, mi raciocinio no estaba presente.
-Me importa un pepino, de cómo te encuentras, necesitamos hablar, urgente, aquí y ahora, necesito que las cosas queden claras tanto para ti, como para mí.-
En ese momento, tragué saliva y relajé mi cuerpo levemente. Miré hacia el suelo.
-No-no hay nada que hablar o aclarar… y-ya l-lo dije todo hoy, d-de una manera pa-para nada planeada…-
-Justamente de eso quiero hablar…-
Su tono de voz era firme, determinado, pero a la vez dulce… se acomodó mejor en el sofá, y quedó mirando hacia mis ojos, yo abracé aún con más fervor mi almohadón, y le desvié la mirada, no podía corresponderle, no en este momento.
-Y-Y justamente te acabo de decir, qu-que y-ya no tengo na-nada que de-decir…-
-Pues entonces, tú me escucharás a mí, ya que dices que ya has hablado, es hora de que me escuches, y más te vale que me prestes mucha atención.-
Aclaró su garganta, se acomodó aún más, y estaba girado totalmente hacia mi persona, con una rodilla encima del sofá, mi mirada “le escaneó” efímeramente.
Tragué saliva una vez más, y desvié la mirada. Entonces sentí, como el televisor se apagó, y el control, se colocó de una manera un poco brusca sobre la pequeña mesita, sin siquiera apartarme la mirada.
-Mírame…-
Aquella voz sonó tan autoritaria, que no pude, “desobedecer” y mi cuerpo se crispó ante tal acción, y a pesar de que aún no podía mirarle a los ojos, estaba “de frente” a él.
-¿Así que no puede ser posible que comiences a preferirme a mí antes que a JinKi?-
Habló inmediatamente luego de que me acomodé, y en ese momento, elevé la mirada rápidamente, por la sorpresa y nuestros ojos se encontraron y “conectaron” por unos momentos, momentos, que se efectuaron en absoluto silencio.
-¿Por qué?- En ese instante tuve la necesidad de desviar la mirada una vez más, pero me resultó imposible ahora, pues, él extendió su mano rápidamente y la posó sobre mi mentón, impidiéndome el hecho de que separase su mirada de la mía. -¿Por qué fui el culpable de que tu relación con él terminara?- Quise desviar la mirada con mayor fervor, pero me sujetó un poco más fuerte… -¿Por qué se supone que me tendrías que odiar, pero ahora no puedes?-
-Y-ya ba-basta…-
-No, escúchame, he dicho.-
Hice un intento por hablar, y pues aquellas 2 simples palabras, se me hicieron sumamente dificultosas el decirlas…
-Déjame decirte algo… yo no tengo la total culpa de todo lo que sucedió, también tu “fuiste parte del engaño” y si correspondiste y me “seguiste” la corriente, es porque entonces, no amabas tan fehacientemente como pensabas a “tu JinKi”, las cosas ya no iban del todo bien… y yo fui la excusa perfecta para terminar esa relación, ¿no es así?-
En ese momento, mi corazón se detuvo por completo, a la par de que mis ojos se abrieron de una manera inhumana.
-Sí, también esa fue mi reacción cuando me entere meses atrás que eras el “perfecto novio” del que tanto, mi mejor amigo hablaba. Pero eso ahora no es el caso… dime ¿Por qué te empeñas tanto en negar “tu agrado” hacia mi persona? En ese momento no nos conocíamos, ni tenía idea de que eras el novio de mi casi hermano, pues de lo contrario, otro hubiese sido mi trato… otro “hubiese” sido el final.-
En este momento, no sabía qué era lo que escuchaba, ¿de qué iba todo esto?, no lo sé realmente, pero cuando me percaté de la existencia de mi entorno, me di cuenta de que estaba absorto, observándolo, atento e hipnotizado por esos labios en movimientos…
-Key, no fue realmente mi culpa, ni la de nadie, simplemente nos dejamos llevar por el momento, yo… me dejé llevar, no te lo voy a negar, como tampoco te voy a negar que… a pesar de sorprenderme, me puse un poco feliz, cuando me enteré de que “ya no eran más pareja”-
En ese momento, al oír aquellas últimas palabras, mi ceño se frunció, pero él con su otra mano, “desfrunció” mi ceño, con su dedo índice, de una manera algo despreocupada.
