Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

LA VERSIÓN JAMÁS CONTADA. por Huitzil

[Reviews - 56]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola otra vez soy yo :D esta vez actualice un poco mas rapido y lo subo en breve espero que les guste mucho XD ademas tengo una duda quieren que les haga un especial de san valentin? bueno si haci lo quieren diganmelo y lo hare gustosa, gracias por llegar tan lejos en la lectura y gracias por sus comentarios son muy valiosos para mi, nuevamente los personajes de Sherlock no me pertenecen son propiedad de SIR ARTHUR CONAN DOYLE. ojala les guste!!!! 

EL PUENTE DE LONDRES SE VA A CAER.

 

Lestrade salió del baño mientras miraba con más detenimiento mi habitación vi como sus ojos se posaban en cada estante de libros que tenía mientras caminaba a mi cama de una forma que a mí me pareció seductora, ¡Joder! ¿Por qué carajos Lestrade tenía que ser tan endemoniadamente lindo? Me sonroje ante mis pensamientos y me tape la cara con ambas manos no quería verlo, me avergonzaba admitir que ahora por su culpa tenía una erección.

- Debo confesarte que nunca pensé que tu cuarto fuera tan común.- lo escuche decir acto seguido con un tono de sorpresa hablo. - Pero… ¿Qué te sucede? ¿Algo malo le sucede a Sherlock?-

Lestrade se acercó hasta quedar sentado nuevamente en la cama a un lado mío. Entonces mis recuerdos se accionaron, hace menos de diez minutos había hablado con el pelinegro de mi hermano y me había confesado su situación actual, en lo delicada que era y no solo eso, en lo peligroso que se volvería ¡Y yo solamente pensando en que quería comerme a Lestrade otra vez! Definitivamente era el peor de los hermanos.

- Todo me pasa todo y si… algo muy malo.- conteste a las dos preguntas que me había hecho el inspector sin quitarme las manos de la cara trate de hablar de una manera formal sin embargo mi voz traicionera ante el momento se quebró antes de terminar, cosa que me molesto e hizo que gruñera levemente.

El hombre se acercó un poco más hasta que sentí como con sus manos sostenía las mías, eran cálidas, fuertes, decididas, todo lo que a mí me hacía falta para enfrentarme al mundo, Lestrade lo poseía, aun no quitaba mis manos de mi rostro cuando él las aparto lentamente y me vio directamente a la cara, desvié la mirada avergonzado.

- Lamento haberte obligado a hacer lo de hace rato.- dijo en un tono triste el inspector.- No pude resistirme, lo siento no volverá a pasar te lo jur…

- ¡NO!- grite antes de que continuara hablando. –No, mi problema no es que, no quiera que vuelva a pasar, mi verdadero problemas es que ¡Quiero que vuelva a pasar! ¡Ho, Rayos! No sé cómo expresarme correctamente sin parecer un endemoniado pervertido o un mal hermano.

Entonces ligeramente sentí como Lestrade se abalanzaba hacia mí, sus brazos me rodearon lentamente sujetándome con fuerzas trasmitiéndome una calidad y una sensación de paz que nunca antes había experimentado;  no entendí el “porque” del abrazo tan afectuoso por parte de Less, pero tenía que admitir que de alguna manera me tranquilizaba.

Escondí mi rostro en su cuello respirando su delicioso y embriagador aroma dulzón y lentamente levante mis brazos para sujetarlo de la cintura y corresponder su muestra de afecto, inexperto e inseguro lo apreté un poco más contra mí.

- Less… soy el peor.-

Susurre y nuevamente me sentí presa de esos tersos y esponjosos labios que con tanto afán Lestrade estampaba en mi cuello, lentamente también empecé a seguirle el juego al peligris del inspector. Con la lengua lamia el contorno de su piel para después succionarla y dejarle una pequeña marca rojiza, de esa manera es como marque como mío a Less; era mío, de ninguna otra mujer, de ninguna de sus tantas novias, no, no pertenecía nunca más a ninguna de sus ex esposas, no… ya no le pertenecía a nadie más que a mí.

<<<<< Cuidado, si eres menor de edad no leas esto es lemon, es decir una fuerte escena entre adultos, sáltate hasta que aparezcan estos signos >>>>>>>>>>>>

Un beso por aquí, otro beso por allá, una caricia por delante y otra por detrás continuamos nuevamente sin prisas, no me importo, ni siquiera me preocupo que Sherlock hubiese matado a alguien, es más, mi hermano menor podría comenzar con un genocidio en Londres si así lo creía conveniente y me hubiese importado lo mismo que si hubiera matado a una mosca.

