Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El dinero ¿Compra el amor? por AndriiNaruu

[Reviews - 484]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aprovechando que tengo tiempo les traigo la actualizacion:D

Muchas gracias por sus reviews! Con respecto a las preguntas... No, nadie me respondio bien xd Bueno, excepto "Anonimo(EarthMelon) sí respondio bien el protagonista y "Mino" respondio bien quien era el malo:3

A LEER

  Sasuke no podía concentrarse por alguna razón. Llevaba días trabajando por inercia, ni se daba cuenta bien de lo que hacía pero cuando se daba cuenta simplemente se cacheteaba mentalmente y olvidaba eso, él tenía demasiado que hacer para perder el tiempo en cualquier estupidez.

 El día pasó rápido y ya deseaba irse, observó el reloj eran las cinco y cuarenta y cinco. Hoy podía irse temprano, mejor dicho, quería irse temprano porque aun tenía cosas que hacer por suerte nada que lo hiciera salir de su oficina…

 

-Jefe

-Dime –El teléfono lo distrajo-

-Tiene una visita, es…

-Sea quien sea dile que pase de una vez

-Si señor

-Gracias –Apenas escuchó la puerta abrirse levantó el rostro sin interés pero su interés creció rápidamente al identificar al que había entrado-

-Buenas tardes, perdone que esté aquí a esta hora –Naruto cerró y se acercó hasta quedar frente al moreno- Seguramente no suele recibir a nadie a esta hora

-No es usual, tienes razón. Siéntate

-Gracias, ya comenzamos con la fase del armado de la estructura, surgió un pequeño inconveniente con el encargado de todas las instalaciones eléctricas principalmente –El rubio colocó una estructura a escala en la mesa transparente entre ellos- El ascensor del sector C tuvimos que moverlo unos metros, el problema fue mío me disculpo pero se arregló rápidamente sin modificar mucho la estructura o el presupuesto, además…

-¿Cómo has estado?

-… -¿Era usual que siempre interrumpiera tan abruptamente una conversación?- Pues, bien ¿Y usted?

-¿Te importa? –Preguntó recargando su rostro contra su mano y su codo reposaba sobre el escritorio, parecía poco interesado en la respuesta-

-Si usted pregunta yo debería hacer lo mismo ¿No?

-Entonces no te importa

-¿Tengo que preocuparme? ¿Está enfermo o algo?

-Te importa

-… Usted es extraño –Sentenció seriamente-

-Quizás. Voy a necesitar que cada vez que me pongas al tanto de cada avance del centro comercial hagas una copia por escrito de todo

-La tengo –Interrumpió ganándose una mirada afilada-

-No había terminado

-Usted también me interrumpió

-Bien, touché. –Suspiró, no tenía ganas de pelear con el rubio- Necesito que lo pases por escrito a mi asesor financiero

-¿Por correo?

-Sí.

-Bien, lo haré

-¿Ya terminaste de trabajar?

-Esto es lo último que tenía que hacer hoy. Y me atrasé porque… -Sasuke no prestó mucha atención a esa parte porque se perdió en sus pensamientos- Me disculpo

-Bien, lo acepto –Pero sabía disimular que si había entendido todo- Una pregunta

-Diga

-Esas cosas –Con la otra mano señaló al rubio de lejos, éste alzó una ceja- En tu rostro ¿Qué son? –Naruto pasó una mano por su rostro-

-Ah, tatuajes –Una ceja del moreno se alzó con interés- ¿Qué?

-Cuéntame… -Hoy Sasuke actuaba especialmente extraño a los ojos del rubio-

-Una de estas –Señaló- Es una cicatriz difuminada, tuve un accidente de pequeño y cuando cumplí los 15 tenía un amigo que tatuaba y decidí tatuarme para que no se viera tan mal, luego entre ambos se nos ocurrió para balancear hacer como tres bigotes en cada mejilla… Con el tiempo se han asentado, especialmente porque no fueron tatuados en color negro puro sino marrón por eso a veces creen que es maquillaje o algo así

-Yo pensé algo así. Entonces eras algo así como un rebelde –Bromeó-

-No me sorprende… -Omitió el último comentario. Sasuke giró la silla observando el cielo oscurecerse- Me iré ya que le expliqué todo lo que venía a decirle, buenas tardes señor Uchiha

-Naruto… -El rubio apenas se había levantado, Sasuke quedo de perfil a él y simplemente preguntó- ¿Tienes algo que hacer ahora?

