Desperté, sentía que alguien tocaba mi trasero y supuse que era Minho, pero me dolía demasiado, todo el ambiente olía a Alcohol etílico. Abrí los ojos poco a poco y me di cuenta de que ya no estaba en esa habitación de hotel, estaba en un lugar extraño, una habitación blanca.
Me di cuenta poco a poco que estaba en el mismo hospital que mi madre. Me giré un poco y me topé con Jonghyun, él era quien me examinaba, estaba completamente apenado.
Jonghyun me sonrió.
-Por favor, no te sientas mal por esto... Por eso pedí ser yo quien te examinara y saqué a todos para que estuvieras con más confianza.
Esbocé una sonrisa, de cierta manera saber que sus manos me tocaban sin juzgarme y sin sentir excitación me hizo sentir mucho mejor. Pero a la vez me sentía como un imbécil por haber sido tan terco con Heechul y Siwon...
-¿Cuánto tiempo no voy a poder trabajar?- le pregunté en voz baja.
Él tiró unas cuantas cosas a la basura, al parecer eran gasas y algodones, puso una especie de frasco de ungüento en la mesita de noche, se quitó los guantes y los tiró a la basura, cubrió mi desnudez.
-Por favor no te voltees hasta que te de los analgésicos- me dijo mientras acariciaba mi cabello. - si lo haces te dolerá todavía.
-Sí, Jjong...
-Iré por ellos, se puso de pie y caminó hacia la puerta.- después de un momento se giró para mirarme y me dijo con cara seria- tienes varias fisuras anales, lo mejor sería que no trabajes por dos semanas o incluso más y me gustaría que estuvieras en absoluto reposo mientras eso pasa, voy a recetarte medicina para acelerar tu recuperación, no para acelerar tu regreso al ruedo.
Jonghyun me sonrió y salió de la habitación sin más.
Me quedé completamente callado, me lleve una mano a la cara y sentí ganas de morirme.
¿Cómo mierda iba a pagar la estadía de mi madre sin trabajar? Estaban por realizarle las operaciones más importantes y yo me tenía que quedar como un maldito inútil en cama debido a que como un debilucho no pude aguantar lo que se supone un sexo servidor debe aguantar.
Quise llorar, pero me contuve porque no quería que esto me afectara, pero de verdad, me afectaba y sentía vergüenza.
Jonghyun regresó a la habitación. Se acomodó la corbata un poco y me miró.
-Kibum está bastante preocupado por ti, quiere verte ya, sigue peleando con Minho desde que llegaron.- me extendió dos pastillas y una botella de agua- Tómalas, por favor, hazlo con cuidado, no quiero que te lastimes, Taemin.
Tomé las pastillas y después de esto bebí un poco del agua.
-¿Podré verlos ya?- le pregunté a Jjong quien volvió a acariciarme el cabello.
-Si eso es lo que quieres los haré pasar- me sonrío- las pastillas que te di te causarán mucho sueño, así que creo que los verás por un tiempo corto, pero tranquilo, saldrás rápido de aquí, tal vez mañana.
Jonghyun se puso de pie de nuevo.
-Gracias, Hyung- Jjong no pudo evitar reírse al escucharme llamarlo así.
Tan solo abrió la puerta unos centímetros para que Kibum empujara la puerta y entrara casi corriendo al verme.
-¡MINNIE!- tenía lágrimas en sus ojos, se me hizo un nudo en la garganta, Heechul y Siwon entraron detrás de él con flores en sus manos.
-¡TAEMIN!- Siwon me abrazó de inmediato, Heechul y Kibum también lo hicieron casi subiéndose a la cama.
-¡Estábamos tan preocupados por ti! ¡Por favor no vuelvas a hacerlo!- Heechul depositó varios besos en mi cabeza.
Nos separamos y nos sonreímos, Heechul lloraba.
-No tienes por qué ser tan sentimental, cariño.- Siwon rodeó con su brazo a Heechul.
-Es que te juro que casi me muero de la preocupación.- Heechul abrazó a Siwon y yo solté una sonrisa nerviosa.
-Hee, lo siento.- comencé a hipear- no hip era mi hip intención hip lasti hip Marlos
Todos en la habitación de giraron al verme hipear, Minho estaba allí, me puse aún más nervioso.
-No es tu culpa- Kibum se giró a mirar a Minho como si lo fuese a matar- es culpa de este hijo de puta que parece que no sabe contenerse.
Minho rodó los ojos y caminó hacia mí, seguí hipando. Tenía un ramo de flores en sus manos.
-Taemin perdóname...-
-No- pasé saliva pesadamente para intentar parar mi hipo.- Tú también intentaste pararme- funcionó- y no te hice caso... No es tu culpa.