-No, no me mires así, tengo derecho a sentirme así… ¿¡Es que acaso no entiendes lo que quiero decirte!?-
Yo estaba totalmente sin habla… no podía pensar alguna respuesta “coherente”. Por lo que nuevamente, mi rostro, optó por girarse ya de manera automática, pero nuevamente un fuerte agarre me impidió moverme.
-Pues bien, perfecto, no entiendes. Entonces te lo demostrare…-
Abrí mis ojos una vez más asombrado, por tales palabras, y cuando quise reaccionar, resultó, que ya tenía a JongHyun avanzando sobre mí, comencé a retroceder una vez más, pero no me fue posible.
-Tu reacción, me dice que quizás ya lo hayas entendido, pero debo asegurarme de eso…-
Ya encima de mí a gatas, sujetando aún mi mentón comenzó a acercar mi rostro al suyo, en lo que éste seguía el impulso. Como si se tratase de una serpiente encantada… pues así como “tironeaba” mi mentón y avanzaba hacia él, él también avanzaba.
A centímetros… o mejor dicho milímetros de mi rostro, de mis labios, para ser más específicos, habla una vez más, en lo que mi corazón estaba sufriendo de taquicardia, y mi sistema respiratorio, un paro…
-Sé que aún, tu cuerpo, tus labios, me recuerdan, me reconoces, y por eso estás tan furioso contigo mismo, no conmigo, porque no quieres aceptar que luego de “aquel polvo”, quedaste deseoso, de “otro reencuentro”.-
-¿¡Qué-qué de-demonios dices!?-
Pregunté más que nervioso, y totalmente paralizado…
-La verdad, nada más que la única y pura verdad… lo sé…-
Su voz se había tornado susurrante, y ¡endemoniadamente sensual!
-¡No! E-estás muy co-confundido, e-especu-culando co-cosas, qu-que no son ciertas, ¿a-aparte, tú que sabes de có-cómo me siento?-
Refuté desesperado, por culpa de aquel orgullo.
-Sé que me deseas, y eso es más que suficiente, es todo lo que necesito saber…-
Avanzó aún más, y pues…
-¡Patrañ-!-
Sus labios atraparon el inferior mío, al yo haber abierto la boca para gritar aquello con “rabia”. Pero pues no pude concluir con mi “diatriba”. Sus labios empezaron a moverse de manera insistente, sobre los míos, y mi maldito cuerpo… ¡mi maldito cuerpo, correspondió con “casi desesperación!”.
¡Esos labios! Volver a sentirlos, se sentía tan extraño… pues jamás pensé que los volvería a sentir, me había… “resignado”…
Pues, esa era la verd- ¡Esperen! ¿¡DIJE RESIGNADO!? ¿¡El maldito cara de cachorro apaleado, tenía razón!? ¡No! ¡NO! Y ¡NO! Eso era imposible, ¡aquello que sucedió en aquel entonces, fue por la mera culpa del maldito alcohol, yo no me emborraché a propósito para tener el valor de coquetearle, y mucho menos, me quedé con ganas de “una próxima vez”!
Cuando volví a la realidad, lo hice por culpa de unas manos, que comenzaban a recorrer mi cuello y pecho, mientras que la otra, mi perfil derecho, por sobre las prendas. Y yo desgraciadamente, ya me encontraba con mis manos envueltas alrededor de su nuca, fortaleciendo y lo peor de todo ¡“correspondiendo”! Aquel contacto.
