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JongKey/OnKey: "Sex or Love?" por ZaffireHeart

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Notas del capitulo:

QnQ No merezco vivir!!! D: me he demorado una eternidad!!!! pero ustedes tranquilas, que hasta que no le publique toda la historia no me voy a suicidar por mi irresponsabilidad Dx


La cosa es que tengo el re sueño, pero no podía irme a dormir sin darles el capítulo que se merecen D:


Así que:


LET'S GO! A Lees! ♥ n.nv

JongKey: "Sex or Love?"


Capítulo 7: "¿Daños Colaterales?"


[…] Y recién ahora… a casi 4 meses de aquella discusión, comenzaba recién a “recuperarme” de ella… tan solo un poco,  pues era como si hubiese sido… “nuestra segunda ruptura”, no creí que JinKi me produjera esta clase de sentimientos, ni tampoco tenía idea que “le apreciaba” tanto.


-Key… Key…-


¿¡La voz de JongHyun!? ¡Despertó! Elevé la mirada asombrado y allí estaba él, mirándome con suma preocupación, pues sin que me diera cuenta, mis ojos estaban llorosos por aquellos recuerdos… y también por aquella situación que tanto me asustó.


-¡JongHyun! ¿¡Estás bien!?-


Cuestioné por acto de reflejo invadiendo “su espacio personal”, él se asombró un poco, y casi sin voz preguntó.


-¿Yo? E-eso creo… ¿Pe-pero tú lo estás?-


 


POV JongHyun


Cuestioné realmente preocupado, pues lo último que recuerdo aunque aún un poco borroso, es oírlo gritar desesperado que parase “esa locura”, y luego de eso, sentí un dolor insoportable, y luego más nada, solamente a lo lejos el eco de un Key, totalmente desesperado, gritando mi nombre como si no hubiese mañana, quería despertar, levantarme, pero mi cuerpo se encontraba inerte en aquel momento.


Él ante mi pregunta, tardó un poco en responderla, pero solamente asintió. Y ya con solo el hecho de que se lo haya pensado, algo me decía que no andaba nada bien…


-Puedo ver en tus ojos que mientes Key… pero si es por lo que yo casi te hago, me disculpo de las mil y una manera posible… no sé que me sucedió. Mi autocontrol, se desintegró junto con mi raciocinio… lo siento en verdad, no era mi intención asustarte así de esa manera. No sé qué es lo que hiciste para detenerme, pero te lo agradezco… lo merecía por bestia…-


Sonreí levemente, con un sentimiento de derrota… y me incorporé de aquel sofá, mi espalda dolía horrores y mi cabeza también, él se apresuró a ayudarme y no paraba de decir, “con cuidado”.


Una vez que me incorpore, le miré una vez más. -¿Me dirás que es lo que sucede? ¿No es por mi culpa cierto?...- Cuestioné preocupado, pero manteniéndole aún la mirada a aquellos ojos felinos que tenían un brillo particular ahora, debido a su estado…


Su mentón comenzó a temblar, y su boca a “arquearse” hacia abajo… hasta que el llanto finalmente salió a la luz, y se tiró prácticamente en mis brazos, y yo pues sin dudarlo… los rodeé con él.


-Lo siento… lo siento en verdad, fui una bestia… no sabes cómo me arrepiento de todo lo que te dije e hice, no merezco tu perdón, pero aún así… lo anhelo, lo imploro.-


Le apresé aún más entre mis brazos, pues sentía que si aflojaba tan solo un poco, él desaparecería  de mi vida para siempre, se iría, se me iría de las manos, algo que realmente no estaba dispuesto a hacer…


-N-no, no e-es por-por tu-tu cu-culpa, bu-bueno si un poco, e-es ta-tan so-solo que-que recordé la-la pelea que tuve con JinKi, y-y le-le extraño…-


“Le extraño” en mi interior iba despertando un volcán a punto de erupcionar, con tan solo esas 2 palabras, dichas con tanta pena, sintiéndolo en verdad, me habían despertado unos celos inimaginables… una sensación de cólera incontrolable. ¡Estoy aquí! ¡Yo soy quien te está abrazando, quien te está conteniendo! ¿¡Y te atreves a pensar en JinKi!? ¡No! ¡Él no te quitara de mis brazos nuevamente!


