CAPITULO 8
"Una apacible tormenta de emociones"
- ... - con miles de venas en sus sienes, esperando que el otro lado del teléfono contestara su milésima llamada.
- ... - miraban a su jefe y el descontento en su cara, aterrados.
- kjj. - ya saliéndole humo de la cabeza - ¡ARGHH! - lanzando el móvil lejos.
- ¡¡!! - asustados.
- ¿¿¡¡POR QUÉ MIERDA NO CONTESTA EL PUTO TELEFONO!!?? - hecho una furia. Camina hacia donde uno de sus hombres y lo sujeta de la camisa acercándolo peligrosamente a él - ¿¿POR QUÉ?? ¡¿HUHH?! - increpándolo sin tener nada que ver.
- ahhh - asustado - ¿por qué... usted estaba con una mujer? -
- ¡¡IDIOTA!! - lanzándolo lejos.
- ¡waaaa! - gritando.
- ... - tomando el móvil y llamando otra vez. El mismo resultado, nadie contesto.
- uff - suspira mientras su jefe hace escándalo, lanza el móvil y golpea a sus subordinados - dudo mucho que el doc le conteste -
- ... - mirándolo también, serio como siempre.
- el doc tiene su genio, ¿huh? -
- así parece, es preocupante -
- ¿huh? - mirando a su compañero.
- lo que ese tipo hará ahora - mirando a Lavi.
- ¿? -
- ¡¡TSUCHIYA!! - gritándole.
- ¡¡SI!! - parándose de sopetón.
- ¡tráelo! -
- ¿huh? -
- ¡QUE VAYAS A BUSCARLO Y TRAELO AQUI! ¡AHORA! -
- p-pero... -
- ¡¡HAZLO!! -
- ¿pero si no quiere? -
- ¡¡TRAELO A LA FUERZA, PERO TRAELO!! -
- jefe… ¡URGH! - siendo jalado desde el mismo lugar que a su otro amigo.
- ¡¡AHORA!! - mirándolo con furia.
- si. -
- ... - soltándolo y sigue llamando.
- te lo dije -
- uhh - suspirando pesadamente.
...
- ... - mirando como su móvil vibraba sobre su escritorio - idiota - apagándolo. Pone su cabeza sobre su escritorio
mirando el tigre de su móvil - mmm - enfurruñándose - tonto, estúpido. - refunfuñando.
*Han pasado unas 2 semanas desde que eso sucedió en la casa de Lavi. No he contestado ni sus mensajes ni sus llamadas, cuando llego a casa cierro con seguro y no le he abierto la puerta. Estoy muy enojado, muy molesto y herido.*
- uff... - entrecerrando sus ojos con tristeza - estúpido Lavi - enterrando su cabeza entre sus brazos y comienza a sollozar.
*Si bien en ese momento no estaban haciendo ESE tipo de cosas, era evidente que si no hubiera llegado habría pasado. No soy idiota y me doy cuenta de que un cuerpo masculino como el mío…*
- nghh - llorando suavemente.
*... no es suficiente*
De repente el teléfono de su oficina suena.
- mnn - limpiando sus ojos con la manga de su garbacha - diga - respondiendo.
- Walker-sensei, lo necesitan en la sala de cirugías - le dice una muchacha por el otro lado del teléfono.
- sí, voy enseguida – colgando, poniéndose de pie - "¡vamos Allen!" - golpeándose la cara para despabilar -
"no puedes quedarte llorando, ¡tienes trabajo que hacer!" - reprendiéndose a sí mismo. - allá vamos - dándose ánimos.
* Me siento aturdido, muy triste, se suponía que el... me amaba *
...
- ... - saliendo de la sala de cirugía después de 4 largas horas metido ahí
- Allen -
- ¿oh? - volteándose - Komui-sensei - deprimiéndose un poco, siempre que él lo llamaba era para reprenderlo por algo o pedirle favorcitos que rompían su calma, que hay que decir, ahora no tenía precisamente.
- ¿tienes un minuto? -
- s-sí - sin poder negarse - dígame -
- ¿te está sucediendo algo? -
- ¿eh? No, ¿por qué? - nervioso.
- estuviste muy distraído durante la cirugía, siempre has sido un buen cirujano, se nota inmediatamente cuando no estas a tu 100% -
- no, es solo que he dormido poco -
- también note que has estado haciendo horas extras nuevamente estas 2 últimas semanas -
- s-sí, pero no es por nada en especial -
- ¿estás seguro? -
- si -
- ¿terminaste con tu novia? -
- ¡¿eh?! - sorprendido.
- los rumores corren rápido en el hospital -
- ¡ah! ¡¡no tiene nada que ver con eso, lo prometo!! -
- tranquilo, no te estoy juzgando por eso, estas en la edad de tener una novia, de hecho ya deberías pensar en casarte -
- ¡¡!! - tensándose.
- ese no es el caso, el caso es que si no estás en tu 100% no sirve que trabajes así -
- ¿eh? - asustándose por esas palabras.
- así que tomate unas vacaciones - dándole un golpecito en el hombro.
- ¡¿qué?! ¡Espere! de verdad no necesito... -
- Allen - interrumpiéndolo.
- ¿? - callándose.
- disfruta tus vacaciones desde mañana - sonriéndole y retirándose.
- ... - boquiabierto, de verdad no quería esas vacaciones obligadas - umm - agachando su cabeza.
*Esto se está poniendo cada vez peor*
RATO DESPUES.
- uhh - sacando la llave de su departamento mientras sube las escaleras de metal - "no quiero estar en casa" - deprimido - "¿qué haré una semana entera?" - llegando a su piso - "no quiero seguir pensando en él, cada vez que lo recuerdo me enfurezco y algo dentro de mí se quema, no quiero sentir esto" - frunciendo el ceño - ¿oh? - notando que hay dos personas fuera de su departamento, por la oscuridad no pudo distinguir caras. - ... - asustándose - "podrían ser" - viniéndosele a la mente los tipos que había visto en el hospital. Dando un paso atrás cuando nota que los hombres se movían al verlo - umm - tiritando levemente y tragando saliva. - ¡ah! - da un pequeño quejido cuando los hombres llegan ante él y lo cogen, llevándoselos por las escaleras - ¡¡ah!! ¡no! ¡¡¿qué hacen?!! - gritando, por lo que los dos hombres le tapan la boca - ¡¡mnn!! - asustadísimo, es llevado a un auto y arrojado dentro de él. - ¡¡NOOO!! - gritando.
