El timbre de la salida ocasiono pánico, ya era hora de irnos y aún no terminábamos un trabajo que consistía de 3 hojas o más, si es que era posible, donde redactáramos una “historia”, si lo terminabas salías sino date por muerto, porque este vejete no se va sino le entregas lo que pide. Por supuesto como era de esperarse el primero en acabar fue Matsumoto. Presento y el profesor leía, después de unos minutos de lectura el felicito, alagando su gran dote de narración y no sé qué más cosas. Yo, en mi caso, sufría de un derrame cerebral por tanto uso excesivo de mi “inteligencia” ahora es cuando desearía ser Shakespeare.
Tras 20 minutos de “imaginar”, fui con el profesor, quien entre risas leía mi historia. Conté de un dinosaurio que no podía agarrar nada. Sí, soy tan maduro. No me dijo nada el maestro simplemente me reviso. Yo corrí por mi mochila, guarde todo y me larga a la chingada, pero al girar para tomar el rumbo a la salida de la institución me asuste viendo a taka recargado en la pared.
-¿Qué haces aquí? –pregunte sorprendido.
-tú, ¿Qué crees? –dijo entre dientes molesto.
-¿esperándome? –recordad que soy idiota.
-si.- se quitó de la pared y comenzó a caminar, no obstante se detuvo medio girando su cuerpo para verme.- ¿no vienes?
-oh sí, claro.- sonreí, el saber que taka me esperaba me daba ilusiones. Di unos pasos para quedar a su lado. Bajamos las escaleras para después caminar por el pasillo vacío de la escuela, diablos, de verdad tarde mucho. Había un silencio pero nada incomodo, de pronto Matsumoto se detuvo por lo que obligatoriamente también me paro. Gire a ver qué era eso que llamaba tanto la atención de mi pequeño.
“TORNEO DE MATEMATICAS”
-¿Qué pasa taka? –me pregunto Akira, admirando también del cartel naranjado que habían puesto en el pasillo y no era el único, había millones pegados, de diferentes tamaños, formas y colores, me pregunto ¿Cómo es que nos lo vi? Oh, claro, las chicas esas que me miraban.
-nada, solo, recuerdo que antes me mandaban a estos concursos.- dije apuntando al cartel.
-¿enserio? –exclamo incrédulo Akira.
-sí, cuando iba a primaria me mandaban a concursar a varios lugares junto con otros tres chicos.
-¡woooo! Era de esperarse de Takanori, con razón sabes mucho sobre las matemáticas.
-no, en realidad es porque pongo atención en clases y practico en casa, ¡Cosa que tu no haces! –tome su mejilla y la jale, obviamente hubo una chillido por mi forma de tratarle.
-¡waaaa, taka! –lloriqueo. Le solté, prosiguiendo con caminar a la salida. Miraba a todos leyendo de los supuestos torneos que habría y si alguien tenía ese tipo de “talento” podía entrar siguiendo los requisitos que pedían. Akira me seguía sobándose la mejilla adolorida, estaba nervioso, en solo tenerlo a mi lado hace latir tan fuertemente mi corazón, incluso creo que me estoy arrepintiendo de darle el regalo. En una mirada de reojo a un lado, un cartel acaparo mi vista. Gire a ver e inmediatamente una duda vino a mi mente porque lo que sin vacilar interrogue a la persona rubia que se encontraba a mi lado.
-Akira.- le llame, al mismo tiempo que tomaba su brazo para detenerlo, lo que fue un éxito.
-si.-me dijo mirándome seriamente.
-¿Qué paso con tus clases de karate?
-ah, eso.- comienza a rascarse la nuca nerviosamente.
-no me digas que ya no fuiste.
-¡no! C-claro que no, ¡fui hasta en las vacaciones! –sonrió.
-ah… bueno, más te vale porque si me entero que te saliste ¡olvídate de taka-chan!
-¡que! ¡No, mi taka-chan no! ¡Hazme lo que quieras pero no me quites a mi niño! –llora infantilmente tomando de mis manos.- por cierto, ¿cómo está el?- drásticamente cambio su “tristeza” por emoción.
-él se encuentra bien.- me sonroje, que el agarrara mis manos me hacía sentir bien.