-Jo-Jonghyun no, no pu-puedo re-respirar…-


Oí entre sollozos volviendo un poco más en mí, y le aflojé tan solo un poco, disculpándome. Él solo asintió y continuó sollozando, mientras yo acariciaba su cabello y mordía mi labio en claro gesto de ansiedad, pues, no sabía que decirle, justo ahora, es dónde menos quiero nombrar a “JinKi”.


-No te preocupes Key… no lo necesitas… me-me tienes a mí ahora…-


Hablé de manera muy egoísta, debo admitirlo, pero en verdad que no pude evitarlo, JinKi comenzaba a ser una piedra en mi zapato.


Él hizo fuerza un poco hasta que logró librarse de mi agarre y me miró a los ojos, de cierta manera algo iracundo.


-¿¡Có-cómo pu-puedes decir eso!? ¡E-es t-tú amigo también!-


Yo le miré algo sorprendido, no me esperaba que aún a pesar de tener los ojos rojos, hinchados y aún llorosos, se atreviese a “defender” a la causa de su actual estado.


-No, no lo es… si se atrevió a hacerte llorar, no merece ni siquiera ser tu amigo Key… ¡Tú no mereces esto!-


Intenté controlar mi egoísmo y rabia, pero la situación comenzaba a exaspérame por completo. Ya, a estas alturas, me superaba todo conflicto referente a… a “él”.


-¡Tú también me has hecho llorar y no por eso te estoy echando de mi casa!-


Me gritó, dejándome helado, cuánta razón tenía… limpió sus lágrimas un poco, con el puño de su camiseta, y se puso de pie…


-Se-será me-mejor que llame a un médico para que te revise la cabeza… te has dado un golpazo muy fuerte, y por eso dices estas cosas…-


Se giró sobre su eje, y se dirigió hacia el teléfono inalámbrico. Yo le miré algo asombrado, en verdad iba a llamar.


Yo, no sé porqué entré en desesperación, y poniéndome de pie con la rapidez de un lince, me fui hasta él, ignorando aquel tirón dolorosamente puntiagudo, en diversos puntos de mi espalda. Le quité el aparato de las manos, colgué, y lo volví a colocar en su lugar, mientras gracias a mi movimiento le había arrinconado una vez más, esta vez contra la pared, y él estaba petrificado.


-O-oye, me-me e-empiezas a-a asustar co-con tu-tus a-actitudes…-


-Lo siento, no eran… mis intenciones.-


Dije con prisa, con una voz insinuante, sin quitarle la vista de sus labios, para luego tomarlos con voracidad, sin su consentimiento… sus labios y cuerpo al principio rielaban, pero luego, terminó por claudicar ante mis “incitadores” movimientos, y nuevamente, dieron inicio aquellos besos desbordantes de pasión sumergiéndome en la vanagloria.


Ignoré una vez más, aquel tirón en mi espalda, y sólo le aprisioné aún más contra la pared, sus manos dudosas, terminaron por posarse por encima de mis hombros, logrando así una posición mucho más cómoda para mí.


Vehementes besos, eran los que nos otorgábamos ahora uno al otro.


Y nuevamente, inconscientemente, comencé a llevarle a rastras hacia el sofá, en dónde calló y yo me hinqué segundos después, de una manera un poco más lenta y relajada…


-Si-si de-deseo que te-te de-detengas… de-detente por favor…-


Habló dificultoso, pues entre beso y beso, yo no le dejaba hablar, sonreí sobre sus labios y le susurré de una manera realmente dulce y “ronroneante” por así decirlo.


-Cla-claro que sí, lo anterior no volverá a suceder, pero… ¿Tú en verdad…?- Me deslicé hacia su mandíbula y le besé con parsimonia. -¿… Quieres que…?- Bajé a su cuello ahora, besándolo con la misma parsimonia, haciendo de aquel “beso” uno realmente sensual y sensitivo, para luego pasarme al lóbulo de su oído. -¿…Me detenga? ¿En verdad lo quieres?- Sonreí liberando mi hálito en su oído que a estas alturas sabía que era altamente sensible.