Nuestras respiraciones bruscas, eran el sonido de fondo, ahora de aquella sala totalmente silenciosa, complementándose con aquellos sonidos “obscenos” producidos, por el contacto desesperado de nuestros labios…
“La bestia, había despertado en mí… con una repentina ‘sacudida’ de todos mis sistemas internos…”
Sus manos, ahora habían comenzado a colarse debajo de mi prenda superior, y al haberse relajado por sobremanera mi cuerpo, estaba, “desgraciada y prácticamente” entregado a él. El almohadón había caído al suelo, y mi cuerpo, se contorsionaba, se erguía, en busca de más contacto, actuaba prácticamente solo. Y él no tardó en “complacerme”, su cuerpo, se pegó un poco más al mío, y sus labios, ahora no estaban en los míos, sino en mi cuello.
Mis jadeos comenzaron a hacerse presentes, mi cuerpo comenzaba a vibrar y mi piel comenzaba a erizarse, mis manos comenzaban a recorrer también su cuerpo, a volver a sentirlo, a reconocerlo centímetro a centímetro.
Ya no era consciente de mis propios actos, mi cuerpo respondía automáticamente al contacto y a las sensaciones que sus labios y caricias, provocaban en mi maldito cuerpo, totalmente cegado por el “placer”.
Sus movimientos de caderas, también comenzaron a sentirse, y mientras mi cuello estaba siendo devorado, mis manos, se encontraban enredados y tironeando sus cabellos castaños, como así también despeinándolo.
Sus labios, comenzaban a dejar marcas en mi delicada y pálida piel, y sus jadeos también comenzaban a hacerse presentes…
Todo el ambiente comenzaba a coger temperatura. El aire, comenzó a hacerse cada vez más cálido y húmedo.
Mi playera comenzaba a desnudar parte de mi piel, y aquellas manos, “magistrales” comenzaban a dejar un “rastro incendiario” por cada centímetro de mi piel que éstas pasaban, mi cuerpo, comenzaba a encenderse lentamente…
POV JongHyun
Mi cuerpo había abandonado mi raciocinio, mi mente y cuerpo, ya no eran uno solo, y mis “instintos” comenzaban a dominar a mi cuerpo, estaba siendo, “abducido” “obnubilado” por aquella presencia tan remilgada, bajo mío.
El solo hecho de tenerlo bajo mi cuerpo, comenzando a gozar del momento, me encendía totalmente, tanto tiempo deseando esto, tanto tiempo, queriendo, “volver a tenerlo” entre mis brazos. Y ahora finalmente lo lograba, sé que quizás estaba forzando las cosas, pero realmente ya no podía más, escucharle decir todas aquellas cosas, que me dijo hoy en la mañana, me han servido, para interpretar que tenía “luz verde” con él. Y al parecer, no me había equivocado… su playera, había desaparecido de su cuerpo ahora, y del mío… estaba a punto de desaparecer también.
Ambos nos encontrábamos ahora con el torso desnudo. Nos observamos, por unos efímeros momentos, pero para mí, parecieron, eones…
Nuestros labios, se complementaron salvajemente una vez más, y entraron al juego, nuestras lenguas, recorriendo cada rincón, de aquella húmeda y cálida cavidad.
Mis impulsos, mis emociones me habían dominado por completo, ahora solo quería poseerlo, y hacerlo total y absolutamente mío, hacérselo de una forma que jamás pudiese olvidar este momento… por lo que sin muchos miramientos, me dirigí velozmente hacia su pantalón, necesitaba arrancárselo, y hacerlo mío.
POV Key
Segundos después de que nuestros torsos se desnudaran, y nuestras bocas y lenguas se complementaran de una manera inexplicable, comencé a sentir un poco diferente a JongHyun, pero el “placer” ese hormigueo anulaba mi raciocinio.
Hasta que en un momento, siento como coloca su mano en mi pantalón con algo de agresividad y desesperación, y en ese momento, no sé porqué, la imagen de JinKi destrozado, inunda mi mente restringiendo absolutamente todas mis sensaciones…
Atiné a separarlo de cierta manera brusca y me quedó mirando mientras jadeaba realmente con gran excitación.
