El club de Seido se encontraba en plena celebración de navidad, el comedor tenía comida de todo tipo, los chicos habían pedido prácticamente un banquete que el instituto pago, debido a su reciente triunfo en el torneo de otoño, un gran avance para la institución. Todos estaban felices, a excepción de cierta persona.
-Eric-kun, es hora de abrir los regalos del intercambio-le llamo Haru, este parecía distraído así que solo asentó y al dar el primer paso a la mesa principal, recibió una llamada que de tan solo ver la pantalla de donde venía se quedó helado.
-¿Kazuya?
Llamada
-Hol...
-Eric necesito que vengas al hospital, ahora.
-¿Que está pasado?
-Te padre, ya va a nacer-su voz nerviosa lo asustó.
-Voy para allá-colgó de inmediato.
Escucho las risas de sus compañeros al abrir los regalos, este fue de inmediato con el entrenador.
-¿Eric?
-Entrenador Kataoka, debo irme.
-Sawamura, que cara-Hayato al verlo también.
-Eric-kun-Haru de igual forma.
-Chicos, ya está en el hospital-les dijo con una leve sonrisa, pues tenía un poco de miedo, se encaminó hacia la puerta cuando Ikki tomó su hombro.
-Iremos contigo.
-¿Qué? ¿Pero?
-Si Eric, iremos por el entrenador Sawamura-agrego Shun.
-Ei-chan tendrá a su bebé, debemos darle aliento.
-Papa debe estar ahí-dijo Hayato.
-Todos vamos-Kuro también le apoyó.
-Chicos-una sonrisa de alivió se dibujó en su rostro.
Dejaron la fiesta y todos se embarcaron al hospital, en el camino Eric recibió otra llamada, esta vez lo que esperaba al fin llegó.
Llamada
-Eric.
-Tatsuya.
-Mi padre me llamo hace rato, ¿Sabes algo?
-No, apenas me dirijo al hospital.
-Ya veo, estoy nervioso.
-Sí, yo igual-de pronto un silencio los invadió-.Tatsuya, yo...
-Llegamos-le informo Haru quien iba con él en el auto, junto a Kuro, Ikki y Rei.
-Ya estamos aquí, te llamo después Tatsuya-colgándole.
En otro venían los demás, rápidamente recorrieron la sala de espera hasta ver a Miyuki sentado cabizbajo muy callado, eso hizo sentir como la sangre se le bajó hasta los pies.
-Kazuya-le llamo Rei.
-Chicos, Eric-viendo a este inmóvil a mitad del pasillo-.Aun no me dicen nada y no me dejaron entrar con él.
-Entiendo-bajo la mirada el chico.
-¿Qué pasó?
-Se sintió mal cuando nos salimos de la fiesta del complejo, como le había dicho a Eric, se trataba de mi nuevo empleo. Y le pregunté si quería venir al hospital, él me dijo que todo estaba bien y justo al subir al auto para regresar a casa, rompió fuente.
En ese momento apareció el doctor, Kazuya se levantó y fue con él, junto a Eric.
-Miyuki-san-luego vio al chico y saludo con un gesto-.Tendremos que hacer cirugía, el canal de parto no dilató lo suficiente, eso suele pasar con los hombres, aunque tratamos de que sea natural ya no podemos esperar.
-Entiendo, pero ellos...
-Están todavía fuera de peligro, por eso debemos actuar rápido.
-Hágalo doctor-intervino Eric.
-Sí, haga lo que tenga que hacer-ratificó el mayor.
El medico se fue y volvieron a la sala, ya el resto del equipo había llegado y les informaron de lo que pasaba. Así que todos se dedicaron a esperar, había pasado una hora cuando sintieron que el silencio los desesperaba, fue cuando Haru vio el rostro de preocupación de Eric y el de Kazuya igual, luego hacia el área de recepción de enfermería donde tenía un árbol navideño y se le ocurrió una idea.
-Es navidad-murmuro y Eric le miró.
-Sí, siento arruinarles la fiesta.
-Para nada-contesto de inmediato Ikki.