- doc -
- ¿eh? - sorprendiéndose, el conocía esa voz.
- buenas noches -
- ... - mirando al hombre en el asiento del conductor - ¿¡¡TSUCHIYA-SAN!!? -
- lo siento por estos brutos, no tienen delicadeza - uno de los hombres se sentó en el lado del copiloto y otro
junto al albino.
- ehhh - confundido - ¿por qué? -
- bueno, usted sabe cómo es el jefe -
- ¿Lavi te envió? - aun sin entender.
- si - encendiendo el auto.
- ¡¡AH, ESPERA!! ¡¡NO QUIERO IR!! -
- lo siento, estoy siguiendo órdenes - un poco aproblemado, a pesar de que le había tomado afecto al albino no podía ir en contra de su bestial jefe.
- ¡Tsuchiya-san! déjame bajar, ¡¡por favor!! -
- lo siento tanto - deprimido por no poder hacer nada, comenzando a conducir.
- ¡¡NOOO!! -
DESPUES
- ¿por qué se demora tanto ese imbécil? - mirando el reloj, sentado en el salón bebiendo sake.
- ... - en silencio.
- ¡deja de mirarme! - realmente cabreado.
- ... - apartando la mirada.
- ¡¡NOO!! ¡¡ESPERA!! ¡¡TSUCHIYA-SAN!! ¡¡SUELTAME!! -
- ... - dejando su vaso al escuchar los gritos y el traqueteo de afuera.
- ¡¡NO QUIEROO!! ¡¡TSUCHIYA-SAN!! - gritándole.
La puerta se abre y ahí estaba el pelirrojo mirándolo notoriamente cabreado.
- umm - tragando saliva pero frunciendo el ceño.
- aquí estas - poniéndose de pie.
- ... - siendo afirmado por Tsuchiya.
- tu... ¿por qué mierda no contestas mis llamadas? - mirándolo enojado.
- ... - enojándose y corriendo su mirada - ¡¡porque no quiero!! -
- ¡! - cabreándose más - ¡¿por qué no querías?! ¡¡¿QUÉ MIERDA DE RESPUESTA ES ESA?!! -
- ¡¡LA UNICA QUE TENGO!! ¡IDIOTA! - gritándole también. Todos estaba boquiabiertos, es decir, nadie le hablaba así y mucho menos alguien que no era parte de la yakuza, al menos, por lo que ellos sabían estando con su temible jefe.
- ¡¿¿IDIOTA?!! -
- ¡¡SI, IDIOTA!! ¡¡DEJAME IR A CASA!! - moviéndose.
- espera... ¡¡Deja de hablarme así!! ¡MALDICION! - algo extrañado por las palabras que salían de la boca de su adorable y manejable albino.
- ¡¡NO!! ¡¡¿QUÉ DEMONIOS ESTAS PENSANDO TRAYENDOME ASI HASTA ACA?!! ¡¡ERES DEFINITIVAMENTE UN MATON!! -
- ¡! - sorprendido.
*Estoy tan molesto, tan ofuscado... *
- ¡¡DEJAME IR A CASA!!! -
- oye, ¡¿qué mierda pasa contigo?! - sin entender.
- ¡¡NO QUIERO MIRARTE LA CARA!! ¡¡IDIOTA!! -
- ¿huh? -
* No quiero verlo... si lo veo recuerdo e imagino lo que hace con esas mujeres y se siente mal, duele *
- ¡¿cuál es tu problema?! - acercándose a él.
- ¡¡NO TE ACERQUES A MI!! ¡MUJERIEGO! ¡¡BRUTO!! -
- espera, espera... ¿esto es por las mujeres de la otra vez? ¡¡HAN PASADO DOS SEMANAS, SUPERALO!! -
- ¡! - enfureciéndose.
- ¿oh? - sintiendo el cuerpo del albino tiritar mientras lo sujetaba.
- ¿supéralo? - susurrando.
* Este hombre... lo odio, realmente lo odio*
- suéltame - diciendo bajo.
- ¿eh? -
- Tsuchiya-san, suéltame -
- pe... -
- ¡SUELTAME! - mirándolo con el ceño fruncido y honestamente se asustó.
- ... - tragando saliva y soltándolo.
- ... - mira rígidamente al pelirrojo que dio un brinco también por esa mirada - ¿qué lo supere? ¿eso fue lo que dijiste? - totalmente cabreado.
- uhh, si. -
- ... - apretando sus puños, se voltea y mira a Tsuchiya fijamente.
- ¡¡¿eh?!! - sorprendiéndose. - ¿qué?... ¡¡!! -
Un silencio sepulcral se hizo presente en toda la habitación, los rostros contrariados y pasmados de todos también estaban a la orden del día, sobre todo la cara desfigurada de Lavi y que más decir de Tsuchiya. El albino lo había agarrado de la camiseta y atraído hacia él en un beso profundo, sin lengua, pero muy profundo y duradero. Cuando lo suelta mira al pelirrojo fijamente.
- ¿? - dándose cuenta de que en esa mirada había una mezcla de furia y dolor.
- eres un idiota - susurrando mientras sus ojos se nublaban.
- ... - su corazón había pasado de sorpresa y furia a un rostro afligido por lo que podía intuir de las palabras de su
amante
- búscame en 2 semanas y dime si lo superaste - retirándose del lugar.
- ... - todos quedan en silencio. El más alto queda de pie mirando el suelo unos minutos. De repente se acuerda y mira a Tsuchiya con una mirada fulminante.
- ¡¡YAAAAGH!! - dando un gemido - "¡¡Dios, estoy muerto!!" -
- TSU.... CHI... YAAAA... - el fuego de la furia se escapaba por cada uno de sus poros.
- ¡¡no fue mi culpa!!¡¡JEFE!! -
- ¡¡ven acá, maldito traidor!! -
- ¡¡AHHHHHHHHH!! -
- ¡Yuu! - mientras refregaba la boca de Tsuchiya con su manga.
- auuu~~ - tirado en el suelo, su jefe sobre él.
- ¿si? - mirándolo.
- síguelo y escóltalo - serio.
- si - sale del lugar.
...
- ... - caminando lentamente por el parque por el que debía pasar para llegar hasta la calle principal y tomar el tren - hic - hipeando por el llanto que salía descontrolado de sus ojos.
