... Puede tomarte por sorpresa.
Nichkhun ya llevaba bastante tiempo en el teléfono y Wooyoung no podía evitar ese sentimiento de intriga por saber que carajos estaba hablando el tailandés en ese idioma desconocido. Olvidando un poco su mal genio por los comentarios hacia su caballerosidad con Sora haciéndolo ver como un troll sin moral, se acercó hacia el joven después de que colgó.
-Ya vengo- El tailandés ignoró el acercamiento de Wooyoung. Este sabía que Nichkhun había durado años sin visitar su país, que debía tener amigos que sin duda deseaba ver, pero eso no disminuía su desconfianza. Desde que este le había sido infiel, le costaba demasiado retener sus celos; al fin y al cabo el tailandés había logrado cumplir todas sus fantasías sin él. Totalmente ignorante de los sentimientos de su novio, Nichkhun se dirigió rápidamente hacia la puerta, saliendo con una gran sonrisa en su rostro y sin despedirse.
Mucho más molesto que antes, decidió ir a la habitación de su pequeña a ver si esta lograba calmarlo. Su mal genio se disipó cuando escuchó a Alex leyéndole un capítulo de Harry Potter, no estaba mal eso de ser padre si un par de mocosos eran capaces de lograr un milagro como el de calmar a Jang Wooyoung.
-¡Woo!- el niño cerró el libro y fue hasta el coreano quien le sonrió –Estaba leyendo con Sarang.
Era bastante interesante como el niño había creado un lazo con la beba, de hecho con Sora habían pensado muy seriamente en la “Alternativa B” si Alex no se llevaba bien con la pequeña, que consistía en acercarlos lentamente y con guardias de seguridad; como siempre, el pequeño estaba cargado de sorpresas y esta última lo llenaba de mucho orgullo.
-¿Dónde está Khun?
-No sé, ni me interesa- Wooyoung pasó una mano por su cabello, sintiendo como su molestia regresaba.
Sora entró a la habitación con dos platos de fruta –Pensé que no te gustaban las mentiras Jang.
Este la recibió con un gesto cargado de ironía -Me interesa pero no lo sé ¿Contenta?- el coreano miro de mala gana a la joven que le pasó un pedazo de mango a Alex. Tal vez era el recién despertado instinto materno de la chica, pero desde su llegada estaba cuidando muy bien del pequeño.
-Khun nació aquí, debe estar visitando a sus papás- Alex estaba masticando su mango y luego se detuvo. Sus ojos miraron con temor a Wooyoung quien no entendía el cambio de actitud en el niño –Pero su mamá le pegó la última vez.
El coreano estaba seguro de que si Nichkhun hubiera ido a ver sus padres, le habría avisado, en eso consistía ese último acuerdo de “nada de secretos peligrosos.” Notando la inquietud en Alex fue por un trozo de fruta -Debió haber ido a visitar algunos amigos. En Estados Unidos no tiene tantos así que los debió extrañar- De hecho esa parecía ser la mejor y más coherente razón que más que el niño, él deseaba creer con todo su ser.
O tal vez no, cuando sonó la puerta lo último que Wooyoung habría esperado encontrar era a una casi replica de Nichkhun (aunque de más edad) y dos hermosas jovencitas bastante nerviosas en la entrada; los tres acompañando a su sonriente novio.
-Yanin, Cherreen, Nichan, este es Wooyoung. Woo, estos son mis hermanos.
El coreano entendió lo que se sentía el conocer la existencia de hermanos a última hora, a su favor recaía que él solo había presentado a una -¿Mucho gusto?-sus ojos buscaban con bastante inquietud a Nichkhun.
Una de las chicas lo abrazó con bastante fuerza –Muchas gracias por traer a Khun. En verdad te lo agradecemos- Wooyoung vio el rostro de Nichkhun sonreír con tristeza ante las palabras de su hermana e invitó a entrar (con toda la cortesía que su estado de shock permitía) lo que parecía ser la parte joven de la familia Horvejkul.
-Todavía nos cuesta un poco entender todo eso de Khun con un novio, pero créeme que no tenemos ningún problema- la joven llamada Yanin, aceptó una taza de té que el coreano se apresuró a preparar.
-Es muy guapo- la más joven de las dos susurró a su hermana y Nichkhun aclaró su garganta.
-Sé que mi madre los fue a visitar y lamento mucho si dijo algo inapropiado. Es solo que la noticia la tomó un poco desprevenida- Nichan bebió de su té –le aseguro joven Jang que sus palabras no fueron dichas con su mejor estado mental, ella es una mujer muy respetable cuando sus hijos no aparecen con noticias de última hora.
