CAPITULO 6
"Cuando el tigre te atrape, no podrás escapar"
- "Sin darme cuenta un gato blanco cubrió mi cuerpo y lo lleno de calor. Por primera vez, el tigre rojo se sentía completo. Me había enamorado de un blanco tan puro como la nieve y sin darme cuenta, mi vida tuvo un sentido claro. Quiero abrazarlo. Quiero tenerlo. Quiero que me mire. Solo a mí, a nadie más. A veces quiero corromperlo, pero... con amor." -
- nghh - apretando los ojos, despertando. Abre los ojos lentamente y ve un par de orejas blancas. - ¿ah? ¿un gato? - susurra.
- ... - mirándolo fijamente con sus enormes ojos plateados.
- ¿oh? - dándose cuenta de quién era.
- ¡¡¡LAVI-SAN!!! - le grita y se le acerca un lloroso Tsuchiya.
- ah, Tsuchi, buenos días. -
- ¡¡NO ME SALUDES ASI!! ¡¡¡¡ESTABA TAN PREOCUPADO POR USTED!!!! -
- no estás realmente preocupado, ¿verdad? -
- oh, pudo notarlo - tranquilizándose, estaba fingiendo. - es que ya era medio día y sabía que no moriría por eso -
- jajaja, si - riendo. - ... - mirando al albino.
- ... - sonrojándose.
- ¿por qué eres mi doctor a cargo? era otro muchacho el que estaba en la cirugía. -
- ... - guardando silencio.
- bien, dejémoslo en que doc me salvo - sonriéndole cálidamente.
- realmente tienes un deseo de sobrevivir sorprendente - arreglando su instrumento - tengo que chequear tu corazón por lo que tendré que abrir tu bata -
- claro - mirándolo fijamente.
Le abre la bata y pone el estetoscopio* en el corazón, luego de poner la otra parte en sus oídos. Comienza a checar sus latidos y al escucharlos bien, sonríe aliviado y tierno.
- ... - mirándolo fijamente. -"tan lindo" -
- ¿cómo te sientes? -
- ... - mirándolo y sonriéndole, tocando la mano que estaba sobre su pecho - no podría estar mejor -
- ... - sonrojado.
...
El albino había ido a ver algunas cosas y ambos se habían quedado solos en la habitación.
- le conté todo al doc - le habla Tsuchiya.
- ¿también sobre Ryuuzaki? -
- lo siento -
- eres un idiota, nunca piensas antes de abrir tu bocota - le dice tranquilo, pero serio.
- perdón, me sentía un poco ofuscado -
- ahora entiendo por qué lucia así -
- ... - mirándolo
- ¿qué paso con el tipo que me apuñalo? -
- fue capturado poco después, al parecer nuestras suposiciones de que la policía nos siguió eran ciertas y sirvió a nuestro favor esta vez, pudimos indagar que todo fue planeado por el grupo de Ryuuzaki. -
- ... - escuchando y mirando el techo.
...
- ... - llevando unas suturas, agua, paños y una aguja.
- Walker-sensei -
- ¿eh? - volteándose. - Walkner-san -
- ¿vas a hacer un test de sangre a Bookman-san? yo lo puedo hacer -
- ¿eh? -
- debes estar pasándola difícil, ya que las enfermeras no quieren acercarse a él y te pasan todas sus obligaciones. -
- ... - mirándola.
- yo estaré bien - sonriéndole - estoy acostumbrada a él. -
- ... - recordando que esa mujer se había acostado con el pelirrojo. - ah, no, está bien, de todas formas debo darle algo -
- se lo puedo dar por usted -
- ¡ah! No, ¡es mi responsabilidad! - "¡¿por qué me estoy poniendo tan serio?!" -
- bien, entonces ¿puedo pedirte que me hagas un favor? -
- sí, con gusto -
- dele esto por mí - dándole una tarjeta.
- ¿eh? - notando lo que era.
- me voy a casar, este será mi último mes aquí. -
- ¿¿¿QUÉ??? - sorprendido.
- jajaja, no es con Bookman-san, pero... - mirándolo - es alguien que él conoce muy bien. -
...
- ¡! - leyendo impresionado - "Parte matrimonial de Makoto Kei y Walkner Mari" - mmm - con su brazo estirado para que el albino pudiera sacarle sangre - así que, así están las cosas - frunciendo el ceño.
- ... - mirándolo y haciendo una mueca de desagrado. - te ha impresionado -
- mmm, si, un poco - dejando el parte de matrimonio a un lado - "eso significa que será una Onee-san" - apretando sus sienes.
- mmm... - enfurruñándose. - bien, debo sacarte un poco de sangre así que apretare un poco -
- sí, está bien. -
- ... - le pone el elástico en el brazo apretándolo mucho.
- ¡¡ah!! ¡DOC ESO DUELE! ¿no está MUY apretado? -
- oh, perdón, ¿te dolió? - haciéndose el desentendido de que lo había hecho apropósito.
* No me gusta esto se siente brumoso*
- ... - pensando.
- ... - mirándolo.
- mmm - cerrando los ojos.
- ... - entristeciendo.
* Este amor es muy doloroso *
- ... -
*pero no puedo decir nada*
- Doc. -
- ¿eh? - mirándolo.
- lo que trajiste son las radiografías que Tsuchiya te dio, ¿verdad? ¿cómo están? -
- ah, sí - hablándole.
DESPUES.
- fui a ver a un doctor después de que me llamaste - sentado en una banca junto a la cama del pelirrojo. - tal como dijiste, no tengo cáncer - le dice el conde. - cuando le pregunte al examinador me dijo todo, querían hacerlo pasar como cáncer para luego poder matarme -hablando. - probablemente presionarían por una cirugía y terminarían conmigo en ella, ¿qué piensas hacer con Ryuuzaki? -
- ... - manteniendo silencio.
- tomando en cuenta todo lo que ha hecho y su trabajo con drogas, tendré que darle un castigo por lo que pudiera ir tras tu trasero otra vez -
- ... -
- el sabía que mi primera opción siempre has sido tú -
- ... - sonriendo - yo pensé que le dejaría la sucesión a su hijo -
...
- ¿mm? Tsuchiya-san - llegando a la puerta de la habitación - ¿no vas a entrar? -
- tenemos visita. - le dice.
- ¿mm? -
- el vino hasta aquí en persona, estoy tan nervioso - asustado.
...