* Duele, mi pecho duele mucho... *
- nghh, hic. - tratando de secarse las lágrimas, pero mientras secaba las primeras, otras venían a seguir manchando sus mejillas.
* Odio tanto el hecho de que estoy tan enamorado de él que duele... *
Sigue caminando, mientras pasos más atrás, el pelilargo lo seguía y miraba fijamente.
* ¿Por qué hiciste que me enamorara de ti? ¿por qué si no era suficiente? *
- ... - sacando su móvil, viendo el tigre en él.
* ¿por qué me haces algo así ahora?*
- nghh - aferrando su celular en su pecho, llorando.
* Ahora que te amo tanto que no puedo vivir sin ti.*
AL OTRO DIA.
- Buenos días - entrando a la habitación de su jefe. Le costaba hablar por sus labios hinchados después de que Lavi le refregara la boca durante horas - ¿oh? - notando que estaba sentado en el sofá con la yukata puesta, su 3er botella de sake casi vacía y el cenicero lleno. – jefe, ¿no ha dormido? - dejando el desayuno sobre la mesa.
- no - pensador.
- ... - mirándolo fijamente
- cancela todo lo de hoy -
- sí, pero debería comer e ir a dormir -
- no tengo hambre ni sueño -
- le hará mal a su salud -
- ... - silencio, Tsuchiya lo mira preocupado, Yuu entra a la habitación. - ¿cómo llego? -
- bien - le dice tranquilo.
- me alegra - poniendo un cigarrillo en su boca, Tsuchiya lo enciende.
- ... - silencio.
- uhh - suspirando - no lo entiendo - susurrando.
- ... - ambos lo miran.
- ¿por qué está molesto?, realmente no me cae en la cabeza -
- ... - los dos se miran
- jefe... -
- ... - mirándolo
- ¿de verdad no lo entiende? -
- no, ¿tu si? -
- bueno, doc debe estar muy dolido -
- ¿dolido? ¿por qué? ¡no le hice nada! -
- jefe, usted se acostó con mujeres -
- ¿y? -
- uhh - suspirando - bueno, puedo entender que nunca ha tenido una relación formal con nadie antes, pero debe entender que para el doc usted lo traiciono -
- ... - pensando y frunciendo el ceño.
- él tiene una concepción diferente al amor de la que usted tiene, es normal que se sienta celoso y ofuscado -
- entonces... ¿él te beso porque estaba celoso? -
- ¡¡ah!! bueno... - nervioso por traer el tema a colación - creo que fue su manera de devolverle el favor -
- ... - arqueando una ceja. - entonces, bajo tu suposición, ¿el espera que no me acueste con mujeres porque estoy con él? -
- algo así, el espera que no se acueste con nadie más que el -
- ¿? ¿en serio eso quiere? -
- sí, póngase en su lugar un momento, si él se acostará con una mujer -
- seria sexy mirar - excitado mientras lo imaginaba.
- eh... - "jefe, realmente es un estúpido en estas cosas" - ¿y si fuera un hombre? -
- ¡lo mato! - lleno de furia.
- ¿ve? esa furia que siente al imaginarse eso es la misma que siente el doc -
- ¿oh? - reaccionando.
- usted solo se acostaba con chicas antes de estar con él, nosotros lo entendemos, pero si el doc no es suficiente para usted, entonces ¿está de verdad enamorado de él? -
- ¡¡!! - poniéndose de pie, mirándolo con furia.
- ¡ah! - asustado.
- ¡olvida lo que dije! vamos a trabajar - quitándose la yukata quedando desnudo para comenzar a vestirse.
- ¿qué? - sin entender.
- ¡¡muévete!! -
- ah, sí - moviéndose.
DESPUES
- nghh - despertando costosamente - uh - suspirando y acomodándose en la cama, sentado rasca sus ojos - cielos - murmurando, le dolían los ojos y sabia el por qué, se había quedado dormido mientras lloraba por lo que su descanso no había sido completo - ... - mira su reloj de cabecera, el cual había desactivado gracias a su semana de vacaciones obligadas. Marcaba las 10:00 de la mañana. - ... - mira su móvil y lo toma, no había ninguna llamada, su mirada muestra su depresión. Se levanta y va hacia el baño, abre la llave del agua y bebe un poco, luego se moja su rostro y se mira en el espejo - "vaya" - notando sus ojos hinchados y rojos. - "que horrible se ve" - secándose con la toalla. Se dirige a su cama nuevamente y se tira boca abajo hacia ella. Mira de reojo su tigre. - mnn - hunde su cabeza en la almohada.
...
- no, no me muerdas~~ - hablando mimosamente.
- mj, es que son tan suaves - apretando sus senos. La mujer se mantenía montada sobre él en su sofá, sus senos se mantenían en su rostro.
- mjejeje, hace cosquillas~~ -
- ¿te gusta? - tocándola suavemente.
- s-si, ngh -
- voy a hacerte más cosas que te gustaran -
- si~~ -
- ¡ah! ¡Espere! -
- ¡¡muy buenas tardes!! - abriendo la puerta rápidamente.
- ¡kya! - chilla la muchacha, tratando de cubrirse con su kimono.
- ... - mirando hacia la puerta - uhh- suspirando - eres tú -
- perdón por interrumpir - sonriendo - pueden seguir - iba a irse.
- no, ya mataste el ánimo - arreglando su ropa.
- suelen decirme lo contrario - entrando a la habitación - lo siento mucho, Maaya-chan - mirando a la muchacha que se arreglaba su kimono.
- no se preocupe, Lavi-sama - sonriéndole también
- eres tan mona ~~ -
- no lo mimes, Maaya -
- mj, es imposible no hacerlo ~~ -
- ¿cierto?~~- hablando mimoso también.
- espérame en el cuarto - le dice el moreno ya vestido y prendiendo un cigarrillo.
- si -
- sí, espéranos ~~ -
- mjeje - se retira.
- ¿y bien? ¿qué haces aquí? -
- que frio, solo quería jugar Majhong contigo -
- si estas aburrido, pídeselo a tus chicos o a alguna mujer -
- lo siento, nadie me dijo que estabas ocupado - prendiendo su propio cigarrillo.
- claro -
- bien, juguemos - arreglando el tablero que estaba a mano.
