-Ya, ya.. maldita bruja ¡¡Soy yo!!
-¡¿Qué?!
-Creo, que escuche mal. Tony que quisiste decir con eso.-Dijo Bruce tratando de buscar la lógica en el comentario que su amigo acaba de gritar, mientras con sus manos temblorosas limpia sus lentes.
Los demás solo observan al genio esperando a que agregará algo más. Natasha ya más relajada se quita de encima de Tony y se le queda mirando con impaciencia.
- Habla que acá nadie entendió nada.- Ordeno la pelirroja.
-Ya, ya les contare todo pero antes podrían sacarme esto.-Señalando las esposas en sus manos. Todos negaron con la cabeza.
-Oh vamos.- Se queja este último. Estaba apunto de revelar su mas grande secreto y estos tarados no le tenían la más mínima compasión.
-Te conocemos muy bien Tony, las esposas se quedan hasta que hables.-
-Ufff está bien, como sea, esto pasó como hace unos 12 años atrás…
~Obviamente hace Doce años atrás~
-Estúpido Howard, Jarvis traidor, estúpida junta, estúpido guardias, estúpido negocios.-Murmuraba un joven castaño mientras caminaba en círculos en su oficina.
-Tony, no sacaras nada, resígnate.-Dice una mujer peliroja entrando a la oficina con una actitud cansada y una montaña de papeles en sus manos.
-Es que no es justo Pepper.-
-Lo se Tony pero es tu Padre.-
-Y uno como la mierda.-
-Tony!!- Regaño la joven a su amigo y jefe. Hace tan sólo un par de horas Howard Stark, había entrado al edificio con su hijo a rastras. Creando un increíble escándalo en pleno lobby.
-Pepper puedes hacerme un favor, no como tu jefe, si no como un amigo. si?-Ruega Tony hacia su amiga poniéndole ojos de gatito maltratado. A los que su amiga no se pudo resistir.
-Uf está bien que quieres.-
-Escaparme.-
-Tony.-Advierte la mujer.
-Por favor.-
-Sera difícil, el edificio está bien custodiado.-Obviamente Pepper se dejo vencer muy pronto..pero no evito poner su cara de resignación patentada por Pepper Potts.
-Ya lo sé.-Exclama el genio, a lo que saca un papel y rápidamente escribe en el.-Consígueme todo esto de la lista, nos vemos en 30 minutos.- Dijo dándole la lista a su asistente. La cual al leerla puso un gesto decepcionado.
-Espera es ¿en serio? Acaso ya lo tenias todo planeado?-
-Sí, sí, es mi plan G.. solo hazlo.-
-Ok.-
~Unos minutos después~
-Tony creo que es una pésima idea. Aunque creo que resultara.-Menciona una incrédula Pepper observando a su amigo complemente trasformado.
-No seas pesimista. A que no dirás que me veo sexy.-Dice Tony realizando poses para su amiga con un muy buen disfraz de mujer.
-Omitiré comentarios.-
-Vamos Pepper un cumplido por último o que. ¿Me veo mejor que tú?
A lo que Pepper decidió guardar silencio, examinando a Tony y no era para menos ya que para ese instante su amigo estaba con un vestido gris corto suelto de la cintura, unas botas café claro con tiro largo y un abrigo negro, sin olvidar de la peluca castaña y el maquillaje perfecto. Como era remotamente posible que Tony supiera maquillarse. Sí, Tony a sus 19 años ya se consideraba sexy ahora vestido de mujer se encontraba todo un primor.
-Ya Tony deja de tocarte los pechos y ahora vete, antes que me arrepienta.-
-Gracias Pepper, te amo.-Dice Tony abrazándola antes de salir por la puerta con un inusual contorneo.
Ya casi fuera de las instalaciones de industria Stark, Tony camina con gracia hacia su libertad hasta que uno de los guardias lo detiene.
-Su nombre señorita.-
-To To Tofi.- "Que clase de nombre es ese, no pudiste inventar algo mejor", se regañaba Tony en su cabeza.-Si, Tofi ese es mi nombre jajajaj- Rio con nerviosismo mientras giraba los ojos hacia una esquina para evitarse más vergüenza.
-No está en la lista, necesito su identificación.-
-Yo ya me voy.-Se escusa antes de correr...
-Su identificación.-Insiste el guardia atrayendo a dos más que se colocan a cada lado de Tony. Si estaba jodido y más vestido de mujer en la entrada de la empresa de su padre, tenía que salir de allí, sea como sea.
-Miren, ese es Anthony Stark.- Grito Tony apuntando a cualquier lado, consiguiendo que los guardias se descuidaran y el aprovechando de huir.
-Oye tú, detente.-Grito uno de los guardias.
-Sí seguro.- Grito Tony corriendo por las calles.
-Atrápenla.- Grito otro guardia.
