POV JI
Despertar siempre ha sido un problema para mí, sin embargo tenía trabajo. Tenía que preparar MI canción para que dejara de ser solista y que fuera del grupo. Ahora que lo recuerdo ¡Yo estaba enojado! No voy a salir así de fácil de la cama.
−Ji…despierta tienes que levantarte – me decía un dulce Seung. Pero lo prometí ¡No me levantare de la cama! – Ji…si finges estar dormido utilizare métodos cada vez más crueles.
¡Ja! Como si lo fuera a hacer, no le creo.
De pronto siento como me toma de un brazo, pero como yo fingía estar dormido deje que me tocara sin poner resistencia. De pronto siento como toca levemente mi axila con sus dedos ¡Me estaba haciendo cosquillas! Pero como soy un actor genial (cuando me conviene) me aguante y no me moví nada. Luego hizo lo mismo con la otra mano.
−Ji…despierta – dice meloso, sin embargo no me muevo. – vamos Ji, no quiero ser tan cruel…- de pronto siento como mis manos son apresadas con algo suave ¿Qué me hará? – Ji te lo pido bien por última vez - ¿Por qué tanta insistencia en que despierte?
De pronto siento como una mano toca suavemente mi torso por encima de mi ropa. Primero toda su mano tocaba suavemente todo mi torso, después sentí como con dos de sus dedos hizo “piernitas” y las hizo caminar cerca, muy cerca de mis pezones.
No decía nada, y no lo necesitaba. Me quería excitar, punto.
Yo seguía sin hacer ningún movimiento seguía “durmiendo” aunque, recapacitándolo yo seguía enojado y si él seguía con sus torturas plenamente deliciosas mi enojo pasaría al olvido. Tenía que pararlo, tenía que detenerlo, tenía que…
El continuó, y levanto mi playera de dormir hasta que mi pezón izquierdo estuviera a la vista mientras que con sus dedos seguía tocando mis pezones, acercó su boca y empezó a chuparlo, lamberlo, degustarlo mientras yo, seguía durmiendo.
Ante mi negación soltó un par de gruñidos un tanto graves por la excitación que él tenia y prosiguió. No recuerdo cómo pero ya estaba desnudo de la parte de arriba; mientras que su boca se concentraba en mi pezón derecho y en mi cuello con sus dedos descendió hasta la orilla de mi pantalón, recordándome mentalmente que no traía puestos los bóxers.
El no esperaba mi aprobación, después de todo estaba “dormido”. Solo introdujo sus dos dígitos y fue en busca de mi glande. Su boca no se despegaba de mi cuello y labios, en ocasiones la nariz tratado de que expresara algo cosa que (aunque difícil) lograba hacer. Se separo un poco de mi para quitarme el pijama por completo.
Mi miembro estaba erguido, eso no lo podía evitar ni aunque realmente estuviera dormido. Seguía con su placentera estimulación con sus dedos y su boca en mi cuello. No sabía qué hacer, ¡Despierta y aléjalo! Gritaba mi voz interior que aun seguía enojada, pero por otra parte, la carne es débil.
–mm…- se escucho un gruñido por parte de Seung.
De pronto dejé de sentir sus caricias, ya no me tocaba. Tenía un gran problema entre mis pantalones y no era porque me acabara de despertar (seguía “durmiendo” de lo lindo), era SU culpa y él tenía que pagar.
Lentamente siento como su peso va desvaneciéndose de la cama, tengo que hacer que termine ¿Dónde quedó mi enojo?
–mmhh…¿S-Seung? – finjo estar despertando. Pero no escucho respuesta.
–Buenos días Ji Yong – dice fríamente. Estaba apoyado sobre una pierna reposando en la pared, de brazos cruzados y una mirada muy…diferente.
¡¿Qué hago?!
–Buen día – sigo fingiendo.
–Te has quedado dormido, ya vas tarde. – sigue con su frialdad ¿Realmente cree que estaba dormido?
–Si…
–Te veo en la empresa. – responde dando por terminada la conversación – Adiós – dice como remate antes de dirigirse hacia la puerta – por cierto – se detiene por un momento
–¿Si?
–Tienes un problema algo grande entre las piernas.
De inmediato dirijo mi mirada hacia mi entrepierna ¡Pero qué hijo de fruta! Si ¡él me tenia así!