- ... - mirándolo de reojo - oye -
- ¿mmm? -
- ¿dormiste bien? -
- oohh~~ ¿te preocupas por mí? -
- deja de hablarme así, no es nada mono -
- mjeje, si~~ supongo que es mejor cuando Maaya-chan lo hace -
- claro -
- siempre que vengo te veo con ella -
- es mi favorita -
- la quieres mucho, ¿huh? -
- le he tomado aprecio -
- ¿y que sea buena en la cama no tiene nada que ver? - picaron
- ... - sin contestar ni enojarse.
- ella es mona -
- lo es -
- tener una Danna* tan joven debe ser difícil para ella -
- ella también es joven -
- cierto, hace un par de años pediste su exclusividad, ¿no es así? -
- cuando cumplió los 18 -
- mmm... -
- ¿por qué me estas preguntando esto? ¿quieres ser el Danna de una mujer? -
- nah, solo estoy curioso. -
- mmm... -
- parte - ya habiendo terminado de arreglar el tablero, ambos comienzan a jugar.
- no respondiste mi pregunta -
- solo no dormí bien -
- tienes ojeras y un fuerte hedor a alcohol - mirándolo de reojo
- tuve una pequeña fiesta anoche - sonriendo
- ... - notando algo extraño en el pelirrojo. - escuche que Ryuuzaki fue a visitarte -
- algo así -
- ¿te dijo algo? -
- al parecer el conde lo había mandado a disculparse por meterme un balazo -
- ¿y lo hizo? -
- si, de mala gana, pero si -
- ya veo, era algo de esperarse -
- sip -
- ¿tuviste algún problema con tu mujer? -
- ¿cuál de todas? - sonriendo.
- la enfermera -
- oh, vamooos, ¿tú también? hombre, ¿qué les pasa a todos? -
- los rumores, tu sabes -
- solo me acosté con ella, nada más -
- no te creo -
- ¿no? - mirándolo de reojo.
- ... - su cuerpo tirito un poco, esa mirada aguda era sensual.
- oye, Tikky - poniéndose serio.
- ¿qué? -
- ¿de verdad sirvo para esto? -
- ¿oh? - sorprendido por esa pregunta.
- de verdad... ¿esto es lo único a lo que puedo llegar? - mirando el tablero.
- ... - guardando silencio un momento - ¿quieres dejarlo? -
- ... - pensándolo - no lo sé. - un poco deprimido - esta mierda me convirtió en un mal hombre -
- ¿? - mas sorprendido.
- o quizá siempre lo fui -
- lo dudo. -
- ... - mirándolo.
- tú eres un tipo raro -
- ¡¿?! - un poco ofuscado por el término.
- si no conociera todo lo que has hecho por la organización te diría firmemente que te fueras, pero eres bueno, traes dinero y manejas a tu gente de forma admirable -
- ... - pensando en eso.
- si te vas tus hombres lo lamentarían -
- ... - deprimiéndose un poco.
- pero no creo que sea lo único que puedas hacer, eres un hombre inteligente, podrías hacer muchas cosas más - mirándolo, el pelirrojo se mantenía tranquilo pero algo triste. - pero es inminente decir que este mundo te traga, te consume y es muy difícil salir de él -
- si - diciendo quedadamente.
- Lavi, se honesto, ¿estás confuso por una mujer? -
- ... - guardando silencio.
- ... - mirándolo.
- no, es solo que estaba viendo mis posibilidades, tu sabes... - diciendo lentamente - nunca quise meterme aquí, pero mis posibilidades siempre fueron muy limitadas -
- ciertamente -
- pero le debo mucho a el conde, a ti y a mis hombres, solo tengo un descanso... - pensando en su doc - y si no cuido eso no tendré ningún lugar a donde huir -
- ... - no entendiendo mucho, pero intuyendo algo. - tienes armas muy poderosas, solo tienes que proponértelo, tu gran problema es que dudas mucho cuando se trata de cosas que nunca habías sentido antes -
- ¡! - sorprendido por eso.
- si tienes algo que defender, hazlo, como un hombre -
- ... - mirándolo de reojo.
- y no busques más excusas -
- ... - sonriendo – vaya, eres muy romántico -
- cállate - golpeando la mesa.
- mje - sonriendo.
...
- vaya, está demorando - fumando en el auto.
- ... - en el puesto de al lado esperando también.
- realmente no sé en qué está pensando el jefe, ¿primero no duerme y no quiere hacer nada y luego nos trae hacia acá a jugar majhong en un momento así? dios~~ -
- ... - recordando el llanto del peliblanco la noche anterior
- ¿me pregunto cómo estará el doc? -
- ¿estas preocupado? -
- el doc es una buena persona a pesar de que le gusten los hombres -
- mmm... -
- el jefe realmente la cago esta vez -
- veo que lo has aceptado ya -
- bueno, ¿qué más me queda? el jefe hace lo que quiere y nadie puede decirle que no, además el doc lo ha ayudado mucho y se ve feliz cuando lo tiene cerca -
- ... - pensando en que eso era cierto.
- nunca pensé que el jefe terminaría enamorándose de un hombre, pero el doc es una ternura en realidad - sonrojándose un poco.
- ¿te gusta? -
- ¡no! no digas eso, ¡si el jefe te escucha me lo cortara! -
- sí, sería lo de esperar -
- solo encuentro que es bueno que el doc se mantenga cerca del jefe -
- ... - pensando algo parecido. La puerta trasera se abre
- conduce - subiéndose.
- ¿hacia dónde jefe? -
- al barrio rojo -
- si... ¡¿QUÉ?! -
- ¿qué tienes? - mirándolo de reojo.
- pe... -
- Tsuchi, cariño~~ me estas molestando tanto~~ -
- ¡sí, sí, entendí! - conduciendo.
- ... - mirando por la ventana, tranquilo y serio.
AL OTRO DIA.