- no tengo favoritismos, si él quiere mi lugar debe ganarte -
- pero yo no quiero pelear con él -
- lo cuidas mucho -
- es casi como familia al igual que usted -
- no lo menosprecies, él también tiene orgullo. -
- si -
- ... - ambos se miran fijamente.
- él es un buen chico -
- ¿podrías decir eso de mis dos hijos? -
- ... - mirándolo
- tú conoces mi debilidad más importante, Lavi -
- es lo mismo para mí, uno de sus hijos conoce mi más grande debilidad. -
- ¿es una mujer? -
- ... - pensando en el albino. - mj, quien sabe -
- una mujer es definición de problemas en nuestro mundo, luego ellas dan a luz a más problemas. -
- creo que por ese lado no tendré problemas. -
- aunque las mantengas a línea, siempre buscaran una forma de atarte -
- ... - mirándolo. -"el tigre ya está atado a sus pequeñas patitas" - mj - sonriendo.
...
- ¡wa! - la puerta se abre y los dos que esperaban fuera se sorprenden.
- ... - el conde sale de la alcoba acompañado de sus guardaespaldas.
- ... - Tsuchiya lo reverencia.
- ... - se retira.
- wuau, que presencia. - susurra Allen.
- te lo dije. -
EN LA NOCHE.
- ... - el pelirrojo estaba en su cama, pensando. Aprieta el botón que lo conecta a una de las enfermeras.
- diga -
- necesito ver a Walker-sensei. -
...
- ¿mm? - suena el teléfono de su oficina - ¿diga? -
- Walker-sensei -
- ¿si? -
- le hablo de la estación de enfermeras, Bookman-san de la 106 quiere verlo -
- ... - sorprendido - ¿se ha empeorado su situación? -
- no lo podría asegurar -
- entiendo, voy enseguida - cuelga. - uhh - respira y se dirige, llega a la habitación - hola, ¿sucede algo? - abriendo la puerta lentamente.
- ey, doc, ven acá - mirándolo fijamente, sentado en su cama.
- ... - Allen entra y cierra la puerta, acercándose.
- aquí - golpeando junto a él en la cama - siéntate - serio.
- ... - haciéndole caso, avergonzado y nervioso.
- bien, quiero ser directo contigo, ¿te acostarías conmigo? -
- ¡! - tensándose y sorprendiéndose.
- sabes, lo lamente después de ser apuñalado - serio - pensé "debería haberlo hecho con él una vez, no puedo morir solo así como así" y en mi mundo realmente puedo morir en cualquier momento -
- ... - asustado, nervioso, confuso.
- ... - mirándolo fijamente.
- ... - tiritando.
- doc, deja de temblar tanto -
- ... - mirándolo sonrojado.
- solo soy un maldito jodido que está forzando una decisión en ti, te conozco y no podrías decir no aunque quisieras en este tipo de circunstancias. -
- ... -
- uff - bajando su cabeza - olvídalo, no hagamos nada -
- ¿eh? - sorprendido.
- solo escúchame y luego puedes irte -
- ... - sin dejar de mirarlo.
- me iré una vez me den el alta, así que quiero decírtelo apropiadamente una vez más -
- ... -
- te amo, doc. -
- ¡! - sorprendido a pesar de haberlo escuchado antes.
- nunca he sentido esto por nadie más, cuando pienso mi cabeza solo se llena de "doc esto o doc aquello", si hubiera sido una mujer o un hombre normal, quizás pudiera haber hecho algo más, pero no hay forma en que pueda hacerte feliz como soy ahora - mirándolo fijamente.
- ... -
- mj, eres bonito hasta en la oscuridad -
- ¡! -
- apuesto a que tendrás unos hijos bonitos, tal como tú -
- ... - sonrojado.
- mj, ya puedes irte, ya dije todo lo que quería decir -
- ... - su cuerpo no se movía.
- ... - mirándolo.
- juguemos -
- ¿? - sin entender.
- jaan ken, si estás bien con alguien como yo, s-si tú ganas… - nervioso.
- ... - mirándolo - ¿qué? ¿me prestarías tu cuerpo solo por una noche? ¿me darías una oportunidad como esa solo por compasión? realmente eres muy amable -
- ... - escuchando.
- de salir las cosas como de costumbre podría ganar, ¿estás bien con eso? -
- ... - asintiendo.
- ... - mirándolo. - bien, ahí vamos - moviendo su mano - jaan ken -
- ... - agitando su mano.
- pon - hace tijeras.
- ... - hacer roca.
Ambos quedan mirando sus manos en posición.
- vaya - rascando su cabeza - estas de suerte esta noche. -
- ... - lamentando el haber ganado.
- deberías estar alegre -
- ... - bajando su cabeza y poniéndose de pie caminando hacia la puerta.
- ... - mirándolo marchar.
- ... - suspira y detiene sus pasos.
*dilo.*
- ... - apretando sus puños.
* vamos, dilo*
- yo… -
- ... - escuchando y mirando su fina espalda.
- te he mentido -
- ... -
- todo este tiempo, yo realmente... -
*¡DILO!*
- realmente estoy enamorado de ti. -
- ... - enterneciéndose.
- quería decirlo apropiadamente, pero tenía miedo… miedo de aceptar todo lo que viene si te daba una respuesta -
- ... - pensándolo - por supuesto -
- ... - mirándolo.
- tienes un padre fabuloso por quien preocuparte. - sonriéndole cálidamente.
- ... -
- eres tan tonto, ¿de verdad crees que dejaría a tu padre pasar malos ratos por mi culpa? -
- ... - conmovido.
- voy a protegerte, a ti y a él con todas mis fuerzas. -
- Lavi-san - susurrando.
- ven aquí - estirándole su mano.
- ... - la toma y es abrazado por Lavi y sus fuertes brazos, acariciando su mejillas - Doc, tu sigue siendo tal cual eres, sigue el camino de un doctor, y de vez en cuando, déjame amarte a ti y a ese gran corazón que tienes -
- ... - mirándolo fijamente.
- ... - atrae su rostro suavemente hacia el suyo, besándolo suavemente. El beso se va intensificando a la par que los minutos pasan y el pelirrojo recuesta su cuerpo en la cama del hospital, iba a comenzar a tocarlo bajo su ropa.
- ah, espera - dice suave alejándose.
- ¿qué? - molestándose.
- tal vez… ¿podríamos hacer una cita para otro día? -
- ¿huh? si te preocupa que alguien pueda entrar, tengo a Tsuchiya afuera para que no deje entrar a nadie -
- emm... - sonrojado.
