Capítulo III: “Transbordo 2ª parte: Corre que te pillo”
Eunhyuk llevaba ya un buen rato dando vueltas en la tienda en busca de Kyuhyun, le conocía bastante bien como para saber que se traía algo entre manos. Después de 30 minutos se estaba comenzando a asustar, solo se había topado con Donghae, no se lo preguntó, pero por la cara de preocupación que tenía supo que tampoco había logrado encontrar a esos dos.
Al final terminaron juntos recorriendo la tienda, al haberla revisado de cabo a rabo si estaban asustados.
-Quizás solo fueron por un refresco –sugirió Donghae.
El bailarín solo le ignoró aunque tomó en cuenta lo que dijo y se dirigió a la salida con el otro detrás, caminaron hasta el único local que vendía alimentos en la cuadra; una heladería cercana, pero solo había un grupito de chicas que al verlos dieron grititos, pero como no entendió que es lo que decían no les prestó mucha atención.
Fue hacia el dependiente quizás el había visto a los otros dos por ahí.
-Excuseme –Algo inseguro le habló esperaba este le entendiera aunque no fuese el idioma del país y aunque él tampoco fuese muy bueno en ingles- ahm... two Korean?
El dependiente le miro confundido.
-Icecream? –Le apuntó la maquina con los sabores.
-No... Korea boys –Se sentía algo cavernícola hablando así- two friends...
Le volvió a mirar confundido hasta que entendió y se rió.
-Oh! Two korean guys?-
-Yes! My friends –sonrió, al fin le había entendido.
-Ahm they bought two icecreams like twenty minutes ago-
-Oh –En ese tiempo ya deberían haber vuelto a la tienda- thank you.
Al girarse chocó contra Donghae.
-¡Imbécil! ¡Ten cuidado donde te paras! –le dijo molesto- pude haberme lastimado...
Se calló, el grupito de chicas de antes parecía haber aumentado considerablemente mientras hablaba con el dependiente, ya había cerca de 30 chicas a su alrededor, quizás era por eso que Donghae había retrocedido hasta donde estaba él.
-Dime que solo hacen la fila para comprar helado –
-Esperaba lo mismo, pero –Le miró con miedo- una dijo claramente “Super Junior” y nuestros nombres ¿Qué hacemos?
Miro a su alrededor, la salida la tenían tapada ellas, no tenían forma de escapar por ahí y no parecía del tipo de locales que tiene una salida trasera, vio el baño, esa era su única salvación.
-Vamos, por aquí –Hizo que el otro le siguiera, por suerte los baños estaban divididos por sexo.
Entraron corriendo mientras la turba se movía al mismo tiempo que ellos, alcanzaron a cerrar la puerta con seguro, no parecía que ellas se iban a mantener afuera solo porque ese era el baño de hombres.
- o – o – o – o – o – o-
Luego de comprar los helados Kyuhyun sugirió que se los tomaran paseando a lo que Sungmin respondió entusiasmado que sí. Entraron a una gran galería de esas con muchos pasajes y bastante que ver.
Esa era la 2ª parte del plan del maknae, entretener a Sungmin para que no se acordase del Eunhae hasta que ya estuviesen bastante lejos como para volver, sabía que su plan podía ir bastante mal, los chicos realmente se podrían perder y ahí estarían todos en problemas, pero es por eso que había pensado en volver por ellos al rato, no creía que fuesen tan idiotas como para salir a pasearse por ahí sin conocer la ciudad.
-Hyung ¿Quieres ver algo genial? –Recordó otra tienda que había visto por ahí, y que por lo poco que sabía de él, le iba a encantar.
-¿Hum? –Este tenía la boca llena con el cono del helado.
Kyuhyun no pudo evitar echarse a reír, parecía un niño pequeño así, sin que el otro entendiera y aún entre risas sacó su celular y le tomó una foto. El otro al notarlo masticó rápido y tragó mirándole entre enojado y avergonzado.
-Eres un mal dongsaeng –Hizo un leve puchero- borra esa foto.
Kyuhyun estaba de piedra.