-¡JongHyun para! ¡N-no po-podemos ha-hacer esto!-
-¿¡Por qué!? ¿¡Por qué, tienes novio!? ¡No me jodas Key! Sabes perfectamente que es mentira.-
Contestó algo colérico, y para mi sorpresa, quitó mis manos de su pecho, y las aprisionó con fuerza por encima de mi cabeza y continuó con aquellos besos que ya no me parecían “pasionales” sino salvajes, bruscos y violentos, comencé a asustarme.
-¡JongHyun suéltame! ¡Te he dicho que no! ¡NO!-
Comencé a chillar, en lo que mi garganta se desgarraba por la elevación de mi voz, y al final sentí que una de mis cuerdas vocales se cortaría, al sentir, como se deshizo de mi pantalón de un tirón algo brusco. ¿¡Acaso esto se transformaría en una violación!?
-¡JONGHYUN! ¡JongHyun reacciona! ¡Tú no eres así!-
-¿¡Tú que sabes cómo soy!? ¿¡Cómo sabes que no he estado todo este tiempo fingiendo ser amable contigo para llegar a esto!?-
-¡NO! ¡Tú serías incapaz de algo así! ¡Eres amigo de JinKi!-
Comenzaba a desesperar, mis lagrimas ya “empañaban” mis ojos y no había parado de retorcerme para evitar cualquier contacto “indeseado” pero él era más fuerte que yo…
-¡Quédate quieto! Sé que al final te terminará gustando, y gozarás, disfrutarás y gemirás tan lascivamente como aquella vez, que me dejaste totalmente fascinado…-
-¡JONGHYUN POR DIOS! ¡YA PARA ESTA LOCURA! ¡ME HACES DAÑO!-
-¿Te hago daño? ¿¡Y tú!? ¿¡Todo el daño que me has estado haciendo desde que te conocí por nunca corresponderme y siempre haciéndome presenciar todas esas escenitas que tenías con JinKi!? ¡Ni dios te podrá ayudar ahora!-
Aquellas palabras me habían asustado demás, en verdad parecía que estaba siendo protagonista de una violación… mis muñecas comenzaban a doler y por consecuente, mis brazos se comenzaban a adormecer por culpa de la mala circulación de la sangre…
Pero mi corazón casi me provoca un paro cardiaco, cuando sentí como con la otra mano libre, me tironeaba mi bóxer, dejando al descubierto, aquel miembro que ya no estaba “reaccionando” al contrario, aquella “bestia” que creí había despertado, había desparecido por completo, ante la actitud de JongHyun…
-¡NO, ALÉJATE!-
Grité con mi mayor desesperación y con ello, hice un movimiento que ni yo supe cómo ni cuándo, pero provocó que JongHyun cayera hacia el costado, encima de la mesita ratona de vidrio allí cerca del sofá, por supuesto que esta se destrozó en millones de cristales, y JongHyun ahora estaba totalmente inconsciente.
¡MIERDA LO MATE! Me dije a mi mismo, sintiendo una gran punzada en el corazón totalmente dolorosa… desesperé a más no poder y mi mente se bloqueó por completo, lo primero que atiné a hacer por instinto es a vestirme… y luego miré hacia todos lados, estaba paranoico… ¿¡Y si lo maté!? ¡Iré preso, se enterarán de mi orientación y me harán vivir el mismísimo infierno si no me mataban mientras dormía! ¡NO! ¡De ninguna manera!