-Me preguntaba, ¿cuál ha sido su navidad más memorable?-levanto el dedo y les sonrió, se le quedaron viendo y por un segundo pensó que fue mala idea.
-La mía fue cuando tenía 10, mi papá decidió hacer la cena solo porque mi padre tuvo una reunión con el equipo en Tokyo. Y para todos ustedes, él es pésimo en la cocina, pero quería hacernos una linda navidad por estar solos la primera vez en esa época.
.......................Flash Back...................
El humo salía de la ventana de la cocina, Shuhei que practicaba en el patio al verlo corrió.
-¡Papá!-grito, para ver a su hermana detrás de la barra y a su papá corriendo a todas partes sin dejar de mirar al horno de dónde provenía el humo-.Pero, ¿Qué?-fue al pasillo de donde tomó el extintor y abrió la puerta del horno con el pie vaciando el contenido de este-.Todo listo, pero papá ¿Que pretendías?
Raichi bajo la mirada.
-Lo siento Shuhei, quería hacerles pollo rostizado.
-Papa-con una mano en la cintura-.Tu no cocinas, creo que una pizza estaría bien.
-Pero...
-Yo creo que papá, iba por buen camino-le sonrió Kuro quien lo abrazo.
-Sí, pero casi nos quedamos sin casa, Kuro-le regalo su hermano.
-El solo quería-pero la mirada de este la hizo sentir miedo y se ocultó detrás de Raichi.
-Calma los dos, fue mi culpa. Con su padre fuera, deseaba una navidad completa para que no lo extrañaran.
Su hijo se le quedó mirando y comprendió todo, vio el recetario sobre la mesa, suspirando dejo el extintor junto a la pared.
-Papa-tomo el recetario, sintiéndose mal por lo que acaba de decir-.Lo siento, y si-miro a su hermana.
-Si hacemos todo de nuevo-sugirió ella, Shuhei le sonrió.
-Sí, limpiemos Kuro y que papá vaya por otro pollo.
Raichi se les quedó mirando, sus hijos al menos esa navidad parecían estar en paz. Así que hizo caso y fue a la tienda por otro más para cocinar todos juntos.
……………....Fin del Flash Back..................
-Fue la mejor navidad, papá se enseñó a cocinar pollo y mi hermano se portó bien conmigo, además nuestro padre llego antes de la cena, dijo que no podía quedarse más allá y regreso con regalos. La pasamos de lo mejor-relato la chica.
-Suena bien-Ikki tomo su mano-.La mía, digamos que fue la del año pasado, Kazumi teníamás de 6 meses pidiéndole a papa un robot Voltron, decía que era lo mejor de lo mejor, claro que como siempre a papa se le olvido, y como nuestro padre estaba de viaje y llegaría hasta esa tarde, se complicaron las cosas.
.......................Flash Back...................
La mañana de noche buena, Mei dejo a Kazumi con la niñera llevándose solo a Ikki con él, lo que no sabía era lo que le deparaba al joven, quien con su cara de molestia lo acompaño a las compras de último momento. Fue hasta que llegaron a la juguetería que lo supo.
-¿No me digas que olvidaste el robot de Kazumi?-le miro con los brazos cruzados.
-¡Hahaha! A mí no se me olvida nada, solo pensé que seríamás barato cuando se acercara la fecha.
-¿Quién demonios piensa eso? Admítelo, se te olvido.
-Ya te dije Ikki, no se me olvido. Vamos-le dio su tarjeta-.Tu ve por el dichoso robot y yo iré al mercado.
-¡Estás loco!-al mirar la fila infernal, solo para comprar el juguete.
-Vas.
-¡No!
-¡Te dije que vas!
-¡Te dije que no!
-En ese caso, no habrá guante nuevo para navidad.
-¡Eres un chantajista!
-¡Hahaha! Sécómo manipular a mis hijos, es todo-la mirada triunfante de Mei.
-Bien, viejo tramposo-musito molesto.
Se colocó en la fila y mientras jugaba con su móvil se percató que a tan solo de dos personas, colocaron el letrero de “agotado”
-Mierda, no es cierto-Ikki impactado.
-Señor, por favor, necesito ese juguete.