- ¿qué? ¿te has acobardado? -
- no, no es eso -
- ... - mirándolo fijamente.
- es solo que... yo no he tomado un baño en dos días. - avergonzado.
- ... -
- así que iré a tomar uno ahora - iba a ponerse de pie, pero el ojiesmeralda lo jala hacia la cama otra vez. - ¡waaa! -
- ... - olfateándolo - si, ahora que lo dices, hueles algo maduro -
- ¡! - sonrojado hasta las orejas.
- pero está bien, aun así sigue siendo bonito - sonriéndole - yo no me he lavado el pelo en una semana, eso es peor -
- ... - mirándolo.
- mj, siento haber dejado una mancha en algo tan blanco –
Se miran fijamente.
- tu garbacha, no podemos ensuciarla, así que tendrá que irse -
- ... - mirándolo, le da el espacio para acomodarse y para desabotonarla.
Le quita la bata blanca y lo aferra a él, besándolo, jugueteando con la lengua del doctor dentro de su cavidad, recostándolo nuevamente en la cama para intensificar más sus labios y la presión contra los del menor.
- ngh - apretando los brazos del yakuza. - mngh - tensando su cuerpo.
- ... - se separa un poco - ¿qué pasa?, doc, ¿no puedes respirar por la nariz? -
- lo siento - suspirando.
- deberías de hacerte un examen -
- si - mirándolo sonrojado.
- mj - mete sus manos bajo la camisa blanca del ojiplateado, haciéndolo temblar. - "tan sensitivo" - tocándole suavemente sus pezones, lamiendo su cuello en el camino.
- ahhh~~ - suspirando.
- "que cosa más grandiosa" - desabrochándole su camisa, levantando el cuerpo del menor para poder sacársela completamente.
- ah - aferrándose a él.
- ... - también aprovecha para quitarle los pantalones y la ropa interior, dejándolo desnudo bajo el.
- mn - se tensa cuando el otro muerde su pezón.
- ... - pone una de sus manos en su miembro para masturbarlo.
- ¡¡ah!! ahh... ~~ - sintiendo las oleadas de placer desde su parte baja hacia todo su cuerpo. - ¡! - se sacude cuando un dedo del mayor entra su pequeño agujero, abriéndola - ¡ah! - sintiéndose extraño, pero nada mal. - ngh - aprieta su boca y trata de taparla con su antemano.
- no hagas eso - apartándola - déjame escuchar que tan erótico puedes llegar a ser -
- mng, ah - mirándolo con sus ojos entrecerrados – L-Lavi-san, ngh - retorciéndose de placer bajo el.
- ... - a punto de volverse loco por tanta pasión e inocencia.
- ahhhhh~~~ nnhh... ¡ahhh! -
- ... - saca su mano de la entrada y quita la parte de arriba de la bata que le habían dado en el hospital, dejando ver todo su perfecto y masculino torso.
- ahhh - sonrojándose al verlo y sentirse aún más excitado. Levanta la parte baja del menor para meterse entre sus piernas y poder acercar su miembro a la entrada. - eres tan delgado que temo quebrarte, dime si es demasiado para ti, ¿ok? -
- ... - mirándolo fijamente a sus ojos, levanta una de sus manos y acaricia la mejilla del pelirrojo.
- ¿? -
- ... - sonriéndole tiernamente.
- ... - algo en él se hizo más grande. - Allen - susurrando.
- mnn -
- ... - metiéndose dentro de él.
- ¡¡!! - sintiéndolo a viva piel contra sus paredes internas. - ahhhhh - apretando la espalda del más alto.
- oh - sintiendo como estaba adentrándose en el pequeño cuerpo de su amante.
- ¡¡ahh!! ¡¡au!! ahhh~~ - el dolor y el placer se mezclaban dentro de su frágil cuerpo.
- ohh. - comenzando a moverse cuando sentía la entrada más dilatada y resbaladiza.
- ¡¡ahhh!! nnng ¡¡¡ah!!! - gimiendo cada vez más extasiado.
- ... - entrando y saliendo de él.
- ¡¡!! - tensando su cuerpo a cada toque que el miembro del ojiesmeralda le daba a su punto interior.
* Después de esto no hay vuelta atrás, ¿verdad? *
AL OTRO DIA.
- aaah~~~ - refrescado - ¡que buen día para ser dado de alta! - con una sonrisa amplia y una piel brillante.
- eh - sonriendo aproblemado por ver a su jefe tan feliz, le daba hasta miedo. Mirando al albino - "este no parece estar muy bien" -
- … - le dolía el trasero.
- Doc, gracias por todo - mirando a su pequeño gatito. - trabaja duro -
- ... - sonrojado – si, tú también -
- ¿de verdad me estás diciendo eso? -
- mj, si, el trabajo de un yakuza envuelve esto y aquello -
- mj - sonriéndole.
Los 3 van hacia la salida, el pelirrojo se sube a la parte trasera de su auto y baja el vidrio.
- entonces, te veo luego, doc -
- sí. -
- mj, de verdad te vez bonito con tu garbacha -
- ... - sonrojado.
- llámame, también te llamare -
- si -
- hasta pronto - el auto comienza a andar.
- ... - mira su partida y se dispone a entrar en el hospital - "esos dos... - tocando sus nalgas - son un par ruidoso" -
recordando lo que hizo anoche y sus sentimientos - mj - sonríe dulcemente.
...
- tome - dejándole un café en su mesa.
- gracias - revisando unos papeles, con sus anteojos.
- jefe, la pelea contra la sucesión aun... -
- si - dice sin quitar sus ojos de esos papeles llenos de números - al parecer el conde está cansado y a pesar de que lo de su enfermedad fue una farsa, sigue pensando en su retiro -
- entiendo. -
- dime, ¿cuál es el hotel más cercano a la avenida principal? -
- ¿ah? - sin entender. - supongo que... "Big Hotel" -
- ya veo - pensando.
- ¿tiene algún problema con los números de ese hotel? si quiere puedo ir y apresurar los pagos. -
- no, no es nada de eso -
- ¿entonces? -
- ¿cuál sería el que le sigue? -
- "Suruzawa" y "Sheldon" -
- bien - dejando los papeles sobre la mesa - esto es lo que quiero, anota. - lanzándole una libreta pequeña.
- ¡ah! - agarrándola. Toma un lápiz de una mesa.