-¡JongHyun! ¡JONGHYUN! ¡POR FAVOR, RESPÓNDEME MIERDA! ¡JongHyun!-
Comencé a abofetearle la mejilla con clara desesperación, había algo de sangre entre los cristales cosa que me alteró aún más, toqué su cabeza, con mis manos más temblorosas que nunca, y por suerte allí no se había hecho daño, o al menos no uno que provocase sangrados externos… pero me preocupaba aquella sección por dentro… ¿¡Sí tenía una hemorragia cerebral, o interna!? ¡MIERDA QUE HAGO! ¿¡Llamo a la ambulancia!? ¡No, porque de seguro me peguntarán como pasó! ¿¡A la policía!? ¡NO, MENOS!
-¡MIERDA JONGHYUN, DESPIERTA CARAJO!-
Intenté tomar mi móvil y resignarme a llamar a la ambulancia, pero mis manos temblaban tanto, que el móvil cayó de mis manos, y se hizo añicos en el suelo, tenía arreglo, pero con el temblor de mis manos y mi corazón acelerado a más no poder, no era lo más “productivo”, ponerme a repararlo allí.
Le escuché proferir un pequeño sonido, como si se tratase de un gemido, y me alteré aún más, tenía un frio realmente insoportable, pero estaba sudando y de seguro estaba mucho más blanco que de costumbre.
Sólo atiné a arrodillarme entre todos los cristales, y elevarle la cabeza con un cuidado increíble, a comparación de mi desesperación.
No sé cómo fue que logré luego, quitarlo de allí de todos los cristales, pues al notar que aún seguía vivo, un atisbo de alivio apareció en mí, como si fuera un bálsamo.
Él seguía profiriendo sonidos de “lamentos” y dolor, cosa que resultaba algo aterrador ahora… por lo que como pude, busqué algo para quitarle los trozos de cristal que se le habían incrustado en aquella espalda desnuda…
No quería tener más problema de los que ya tenía, por lo que opté por prestarle yo mismo, “los primeros auxilios” o por lo menos un intento de ellos, aunque sabía que no era lo más adecuado, pero era en lo único en lo que podía pensar… por el momento.
Luego de quitarles los trocitos, que gracias a Dios no eran muchos, ni estaban tan profundos incrustados, limpié todos aquellos demás cristales, en conjunto con los “ensangrentados” en verdad que esto parecía una escena del crimen, un intento de homicidio…
Las manos me temblaban aún, ya no en gran medida como antes, pero seguía temblándome igual.
Las horas pasaban y yo estaba que ya no tenía uñas, pues, el nerviosismo crecía y crecía, al no ver que él despertase, por completo luego de aquel golpazo…
Tuve el impulso más de 3 veces de llamar a la ambulancia, pero luego me arrepentía a último momento, estaba hecho un manojo de nervios, un cobarde... y encima un enmarañamiento de sensaciones y pensamientos, me hacían doler la cabeza…
¿¡Cómo es posible que esté de esta manera, así tan preocupado, por este… “hombre” que estuvo a punto de violarme!? Pues estaba más que seguro que esas eran sus intenciones, y no sé por qué razón, se comportó de aquella manera.
Estuve a punto de llamar a JinKi también varias veces… pues era el primero que se me venía a la cabeza, pero luego al igual que con la ambulancia, me arrepentía a último momento.
Y al no ver reacción alguna en él a pesar de que le hubiese golpeado suavemente, y le hubiese colocado un paño con agua fría en su frente, comencé a preocuparme una vez más, y sin pensarlo recordé una conversación que tuvimos, a los semanas siguientes luego de mi esguince, hace ya unos 3 meses si no mal recuerdo…
//FLASHBACK//
-Bien, felicidades joven Kim, su tobillo se ha recuperado de las mil maravillas…-
-Gracias Doctor…- Asentí simplemente.
El médico sonrió, al retirar todo lo que en mi pie había y me palmeó la espalda, JinKi estaba allí a mi lado, JongHyun… no. Pues según él, tenía un asunto que atender de urgencias, y extrañamente aquella excusa, me había logrado molestar un poco, y es más, hasta me sentí celoso de que “hubiera algo más importante que yo”, pero luego me regañé a mí mismo por pensar de esa manera, cuando había sido yo, quien había estado “insistiendo” para que se encargaran de sus propios asuntos, y que no exageraran tanto con “los míos”.