-No realmente -¿¡Para que había dicho eso!? Se dio cuenta tarde y se golpeo mentalmente por eso-

-Tu dijiste tener una buena relación con tu hermano…-Comentó observando la ciudad en su esplendor, Naruto observó algo como ¿Melancolía? En el rostro de su jefe- ¿Cómo es?

-¿Qué cosa?

-Llevarse bien con tu hermano…

-…

-¿Quieres contarme? –El rubio no contestó por unos segundos, Sasuke se puso de pie- Lo entiendo, es personal no preguntaré más sobre eso. ¿Quieres acompañarme?

-¿Acompañarlo?

-Quiero hablar con alguien… -Rodeó el escritorio hasta quedar frente a frente con el rubio- ¿Quieres acompañarme? ¿Cómo un amigo? –Mostró su mano-

-¿Quiere que seamos amigos?

-¿Por qué no? –Naruto dudó pero hoy Sasuke estaba extraño ¿En verdad necesitaría un amigo?-

-Bien, puede contar conmigo, lo escucharé –Tomó su mano y sonrió, Sasuke le regaló una pequeña sonrisa ladeada. Luego ambos se dirigieron a la salida… “Quizás un amigo con derechos” pensó el moreno riendo internamente-

 

  Sai enfocó mejor y tomó la imagen a lo lejos de dos personas abrazándose de lado y sonriendo, él sonrió observando la cámara en sus manos

 

-Eso es acoso –Se sorprendió volteando a su lado, Gaara observaba en la misma dirección que él mientras tenía una bebida en su mano- ¿Sabias?

-¿En serio? –El pelirrojo movió los hombros restándole importancia-

-Algo así, ellos no saben que los observas, tampoco que los fotografías

-Abogado tenias que ser ¿Cierto? –Sai recibió de respuesta una mirada con una ceja alzada “Exacto” y sonrió- Claro… -El pelinegro guardó la cámara y el pelirrojo comenzó a caminar, el moreno se colocó a su lado-¿Hace mucho estabas ahí?

-No, solo estaba caminando un rato. Y me pareció extraño observar a alguien con una cámara tomando hacia la nada, luego noté que eras tú y me acerqué a curiosear –Comentó como si nada, casi parecía no importarle-

-Entonces eres curioso

-Algo –Confesó, botó la bebida que ya había acabado y siguieron caminando, la puesta de sol se veía bien entre los edificios a su lado, o eso pensaba el pelirrojo al menos-

-¿Siempre eres tan callado? Y cuando hablas eres tan… ¿Poco expresivo? –Sai consiguió que Gaara riera bajo-

-Algo así. Si suelo ser serio y callado –Gaara se detuvo haciendo que Sai parara unos pasos más adelante-

-¿Qué?

-¿Por qué no tomas eso? –Señaló con el rostro hacia el crepúsculo entre los edificios- Se ve bien ¿No crees?

-Tienes razón… -Sai se dio su tiempo en colocar bien la cámara, en buscar el ángulo exacto, en enfocar perfectamente. Gaara lo notó y sonrió de lado, ese chico amaba la fotografía, era obvio- Listo, se ve bien en verdad. Mira –Le mostró la imagen al pelirrojo- Tenías razón, gracias

-A ti

-¿A mí?

-Claro, por hacerme caso –Sai sonrió-

-Comienza a oscurecer… -Comentó para sí mismo- Entonces, ¿Cómo has estado? ¿Mucho trabajo?

-Sí, un poco últimamente y yo pues, todo normal como siempre nada nuevo o diferente en mi rutina… ¿Tu?

-No mucho trabajo de hecho, he tenido tiempo para dedicarme a mí mismo y a mi cámara

-Eso sería bueno… Tiempo para uno mismo. Debe ser agradable y relajante tener un hobbie

-¿No tienes uno?