- quiero dos habitaciones en cada uno de esos tres hoteles, todas a un nombre diferente. Haz una lista de todos los del grupo, que no esté al nombre de ninguno de ellos, ni menos tuyo ni mío -
- ... - sin entender nada, pero anotando.
- cuando lo hagas cambia todas las camas por otras que suenen -
- ¿qué? - aún más confundido.
- ... - mirándolo con una sonrisa pícara - quiero que cuando me esté cogiendo al doc la cama haga ruidos pervertidos - imaginándoselo y sangrando por la nariz.
- eh... - con una gota en su cien, claro ¿cómo no? Su jefe se había vuelto totalmente loco. Su guardaespaldas que siempre permanecía en la habitación con él, estaba igual de asqueado.
- también consígueme otro celular con un numero privado, no lo hagas al nombre de ninguno de nosotros -
- si - mirándolo - realmente está tomando varias precauciones -
- ¿cómo no hacerlo? - prendiendo un cigarrillo - debo protegerlo - serio - no podría perdonarme si algo le sucede por mi culpa -
- ... - mirándolo fijamente - realmente lo han atrapado, ¿huh? -
- mj, quizá - echando su cabeza hacia atrás recostándola en el respaldo de su gran sofá.
- bien, tratare de apresurarlo -
- te lo encargo. -
- con permiso - retirándose.
...
- ¿eh? - mirando el número telefónico en la pantalla de su móvil. Un sonrojo notorio hizo arder sus mejillas. Tomo una pequeña bocanada de aire antes de contestar y su rostro no perdió color - hola -
- buenos días, doc - su voz era calmada y hasta un poco sutil, solo un poco, tomando en cuenta que su tono amenazador característico de él seguía intacto a cada palabra - ¿cómo has estado? -
- bien, gracias y ya es medio día -
- oh - mirando un reloj de mano que descansaba sobre la mesa - tienes razón -
- no... - temiendo un poco decir ya que a pesar de todo aun le tenía un poco de miedo a aquel hombre y bueno estaba algo avergonzado - habías llamado en días -
- mmm - sonriendo al escuchar aquello - ¿me echaste de meno, doc? -
- eso no... - callando y avergonzándose más.
- no seas tímido - sonriendo - yo también te he extrañado - hablando sinceramente.
- ... - sin saber que responder a tan sincera y dulce confesión.
- mj, ¿quieres verme hoy? -
- ah, ¿puedes? -
- sí, termine todo el trabajo importante así que estoy libre todo el fin de semana -
- emm, yo tampoco tengo turnos -
- entonces es perfecto, ven luego del trabajo. Te enviare la dirección y el número del cuarto en un mensaje luego que corte la llamada -
- ¿hotel? -
- sí, ¿te molesta? -
- no, es solo que pensé que iríamos a tu casa o algo así -
- mmm, pensé que sería incómodo para ti -
- ¿eh? -
- bueno, ya les conté a mis subordinados que estoy muy acaramelado con mi enfermerita, de todos modo yo no tengo problema con ello -
- ¡no! ¡olvídalo! iremos a un hotel, ¡¡envíame la dirección!! - enfurruñado.
- ¿oh? - escuchado el sonido característico del móvil – jejeje, que ganas de ver ese rostro sonrojado y enfurruñado - sonriendo mientras apoya su cabeza en el respaldo de su cómodo sofá.
- en serio - dejando su móvil sobre su escritorio - ¿en qué está pensando este tipo? - sonrojado hasta las orejas. Mira el tigre colgante - mj - sonríe dulcemente.
MÁS TARDE
- Vaya... - sorprendido por lo alto del edificio que a primera vita lucia elegante y costoso - "es enorme" - revisando su móvil exactamente el mensaje de texto que le había enviado el pelirrojo más temprano - "la dirección es correcta y el nombre también" - mmm - exhalo y entro al hotel el cual por dentro era aún más impresionante - ... - mirando el lugar con sus ojos abierto de par en par
- disculpe -
- ¿eh? - se voltea y ve a una hermosa mujer vestida con lo que parecía un uniforme
- ¿puedo ayudarlo? - sonriendo atenta y ya no le caía duda de que era parte del staff del hotel.
- ah, estoy buscando el bar - en el mensaje de Lavi le había escrito que lo esperaría en aquel lugar.
- claro, lo llevare. Sígame, por favor - le indica la dirección izquierda de su cuerpo y ambos comienzan a caminar uno junto al otro. - ¿es su novia a quien viene a visitar? -
- ah - poniéndose un poco nervioso – no, solo un amigo - claro no podría decirle que su novia era en realidad un él. Bastante especial por lo demás.
- entiendo, algo de negocios, ¿no? -
- emmm... - no queriendo explicar más - si, algo de eso -
- bien, agradecemos que haya elegido nuestro hotel. Este es el bar. - indicándole un amplio salón en cual muchos hombres y mujeres refinados bebían cocteles y fumaban entre risas y habladurías
- "es enorme también" - era bastante amplio, decorado con un tapiz marrón que daba más elegancia al lugar donde los ternos, corbatas y vestidos de fiestas adornaban y daban el aire de "un lugar sumamente costoso". - uhh - suspirando largamente. - "¿en qué estoy pensando? Teniendo una relación homosexual con un hombre como él. Nunca antes me ha gustado un hombre ni pensé que llegarían a gustarme" - recordando que ya había intimado con el mayor y nada menos que en una habitación de hospital. Se sonroja al recordar aquel extraño pero erótico momento - "cielos, en qué momento termine haciendo este tipo de cosas" - ¿oh? - siente algo aplastar su hombre ligeramente.
- perdón por hacerte esperar - una voz conocida le habla suavemente en el oído, volteándose para verlo. - buenas noches, doc - le sonríe un bien vestido y por alguna razón pelinegro Lavi.
- ¿Lavi-san? - preguntando a pesar de que era su voz, sus facciones habían cambiado un poco por el color de su cabello.
- sí, ¿te gusta el nuevo color? -
- ¿por qué? - algo confundido.
- te lo explicare en la habitación - comenzando a caminar - vamos -
El albino se puso de pie y lo siguió, fijándose en el guarda espaldas pelinegro que acompañaba a su amante, vestía una camisa blanca y un pantalón negro, su cabello estaba suelto y algo desordenado, supuso que Lavi le contaría luego sobre lo que sucedía. Caminaron hasta el lujoso ascensor y apretaron el botón, esperaron un poco a que bajara hasta donde estaban. Kanda los seguía a una distancia prudente.