-Lo siento, pero ya no hay.
-Uno, solo uno necesito-rogo, fue cuando el tendero se acercó a su oído y le dijo.
-Pues lo hubiese pensado antes, que tenga una feliz navidad-le despidió.
-¿Ah?-no podía creerlo, vio en peligro su guante y al salir se topó con su uno de los que se quedaron sin el robot.
-Chico, dicen que en el centro comercial del otro lado de la calle todavía hay.
-¿Habla en serio?
-Sí.
Vio su reloj, y faltaban 30 minutos para el cierre de las tiendas, su papa no tardaba en ir por él, respiro hondo «Bien, Voltron allá voy…» penso, emprendiendo la carrera, casi caía a la fuente, se topó con unos maleantes y salió huyendo, y cuando al fin llego a la tienda, vio el robot en el aparador.
-Señor, quiero uno de esos-señalo, pero justo al volver a ver, ya no estaba-.Espera, ¿Dónde?
El mismo sujeto que le dijo sobre la tienda se lo llevo, Ikki quería asaltarlo pero vio a su hijo, quien acogió el robot en sus brazos, lucia igual que su hermana de feliz-.Bien, como sea. Lo siento Kazumi-suspiro.
Al regresar Mei lo esperaba en el auto y al preguntarle por el robot, prácticamente se desmayó en el asiento. Esa noche, Ikki veía a su hermana corretear por la sala esperando su robot Voltron, y no sabía que hacer por no haberlo comprado.
-¡Ya llegue!-Itsuki apareció con dos cajas enormes.
-¡Papa!-Kazumi fue a abrazarlo.
-Hola hermosa guerrera paladín.
-¡Hehehe!
-Hola papa-le recibió Ikki.
-Pero, qué cara hijo.
-Pasaron muchas cosas-le dijo, Kazumi fue a la cocina para avisar que su padre había llegado, cuando le conto lo que había pasado, Itsuki comenzó a reir-.No es para reírse papa.
-No, solo que Mei no iba a comprar el robot, lo haría yo.
-¿Qué?
-En realidad iba a comprar tu regalo, ese fue el que se le olvido.
-Ósea que-Ikki cayó en gracia que toda esa pantomima fue para que le diera tiempo de ir a recogerlo.
-Dijo que si te dejaba en casa, probablemente lo buscarías para usarlo antes de tiempo, como cuando eras niño.
-Ese tipo-bufo.
-Vamos, te quiere pero a veces se le olvidan las cosas.
-¡Ikki! ¡Feliz navidad!-Mei le dio la caja y dentro su guante-.Lo mande grabar para ti.
-Esto-pese a todo, era perfecto, termino por abrazar a Mei-.Gracias, papa.
……………....Fin del Flash Back..................
-Fue una buena navidad, después de todo.
-Mei, ¡hahaha! No cambia para nada-se comenzó a reir Miyuki.
-Nosotros tuvimos una navidad genial hace 10 años-intervino Rai.
-¿No hablas de?
-Si-comenzó a reírse-¡Hahaha! La abuela nos regaló unos vestidos.
-Espera, ¿Qué?-Eric impactado por eso.
-Digamos que la abuela siempre quiso nietas, y nos obligó a vestirnos de niñas esa navidad.
-Kai se veía tan lindo.
-Son iguales-comento Ikki.
-Fue vergonzoso.
-Pero divertido, nos dieron muchos dulces y-saco de su móvil una foto, mostrándosela a Haru y los demás.
-¡Rai!-Kai trato de quitárselo, pero no lo logro.
-Se ve tan lindo-Haru sonrojado.
-¡No lo veas!-lo abrazo Kai.
Después de calmarse un poco y de que Kai dejara de estar molesto con su hermano gemelo, Haru prosiguió con las historias.
-La mía fue cuando tenía 10 años, como saben mis abuelos son de Hokkaido, asi que esa navidad fuimos a visitarlos.
-Espera Haru, ¿no fue donde te perdiste?-pregunto Sosuke.
-Sí.
-¿Te perdiste?-Kuro impresionada.