Minho y yo nos sonreímos, él se acercó a mi frente y depositó un beso en ella, la piel entera se me erizó, sentí que mi corazón dio un salto por alguna razón, me sentí completamente extraño.
Pero entonces, como si la música romántica se hubiera cortado de repente la puerta se abrió de golpe. Rain-oppa estaba allí, jadeando, con su precioso traje Louis Vitton y el arreglo de flores más grande de toda la habitación.
Dejó las flores en el suelo y le lanzó una mirada asesina a Minho.
-Heechul- dijo con el ceño fruncido y una cara increíble de furia- ¿Fue él quien le hizo esto a mi Taemin?
Al escucharlo llamarme su Taemin me puse tan rojo que estoy seguro de que en ese momento era un completo jitomate.
-Por supuesto que fue él- Kibum intervino.
JiHoon caminó rápidamente hacia Minho y lo tomó por el cuello de la camisa.
-¡Eres hombre muerto! ¡¿No sabes lo que es el autocontrol, hijo de puta?!- de inmediato me enderecé sobre la cama sintiendo una punzada recorrer todo mi interior.
-¡Oppa, ya basta!- aún no hacía efecto la medicina, Jjong quiso ir hacia mí pero entonces los chicos comenzaron a forcejear. Él se giró a detenerlos.
-¡Por favor, dejen de alterar a mi paciente!
-¡Ya basta, Taemin dijo que no fue mi culpa!- Minho tomaba a Rain por el cuello de su traje.
-¡Porque Taemin es adorable y jamás le echaría la culpa a alguien! ¡Incluso cuando la tiene!- Rain y Minho alzaron los puños con la intención de golpearse e iniciar una pelea.
Con todo el acarreo de mis fuerzas aparté las cobijas y me puse de pie al lado de la cama.
-¡Ya basta!- De inmediato sentí ese dolor invadirme de nuevo- ¡Ahh!- grité debido a la punzada horrible que recorrió todo mi ser. Unas cuantas lágrimas rodaron por mis mejillas.
Minho y Rain se giraron, Jjong corrió hacia mí al ver que estaba a punto de caer de nalgas contra el suelo. Siwon también me sostuvo.
-¡Taemin!- Jjong me sostuvo por la cintura.
-¡Minnie!- Siwon me sostuvo por los brazos.
Alcancé a ver cómo Rain empujó a Minho para acercarse a mirarme.
-Por favor, Siwon, ayúdame a subirlo a la cama de nuevo.
-Sí...- Siwon estaba completamente preocupado por mí, lo podía ver en su rostro. Se puso detrás de mí cargándome por los hombros mientras que Jjong alzó con cuidado mis piernas.
Al posarme de costado en la cama me cobijaron de nuevo.
-Taemin lo siento...- escuché a Minho decir. Pero debido a la posición en la que me encontraba no me pude girar a mirarlo.
-¡Minho!-
-¡Basta! ¡Se acabó el horario de visitas!- Jjong no sólo empujó a Minho afuera, también a Siwon e incluso a Rain.
-¡Recupérate pronto, Tae!- Heechul salió por su cuenta.
Jonghyun se detuvo en Kibum. Ambos se miraron directo a los ojos con seriedad. Jonghyun cerró la puerta.
-Creo que eres el único al que le puedo confiar a Taemin- Jonghyun acarició el rostro de Kibum, Kibum tomó su mano y la besó.
-Incluso si no confiaras en mí me quedaría, porque Taemin es lo más importante para mí y porque puedo verte más tiempo estando aquí.
Ambos rieron, yo me sonrojé completamente al ver esa escena. Pero poco a poco el sueño comenzó a invadirme, sentí los párpados más pesados.
-Jjong- dije casi en un susurro, pero eso bastó para que él se girara y Kibum también.
-Tranquilo Minnie- su voz comenzó a escucharse más distante- es el efecto de la medicina, estarás bien.
Sentí una mano acariciarme el cabello, era la de Kibum.
-Yo te cuidaré, cariño.
Cerré los ojos. Por un momento, por alguna extraña razón, me sentí como si hubiera vuelto a casa con mi madre y con mi padre, hace diez años. Quise que esa sensación se prolongara, esa calma de no tener que vender mi cuerpo para sobrevivir, esa calma de poder abrazar a alguien cuando me sentía triste.
Pero entonces me dormí.
***Jonghyun's POV***
Taemin finalmente se durmió, cuando al fin cerró los ojos supe que podía ponerlo en una posición más cómoda, así que lo moví delicadamente recostándolo boca arriba, el dolor ya no sería un inconveniente.
Kibum miraba todos mis movimientos con sumo cuidado, pude ver en sus bellos ojos asomarse unas lágrimas y me sentí extraño, lo abracé. Él escondió su cara en mi cuello.
-No tienes de qué preocuparte- comencé a acariciar su cabello- él estará bien, yo soy su doctor.