- ... - comiendo lentamente su almuerzo comprado en una tienda de conveniencia. Vestía una polera blanca y unos short azules. - "el tiempo pasa tan lento" - mirando su plato de comida más que comiéndola - "han pasado solo dos días y quiero regresar al trabajo" - umm... - dejando los palillos - "no tengo apetito" - su móvil suena vibra sobre la mesa. - ¿oh? - su cuerpo se tensa y su corazón palpita violentamente, toma el móvil y se deprime un poco al ver el nombre, aun así contesta - Lena -
- ¡Allen! ¡Al fin contestas! ¿cómo estás? -
- estoy bien, ¿y tú? -
- preocupada, mi hermano me dijo lo de tus vacaciones, ¿de verdad estas bien? ¿paso algo? -
- no, de verdad no fue nada -
- ¿me dijo que habías estado ausente en la cirugía del viernes? -
- sí, no había dormido bien, pero Komui-sensei es algo intransigente, tú lo sabes -
- ¿quieres que te haga una visita? tengo algo de tiempo después de archivar unos papeles -
- no, no es necesario que te molestes, usa tu tiempo libre para salir con tu novio - sonriendo
- ¿eh? ¿cómo sabes eso? -
- mjeje, los rumores corren muy rápido -
- cielos~ -
- mjeje, gracias por llamarme, tu voz me hace feliz -
- mj, ¿estás seguro de que no quieres que vaya? -
- sí, ve a divertirte -
- ¿qué harás ahora? -
- me ducharé y leeré o veré una película, tengo mucho tiempo libre, debo agradecérselo a tu hermano -
- jajaja, ya sabes como es -
- sí. -
- oye. -
- dime -
- si hay algo que te preocupe, lo mejor sería que lo enfrentaras -
- ¿oh? - sorprendido.
- convérsenlo con tranquilidad, ¿de acuerdo? -
- ... - sonriendo con unas lágrimas en los ojos - si, lo haré -
- mj, cuídate, te llamaré mañana y podremos salir por un café -
- sí, gracias -
- hasta mañana -
- hasta mañana - colgando. - ngh - llorando.
*Quiero verlo... *
- hic - hipeando.
*De verdad, que quiero solucionar esto*
- nghh - apretando su móvil.
De repente suena el timbre de su casa y se sorprende.
- ... - mirando hacia la puerta sentado en su lugar un momento. Se pone de pie lentamente para caminar hacia la entrada. Confundido, ya que no sabía ni tenía una idea de quién podría ser. Si bien tenía amigos, nadie iba a visitarlo sin antes preguntarle debido a sus horarios en el hospital. Vuelve a sonar. - ... - quedando a unos pasos de la puerta - ¿quién es? - dice suavemente.
- soy yo, abre -
- ¡¡!! - se sacude al escuchar la voz ronca y masculina del pelirrojo tras la puerta.
- vamos, ábreme -
- ... - tragando saliva, tiritando un poco.
- Allen -
- ¡! - sacudiéndose al escuchar su nombre venir de esos labios.
- si no me abres voy a gritar aquí mismo el tipo de gemidos que haces -
- ¡¡!! - asustándose y abriendo la puerta.
- bien - mirándolo fijamente, el albino hacia lo mismo con el ceño fruncido. - lo siento, fue lo único que se me
ocurrió - cerrando la puerta tras él. - ¿puedo? -
- ... - se voltea y camina hasta la sala.
- uff - suspira, quita sus zapatos y entra siguiendo el rastro del albino, el cual se había sentado en su sofá, manteniendo su cabeza agachada. - ¿no vas a decir nada? -
- ... - silencio.
- bien, hablare yo - acercándose a él, hincándose en el suelo frente al menor, tomando su mentón.
- ¡! - mirando fijamente a esos ojos esmeralda que tanto amaba.
- lo siento mucho -
- ¿eh? - sorprendido, su corazón palpitaba a mil.
- de verdad, lo siento mucho -
- ... - a punto de estallar en llanto.
- me equivoque, no tome en cuenta tus sentimientos, soy un bruto y merezco que me odies por eso - tomando sus manos tiritantes con las suyas - no volveré a tocar a nadie más que no seas tú -
- ... -
- pero no me dejes - apoyando su rostro en las manos del pequeño - soy tan inservible sin ti, te necesito -
apretando las manos pequeñas de su amante - soy un hombre bruto, no sé qué hacer con muchas cosas y es la primera vez que me he enamorado de alguien, te juro que no lo hice a propósito - tiritando un poco.
- ¿oh? - notando aquello.
- si tú me dejas voy a morir en vida otra vez -
- ¡! - sorprendido por esas palabras y esa voz frágil.
- no me dejes, por favor, doc -
- ... - pasmado un momento luego levanta una de sus manos y golpea suavemente la cabeza del pelirrojo
- ¡¿?! -
- de verdad - apoyando su cabeza sobre la del pelirrojo - ¿no volverás a hacerlo con alguien más? -
- lo prometo, tu eres al único que necesito y no estaría aquí si no fuera así -
- lo sé, no eres del tipo de hombre que se arrodillaría así - sonriendo un poco.
- te amo -
- ... -
- de verdad que lo hago -
- eres tan tramposo - jalándole el cabello.
- ... - sonriendo y abrazando el cuerpo de su amante como un niño.
- no te perdonare si lo haces otra vez -
- lo sé, no lo haré, lo juro -
- Lavi... -
- ¿? -
- ¿no soy suficiente? -
- ¿oh? -
- ¿mi cuerpo es el que no te gusta? -
- no, no es nada de eso - soltándolo y ambos se miran fijamente - me encanta tu cuerpo - acariciándole la mejilla, limpiándole las lágrimas que habían caído hace un momento - tu eres muy erótico - sonriéndole cálidamente.
- entonces, ¿por qué? -
- por qué soy un idiota, porque pensaba que mi hombría tenía que ver con eso, porque estaba acostumbrado a hacer las cosas de una manera, pero eso no vale la pena si no te puedo mantener a mi lado -
- ... -
- en realidad... - sonriendo - cuando hacia eso con mujeres siempre terminaba pensando en ti -
- ¡! - sonrojándose
- en tu cuerpo, en tu cara... - tocando su cuello suavemente, poniendo una mano sobre las caderas del albino - en los ruidos que haces... - besándole los labios suavemente haciendo que el cuerpo delgado frente a él se estremeciera - en tus expresiones... - aferrándolo más a él.
- uh - jadeando suavemente.
- en tus caricias - pasando su mano por bajo la polera de su albino.
- ngh - tiritando suavemente
- en la forma que me miras y disfrutas cuando hacemos el amor -
- eres tan injusto - tiritando un poco.
- tu querías saberlo -
- ... - apoyando su cabeza en el hombro del pelirrojo. - me sentía tan solo - sincerándose. - cuando pensaba
que esto terminaría, me sentí tan triste -
- ... - sintiéndose culpable por haber provocado esa pena en su pequeño amante.
- no quiero que termine - abrazándose a su amante - no quiero que me dejes, después de haberme enamorado así -
- ¡! - sorprendiéndose y sonrojándose un poco.