-La nieve no dejaba de caer, y estaba obscuro, yo me perdí porque mi trate de seguir a papa cuando iba por más leña, hay un bosque frente a la casa de campo de mis abuelos, llegue al mitad del bosque y no sabíaqué hacer.
……………...Flash Back..................
-¡Papa! ¡Papi!-gritaba el niño sin suerte alguna, todo estaba obscuro sin ninguna luz aparente, fue en ese momento que se sentó bajo un árbol, si estaba perdido moverse era contraproducente. De pronto comenzó a llorar-Papi.
-¿No eres muy grande para llorar?-le dijo la voz de alguien, al levantar la mirada se trataba de un niño con una mirada agresiva que le dio miedo y comenzó a llorar más fuerte, y del cual trato de huir, solo que lo tomo de la bufanda-.Te perderás mas.
-Lo siento, no me lastime.
-No voy a lastimarte, vivo en la casa de por allá-señalo y una luz tenue se vio. Haru se calmó y lo vio más de cerca, este le dio su pañuelo para que limpiara sus lágrimas-¿Cómo te llamas?
-Haru, Furuya Haru.
-Soy Masamune Ken, tengo 11 años.
-Yo tengo 10.
-¿Qué? Te ves más grande que yo-pues alzaba la vista ante él.
-Lo siento, soy muy alto, más que los otros niños-bajo la mirada, pero este tomo su mano.
-No importa, imagino que asi es tu corazón de grande, ven-lo llevo hasta su casa.
Una vez ahí les llamaron a sus padres, para cuando llegaron Haru y Ken,jugaban en la sala con unos trenes, algo que amaba Ken, eran los trenes eléctricos.
……………....Fin del Flash Back..................
-Resulto ser hijo de un amigo de papa, Masamune Hongo.
-¿El famoso pitcher de Corea?-Saito impactado.
-Sí, el-sonrio.
-Ese Ken, de Komadai Fujimaki-entendió Hayato, a lo que asentó.
-Ken-chan es muy fuerte, y siempre he querido saber lo que es enfrentarlo. Tal vez por eso no me rendí en el béisbol-comento mirando a la nada. Kai se le quedo mirando, no muy agradado por lo que acababa de decir.
Uno tras otro relataron sus navidades, divertidas, emotivas y hasta espeluznantes, como la de Shun, pues se había quedado encerrado en el cuarto de su abuelita, que falleció dos meses antes cuando fueron a visitar a sus tíos.
-Jamás lo olvidare, nunca-temblaba, Rai era quien solto tremenda carcajada a lo que Kai le golpeó la cabeza, en son de regaño.
Aun asi, comenzaron a reir olvidando un poco la incertidumbre que les embargaba por la preocupación de su ex entrenador. Rei fue la primera en ver que el medico salió del quirófano, y toco el hombro de Miyuki, faltaban un poco más de las 10 de la noche de ese 25 de diciembre, cuando el doctor se quitó el gorro y al mirar al hombre le sonrio.
-Fue difícil, hubo complicaciones pero-hizo una pausa muy grande-.Todo está bien.
-¿Qué? ¿Están bien?-Kazuya que sintio como un peso de encima se iba, Eric se sentía de igual manera.
-En perfecto estado, solo que el señor Sawamura está cansado y duerme, pero su hija está en los cuneros.
-¿Hija?-sorprendido Kazuya, pues el único que sabía del genero del bebe siempre fue Eijun-.Es una niña, es una-se cubrió la boca y cayó en la silla.
-Sí señor, es una niña muy sana de 3.5 kilos y 55 centímetros.
-No puedo creerlo, tengo una hermanita-Eric feliz por ello.
-Gracias sensei-tomo la mano del doctor.
-De nada, es mi trabajo. Puede verla, es por ese pasillo al final-le indico.
-Felicidades Miyuki-Rei conmovida por el momento.
-Gracias Rei-chan.
Kazuya se encamino, aunque se dio la vuelta con Eric.
-¿No vendrás a ver a tu hermana?
-Sí, claro que sí.
Los demás estaban felices por ellos, Kuro no dejaba de sonreír por que estuvieran bien, Rei se acercó a Haru.