Levante con precaución a Lestrade para que quedara mejor posicionado entre mis piernas mientras él se sujetaba con fuerzas a mis hombros, las sabanas de la cama no eran un problema y la ropa había desaparecido hace mucho, solo quedábamos nosotros dos, esta vez trate de ser un mejor amante, así que mientras masturbaba a Lestrade aprovechaba su pre semen para humedecer su cavidad. Introduje con cuidado un dedo y Greg estampo un leve quejido en mis labios, seguí con mi tarea esta vez moviendo el dedo lentamente hasta que el pequeño inspector se encogía por el placer que le brindaban ambas manos, después un poco más atrevido introduje un segundo dedo, Lestrade se volvió a quejar y moví más rápido mi mano que maravillada nos masturbaba a ambos para que su expresión cambiara rápidamente. Podía sentirlo, podía sentir el corazón de Greg galopar rápidamente y sus mejillas coloradas eran malditamente provocativas.

- Jo-joder… Mycroft, ¡hazlo de una buena vez!- Dijo en un reclamo Greg que me sorprendió.

-¿Por qué? ¿No te gusta lo que te hago?- dije dudoso y con complejo, muy dentro de mi creía que hacia un buen trabajo preparándolo de esa manera tan sutil y elegante.

- Si, si me gusta, por eso… ¡Ya hazlo y no me tortures más!-

Sonreí con malicia e introduje un tercer dedo mientras los movía con rapidez, escuche un quejido lleno de placer y fue como un choque eléctrico que recorrió todo mi cuerpo; saque mis dedos y abrí las nalgas de Lestrade dirigiendo con cuidado mi miembro a su cavidad húmeda y ansiosa.

Lo metí lentamente mientras con un grito que desgarro la habitación como la primera vez Greg me abrazaba fuertemente y arañaba mis brazos, tratando de soportar el dolor, no me había dado cuenta que realmente le dolía que yo estuviese dentro de esa forma, la primera vez no me di cuenta porque estaba tan desesperado por hacérselo que lo poseí de la manera más salvaje que se podía pero ahora lo estaba haciendo a la perfección con lentitud me fui adentrando a ese lugar tan estrecho y Lestrade derramo unas lágrimas las cuales elimine con mi lengua.

-S-soporta un poco más.- susurre y empecé no solo a besarlo con lujuria sino a masturbarlo de una manera magnifica para que olvidara el dolor, cuando de repente escuche lo que me pareció no solo un gemido de satisfacción sino un ronroneo encantador.

Por fin había logrado tocar su punto dulce ahora todo sería más fácil, de alguna u otra manera empecé a ir más rápidamente ahora que los gritos de dolor se habían transformado en gemidos de placer con los que era recompensado, lo recosté en la cama y Lestrade  cerro con fuerza los ojos, sus manos las dirigió a las sabanas que sujeto con fuerzas para dejarme  moverme mejor y no solo eso el también cooperaba moviendo sus caderas y aprisionándome con las piernas.

El vaivén en el que estábamos podría describirse como un poema, una hermosa canción que posiblemente nadie entendería hasta que la viviesen por ellos mismos como yo lo hacía justo ahora. Disfrutaba el momento por que tarde que temprano sabía que terminaría por que… “Nada es para siempre”

Nuestro final fue glorioso Greg se vino en nuestros pechos decorándolos de un color blanquezco perla y al momento en que se vino su interior se contrajo volviéndose a un más apretado aprisionando mi miembro y haciendo que yo también me viniera dentro de él.

<<<<<<<<<<<<<<<<<<< Ya pueden empezar a leer nuevamente los que se abstuvieron de hacerlo. :D >>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>>

Terminamos en la cama, exhaustos y cubiertos por una capa ligera de sudor por la actividad. Tenía la mente en blanco mientras veía mi lámpara en el techo me levante y me di cuenta que Greg estaba profundamente dormido, no podía culparlo por terminar tan cansado, sin embargo a pesar de mi cansancio físico no pude olvidar a mi hermano; me levante de un golpe, sin despertar a Less, cambie las sabanas de la cama por unas limpias y le coloque unas nuevas, me dirigí al baño con rapidez y me duche en menos de cinco minutos para salir disparado, cambiarme, calzarme e irme.