- tienes que tomar la responsabilidad de esto, de lo que hiciste con mi cuerpo y con mi corazón - apretando más su abrazo - si me dejas voy a morir de tristeza -
- Allen - abrazándolo también - te prometo que tomare la responsabilidad completa -
- ... -
- te voy a amar toda mi vida, lo juro -
- más te vale - susurrando.
- mj - sonriendo dulcemente.
Ambos se quedan abrazados unos cuantos minutos, mientras sus corazones palpitaban fuertemente y las ganas de OTRAS cosas se iban creando.
- oye... - separándose un poco, para tomar sus mejillas entre sus fuertes manos - ¿tienes que trabajar mañana? -
- no - mirándolo - gracias a ti me dieron unas vacaciones obligadas - enfurruñándose un poco.
- ¿fue así? - sonriendo.
- si -
- entonces... - acercándose a sus labios - ¿puedo tomar eso como un permiso para amarte ahora? -
- ... - sonrojándose - tonto -
- ... -
- cuando te dije que tomaras la responsabilidad - diciendo avergonzado - dije "mi cuerpo y mi corazón" -
- mj, entiendo. - sonriendo y dándole un beso corto en sus labios. - eres la cosa más mona que he visto en mi vida -
- cállate -
- mj - aferrando sus labios gruesos a los del albino, dándole un beso salvaje y erótico, haciéndolo suspirar por lo bajo e hizo que su cuerpo se erizara, en mitad de ese beso el pelirrojo toma el cuerpo de su peliblanco para cargarlo sobre su hombro y llevándoselo a la cama.
- ¡¡waa!! ¡¡puedo caminar por mi cuenta!! -
- nah, así puedo manosearte un poco - tocándole sus nalgas.
- ¡eres un pervertido! -
- sip - sonriendo y poniendo el cuerpo del menor sobre la cama suavemente, subiéndose sobre él, mirándolo fijamente. - pensándolo ahora nunca lo hemos hecho en tu cama -
- ¿eh? -
- no sé si es por el tiempo que ha pasado o por el hecho de hacerlo aquí, pero tengo más ganas de lo normal -
- umm - sonrojándose y poniéndose nervioso por aquel comentario.
- así que perdóname si me dejo llevar - besándole los labios suavemente.
- mnn... - levanta sus brazos sobre su cabeza
- ¿? -
- está bien, quítame la ropa... - entre jadeos - lo tomare como un hombre -
- ¡! - en ese momento en interruptor de auto-control de Lavi se rompió en mil pedazos. Ya lo había sentido su cuerpo también, haciendo que su miembro estuviera completamente rígido y ansioso.- maldición - quitándole la polera presuroso - deja de ser tan erótico. - sacándole su short y ropa interior, dejándolo desnudo bajo a él.
Sus labios se encuentran nuevamente en un beso profundo, las manos agiles del pelirrojo se deslizaban por todo el cuerpo desnudo del ojiplateado, arrasando con sus tetillas, su pecho, sus piernas, sus muslos.
- ngghh ahhh~~ - tiritando sutilmente.
Los labios de Lavi bajan por su cuerpo y separa sus piernas, para poder lamer sus muslos, succionando un poco y dejando pequeñas marcas en la parte interior de esas blanquecinas piernas, sujetando el miembro del más bajo entre sus manos, apretándolo y subiendo su mano de arriba hacia abajo en él, jalándole el cuero para encerrarlo y liberarlo.
- ¡¡ahhh!! - levantando un poco su cuerpo ante el espasmo de ese movimiento. - ngh. -
Al ver esos espasmos sonríe lascivamente para luego acercar su lengua a ese miembro, dándole unas pequeñas lamidas en la punta.
- ¡ahh! - apretando las sabanas bajo el. Una de sus manos por su propia cuenta se dirige a la cabeza del pelirrojo, para empujarlo hacia su miembro.
- ... - mirando este movimiento y sonriendo aún más al notar que su doctor deseaba esa felación con impaciencia.
Con su mano jala la pared de carne que apresa a su miembro, corriéndolo hacia abajo para meterse de lleno el miembro de su amante en la boca, sintiendo a la entrada el líquido pre seminal del sensei.
- ¡¡¡AHH!!! - sintiendo una oleada de placer – uhhh, nnghh - jadeando y moviendo sus caderas para tener aún más atención.
El yakuza continua su trabajo en esa zona, subiendo de arriba hacia abajo con su boca, tocando con una de sus manos uno de los pezones, apretándolos y luego acariciándolos con la yema de sus dedos. Con la otra, tocaba los testículos del otro para darle más placer. Después de un rato, usa una de sus manos para abrir su propia cremallera y sacar su propio miembro, dejando de succionar, besando a su albino mientras junta sus falos para masturbarlos juntos.
- ahhh... nghhh... - apretando los hombros de su amante, mientras ambos se miran entre jadeos, besándose en algunos momentos y luego solo disfrutándose.
- quiero cogerte - le dice bien cerca de su boca, besándole su cuello, lamiéndole su oreja.
- ngh - tiritando por esas obscenas palabras que se colaban por sus oídos por todas sus venas.
- ¿tienes un condón? -
- si - susurrando. - en el cajón -
- ... - incorporándose para sacarlo de su escondite, abriéndolo con la boca para luego colocárselo, se pone en la entrada del albino, usando un dedo para bordearlo.
- mngh -
- voy a prepararlo un poco -
- n-no -
- ¿? - mirándolo.
- no puedo aguantarlo... - mirándolo rogante - solo ponlo dentro -
- ¡! - otra vez sintió su interrumpir romperse. - te puedo hacer daño -
- no - sonriendo dulcemente - sé que no lo harás - tocando su rostro suavemente.
- ... - mirándolo cautivado.
- ven... - tomando su miembro acercándolo más a su propia entrada, metiendo la punta - nghh - tiritando - tómame -
- ¡¡!! - empuja el cuerpo del menor y levanta sus piernas un poco y se mete lentamente dentro de él.
- nnghh - apretando sus manos, sus ojos y sus labios.
- relájate - suspirando mientras las paredes del albino se aferran a él, apretándolo. - oh - jadeando.
- ahhh~~ - tratando de controlar su propia respiración.
Cuando ya está dentro de el por completo, espera un poco para acostumbrarse ambos a esas sensaciones.
