El tiempo se arrastraba cuando esperabas algo, notó SungMin, suspirando para sí mismo.
- ¿Algo está mal con tu café, Minnie?
SungMin miró su café intacto antes de sacudir la cabeza.
- Está bien.
Dijo, sonriendo a Kristal.
Ella estaba realmente enojada con él cuando lo había visto por primera vez:
-¿Cómo pudiste desaparecer así? ¡Estaba preocupada, imbécil!
Pero afortunadamente ella lo había perdonado.
- Sólo estoy...
SungMin se retorció cuando ella le lanzó una mirada de complicidad.
- Oh, Dios mío - dijo ella, sonriendo. - Finalmente lo follaste.
La campana sonó.
- Yo...
Dijo SungMin antes de darse cuenta de que los ojos de Kristal estaban en otra parte.
- Mierda - murmuró ella, mirando algo detrás de SungMin. - Mira ese buenorro, Min.
Curioso, SungMin se volvió... Y se congeló.
Un hombre alto y ancho de hombros estaba junto a la entrada, barriendo una mirada fría de ojos color acero alrededor de la cafetería. Su largo cabello castaño oscuro estaba atado hacia atrás y no hizo nada para suavizar el corte afilado de su mandíbula firme o el acero en su mirada mientras sus ojos se encontraron con los de SungMin.
SungMin trató de hacerse más pequeño.
- ¡Te está mirando, SungMin! - Susurró Kristal emocionada. - ¿Cómo eres tan afortunado? Primero KyuHyun y ahora...
- Es mi hermano.
Dijo SungMin con un suspiro, mirando con resignación cómo Siwon se dirigió hacia él.
Siwon estaba enojado. Podría parecer tranquilo y sereno, pero SungMin sabía que en realidad estaba enojado. No era que pudiera leer los pensamientos de Siwon. Nunca pudo, y, para su sorpresa, SungMin todavía no podía penetrar los escudos mentales de Siwon a pesar de sus capacidades telepáticas, que habían mejorado mucho. No es que se estuviera esforzando mucho.
Técnicamente, estaría cometiendo un crimen si lo hiciera.
Pero conocía a Siwon. No necesitaba leer su mente para poder decir que su hermano no estaba contento con él. Para ponerlo a ligeramente.
- ¡¿Hermano?!
Kristal exclamó justo cuando Siwon los alcanzó.
- SungMin.
Dijo Siwon con cuidado.
SungMin pensó que era la primera vez que Siwon realmente lo llamaba SungMin. No estaba sorprendido. Siwon podría ser un acosador de las reglas en casa, pero como Lord Canciller del Ministerio de Asuntos Intergalácticos, estaba bien versado en las costumbres de otros planetas y nunca haría algo que traicionara que no fueran humanos.
Incluso la forma en que estaba vestido era impecablemente humana. Mientras SungMin no tenía esperanzas en la moda humana, Siwon llevaba un traje oscuro de aspecto caro que no era tan diferente de los que KyuHyun usaba.
Al pensar en KyuHyun, SungMin se asustó un poco. El almuerzo de KyuHyun iba a comenzar pronto. KyuHyun podría entrar en la cafetería en cualquier momento.
- Hola.
Dijo SungMin, tratando frenéticamente de decidir qué hacer.
Presentar a KyuHyun a Siwon sería una idea terrible. Pero no podía simplemente irse con Siwon. Había prometido esperar a KyuHyun. Sin mencionar que tenía miedo de que, si se iba con Siwon, nunca volvería a verlo. No dejaría pasar a Siwon para teletransportarlo a casa tan pronto como estuvieran fuera de la vista de los humanos.
Kristal se aclaró la garganta y SungMin finalmente recordó sus modales.
- Esta es Kristal, mi ex compañera de trabajo - dijo, gesticulando entre ella y Siwon. - Mi hermano, Siwon.
Mierda. ¿Debería haber inventado un nombre para Siwon? ¿Suena Siwon lo suficientemente normal?
Siwon le lanzó una mirada de asombro, pero asintió cortésmente a Kristal.
- Encantado de conocerte.
Murmuró.
Ella se sonrojó, tocándose el pelo y mirando a Siwon por debajo de las pestañas.
- El placer es todo mío.
Dijo ella, su voz sonaba un poco rara.
Por primera vez, SungMin entendió el significado de la vergüenza de segunda mano. Ya no estaba tan despistado en tales asuntos y podía ver que Kristal se sentía atraída por Siwon. Deseaba poder decirle que no se molestara.
Si Siwon notó que ella estaba coqueteando con él, él no lo demostró, sus ojos se movieron hacia SungMin.
- ¿Dónde está él?
- ¿Quién?
Chilló. ¿Siwon sabía de KyuHyun?
- Ryeo.
Dijo Siwon, dándole una mirada extraña. Cierto.
Antes de que SungMin pudiera contestar, el timbre sonó de nuevo, y algunos clientes entraron a la tienda.
- Lo siento, tengo que volver al trabajo.
Dijo Kristal con pesar.
- ¡Puedo ayudar!
Dijo SungMin rápidamente, poniéndose de pie.
Excepto que Siwon lo agarró de la muñeca y lo sentó.
- Él no puede.
Le dijo a Kristal en un tono vagamente de disculpa, sin parecer una disculpa en lo más mínimo.
Tan pronto como ella asintió y los dejó solos, Siwon dijo en voz baja:
- Explícate, Min.
SungMin se hundió en su asiento en derrota.
- ¿Cómo me encontraste?
Siwon le dio una mirada plana.
- ¿Realmente pensaste que no lo haría?
- Pero a Ryeo se le quitaron los chips de identificación.
Esperaba que su familia lo encontrara eventualmente, pero no esperaba que sucediera tan pronto.