-No realmente, yo prefiero trabajar y gasto todo el tiempo que puedo en realizar bien mi trabajo. Nunca me he dado tiempo para descubrir alguna actividad extra que me guste

-Deberías

-¿Ah sí?

-Claro, todos necesitan algo de tiempo, relajarse de vez en cuando… -El silencio reinó un momento, pero el ambiente seguía sereno- Pregunta

-¿Mm? –Sai ganó toda la atención del pelirrojo que lo observó fijamente un momento, Gaara no era de los que huía a ver directamente a las personas, al contrario prefería observar de frente-

-¿Tienes hambre? ¡Porque hace rato que no como nada! –Gaara rió bajo y Sai rio un poco más abiertamente-

-Claro ¿Por qué no?

 

   Deidara soltó su cabello suspirando…

-Lo único que odio de la cocina es el olor que deja en mi cabello –Se dijo a sí mismo- Últimamente estas muy pensativo –Comentó en voz alta, al no obtener respuesta salió hasta la habitación del moreno y lo encontró acostado con el antebrazo sobre sus ojos- ¿Itachi?

-¿Hm?

-¿Estás bien? –A respuesta se ganó un suspiro- Ya veo que no… -Se sentó junto al moreno y tomó su mano- ¿Por qué no te bañas y así te relajas un poco?

-Sasuke ni siquiera me considera su hermano

 

  Deidara en ese momento se sintió derrotado, el tema de Sasuke no era uno que fuera precisamente alegre. Itachi usualmente solía quejarse de que Sasuke cada vez estaba más cerrado y frío mientras que Deidara solo escuchaba y trataba de animarlo, opinar mucho no tenía sentido su relación con Sasuke era inexistente una sola vez se habían visto frente a frente y todo había sido horrible y por lo que había hablado con Sai parece que con él Sasuke también tenía problemas ¿Es que acaso Sasuke no albergaba algo diferente al odio y al desprecio en su cuerpo?

 

-Claro que si, eres su hermano y nadie puede cambiar eso. Seguro dijo algo solo porque estaba molesto –Deidara se sentó sobre los muslos del moreno y con su otra mano tomó la que cubría el rostro de Itachi y la apartó- ¿Intentaste hablar con él?

-Me dijo que era tarde intentar sonar como un hermano preocupado…

-Debe haber una forma de hablar bien con él

-Dímela porque no la conozco

-No yo menos –Bromeó- ¿Qué pasa con Sai? ¿Tampoco lo escucha a él?

-Casi parece que fuera un extraño en su vida…

-¿Algún amigo?

-No le conozco ninguno

-Bueno tiene que hablar con alguien, no sé, quizás alguien de la empresa… ¿No has pensado quizás hablar con un profesional?

-¿A qué te refieres?

-Un terapeuta quizás

-Claro… Para que me diga que lo creo loco y se termine definitivamente todo

-… Me rindo… -Para Deidara era triste ver que Itachi se pusiera de esa manera por su hermano, se supone que los hermanos se lleven bien- ¿No quieres hablar de otra cosa? –Itachi suspiró y miró al rubio-

-Tienes razón, lo siento no debería estar fastidiándote con estas cosas

-Hey… -Soltó una mano del moreno y la llevó a su barbilla acercándose- No es fastidio, todo lo que tenga que ver contigo me interesa

-¿Todo? –Sonrió-

-Todo –Sus labios se unieron a los del moreno en un baile lento- ¿En serio no quieres darte un baño?

-Jaja, ve y yo te alcanzo

 

  Itachi observó al rubio entrar al baño y sonrió ¿Qué haría sin Deidara? El hombre lo entendía, no lo criticaba, lo escuchaba y además lo aconsejaba como podía… ¿Qué haría sin Deidara? Entonces recordó “Es Deidara o soy yo” “Es ese chico o es tu familia” elegir… ¿Podría elegir entre Deidara y su apellido? ¿Sería capaz? No, sentenció, no podría.