-Mierda.-Dice Tony tratando de escapar de esos guardias adentrándose en las calles de Brooklyn.
~2 horas después~
-Uf, creo que los perdí de vista.- Deteniéndose en un parque finalmente. Tony se queda contemplando el lugar mientras intenta calmar su respiración .-No sé dónde mierda estoy.-
Ya más tranquilo y sin los latidos de su corazón taladradole los oídos. Tony decide caminar por el parque, mas relajado y feliz, bueno ya se habia salido con la suya. Así que ahora a disfrutar.. Ninguna persona que trascurría por el lugar lo reconocio, pero eso no descarta que más de un hombre o mujer se le queda observando embobado, generando que su orgullo crezca todavía más. Tan concentrado o mejor dicho distraído estaba que no noto a los guardias entrar al mismo parque hasta que escucha sus gritos.
-Entro por aquí.-Grito uno de los guardias desde la misma estrada por donde Tony había llegado..
-Rayos son persistentes, que hago?, que hago?- Murmura este presa del pánico. Mirando a todas las direciones en busca de algo o alguien que usar de salvavidas. Cerca suyo ve entonces una banca con un joven rubio en ella.-Ya se!!
Sin esperar más se acerca a la banca donde está el muchachito y se sienta junto a él, el otro no se percata de su presencia a sí que Tony lo jala del brazo acercándose a su oído para hablarle.
-Niño abrázame.-
- Que?! P-per perdón?.-
-Me están siguiendo, solo abrázame carajo.- Rechino Tony ya desesperado viendo que los guardias se acercan a él.
Gracias al cielo el muchacho le hizo caso y abrazo a Tony, al principio un poco torpe pero al pasar un tiempo se aferró más a él. En cambio Tony no se movía por justa razón hasta que se dio cuenta que los guardias pasaron de largo, espero un tiempo más y luego se aparto del niño.
-Gracias niño, me salvaste.-
-S-Steve, es mi nombre.-
-Yo soy…María, si María ese es mi nombre.- "En serio Tony, no tienes imaginación, por lo menos no fue Tofi. Eres pésimo con los nombres", se regañaba mentalmente Tony.
Pero al contemplar a su “salvador” se fijó que era un joven no más de unos 15 años, rubio de ojos azules, famélico, que se nota que había estado peleando resientemente y obviamente él no gano. Pero ante todo pronóstico Tony lo encontró lindo. Mas como se había presentado ante él con un adorable sonrojo en su cara, si definitivamente era lindo. Pero todo lo bueno tiene que terminar y estaba perdido, tendría que llamar a Pepper para que lo viniera a buscarlo.
-Ya Steve, me tengo que ir, gracias por la ayuda.- Contesto Tony mientras se levantó para irse de su lado pero es retenido por una pequeña fuerza en su brazo. Si, la lindura lo está tomando la mano.
-Lo.. lo siento, yo no, yo no debía.-
Tony para ese instante tampoco quería irse, la razón ni él mismo lo sabe pero esos ojos azules lo habían cautivado, pensó que podría sacar partido a la situación.
-Invítame algo y me quedo.-Responde con una coqueta sonrisa produciendo un sonrojo mayor en el rubio.
-No, no tengo nada, me lo quitaron.-Dice bajando la vista a sus pies.
"Patético" era el pensamiento de Tony "¿así lo me quiere conquistar? ¿A Mi? Con su patética cara de perro mojado," no él valía mucho más.
-Uf haber espera acá.-
Sin dejar tiempo de responder, Tony se fue de su lado abandonándolo a su suerte. Despues de llamar a Pepper y escuchar todo un discurso sobre la responsabilidad y de las noticias de un furioso Howard amenazando a media ciudad, por la irresponsabilidad y libertinaje de su hijo. Vago unas cuantas horas por los alrededores, ya que su amiga le tomaría más tiempo en ir a buscarlo, consiguió uno que otro número de chicos y chicas, sí él era todo un rompe corazones sea el género que sea, era todo un Stark. Asi después de un tiempo le dio hambre así que decido comer lo más sano según él, un café negro bien cargado y una caja de donas. Si el manjar de los manjares. Estaba tan feliz bebiendo su café pasando por el parque que en un momento a otro paro de caminar.
-¿Estará aun ahí?- Murmuro para sí. Recordando al muchacho rubio de la cara simpatica-No creo, sería un estúpido en esperarme.-Miro su café.-No es mi problema.-Y se marchó por donde vino.
Pero no dio ni dos pasos y ya estaba devolviéndose al parque, más específico a la banca donde había dejado al muchacho, estaba dividido si debía sentirse feliz o enojado al verlo ahí. Porque para su sorpresa Steve aún estaba ahí. Esperando.
-Aun estas acá, eres idiota.-Le respondió con fastidio a Steve, pero se notaba mas feliz de que no se haya ido y luego se sintio mal porque lo espero todo ese tiempo.-Tómatelo.- le ofreció su café a medio terminar...
