Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La Infiltrada. por fxctheworld

[Reviews - 33]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Espero les gusté el capítulo y eso

─ ¿Estás bien? ─ preguntó Jounochi, quitando el hecho de que Yami no confía en mi..

 

─ Sí, estoy bien. ─ suspiré, dejando salir un peso de encima.

 

Joey pasó las manos por su cabello liberando la tensión que tenía en sus hombros. Miré por donde se había marchado Yami, pero desapareció de mi vista. No podía creer, ni analizar el hecho de que estuvo a punto de revelar mi secreto, pero más aún que Joey llegó justo en el momento preciso para ayudarme y salvarme. Aunque me preocupa que pudo haber escuchado, dijo que nada..., pero ¿fue para calmar a Yami? no sé que haré con él, lo que me había dicho era cierto. No le he dicho mis razones por las que vine aquí a esta escuela, ni siquiera mis futuros planes lejos de aquí, en América.

 

─ Debes pedir un cambio de cuarto, Yato. Te lo digo como un amigo confiable, él no es de buena espina. En cualquier momento el usara algo en tu contra y...

 

─ Joey, está bien. Conozco su temperamento, no tienes por que preocuparte por mi. Puedo manejarlo ─ admito. En cuanto a Yami hablaría con él esta noche. ─ también tuve la culpa, seguro toque un tema delicado para él.

 

─ Él no tiene sentimientos. ─ notificó seriamente metiendo su mano izquierda en su bolsillo del pantalón. ─ es sólo un cabrón fabricado para hacer daño, eres el amigo de Ryo, por lo tanto eres el mío así que no dejaré que ese tipo te dañe.

 

─ No me hará daño, tranquilo. ─ espete. Era increíble como Ryo hacía amigos tan rápido, y a mi me cuesta hacerlo.

 

─ ¿Cómo puedes estar seguro Yato? ¿Cómo puedes afirmar que no te hará daño? ¡Ese tipo es un peligro! ─ replico agitando sus manos.

 

─ La verdad es que no por ese acontecimiento que cometió ya sea un peligro, no tienes que exagerar las cosas Joey. ─ no puedo afirmar eso con seguridad, pero estoy segura que Yami no puede ser tan peligroso como para infundir ese miedo en Joey. Se veía en sus ojos, como sí el pudo haber sido una victima suya.

 

─ No lo conoces, no sabes nada de él.

 

─ ¿Y tú sí? ─ Inspiro hondo para tranquilizarme, estoy perdiendo la paciencia con el pasado de Yami─ lo siento, dejemos esto para otro día ¿quieres? sigo dolido por el balonazo que me dio tu estúpido amigo.

 

─ Cierto, perdona. Es sólo que..., nada.

 

─ Está bien, nos veremos mañana en clases. ─ dije amable retirándome allí, la cabeza me estallaba demasiado. Cuando pienso que un problema no es suficiente, viene dos mas; lo de el trabajo en equipo con Yusei y ahora lo de Yami.

 

Esta escuela terminara matándome, creo que debí haberme hecho monja como me decía mi tatarabuela. Aunque... pensándolo bien, mejor no. Estaría vendiendo rompopes o algo por el estilo.

 

Falta menos de tres semanas para salir de vacaciones. Tengo el trabajo de Filosofía, no me quejo es la materia muy interesante. Pero ¿hacer 15 hojas? debo sacar todo mi conocimiento en redacción y poner miles de palabras. Además que aún no sé como hacerle con el trabajo con Yusei, pensaba en ir a su habitación y ahí hacer el trabajo. No estoy segura, luego Yami estará cuestionándome sobre donde estuve y todo ese rollo. Un momento, no es mi obligación decirle.

 

Si si, entiendo que se preocupe por mi estando yo cerca de Yusei, pero mientras el no sepa que soy yo nada malo va a pasarme. Y si invito a Yusei a la habitación podría entrar él y seguro que se arma en grande, un cien por ciento de mi intuición afirma que terminarían ambos en el hospital, Yusei expulsado y Yami..., no sé.

