-No lo entiendo. - dijo Nathan, una semana después, mirándolo desde el otro lado de la mesa de la cafetería del campus. - ¿Por qué está siendo tan pendejo contigo? Quiero decir, él siempre es un pendejo, pero últimamente ha sido un súper pendejo cuando se trata de ti.
Suho reprimió un suspiro.
Su amigo tenía razón, por supuesto.
Sehun le había estado tratando como una mierda toda la semana. No es que eso fuese una completa sorpresa.
-En serio, ¿mataste a su gato? ¿O... ¿O dejaste un pollo ensangrentado en su puerta o algo? - negó con la cabeza. - Tiene que haber alguna explicación. Se está poniendo ridículo. La gente está comenzando a hablar.
La taza de café de Suho se detuvo a medio camino a su boca.
-¿A hablar?
-No importa. - Nathan hizo una mueca, viéndose un poco incómodo. - Sólo algunos rumores estúpidos.
-¿Qué rumores, Nate?
Su amigo tomó un sorbo de su café.
-Algunos piensan que es sospechoso que Sehun no te diera una nota reprobatoria a mitad de período.
Suho dejó de respirar.
-¿Qué?
-Algunos dicen que lo has chantajeado para que te dé una calificación aprobatoria. Te dije que era estúpido.
Se relajó, recostándose en su silla.
-Sí. Estúpido.
-En realidad, es un poco extraño, ¿no crees? Pensé que te haría fallar de seguro. Pero no lo hizo, y ahora él es un idiota total contigo. Todo esto es raro. - su amigo le dirigió una mirada sondeándolo. - ¿Estás seguro de que no estás ocultando algo de mí?
Suho sintió una punzada de culpabilidad. Tomó un sorbo de su café y miró a su taza.
-Puede ser.
-Muy bien, suéltalo.
Dijo, fijando sus ojos en él.
Comenzó trazando el borde de la taza con el dedo siguiendo su forma.
-Yo... ¿Recuerdas el consejo que me diste? ¿Sobre Sehun?
Su amigo se rió entre dientes.
-¿Te refieres a coquetear?
-Sehun no me dio una calificación aprobatoria porque él se apiadó de mí, Nate.
Las cejas de Nathan fruncidas; luego su boca abierta.
-De ninguna manera. ¿En realidad seguiste mi consejo?
Suho hizo una mueca.
-No exactamente. - Él miró el sándwich en el plato y tiró del queso que salía por los bordes. - Hice más que coquetear.
Un sonido metálico le hizo mirar hacia arriba.
Nathan había dejado caer su tenedor y ahora estaba mirándolo con los ojos muy abiertos.
-Estás bromeando.
-Ojalá.
Nathan miró a su alrededor y luego acercó su silla.
-Entonces, ¿qué te hizo hacer?
-¿Qué crees? No un trabajo de mano de seguro.
-Santa mierda. ¿Le hiciste una mamada?
Asintió secamente.
Nathan dejó escapar una breve carcajada.
-Wow, nunca pensé que realmente coquetearías con él, mucho menos... Entonces, ¿cómo fue? Quiero decir, ¿te dio asco?
Tomó un sorbo de café.
Suho estaba tentado a decir que sí. Habría hecho todo más sencillo.
Pero no podía obligarse a sí mismo a mentir.
-No. Estuvo bien. Incluso la primera vez.
Su amigo se atragantó con el café y empezó a toser.
-¿La primera vez? - Dijo cuándo la tos, finalmente cedió. - ¿Quieres decir que lo hiciste más de una vez? ¿Todavía te obliga hacerlo por una calificación?
Suho se preguntó si prostituirse a sí mismo por una nota era mejor que prostituirse a sí mismo por dinero. No estaba seguro.
-Mira...- Suho se pasó una mano por los ojos. - Yo realmente no quiero hablar de ello. Sí, ah estado sucediendo por unas semanas, pero lo importante es que ya pasó Yo terminé el acuerdo.
-¿Pero tú?, tú sabes... ¿te lo follaste?
-Sí. - dijo, luchando por mantener su voz normal. - Yo me lo follé. Bueno, él me folló.
Nathan sonrió, ojos marrones brillando con picardía.
-¿Como estuvo él? ¿Estuvo bien?
Sonriendo torcido, negó con la cabeza.
-Vamos ¿tenemos que hablar de ello?
-¡Por supuesto que tenemos que hablar de ello! ¡Tuviste sexo con Sehun! ¡Sehun!
-Callate. – dijo entre dientes, mirando a su alrededor. - No quiero hablar de ello. No hay nada que hablarlo, No apestó, pero obviamente me alegro de que todo el asunto haya terminado.