-Gracias.-Sonrió mientras recibía el café de Tony.
-Eres un idiota, lo sabes.- Menciona enarcado una ceja, mientras come una dona.
-Sabía que volverías.-
-Mentira… ya te ibas a ir.-Se excusó este un poco sonrojado.
-Pero tú llegaste.-
-….-
Tony con ese comentario, sintió como algo se removía desde su estómago a su corazón. "Espero no estar enfermo" pensó...
~Unos meses después~
-Tony aun sigues viendo a ese muchacho.- Menciona una preocupada Pepper por su amigo ya que desde esa tarde en el parque Tony se a empeñado en escaparse casi todo los días y mas enzima disfrazarse de mujer, todo por un enamoramiento de este último. Que se negaba en reconocer.
-Sí Pepper, porque te molesta que no te tome atención, no sienta celos es malo para tu piel.-Se escusa Tony.
-Tony lo digo en serio, cuando le dirás, bueno tu sabes, que eres un chico.-
-Todavía no, no es el momento.-
-Tienes miedo a su rechazo?-
-…-
-Tony si él te quiere te acep…
-Señorita Potts, me deja hablar a solas con mi hijo.- Dice Howard entrando a la oficina, interrumpiendo la conversación de ambos amigos.
-Sí Señor, con su permiso.- Obedeció la mujer retirándose del lugar.
-Que quieres.- Fue la respuesta cortante de Tony.
-Eso es lo que yo quiero saber.-Dice adentrándose a la oficia, quedando enfrente del menor.-Me puedes explicar que es esto.-Arrojándole en el escritorio fotos de Steve y el vestido de mujer.-
-No sé de qué me hablas.- Se escusa Tony.
-Bueno si no te importa que mis hombres vallan por ese tal Steve Rogers.-Dice desafiante Howard.
-No!! Ni se te ocurra.-Gruñe Tony.
-Entonces harás lo que yo diga.-
-Que quieres.-
-Que cortes este jueguito tuyo. Te vas mañana al extranjero a perfeccionar tus estudios.-
-¡¿Qué?!
-Te iras mañana, ahora te escoltara unos de mis guardaespaldas para que no hagas nada estúpido.-
-Y si me reusó.-
-No lo haras, si estimas a ese muchacho ni lo pensaras.-
-Bastardo.-
-Soy tú Padre y se harás lo que yo diga.-
Sin más Howard se retiró de la oficina de su hijo dejando tras de sí a un herido Tony y a un guardia vigilando sus movimientos.-
-Que hare.-Murmuro un deprimido castaño, soltando unas cuantas lágrimas de impotencia.
~En la actualidad~
-Y eso paso, contentos.- Dice Tony como si nada ante las miradas atónitas de sus amigos.
-Uy tu padre era una mierda Tony.- Menciono Clint soltando lo primero que se le vino a la cabeza por lo que escucho del genio.
-Y ¿qué paso después? Pregunto una calmada Natasha.
-A que te refieres.-
-A que por que te tomo tanto tiempo en reencontrarte con Steve.-
-Bueno, me tenían vigilado las 24hrs. Todo el tiempo, sin mencionar que estaba al otro lado del mundo.
-Me refiero al accidente, como supiste y como, pudiste tu sabes.-
-Pepper, ella me ayudo. Costeé todo el tratamiento su estadía y recuperación pero más haya no podía hacer con Howard enzima mío.-
-Hasta que murió ¿no?
-…-
-Tú papa murió?.... Tony?
-Como hace 6 años.-
-Y es por eso que cuando el murió volviste.-
-Era más que obvio Clint.-
-Cállate Banner.-
-Pero porque te tomo tanto tiempo Tony.-
-Por culpa del Mapache.- Declaró el castaño mirando a Bucky con odio.
-¿Yo?
-Que acaso se te olvido la mentirita que me diste esa vez.-
-Oye te lo vuelvo a repetir. Que un desconocido golpee tu puerta a las dos de la mañana preguntando por tu mejor amigo y con una foto de ambos cuando éramos chicos ¿no es para sospechar?
-Espera ¿qué?- Todos miraron a Tony y a Bucky sin comprender, acaso estos ya se conocían y peor Bucky ya sabía sobre Maria y Tony?
-Y se te ocurrió mentirme, por tu culpa me demore más tiempo en encontrarlo.-
-Si pero gracias a Nat que lo encontraste.-
-Y que haras ahora Tony.-
-….-Ni el mismísimo Tony Stark sabia como contestar a eso.
-No le dirás que eres María?
-Su novia de juventud?
-¿Que Tony es quién?- dijo Steve entrando por la puerta de la cocina con un semblante cansado y serio?... todos quedaron congelados.
"Mierda nos escuchó" Fue el pensamiento colectivo.
Fin?