-Buen trabajo con esa distracción-le dijo al peli rosa.
-Pensé que sería bueno-le sonrio, Kaito se recargo en su brazos y asentó, pues también aprobó su manera de actuar.
En los cuneros, había muchos bebes, con su cobijas de colores, rosa y azul, Miyuki de inmediato busco su nombre entre todo ellos hasta que Eric la vio.
-Ahí-señalo a una bebe con la nariz arrugada, cabello castaño y que se movía mucho-la cuna decía “Sawamura Eijun”
-Es hermosa-Kazuya se pegó al cristal, Eric estaba tan emocionado pero al volver a ver a Miyuki, este estaba llorando.
-¿Kazuya-san?
-Lo siento, es que soy tan feliz que se desborda, mi sueño se hizo realidad, tener una familia junto a Eijun, toda mi vida lo desee y cuando lo vi perdido, pensé pero, me llevo al de nuevo-se limpió las lágrimas.
Eric comprendió que sus padres, aunque pasaron toda una vida sus esperanzas y sueños, nunca desaparecieron y volvió a juntarlos, si asi era para él y Tatsuya, esperaría lo que fuese necesario, porque lo amaba tanto como su padre a Kazuya.
-Me alegro por ustedes-le dijo.
-Wakana.
-¿Cómo?
-Tu padre dijo que si era niña, se llamaría Wakana.
-¿Habla en serio?
-Si-coloco la mano sobre su hombro, Eric bajo el rostro y por un momento penso que no le agradaba la idea, pero luego le miro y como él estaba llorando.
-Gracias, gracias-lo abrazo.
-De nada, hijo-le susurro «Tu hijo es tan parecido a ti, Eijun…»
Más tarde esa noche, despidió a sus compañeros que ya debían regresar a los dormitorios y una vez se fueron, tomo su móvil y busco el nombre de Tatsuya.
En China, el joven estaba sentado frente a la ventana viendo nevar, con una manta sobre sus piernas, había pasado la noche en vela para escuchar noticias, su madre había pasado dos veces antes de irse a descansar porque su tratamiento era cansado, de pronto recibió un mensaje, rápidamente lo abrio y se trataba de una fotografía de su hermanita, no pudo creer tanta hermosura que salto del sofá.
-¡Tengo una hermana!-alzo la voz emocionado, tan pronto termino de festejar, recibió una llamada.
Llamada.
-Es hermosa.
-Lo sé, tu padre estaba llorando hace rato.
-¡Hahaha! Ese viejo llorón, ¿Cómo está tu padre?
-Bien, solo cansado.
-Me alegro, desearía poder estar ahí, para cargarla.
-Lo harás, sé que lo harás.
-Eric-bajo el tono de su voz.
-Se llamara Wakana.
-¿En serio?
-Sí, tu padre me lo dijo.
-Me gusta.
Pasaron toda la noche hablando, Kazuya lo vio desde el pasillo antes de entrar a la habitación de su esposo, se sentó a su lado y tomo su mano, para besarla.
-Gracias por hacerme tan feliz.
-Que dices, tonto-murmuro Eijun, despertando poco a poco.
-Hola-le sonrio Kazuya.
-¿Es hermosa, verdad?
-Mucho, más que miles de estrellas.
-¿Qué te pasa y que hiciste con mi esposo? El jamás diría cursilerías.
-Oye, no me culpes, estoy inmensamente feliz.
-¡Haha! ¡Ouch! ¡Haha! Si, Kazuya-le miro con una dulce sonrisa, este se acercó para recibir un beso, aunque lo que se llevo fue un golpe en la cabeza.
-¡Ouch! ¡Me dolió!
-A mi también, imbécil. No pienso tener otro hijo.
-¡Hahaha! ¿Seguro?
-¡Sí!
La mañana siguiente, recibió a la pequeña en brazos, no paraba de llorar ante ella y Kazuya no paraba de reírse, de pronto se puso serio y tomo su diminuta mano.
-Bienvenida, mi hermoso regalo de navidad, bienvenida, Wakana-beso su frente y luego a su esposo.
Continuara…