-me alegro.- sonrió, diablos, su sonrisa es perfecta. Baje mi miraba, mi cabello tapaba mi vergüenza, aun tenia de ese copete rojo, que ya no era tan rojo.- taka, estas bien.- me interrogo inclinándose un poco para verme, creo que este es el momento. Abrí mi mochila y extraje lo importante, o lo que quería darle.
-¡t-to-toma! –estire mis brazos, mis manos sujetaban el regalo para Akira. Temblaba demasiado, tanta era mi pavor que ni siquiera podía verle a la cara. -¡t-tó-tómalo ya! –grite, de verdad me estaba muriendo de la vergüenza que sentía en esos mismos instantes.
-taka.-su voz tan suave me tranquilizo pero su acción agito demasiado mi corazón.- gracias.- escuche en mi oído al igual que sus brazos me abrigaban cálidamente. Y sin darme cuenta mi rostro se escondió en su cuello cubierto por una bufanda de a cuadros negros y blancos.- nee de verdad te quiero.- me confeso en un susurro casi silencioso; se separó de mi tomando con sus manos mi rostro, mi sonrojo invadía gran parte de mi rostro hasta llegar a mis orejas.
-y-y-y-y-y-y-y-y-y…- no podía creer que no pudiera decir unas miserables palabras.
-heheheh.- rio suavemente Akira.
-¡n-no te burles!
-lo siento, te lo compensare.- lo vi acercarse peligrosamente a mi rostro, pero no, no voy a huir, cerré mis parpados y espere a sus labios. Un suave contacto a mi parecer. Fue pequeño pero muy significativo para mi corazón. No reclame, no grite, no dije nada, el solo sonrió soltando mi rostro. No quería que se alejara por lo que rápidamente deje caer mi cabeza en su pecho. Sentí su gran mano acariciar mi cabeza, unas palmaditas muy cálidas.- taka, ya debemos irnos o nos encerraran, vamos.- cogió mi mano, no me molesto en absoluto al contrario, la apreté dócilmente para que no me soltara.
Caminábamos por los pasillos desolados tomados de las manos, estaba rojito al igual que Akira, aunque el, gran parte de su sonrojo era escondido por su venda. No había problema alguno estar así, me pregunto si habrá gente a fuera, no hay ruido tal vez este vacío.
-nee Akira.- le llame mirando al suelo, es que no podía levantar mi rostro, tenía demasiada vergüenza.
-si.- me dijo sin dejar de mirar al frente.
-mañana, continuaremos con las clases, pasaste de panzazo esta vez, fueron muy miserables tu notas, así que ahora tendrás que dar un mejor esfuerzo.
-lo que tú digas.- se giró para sonreírme.- si tú me lo pides, lo cumpliré.- me detuve, de verdad era un idiota. Le jale lo suficiente para que me mirara a los ojos.
-¡no lo hagas por mí, es tu futuro, así que piénsalo dos veces!- le regañe cogiendo sus manos.
-pero mi futuro será contigo.- sonrió tiernamente.
-eh? – no podía estar más que rojo, inmediatamente baje mi rostro apenado por su confesión.
-lo siento, debe ser extraño para ti recibir este tipo de halagos, hehehe.- rio nerviosamente soltando una de mis manos y llevarlos a su nuca donde se rasco, debía de ser alguna clase de tic cuando está nervioso.
-no, me… gustan.- Musite, la pena y la vergüenza no me daban tregua.
- hehhehehe.- volvió a reír. Aquella mano que antes estaba en su nuca, llego a mi mentón, donde sutilmente lo levanto para así yo poder verle a la cara. De nuevo sus labios se acercaban peligrosamente pero esta vez no pudimos besarnos porque ría me llamo.
-¡enano de porquería ven de una puta vez y mañana te darás todos los jodidos besos que quieras con reíta! ¡Pero ahora trae tu pinche culo para acá!
-¡s-si! - aleje a Akira.- n-nos vemos.- Aun con mi vergüenza en mi rostro salí huyendo al portón donde ría estaba más que enojada recargada en la puerta de nuestra limosina. Me subí, detrás mío ría se subió y después francisco cerró la puerta.
-así que ya son novios.- comenzó a molestarme mi hermana.
- ¡no!... bueno, no sé.- infle mis mejillas formando un piquito en mis labios. Más bien era un berrinche mío.
-¿que no te dijo?