 

  Sasuke sonrió con burla mientras que Naruto rió entre dientes y mirando hacia abajo. Ambos estaban conversando y bebiendo en un bar no muy concurrido, estaban en una mesa alta alejada

 

-No creí que podría ser tan… Agradable

-Vaya, gracias es el cumplido más grande que me han dado

 

  El rubio volvió a reír, en verdad ese día Sasuke estaba siendo diferente, el moreno no llevaba el saco puesto y la corbata tampoco, su camisa tenia los primeros botones abiertos y las mangas arremangadas. Naruto llevaba el chaleco abierto la simple camisa manga larga también tenía las mangas arremangadas. Era obvia la diferencia, Sasuke vestía dinero y poder, el traje ya formaba parte de sí y aun desarreglado, el reloj ayudaba a que el precio del traje fuera claramente alto, mientras que Naruto era simple se notaba que para intentar estar más elegante usaba el chaleco pero no le quitaba que se viera bien, solo se notaba un chico cualquiera nada extraordinario.

 

-Usted… Actúa extraño, hoy más de lo normal –Sasuke lo miró dudoso- No entiendo si le agrado o me odia y solo quiere regodearse frente a alguien que no puede negarse porque es su empleado… Ni idea

-¿Quieres saberlo?

-Mm… No, quizás no jaja

-Qué lástima ya estaba pensando en mi discurso

-Dígalo

-En verdad no lograré que me trates de tu ¿Verdad usuratonkachi?

-Y usted no dejará de llamarme así, teme

-No, no creo.

-Teme dijiste que querías hablar ¿De qué era? –Estaban fuera de horas de trabajo ¿Qué mas tenia tratarlo de tu?-

-Eres entrometido dobe pero tienes razón… Quería hablar –Sasuke dirigió su vista al vaso entre sus manos- Pero ¿Qué importa? No creo que realmente hayas venido porque quieres escuchar mis cosas. Ya lo dijiste, no te niegas porque soy “el jefe” –Hizo comillas en el aire-

-Yo creía que tenías una autoestima más alta que la torre Eiffel, te pregunté ¿No?

-… -Sasuke alzó una ceja ¿Quería saber? ¿Le importaba lo que el moreno quería decir? Sonrió pero el rubio no lo notó- Usualmente nadie se preocupa por lo que tenga que decir

-Para eso es un amigo

-No tengo amigos

-Ah que mal –Fingió tristeza- Yo creí que era verdad que quería que yo fuera su amigo

-Jaja, tienes razón. –Naruto bebió y notó que el moreno en realidad si quería decir algo, su mirada lo decía todo, estaba reprimido ¿En verdad Sasuke no tendría con quien desahogarse? ¿Nadie que escuchara cuando tenía problemas? Porque seguramente debía tenerlos, era humano después de todo-

-Mi hermano lo es todo para mí, y sé que yo también le importo demasiado –Comentó tranquilamente mirando hacia otro lado, quizás dar el primer paso ayudaría a Sasuke a abrirse con los demás. El hombre parecía necesitarlo- Sí, somos huérfanos y desde pequeño he visto a mi hermano trabajar día y noche para mantenernos a ambos, a mi principalmente que soy el menor… Para darme educación, comida, ropa, juguetes todo lo que necesitara

-… -Sasuke en realidad estaba interesado en la conversación, Naruto estaba siendo sincero, contándole algo personal que no tenía que decirle si no quería. Era fácil notar que la mirada celeste se encendía al hablar de su hermano-

-Es gracias a mi hermano que estoy donde estoy ahora

-Debe ser trabajador

-Sí, mucho

-Quizás me agradaría conocerlo

-¿Por qué? –Preguntó sin comprender-

-Suena a alguien admirable y dedicado ¿Por qué no? –Naruto movió los hombros restándole importancia- Yo en cambio naci en cuna de oro, Sharingan existe desde hace tanto tiempo yo jamás pensé que al final quedaría en mis manos su futuro… Papa siempre prefirió a mi hermano mayor –Naruto lo miro extrañado, Sasuke casi leyó sus pensamientos sin siquiera verlo- Murió –El rubio mostró sorpresa- Y fue difícil sobresalir, era el pequeño, el que nunca sería suficiente el que debía esforzarse diez veces más para lograr algo. Lo logré pero aun así nuestra relación jamás fue perfecta

-… -Naruto por primera vez, vio un lado más sincero más humano de parte del moreno, Sasuke hablaba tranquilamente pero detrás se ocultaba algo como inseguridad o quizás como exasperación ¿Cuánto tendría el hombre aguantando decir todo eso?-

-Solo me volví “el sustituto” y obtuve la atención de mi padre, no su amor, no su cariño

-¿Y tu mama?