 

 

 

En pocos minutos llegué a la habitación de Yusei, inhale aire y toqué la puerta dos veces esperando que estuviera aquí. Unos ruidos se escucharon al otro lado.

 

Abrí los ojos como platos con semejante escena de mi ex novio frente a mi, ¡Alguien dígale que se cubra la parte superior del cuerpo!

 

─ ¿Yato? ¿Qué pasa? ─ cerró la puerta tras de si, obviamente lo interrumpí en el momento menos indicado.

 

─ Quería ver si podíamos empezar con el trabajo, entre más rápido lo terminemos mejor. ─ contesté mordiendo el interior de mi mejilla nerviosa. ─ ¿qué dices?

 

─ Sí, sí, está bien sólo deja que me cambie, pasa si quieres. ─ Propuso haciéndose a un lado, pero yo negué rápidamente. ─ No no, está bien así te espero en la colina.

 

Accedió entrando en lo que yo me dirigía a dicho lugar, sobe mi cabeza nuevamente. Hasta que llegue lo primero que hice fue dejarme caer en el suave pasto relajándome un poco, era lo que necesitaba después de tanto drama.

 

Aún tenía que pensar en si acompañar a Yami a Londres, o no. Conocer..., a su madre era inesperado pero a la vez tierno de su parte.

 

El viento sopla y acaricia mis mejillas, en cuestión de segundos el dolor desaparece de mi cabeza y me pierdo.

 

─ Yato, Yato, despierta.─ pronuncia suavemente Yusei, moviéndome. Abro los ojos, el cielo luce un atardecer carmesí, entre rojo y anaranjado.

 

─ ¿Qué?

 

Tallé mis ojos para ver con claridad. ¿En que momento me quedé dormida?

 

─ Estabas dormido, no quise despertarte... lucías agotado. ─ confesó recargándose en el árbol, me senté incorporándome. ─ creí correcto dejarte descansar, un rato, pero ya esta atardeciendo.

 

Sonreí nostálgica, un vago recuerdo inundo mis pensamientos.

 

 https://www.youtube.com/watch?v=UhbipDWCPHU (escuchen)

 

─ Jajaja ¡Yusei, bájame ahora mismo! ─ grité golpeando la espalda de mi novio, me estaba dando vueltas sin parar─ ¡Sí no lo haces vomitaré y soy capaz Fudo!

 

─ Ya va, ya va, tranquila ─ río bajándome en el pasto, permanecí quieta. La cabeza me daba vueltas. ─ no quiero que ensucies mi chaqueta nueva.

 

─ Un poco más y lo hacía. ─ recosté mi cabeza sobre su pecho, oyendo su corazón latir mientras veíamos el atardecer que se avecinaba entre los arboles y unas montañas a lo lejos. ─ es hermoso.

 

─ Lo es, pero.., ¿sabes quién es más hermosa?

 

Tomo mi mentón obligándome a verlo a los ojos, azul marino cristalinos, brillantes.

 

─ ¿Quién? ─ sin darme cuenta estábamos a centímetros de nuestras bocas, casi por besarnos

 

─ Tú.

 

Estaba por contestar, pero Yusei silenció mis labios con los suyos, besándonos lenta y cariñosamente. Su mano acariciaba con suavidad mi mejilla, ese día había sido el mejor día de nuestra relación y..., el último.

 

 

 

─ ¿Empezamos? ─ me preguntó sacándome de mis pensamientos de ese recuerdo hermoso de nuestra relación, aunque haya sido pasado guardo ese momento en mi corazón, fue importante para mi ese día. Asentí tomando mi mochila y los libros que necesitaríamos para el trabajo. ─ por cierto... ¿por qué elegiste este lugar?

 

─ Me ayuda a despejar mis pensamientos, es relajante y a la vez nostálgica esta colina. Es extraño, siento como si ya hubiera estado aquí, es una conexión extraña pero es reconfortante. ─ me reí por lo que estaba diciendo, siendo que estoy haciendo de papel de chico─ sé lo que estarás pensando, que es patético viniendo de un chico como yo.