-no, solo, me beso.- abrace mi mochila, queriendo esconder mi gran sonrojo tras ella. - Fra-Francisco.- le llame al ver que ya se había subido ala limosina en el asiento de piloto.- n-no vayas a decirle nada a mi padre, de lo que viste, por favor.
-¿de que cosa me habla, señor? Yo no vi nada.- sonrió, lo descubrí gracias al espejo que se encontraba en medio. Yo también sonreí al ver que había comprendido lo que le pedía.
-gracias.- musite sonriente, recordando cada momento que pase el día de hoy, definitivamente, a pesar de que comenzó hecho mierda, término de una forma muy memorable.
***
Llegue a casa, mama y mi hermana no estaba, aunque ella dentro de unas horas llegaría. Deje mi mochila, mi perro me siguió hasta mi cuarto donde se tumbó en la pequeña camita de cartón y telas que le hice, mi perico inmediatamente se colocó en mi hombro derecho, después proseguí con tomar asiento frente al escritorio donde tenía mi computador.
Tome la bolsita de regalo, me pregunto que será, pesa, no mucho pero si algo. Hice a un lado los papeles de colores y metí mi mano, sentí algo duro y pequeño como dos cajitas, al sacar ambos me quedé asombrado. No era cierto lo que mis ojitos veían, debía de ser una broma de mal gusto. Era un iPhone y unos audífonos color blanco. Los audífonos claro que eran reales pues su cobertura de plástico trasparente me lo decía, pero el iPhone, no me lo creo. Abro de la caja de cartón duro y mientras voy abriendo, me digo mentalmente que no me ilusione pero de pronto veo el aparato electrónico.
-¡pinche Matsumoto millonario!
Grite a todo pulmón estaba solo así que no había problema, ahora me siento miserable, yo le regale un libro ya usado y él una cosa de estas. ¡Mierda, me siento mal por esto! Tapo mi cara avergonzado sin embargo las quito rápido para ver si no hay más en la bolsita. Y en efectivo había un pequeño sobre blanco. Lo abrí con cuidado, obviamente había una pequeña carta. ¿Qué me habrá escrito mi pequeño? No obstante al leer me saco de onda y más al ver quien firmaba era Ria por lo que con más atención leí su mensaje:
“Lo siento si esperabas que fuera mi hermano pero tú sabes cómo es ese nerd.
En fin te escribo este intento de carta para agradecerte, suena raro de mi parte pero esto es sincero; gracias a ti, milagrosamente mis conflictos, el odio, las dudas y aquella barrera que existía entre mi hermano y yo desapareció pero, sé que toda mi puta vida escolar de secundaria me la he pasado tras tu huesitos pero nunca te amé con sinceridad, solo eras un capricho esto ni al caso pero debía decírtelo. Nunca creí que tú, un niñito infantil e inocente (aunque esto yo lo defino como idiotez) nos hiciera volver a unir a mi hermano y a mí, te lo agradezco. Sé que soy cabrona y demás pero créeme que te digo esto de corazón, gracias.
Los conflictos con papa aún siguen pero bueno mi hermano y yo nos queremos, sin embargo me atrevo a decir que el pasado de Takanori aún sigue latiendo, sabes lo que ocurrió con kai, lo que le hiso, temo decir que kai aun insiste con atemorizarnos, taka no lo sabe pero kai me amenaza con hacerme daño si digo algo, y no solo ahora desde que éramos niños el me amenazo porque yo vi lo que hiso kai, tengo miedo y mi hermano también, tenemos mucho miedo. No te pido que nos cuides ni muchos menos nos protejas, lo que si te suplico es que te cuides. Mi hermano te quiere con sinceridad, mucho más que a kai y por esa razón quiere ir contra ti, reíta.
Cuídate, kai no es de quedarse de brazos y ver cómo le quitan las cosas, no, él es capaz de todo. Adivino ahora que comenzaran las clases kai nos intimidara más a los dos y de seguro te utilizara a ti para retener a taka, conozco a mi hermano y sé que para protegerte el sería capaz de mantener distancia, incluso seguir con su enorme seriedad y rechazo a ti.
Ten cuidado reíta, Kai parecerá inofensivo pero es todo lo contrario, es un maldito lobo vestido de borrego, sé que es posible de que te aleje de taka o peor aún que repita lo que hiso con taka, y no solo a mi hermano se lo hará, podrían ir más víctimas, incluso tú, porque a kai le gustan los culos vírgenes, cuídate.