- Tsuchiya-san ¿no vino contigo hoy? -el entrecejo del más alto se frunce.
- no, tenía otras cosas que hacer -
- mmm, pensé que vendría, él siempre está a tu lado -
- es mi mano derecha, pero ahora que Yuu está conmigo, no necesito su compañía todo el tiempo -
- entiendo - quedándose callado. Estaba nervioso, por eso comenzó a hablar del antes mencionado, sinceramente no sabía de qué más hablar con el más alto y creía que preguntar sobre su "trabajo" no era una buena idea.
Cuando el ascensor llego al piso uno, ambos suben en él. El pelilargo se queda abajo cuando las puertas se cierran.
- ¿eh? - sorprendido.
- nos seguirá en el próximo -
- mmm - entendiendo menos lo que sucedía
- ¿y doc? -
- ¿eh? -
- ¿cómo fue tu día? -
- ah - sus mejillas se tiñeron de un leve carmesí - fue un día tranquilo -
- ¿alguna cirugía? - en un tono sarcástico.
- no es gracioso - enfurruñándose
- mjeje - riendo al verlo así - doc -
- ¿? - levantando su cabeza para encontrarse con esos hermoso ojos esmeralda que lo veían fijamente.
- estas tan lindo como de costumbre –
El albino se sonroja hasta las orejas y sus frenéticos latidos le obligaron a correr su mirada.
- estoy algo emocionado, ¿tú no? -
- ¿emocionado? - sin entender.
- esta noche es como una segunda luna de miel
- ¿eh? - volviéndose una bola roja por esas palabras
- ¿qué? ¿no piensas lo mismo? - con una sonrisa pícara
- ¡¡por supuesto que no!! - cruzando sus brazos.
* De verdad no sé qué pasa por su cabeza *
El elevador se detiene en el piso 7, abriendo sus puertas. Ambos salen de él mientras el pelirrojo sácalas llaves para abrir la puerta con el número de habitación 707, las luces se encienden automáticamente al girar el cerrojo en la madera.
- wuau - observándose dentro del lugar un espacioso cuarto con una mesa amplia, llena de frutas y postres, dos sofás negros y amplios en la sala y una mesa de madera barnizada. Se veía también al lado contrario una enorme cama. No había separación en murallas solo el baño estaba tras una puerta.
- Esta habitación es como una casa -
- es una suite - quitándose el abrigo, acercándose al doctor para quitarle el suyo.
- ... - mirándolo algo nervioso.
- lo vas a arrugar - le dice mientras se lo quita.
- ah, gracias - mirando de nuevo a su alrededor - ¿no es esto muy costoso? -
- ¿qué cosa? - colgando los abrigos.
- el hotel, la habitación -
- no tienes que preocuparte por eso - tomándole de la cintura, acercándolo a él rudamente.
- ¡! -
- este hotel es mío - apoderándose de los labios de un sorprendido albino. Lavi lo aferra a su masculino cuerpo, mientras comienza a resbalar su lengua en la pequeña cavidad, tratando de encontrar la otra para jugar con ella.
Obliga al cuerpo del menor moverse, sin dejar de besarlo hasta que llegan a la cama en la cual lo recuesta.
- ... - el menor sonrojado lo mira fijamente.
- mje, vamos - quitándose su corbata sensualmente mientras se inclina sobre el albino. - o me vas a decir que no te esperabas algo como esto - entre abriendo su camisa.
- solo pensé que... comeríamos -
- y eso es lo que estoy tratando de hacer - sonriendo lascivamente - tratando de tener un bocado de ti - sus labios toman los de Allen en un beso profundo y húmedo. En su sorpresa, el más bajo se ve obligado a sujetarse de la camisa blanca a medio abrir, dejándose llevar por las sensaciones que el hombre sobre él le provocaba al tocar sus pezones. Pronto vinieron esos incontrolables temblores que sacudieron su cuerpo.
- estoy asustado - susurra.
- ¿asustado? - lo mira el ahora el pelinegro.
- si, la vez que... emmm - sintiendo vergüenza de decirlo - en el hospital me dolió un poco - sonrojado y con su mirada puesta en otro costado por la pena de tener que hablar aquello en voz alta.
- lo entiendo - mirándolo fijamente, esas expresiones tan monas le causaban una ternura sorprendente. - fue tu primera vez por eso dolió, pero esta vez estará bien - acariciándole su cabello suavemente - me encargare de que lo disfrutes - tomándole la mandíbula haciendo que lo mirara. - esta vez me tomare mi tiempo y te llevare al paraíso - sonriendo sensualmente haciendo que un suspiro ahogado saliera de su garganta para luego ser besado nuevamente con lujuria.
- ngh - suspirando, mientras el más alto se apoderaba de su pezón izquierdo primero, pasándole su lengua suave pero con vehemencia y luego succionando - ¡ahh! - su cuerpo se estremecía a cada toque, lamida o succión de su contra parte. - ammmnn... - apretando la almohada bajo su cabeza, las manos agiles del yakuza se deslizaban por su cuerpo ya completamente desnudo - ¡! - se sorprende al sentir la boca de Lavi bajando hacia su ombligo - espe... -
- shhh - mientras sigue bajando - déjame cumplir mi promesa - tomando el miembro semi erecto en una de sus manos, masturbándolo de arriba hacia abajo para concretar una completa erguidez.
-ahhh... mnnn, ahh... - sintiendo oleadas de placer provenientes de esas grandes manos - umm - doblando un poco su espalda, sacudiéndose. Cuando el miembro frente a él está completamente listo y duro, lo mete de lleno en su boca, provocándole al menor un gemido de placer - ¡ahh! - como auto reflejo de su última primera vez tapa su boca con sus manos.
- no hagas eso - apartándola con la mano que le quedaba libre - quiero escucharte -
- ahh, pero… - sollozante.
- está bien, las paredes son gruesas nadie te escuchara así que... - lo mira desde su posición sonriente y perverso - puedes gritar todo lo que quieras - cuando termina de hablar vuelve a hacer el mismo acto esta vez succionando.
- ¡¡AHHH!! - su voz sonó por toda la habitación y su cuerpo vibraba a cada lamida. Sintiendo placer de una manera intensa. Extasiado y mareado por cada sensación. – ahhh, ummm, no... - apretando el cabello del que ahora era su amante.