Responde Kyuhyun, ¡Maldición reacciona! Se decía a sí mismo, ver a Sungmin sonrojado y haciendo un puchero le estaba pasando la cuenta, ¿Cómo lograba embotarlo de esa forma con cada gesto?
Sungmin en tanto le miraba fascinado, nunca había visto al maknae de esa forma, tenía las mejillas ligeramente sonrojadas y la boca levemente abierta, y si se le suma a eso que miraba hacia el vacio, no sabía cómo definirlo, sería correcto decir que se veía insólitamente lindo (?)
Agitó su mano frente a la cara del menor para despertarle, nada, ¿Qué sería lo que le tiene así? Bueno, aprovecharía el momento, esta vez fue él quien sacó el celular y le tomó una fotografía.
Con el sonidito del celular Kyuhyun despertó y Sungmin se rió como nunca.
-¿Qué pasó Kyuhyun? ¿Viste pasar un ángel?-
Podría decirse que si, dijo para sus adentros el menor.
-No es nada Hyung –desvió la mirada avergonzado.
-Anda dime –le dio un pequeño codazo juguetón en el costado- te juro que no le diré a nadie –Sonrió.
-Que no es nada –
-No puede ser nada -Puchero otra vez- Estabas mirando en mi dirección y de la nada te paralizaste y pusiste esa cara tan li... tan rara...
El maknae en parte se asustó, sabía hacia donde miraba, pero prontamente se sintió aliviado, no había asociado ambas cosas ¿Entonces no había notado que le observaba a él?
Sungmin miró alrededor, concretamente buscaba a alguien que hubiese estado en la dirección directamente detrás de él, y la encontró.
-¿Kyuhyun mirabas a esa chica?-
El nombrado miró en aquella dirección, figura esbelta, largo cabello marrón y un lindo vestido blanco que marcaba su figura, la verdad era una chica bastante linda, pero nada tan sorprendente como para llevarse siquiera un minuto de su atención, no como Sungmin por lo menos...
Se puso rojo ¿De dónde había salido ese pensamiento?
Su compañero miraba a la chica y a Kyuhyun, y luego repetía la acción una vez más, este se había puesto rojo mirándola, en cierto modo eso no le gustó.
Ella comenzó su marcha.
-¿Qué te parece si la seguimos? –le guiño un ojo y sin esperar respuesta empezó a caminar como si nada pasara.
-¡Hyung no podemos hacer eso! –Le miraba sorprendido el otro mientras le alcanzaba- ¡Si nos descubre estaríamos en problemas!
-Shhh... –Le hizo callar- tú solo camina.
- o – o – o – o – o – o-
’Cause I’m a rockstar b34;~
Ese trozo de “Rockstar” vino de repente a la cabeza de Hyukjae mientras ayudaba a Donghae a salir por la ventana del baño, se sentía un tanto avergonzado de estar en esa situación.
La única alternativa que les había quedado una vez se encerraron en el baño era la ventana.
Punto a favor; era lo suficientemente grande como para que salieran por ella.
Punto en contra; estaba muy alta como para que Donghae subiera por sí solo.
A Eunhyuk eso le valía, si hubiese sido por él, hubiese dejado ahí abandonado a su suerte al pez, pero por otro lado Leeteuk con seguridad le lincharía si volvía a aeropuerto sin él.
Así que ahí estaban, Donghae con medio cuerpo afuera mientras él le empujaba por detrás, terminó aburriéndose de la lentitud del otro y le empujo con toda su fuerza para que saliese de una vez. Se escuchó el grito de Donghae y un sonoro caer de cajas y cosas. Se rió para sus adentros, se encaramó en el marco de la ventana y salió limpiamente hasta el otro lado.
-¿Todo bien mi querido Fishy? –Le preguntó burlón.
Este se limitó a ignorarle y se paró lentamente de donde había caído, tenía un pequeño corte en el pantalón y se notaba una mancha de sangre en ese lugar pero no dijo ni pío.