-Aan- Un gemidito, dulce, suave, “aniñado”, fue lo que salió de aquella fascinante boquita. Yo continué besando con parsimonia, todos aquellos puntos que yo creía eran sensibles, y al parecer funcionaba, pues segundos después su “trémulo” cuerpo, me estaba indicando que así era. –No~ no por ahora, no te detengas…- Habló rindiéndose a las sensaciones que mis labios y caricias con los mismos, despertaban en él…


-Ese es mi niño… ese es MI GATITO…-


Dije nuevamente con una voz que rezumaba lujuria y amor a la vez, enfatizando aquellas últimas palabras, para luego morderle suavemente el oído, haciendo que su cuerpo se crispara por completo. Sonreí satisfecho, “revolcándome” en mi vanagloria una vez más, y continué con aquello que no había podido terminar por haber estado fuera de mí.


 


POV Key


Su voz, sus caricias, sus besos, todo el conjunto, todo él, hicieron que rápidamente claudicara ante cualquier resistencia que pudiera oponer… y es que ya, ya no tenía más nada, estaba totalmente expuesto a él, me sentía desprotegido, pero a la vez libre… de ya no tener que fingir más frente a él, pero… de todas maneras, eso, no quitaba el hecho de que me sintiera realmente expuesto.


Aunque con aquellas sensaciones que despertaban en mí, por causa de aquella voz que “trémula” se colaba por mi oído, despertando oleadas y más oleadas de placer puro.


“Ese es MI GATITO” había dicho, y les juro que jamás creí que el que él me llamara así, con aquella voz ya algo ronca que rezumaba sensualidad, me hiciera enloquecer tanto, y querer gritar a los 4 vientos… o mejor dicho, GEMIR a los 4 vientos, su nombre…


Estaba totalmente entregado a él, mi cuerpo se “quebraba” en forma ascendente con tal de hacer mayor contacto físico con el suyo.


Las prendas poco a poco, comenzaron a desaparecer, con una sensualidad inimaginable, en verdad que ahora era otro JongHyun. Ya no presentía esa desesperación, esas ansias que me asustaron, al contrario, ahora el ansioso era yo.


Me rendí ante aquel pecado imperdonable, pero a veces, los instintos, pueden más que la razón, somos “animales” también, y no siempre podemos controlar nuestra “naturaleza animal”. Mi cuerpo lo aclamaba, mis labios lo saboreaban, y mis manos lo deseaban.


-JongHyun… JongHyun amns…-


Nada en mi mente podía volverme la cordura que necesitaba, pues en el fondo sabía que aquello no estaba bien, lo sabía, pero ¿Por qué no lo estaba? Yo no tenía a “nadie” a quien “rendirle cuentas” ahora, sólo éramos JongHyun y yo…


 


Mi mundo se distorsionó por completo, ahora estaba totalmente sumergido en aquel “nirvana” en dónde sólo él y yo estábamos. Profesándonos, nuestro “amor prohibido” una vez más, como aquella vez. Pero como aquella vez, mi raciocinio, no pudo contra el placer, que las manos, los labios, y las palabras de JongHyun, me provocaban.


No sé cómo explicarlo, pero sólo con él, mi cuerpo vibraba, como hacía mucho tiempo no lo hacía, entre nosotros había una atracción demasiado fuerte, como para ignorarla o reprimirla, por lo menos de mi parte, pues, al igual que dos imanes, que al principio se repelen, y luego se transforma en algo inherente, luego de ejercer un poco de presión, Era en la etapa en la que estábamos ahora… nada, podía separarnos. Estábamos encarnizados el uno con el otro.


-Gatito~ e-eres tan sexy, te vez tan sexy, debajo de mí absolutamente desnudo y sonrojado, eres una joya maravillosa de admirar y anhelar…-


Cuando reparé en sus palabras, me observé a mí mismo… ¿¡Có-cómo!? ¿¡Cu-cuando él me había despojado de absolutamente todas mis prendas!? ¿¡Y cuándo había yo, colocado mi mano descaradamente en su miembro mientras al parecer lo estimulaba!?