Antes de salir del cuarto regrese la mirada a Lestrade que descansaba en la cama y dormía plácidamente me volví para plantearle un suave beso en los labios y marcharme de una buena vez para ayudar a mi hermano.

Su ubicación no me era desconocida pues no por algo el localizador de mi hermano estaba encendido y me daba su ubicación exacta. El puente de Londres era mi siguiente destino pero mientras salía del lugar con Anthea un ex militar se topó en mi camino y me miro furtivo con esa mirada verde pasto tan expresiva como siempre.

-Buenos días Mycroft.-

Se aclaró la garganta, guardándose las manos en la chaqueta que traía por el frio de la mañana.

-Buenos días Doctor John  Watson.-

Me detuve frente del hombre mientras mi ayudante continuo su camino al carro que nos esperaba.

-Solo dígame John.-

- Aprecio mucho que se sienta tan familiarizado conmigo pero me agrada más su apellido, le llamare por el mismo si no le molesta con su respectivo título de doctor.-

Watson bufo un poco y rodo los ojos en un evidente acto de enfado que deje pasar desapercibido.

- Este bien, está bien, llámame como quieras, solo vine a verte por que no sé dónde se metió Sherlock  y mi esposa Mary. Se quedaron de ver después de media noche y no han vuelto, nos adonde fueron o con quien, ninguno de los dos contesta el teléfono y ya busque por todas lados que frecuentan, pero nada, como último recurso creo que, eres el hombre más indicado para saber las cosas, tú debes de saber por lo menos donde se mete Sherlock.-  El hombre rubio resoplo un poco y paso su  mano por la cara en un evidente gesto de preocupación, se veía que estaba muy ansioso y que no había dormido casi nada.

-Oh… Sherly….- dije en el tono más frio que pude viéndolo a los ojos que estaban adornados por el miedo y la duda. – No lo he visto mi estimado doctor, desde hace aproximadamente cuatrocientas cincuenta y cuatro horas con… ¿Me puede decir la hora?-

-¿Qué? Ho por dios, por favor Mycroft…. Eres al único a quien podría pedirle ayuda, no encuentro a Lestrade tampoco para consultarlo estoy muy preocupado por ambos, Mary mi esposa, sé que no es santo de tu devoción pero….-

-Mary ni siquiera ha sido canonizada como santo así que no es posi…

- ¡Lo digo hipotéticamente no es literal! Mycroft, lo que quiero decir es que tengo en cuenta que no te cae bien Mary es más soy consciente de que odias a todas las personas y por el único ser humano por el que te preocupas es tu hermano pero quiero que entiendas por un momento que estoy desesperado, yo, Mary es mi todo en el mundo y Sherlock es mi mejor amigo no me gustaría saber que algo malo les hubiera pasado a ambos.-

No aparte la mirada de aquel hombre que desesperado me pedía ayuda, me sentí mal por unos breves momentos porque sabía que Mary estaba muerta y que su todo en el mundo se acababa de convertir en un gran NADA por culpa de su mejor amigo.

- Doctor Watson, por favor tranquilícese. Ante su alarmante queja y evidente preocupación, contagiosa por cierto, no me queda de otra que intervenir en su asunto, mandare a Anthea a buscar a ambos hombres y a un grupo de hombres selectos para que den con su ubicación antes de la comida, en todo caso de que ellos fallen yo mismo me hare cargo, pero en este momento doctor voy con prisas a un asunto muy importante con personas de otros países, es obvio que es una falta de educación que valla tarde.-

El doctor se sonrojo y se hizo a un lado rápidamente mientras sin borrar esos ojos de cachorrito que poseía me miraba dudoso.

- Se lo prometo doctor, encontrare a ambas personas, usted vuelva a casa y trabaje normalmente como siempre.-

Watson se encogió de hombros y asintió de mala gana con la cabeza.

- Esta bien esperare hasta las dos de la tarde, gracias Mycroft.-

Escupió de mala gana pero note que sus músculos se destensaban solo un poco, y su rostro adquiría un poco de esperanza, pobre doctor pero me sentía feliz al saber que al menos le brinde unas cuantas horas más antes de que su corazón se partiera en dos.

Cuando subí al carro me dirigí rápidamente al puente de Londres en donde se suponía que estaba mi hermano ya eran exactamente las siete de la mañana, el sol salía y los coches transitaban con rapidez por las vías en un costado del puente me encontré con el pelinegro de mi hermano, veía hacia enfrente, me daba la espalda y no tardo en escucharme llegar pero aun así no me dio la cara, hablo con fluidez y exactitud.