-… Mamá jamás tuvo preferencias, entre ninguno. Él era el mayor, yo era el menor punto, siempre nos apoyó en todo pero cuando papa puso su atención en mí todo cambio, ya nuestra relación no era de madre e hijo ni siquiera sé como nombrarla, me siento mal cuando recuerdo que, a pesar de no decirlo, ella se decepcionó de mi –Naruto no comprendió- Yo lo dejé todo atrás, yo preferí ser una copia de mi padre ser un Uchiha ser un buen empresario, el jefe de Sharingan Corp. Abandoné mis amistades, mi vida social, abandoné todo lo que no tuviera que ver con la empresa.. La soledad se convirtió en mi única amiga hasta el día de hoy… -Observó al rubio- Hoy conseguí un amigo, ¿O no?

-Jaja, claro teme –Ambos chocaron sus vasos antes de volver a beber-

-No suelo hacerlo pero, gracias

-¿Por?

-Por escuchar…

 

 

-Comes mucho –Comentó Gaara gracioso-

-Solo se vive una vez, además no debería molestarte no saldrá de tu bolsillo

-No claro que no, de ser así ya hubiera salido corriendo

-¡Ah! ¡Me abandonarías!

-Seria idiota si no lo hiciera

-Ja, ja que gracioso… ¿No quieres? –Ofreció al pelirrojo acercando sus palillos con comida al otro que alzó una ceja- ¿Qué? ¿No quieres?

-Ja, no saldrá de mi bolsillo ¿Por qué despreciarlo? –El pelirrojo tomó con sus manos el pedazo de carne y lo comió tranquilamente-

-Bueno ¿Cierto?

-Si si

-Que odioso

-No me dices nada que no haya escuchado antes

-Lo supuse…

 

  Para cuando salieron ya la noche estaba avanzada…

 

-Mañana es sábado –Comento Sai para sí mismo- Hay cosas que hacer

-¿Trabajo?

-Algo. ¿Tu? Los abogados suelen llevar trabajo a casa ¿No?

-Sí, algo. Pero es poco, es algo rápido

-Entonces ¿Quieres hacer algo mañana?

-¿Hacer algo?

-No conozco muchas personas aún, pocas de hecho ¿Te importa? –La expresión facial del pelirrojo demostró que no-

-No realmente. Ahora que lo pienso, ni siquiera tenemos el número del contrario

-Tienes razón

-Las veces que nos hemos visto ha sido por casualidad, no me sorprende –Se intercambiaron teléfonos y luego volvieron a entregárselos- Yo voy por allá

-Yo voy al contrario

-Entonces supongo que nos vemos

-Claro –Sonrió-

 

  Sasuke suspiró colocando ambos codos sobre la mesa

 

-¡Por fin mañana es sábado! –El moreno observó al rubio estirarse, le había leído la mente él estaba pensando lo mismo- Día para descansar

-Algunos…

-¿Trabajas también en sábado?

-Tu estas empezando dobe, yo en cambio llevo toda una empresa sobre mí

-No es bueno tanto trabajo

-¿Quieres hacerlo tu?

-No gracias, bien por ti jaja

-¿Día o noche?

-¿Qué?

-Ya me oíste, tengo curiosidad ¿Qué prefieres? ¿Día o noche? ¿Frío o calor?

-Día y calidez, no es que me agrade el calor ¿A quién sí?