Mierda… ¿tan absorto en mis pensamientos, en las sensaciones, estaba que no noté absolutamente nada de esto?


-Jo-Jong-


Gemí su nombre, y atiné a quitar mi descarada mano de allí, pero él en un movimiento veloz, me detuvo, y me “obligó” a dejar la mano allí.


-No… no la quites, lo haces endemoniadamente bien, ¿acaso no lo sientes?-


Me sonrió con dulzura, y en ese momento algo sorprendido y sonrojado a más no poder, llevé mi atención a mi mano, y sentí, sentí algo que estaba despertando de su “letargo” y que comenzaba a tomar “firmeza”, preparándose, para mostrarse luego “refulgente” seguramente ante mis ojos…


Pensar aquello, me hizo sentir un calor repentino en mi interior, que hasta creí incinerarme dentro de mi propio cuerpo… era un calor realmente abrumante, asfixiante. Tanto que comencé a sudar de repente.


-Así es gatito… así has logrado que me ponga…-


Sonrió nuevamente, sacándome de mis pensamientos “insanos” y es que pues, esa sonrisa, y esa manera de decirme “gatito”, me enloquecían, ya no me molestaba en lo absoluto que me dijera así, al contrario, me encantaba, y es por eso, que antes me negaba a que me llamase de esa manera, pues, cada vez que lo hacía, realmente me “derretía”.


Él volvió a tomar mis labios, obligándome a “permanecer allí” en aquella sala, en aquel sofá, en sus labios… y pues mientras le correspondía, comencé a intentar deshacerme de aquellos pantalones jeans negros que ya se me hacían excesivamente molestos.


Una vez que logré desprender y bajar la cremallera, él se dirigió a mi cuello, anulándome una vez más… gemí sin control alguno. Hasta que él de repente se quitó de encima, yo me le quedé mirando, de cierta manera “desesperado” ¿¡No podía dejarlo aquí cierto!?


Él al salirse del sofá y quitarse el pantalón, me miró y me extendió una mano, la cual yo miré con intriga, incertidumbre.


-Vamos a la cama, será mucho mejor.-


Me sonrió esta vez con sus claras “intenciones sucias” en el rostro, a lo que yo para mi sorpresa le correspondí y me “alivié” al saber de que esto continuaría.


Nos dirigimos a mi habitación, y apenas cerramos la puerta detrás de nosotros, me “empotró” contra la puerta.


-¡AAH Jong! ¡Mhsn!-


Gemí extasiado, en lo que buscaba de alguna manera, estimular alguna parte de su cuerpo también, pero mis manos se encontraban inertes, ante el placer…


Comenzó a restregar la tela de su bóxer, sobre mi miembro ya desnudo, y la sensación de “tela contra piel” era realmente maravillosa, correntadas y más correntadas despertaban en mi interior, como si fuera una compleja red de circuitos, justamente en “cortocircuito” valga la redundancia.


Y pues con el paso de los segundos, pasó de mi boca, a mi mandíbula, de ella a mi cuello, y de él a mi pecho, mis pezones y así de manera descendente, hasta que ahora lo tenía frente a mí, genuflexo, comenzando a juguetear con mi miembro más que erecto, está demás decir.


-¡AAHM! ¡MIERDA JONGHYUN! ¡Aasmm!-


Su boca, su lengua, sus labios, habían tocado, aquella vena que ya sobresalía de mi falo, provocándome una deliciosa correntada que dejó en sinestesia al resto de mi cuerpo.


Y mis manos, ya habían reaccionado ahora, incitando a Jong, a que se lo introdujera de una vez por todas, si es que lo iba a hacer, para que dejara de torturarme. Pero él se resistía, y sonreía de vez en cuando mientras seguía “jugueteando” con mi “orgasmo”…


Yo no podía más que gemir, estaba realmente anulado, solo su nombre, y sonidos amorfos, eran los que salían de mi garganta, mi vientre se contraía por las sensaciones que sus movimientos me provocaban, hasta que finalmente gemí de una manera realmente frustrante.