Algo parpadeó en los ojos de Siwon. Se encogió de hombros.
- No fue difícil darse cuenta de que podrías estar en Terra después de que intentaste convencer a mamá de que te dejara volver. Además, todos nuestros vínculos familiares contigo se cortaron de nuevo, lo que hace que sea obvio que te encuentras en un planeta lejano - Una mueca desdeñosa torció los labios de Siwon. - No me sorprende que Ryeo no haya tenido la previsión de ver esto, pero esperaba algo mejor de ti. ¿Es contagiosa la estupidez?
- No seas malo.
Dijo frunciendo el ceño ante el tono frío y cortante de su hermano. Nunca entendió el abierto desdén que Siwon tenía por Ryeo. Siwon solía estar tan concentrado, pero era francamente malo con Ryeo.
- No es amable hablar de esta manera acerca de tu compañero.
Una mirada agria cruzó la cara de Siwon ante el desagradable recordatorio de que Ryeo no era sólo el mejor amigo de SungMin sino también su compañero de unión.
Por primera vez, entendió completamente por qué Ryeo quería romper su vínculo con Siwon tanto. Tampoco querría estar unido de por vida a alguien que lo despreciaba.
Sin mencionar que claramente había algo defectuoso en el vínculo de Siwon y Ryeo, porque no era normal que a los compañeros de unión no se gustaran el uno al otro. El vínculo usualmente lo impedía. Debían ser realmente incompatibles si ni siquiera el vínculo podría hacer que se encariñaran entre sí.
- ¿Amable? No soy amable, Min - dijo Siwon con leve diversión en su voz. - Tú eres el único que es delirante al respecto.
- No estoy delirante. Sé que pretendes ser cruel, pero en el fondo te importa mucho.
Siwon sólo negó con la cabeza, mirando a SungMin como si fuera la criatura más tonta que jamás había visto, pero todavía le gustaba su buen juicio. ¡Lo que demostró que SungMin tenía toda la razón! ¿Verdad?
- No sé cómo diablos estás relacionado con nuestra madre o conmigo - dijo Siwon, torciendo los labios. - Eres como un pollo eclosionado en un nido de k'hlers.
- Ahora estás siendo malo contigo mismo y con tu madre.
Claro, su madre y Siwon podían ser severos y despiadados, pero no se parecían en nada a los k'hlers, los venenosos depredadores calluvian similares a las serpientes terranas, solo que con alas.
- Estoy siendo honesto, no malo - murmuró antes de clavar sus ojos plateados en los de SungMin. - ¿Por qué estás aquí? ¿Por qué querías volver a la Tierra?
SungMin se lamió los labios secos. Antes de que pudiera decir nada, el timbre de la puerta volvió a sonar y KyuHyun entró en la tienda.
SungMin se congeló.
KyuHyun le sonrió antes de que su mirada se dirigiera a Siwon, quien todavía tenía su mano alrededor de la muñeca de SungMin. La sonrisa de KyuHyun desapareció, sus hombros se tensaron visiblemente.
Caminó hacia la mesa, sus ojos seguían fijos en la mano de Siwon en SungMin.
Como si sintiera algo, Siwon se giró justo cuando KyuHyun los alcanzó.
- ¿Quién es este, SungMin?
Dijo KyuHyun, pasando a Siwon por encima del hombro y poniendo una mano en la nuca de SungMin.
Ambos hombres intercambiaron una mirada fría sobre SungMin, la expresión de KyuHyun vagamente hostil y la de Siwon de sospecha.
SungMin se mordió el labio, mirándolos cautelosamente. Eran de altura y construcción similares, no estaba seguro de cuál de ellos ganaría si hubiera un altercado físico.
Tentativamente, extendió sus escudos mentales a KyuHyun, protegiéndolo de las maniobras telepáticas. No es que pensara que Siwon lo haría, después de todo era un crimen, pero no lo dejaría pasar. Siwon podría ser absolutamente poco ético si pensara que era necesario.
SungMin sabía que su hermano era un poco hipócrita en ese sentido. Insistió en que todos debían seguir las reglas y leyes, pero parecía que no tenía ningún problema en ignorar las reglas si le convenía.
Esperaba que Siwon no intentara entrometerse en la mente de KyuHyun. Si lo hiciera, encontraría el escudo de SungMin, lo que haría que Siwon fuera más que sospechoso. Un telépata de Clase 1 no debería haber podido extender sus escudos mentales a otra persona, y se suponía que SungMin era de Clase 1.
- Este es mi hermano, SiWon.
Atrapando la mirada incrédula de Siwon, SungMin se dio cuenta de que se había recostado en el toque de KyuHyun. Se apresuró a enderezarse.
- ¿Hermano?
Dijo KyuHyun.
- Shǐ Yuán, -corrigió Siwon secamente. - Choi Siwon. ¿Y usted es?
KyuHyun miró a SungMin antes de regresar sus ojos oscuros a Siwon.
- Cho KyuHyun.
Dijo, su tono aún frío.
- Es mi compañero de piso.
Dijo SungMin rápidamente.
Sintió que KyuHyun se ponía rígido e hizo una mueca por dentro.
Tenía tantas explicaciones que hacer.
- Compañero de piso.
Repitió su hermano, mirando la mano de KyuHyun en el cuello de SungMin. Su rostro era completamente inescrutable.
- Sí.
Dijo KyuHyun con voz cortada.
- Londres es caro.
Volvió a decir rompiendo el tenso silencio.
- Estoy seguro de que lo es - murmuró Siwon antes de sonreír amablemente. Fue un poco desconcertante. Siwon rara vez sonreía amablemente sin una razón. - Pero ahora estoy aquí y ya no tienes que preocuparte por eso. Me encargaré de ello.