JinKi se negó rotundamente, por eso es que estaba conmigo ahora y JongHyun al parecer algo contrariado “se dio por vencido” y decidió hacer sus cosas… pues realmente pareciese que fuese urgente…
Ya fuera del hospital la voz de JinKi gritándome con cariño, para que le prestase atención, me sacó de mi “ensoñación”.
-¿¡Qué!? ¿Qué decías?...-
-No, aún nada, ¿qué es lo que estoy por decir? Es la pregunta correcta.-
-¿Qué sucede?-
Hablé ya un poco más alarmado, su tono era serio, pero el “cariño” en su voz no desaparecía por completo…
-Mejor vayamos a otro lugar más tranquilo…-
Simplemente callé, y asentí, mi corazón ya estaba comenzando a acelerarse… ¿Qué era eso “tan grave” que tenía que decirme que “ameritaba un lugar más tranquilo”?
Llegamos a uno de los parques más alejados del bullicio del centro de la ciudad, y cuando estaba desprendiendo mi cinturón para bajar y dirigirme a la cafetería que había en frente, él me retiene colocándome una mano en mi brazo.
-No, espera… será mejor que te lo diga aquí…-
Aquello ya me estaba poniendo de los nervios…
-¡Por Dios santo JinKi! ¡Habla de una puta vez! ¡Me estás poniendo de los nervios, con tanto misterio!-
Estallé sin pensarlo… y luego de que él me dedicó una mirada algo “lastimera” me arrepentí por completo de haberme comportado de esa manera y decirle aquello, pero realmente estaba de los nervios.
-Pues bien… verás, es más que nada una advertencia…-
Yo le miré con algo de enfado dándole a entender claramente lo que pensaba “¿¡Para esto me has traído aquí y me has dado 5 millones de vueltas al asunto!? ¿¡Para advertirme de algo!?” Pero él se adelantó antes de que pudiera profesarlo en palabras audibles.
-¡Antes de que te alteres, déjame explicarte!-
Me tragué toda esa cólera, cerré mis ojos, miré hacia la alfombra del carro, y suspiré, en un intento por controlarme y relajarme, le miré ahora más relajado.
–E-es sobre JongHyun…-
Nuevamente le miré y esta vez mis ojos prácticamente se desorbitaron ante el impacto de aquellas 3 palabras… que incluían aquel “nombre” que ya había comenzado a causar estragos y corroer todo mi ser, todo mi interior…
-¿Qu-qué sucede con él? Habla.-
-Aléjate de él…- Habló serio, sin rodeos esta vez, sorprendiéndome aún más… no pude decir nada al respecto, pues las palabras se quedaron atoradas en mi garganta. –He querido decírtelo hace un buen tiempo, pero como no nos dejaba ni a sol ni a sombra, no encontraba el momento adecuado, y pues… es ahora o nunca…- Continuó hablando ante la falta de respuesta por mi parte, estaba realmente impactado ante esas palabras… -Así que quería advertirte sobre él, ¿conoces el dicho “Las apariencias engañan”?-
Yo asentí algo dubitativo… aún no salía de mi asombro, y aquella seriedad que iba adoptando JinKi cada vez más “Determinada” me comenzaba a asustar… ¿Acaso era un asesino a sueldo, un vendedor de drogas o qué carajos para que me venga a decir esto? Era lo que pensaba.
-¿Po-por qué di-dic-?-
-¿Por qué digo eso de JongHyun, cuando resulta que él es mi amigo?- Asentí una vez más idiotizado… no podía procesar palabra alguna... –Justamente, porque “es mi amigo”, es que lo conozco mejor que nadie, y “soy inmune” a él, pero para ti… él-él es peligroso…-
-¿¡Por-por qué!?-
-Ya te lo dije, las apariencias engañan, y al tu haberte vuelto un poco más cercano a él, hace que mi instinto “protector” actué sobre mí, y te avise de esto… él es peligroso… te-te puede lastimar…-
-¿E-en qué sentido?-
Hablé aún no sé cómo, estaba totalmente desconcertado, no daba crédito a lo oía. Mi cuerpo había comenzado a temblar levemente, ¿acaso era el mismísimo diablo?...