-¡Naa~, ya JongHyun! ¡Hazlo de una vez, voy a morir!-


Gemí totalmente desesperado, como anteriormente mencioné, y pues, él sonrió de lado satisfecho, y se puso de pie una vez más, su mirada, rezumba fuego, lujuria… y sin pensarlo, atacó mi cuello, digno de un vampiro, sus besos, eran ahora mucho más feroces, por lo que de seguro, dejaría marca, aquella idea no me terminaba de convencer, pero estaba tan obnubilado por el placer, que tan sólo le dejé hacer…


Minutos después, siento como caigo en una superficie acolchada, mi cama… y allí, nuevamente se dedica a prestarle atención a mi miembro de manera manual.


Mientras que sus labios, una vez más acaparaban los míos, los reclamaba.


-Eres endemoniadamente sensual Gatito, eres mi íncubo, en tan solo segundos de probar tu piel, tus labios, “tu sabor”, me encuentro a mí mismo, absolutamente adicto a ti, te deseo… deseo que esa figura tan remilgada que posees, sea mía, pura y absolutamente mía. Ahora… eres mío gatito…-


Habló con vehemencia. Dejándome realmente atónito ante aquellas palabras… pero ya que… a la mierda todo, no podía ocultarlo para siempre, él me atraía, y siempre me atrajo de una manera innatural, desde que le he conocido, él… él ha dejado “marcas de fuego” en mi piel, las cuales jamás desaparecieron, y ahora que sus manos vuelven a acariciar mi cuerpo, aquellas “marcas, heridas” se han vuelto de una manera furiosamente ardientes, llameantes…


Una vorágine de sensaciones era lo que él me provocaba, y yo, yo ya estaba “mareado” de tantas sensaciones, por lo que finalmente, decidí dar “rienda suelta” a aquellos sentimientos, que me obligaba a mí mismo, a guardar bajo 7 llaves en lo más profundo de mi ser, pero con unas simples palabras… como aquellas, todo aquel esfuerzo, había sido realmente en vano.


Pero ahora… ya no me importaba.


Mis ojos “se encendieron”, le miré de la manera más felina que podía, demostrándole cuan hambrienta de deseo estaba, rodeé su cuello fuertemente con mis brazos y en un hábil movimiento, le coloqué debajo de mí, él gimió, no de placer, sino de dolor, pues imagino que ha de ser por sus heridas, pero ahora poco me importaban.


Nuevamente, había logrado despertar al “felino salvaje” dentro de mí.


Estaba “hambriento” de su cuerpo, de todo su ser, y realmente, ya no podía competir, con aquel felino salvaje, que había tomado el control absoluto de mí persona.


Con vehemencia, comencé a mordisquearle, lamerle y besarle el cuello, mientras mi mano descarada, se había dirigido directamente hacia el interior de aquel bóxer negro tan ajustado a su figura… algo que realmente me extasiaba, sin dudarlo, “arrebaté su virilidad” de su “escondite” y con fervor, comencé a estimularlo.


-¡AAHMNS KEY! ¡Key...! ¡Aaah~ ¿¡Qu-qué de-demonios!?-


-Ssht, sólo cállate, habla menos, y  bésame más…-


Le “impuse” de una manera realmente seria… él se me quedó mirando estupefacto, era yo ahora quien sonrió de lado, y atacó con desenfreno aquellos gruesos labios, que me llevaban a la gloria, si bien mi miembro, ya no podía más, sería injusto, que él no disfrutase tanto como yo… por lo que decidí sacrificarme un poco, y “atenderlo” aunque sea un poco.