Con cariño, Ria.”
Deje la nota en el escritorio, su mensaje me estremeció. Conozco a Ria desde el primer día, ella y yo nos unimos porque éramos simplemente los “reyes” en la escuela, los dos hasta la actualidad seguimos conservando una gran popularidad. En aquellos días hacíamos bella pareja y por esa razón debíamos serlo, no mentiré que si tuvimos un pequeño romance secreto, pero en si no había amor, solo era para cumplir con los deseos de la gente. Incluso cuando nos juntábamos para “besarnos”, ya que nuestros amigos nos dejaban solos en lugares especiales, en realidad platicábamos sobre nosotros, ahí empezó nuestra amistad, ella sabe mucho de mí, gran parte de mi pasado ella lo sabe aunque Ria nunca me abrió su corazón, en cierta manera era idéntico a Takanori sin embargo nunca insistí, respete su privacidad cosa contraria a con Taka, en realidad no, Matsumoto me entrego su corazón en charola de plata, confiaba demasiado en mi aunque yo siempre fui tratado en un principio como un tarado y si, lo soy.
Por lo que me dijo Ria de no quererme, me alegra porque en aquellos tiempos en que me coqueteaba porque me quería era incomodo, lo que hacía que nuestra amistad se fuera a la mierda pero saber que fue un capricho suyo me alegra.
Lo que si me molesta es kai, no sabía que fuera tan peligroso, pero como para que me diga esto, me causa miedo también. Ahora más que nunca Ria y Takanori me necesitan más que nunca, debo protegerlos, no pienso dejarlos solos teniendo a ese puto violador tras de ellos, de Ria, bueno, no me preocupo mucho porque sabe defenderse aun así necesita mi ayuda. Taka, obviamente me necesita más y yo estaré a su lado, además cumpliré mi promesa.
Prendí el iPhone y revise las aplicaciones para así despejar un poco mi mente pero al checar las notas había un nombre o mejor dicho una nota:
“Ruki~ LOVE! otra vez yo reíta xD le hice un Facebook a mi añoñado hermano, se enojó por el nombre pero es para que nadie se dé cuenta de quién es, lo digo por kai y mi padre, este es mi regalo de navidad, taka te dio este iPhone junto con los audífonos así que yo también quise darte algo xD ahora estarán juntos siempre uwu LOVE LOVE! PD. La idea de regalarte un iPhone fue mi idea además obligue a mi hermanito a dejar ese aburrido iPod por un iPhone le resultara mejor, chao~ PD2. No te preocupes, obligare a ese nerd a que este todo el día conectado x3”
-hhehehe.- me reí por la ridiculeces que hace Ria, obviamente le hice caso y me puse en face donde inmediatamente busque a taka, oh perdón a Ruki~ LOVE!
Era un perfil simple, y las únicas publicaciones que habían eran sobre que me quería y no se mas, estaba más que claro, que Ria anduvo ahí. Envié la solicitud y después vi su foto de perfil, era una muy cómica.
Se trataba de Ria “abrazando”, disque “abrazando” porque en realidad ella con su brazo izquierdo rodeaba su cuello para dejar su mano tapando la boca de taka, se veía molesto, lo obligo a tomarse esa foto y Ria, ella estaba sonriente con su lengua de un lado.
No paso mucho cuando mi solicitud fue aceptada y el me hablara:
Ruki~ LOVE!: reíta!!!! Soy Ria, el idiota de mi hermano estuvo a punto de tener un derrame nasal por tu foto de perfil xDDDD ahahahah LOL
Reita_rock n´ roll: eh? –fue lo único que escribí. No lo pensé dos veces y revise mi foto. Mierda, tenían razones para tener un derrame. Era una foto mía con Aoi y Shima sin camisa, estábamos en la playa, era obvio que anduviera sin camisa, aun Shima en realidad traía una playerita blanca sin mangas. Debo quitar esa foto, ya paso meses. Inmediatamente salí de la aplicación y me puse en la cámara y tome una foto mía donde solo se veía mi sonrisa y parte de mi hombros, donde también salía de colado mi perico. Cambie las fotos y fui a ver que me habían escrito, desde hace unos minutos que me contestaron.