-Sólo eso me hace sentir más tranquilo- alzó la mirada y nos besamos.
Desde la primera vez que probé sus labios sentí una fuerte conexión con este chico, mi amante, una conexión que jamás en mi vida había sentido con alguien, ni siquiera con Minho, que me había enamorado desde hace tiempo. Sus labios rozaban los míos a un ritmo están sincronizado, que incluso parecía como si bailáramos una coreografía con nuestros labios.
Al separarme me acomodé un poco las gafas y él el cabello, se había quitado la peluca, me gustaba así, era perfecto siendo quien realmente era.
Ese chico me estaba volviendo loco.
-Me siento tranquilo porque sé que su doctor no lo juzgaría nunca por lo que es- me miró con una sonrisa, yo acaricié su rostro.- y porque su doctor es una persona preciosa por dentro y por fuera.
Me sonrojé bastante y volví a abrazarlo mientras reía, él me correspondió al abrazo.
-¿Hay algo que pueda hacer por ti, Kibummie?- nos separamos.
-Ya haz hecho bastante, pero si me traes al menos una almohada creo que sería bastante feliz.- ambos reímos.
-A ti te dejaría dormir en una camilla si así lo quieres.
-No, gracias me da escalofríos.- se frotó ambos brazos mientras me miraba divertido.
Estaba por besarlo de nuevo cuando de repente comenzamos a escuchar gritos, no distinguí que decían hasta que ya estaban cerca de la puerta.
-¡Por favor Aron fue solo un accidente!
-¡Apártate!
Escuché un golpe y algo caer contra el suelo, Kibum inmediatamente comenzó a alterarse, caminé hacia la puerta y me detuvo.
-No, por ningún motivo salgas, escóndete por favor- sacó de su bolsa la peluca y comenzó a colocársela rápidamente.
-¿Qué pasa?
-Es Aron-
En ese momento la puerta se abrió agresivamente, un chico como de mi edad y un tanto más alto que yo entró de golpe, seguido por otros tipos que parecían ser guardaespaldas. Eran unos mastodontes de un Metro con ochenta, robustos y bastante malhumorados.
-Buenas noches, doctor Kim- dijo el chico que acababa de entrar con aire burlón. Apartó la mirada de mí y la dirigió hacia Kibum.- Te ves terrible, cariño.
-Aron- Kibum hablaba con voz temblorosa.
-Disculpe, se acabó el horario de visitas, tiene que retirarse- le dije amablemente haciéndole una reverencia, algo en toda esta situación resultaba extraño.
El chico solo comenzó a reír.
-No me vengas con estupideces, "mata-sanos"- mi paciencia se fue al caño, lo tomé por el hombro.
-Por favor váyase.
-¡No, Jjong!- antes de que pudiera girarme a ver a Kibum uno de los mastodontes me tomó por el cuello y me estampó contra la pared, el otro me soltó un puñetazo en la cara que hizo que mi mundo entero se moviera y mis lentes salieran volando, casi toda la cara me dolía.
-Mira, charlatan- el chico se acercó y me miró por encima de uno de los hombros de sus mastodontes.- no te metas donde no te importa ¿vale?
-¡Aron, él no tiene nada que ver con esto!
El chico se giró para mirar a Kibum, quien estaba temblando debido al miedo. Me sentí impotente, quería correr y protegerlo, pero esos tipejos no me dejaban moverme.
-Quédese jugando con mis amigos, doctor, yo iré a jugar con mi perras un rato.
-No...- dije en apenas un susurro, la voz no me salía.
-Que yo sepa- el chico caminó hacia Kibum- una perra jamás muerde la mano de quien le da protección.- pero entonces, el tipo se giró hacia Taemin- y menos de una perra sucia, hambrienta y solitaria a quien decidiste darle refugio.
-Aron, no es su culpa- el chico alzó una mano en señal de silencio.
-Deshazte en echar culpas Kibummie, adelante- el tipo se sentó en la camilla de Taemin y sacó un cigarro que encendió con una cerilla, le dio una calada y continuó- pero a una de mis perras, le tendré que regresar esta mordida...
Kibum casi se hecha a llorar, suspiró.
-Por favor Aron, no tendrás que pagar el hospital y nada.
-¿No?¿Me lo juras? ¿Qué hay de todas las enfermeras y doctores a los que tendré que comprar su silencio?
Kibum se quedó callado. Nunca me había planteado que mi equipo pudiese denunciar a la policia sobre la ocupación de mi paciente Taemin, no los creí capaces.
-Pero te digo algo- el chico tomó la cara de Kibum, comenzó a arderme el rostro debido al coraje- ¡Estamos salvados! ¿Verdad doctor Kim?
