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Rescatame por alexriden02

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Notas del capitulo:

24/04/14

¨*¨*¨*Hola¨*¨*¨¨*¨

 Anocheció  y como no podía dormir he decidido editar este capítulo. Además  dentro de unos días estaré  viajando ~más de 12 horas~, para que no me extrañéis os dejo esta segunda parte.

Advertencia: habrá poco Yoosu y Yunjae, algo de Changminho y mucho Sichul.

Habiendo terminado las advertencias, os invito a seguir leyendo "Rescatame"

No olviden comentar que os parecio el beso(?)

 

IMPORTANTE: Lean las notas finales.

 

 

 

El pelinegro se acercó hasta el otro y lo abrazó, apretándolo a su cuerpo. Luego lo alejo para desabotonarse la camisa, cuando se la quitó expuso su hermoso cuerpo frente al él. Su cuerpo era delgado, pero bien definido. Desabotonó la pretina de su pantalón y abrió la cremallera.

-¿Intentas seducirme? – preguntó el más alto sonriendo de costado al ver como el más joven reveló un bóxer negro. Sin esperar la respuesta a su pregunta introdujo su mano dentro de la tela y tomó firmemente el miembro con su mano – Estas tan duro.

-Idiota… aahh… si sabes que estoy duro porque no lo haces de una vez – Heechul gimió excitado por el toque experto de Siwon. Él también quería sentir la piel del masculino hombre, le desabotono la camisa.

Siwon sonrió de costado, era la primera vez que Heechul sonaba tan insistente. Rápidamente se quitó él mismo su camisa. Continuo sacándose todo lo demás, antes de ayudar a su hermoso amante a sacarse también su ropa.

Heechul estaba encantando con el masculino cuerpo de Siwon, con solo mirarlo lo deseaba tener sobre él.

Siwon estaba consciente que Heechul estaba al borde del abismo, sus ojos clamaban que lo follase, pero Siwon quería jugar un poco más.

-¿Qué es lo quieres? – Siwon atrajo a Heechul a su cuerpo y restregó sus erecciones, cogiendo firmemente el par de globos de su hermoso amante – Si no me dices que es lo que quieres – susurró – No podre complacerte.

Heechul mordió sus labios en señal de no decir nada, pero mando su orgullo al diablo, deseaba que Siwon lo partiese en dos.

-Fóllame – un enardecido Heechul se soltó del agarre de Siwon y se puso contra la pared. Exponiendo su magnífica entrada – Quiero hacerlo de pie, házmelo de piel.

-Sabes que te haría el amor de mil maneras – lamio sus dedos para usarlo como lubricante. Luego separó los glúteos de Heechul, lentamente introdujo un dedos, sintiendo la estreches del más joven – Estas más estrecho que de costumbre… - lamio el hueco del cuello del más bajo.

-¡Cállate… mmmh y solo hazlo! – él estaba excitado de solo sentir el dedo en su interior. Se dejo llevar por la sensación de sentirse lleno al sentir los movimientos de esos dedos invadiendo su interior, gimió dolorido cuando agregó un tercer dedo.

-Gimes como una virgen – dijo mientras se agachó y besó el desnudo cuello de su joven amante.

-Nnnh… idiota… solo métela  aahh…

Siwon no pudo esperar más y llevo su pene hasta la pequeña entrada de Heechul, introdujo lentamente su erección hasta llevarlo al fondo. Al sentir como Heechul gemía con lujuria, acarició su espalda y dejó que se acostumbrase a su tamaño.

-Aaahh… Siwon aahh, puedes moverte… ohhh se siente tan bien.

Siwon obedeció las ordenes de Heechul, no importaba cual fuera el deseo más descabellado de su amado Heechul, él estaba dispuesto a cumplirlo. Lo penetró profundamente con cada una de sus envestidas, haciendo que el más joven gimiera y dejándolo casi sin aliento con cada embestida. Le gustaba que el más joven fuese tan sensible a su toque, estaba tan orgulloso de ser el único que podía tener  Heechul en ese estado, quien gemía y rogaba por más, era muy caliente ver ese esbelto cuerpo recibiéndolo. Miró con excitación la unión de sus cuerpos y ver como el cuerpo de Heechul tragaba su miembro con avaricia casi lo llevo a acabar en el interior de éste.