- ¿no qué? - hablando cerca de su miembro, dejando que su aliento cayera sobre él, masturbándolo. - esto no duele, ¿verdad? -
- no, pero... ahhhmm... está muy... -
- ¿muy qué? -
- ahhh... -
- vamos, dilo - sonriendo de medio lado. - vuélvete un pervertido -
- muy... - el pelirrojo lame la punta con su lengua, mientras masturba el tronco. - ¡ah! bueno... ¡muy bueno! -
gimiendo a un alto volumen y por primera vez Allen se da cuenta de que su debilidad son las mamadas. - ¡AHH! - corriéndose en la boca de Lavi - uhhm - suspirando
- mj - se ríe el más alto, tragándose el líquido que Allen había dejado en su boca.
- no te rías -
- fue muy rápido -
- ha pasado tiempo - sonrojado
- así que… ¿ya te habían hecho una mamada antes? -
- ... - más rojo. - no contestare eso. -
- mj, eres tan mono - acercándose a su boca, besándolo apasionadamente.
- nnnhh.. -dejándose llevar, pensó para sí que acompañar una gran mamada con un beso así de intenso era una gran idea. La mano del mayor recorre el cuerpo húmedo de sudor y fluidos del albino hasta agarrar con ambas manos su cintura y darlo vuelta, dejándolo boca abajo. - ¿Lavi-san? - algo asustado.
- tranquilo - abriendo el cajón junto a la cama - tengo todo lo que necesito justo aquí - saca de ella lubricante y un condón.
- ¿por qué tienes todas esas cosas ahí? -
- le pedí a Tsuchi que me las comprara -
- ¡¿¿qué??! -
- él ya sabe lo nuestro, ¿qué más da? -
- "¡nunca más podré mirar a Tsuchiya-san a los ojos!" - ¡! - sintiendo algo liquido en su parte trasera.
- no te tenses - bordeando los alrededores de la entrada del menor con el líquido transparente
- nghh - sintiendo un dedo empujando dentro de él - ummm - cerrando los ojos y apretando las sabanas.
- levanta un poco más tu trasero -
- n-no -
- ¿no? - arqueando una ceja. Si a algo no estaba acostumbrado Bookman Lavi era a ser rechazado.
- es vergonzoso -
- mmm... - girando su dedo dentro del albino.
- ¡¡ah!! - contrayéndose
- esta parte de ti no parece tener vergüenza -
- ¡no digas eso! -
- pues lo siento mucho - pasando su mano libre por el miembro del peliblanco
- ahhh - sintiendo una oleada de calor en su estómago.
- tu amante es un pervertido -
- "mi amante..." -
- así que acostúmbrate -
*Es cierto, este hombre es...*
- a esta forma pervertida de hacer el amor -
* Mi amante *
Su parte trasera se levantó lentamente para la sorpresa de Lavi.
- ... - mirándolo con sus mejillas sonrojadas y si boca entre abierta.
- mj, así se hace, doc - sonriendo.
- mngh - sintiendo el segundo dedo dentro de él.
* Debo acostumbrarme a esta relación... de todas formas yo... *
- ammmm - enredando sus finos dedos en las blancas sabanas cada vez con más frenesí.
- es una vista preciosa la que tengo ahora - moviendo sus dedos dentro de él y así era... una vista privilegiada.
Una espalda tiritante y larga a su merced, sus suaves muslos tratando de mantener el peso de ese sensual trasero que se sacudía a medida que los dedos de su contra parte se movían dentro.
- ahhh, Lavi san... - suspirando.
- ¿ya estás listo? -
- no me preguntes eso a mí -
- mjejeje, eres tan denso, doc - sacando sus dedos, volteando su cuerpo para mirarse. - mírame - sus ojos se cruzaron en una combinación sensual - quítala -
- ¿eh? - sin entender. El mayor toma una de sus manos y la pone en su camisa
- desnúdame - el colorado rostro del médico parecía a punto de estalla. - si me deseas, ayúdame - mirándolo fijamente.
*Yo estoy enamorado de este hombre *
- nnn - su cuerpo se sacudió un momento. Luego se enderezo un poco y con ambas manos comenzó a quitar la camisa del más alto.
- estas nervioso - al ver que las manos que lo desvestían tiritaban - tu cuerpo es muy honesto - tocando las pequeñas manos sobre su camisa a medio abrir - oye - hablándole suavemente, tocándole su mejilla - no tengas miedo - apoyando su frente contra la otra - estoy aquí - besándole sus manos - soy solo yo - ambos se miran - un hombre enamorado tratando de volverme uno contigo - el rostro de Allen enterneció completamente por esas palabras
- Lavi-san -
- siénteme - pasando la mano antes besada, posándola en sobre su pecho.
* El corazón de Lavi estaba retumbando bajo mi mano, era tan fuerte su palpitar que realmente pensé que era un estúpido por sentirme tan avergonzado y asustado *
- al parecer tu... - avergonzado - realmente me amas. -
- mj ¿y recién te das cuenta? - el albino acerca sus labios a los que estaban frente a él, depositando un tierno y tímido beso, sorprendiendo al yakuza - tu... eres tan mono - besándolo desesperadamente, sin poder aguantar más. Recuesta el cuerpo del albino en la cama y baja sus pantalones y ropa interior, acercando su miembro a la entrada ya dilatada del más bajo - doc -
- ¿nnn? - apretando un poco sus manos en el cuello de su amante al sentir la punta entrando en él.
- dilo. - metiéndose dentro de él lentamente - di que... -
- ahmm... te amo - interrumpiendo las palabras del otro, sorprendiéndolo - estoy asustado, pero de verdad de te amo - sonrojado - si no fueras tu... nghhh... no dejaría que nadie más me viera así. - el más alto conmovido se acerca a sus labios
- Allen -
- ¡nghhh! - sintiendo toda la extensión del miembro del otro dentro de él. Llenando su cuerpo.
- oh. - apretando sus ojos también.
* Esa noche él dijo mi nombre varias veces *
- ¡ahh! ¡ah! ... -
- Allen... - embistiéndolo a un buen ritmo.
- ahhnm - apretando la espalda tatuada de Lavi - ahhh ¡AHI! - su cuerpo se tensa al ser golpeado justo en aquel lugar donde su próstata descansaba
- ¿aquí? -
- ¡¡ahh!! ¡¡Si!! Nnnghh, justo ahí... - enterrando su cabeza en la almohada.