–¡Pero tu…! – demonios.
–¿Yo qué? – de nuevo su frialdad ¿Qué es lo que le pasa?
–Nada – tonto.
–…
Con su silencio estruendoso se retira ¿Qué fue eso?
~~~
En la YG
Estaba solo.
SeungRi y Taeyang se quedaron en casa, Dae se encuentra en la sala de ensayo y Seung. ¡Ja! Seung brillando por su ausencia.
Todavía, después de que tengo que editar la canción para los cinco, ninguno de ellos está conmigo. Esto no estaba bien.
Abrumado, salgo de la sala y me dirijo a buscar a Seung. Hasta que lo encontré.
–¡Seung! – grito alzando las manos para que me vea - ¡Seung! – vuelvo a levantar la voz hasta que lo veo.
Estaba cómodamente platicando con una bailarina; su plática debía de ser muy tranquila por la expresión de su cara, cuando me fui acercando más hacia él, vi una escena no muy agradable.
Cada toque de él hacia ella aunque sea mínimo ella hacia movimientos junto con sonidos muy…extraños llegando a tocar lo erótico ¡Y él no hacía nada! ¿Y por qué lo defiendo? Él no debería tocarla para eso me tiene a mí.
–¿Ji? – su expresión era serena, como si no temiera a nada ¿Qué está pasando?
Sin decir nada me retiro, si él quiere jugar…juguemos.
–¡Ji! – ahora ¿Quién está gritando?
Como si mi vida dependiera de ello, corrí (casi volé) hasta el estudio; después de todo, tenía trabajo.
–Ji… - dice al entrar a la sala.
–¿Si? – digo mirando al computador.
–… - se quedo en silencio que yo ignore - ¿Cómo vas?
–¿En qué?
–Con la canción.
–Voy bien…algo aburrido, tal vez para ti sea mejor… - ¡Dios que voy a hacer! Me muerdo la lengua y callo ¡No soy la típica novia celosa!
–¿Si?
–Ir a ensayar con Dae – uff me salve – el baile será algo complicado al ser en grupo y…
–No quiero – dice cortante y a la vez como un niño.
–Ok… - sigo concentrado en el computador, no tengo ganas de jugar.
De pronto siento como su mano toca sin compasión mi entrepierna.
–¡Seung!
–Vamos Ji, juguemos un rato – no es una petición es más bien una orden.
–No quiero – esto parecía tan surrealista que pensé que alguien mas había hablado…pero fui yo.
Se dirigió a la puerta y le puso llave se regreso a mí y con ojos lastimeros se puso en cuclillas.
–Ji – suspiró – vamos a jugar.
Su voz era demandante, ahora si estaba en problemas.
–Seung, tengo que entregarle esto a Teddy hyung, no puedo detenerme a jugar
–Que yo recuerde no querías hacer esto ¿me estás evitando?
–¿Qué? Seung ¿Qué tienes? Hoy estás raro, háblame cuando te encuentres mejor.
–No Ji – y con enojo movió mi silla corrediza hasta que el respaldo chocara con la pared – tú eres el raro hoy.
–Se…mnh…¡Seung Hyun! – empezó a besarme con necesidad y le correspondo, yo también lo necesitaba, en la mañana tuve que solucionar mi problema solo, lo necesitaba.
–Te necesito Ji. – jadea en mi oído, mientras que con su mano empieza a quitarme los pantalones.
–Yo…te necesitaba en la mañana, tonto – levanto mis caderas para facilitarle el trabajo.
–No te creo – me dice triste ¿me dirá ahora que es lo que le molesta? – no me lo pediste.
Levanta mi camiseta y me deja completamente desnudo ante sus ojos y comienza a besarme y a dejar marcas por todo mi cuerpo.
–P-pero te fuiste – su boca sobre mi cuello es de lo más placentero que he sentido en la vida y nunca me cansaré.
–Mnhh – gruñe contra mi oído – ambos sabemos que no estabas dormido – me lambe y muerde el lóbulo de la oreja.
Me había descubierto ¿Qué decir? Nada.
–Me dolió ¿Sabes? Yo solo quiero que gimas para mi, que no te retengas, que solo yo pueda oírte y que solo yo pueda tenerte por completo…porque eres mío – lambe dos de sus dedos de una manera completamente erótica y con ellos toma mi glande masajeándolo de una manera deliciosa – a pesar de que lo sabes, no hiciste sonido alguno – toma un poco más fuerte mi miembro haciendo que una oleada de dolor-placer me recorra por el cuerpo.