-Eres tan hermoso, tan jodidamente hermoso – separó los glúteos de Heechul y tuvo una mejor vista de su pene entrando y saliendo de la apretada entrada que lo tragaba. Ver esa imagen lo excitaba aún más, mordió sus labios para no soltar un “te amo”, sabía que eso rompería el encanto y que Heechul lo botaría directamente a la calle.

En la cumbre de su excitación, Heechul sintió que Siwon se salía de él y lo hizo recostar  contra la pared. El esbelto joven miro al más alto con cierta inocencia y picardía, pero su cuerpo despedía  la escancia de la lujuria.

-Te deseos… quiero que digas mi nombre una y otra vez – dijo Siwon, se agachó y besó a Heechul. Al principio el beso fue suave, pero fue cambiando en algo más fuerte y demandante, mientras restregaba su erección con la del esbelto pelinegro.

 Él  puso las manos en los pálidos muslos del más joven – Sube tus piernas a mi cintura – dijo mientras  ayudaba a realizar la acción. Cuando Heechul lo hizo, Siwon tomo sus glúteos y los separó para tener libre acceso a su cuerpo – Te gustara esta nueva posición – dijo apoyando a Heechul contra la pared de la habitación e  introdujo su fuerte erección en la entrada rosácea del más joven.

 

Heechul  al sentirlo en su interior rodeo con sus manos los fuertes hombros del hermoso semental de hombre que lo estaba penetrando.

-Aah… Si… ahh - gimió Heechul sintiendo como el pene de Siwon embestía su agujero – Agh… Siwon… ahhh

Al escuchar su nombre en boca de Heechul  se sintió en el cielo, como si esos gemidos fueran el canto de un ángel. Más cuando sentía como el interior de Heechul lo tragaba y lo apretaba ante cada embestida.

-aahh… más fuerte… ahí… aahh… más duro

Le resultaba  forzado hacer todo el trabajo, pero era tan excitante cuando el más joven gemía presionando sus dedos contra su espalda rogando por más, aquellos dedos se asemejaban a las garras de un animal. Coló su boca en la del más joven, con su lengua recorrió todo ese interior que nunca se cansaría de degustar. Jamás, Siwon  había hecho el amor en esa posición y no era un jovencito para soportarlo por más tiempo.  Aún así la situación ameritaba su resistencia, con sus fuertes músculos sostuvo a Heechul ante cada embestida, cumpliendo los deseos de su amado pelinegro.

Estando de pie tomó con más fuerza los muslos de Heechul y movió las cadera del más joven  de arriba hacia abajo, le encantaba embestir de esa forma. Sentía todo el control, ya que el más joven dependía de su fuerza para ser sostenido y embestido con tal entrega y pasión. Cada embestida de pie obligaba a que Heechul le clavase las uñas con fuerza porque sentía que Siwon lo partiría en dos. Un último choque piel con piel y la espalda de Heechul choca  contra la pared, sintiendo como un liquido llenaba sus entrañas. No quería que Siwon lo soltase, así que plantó un beso en aquellos labios mientras lo rodeaba con sus brazos.

 

- ¿Por qué me llamaste? – pregunta  Siwon intentando recuperar el aliento mientras soltaba con cuidado a Heechul  sobre la cama – No creo que sea para que viese como escurría mi semen de tu culo – se montó en la cama y Heechul abrió las piernas.

- Tan rudo – cerró sus piernas y se levanto de la cama frunciendo el entrecejo – Llame a varios, pero solo tu acudiste a mi llamado – se cubrió la desnudez con una sabana, no le gustaban las frases de cavernícola de Siwon – Creo que ya no soy tan hermoso como antes – sonrió de costado subestimando la mirada de Siwon.