- mj. - sonriendo lascivamente agarrando las caderas de su amante muy fuerte mientras lo embiste
- ¡¡¡ahhh!!! - retorciéndose – ahhm, ahhh, ¡¡muy bueno!! Nghh, ahhh... - su cuerpo se sacudía violentamente
- esto es algo nuevo, doc - notando como ese pequeño cuerpo se contraía tempestuosamente - no pensé que dirías cosas eróticas en nuestra segunda vez - si bien sabia y estaba seguro de sus buenas aptitudes como amante, pensaba que por lo tímido que era el médico se negaría a dejar salir esas palabras las primeras veces que lo hicieran.
- ahhhmm, ese... ese lugar -siendo embestido constantemente – ahhh, muy bueno, ahhm, ¡¡ahh!! -
- mj está bien - acercándose a su boca - también lo siento - sonriendo y sudando - se siente jodidamente bien -
- ¡¡¡uwaa!!! - temblando intensamente.
- te corriste, ¿verdad? -
- umng - respirando agitado - lo siento -
- está bien - mirándolo - tengo toda la noche para hacerte gemir -
* Y tal como lo dijo... gemí en sus brazos toda la noche*
AL OTRO DIA.
- ngh - costándole abrir los ojos - "mi cuerpo se siente tan pesado" - mmm - acurrucándose más en las cobijas.
- oye - escucha una voz ronca pero suave - abre tus ojos - su voz sonaba casi paternal
- … - acurrucándose mas
- mj - abraza el pequeño cuerpo pegado a él.
- ¿eh? - su cerebro al fin había despertado.
- eres muy mimoso en las mañanas, ¿huh? - acariciando su suave cabello, mientras lo abrazaba.
- emm… - "cielos, todos los recuerdos de anoche están viniendo a mi cabeza" - colorado hasta las orejas
- está bien, no tienes que decir nada - ya intuyendo lo que pasaba - solo quedémonos un poco más así - enterrando su mentón en el cabello platinado.
* Y así lo hice por varios minutos, sin sabes qué hacer ni decir en tan increíble, pero vergonzante momento *
...
- Aquí tienes - dejando el desayuno sobre la mesa
- gracias - el más alto se sienta - así que era solo Spray* - mirando que el color de su cabello había vuelto a ser rojo después del baño
- así es -
- ¿y por qué tuviste que usarlo? -
- ¿de verdad tenemos que hablar de esto en nuestra esperada luna de miel? -
- ¡¡no es una luna de miel!! y no quisiste contarme anoche, así que dime -
- bueno, tomando en cuenta a lo que me dedico no debería ser una sorpresa -
- ¿eh? -
- tengo que ser precavido ahora que eres mi amante -
- ... - escuchándolo.
- tengo varios enemigos dentro y fuera del grupo, sin mencionar que si la policía me descubre estoy frito, ya sabes cómo es o al menos debes tener una idea -
- si -
- quiero mantenerte alejado lo más posible de este mundo -
- ... - escuchándolo -
- no quiero que te veas envuelto en cosas desagradables, así que es mi manera de protegerte -
- Lavi-san - conmovido.
- iremos cambiando de hoteles las veces que nos encontremos y una que otra vez lo del cabello sucederá o quizás lentillas -
- entiendo, pero eso ¿no será un gran costo para ti? -
- los hoteles están bajo mi mando, así que económico no -
- ¿y físico? -
- mmm - mirando el semblante preocupado de Allen. - si seguimos follando como anoche por supuesto me cansare -
- mmm...- avergonzado y enfurruñado
- mjeje, te ves tan mono cuando te enfadas, doc - sonriendo
- tonto - corriendo su rostro, haciendo un puchero
- ¿no será mucho para ti?-
- ¿eh? ¿A qué te refieres? -
- a esto, a nosotros -
- ... - mirándolo fijamente.
- no será fácil y quizás a veces sea molesto -
- pero... - mirándolo de reojo con sus mejillas ardiendo - ya es tarde. -
- ¿tarde? -
- sí, tu... -
- ... -
- "puede que tenga razón, pero..." - mirándolo - Lavi-san, te lo dije aquella vez en el hospital - sonrojado - te amo - el pelirrojo siente una punzada en su corazón al escuchar tan dulces palabras - yo no estaría aquí si no estuviera seguro de ello y de que debo cargar con el hecho de lo que haces, yo creo que Lavi-san es una persona muy amable -
- ¿oh? - se sorprende, no había escuchado a nadie decir algo así de él, nunca. El menor lo mira de reojo notando el silencio entre ellos. Ambos se miran. El mayor se pone de pie para acercarse y arrodillarse junto al albino. - entonces... - tomando sus manos suavemente - ¿estamos juntos en esto? - Allen se acerca al rostro del yakuza sin miedos ni dudas.
- si - apoyando su frente contra la del otro
- mj - mueve su cabeza y se besan cálidamente - volvamos a la cama - le susurra entre besos
- el café se enfriara - tímido.
- podemos hacer otro después -
- pe... ¡¡waaaa!! - grita al ser tomado de improviso como una princesa.
- Allá vamos. - cargándolo con una sonrisa infantil.
- mj - sonríe dulcemente.
*Realmente me he involucrado con una bestia*
- nghh. - retorciéndose en los brazos de su amante una vez más.
* Pero está bien así. Muy bien.*
SEMANAS DESPUES
- Aquí está la recaudación de este mes, conde - dejando sobre la mesa de estancia 5 maletines negros abiertos y llenos de dinero.
- vaya - mirándolos algo asombrado - es más de lo esperado este mes -
- sí, los hoteles han estado funcionando bien -
- así veo - mirándolo de reojo - dime algo, Lavi -
- ¿sí? -
- ¿qué es lo que te tiene tan feliz? -
- ¿mmm? el negocio por supuesto -
- vamos, es más que eso, ¿no se lo contaras a papá? -
- mjejeje - riendo - no es nada especial, en serio -
- mmm... -
- es solo que todo está saliendo bien -
- mm, ¿con tu mujer? -
- ¿qué le hace pensar que tengo solo una? - sonriendo de medio lado
- los rumores corren rápido entre nosotros, querido hijo - bebiendo un poco de sake. - además, siempre fuiste un hombre más destinado a encontrar una buena mujer que jugar como tu padre -
- ha vivido una buena vida -
- si -
- bueno, aún tengo trabajo por hacer, así que debo dejarlo - poniéndose de pie.