-Ja, tienes razón…

 

  Las horas siguieron pasando entre charla y charla, Sasuke estaba en realidad interesado en conocer sobre el rubio, algo, algo que pudiera encontrar para acercarse como quería, algo en común con el rubio… Para su sorpresa tenían cosas en común y eran contrarios a la vez. Quizás Naruto si pudiera ser algún día un amigo, pero ahora mismo esa no era la intención del moreno no estaba ni cerca.

  Naruto en cambio simplemente quería conocer un poco más al moreno, Sasuke era un hombre frío y serio pero con él parecía ser un poco más abierto y ese día parecía tan triste tan pensativo, en realidad parecía necesitar un amigo como si en verdad le importara el rubio y quisiera su amistad ¿Podría pasar? ¿Quizás Sasuke simplemente era cerrado y necesitaba alguien con quien abrirse? O era solo ese día, esas bebidas las que habían hecho que el moreno fuera tan agradable.

  Ya la madrugada llegaba… Para cuando iban de salida el auto de cada uno estaba lado a lado

 

-Nos vemos teme ¡Buenas noches!

-Naruto –Lo llamó captando la atención del rubio- Me agradas –Naruto sonrió sinceramente logrando así hacer sonreír al moreno, esa sonrisa ¡Esa era la sonrisa que quería del rubio! Naruto mostró su mano y Sasuke la tomó- También me gusta esa sonrisa

-… Eso es raro –La sonrisa del rubio se borró-

-¿Por qué? ¿Porque me gusta tu sonrisa?

-No es normal que un hombre diga “me gusta” a otro hombre

-¿Por qué? Tú ya lo sabías, ya te lo había dicho

-Aunque así sea –Naruto parecía hablar en serio. Esto sería más difícil de lo que creía Sasuke- Es raro

-Bueno, ya me habías denominado raro ¿No?

-Deberías ser abogado, nunca quieres perder

-Soy un Uchiha, nunca pierdo

-¡Ya quisieras teme!

-Obsérvame dobe. Yo nunca pierdo

 

  Sasuke entró a su auto alejándose, rió recordando que lo último que había visto en el rostro del rubio fue una mueca de molestia. Intento ocultar su sonrisa detrás del dedo sobre sus labios pero no le fue posible, estaba… Alegre ¿Alegre? ¿Hace cuanto no experimentaba la alegría? Naruto era alguien real, sincero, el rubio realmente había mostrado interés en ser su amigo y saber de él…  Además había conocido más al rubio, un poco más profundo. Ese hombre llamaba su atención era en verdad necesario que fuera suyo, de algún modo u otro… Tenía que serlo.

  Entró en casa notando todo a oscuras y cayó sobre su cama aún sonriendo con prepotencia, Naruto era una conquista difícil, pero no imposible, no, él ya lo había dicho Sasuke Uchiha nunca perdía y Naruto no sería la excepción. Parecía idiota pero es que ese hombre era diferente, lo hacía salirse de sus casillas con sus palabras, lo traía de vuelta a tierra con las mismas y le atraía más allá de solo lo físico. Naruto Namikaze definitivamente ponía el mundo perfecto y tranquilo de Sasuke Uchiha, de cabeza.

 

*****

 

   Karin siguió a la mujer de traje negro por la inmensa casa, observando sonriente a todos lados siempre que iba a la mansión Uchiha se decía a si misma que esa era la clase de vida que debía tener, cuantas cosas, cuanto terreno, todo. La señora que iba cada mañana excepto los domingos a limpiar la guió hasta la sala y luego subió las escaleras para buscar a su patrón. Dos toques fueron suficientes para escuchar el “pase”

 

-Señor, tiene una visita

-¿Visita? –Sasuke elevó la vista del libro en sus manos, tomó el jugo que aun reposaba en la bandeja con su desayuno ya acabado-

-Es la señorita Uzumaki

-… -“Maldición” pensó- ¿La dejaste pasar? –Preguntó con una mano sobre su cabeza, luego se quitó las gafas de lectura-

-Está en la sala señor –Sasuke suspiró ¿Cómo evadirla?-

-Está bien Mizuki. Ya iré a verla –Ella tomó la bandeja saliendo de la habitación, Sasuke observó fuera de la ventana a su lado… Luego salió para encontrarse con la mujer-

 

  Sai bajó las escaleras tranquilamente, ya estaba cambiado una simple camisa y un simple pantalón, después de todo, no tenía pensado salir, no aún, pero su vista se detuvo en una mujer en la sala. Alta, cabello rojo, lentes, tacones, cartera, pantalón, camisa, chaqueta… Era obvio que dedicaba mucho tiempo a sí misma, que gastaba mucho en su apariencia.