- ¡Deja de bromear y dime porque  me llamaste! - siguió al más joven con la mirada de un depredador listo para atacar a su deliciosa presa.

- Para darte un consejo – sonrió mientras movía sus caderas, algo que enloquecía al más alto – Si Yunho  se entera que estas ayudando a  Hime-sama no solo te asesinara a ti, sino a tu hija – eso ultimo basto para que Siwon abriese sus ojos como platos. <<-¡Bingo!>> pensó Heechul, su querido Siwon conocía a aquella persona que se hacía llamar Hime-sama.

¨*¨*¨*¨*¨*¨*¨*

 

El más alto descansaba en su habitación, después del incidente con las pastillas Yunho lo mantenía vigilado como un niño pequeño. Él  estaba cansándose de ser espiado por los custodios cada media hora. Nuevamente por la puerta se escuchó un toc-toc, sin mucho ánimo contesto que pasasen. Desde el umbral ingresó Sebastián.

- Joven Changmin, en la sala hay un grupo de jovencitos que piden verlo – anuncio el hombre dejando a Max Changmin totalmente sorprendido.

Sin hacer preguntas  Changmin bajo por las escaleras, si bien él no tenía muchas ocupaciones ese día su mente estaba ocupada en su joven amigo, Choi Minho.

Ese día el cantante tenía planeado una visita al parque de diversiones junto a Minho y Taemin como una gran sorpresa y hacérselos saber precisamente ese día. Sin embargo todo pareció venírsele encima imaginando que algo malo les sucedería a sus jóvenes amigos si estaban a su lado.

Cuando llegó a la sala comprobó la identidad de los jóvenes de los que hablaba Sebastián. Él pudo ver en los ojos de los miembros de Shinee admiración al ver la lujosa sala de la mansión de Yunho, pero la mirada que más llamó su atención fue la de Minho, parecía tener los ojos a punto del llanto.

- Changmin-hyung – dice Onew haciendo una reverencia – Disculpa nuestra inesperada visita.

- ¡Sunbae! – dijo Key viendo los alrededores – Sabia que tenias dinero, pero nunca imagine que tuvieras una mansión tan grande y lujosa – miro al mayordomo que los recibió – Hasta un mayordomo como en las películas…

- Lo siento – dijo JongHyun cubriendo la boca de Key. A veces su novio hablaba de más.

- Esta mansión no es mía – dice Changmin sin poder apartar la vista de Minho <<-¿Por qué parece que lloraste?>> - La mansión es de mi mejor amigo, por seguridad me dejo hospedarme en ella.

- Entonces eso explica la cantidad de custodios alrededor de la mansión – dijo JongHyun en un tono serio. Ya que casi asesina a uno que se atrevió a tocar a su amado Key.

Los cinco muchachos notaron como la algarabía de su sunbae había desaparecido y como unas ojeras se dibujaban en las bolsas de sus ojos.  Fingidas sonrisas mostraban su desanimo. Pasaron a la sala de visitas donde Sebastián les sirvió algunos bocadillos.

- Sunbae – dijo Onew – Siempre contara con nuestro apoyo, somos sus amigos así que por favor no se sienta sólo en estos momentos.

- Gracias – dijo el más alto con la mirada perdida en sus propios pies – Gracias por la visita, pero entiendo que a estas horas deberían estar descansando para sus ensayos de mañana.

Onew agradeció los bocadillos alegando que era muy tarde y debían descansar o su manager se enfadaría al ver que todos se desvelaron. Max Changmin les agradeció la visita, pero sin esperarlo el maknae saltó a sus brazos. Necesitaba de un abrazó así que correspondió el de Taemin. Onew quedo sorprendido ante el accionar del más joven, Key parecía molesto al igual que Minho.

- Por favor no deje de sonreír – dijo el más joven estrechando al más alto en sus brazos.