Uno de los mastodontes volvió a golpearme en el rostro y me arrojó contra el suelo, sus golpes eran certeros, estaba completamente aturdido y comenzaba a sospechar de alguna lesión en la mandíbula, mordí por accidente mi lengua y eso hizo que mi boca sangrara.
-¡Ya déjenlo, por favor!- Kibum intentó correr hacia mí, pero escuché como ese tal Aron lo arrojó hacia la mesita de noche.
-Déjalo- apenas y podía hablar, me dolía incluso articular palabras.
El tipo más gordo me tomó por el cabello, y me obligó a alzar la cabeza y mirar a aquella bestia llamada Aron.
-No crea que soy un ignorante, Doctor Kim, investigué sobre usted, lo llaman: "el joven prodigio", de los mejores cirujanos que existen en Corea del Sur, a su joven edad ya está a la altura de los mejores galenos del mundo- me dio unas palmadas en la cara que me hicieron cerrar los ojos debido al dolor.
Se alejó y despojó de la cobija a mi paciente, quien seguía en un profundo sueño debido a los medicamentos que les recete. Un mal presentimiento invadió por completo mi mente, ese sujeto no era un simple matón.
Sin más, alzó la bata de dormir de mi paciente y comenzó a apretar sus glúteos.
-¿Qué tanto le costará reconstruir el lindo trasero de esta perra? Después de todo me tengo que cobrar sus estupideces- Aron llevó sus dedos un poco más lejos de lo debido, sentí que la ira me carcomía entero, quería correr hacia él y ayudarlo pero los dos tipos que me sostenían me ganaban en fuerza y tamaño.
-¡Aron!- Kibum al fin habló, apretó los puños y comenzó a llorar- ¡Y-yo invito!
Me quedé completamente confundido mirando a Kibum, los mastodontes me soltaron un momento para poder reírse mejor, casi caigo al suelo debido a todo el mareo. Escuché las carcajadas de aquel tipo y vi como se bajaba de la cama después de bajarle la bata a Taemin.
-¡Kibummie!- se acercó a Kibum y comenzó a acariciarle el rostro mientras posaba una de sus manos en su cintura- ¿Olvidaste cómo te fue la última vez que se te ocurrió decir eso?
-No me importa... Deja a Saja en paz...- Kibum lo miraba aún decidido pero con miedo, sabía que las palabras que había dicho no significaban para nada algo bueno.
-Si así lo quieres, así lo haré, cariño- depositó un beso en sus labios y como si eso hubiese activado un switch en mí me levanté e intenté arrojarme hacia él , pero los mastodontes me detuvieron. Aron solo se giró.- Un gusto en conocerlo doctor Kim, apúrese en la recuperación de Saja, es de los mejores en la esquina del pecado.
Kibum tomó de la mano a Aron y me miró con ojos suplicantes.
-No le digas nada a Taemin... Gracias por todo y perdóname- Kibum y Aron se acercaron a la puerta.
De nuevo hubo un golpe en mi cabeza, pero esta vez fue uno certero, me desmayé debido al impacto... Me sentí inútil, no pude ayudar a Kibum y tampoco a Taemin...
Solo esperaba que Kibum estuviera bien y que toda esta pesadilla acabara pronto.
***Key's POV***
Jonghyun cayó al suelo después de que aquel mastodonte le diera un golpe en la cabeza con el puño, sentí como mi mundo entero se caía, la angustia me dominó horriblemente al verlo caer de esa manera, lloré aún más porque quería abrazarlo pero no podía.
Estando con Aron no podía hacer nada, como él dijo, era solo su perra.
Al salir de la habitación vi a Heechul y a Siwon en una esquina de la sala de espera, mirando como tenían sometidos a JiHoon y a ese tal Minho contra el suelo, unos tipos igual de bestias que los que golpearon a Jjong.
Heechul se acercó al verme tomar de la mano a Aron.
-Por favor dime que no lo dijiste- tomó mi muñeca, Aron comenzó a reír- dime que no invitaste...
-Kibum, no- mire a Siwon y a Heechul.
Aron se giró a mirarlos con desprecio.
-Inútiles, ¿Qué hacen aquí? No los quiero ver rondando nunca más por este maldito hospital a menos de que sea por mi culpa.
-Pero Saja-
-Vamos Kibum, después de todo- me tomó por el cuello- fuiste tú quien invitó...
-Por favor, espera... Sólo dame un minuto.- Aron me soltó del cuello y me miró con ira en sus ojos, comenzaron a temblarme las piernas.
-60, 59, 58- Me giré rápidamente hacia donde tenían sometido a Jihoon.
-Por favor, cuide de Taemin en lo que no estamos-
-30, 29...- Aron alzaba más la voz para darme a entender que lo estaba sacando de quicio, JiHoon no me respondió, Minho solo me miraba atónito.