 

-¿Y tú eres?

-Yo pregunto lo mismo –Respondió el moreno seriamente, la forma de hablar de la mujer era de superioridad, como si quisiera parecer más de lo que era-

-Yo soy Karin –Ella sonrió, muy falsamente, se levantó acercándose a él y mostró su mano, perfectamente pintadas uñas- Uzumaki Karin

-Karin… -Repitió, claro ahora sabia quien era- Soy Sai Shimura

-¿Eres pariente de Sasuke? Porque usualmente nadie está aquí…

-No realmente –Respondió Sasuke apareciendo en la habitación, ella rápidamente se alegró-

-¡Sasuke!

-Ni siquiera recuerda quien soy –Comentó Sai como si nada-

-¿Te conozco? –Ahora intentaba actuar amablemente, Sai sonrió burlón, claro si ella lo que quería era parecer la mejor persona del mundo frente a Sasuke-

-Claro que lo conoces. Es Sai, el primo putativo de Itachi

-¡Ah! –Solo entonces ella comprendió, claro, hacía años no veía a ese hombre antes era un chico- ¡Claro! ¡Sai!

-… Yo no interrumpo más

 

  Sai salió de ahí, ella recordó él solía estar mucho en esa casa casi parecía vivir ahí y para Mikoto, Itachi y Sasuke estaba bien, pero para Fugaku no y luego Sasuke pensó igual, Karin pensaba igual, Sai no era nada, no era nadie solo un agregado con ganas de tener posición económica.

 

-¡Sasuke! –El la miró como siempre, seriamente, ella sonreía- ¿Qué haces vestido así? ¿Acabas de despertar?

-Algo así… -Sasuke usaba su usual mono y una camisa ligera, como si nada, tomó asiento en el sofá y ella rápidamente se sentó junto a él-

-Pero ya pasan de las 11

-¿Y?

-Claro, tienes razón –Karin no solía llevarle la contraria, lo último que quería era ver a Sasuke molesto- ¿Quieres ir a cambiarte?

-¿Para qué?

-Para que me acompañes, necesito hacer algunas cosas y pensé que quizás querrías acompañarme y pasar tiempo juntos

-¿Qué te hizo pensar eso?

-¡Sasuke! –Se quejó- Vamos, acompáñame –Se abrazó a él- Por favor –Sasuke la observó sin interés ¿Qué podía perder?-

-Está bien

-¡Sí! Bien, te espero ve a cambiarte –Hablo rápidamente-

-No me des ordenes –Fue lo último que dijo antes de perderse, ella suspiró complacida-

 

  Sai que no se había mantenido muy lejos sonrió con gracia, “Pobre”  pensó alejándose, no era su intención escuchar pero pasó y era obvio para él que Sasuke no soportaba mucho a la mujer, y ahora debía pasar tiempo con ella. Según lo que recordaba ellos se llevaban pero no totalmente bien, parecía que ahora menos, claro no le sorprendía si Sasuke se había vuelto más cerrado y ella seguía siendo como antes, una acosadora.