-En todos Bummie… sé que ya no tengo derecho a meterme en tu vida, pero como buenos y mejores amigos que somos, me siento con el deber de advertirte, aléjate de él, por favor aléjate y ve con cuidado… no confíes tan rápido en las personas, podría resultarte perjudicial, podrías… terminar llorando, nada más, sólo eso, aléjate de él…-
Aquellas palabras repetidas tantas veces, y ya en un tono suplicante, me hizo hervir la sangre, ¡Yo no quería alejarme de él, me negaba a hacerlo! Y por esa misma razón es que me enojé y enfurecido le grité.
-¡Son mentiras! ¡Son todas puras injurias de tu parte! ¡Lo que sucede es que estás celoso de él! ¡Y como no puedes verme feliz con nadie más que no seas tú, me dices todas estas cosas! ¡No te creía capaz de caer tan bajo JinKi! ¡Cómo aún me amas, te corroen los celos y la rabia y la envida que yo pueda ser feliz con otro! ¿¡Es eso!? ¿¡Es porque aún me amas, que dices todas estas injurias sobre JongHyun, cierto!? ¡Por Dios! ¡Es tu amigo! ¡No puedo creer que le hagas esto! ¡Lo nuestro terminó, acéptalo!-
Exclamé sin pelos en la lengua, y al decir todo aquello vi como algo en la mirada de JinKi cambiaba… se ensombrecía, pero no bastándome con ello seguí contra-atacando.
-¡Además! ¡No veo a que viene toda esta sarta de estupideces! ¡Si ya estás saliendo con alguien! ¿¡Tú si puedes rehacer tu vida, pero yo no!?- Él abrió sus ojos a más no poder, y pude observar cómo se cristalizaban levemente… -¡SI! ¡ASI ES! ¡TE VI! ¡TE VI CON ESE NIÑATO DE LA CLASE DE DANZA! ¡LOS VI MUY “ACARAMELADOS” EN MEDIO DE LA PUTA CAFETERÍA! ¡Y NO UNA, SINO VARIAS VECES YA! ¿¡ASÍ QUE PORQUÉ NO TE VAS A LA MISMÍSIMA MIERDA CON ESE ESTÚPIDO NIÑATO Y ME DEJAS HACER MI VIDA DE UNA PUTA VEZ, CON JONGHYUN, CON EL CHICO DE ATLETISMO O QUIEN SE ME CANTEN LAS PUTAS GANAS!?-
Su cara no salía del asombro, mientras yo le iba soltando toda aquellas barbaridades, que me fluían por la mera rabia, de haberlos vistos juntos en la cafetería, ya más de unas cuantas veces… y aunque no quisiese aceptarlo… creo que todo aquello que le reprochaba. Era al revés…
Salí de allí desabrochando el cinturón como pude, con mis manos temblando a más no poder por la ira que me invadía, y con el rostro supongo más rojo que un tomate, por culpa de aquel mismo sentimiento.
-¡BUMMIE, ESPERA!-
Gritó él al reaccionar, con el sonido de la puerta abriéndose. Se la cerré en la cara y desde afuera le grito.
-¡JAMÁS EN TU PUTA VIDA ME VUELVAS A LLAMAR DE ESA MANERA! ¡TÚ Y YO, YA NO SOMOS ABSOLUTAMETE NADA, PARA QUE ME LLAMES ASÍ! ¡NO QUIERO VERTE NUNCA MÁS! ¡VETE CON TU ESTÚPIDO BAILARÍN Y MÓNTATELO COMO LA PUTA QUE DEBE DE SER! ¡TE ODIO!-
Y me fui corriendo de allí, rumbo a… a ningún lugar. Mis lágrimas habían comenzado a obstruir mi visión, y choqué con alguien, quien soltó una gran cantidad de imprecaciones, que si no fuera porque seguí corriendo sin prestarle atención, estoy seguro de que me hubiese dado una buena paliza.