Al ver la angustia en el rostro de Minho, el líder decidió que debía separar al más joven del sunbae. Hizo un profundo sonido con su garganta mientras cogía por los hombros a Taemin.

- Me alegra ver que este bien – dice haciendo una reverencia y casi sacando a empujones a Taemin.

- Hyung, por favor no se enfade con Taemin es muy impulsivo – dijo Key haciendo una reverencia.

- Fue un placer verlo en tan buen estado – dijo JongHyun con una reverencia –Minho-shi, te esperamos afuera.

Dentro de aquella lujosa sala de recepción quedaron los dos más altos. El más joven estaba en un estado de aflicción y desasosiego. Esa mirada es captada por el mayor y una sensación de temor e inquietud parece invadirlo, temiendo que el menor empezase a llorar.

- Es mejor no volver a vernos

Después de oír al más alto, Minho empezó a ponerse lacrimoso, imaginado que Max Changmin estaba enojado con él.

Al cantante Max Changmin le dolía ver las lágrimas descender de los ojos de su hobbae. Con un impulso de amabilidad estrecha al más joven en sus brazos. Sobó el cabello de Minho intentando calmarlo.

- Recibí una nota donde amenazaban la vida de todos los que estuvieran a mi alrededor – aclaró el cantante para evitar las lagrimas de más joven, pero Minho seguía llorando en sus brazos – No quiero que nadie te lastime, así que debes alejarte de mí.

- ¡No! ¡No quiero alejarme otra vez! – exclamó hundiendo su rostro  sobre el torso de Changmin. Recordando lo doloroso que fue soportar los años en los que Max Changmin no estuvo en el país, los lamentos que pasó al no poder verlo y menos hablar con él. Minho no estaba dispuesto a aguantar otro día lejos de la persona que amaba.

- Ven – dijo Max Changmin caminado hasta las escaleras – Tengo algo que mostrarte – dijo pensando en enseñarle la nota anónima que recibió, pensando que de esa forma el menor entendería su separación. Aunque a él también le dolía esa separación, de alguna forma tener cerca a Minho lo aliviaba y le llenaba de felicidad.

Una  vez que ambos hombres ingresaron a la habitación de Max Changmin, el más joven había cesado su llanto. Sin más que decir Changmin enseñó la copia de la nota anónima.

- ¡Me niego a dejarte! – dijo Minho con convicción en su mirada.

- Debes hacerlo, al menos hasta que esto termine – dijo el cantante acercándose hasta Minho, ya que sentía que nuevamente el más joven se echaría a llorar <<-¿Por qué lloras? ¿Lloras por mi?>>, - Te prometo que cuando todo termine hablaré con tu manager…  hasta con el presidente de la compañía si es necesario para que tengamos un fin de semana para los dos – dice mientras seca las lagrimas de Minho con el borde de su pañuelo – Pero por ahora debes alejarte de mí, temo que alguien te lastime – dice suplicando la comprensión del más joven a medida que miraba esos ojos saltones.

Para evitar más víctimas, Changmin abandonó las instalaciones de la SM ya que temía que alguien más saliese lastimado por otro atentado. Su concierto no se suspendería por órdenes de KangTa y de la central de inteligencia, quienes aseguraban tener la confianza de detener al responsable de los asesinatos. Todos los ensayos se llevarían a cabo en la mansión de Yunho, ya que era una fortaleza impenetrable.

- Por favor, entiéndeme – suspira deprimido ya que jamás había visto en ese estado a Minho – Por favor, no llores.

Minho agachó la mirada y siguió llorando en silencio, había comprendido todo, pero eso no evitaba que le doliese estar alejado de su amado sunbae.

 

- No quiero que me vuelvas a dejar – eleva la vista hacia el más alto mientras sus lagrimas caían incesantes, Minho no controlaba el caudal que despedía sus ojos en forma de llanto.