  Llegó a la cocina saludando a Mizuki y tomó lo primero que encontró en la nevera para comer, ya había desayunado hacía mucho y había trabajado también, ahora tenía ganas de hacer algo, de distraerse con cualquier otra cosa… Salió por la puerta corrediza hacia el jardín y mientras terminaba de comer simplemente caminó, caminó observando alrededor y pensando…

  Sasuke desde su ventana observaba afuera mientras se colocaba la camisa y ataba los botones, su vista se detuvo sobre Sai caminando por ahí… Sai había cambiado poco si lo pensaba, en los años que tenía sin verlo estaba poco cambiado, más alto sí, quizás algo mas relleno, siempre fue muy flaco, el cabello lo llevaba un poco más corto y tenía más color en la piel, de pequeño casi no tomaba sol, decía que no le gustaba. Rió de sus recuerdos pero volvió a su seriedad rápidamente antes de salir a encontrarse con la pelirroja. ¿La actitud de Sai habría cambiado? Se preguntó, porque apenas había tratado al moreno, no se había dado cuenta…

  El manejaba sin prestar mucha atención a todo lo que la chica decía, hablaba mucho y él poco interés tenía en oír. Solo manejaba, respondía momentáneamente y ayudaba a la chica con sus compras ¿Por qué no le agradaba mucho la chica? “Jamás debí meterla en mi cama” pensó recordando. Claro, eso fue lo que cambió todo. Siempre supo que Karin estaba enamorada de él pero jamás lo tomó en serio, sin embargo después de un tiempo notó que la chica no era fea, en realidad tenía un hermoso cuerpo y aprovechándose de los sentimientos de ella, la hizo suya. Pensó que quizás después de eso Karin olvidaría todo, se conformaría con haber estado con él y que eso era suficiente pero no… Ella creyó que eso solo hacia más fuerte la relación entre ellos, relación que no existía.

  Había metido la pata. Karin se volvió más acosadora y obsesiva con él después de aquello ¿Ahora qué podía hacer?

 

-Sasuke detente allá

 

  Apenas salieron del auto la chica se guindó a su brazo y a él poco le importó en ese momento, no tenía ganas de pelear con ella solo se dejó hacer pero apenas tocaba su mano él la alejaba, esas cosas no iban con él. Sasuke era libre y le gustaba serlo, eso de tener algo serio no estaba en sus planes mucho menos con Karin, mucho menos esas demostraciones cursis de amor en público, no con él.

  La mujer lo hizo entrar en el centro comercial y en cada tienda que podía, a veces pensaba que era demasiado bueno con ella ¿Seria porque en realidad después de tantos años le tenía aprecio? ¿O porque le tenía lastima? Ya ni sabía.

  Pero mientras estaban en una tienda su vista se dirigió afuera por el vidrio transparente, su mirada mostró sorpresa ahí frente a él iban pasando Itachi y Deidara tan alegres, tan sonrientes, sintió rabia quizás asco ¿Cómo podía Itachi pasearse tan tranquilamente con ese hombre por ahí? ¿Cómo podía abrazarlo? Sin darse cuenta había salido de la tienda siguiéndolos a la distancia… Iban caminando lado a lado, hablando, sonriendo, empujándose algunas veces. ¿Sabrían acaso lo estúpidos que se veían?

  Pero… Pero toda rabia se transformó en tristeza sin darse cuenta. ¿Estaban sonriendo? ¿Estaban en verdad felices? ¿Por qué Itachi se veía tan feliz junto a ese hombre? ¿En verdad le importaba tanto? ¿Por eso había defendido tanto al rubio frente a Fugaku? ¿Por él había renunciado a todo? Itachi se veía… Feliz… Algo que usualmente no notaba en el hombre, felicidad, ¿Por qué? ¿Por culpa de Deidara? O seria quizás… ¿Por culpa de Sasuke? “Mi hermano lo es todo para mí” recordó que Naruto había dicho, y lo anheló… En silencio anheló una relación así, de hermanos, una que hacía mucho no tenía y no notaba cuanto extrañaba.

  Se detuvo observándolos alejarse, ¿Estaba mal en decir que Deidara no le convenía a Itachi?

 

-¡Sasuke! –Karin lo devolvió a la realidad llamándolo, entonces reaccionó. No, el no estaba equivocado, después de todo Fugaku pensaba igual, Itachi no debía estar con Deidara eran totalmente diferentes, quizás solo era la ilusión momentánea la que hacía que se vieran tan alegres- ¿Por qué me dejaste sola? ¿Pasa algo?

-No, solo sigamos…

 

 

 

Notas finales:

¿Merece review?

Bye!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).