Definitivamente el Nichkhun mayor era mucho más maduro y eso solo acrecentaba su sex-appeal, su novio pareció notar el interés de Woo acabando con sus fantasías en un fuerte codazo –No hay problema, creo que debe ser normal que una madre actué así si ves a tu hijo después de tanto tiempo y este no parece estar haciendo lo que pensaba- el coreano miró molestó a Nichkhun sobándose las costillas.
Todos rieron y el tailandés le agradeció en silencio a su novio por estar tan calmado y retener sus comentarios a un tono suave, entre ese juego de miradas fue que Wooyoung notó escondidos en una esquina, los ojos azules de Alex sobresalir, desafortunadamente para el pequeño el coreano no había sido el único en darse cuenta de su presencia-¿Y tú cómo te llamas?- Una de las chicas le preguntó con dulzura. El niño desapareció al ser detectado.
-Es Alex- los tres jóvenes miraron a Nichkhun esperando más información –Es… mi ¿futuro? hijo.
Hubo un extraño momento de silencio en el que los hermanos de Nichkhun parecían debatir la cordura del joven. La falta de respuesta aclaró parte de sus dudas y haciéndoles entender que no estaba bromeando -¿Es en serio Nichkhun Buck Horvejkul?- Yanin alzó la voz más de lo debido.
-Silencio, hay una beba durmiendo.
De nuevo los tres se quedaron sin habla y Nichkhun entendió que antes de que llegaran a extrañas conclusiones tenía que aclarar su situación actual. Fue algo extraño contar su historia sin entrar a detalles innecesarios, Wooyoung solo se inmutó por ayudarle algunas veces donde estaba metiendo más información que la que debía. Al final los hermanos del tailandés terminaron su té en silencio, lo cual en sí no parecía una muy buena señal; o al menos para el coreano, que estaba acostumbrado a reuniones familiares menos amenas.
-Entonces Sarang es la hija del joven Jang… ¿La madre está de acuerdo con esto?- Nichan los señaló algo dudoso. Wooyoung sabía que su novio ya se sentía demasiado incomodo con la situación así que trató de calmar un poco el ambiente.
-Sí, ella comprende nuestra situación y le aseguro que no voy a faltar a mi deber como padre, aunque tampoco dejaré a Nichkhun, además Sora está de acuerdo en que él también sea parte de la vida de la niña.
-¿Podemos conocerlos?- Cherreen dejó su taza a un lado y estiró el cuello buscando a Alex que no había vuelto a salir.
-Por supuesto- Nichkhun los llevó hasta la habitación de Sarang y Sora donde golpeó levemente. La puerta se abrió unos centímetros y los cinco se encontraron con la joven sosteniendo en brazos a la pequeña mientras Alex jugaba con ella. El niño se detuvo al ver a los desconocidos en la puerta.
Yanin se cubrió la boca con las manos y suspiró. Wooyoung sintió el miedo de su novio a su lado por la reacción de sus hermanos con los niños, prácticamente estaba criando hijos que no eran de su sangre, aunque eso en realidad poco le importaba. No sabía si para ellos era un problema, aunque como Nichkhun lo había expresado en la noche anterior “La sangre nunca determina nada.”
-Alex, ellos son mis hermanos- Nichkhun caminó hacia el pequeño y le tendió la mano. El niño la tomó algo dudoso de ir hacía los desconocidos, en silencio Wooyoung le guiñó un ojo asegurándole que todo estaba bien.
-Hola Alex, mi nombre es Cherreen y soy tu… tía- la menor de los Horvejkul se arrodilló para quedar frente al niño que pestañeó por unos segundos antes de sonreírle –Y este de atrás es Nichan y ella es Yanin. Estamos muy felices de conocerte.
Alex miró a Nichkhun y luego a los hermanos con cierta curiosidad –Se parecen mucho- las risas del pequeño disiparon el ambiente y luego estuvo rodeado de lo que Wooyoung ya había llamado la dinastía Horvejkul. Después de las presentaciones con Alex, llegó el turno de Sora quien se disculpó por no poder recibirlos como debían y aclaró su posición en aceptar a Nichkhun como un segundo padre para Sarang. En cuanto a la beba fue un gran problema sacarla de los brazos de Yanin y el montón de fotos que sacaron con todos parecía ser capaz de llenar todo Instagram.
-Cuídense mucho- Nichkhun se despidió de sus hermanos –Coman bien- Nichan lo apartó un poco antes de despedirse a lo que las hermanas aprovecharon para acercarse a Wooyoung.
-Está en tus manos, no dejes que vuelva a tardar tanto en visitarnos y gracias por la dirección, los estaremos visitando. No pienso dejar que mis sobrinos se olviden de sus tías- Cherreen lo abrazó de nuevo –En verdad muchas gracias por hacerlo feliz. No nos decepciones.