Max Changmin no podo quedarse viendo como el más joven lloraba de esa incesante manera por su culpa. Él quería ver al Minho sonriente, aquel joven que con esos ojos saltones y alegres llenaba de ánimos a su desolado corazón. Sin pensarlo, el cantante besó con ternura la frente de Minho.

El joven de mirada triste quedó sin aliento y sus lágrimas cesaron, la garganta se le secó al sentir aquel cálido beso en su parte frontal.

- Po… ¿Por qué me diste ese be…beso? – preguntó con timidez al recobrar el control sobre su garganta.

- Sólo quise hacerlo – sonrió nervioso elevando los hombros de forma despreocupada. Pero la verdad era que él no sabía que lo había llevado a besar al más joven de esa forma – ¿te molesto que lo hiciera? – preguntó de forma ingenua.

El rostro de niño ingenuo del cantante hacia que Minho quisiera colgarse del cuello y plantarle un beso capaz de sacarle hasta el último aliento. Había soñado miles de veces en besar a Max Changmin, pero nunca había hallado el valor para hacerlo. Su control al ver la dulce expresión en el rostro del más alto fue lanzado por el abismo. Extendió sus brazos y cogió el cuello de Max Changmin atrayéndolo hasta su altura. Adoraba tener casi la misma altura que su sunbae. Y sin darle tiempo al más alto de reaccionar unió sus labios con los de Changmin.

Max Changmin no se esperaba ese beso, jamás había probado labios tan perfectos como los de Minho. Su cuerpo no se opuso cuando el más joven profano la calma del interior de su boca. El beso pasó de ser suave a ser tan salvaje que él sentía como el más joven le succionaba el aire. Él  cogió la cintura del más joven así unir más  sus cuerpos. Ambos labios se encontraban uno en el otro. <<-No es un sueño… en verdad estoy besando al sunbae>> pensó Minho sintiendo como Changmin  ahora tenía el control de beso.

 De repente un ligero toc-toc irrumpió el beso entre  ambos. Max Changmin se apartó  de Minho como si recibiese una descarga eléctrica y la verdad era que su parte baja estaba clamando por ser liberado. Una sensación que nunca había experimentado con un simple beso.

- El joven Onew, pide que el joven Minho baje hasta la camioneta – dijo Sebastián detrás de la puerta.

- Yo… yo… lo siento – dijo Minho agachando la mirada para evitar mostrar sus sonrojadas mejillas al más alto.

Cuando Changmin estaba por responder, Minho sale huyendo de su habitación. Él no pudo detener al más joven ya que no entendía su propio accionar, acarició sus labios. Aquellos labios habían tocado los de Minho, aún sentía el remanente del sabor del más joven. Un dulce sabor que degustaría nuevamente.

¨*¨*¨*¨*

 

En el instante en el que Jaejoong depositó sus pies en el suelo nacarado, corrió en busca de un paraguas. Casi tropezó en el último escalón, las manos le temblaron en el mismo momento que puso un pie un pie fuera de su casa. Jaejoong camino de forma pausada, con timidez. Él no podía creer estar preocupado por aquel hombre que lo humillo en incontables ocasiones. Abrió el paraguas y se aproximó con duda hasta el más alto. Su corazón era tan benevolente que se maldecía a sí mismo por tener esa personalidad.

- No te dije que te fueras – dijo mientras fruncía el ceño.

 Yunho  parpadeo varias veces, no creía estar viendo al hermosos joven cubriéndolo con un paraguas. La nieve había cesado de caer en su cuerpo, Jaejoong lo cubrió, lo protegió. El frio de su cuerpo no era comparable con la gélida expresión del pelinegro.

- Hace mucho frio

Escuchar al más joven alivio la pesadez de Yunho, <<-Sigue teniendo un corazón bondadoso… no merezco su bondad>> se dijo a si mismo mientras observaba a Jaejoong con ternura.

El color del rostro de Jaejoong llegó a un carmesí, Yunho parpadeo de nuevo y esta vez lo miró. Le lanzó una sonrisa vacilante, una sonrisa que contenía alivio y esperanza.