Ruki~ LOVE: buuuu para que cambiaste la foto!!! :( taka ya iba a ir al baño a masturbarse con tu foto LOL XD
Reita_rock n´ roll: Ria eres una loquilla! xD – y de pronto tardo en contestar y si llegaban mensajes eran cosas incoherente, bueno simplemente letras al azar.
Reita_rock n´ roll: hola? –volví a escribir hasta que después de un rato me contestó.
Ruki~ LOVE: no le creas, solo me sonroje, solo fue eso, ok.
Reita_rock n´ roll: taka?
Ruki~ LOVE: si
Reita_rock n´ roll: entonces si te sonrojaste significa que si te puse duro con mi foto xD
Ruki~ LOVE: ¡VETE A LA MIERDA!
Reita_rock n´ roll: era broma, Matsumoto xD
Si, y ahí fue cuando lo jodi todo, no me contesto ni en diez, ni treinta, ni una hora, por lo que busque a Ria en face.
Reita_rock n´ roll: Ria, taka se enojó (/TAT)/
Ria Matsu:V : no mames tan rápido lo hiciste enojar
Reita_rock n´ roll: ayúdame! O.Ó
Ria Matsu:V : ya hable con el
Reita_rock n´ roll: tan rápido o.o
Ria Matsu:V : estoy en su cama acostada aun lado de él. Dice que cuando termine de descarga un libro en su iPhone te contestara.
Reita_rock n´ roll: entiendo, gracias, iré a comer, tengo hambre.
Ria Matsu:V : OK! Pero no quemes la cocina! xD te acuerdas de aquella vez que Aoi, Shima, Miyavi, Tora, Saga y yo fuimos a tu casa y nos pusimos a disque cocinar xDDD
Reita_rock n´ roll: si, quémanos las cortinas xDDD y de paso parte de mi pared e.e me regañaron por eso, además de que me prohibieron acercarme a la estufa u.u
Ria Matsu:V : hahahhaha LOL fue divertido, ya no nos Juntamos como antes u.u
Reita_rock n´ roll: si u.u algún día Ria, algún día volveremos a aquellos días.
Ria Matsu:V : junto con taka!
Reita_rock n´ roll: SII OAO)9 oye neta deja me preparo algo, tengo chingos de hambre, ahorita hablamos.
Ria Matsu:V : vale, te dejo chao~
Deje el iPhone aun lado, mientras tanto me dirigí al refrigerador a ver que mierda me preparaba o recalentada en el microondas para comer, porque la estufa definitivamente está prohibida para mí.
***
Estaba sentado en la mesa, habíamos terminado de comer. Aun lado mío se encontraba Ria sumida en su celular mientras yo igual checaba esa tal página llamada Facebook, en la cosa esa en la que me metió mi hermana, de pronto un sonidito y marca roja en la página me puso a dudar, golpee suavemente el brazo de mi hermana para llamar su atención.
-¿Oye que significa esto?-le interrogue, ella inmediatamente giro y me dijo que era sobre las solicitudes, tal vez era reíta, fue lo último que me dijo.- ¿Le pico?
-si, tarado.- me dijo viendo atentamente a mi iPhone. Al picarle ahí salía una foto diminuta, no sabía quiénes eran así que le toque donde venía el nombre, al agrandarse aprecie mejor la foto, de inmediato los colores se me subieron por lo que con mi mano libre tape mi boca por la impresión, Ria no lo dudo ni dos veces y me arrebato el celular.
-¡oye!- le grite, pero ella se rio gustosa.
-¡no inventes, te pusiste rojo solo por esa foto! Hahahah.- reía a carcajadas desde su asiento haciéndome sentir un idiota.- ¡le diré a Akira! –cuando escuche su nombre me sonroje más, por lo que no lo dude y me abalance contra ella.
-¡ni se te ocurra!- trate de quitárselo pero no podía. Por más que la abrazara para quitarle el aparato no pude y estuve minutos así a hasta que ella reía a carcajadas, en esa oportunidad arrebate mi iPhone y vi lo que había escrito por lo que rápidamente conteste aun con las risas escandalosas detrás de mí.
Reita_rock n´ roll: hola?
Ruki~ LOVE: no le creas, solo me sonroje, solo fue eso, ok.
Reita_rock n´ roll: taka?