Me alejé rapidamente de ellos y tomé la mano de Aron. Heechul y Siwon nos siguieron con la mirada hacia abajo.
Solo podía pensar en Jonghyun tirado en la habitación de ese hospital, esperaba que estuviera bien, que se levantara cuanto antes y que cuidara de Taemin, mientras nosotros no estábamos.
Después de eso comencé a preguntarme si Aron nos subiría q todos las comisiones y eso me hizo preocuparme aún más, porque eso significaría que el infierno que estábamos por vivir no se comparaba en nada con el infierno que seguiríamos viviendo debido a este malentendido.
Pero honestamente, lo que yo estaba por vivir no se comparaba en nada con lo que yo estaba por pasar.
***Minho's POV***
Estaba completamente aturdido, los golpes de aquellos gigantones sí que me habían hecho daño. Habían llegado justo cuando estaba discutiendo con JiHoon, y el miedo que me provocó ver cómo arrojaban a Siwon y a Heechul contra las sillas de la sala de espera fue más porque sabía que iban a entrar a la habitación de Taemin.
La angustia que me invadió cuando me tenían sometido de cara contra el suelo fue eterna, hasta que los vi salir, Kibum le dijo unas palabras que ni yo ni JiHoon entendimos y vi a Siwon y Heechul alejarse con ellos. Me reincorpore con un dolor horrible en la cabeza, cuello y costillas.
Me giré, JiHoon aún no se levantaba. Caminé hacia la habitación y me di cuenta de que Jonghyun estaba tirado en el suelo, muy malherido. Sentí que un nudo se me hizo en la garganta.
-¡Jonghyun!- corrí hacia dónde estaba y alcé un poco su rostro- ¡Jonghyun despierta!
Jonghyun estaba inconsciente, tenía sangre en la boca y moretones en las mejillas, además de un hematoma en el ojo izquierdo. Sentí aún más angustia por Taemin. Dejé a Jonghyun en el suelo delicadamente y caminé trabajosamente hasta la camilla. Taemin no tenía cobija por alguna razón que me aterraba pensar.
JiHoon entró a la habitación y también se dirigió hacia la camilla.
-No sé qué le hicieron a Taemin... Por favor pide ayuda- tomé a JiHoon por los hombros, él me empujó de inmediato y me miró con furia.
-Todo esto es tu culpa...no te le acerques de nuevo a Taemin.
Apreté los puños y lo empujé con más fuerza.
-¡No es momento de echar culpas, maldición! ¡Necesito que llames por ayuda!- lo miré con el ceño tan fruncido que sentí que la cara se me quedaría en esa posición por siempre, no era posible que este imbécil siguiera pensando en echar culpas cuando mi amigo estaba tirado en el suelo con una posible lesión grave en la cabeza.-¡Maldición olvídalo!
Salí de la habitación y vi a una enfermera caminar por el pasillo, la tomé por los hombros. Ella me miraba con miedo.
-¡Por favor ayúdame! C-creo que abusaron de un paciente y el doctor Jonghyun fue brutalmente golpeado- la enfermera abrió los ojos desmesuradamente al escuchar que mencioné a Jonghyun.
-Iré por ayuda, por favor, quédese con el paciente.
Volví a entrar a la habitación, JiHoon lloraba mientras abrazaba a Taemin.
-Perdóname- decía una y otra vez mientras acariciaba su rostro.- no te protegí... Ahora lo haré, si me lo permites.
Decidí no acercarme allí, me sentí extraño porque de cierta forma entendí que podía ser que Taemin estaba lo suficientemente lejos de mí ahora... Supe entonces que fui un idiota al no haberme acercado a él antes, me sentí solo, fui con Jonghyun y tomé su mano fuertemente.
-Estarás bien Jjong, nunca te voy a dejar solo.
***
La enfermera no sólo llegó con doctores y otras enfermeras, sino que también llegaron policías a interrogar a Jonghyun y a Taemin. JiHoon habló un buen rato con ellos, ya que Taemin seguía profundamente dormido.
Jonghyun despertó gracias a que la enfermera lo reanimó con un poco de alcohol, me dijo que sus lesiones eran menores y no tardaría en recuperarse.
Jonghyun me miró al despertar y en seguida se alteró.
-Kibum ¿¡Dónde está él?!- Jonghyun me tomó por los hombros y comenzó a agitarme- ¿¡Dónde?!
Yo lo tranquilicé. Lo abracé estando aún en el suelo.
-Esos sujetos se lo llevaron... Se fueron todos los amigos de Taemin... Creo que el sujeto era su proxeneta.
Jonghyun comenzó a pasarse la mano por el cabello y se acercó a un policía.
-Por favor, necesitan ayudarlos, ellos están en peligro- los policías se miraron mutuamente, negando con las cabezas.
