Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Los Ilusionistas por Huitzil

[Reviews - 14]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

DIECIOCHOAVA ILUSIÓN

Daniel trataba de recuperar el aliento pero aún no se recuperaba de haber nadado tan profundamente al lago cuando vio fijamente que Lionel no respiraba, ¡Maldición! No respiraba y todo era su maldita culpa, si no hubiera sido tan avaricioso, si hubiera confiado un poco más en ese hombre que los fue a buscar hasta el otro extremo del mundo.

Las personas en el mercado hablaron maravillas de Dylan, contaban que incluso parecía una película y gracias a Merrit una mujer con cámara les regalo las fotos y la historia narrada por sus subconsciente como paso, ahora Rhodes pasaba de ser el quinto jinete a ser “el mejor puto hombre del planeta” – según palabras de Merrit y que nadie quiso refutar.

- Vamos Dylan – gruño por lo bajo Daniel dirigiendo sus labios al contrario para darle respiración boca a boca – Lograste abrir esa maldita puerta de metal, lograste salir…. No puedes dejarnos aquí tirados maldito infeliz – tomo aire y lo deposito en la boca del otro nuevamente esperando que recuperara la conciencia presionando con las manos y contando en su mente – Tú no puedes… no ahora que sabemos quién eres Shrike –

Dylan se encontraba en aquel lugar nuevamente, en aquellas pesadillas tan reales y temerosas que desde niño lo abordaban, el lugar donde su padre había muerto. Su reloj seguía avanzando en su muñeca y a diferencia de muchos otros sueños él ya no era un niño.

- ¡Padre!- grito cuando vio como la caja caía al agua y sin pensarlo se lanzó al agua desesperado.

- Hijo – unos brazos lo rodearon con suavidad antes de adentrarse por completo al agua que apenas y le llegaba a la cintura. Sintió una tibieza en su cuerpo. No podía ver el rostro de su padre que estaba tras de él pero sabía quién era por la voz – shhh….- le escucho calmarlo como cuando niño en las noches de tormenta, de la nada se sintió flotando, sin más problemas, sin más de nada – es magia…. ¿lo sientes? La magia no significa dolor, ni sufrimiento, ni venganza, debes dejarla fluir. Ya te lo había explicado muchas veces. La magia es el estado puro de la materia, significa vida – Pronto poco a poco la imagen de aquella noche en el lago fue desapareciendo para empezar a aparecer su antiguo hogar con su madre en la entrada. Los brazos lo soltaron, no se molestó en girarse puesto que ahí en el picaporte ya estaba su familia reunida nuevamente en aquel portoncito blanco. Sabía perfectamente en que parte de su vida estaba, sus ojos se llenaron de lágrimas al ver a un niño acercarse a su padre, era él. Su madre sonreía alegremente y Lionel se puso de rodillas para abrazar a su hijo  – La magia es volver lo imposible y fantástico en un hecho real para que la gente vuelva a creer en lo imposible, porque la magia es amor, es un lugar al que todos merecemos ir aunque no lo veamos, no lo toquemos, sabemos que es real porque lo sentimos dentro de nuestra alma ¿lo sientes? – el niño asintió con la cabeza, él asintió con la cabeza.

- Mamá, Papá – el pequeño que en este momento volvía ser el adulto Dylan los abrazó con fuerzas. – estoy de vuelta en mi hogar.

- No hijo – murmuro la mujer cariñosamente – este ya no es tu hogar.- ella sonrió y lo alejo para que nuevamente el paisaje se alejara de él tan abruptamente como había aparecido – Tu hogar esta allá fuera, con las personas que te aman, con ellos debes regresar -  

- ¡No quiero!- y cuando intento correr alguien lo sostuvo de la muñeca e impido que se metiera aun lago negro burbujeante y pegajoso. Le dio miedo girarse puesto que temía encontrarse con el cuerpo en descomposición de su padre y sin embargo lo hizo y cuando abrió los ojos vio el rostro de Daniel frente y empezó a toser toda el agua acumulada en sus pulmones.

Lula dio un grito victorioso al aire y lo calló con sus manos, sus ojos se llenaron de lágrimas al igual que los de Jack, ambos jóvenes sonreían pero no eran los únicos Merrit movió negativamente la cabeza mientras se quitaba unas lágrimas de los ojos con una gran sonrisa de por medio.