Ruki~ LOVE: si
Reita_rock n´ roll: entonces si te sonrojaste significa que si te puse duro con mi foto xD
Ruki~ LOVE: ¡VETE A LA MIERDA!
Molesto cerré esa página y apague mi celular. Me fui del comedor enojado y subí las escaleras para ir a mi cuarto. Ria vio mi cambio de humor tan drástico por lo que me siguió mas no me interrogo por saber lo que me pasaba. Llegamos a mi habitación y me senté volviendo a prender el aparato.
Reita_rock n´ roll: era broma, Matsumoto xD
Dejo un mensaje, pero ni de coña le contestare. Me recosté, mi hermana ya se había acostado por lo que la acompañe aunque ella estaba sumida en el celular y yo volví a salirme de Facebook para vagar por las aplicaciones y después ir a internet a buscar algún libro.
-nii-san reíta dice que le conteste que no te enojes, era una broma.
-dile que se vaya a la mierda y estoy ocupado.
-¿haciendo qué?
-descargando un libro.- le conteste ya más calmado no dejaría que mi enojo lo pagara mi hermana, ¡aunque ella también tuvo la culpa! Y de ahí ya no me dijo nada simplemente me abrazo.
-Contéstale mierditas.
-ahorita, estoy ocupado.
-hooo~ más te vale nii-san, ¿sabes?
-hummm.
-es una gran oportunidad para que conozcas más a reíta.- ¡Reíta! ¡Reíta! ¡Reíta! ¿Quién coños es “Reíta”? o ¿porque le llaman así?
-¿porque le llamas reíta?
-Ha, porque un día Aoi le llamo retraído y Akira contesto: yo no soy reíta…¡¿reíta que?! Nos burlamos de él porque no sabía que era eso y desde entonces le llamamos reíta, de retraído hahaha fue gracioso.
-¿te llevabas con Akira antes?
-somos los reyes Akira y yo en esa escuela, a huevo teníamos que conocernos.
-ohh.
-en fin, enfócate más en que debes conocer a Akira.
-¿porque?
-porque reíta sabe mucho de ti pero tú sabes muy poco y créeme que el a pesar de que no lo aparente esta igual de destrozado que nosotros.
-¿porque? ¿Qué paso? –me preocupe al escucharla decir aquello.
-¿no me digas que no lo sabes?
-¿qué cosa?
- no, no sabes idiota
-¿que no se qué? –comenzaba a desesperarme porque no conocía que le pasaba a Akira.
-que Akira lleva como 6 años o más intentando entrar a una escuela de karate y su puta madre no lo deja.
-¿que?
-¿sabes del accidente de su padre, cierto?
-si.
- ¿sabes que ya no puede hacer karate?
-si.
-¿Sabes que hay una preparatoria y universidad enfocada con el karate y otras artes marciales?
-creo que se dé cual me hablas.
-bueno, pues Akira lleva como casi 6 años intentando entrar y su madre no le deja.
-pues que se largue de su casa, se consiga trabajo y pague sus estudios no hay un puto problema.
-claro que lo hay.
-y ¿cuál es?
-que para entrar a esa puta escuela debes ser seleccionado.
-¿Haa? ¡Es estúpido!
-hay si serás idiota, Akira tiene que entrar en un torneo de karate pero no es cualquiera, esto solo ocurre cada último año de la secundaria y los putos señores esos vienen y ven el potencial de los karatecas, ¿porque crees que son los mejores karatecas que salen de esa escuela? Y son los que van a los juegos olímpicos y no sé cuántos concursos más.
-él nunca me dijo nada.- me sentí de nuevo a avergonzado, ¿de verdad Akira sufría todo eso? ¿Por qué nunca me lo dijo?
-pues claro, porque reíta es un retraido, es muy timido en cuestiones de su vida, de sus problemas ademas de es una persona que se lo guarda todo, el prefiere escuchar que ser escuchado, el dice que ya no tiene remedio sus problemas, y para quitar digamos “el peso” que siente, ayuda a los demás para que ellos no sufran como el, claro, obviamente deben importarle la gente, un caso eres tú, para reíta tú eres muy importante, ahora contéstale hijo de mierda.
-vale, vale, vale, ya.- me salí de mi descarga y busque la aplicación para continuar con platicar con “reíta” hoy en verdad sería un día muy largo junto con Akira, mi chico rubio.