-Señor Kim, ¿desea presentar una denuncia por agresión física?- me sentí enojado al escuchar cómo le hablaban a mi amigo, así que antes de decir algo decidí que era mejor ir por sus lentes y limpiarlos para él.
-P-pues claro, pero ellos necesitan más ayuda que yo, su proxeneta.-
-¿Su proxeneta?
Todos los policías comenzaron a reír al unísono, le di los lentes a Jonghyun y él se los puso mientras miraba a los policías con el ceño fruncido.
-Sí, ellos son-
-No es necesario que lo diga, señor Jonghyun.... Pero le aconsejo que no denuncie esa clase de cosas, posiblemente sólo era el novio vengativo de alguno de esos sujetos que habla, ya sabe- el policía se burlaba con sus amigos- esas personas son bastante volubles.
Jonghyun se enfureció, lo tomé por la muñeca antes de que hiciera cualquier estupidez.
-Ya pueden marcharse oficiales, gracias por nada.- esta vez fui yo quien habló- váyanse antes de que me logren sacar de quicio.
-Estamos al servicio de los ciudadanos honrados, recuerden eso.
JiHoon se puso de pie también, pero lo jalé del brazo al ver que se abalanzaría contra uno de los oficiales.
-Lo que digan... Adiós.
Los policías nos miraron con desprecio una vez más y se fueron. JiHoon se zafó molesto de mi agarre y caminó de nuevo hacia Taemin.
-Doctores, no revisen a Lee Taemin, no hubo contacto sexual con él- Jonghyun sostuvo mi mano, por la forma en que lo hizo pude suponer lo nervioso que estaba. Los doctores que estaban por examinarlo se apartaron y tomaron sus cosas. Las enfermeras nos echaron un último vistazo y seguido de una reverencia se fueron.
-Me llevaré a Taemin conmigo- JiHoon habló, podía ver en sus ojos que estaba completamente molesto por la situación que acabábamos de pasar.- si alguien vuelve a verlo será con diez de mis guardaespaldas a su alrededor.
Quise decir algo, no quería que se lo llevara porque quería seguir viéndolo, quería arreglar las cosas con él y tratar de hacer que me recordara pero entonces Jonghyun apretó más mi mano.
-Está bien- habló mi amigo- llévatelo, creo que será lo mejor para él.
-Si tú te lo llevas yo pagaré su cuenta en el hospital- hablé decidido, ese maldito bastardo no se iba a quedar con todo el papel de héroe.
-No creas que con esto arreglas todo lo que hiciste, cabrón- JiHoon aún me miraba con furia.
Jonghyun se puso en medio de ambos.
-Llamaré a la ambulancia de traslados. Por favor, espere aquí, Minho, acompáñame.
Antes de que pudiera reprochar o tan siquiera protestar sobre ello Jjong me sacó de la habitación jalándome de la muñeca, ambos caminamos por los pasillos en silencio, dijeran lo que dijeran, podía ver los ojos de preocupación en mi amigo. Y eso me ponía triste.
***
-¿Cómo pudiste dejar que se lo llevara Jonghyun?- Jonghyun se puso una bolsa de hielo en los moretones de su cara.
Ya era media hora desde que los paramédicos se habían llevado a Taemin y a Rain. Habían desaparecido, ante mis narices, en esa pequeña ambulancia sin que yo pudiese hacer nada.
-Se le llama sentido común- Jonghyun estaba de un visible mal humor- algo que pareces no poseer...- a pesar de que esto último lo dijo en voz baja lo alcancé a oír y me dolió bastante.
Caminé hacia él y lo hice mirarme.
-¿Cómo dijiste?- Jonghyun apartó la mirada, un nudo se hizo en mi garganta- ¿Tú también crees que es mi culpa? Dime la verdad, Kim Jonghyun.
Jonghyun me empujó fuertemente, el hielo cayó al suelo y yo casi me voy para atrás.
-¡Por supuesto que es tu maldita culpa!- Jonghyun tenía los ojos llorosos- ¡Si no fuera por tu maldita desesperación Taemin ahora estaría bien y Kibum estaría conmigo! ¡Pero después de esto quién sabe si quiera volver a verme en su vida!
Unas lágrimas comenzaron a asomarse en mis ojos sin que yo pudiese hacer algo, de un momento a otro comencé a sentirme pequeñito, como cuando discutía con Sulli, como cuando la escuchaba llamarme imbécil, poco hombre... Sin quererlo comencé a llorar.
-Nunca fue mi intención lastimar a Taemin.
-Pues lo hiciste, vive con eso- Jonghyun me dio la espalda, él también lloraba.
-No vuelvas a hablarme en toda tu maldita vida, Kim Jonghyun- lo obligué a verme de nuevo, lo jalé de un brazo y quedamos frente a frente, sentí que el aire se me iba, quería besarlo y reírme con él fingiendo que todo estaba bien, pero no podía. Él ya no me quería.- nunca vuelvas, hijo de puta.