Volvió a mirar a Daniel que parecía tan sorprendido como él de verle ahí, su boca se torció a punto de llorar y apretaba con frenesí su mano sin saber qué hacer. Dylan le quito un mechón de cabello que estaba frente a sus ojos y lo hecho para atrás haciendo que en el acto el primer jinete echara a llorar sin control tapando su rostro con ambas manos.

- Gracias chicos por salvarme – dijo Dylan con un gran alivio sin darse cuenta estaba sonriendo después de haber escapado de la muerte por los pelos.

- Nos diste un buen susto – menciono Merrit sin importarle.

- Fue Atlas quien se lanzó al lago helado, nosotros realmente no hicimos nada, solamente esperamos parados a que volvieran a la orilla- aclaro Lula puesto que con todo lo que había pasado se dio cuenta que realmente Daniel sentía algo más que respeto por Dylan y que este a su vez le correspondía sin darse cuenta.

- Gracias en verdad.- repitió sonriéndole al chico que se encontraba recuperándose del susto inicial de creer que lo había perdido.

Entonces paso…

Fue algo inesperado para todos o por lo menos para Dylan quien ya tenía a Daniel dándole un beso en los labios, sus brazos rodeaban su cuello y sus caderas se pegaban a la ropa mojada del ex detective.

Todos los demás jinetes se quedaron viendo aquella escena, ni en mil mundos esperaron que sucediera de esa manera. Lula grito de felicidad dando un fuerte aplauso y levanto las manos

- ¡Yeiii!-

- S-se b-be-besa-ron… ellos…- Jack tartamudeo un poco nervioso.

Dylan no rechazo el beso pero tampoco lo acepto del todo. Seguía tan sorprendido por ello que no supo que hacer. Hasta que vio como Daniel  se separaba lentamente con una sonrisa en los labios.

-Wow…-

 Fueron las palabras del quinto jinete con un leve sonrojo en las mejillas, McKinney empezó a aplaudir distrayendo la mirada de todos.

- Eso no me lo esperaba -

Lula estiro la mano hacia este.

- Paga –

- No puedo creer que me estés cobrando cuando todo termino en un final feliz –

- Oye, deudas son deudas –

- ¿Quién me manda a ser un hombre de palabra? Bueno… deudas de apuesta son deudas de honor -

Merrit saco su cartera y le dio tres billetes de cien a Lula de mala gana Jack los fulmino con la mirada.

-¿Apostaron?-

- Claro. Yo aposte a que Daniel se le declara a Dylan en cuanto llegáramos a New York y ella que en Macau  – dijo naturalmente el mentalista.

- ¿¡Apostaron?!- pregunto exaltado y furioso Daniel, pero entonces sintió un agarre en su mano que lo tranquilizo al darse cuenta de quién era. U corazón latía estrepitosamente y el frio de la noche no lo sentía, al contrario todo su cuerpo parecía estar en llamas.      

- No estamos para perder más tiempo. Vengan… Debemos poner punto final a todo esto cuanto antes. Sé de un lugar que es seguro y donde Tressler y su dinero no podrá alcanzarnos ni con todo el poder o seguridad que tengan.-

- ¡Dylan! – exclamo Jack cuando lo vio de pie. Y sonrió de lado un poco tímido cuando este al fin le miro regresándole la sonrisa. El mas joven de los jinetes también había creído que este moriría, no sabría que hacer si le dejan nuevamente solo. – Me alegra que estés de vuelta con nosotros – el ex detective se le acercó  revolviéndole el cabello con cariño.

- Yo también me alegro –

- Bienvenido Dylan –

- Si… estoy en mi hogar-

Daniel y Lula miraban la escena con celos y resentimiento, no podían dejar de ver a ambos siendo muy cariñosos entre si y su aura cambio por una obscura y siniestra.

- Si alejas a tú Dylan de mi Jack yo haré lo mismo por ti – murmuro molesta la jineta pero sonriendo para no levantar sospechas.

- Por supuesto – contesto Daniel cómplice de la chica. Mientras Merrit solo veía la clase de monstruos con los que estaban relacionados sus amigos. Sintió pena por un momento antes de sonreír. 

Notas finales:

Mñana espero poder terminar esta historia. gracias por leer. :)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).