Llegué a otro parque que estaba aún mucho más desolado que el anterior y me dejé caer, en el primer banco que vi vació, y comencé a llorar como una niña… todo aquello, había sido mucho más doloroso de lo que pensaba.
Pues ahora me daba cuenta, de lo mucho que quería a JinKi, y de lo dependiente que me había vuelto de él sin darme cuenta, y al encontrarme con que “ya no era merecedor” de su atención al 100% me cabreé como nunca, me sentí traicionado. Cuando sabía a la perfección, que no tenía ni siquiera el derecho de sentirme así, cuando yo había sido el que había cagado todo desde un principio.
Pero realmente mi personalidad era muy compleja, y la verdad es que no sé como ha hecho JinKi durante tantos años para soportarme, sin nunca haberme levantado la voz… pues desde la secundaria que él “está a mi lado”.
El suponer “ya no tenerlo más” era lo que más me afectaba, “el que me lo hayan quitado” era lo que más me dolía. Pero debía ser por primera vez “maduro” comportarme como un joven-adulto, y aceptar las cosas…
Pero me era difícil, ahora que estaba un poco más calmado, y recordaba toda esa cantidad de barbaridades e insultos que él se llevó sin razón alguna, pues él no tenía la culpa de “querer seguir adelante”. La culpa era mía, “al no querer dejarlo ir del todo”…
Una lluvia se aproximaba en aquel día, y yo aún seguía sentado en aquella banca, totalmente solo, con mi dolor y angustia. Pero aquello no duró mucho, pues quien sabe cómo, me encontré con un JongHyun parado frente a mí, le miré extrañado, y luego de reparar en que era él, atiné a limpiar mis lágrimas rápidamente, ¡NO! ¡No debía verme llorar!, pero no me dejó hacerlo, tomó mis manos, las bajó, se sentó a mi lado, y envolviéndolas con las suyas, me preguntó que me sucedía, con aquella mirada de preocupación… y pues no pude aguantarlo más y nuevamente me derrumbé en un llanto hasta ese entonces “sin sentido” para JongHyun de seguro, hasta que luego de calmarme levemente, le comenté mi discusión con JinKi, obviamente no les expliqué las razones, excusándome de que no me apetecía hablar, y como nunca, él no insistió y me acompañó hasta mi casa…
Se comportó realmente muy amable y comprensivo, ¿cómo era posible que alguien como él, “tuviera maldad”? Y el “confirmar” que JinKi me mintió, me dolió muchísimo, ¿realmente lo había hecho, para hacerme solo daño? ¿Se estaría vengando de mí?... No, JinKi no es alguien que posea maldad en su corazón… pero “sus mentiras”… ahora me hacen dudarlo…
Luego de ese día, JinKi no volvió a acercarse a mí, si nos cruzábamos, nos saludábamos de una manera casi inaudible y por mera obligación… él comenzó a juntarse con aquel “bailarín” de ese día en adelante, y yo “me quedé con JongHyun” intentando no pensar en nada, de no pensar en JinKi”…
//FIN DELFLASHBACK//
Y recién ahora… a casi 4 meses de aquella discusión, comenzaba recién a “recuperarme” de ella… tan solo un poco, pues era como si hubiese sido… “nuestra segunda ruptura”, no creí que JinKi me produjera esta clase de sentimientos, ni tampoco tenía idea que “le apreciaba” tanto.
-Key… Key…-
¿¡La voz de JongHyun!? ¡Despertó! Elevé la mirada asombrado y allí estaba él, mirándome con…