Lo empujé una vez más y salí corriendo de la habitación en búsqueda de algo... La libreta de traslados.
***
Iba camino a la casa de JiHoon, con el corazón roto y completamente solo, creo que mi única esperanza era que Taemin me perdonase, eso me ayudaría a sanar a mí ya cansada y triste alma. Al llegar a la reja de la casa de Rain noté que el equipo de seguridad que había puesto en verdad era bastante fuerte, pero burlable.
Logré escabullirme hasta el balcón de la única habitación con luz de aquella enorme casa, supuse que allí se encontraba Taemin, escalé como pude y al llegar ahí pude observarlo por la ventana.
Estaba despierto y en pijama, tenía varias almohadas acomodadas debajo de sus piernas y muslos. Pude notar que había llorado, miraba inexpresivo a un punto de la habitación.
Esa noche ambos sufríamos.
Estuve por abrir la ventana para entrar cuando vi a Rain aparecer en la habitación, tenía una taza de algo humeante y un poco de fruta en un plato todo esto servido encima de una charola.
Me escondí para que no pudieran verme y los escuché hablar, casi no distinguía lo que Taemin decía, debido a que hablaba en voz muy baja, parecía estar triste.
Pegué mi oreja lo más que pude a la orilla de la ventana.
-Pero incluso si eso pasa, no quiero que lo hagas solo, yo estoy contigo.- esa era la voz de Rain, no entendía de qué hablaban.
-No sé qué haría sin ti Oppa- Taemin estaba apunto de llorar, por eso había aumentado el volumen de su voz- A pesar de que tal vez no nos conozcamos del todo... Creo que... Te quiero.
Algo en mi corazón se desgarró, las flores que tenía en la mano cayeron al suelo. Me sentí diminuto una vez más, recordé la primera vez que atrapé a Sulli engañándome con mi mejor amigo Jinki. Las lágrimas comenzaron a resbalar por mis mejillas rápidamente y las piernas me temblaron.
-Yo... También te quiero, Taemin- me tapé los oídos, me los tapé fuertemente y traté de convencerme de que no era yo quien estaba solo, pero lo estaba, me bajé del balcón y por accidente caí de bruces un Metro y medio abajo.
Escuché que se formaba un alboroto alrededor del jardín debido a que los guardias me habían escuchado correr así que aceleré mi huida.
Ya no solo era el dolor físico de la golpiza y de la caída lo que me atormentaba, ya no solo era el hecho de haber perdido a mi único amigo de verdad, ahora también lo era el darme cuenta de que perdí al otro más grande amor de mi vida.
Al llegar a la calle grité, grité fuertemente esperando que todo el mundo me escuchara, me tiré de rodillas en el pavimento y comencé a llorar fuertemente.
Nadie me escuchó, la lluvia comenzó a caer.
***Key's POV***
Las sogas apretaban fuertemente mis muñecas y mis tobillos, estaba atado , el cuello me dolía debido a que no podía recargarlo en nada mi trasero estaba al aire, desde hace casi tres horas, tenía miedo, quería estar en otra parte, con otra persona.
Pero estaba en el infierno.
Aron fumaba mientras seguía sacándome fotografías. Estaba masturbandose, recuperándose de las primeras veces que me folló antes de tenerme así, como le gustaba, sometido y humillado. Habían tres condones tirados en el suelo.
-La primera vez que invitaste me encantó Kibum- se acercó a mí y apagó su cigarrillo en una de mis piernas, lancé un grito debido al dolor y apreté las manos, se recostó a mi lado y comenzó a besar mi cuello.- Después de esa vez creí que todas las veces que te acostarías conmigo sería debido a mi orden... Pero.. No aprendes. Cariño.
Se levantó de la cama y caminó hacia la mesa, donde estaban sus "instrumentos de tortura" tomó de ella una fusta. Supe entonces que planeaba desquitar conmigo toda su maldita furia... Temí morir allí.
- Y sabes, pensé que era injusto- comenzó a acariciar mi trasero con ella- porque yo te recogí... Yo te salvé de ese abusador con quién estabas, ese tal Yongguk que te explotaba y te quitaba todo tu dinero ¿Lo recuerdas?
Recordar a Yongguk me hizo tener miedo, me hizo sentirme horrible y sucio, recordé como todas las malditas noches me reclamaba el no ser mujer, por ser horrible, recordé como me obligaba a orinar sentado y a usar pelucas. Me sentí aún más humillado de lo que estaba siendo por Aron. No quise contestarle.
-¡Respóndeme!- golpeó mi trasero fuertemente con la fusta, el ardor se esparció por toda la piel de mis glúteos.