- ¿te encentras bien? – pregunto intentando no sonrojarse más de la cuenta al ver aquella sonrisa dibujarse en el rostro de Yunho.

Yunho volvió a moverse con lentitud hasta Jaejoong. Extendió el brazo intentando llegar al rostro del más joven. Quería comprobar que aquel hermoso joven no era un espejismo, que era real y para eso debía tocarlo. Él se tambaleo. Jaejoong le tomó el brazo y lo ayudó a incorporarse. Aun en su estado Yunho se apego a él, buscando un contacto más próximo con su cuerpo.

Jaejoong se puso tenso y se preparó para apartarse, para mantener la distancia del otro, pero éste suspiro en su pecho. Y entonces Jaejoong cerró los ojos sintiendo el frenético latir de sus corazón. Yunho le pasó un brazo por la cintura para atraerlo hacia sí. Él completamente confiado, apoyo la cabeza en el hueco del cuello de Jaejoong.

- He soñado con esto – susurró – Tan cálido.

El esbelto pelinegro tragó el nudo que tenía en la garganta y sintió a su corazón palpitar miles de sensaciones a su mente, haciendo sonar los barrotes de su inconsciente.

<<-Admite que éste hombre te gusta>> dijo una voz que sonaba similar a la suya, su otro yo <<Te gustaba Junsu, porque no puede gustarte Yunho… después de todo son hermanos>>

Jaejoong no estaba de acuerdo con esos pensamientos. Le gustaba Junsu, él era todo un caballero, le resultaba ridículo sentir lo mismo por Yunho. Aunque no podía dejar de admitir que su corazón latía intensamente sólo con una mirada del más alto.

- Sin tocar – gruñó con más dureza de la que era su intención. De Nuevo comprendió que debía poner distancia. Dejó caer sus brazos y se apartó. Ero en el mismo instante el peso de Yunho lo sofocó y lo obligo a caer al suelo – ¡Hey! – gruño frunciendo el entrecejo – ¡Muévete! – zarandeo a Yunho. Cuando éste no reaccionó lo zarandeo con más fuerza, pero él no reaccionaba.

Sin quererlo su mano rozó con la de Yunho – Esta helado – se sobresalto ante el tacto, sentía que había tocado hielo. Miró a Yunho y sus ojos vieron como él tenía las mejillas pálidas y los labios morados, sus ojos parecían no volver a abrirse nuevamente, ver en ese estado a Yunho provocó remordimiento al más joven. Con cuidado Jaejoong rodeo con sus brazos a Yunho hasta lograr levantarlo. Rodeo el helado brazo del más alto contra su cuello, suspiro agotado por la acción de sostener el cuerpo del otro. Debía apresurarse y llevar a Yunho a un lugar cálido o él se congelaría. La sola idea abrumaba a Jaejoong.

- Tonto… eres un tonto ¿Por qué esperaste por mí bajo este frio? – dice a medida que va entristeciendo su mirada.

 

Notas finales:

La próxima actualización será… si mis cálculos no fallan y el avión no se desploma sobre alguna montaña…  domingo o martes.

Os doy un adelanto pequeño de algo que escribí para el siguiente capítulo ~ sé que nunca hago esto, así que no os acostumbréis (n_n) que apenas estoy escribiendo la escena~

[…]

-Necesito que te quedes a mi lado- oyó pasos y Yunho llegó a su lado.

-¿Por qué? – repreguntó a través del nudo en la garganta.  Yunho le apoyó las manos en los hombros, presionando con suavidad. Luego le tomó la cara con ambas manos, obligándolo a mirarlo. Los intensos ojos marrones se convirtieron en el centro de su mundo, un ancla en medio de una tormenta.

-Porque… porque te quiero – le acarició la mejilla con el pulgar – Suena extraño, pero no encuentro otra explicación.

[fin de adelanto]

¿Qué os pareció este pequeño fragmento?  ¿os imagináis lo que sucedera?


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