Besé, mordisqueé, succioné, sus labios, su cuello, su oreja, sus pezones, su estómago, y finalmente llegué a su miembro. Comenzando a jugar con descaro, con sus testículos, mientras me alternaba con mi boca entre su miembro y sus muslos internos. La piel de JongHyun estaba realmente erizada, y sus pezones estaban más que erectos…


Aquello al parecer sí le había provocado sumo placer… una vez más sonreí satisfecho, y me introduje su miembro en mi boca, comenzando a ejercer toda mi habilidad posible, en hacerlo sentir aun mejor, para, “enloquecerlo” por completo, y pues, al parecer funcionó, porque no mucho segundos más tarde, él tironea de mí suavemente hacia su rostro, y me gira una vez más…


-¿Con qué así quieres “jugar”, no es así? Pues prepárate… para el mejor sexo de tu vida.-


Dijo agotado, jadeante, dificultoso, y mi mano la cual se había apoyado suavemente en su pecho, podía sentir aquel “brusco” latir de su corazón, aquello me alegró, y aquello último dicho, me “encendió” aún más… sonreí con sorna, “poniendo en dudas” sus “dotes como Dios del sexo”, y él frunciendo el ceño con una sonrisa de lado, sin previo aviso, comienza a juguetear con aquel “versátil orificio”, pues se transformaría en una entrada momentáneamente…


Gemí, volviendo a “quebrarme” contra su cuerpo, él sonrió, y mientras comenzaba también a juguetear con mis testículos, “involucró” a su boca en el asunto y pues… que les puedo decir, aquella sensación de sentir su lengua “allí”, me terminó de enloquecer, ya no más restricciones, comencé a gemir, como si en cada uno de ellos se me fuese la vida, pues las sensaciones, aquella “vorágine” se había triplicado, si es que era posible, pues la verdad, que eran sensaciones, que no les puedo explicar con claridad… pues compréndanme, mi-mi cabeza, no está en su mejor estado, de hecho, está en el peor de ellos.


Luego de que más de 1 dedo pudiese ingresar allí, sin mayor impedimento, me miró, me sonrió con suma “maldad” mostrando despreocupadamente, sus intenciones más pervertidas y oscuras en su próximo movimiento… y “arremetió contra mí, impío”.


-¡AAAH JONG! ¡JONG, JONG!-


Su nombre, sólo su nombre podía pronunciar, mi cabeza no podía procesar más nada, todo mi cuerpo estaba cubierto, por aquellas redes de circuitos, que desprendían placer, en dónde quieran que “fallaban” y causaban un cortocircuito…


Luego de las primeras embestidas, comenzó a disminuir un poco su velocidad, y por más que yo quería más, le agradecía, pues en verdad sentía como si algo en mi interior se estuviese “rasgando” en 2…


-Gatito… gatito ahmns, n-no pu-puedo cre-creer, qu-que al final, pu-puedo vo-volver a tenerte de esta ¡aamns, manera!-


Intentaba formular un diálogo, un agitado, jadeante y “gimiente” JongHyun… yo simplemente sonreí, y esforzándome un poquito en soportar aquel dolor, con ambas manos tomé su rostro, y lo acerque al mío, comenzando así, una nueva ronda de besos errantes… pero aquello era lo de menos.


Nuestras lenguas “se entrelazaban” entre sí, luchaban entre sí, y exploraban con ferocidad, la cavidad húmeda e “hirviente” ajena.


Tanto así, que la saliva comenzó a escapar por una de mis comisuras… pero le di poca importancia, pues, él nuevamente comenzaba a arremeter contra mí de aquella misma manera, impío.


Mis manos, mis uñas, ya se encontraban rasguñando su espalda, aquella que estaba levemente vendada, por “el accidente”, y pues estaba claro que aun dolía, pues, sus gemidos de placer se entremezclaban con los de dolor.


Luego se salió de mi interior de una manera brusca y yo gemí levemente adolorido e insatisfecho, pero él me sonrió.


-No seas goloso gatito…-


Me susurró ronco, sensual, y nuevamente un escalosfrío recorrió mi espina dorsal, él me colocó en “4” y volvió a arremeter contra mí, entrando de una manera mucho más directa y fácil… sus manos acariciaban con fervor, mi espalda, y los laterales de ellas, provocando que allí donde pasara con sus manos, dejara un "rastro hirviente”, en  verdad sentía mi cuerpo como si dentro de mi corriera lava y no sangre, mi torrente sanguíneo estaba realmente acelerado, corría raudamente, con la misma intensidad que la de una cascada al caer.