- Lavi...-
- dígame - mirándolo.
- Yamada ha dejado la sucesión -
- ... -
- solo piensa bien y borra tus huellas si no quieres perder -
- lo tendré en mente, conde. Con su permiso - retirándose.
...
- ¿cómo fue? - encendiendo el auto.
- bien. - mirando por la ventana, prendiendo un cigarrillo.
- ... - notando algo de preocupación en su jefe.
- crees que... - guardando un poco de silencio - olvídalo -
- ¿jefe? -
- olvídalo, solo estoy delirando. -
- mmm. -
- llévame al hotel -
- ¿hoy se verán? -
- si... - apoyando su cabeza en el respaldo del asiento.
- no se ve muy feliz -
- solo estoy cansado. - cerrando los ojos un momento.
- ¿pesadillas? -
- las de siempre - susurrando con desgano esto último.
- ... - guardando silencio. De repente el móvil del pelirrojo suena.
- ... - sacando el móvil de su bolsillo, viendo el nombre en la pantalla - ¿qué? - con un tono duro como siempre, pero con un rostro apacible y algo sonrojado.
- ah, Lavi, soy yo. - dice una vocecita dulce tras el teléfono.
- sí, ¿qué pasa? -
- llegare un poco tarde hoy - hablando algo asustado.
- ¿qué? ¿por qué? - con una vena en su cien.
- tengo algo de trabajo todavía, lo siento. -
- ... - de mal humor.
- solo serán un par de horas más -
- ... - sin hablar.
- emm, pasare todo el fin de semana contigo, no estés de mal humor -
- ... - suavizando sus facciones. Tsuchiya lo miraba por el retrovisor.
- ¿te gustan las fresas? -
- ¿huuh? - confundido por el cambio de tema.
- hice un pastel para ti. -
- ¡! - sonrojándose.
- así que... no te enfades, ¿sí? -
- ... - suspirando - está bien, no estoy enojado -
- bien - sonriendo. - te veré luego -
- si -
- adiós -
- adiós - colgando. - ... - mirando su móvil, sonriendo dulcemente.
- ... - Tsuchiya que miraba sus reacciones, sonríe también
- Nadie me había hecho un pastel antes - susurrando y sonriendo infantilmente.
- debe estar muy bueno, ¿me dejara probarlo? -
- no. - guardando su móvil.
- jajaja, ya me lo suponía -
- ¡¡bien!! - con nuevas fuerzas - ¡pasaremos por la farmacia! ¡¡necesito mucho lubricante!! - con una voz lúgubre.
- usted realmente es una bestia. -
- ¡VAMOS A ELLO! -
- mj - sonriendo y yendo hacia la farmacia.
Mientras.
- ... - cerrando la puerta tras él, cargando su maletín y una pequeña caja envuelta en una bolsa.
- Allen... -
- ¿oh? Lena - sonriéndole - ¿te toca el turno de noche? -
- si - acercándose a él - ¿ya te vas? -
- sí, quiero huir antes de que Komui-sensei me obligue a hacer un turno extra -
- mjejeje, debes disculpar a mi hermano por eso, a veces exagera -
- sí, lo entiendo, por eso huyo - sonriendo.
- jejeje, déjame acompañarte a la salida - caminando junto a él.
- bueno -
- últimamente te vas a la hora casi todos los viernes -
- ¿es así? - sonrojándose un poco.
- mj - abrazándolo por el hombro - ¿es por tu salvaje noviecita? -
- no, bueno, sí, algo así - avergonzado.
- vamos, vamos, no seas tímido, cuéntame de ella -
- no hay mucho que pueda decir honestamente... - pensándolo un poco - no conozco mucho de su vida personal -
- ah, ¿no? - sorprendida - ¿no le has preguntado? -
- ¿preguntar? - pensando - bueno, no es una persona que hable mucho sobre ella misma -
- mmm, quizás solo llevan poco tiempo, ¿no? pronto se abrirá más -
- sí, puede ser - bajando la cabeza un poco.
- ... - notando esto - en fin - dándole un golpecito en la espalda - no te preocupes tanto por eso, las relaciones suelen ser así cuando comienzan, ya se abrirá a ti, además por lo que noto es una persona algo complicada -
- bastante - sonriendo.
- mj, entonces solo mímala -
- ¿eh? -
- dicen que las personas que se muestran frías por fuera son las más sinceras -
- ... - escuchando.
- posiblemente no tuvo una niñez muy alegre, por ello es cerrada a contar sus experiencias pasadas, así que debes ir con cuidado para no dañarla -
- ¿lo crees? -
- si, por eso, si pones calor al final el hielo siempre se derrite, ¿no? -
- ... - pensándolo – sí, tienes razón -
- mj - llegando a la puerta de salida del hospital. - bien, ten una buena noche y dile a tu novia... - acercándose a él y apartando un poco la camisa de su cuello - dile que no deje marcas - viendo el chupetón en el término de su blanco cuello.
- ¡¡¿eh?!! - tapándose el chupetón, totalmente colorado.
- mjejeje, que suerte tienen algunos - caminando hacia su oficina - disfruta tu fin de semana - diciendo picaronamente.
- ... - avergonzado. Sigue caminando.
* En realidad, quede pensando sobre lo que Lena me dijo por días, en realidad ¿qué sé sobre Lavi? *
- ... - caminando por las frías calles de Tokio, colocando su bufanda y revisando su móvil en donde Lavi había enviado en un mensaje la dirección del hotel donde se juntarían hoy.
* Sé que es un Yakuza, pero no me siento muy cómodo con preguntarle algo sobre ello. Sobre lo que hace o como llego a ser parte de un grupo de mafiosos. Además el no siempre fue jefe, ¿no es así? *
- ... - deteniéndose cuando llega frente al hotel.
* Como llegaste a ser una bestia... *
Bajándose del ascensor, tocando la puerta 203. La cual se abre.
- buenas noches - sonrojado.
- buenas noches - sonriéndole - pasa -
- ... - entrando, la puerta se cierra tras ellos.
- tienes la nariz roja - acercándose y tocándola con su propia nariz - y fría. -
- ... - avergonzado - comenzó a nevar -
- mmm... - le da un beso suave en sus labios - vamos adentro, te hare un poco de café con leche - sonriéndole.
- si - mirándolo fijamente.
*... Teniendo un corazón tan calido.*
ATTE.
~~MYVmaru~~