Y bueno aunque hubiese querido decir algo no tuvieron tiempo ni para ello, porque las chicas aparecieron por un extremo del callejón al cual habían dado y empezaron a correr hacia ellos, lo cual logró asustarlos como nunca y hacerlos salir corriendo despavoridos en la dirección contraria.
Corrieron por varias calles y por suerte tenían buena condición física gracias a los ensayos, sino esas chicas ya hubiesen puesto mano sobre ellos.
-¡¡Agh!! ¡¡Ya déjennos en paz!! –Gritó Donghae aun en carrera.
-Si con seguridad eso hará que se rindan –Le respondió Eunhyuk con sarcasmo- Y yo que creía que no podías ser más imbé...
Un puesto de frutas se había materializado de la nada delante de él y chocó de lleno, las frutas cayeron y junto con ellas Hyukjae. Quedó enterrado bajo naranjas y manzanas además de algunos trozos de madera resultantes de sus contenedores, el golpe le dolió hasta el alma e hizo que quedara un rato tirado ahí.
Donghae Había seguido corriendo, tratando de ganar distancia de su compañero porque ya estaba harto de sus insultos, hasta que sintió todo el ruido y volteó a ver.
-¡Hyukjae! –Volvió hasta él y le tomó del brazo para ayudarle a incorporarse- ¡Vamos! ¡No es tiempo de quedarse descansando! ¡Muévete!
Ya antes habían tenido la experiencia de ser agarrados por una turba de fans; ropa rasgada, piel rasguñada, tirones de cabello, algún que otro golpe y ni hablar de los agarrones que les daban en ciertas partes. Amaban a las Elf’s pero entre tanta emoción y sin guardias a veces se volvían un poco locas.
-¡Idiota muévete! –
Logró ponerlo de pie y comenzó a tironearlo acelerando el paso, no deseaba volver a pasar por ello. En el rato en que habían estado quietos, ellas casi los habían alcanzado, necesitaban salir de su vista de una vez, no iban a ser capaces de correr por siempre.
En la calle de enfrente vieron un parque y corrieron hasta adentrarse en el, en una de las vueltas vieron unos grandes arbustos.
-¡Aquí! –
Llevó a Eunhyuk hasta ahí e hizo que se metiese entre las ramas con él y se agachara a su lado, escucharon a las chicas pasar por ahí y quedarse quietas un rato, debían estarse preguntando a donde habían ido, pero después de unos agobiantes minutos ellas continuaron su camino.
-Uff –Suspiró agotado Donghae- ¡Al fin libres!
Hyukjae en tanto se volvió a parar y puso su mano en sus costillas acompañando el movimiento con un gesto de dolor, Donghae le observaba desde abajo preguntándose qué le pasaba, hasta que cayó en cuenta.
-¿Te heriste al caer no? –Le interrogó.
-No es nada –Otro gesto de dolor- Solo un pequeño golpe.
-Levántate la playera –le ordenó.
-No –
-Hazlo –
-¡Que no! –
-¡¡Que la levantes Hyukjae!!-
El otro a regañadientes lo hizo, el pez observó con genuina preocupación las costillas de su compañero, en las cuales se veían un par de marcadas líneas rojas.
-¡Demonios! –Exclamó Donghae- Espero no te hayas quebrado nada.
-No lo sé –Le respondió Hyuk al tiempo que se volvía a cubrir con la playera- pero duele bastante.
Se quedaron un rato callados mientras renovaban energías.
-Salgamos de aquí –Dijo Hae levantándose también- Busquemos algo para ayudarte con el dolor.
Se metieron nuevamente entre las ramas para empezar a caminar de vuelta por donde llegaron, cruzaron la calle, pero al llegar a la esquina un hombre les estaba esperando, les miraba muy enojado y les empezó a gritar, no entendían nada de nada, hasta que el apuntó un poco más allá a un destrozado puesto de frutas.
Ambos se miraron y sin pensarlo dos veces corrieron en dirección opuesta a aquel hombre.
-¡¡ESTOY HARTO DE CORRER!! –Gritó Donghae desahogándose.
Continuará...