-¡AAHMNS! ¡AHM MÁS! ¡MÁS!-


Me encontré de repente gimiendo, e “implorando” por más “rudeza”.


-Y-ya no-no puedo más… e-estoy a- a mi límite, y e-en cu-cualquier mo-momento yo… yo-


-¡AAAMNS AHÍ! ¡AHÍ JODER!!-


“Eureka” aquel lugar que tanto placer “alojaba” había sido descubierto… y con sus “últimas fuerzas” comenzó a embestirme allí, una y otra vez, mientras yo ya había comenzado a estimularle a mí mismo, con aquella misma “rudeza” con la que él me embestía. Estaba fuera de mí, aquel “felino salvaje” aún no me había abandonado, por lo que seguí hasta las últimas consecuencias… cuando me corrí sobre las sábanas, y él segundos después luego de haber hecho una pausa para que yo pudiera disfrutar de aquella sensación que me estremecía por completo de una manera tan deliciosa…


-Aaamns, sí, joder… aaah, aaah-


Dije luego de que me recuperé de aquellas sensaciones… y él también hubo “culminado” antes las sensaciones…


Me “desparramé” sobre mi cama, cayendo encima de mi propia “esencia” pero poco me importó… me encontraba realmente agotado, pues, luego de que todas aquellas sensaciones se disiparan, mi cuerpo, se destensó, y sentí como si estuviera totalmente anestesiado… no tenía fuerzas para más nada…


Él cayó segundos después, de haber quitado su “gran virilidad” de mi interior… y se recostó a mi lado… ninguno dijimos nada, pero con aquel suspiro que él emitió, ambos supimos que estábamos realmente satisfecho… sonreí de lado de una manera imperceptible, pues él no me vio debido a que estaba boca abajo, y con la cabeza hacia el lado contrario a Jong…


-Se-será mejor que nos levantemos, nos duchemos y cambiemos las sábanas, ¿no crees, gatito?-


Habló de repente JongHyun, sobre-exaltándome, pues yo ya me encontraba medio adormilado, aún no me sentía “apto” para moverme ni siquiera un centímetro, estaba realmente inerte, allí en la cama, aquella “sesión de sexo” realmente había “absorbido” toda mi vitalidad, pero había valido toda la pena del mundo…


-Hmm.-


Murmuré, ni siquiera en una afirmativa o negativa, él sólo rió suavemente, y con cuidado, se levantó, me ayudó a levantarme, mis piernas aún temblaban, pero ya no tanto, podía mantenerme levemente en pie… pero solo por unos segundos… y nos dirigimos al baño, allí nos duchamos, yo con su ayuda por supuesto, y ya con las energías un poco más recuperada, pero sólo un poco, cambié aquellas vendas que se habían mojado con el agua y el vapor, y prestándole algo de ropa, nos pusimos el pijama, el se ofreció a cambiar las sábanas, yo no me negué, para hacerlo yo, y luego de eso… nos acostamos juntos…


Nadie había dicho nada sobre eso, yo no le invité y él tampoco preguntó, pero al parecer nuestra química era sorprendente… y ya ambos dábamos por hecho, de que aquello así sería, y sin dudas, así fue. Allí dormimos ambos abrazando al otro, hasta que el amanecer llegó…

Notas finales:

Espero que les haya gustado, este cap me salió medio bipolar, pero en sí el fic es bipolar xD así que no se sorprendan si de la nada les aparece un JinKi re feliz dela vida dándoles sus bendiciones la JongKey... xD ajjaja

(Obvimaente no va a pasar, pero era un ejemplo, igual creo que estaba más que claro xD)

Como sea, como tengo sueño, me voy a obviar todo lo que siempre digo, al cap no lo revisé así que los siento u.u si hay algo que no logran entender o algo por el estilo u.u

Y también les dejo el link de mi página en Faebook, por si hay alguien más, que sea nuevo y le interese n.n

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Me despido, que descanses, y gracias a todos por sus reviews n.n

Bye bye~ ^u^//

♥ ZaffireHeart ♥


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