-Sí lo recuerdo, Aron- volvió a golpearme una vez más con la fusta y esta vez lo hizo en repetidas ocasiones haciendo resonar por toda la habitación los golpes.
-Otra vez.
-Sí lo recuerdo...amo.- estaba apunto de derramar lagrimas debido al dolor, pero me contuve, porque lo peor estaba por comenzar.
-Muy bien, Kimmybum- Aron caminó hacia la mesa de instrumentos una vez más y de él tomó una especie de bala vibradora. La cual encendió y la observó con detenimiento.- Aunque sabes, en lo único en lo que estuve de acuerdo con ese cerdo, fue en que siendo mujer en definitiva me pones más duro...- insertó el vibrador en mi interior, apreté más las manos al sentir como estimulaba tan perfectamente mi punto g, me sentí asqueroso- y la combinación de verte así, como mi dulce y tierna perrita me pone aún más duro.
Comenzó a acariciar mi rostro, me soltó una cachetada.
Como un alivio para mi dolor recordé a Jonghyun, recordé como me apreció por lo que era, recordé cómo me quiso siendo hombre y me sentí feliz, me sentí bien, de que al menos alguien supiera apreciarme como realmente era y me gustaba ser.
Pero mis pensamientos fueron completamente interrumpidos debido a que Aron comenzó a rodar su miembro contra mi entrada.
Un escalofrío recorrió toda mi espalda.
-A-Aron por favor, saca la bala.- Aron comenzó a carcajearse, me soltó otras cuatro cachetadas.
-¿Qué pasa cariño? ¿Es demasiado para tu delicioso interior?- sabía que si hacía esa maldita locura me iba a desgarrar por dentro, todo el cuerpo comenzó a temblarme.
-Por favor...por favor...
-Lo siento cariño, pero aquí, las cosas se hacen a mi manera- y sin aviso, introdujo su miembro dolorosamente en mi interior de una sola estocada, introduciendo la bala vibradora aún más adentro, sentí una punzada en mi interior, un dolor ensordecedor me inundó, hice todo lo posible por no soltar un grito pero era prácticamente inevitable.
-¡Ya para!- dije antes de que comenzara a embestirme salvajemente, jalando mis cabellos y apretando con fuerza mis glúteos.
-¡CARIÑO! ¡pero si aún te cabe mucho más!- comenzó a carcajearse horriblemente.
Era una maldita mentira, sentía que en cualquier momento iba a hacerme daño, más daño del que estaba sintiendo en mi interior, esa cosa de plastico me lastimaba tan horriblemente que no podía parar de gritar.
-¡Ayuda!- grité con desesperación al ver que Aron no se corría. Comencé a sentir que me desmayaba debido al dolor pero el seguía embistiéndome rápidamente y fuertemente.
-¡Grita todo lo que quieras! ¡A nadie le importas!- comenzó a embestirme aún más fuerte, la fricción dentro de mi interior ya no solo dolía, también ardía y hacía parecer que me estaba desgarrando por completo.
-¡PARA!- Aron me tomó por el cuello para que dejase de gritar, sentí que me asfixiaba.
-¡Eres tan escandaloso!
Me corrí debido a la sobreestimulación esto hizo enfurecer a Aron quien me volvió a abofetear en medio de sus embestidas.
-¿Corriéndote antes que yo eh? ¡Vas a tener que pagarme!- Aron soltó al fin mi cuello, pero sólo hizo esto para ahora, comenzar a morderme agresivamente, en el cuello en el pecho, dejando horribles marcas e incluso sangre en algunas mordidas.
Los horribles pellizcos repentinos que sentía debido a sus mordidas me hicieron olvidar por un momento el maldito dolor en mi interior, quería huir, quería estar con Jonghyun, quería que Siwon me salvara pero no había nadie.
Como Aron dijo, en ese preciso momento, a nadie le importaba.
Cuando comenzó a correrse mordió fuertemente el costado de mi cuello, haciéndome gritar y patalear debido al horrible dolor que sentía, abrió una herida en mi piel y la sangre comenzó a brotar de ella. Comencé a desvanecerme, todo se veía como si estuviera dentro de una viñeta.
Aron me desató.
-¡Gracias por invitar esta deuda a tus amigos!- comenzó a vestirse sin más. Era mi momento de gritar.
-Ayuda- la voz no me salía- ayuda...- ni siquiera Aron podía escucharme.
-Tienes un día para recuperarte, perrita. Si no tendrás que pagarme otra vez.- se giró y cerró la puerta de la habitación dejándome solo en ese maldito infierno, comencé a cerrar los ojos.
-Ayuda...- grité, pero ese gritó fue casi inaudible.-ayuda...
Nadie me escuchaba... Y nadie nunca me escucharía, porque hasta para la sociedad... No era más que una puta.