- ¿duele? -
- n-no. - mirándolo de reojo
- ¿? - viendo que frunce un poco el ceño.
- ... - se aferra a las pocas fuerzas que tiene su cuerpo y levanta sus brazos, llegando hasta la camisa del pelirrojo,
jalándola - quítatela - sacando algunos botones.
- mj, ¿quieres verme desnudo? -
- si - sonrojándose, pero mirándolo lascivamente.
- eres realmente un pervertido - desabotonando su camisa, quitándosela, dejando ver todo su torso fuerte y parte del tigre en su espalda que sobresalía por su hombro.
- ... - suspirando al ver a su guapo amante en su máxima expresión.
- mj... - acercándose a sus labios - me estas devorando con tu mirada - besándolo.
- mnn - aferrándose al cuello de su Lavi, mientras juegan con sus lenguas dentro de su boca.
A los pocos segundos, el activo comienza sus suaves, pero certeras envestidas, tocando ese punto de placer que tenía dentro de sí el doctor.
- ¡ahhh! Mnh, ahh... - dejando salir sin tabú sus gemidos, mientras es envestido continuamente. Sin sentir nada de dolor a pesar de no haber sido preparado correctamente. Su cuerpo estaba tan encendido que lo único que podía sentir era el placer y en un punto, la voz de su amante parecía borrosa y después de su último gran espasmo, se quedó profundamente dormido en los brazos de su amante.
HORAS DESPUES.
- nghh - abriendo sus ojos suavemente, mientras lo que hay frente a él se va haciendo paso en su campo visual, las cortinas de su alcoba estaban semi-cerradas, dejando ver tenue el atardecer entre los edificios. - uhh - suspirando y cerrando sus ojos suavemente - "dormí tan bien" - sintiéndose refrescado. Había dormido muy poco las últimas noches a causa de su problema con Lavi, por lo que no había estado sintiéndose muy bien, pero ahora eso ya parecía no haber sucedido. - ¿? - sintiendo un leve aroma delicioso, abriéndole paso a un nuevo sentimiento, el del hambre. - ... - abre sus ojos y se sienta en su cama y luego pone sus pantuflas, nota que esta vestido con una camiseta y su ropa interior, se coloca un pantalón de buso sobre su cuerpo y camina hacia la cocina - ¿oh? - viendo a su amante salteando unas verduras en el sartén con su delantal de cocina. La mesa estaba puesta, el arroz caliente y en cuencos dobles, al igual que el pescado, la soba y la soya. - Lavi - susurra.
- ¡! - se voltea - mj, buenas doc - sonriéndole. - está casi listo, siéntate. - apagando el fuego de la cocina.
- emm - sentándose - no sabía que cocinabas - viendo la comida, parecía deliciosa.
- mj - acercándose y sirviendo los vegetales - no siempre he tenido mujeres ni subordinados que esclavizar - riendo
- ... - mirándolo.
- ¿mm? - quitándose el delantal
- es cierto, nunca me has contado que hacías antes de ser un yakuza -
- ... - callando un poco - bueno… - sentándose - ya habrá tiempo para eso, ahora comamos - sonriendo.
- está bien - no podía decir que no, moría de hambre. Separa los palillos - gracias por la comida - probándola - ¡oh! -
- ¿te gusto? - viéndolo comer.
- está muy bueno -
- me alegra que te guste - comiendo también.
- esta rico - feliz.
- mj. - sonriendo - ¿está bien tu cuerpo? -
- si. - sonrojándose.
- estaba un poco preocupado, te quedaste dormido a penas terminamos, quizás fui muy duro -
- no - hablando suavemente - solo estaba cansado, no había dormido bien -
- mmm... - mirándolo - debo disculparme por ello -
- está bien, ya está en el pasado -
- así que... ¿no eres rencoroso? -
- no -
- mj, eso es tan del doc -
- ... - mirándolo de reojo
- tu padre llamo mientras dormías -
- ¡¿oh?! - sorprendido.
- le dije que habíamos bebido un poco, así que no debes preocuparte por darle alguna escusa -
- oh -
- deberías llamarlo después de comer -
- lo haré - pensando - ¿dijo algo más? ¿está bien? -
- si, dijo que estaba sintiéndose muy bien con el tratamiento, que ya podía hacer cosas rutinarias que antes no... -
- mj, me alegra mucho saberlo - sonriendo cálidamente.
- ... - mirándolo - también dijo que te dejarás mimar por mí - sonriendo
- ¡por supuesto que no dijo eso! -
- mjejeje... -
- gracias -
- ¿? -
- por cuidar de él, de verdad estoy muy agradecido por lo que estás haciendo -
- no tienes que darme las gracias, lo hago porque quiero -
- ¿por qué quieres? -
- sí, ¿qué tipo de hombre sería si dejara a mi suegro sentirse mal? -
- ¡no le digas suegro! -
- mjejeje. - riendo - yo quiero cuidar lo que es preciado para ti -
- ¿oh? - conmoviéndose
- es lo que quiero y puedo hacer por ti, así que... - mirándolo fijamente - porque si haciendo eso puedo ver
esa hermosa sonrisa en tu rostro es suficiente para mí - comiendo nuevamente.
- ... - sintió como se había vuelto a enamorar de ese hombre y sonríe suavemente.
- entonces ~~ ¿qué haremos en nuestra semana libre? -
- ¿nuestra? -
- sip, voy a auto-invitarme y me quedaré aquí todo lo que queda de semana, ¿no es genial? -
- espera, ¿qué pasa con tu trabajo? - insistía en pensar que era raro llamarle a los actos de un yakuza "trabajo"
- no te preocupes por eso, los chicos podrán hacer algo... supongo. -
- ¿supones? ¿tus superiores no se enojaran? -
- está bien, ya deje a alguien para que se encargará de todo, estará bien -
- aun así dejar tu trabajo es… -
- está bien, está bien ~~ -
- mmm... - suspirando, de todos modos, dijera lo que dijera no haría cambiar de opinión a ese hombre testarudo y llevado a sus ideas. - ¿le avisaste a Tsuchiya-san que vendrías? -
- ¡! - crack. Había tocado un punto muy sensible
- ¿? - viendo llamas salir de su amante y recordando lo que había sucedido días atrás - "¡¿será que esta celoso!?" -
- por qué te preocupas tanto por Tsuchi, siempre es "Tsuchiya-san esto, Tsuchiya-san lo otro" ¡es molesto! - con el ceño fruncido.