 

Negó con la cabeza con una leve sonrisa─ claro que no, me recuerdas mucho a ella. Solía hablar como tú. En ese entonces me parecía una chica maravillosa y poética, recuerdo que una de sus aficiones era escribir en una pequeña libreta sus pensamientos, cualquier cosa siempre tenía algo para narrar. Yugi es increíble. ─ comienza a relatar sorprendiéndome que lo recodase creí que no lo haría nunca después de eso, entonces me doy cuenta que en sus ojos hay una pisca de tristeza ¿por qué? ¿por mi? no lo creo.

 

Pero siento ganas de preguntarle algo que me he estado guardando todo este tiempo, el por qué.

 

─ ¿Por qué?

 

─ ¿Qué cosa? ─ dice aún con ese semblante.

 

─ ¿Por qué le hcisite eso a mi prima? podría matarte ahora mismo por eso. ─ dije, actuando como un primo-hermano protector.

 

─ Lo sé, pero... tenía mis razones. No lo entenderías, ella era todo para mi. ─ empuñó sus ojos, entonces me estoy dando cuenta que estoy tocando un punto sensible. Aún así me mantuve firme.

 

─ Si era todo para ti, no le hubieras mentido engañándola con esa pelirroja llamada Akiza.

 

─ ¡No lo entiendes Yato! ─ explotó golpeando el tronco del árbol, brinque por tal violencia. Estaba de rodillas, leves sollozos salían de su boca─ no sabes lo mucho que desearía disculparme con ella, de decirle que... todo lo hice por ella.

 

¿Por mi? ¿Qué tuvo que hacer por mi para cometer tal atrevimiento?

 

─ ¿Qué cosa?

 

Se puso de pie dándome la espalda, mirando al frente. Su mirada era determinada, pero aún había esa pisca de tristeza y culpabilidad. Lo conocía perfectamente para saber sus sentimientos.

 

─ Ella... ¿está bien? ─ fruncí el ceño─ me refiero a que si se recupero, me enteré que estuvo en depresión. Tengo la esperanza que me haya perdonado. ¿No sabes algo tú?

 

Sí, era cierto. Por esa verdad, estuve en depresión ya que Aki no ayudo mucho que digamos. Se encargó de restregármelo en la cara todo. Lo recuerdo; esa vez Aki y Yusei vinieron a mi casa, en esos días mi abuelo y mi madre salieron por unos medicamentos. Aprovecharon la ocasión entregándome una caja donde se supone que vienen chocolates pro no había nada, totalmente vacío.

 

¡Es lo que Yusei siente por ti, está vacío!

 

Mordí mis labios evitando dejar escapar un jadeo.

 

─ Está bien, de hecho está más fuerte que nunca y no gracias a ti y tus bromas con Akiza. ─ escupí mis palabras con rencor, se volteó para mirarme. ─ ¿qué?

 

─ ¿Me perdono?

 

¿Lo perdoné? no, sí, no, sí ¡No lo sé! en realidad..., sólo lo olvidé pero jamás me pasó por la cabeza si perdonarlo o no, lo deje inconcluso esa faceta. ¿Habré perdonado a Yusei?

 

─ No lo sé, ella no me habló de eso. ─ mentí. ─ ¿Me dirás tus motivos por él que hiciste eso?

 

Pasó su mano por su cabello despeinándolo, era señal de que estaba nervioso. ¿Qué era tan misterioso que tenga que actuar de esa manera? ¿Acaso si hubo un motivo por el cuál me fue infiel?

 

─ Quería protegerla por que Aki iba a lastimarla. ─ puse mis ojos en blanco ante la absurda excusa que ponía, era increíble que él se inventara todo eso.

 

─ Claro, como no ¿Qué sigue?