- Mycroft… llegas evidentemente tarde, suponía que tardarías exactamente solamente un cuarto de hora por la lejanía y has tardado de más.

- Me tope en el camino con cierto doctor.

- ¿Tu nutriólogo?-

Sin verlo sabía que había sonreído con burla y picardía.

- No. El doctor Watson, y me entretuve con el hombre teniendo una buena sesión de sexo.-

Conteste rápidamente y de la misma manera dibuje una maléfica sonrisa.

- Por la ciencia, tu eres más virgen entre los vírgenes tu no pud…i…s…te…-

 Mi hermano se giró lentamente y cuando me vio abrió sus ojos cual platos extendidos, empalideció sin terminar de hablar y empezó a analizarme.

- No te preocupes que no le he hecho nada a tu doctor.-

Sonreí complacido y gallardamente, el misterio se veía reflejado en mis ojos y la duda e intriga en mi hermano.

-¿Quién fue la afortunada?

- Tu doctor vino preguntando por su esposa y su mejor amigo a mi casa, estaba evidentemente preocupado.-

Conteste ignorando la pregunta y situándome a su lado viendo el hermoso paisaje

-¿Qué le dijiste?-

- Que los encontraría antes de la comida.-

- Yo lo hubiera hecho antes del desayuno.-

-“Hubieras hecho” has dicho lo que ahora necesitamos es tiempo no quedar bien con las personas. ¿Dónde está el cuerpo de la pobre infeliz?

Con una seña levanto un poco la quijada y con los ojos miro el mar.

- ¿Por qué la citaste en este lugar?- dije después de unos cuantos minutos de silencio y de analizar el sitio. Mi pregunta no hizo que mi hermano se moviera de su lugar, ni siquiera que se alterara, no surtió efecto en él la sorpresa o la admiración, es como si habláramos del clima, sin embargo me contesto con desdén.

-Porque le era infiel a John, con una mujer, no soporte que le hiciera daño a Watson y decidí confrontarla, jamás calcule que terminaría muerta, a lo mucho me daría una bofetada en el rostro o tratando de matarme sin lograrlo, pero… se murió.-

- Es obvio que no forcejearon.-

-No.-

-Llego un poco tarde después de la cita.

-Me pidió disculpas cuando llego, también un dulce, como no tenía le di un chicle que me habían dado en la oficina de Lestrade y se lo entregue, le dije que sabía que le era infiel a Watson discutimos un poco y después, salto por el puente con un ataque de taquicardia y espuma en la boca. La deje caer.

Esto último que dijo me dejo pensativo.

-Actuó como si estuviera envenenada, callo y se ¿hundió?

- Exacto, como si yo la hubiera envenenado y desafiando las leyes de la naturaleza se hundió como una roca, como si pesara demasiado como para salir a flote de nuevo.

-Eso desafía muchas leyes de la naturaleza.

- Lose,  no supe que hacer, quise lanzarme al rio pero estaba muy obscuro, así que espere, debí de haber esperado demasiado porque cuando me di cuenta ya era de madrugada y estaba marcándote.

- Ahora entiendo mejor lo que sucedió… prepárate para lo que viene Sherly porque vas a necesitar todo el valor posible para mirar a Watson hoy, veras como el doctor cae en pedazos y se hunde en desesperación cuando le digamos que su esposa está muerta.-

- ¿Le vas a decir que está muerta?-

- ¿Le vas a decir que está viva?-

-Podríamos decirle que se fue con su amante y dejarle una nota.

- y ¿si aparece el cuerpo?

-Tú te encargaras de que eso no suceda.-

Sherlock parecía haber pensado mucho en lo que iba a hacer, pero a mí no me terminaba por convencer.

-Hubiera sido mejor que se callera el puente de Londres.-

- si… hubiera sido mejor que el Puente de Londres se callera.-

Mi hermano repitió lo que dije como para marcar que a él tampoco le gustaba mentir, ahora tenía que resolver por que se enveneno Mary, enfrentar a Watson para decirle sobre la tragedia y esconder mi aventura con Lestrade de Sherlock, todo en menos de un día.

Notas finales:

wooooooooooock!!!!!!!!!! que genial jajajajaja soy toda una loquisha esta vez hice un poco mas mi fic mas largo :D gracias por leer besos!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).