- mmm... - pensando en algo - solo me preocupo por él -
- ¡¡¿qué?!! -
- eso es -
- ¿¿¡¡POR QUÉ!!?? ¡¿¿QUÉ ACASO TE GUSTA??! - fuera de sus casillas.
- mmm... - pensándolo - un poco -
- ¡¿¿QUUUUUUUUUUUUUUUEEE??! -
- mj. - sonriendo al verlo salirse de sus casillas - "lo siento por Tsuchiya-san, pero molestarlo es tan divertido" -
- ¡¡VOY A MATARLOOOOOOOO!! -
...
- ¡achus! - estornudando
- Aniki, ¿estas resfriado? -
- no - rascando su nariz - pero tengo calosfríos~~~ -
...
- sí, me alegra mucho que estés bien - hablando con su padre por teléfono. - mj, claro, se lo diré de tu parte - mirando de reojo a Lavi, el cual esperaba en el sofá leyendo el periódico. - está bien, cuídate tú también sigue el tratamiento, ¿de acuerdo? - esperando - mj, yo también, muchos besos, adiós - colgando y sonriendo cálidamente. Deja el móvil sobre la mesa y camina hacia el pelirrojo.
- ¿todo bien? -
- si - sentándose a su lado - su voz se escuchaba muy bien, estaba contento - sonriendo cálidamente.
- eso es bueno - sonriendo también.
- si - apoyando su cabeza en el hombro de su amante. - estoy tan feliz - cerrando sus ojos
- mj, te ves feliz -
- ... - quedándose en silencio, llenándose de su propia felicidad.
- ... - mirando ese rostro tranquilo y hermoso, deja el periódico a un lado y acerca sus labios al del albino, reclinándose un poco, besándolo suavemente. Por la sorpresa Allen abre los ojos
- ... - quedándose así mientras es besado.
- mj, lo siento, no pude aguantarme - sonriendo infantil.
- ... - mirándolo y luego el mismo junta sus labios con los de Lavi, ahora el sorprendido es el mayor.- no pude aguantarme - sonriéndole.
- mjejeje... - ambos se ríen y vuelven a besarse románticamente, Allen empuja el cuerpo del pelirrojo a lo largo del sofá recostando su cuerpo sobre el del mayor.
- vaya... no sabía que podías ser tan activo, doc - fascinado por las nuevas facetas que estaba mostrado su gatito.
- ya te lo dije, yo también soy un hombre - mirándolo fijamente
- sí, eso puedo notarlo - bajando su mano y poniéndola sobre el miembro del menor por sobre la ropa.
- nghh... ¡¡oye, no toques!! -
- no seas tacaño, no después de haberme empujado así - manoseando.
- mnn, tonto - jadeando.
- lo de antes... - susurrando en su oído - no fue suficiente, ¿verdad? -
- no... - avergonzado pero honesto.
- ya lo había supuesto - sonriendo. - vamos a ponernos al día, ¿de acuerdo? - pasando su mano por debajo de la ropa.
- nghh... - tragando un poco de saliva
- ¿me dejas? -
- ya, ¡solo hazlo! -
- de acuerdo, de acuerdo. -
* Sentí como si todo hubiera regresado a una sincronía, una perfecta y maravillosa sincronía *
DIAS DESPUES.
- ¿tienes todo? -
- si - cargando un bolso que uno de sus hombres le fue a dejar un día después de haber decidido por sí mismo quedarse una semana en casa del doctor.
- bien -
- mj, te llamaré en la noche, ¿de acuerdo? -
- si - ambos llegan a la entrada.
- mañana regresas al trabajo, ¿verdad? -
- si -
- mmm... - enojándose un poco.
- ¿? -
- tendremos que volver a la misma rutina de los fines de semana ¿huh? - suspirando.
- ... - conmovido por ese puchero de niño abandonado - mjejeje - riéndose.
- ¿qué? - enojándose.
- no es nada, mjejeje -
- ¡ya deja de reírte de mí! -
- mj. - mirándolo fijamente.
- ¡¿qué?! - nervioso.
- eres un niño bobo - jalándole la camisa para acercarlo y poder darle un beso.
- ¡! - sorprendido. Se deja llevar y aferra el cuerpo del peliblanco a él, profundizando el abrazo.
- mnn - tratando de seguir el ahora, beso apasionado. - ya - tratando de correrlo - no sigas, nghh -
- ¿no podemos tener un revolconcito? - excitado.
- ¡no! ¡ya hicimos eso! ¡hace 5 minutos! -
- solo un poquito ~~ -
- ¡¡no!! - apartándolo. - ¡ya vete! - empujándolo y abriendo la puerta.
- está bien, está bien, me voy - saliendo
- ... - mirando hacia abajo, viendo el auto negro de Lavi al otro lado de la calle. - Lavi -
- ¿mm? - mirándolo.
- podemos salirnos de la rutina de vez en cuando, ¿no crees? - sonriéndole.
- ... - cautivado – mje, me parece perfecto -
- mj -
- ven aquí - jalándolo y besándolo profundamente otra vez.
- ... - dejándose. - no hagas eso fuera. - le dice cuando se separan.
- sí, aunque no convence tanto cuando lo dices sonrojado así - tocándole las mejillas.
- ¡ya vete!~~ - empujándolo.
- mjejeje, si, si... - yéndose.
- ¡Lavi! -
- ¿? - volteándose.
- envíale saludos a Tsuchiya-san de mi parte - sonriendo ampliamente.
- ¡¡!! - crack. Corre hacia su auto.
- mj, idiota - susurra y entra a su casa.
El pelirrojo sube a su auto.
- Jefe, no debería hacer esas cosas donde pueden verlo - le dice su leal Tsuchiya que había visto todo el espectáculo.
- ... - mirándolo asesinamente.
- ¿qué? - tragando saliva.
- ¡¡¡¡¡VOY A MATARTE!!!!! - ahorcándolo.
- ¡¡¡ARGH!!! ¡¡¿¿¿¿¿POR QUÉ YO?????!! -
- vaya, vaya~~~ - apoyada en un árbol - tenemos una gran primicia aquí - mirando su móvil, en ella se reflejaba una fotografía tomada en el momento preciso en que Allen y Lavi se habían besado - ahora tendrás que tomarme en serio, Ryuuzaki-chan ~~ - sonriendo.
CONTINUARA.
ATTE
~~MYVmaru~~