 

Sus cejas se cruzaron y su frente se arrugo un poco, se estaba frustrando de mi terquedes. Ya ni me acordaba del trabajo de Filosofía, no me importaba en este momento. Lo que quiero saber es la verdadera razón de Yusei por lo que me hizo, pero es estresante ver como pone excusas....

 

─ Escúchame solamente. ─ interrumpió─ el padre de Akiza es un hombre aliado con personas peligrosas, ella me amenazó a mi de salir con ella pero la rechacé. Su padre y el mío son viejos amigos, por lo tanto siempre nos veíamos cuando vivíamos en China, pero ella siempre estaba pegada a mi como un chicle en un zapato de metro. Por eso me mude a Japón y ahí conocí a Yugi, ella fue, es y será una persona importante en mi vida aunque no quiera verme nunca más. Por aquel reencuentro que tuve hace unos días, con... ese chico que es tú compañero, Yami.

 

─ Sigo sin entender por que ella querría hacerle daño, hasta donde tengo entendido ella no hizo nada.

 

─ ¿No entiendes Yato? Akiza está completamente desquiciada, psicópata, es capaz de borrar del mapa a cualquiera que se entrometa en su camino, y sólo basta su palabra y el nombre de la persona para que su padre lo desaparezca. ─ un momento, ¿ella acaso..?─ Akiza me amenazó de salir con ella o si no Yugi pagaría por mis decisiones, no quería dejarla así como así. Por es acepté su trato si dejaba a tu prima en paz, en ese entonces era capaz de aguantar todo por ella. Aunque ya no sé si pueda contenerme más tiempo. ─ respiro hondo limpiándose las dos primeras lágrimas que se escaparon de sus ojos. ─  Tenía tantas ganas de explicarle la razón pero no podía, le costaría la vida si lo hacía ─ ¡entonces no me lo cuentes! ahora me arrepentía de haber sabido la verdad de esto, era... por eso que termino abruptamente conmigo.─ ¿Entiendes el peso que carga llevar esto conmigo? ver a la persona que más amas y que no esté a tu lado, y para colmo... que un imbécil haya ganado su corazón.

 

Me quedé callada, viendo a la nada. No tengo idea de como reaccionar, mi cabeza nuevamente está hecha un lío. Cada vez me convenzo a mi misma que nunca acabaran los secretos, siempre ha de salir uno nuevo. Uno... que seguro me dolerá.

 

Siento tanta culpa, Yusei tuvo que aguantar tantas cosas, más aún su gran dolor y perdida fui yo.

 

─ Yo ─ tartamudeo fallando en mi intento de hablar normal─ no sé que decir...

 

─ No es necesario, me siento... aliviado de contarte esto. Saqué un enorme pecho de encima. Pero eso no servirá de nada, ella está con otro.

 

Mi estómago dio un hueco. Estaba en parte correcto, yo no volvería con él. Por mucho que él se haya sacrificado por mi, mi corazón es de Yami ahora. Lo único que puedo hacer, es perdonarlo.

 

─ Sufriste mucho ¿no? ─ asintió. Me puse de pie poniéndome a su lado.─ te agradezco... por compartir esto conmigo, al menos te entiendo ahora, tu sacrificio y todo.

 

Lo menos inesperado fue que el me abrazara con fuerza, su cabeza se posicionó en mi cuello sollozando liberando toda su tristeza y dolor. Parecía que buscaba consuelo en una persona, creo que soy la indicada para eso. Percibo un espacio vacío en él y no lo culpo vivir con esto y no tener a nadie a quien contárselo debió ser terrible, lo estreché contra mis brazos tranquilizándolo dando leves palmaditas en su espalda, recordando que todavía hago rol de chico.

 

Oí como unos pasos se alejaban de nosotros, no le tomé importancia. Mi prioridad ahora era sanar sus heridas con este abrazo. Recordé al Yusei vulnerable de hace tiempo, cada vez que necesitaba de un consuelo siempre recurría a mis abrazos.

Notas finales:

¿Qué les pareció? espero les haya gustado, nos vemos :).


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).