–Y-Yo no po-podía ha-acer nin-ningún…ahh…ning-gun ruido – digo difícilmente.
–Y ¿Por qué no? – sigue apretando mi miembro ahora con toda su mano, jugando con el glande y descendiendo a la base ¡Me quiere matar!
–P-Porque es-estaba dormido – respondo entre suspiros.
–mmm… - murmura y su cara tiene una mirada diabólica y una sonrisa ladina, estaba pensando en algo malo, y su mirada me decía que yo estaba en sus planes – Como no me convences Ji – comienza a hablar contra mis labios – te perdonare – me besa demandante; su boca decía algo pero sus manos decían otra cosa… - solo si gimes como nunca - ¡Y ahí estaba la condición! Chantajista – quiero que todo el edificio te escuche.
¡Hijo de la gran fruta! ¡Obviamente mi respuesta es no!
Me mira, sus ojos suplicantes y llenos de lujuria, con un toque de ternura y tristeza. Lamentable para mi situación, eso me mataba, sus malditamente hermosos ojos.
–S-Si – digo despacio que solo el escuche. Su boca al igual que sus ojos sonríen. Estoy seguro que no llevara las cosas tan lejos como a poner en riesgo lo nuestro por mis gritos, así que estoy tranquilo.
Se hacerca a mi y me toma entre sus brazos, me eleva y estando los dos de pie me acorrala contra la pared.
–¡Hyung! Ji Hyung ¿Estás ahí? – grita Ri del otro lado de la puerta – Ji ¡No te enojes! Nos quedamos dormidos pero vinimos a ayudarte.
–Seung – casi di un gritito – es Ri, nos va a ver, tenemos que…- pero en el momento en que lo trato de alejar para comenzar a vestirme, me acorrala mas todavía y su mano se dirige de nuevo a mi miembro - ¡Seung!
–Cuando dije todos, también los incluía a ellos – dice sonriendo.
¡Que le den!
–No Seung…tenemos que.
–¿Qué tenemos Ji? Tu no querías hacer la canción para los cinco.
–Pe-pero… - tenía razón.
–Te dejaré ir - ¡Ya lo conozco! Así de fácil no me va a dejar – pero solo si continuamos en la casa.
–Si te lo prometo – digo dándole un beso en los labios.
–¡Hyung! Sé que estas enojado pero déjanos entrar, te prometo que me portare bien – sigue hablando Ri detrás de la puerta.
Sigo acorralado contra la pared y miro a Seung algo suplicante
–Mi otra condición es que hagas la canción.- ¿Pero qué? – deja de jugar cartas en la computadora y haz la canción – dice tratando de regañarme, su expresión es lo más lindo que he visto en mi vida.
–Pero… - me había descubierto de nuevo. Aunque arruine mis planes, él es único que me entiende y sabe perfectamente lo que siento, Dios amo a este hombre.
–Por favor Ji todos esperan algo grande de la canción…y yo…yo quiero cantarla, pero porque tu lo hiciste, quiero hacer lo mejor para que estés orgulloso de mi – Dios yo lo mato a besos.
–E-está bien – estoy seguro que estoy más rojo que un tomate en estos momentos. Me da un beso y me da mi camiseta mientras que comienza a ponerme los bóxers y pantalones.
–¡Hyung! ya encontramos la llave ¡Vamos a entrar quieras o no! la canción ahora es de 5 ¡No solo tuya! – sigue gritando.
Seung se recuesta en el sofá como si nada. Yo acomodo la silla corrediza y me dirijo a la puerta “enojado”
–¡Podrías dejar de gritar! – abro la puerta justo en el momento en que iban a meter la llave – ¡estoy trabajando! Por lo mismo que la canción es de 5 necesito pensar bien ¡Podrías dejar de gritar!
–Pero Hyung yo solo quería ayudar – dice en un puchero.
Los dejo pasar y me concentro puramente en la canción, que honestamente me quedo hermosa. Pensándolo bien, se escuchaba mejor que si fuera solista. Las ideas en mi cabeza fluían con las voces de mis amigos; fue más divertido y más lindo. Después de todo somos un grupo, un equipo…somos hermanos.