Wooyoung tomó nota de jamás enfurecer a las jóvenes Horvejkul y les prometió lo que hacía mucho tiempo había hecho con Nichkhun –No creo tener motivos para dejarlo (por el momento) y ese tonto no volverá a dejarlos solos, confío en sus visitas.
Los jóvenes Horvejkul se despidieron, dejando un leve silencio a su paso; no era muy común para Wooyoung ver a familias tan liberales y con buena energía. Cuando la casa volvió a estar en su orden (ahora natural) le pareció que el estrés de ese día había valido la pena, si pensar en celos inexistentes y noticias más que “sorpresivas” podía dejar en el joven tailandés una sonrisa como la que ahora llevaba, el mal genio era un costo demasiado bajo.
Aprovechando las vacaciones y los nuevos guías turísticos (Cherreen y Yanin no dejaban de invitarlos a varios lugares) Wooyoung fue capaz desde su estancia en Tailandia, de conocer un poco de la cultura de su novio. Aunque este no había vivido mucho en ese país, se notaba que lo amaba y respetaba; sobre todo la comida, algo que Alex no dejaba de disfrutar. Después de visitar una pequeña parte de Bangkok y llenarse del verdadero Pho*; los Horvejkul, Jang y Sora terminaban su visita en un restaurante que daba al Wat Arun**, una verdadera belleza arquitectónica. Definitivamente esa ciudad le había dado bastantes ideas para sus proyectos de diseño en Estados Unidos ya pasada la noche, Sora les había regalado un momento a solas; desde que habían llegado que su atención no pasaba de Alex, Sarang o la joven que de cierta forma ya estaba lista para retomar su rutina.
-Yo me encargo de los niños por hoy, salgan, en serio- Wooyoung no esperó a más ruegos y Nichkhun parecía que tampoco deseaba contradecir a la chica, rápidamente los dos jóvenes estuvieron listos para salir.
-No le causes muchos problemas- Wooyoung se despidió de Alex que asintió con energía.
-Escucha a Sora- Nichkhun le acarició el pelo y al salir de la casa se dieron cuenta que por primera vez en meses, ambos estaban solos. En sus breves visitas a la ciudad habían encontrado algunos bares donde podían ser cariñosos sin llamar mucho la atención y como era lo que deseaban, entraron a uno que parecía ser el más sobrio de todos; con una decoración detallada pero minimalista y también un gran número de parejas. El camarero los llevó hasta un rincón donde la privacidad que daban los asientos rodeados de madera era bastante agradable.
Wooyoung tenía que aceptar que había extrañado bastante al tailandés durante su estancia en ese país, de hecho, agradeció mucho la tecnología por al menos poder verlo y hablar con él cuando se le daba la gana, pero por obvias razones nada se comparaba con ese beso que ahora compartían sin ningún afán y que literalmente, sabía a gloria.
-Demasiado tiempo- susurró el coreano yendo por el cuello de Nichkhun –Y la casa de Nabi tiene paredes muy delgadas.
El tailandés lo detuvo para besarlo y aprisionarlo un buen rato contra el asiento –Ya pedí la habitación de un hotel, así que calma tus hormonas. Me avergüenzas.
El coreano lo empujó fingiendo molestia – Mira quien habla, tengo bastantes fotos tuyas en donde lo único que falta es ropa.
Nichkhun lo besó levemente –Ya sabemos que el límite para ser inocentes es de tres días sin un mínimo de contacto físico.
Era algo que pocas veces lograban hacer; hablar sin peleas o conversaciones tediosas sobre el futuro. Tener cosas normales como tema de conversación era definitivamente lo que ambos necesitaban para disfrutar del calor y las especias que pertenecían a esa ciudad.
-¿Extrañabas Bangkok?
-Solo viví un par de años antes de irme, así que es raro.
-Es raro oírte hablar en tailandés, aunque no parece que suenes muy local
Nichkhun tosió por el comentario y se recargó en el asiento –No lo practico mucho.
-¿Alguna noticia de tus padres?- Era una gran lástima que los temas normales no duraran mucho.
-Quieren verme, pero sin ti.
No era extraño escuchar tal petición de los señores Horvejkul, de hecho lo veía venir, teniendo en cuenta que técnicamente Wooyoung había echado de la casa a la madre de Nichkhun la última vez que la vio –Acepta verlos.
-Pero…
-Yo esperaré en un lugar cercano por si tengo que rescatarte.
Las carcajadas del tailandés habían llamado más la atención de lo que había hecho su maldito y perfecto rostro.