Sintió los ojos de Nathan en él, inusualmente serios e inquisidores. Suho se removió bajo su escrutinio.
-¿Qué?
-Entonces, ¿por qué está tan enojado contigo si se ha acabado?
Dijo Nathan, tamborileando con los dedos sobre la mesa.
Suho tenía una idea del por qué, pero no era algo sobre lo que quisiera pensar.
-Ni idea.
Nathan le dio una mirada escéptica, pero no insistió más y miró su taza. Él se quedó en silencio, con una expresión distante, pensativa en su rostro.
Suho miró a su amigo Pensando en ello, Nathan había estado un poco distraído todo el día.
-¿Ocurre algo malo?
Nathan miró hacia arriba.
-En realidad no. Sólo... ¿tú conoces a HyunA?
-¿HyunA?
-¿La niña en la clase de Sehun? ¿Muy bonita, con pelo oscuro?
Suho se encogió de hombros.
-Es una gran clase. No puedo decir que la recuerde. Entonces, ¿qué pasa con ella?
-Ella me invitó a un trío.
Suho enarcó las cejas.
-¿Y cuál es el problema? No es como si nunca has tenido un trío antes.
Había muy poco que Nathan no había hecho, en realidad. Su amigo tenía tantas ofertas lascivas a veces que parecía una tontería. El hombre ni siquiera tenía que intentarlo.
Si Nathan No fuera tan condenadamente agradable, todos los chicos le odiarían.
-El problema es su novio.
-¿Qué hay de él? ¿Lo conoces?
Nathan vaciló.
-No exactamente. Pero yo le he visto por ahí. Él siempre la recoge después de la escuela.
Suho soltó una carcajad, finalmente dándose cuenta de lo que su amigo estaba hablando.
-¿El tipo heterosexual del que has estado enamorado por años?
-Vamos, no estoy enamorado de él. - dijo con una sonrisa torcida. - Yo ni siquiera sé su nombre.
El chico le lanzó una mirada que decía por favor.
-Síp, tú no estás enamorado de él. Sólo los miras fijamente y babeas cada vez que lo ves.
-Yo no lo hago.
-Tú lo haces.
Nathan se echó a reír.
-Bien. Puede ser. Sólo un poquito. Pero vamos, ¿quién no? Todas las chicas lo miran y babean cada vez que viene. El tipo es ridículamente apuesto.
-Entonces, ¿cuál es el problema? ¿No deberías estar feliz de poder llegar a tener sexo con él?
Nathan lo miró como si fuera un idiota.
-Él es hétero. No va a ser ese tipo de trío. Simplemente compartiremos a su novia; eso es todo. Tal vez me equivoque, pero tengo la sensación de que el trío es enteramente idea de HyunA ella siempre coquetea conmigo, y yo no creo que él ni siquiera sepa que yo existo. Yo no creo que el chico esté muy feliz de que ella me invitara a unirme a ellos. No lo sé... Me da la impresión de que él es el tipo posesivo.
-Un pequeño enamoramiento, sip. - bromeó. - Muy pequeñito.
Los oídos de Nathan se pusieron rojos.
-Oh, ahórratelo. De todos modos, ese es el problema: No estoy seguro de que este trío sea una buena idea. El tipo probablemente odiará mis pelotas por tocar a su chica.
-Entonces dile a ella que no puedes hacerlo.
-Ya le dije que lo haría. - Nathan le dio una mirada tímida. - No pude resistirla oportunidad de verlo desnudo.
Suho negó con la cabeza.
- No tienes remedio, hombre.
Nathan sonrió.
-Al menos yo no estoy tirándome al Profesor Pendejo. Vamos, ¡dime que tiene una pequeña polla! ¡Alegraría mi día!
Suho puso los ojos, sacudiendo la cabeza.
-Él no tiene un pene pequeñito. Y yo no me lo estoy follando más. Terminamos.
Levantó su taza y se la llevó a los labios, evitando los ojos de su mejor amigo. Pensó en la forma en que Sehun le había mirado en la clase: enojado y tan jodidamente intenso que le hizo ponerse duro al instante.
Pensó en cómo había pasado la mitad de la clase fantaseado con caer de rodillas ante Sehun y chupar su polla, allí mismo, delante de todos los demás estudiantes.
Pensó en sus otras fantasías: cómo quería subir a su regazo, hacerlo callar con besos y luego conseguir la polla dentro de él.
-¿Estás bien? Te ves sonrojado.
Suho forzó una sonrisa.
-Sí. Estoy bien.
Estupendo.