El día estaba sencillamente hermoso, el sol brillaba calidamente y en el cielo se podían ver diversas figuras que se formaban con las nubes, mientras que el dulce sonido del agua corriendo arrullaba al aprendiz que se encontraba profundamente dormido a la sombra se uno de los árboles.
Todo se encontraba en una equilibrada quietud, que fue interrumpida por otro de los aprendices, el cual al darse cuenta de donde estaba su compañero sonrió complacido de haberlo encontrado por fin.
Se acerco poco a poco, se arrodillo frente a él, le quito uno que otro cabello para poder apreciar el bello rostro de aquel y planto un beso suave en sus labios con el objetivo de despertarlo.
Acción que funciono inmediatamente.
- ¿Afrodita?- dijo con los ojos entrecerrados y la voz adormilada.
Afrodita sonrió dulcemente mientras tomaba la mejilla del dormilón diciéndole- despierta flojo, tu novia y yo te hemos estado buscando desde hace un rato.
- ¿Novia?- pregunto confundido.
- claro, Aioria¿Todavía andan juntos o no?
- ya te he dicho que él y yo no somos novios- reprocho Milo al momento que se incorporaba- somos A-MI-GOS.
- y yo ya te he dicho que los “amigos” no hacen lo que ustedes dos- recordó Afrodita.
- bueno eso tómalo como un bonus extra- dijo Milo sonriendo mientras le ofrecía su mano a Afrodita para que se pusiera de pie y con semblante serio le preguntó- y dime¿Para que me buscaban?
- tengo algo que contarles , vamos apúrate, Aioria debe estar por allá.
-----------Unos minutos después-----------------
Tanto Aioria como Milo miraban asombrados a un victorioso Afrodita.
- no, no es verdad- alegó Milo.
- claro que si, él me correspondió y debo agregar que besa muy bien
- no te creo- continúo Milo.
- de acuerdo- dijo Afrodita.
- no voy a caer.
- bueno, allá tu.
Milo y Aioria se miraron mutuamente, estaba claro que Afrodita se decía la verdad, lo conocían lo suficiente para saber que esta vez decía las cosas muy enserio y entonces Mu…¡MU!
-¡Pero Afrodita!- Aioria lo tomo por lo hombros mirándolo duramente- ¡Y KANON¿Qué harás si Kanon se entera¡Dices que él si te aviso que no iba a estar estos días!
- No creo que se entere, además si se entera le diré que me confundí y que pensé que ya había regresado - contesto cínicamente el aprendiz de Phycis
Aioria lo miro alarmado- no esta bien que te metas con su hermano, no te conviene¿Verdad Milo?.
- ¡CIERTO!- los ojos de Milo brillaban con determinación- ¡Es peligroso!
- ¿Y a ustedes que le pasa?- Afrodita también los conocía lo suficiente (no en vano los había acompañado varias veces a las largas noches de parra) para adivinar que traían algo entre manos
Y en realidad tenía toda la razón de su parte, ya que no solo Milo, si no también Aioria habían tenido al mismo tiempo más de un amante de la misma familia, incluso hubo una temporada en la que el segundo de ellos andaba con la hija, la madre y el primo de una familia del pueblo (obviamente, esa aventurilla no había terminado nada bien, cuando los involucrados con el joven en cuestión se dieron cuenta), así que era extraño escuchar esas palabras de sus amigos que eran tan güilos como él.
Aioria tomo sus manos juntándolas y con ojos que destellaban fuego continuó- no te preocupes, NOSOTROS te cuidaremos para que nada malo te pase- cerro los ojos y respiro hondamente como para darse valor por la difícil tarea auto impuesta que tenía que llevar acabo (o para no comenzar a reír frente a Afrodita- Será mejor que ya no veas a Saga, te cuidaremos hasta que Kanon regrese y te des cuenta de a quien quieres en realidad¿Vedad Milo?
- ¿QUUUEEEEEEEEEEEE!- Afrodita no lo podía creer.
- ¡CLARO QUE SIII!- contestó Milo cuando ponía su mano en el hombro de Afrodita en señal de apoyo.
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Mu se encontraba en sus 30 (ahora 40) minutos de descanso y estaba tomando un reconfortable baño cuando recordó todo eso de la técnica “Tropieza como un tonto”.
- ¡Que tontería!- dijo en voz alta mientras enjabonaba su cuerpo- solo voy a hacer el ridículo; ¿Qué va a pensar él de todo esto?- en su mente comenzó a recrear todo ese plan tan embarazoso, lo peor del caso es que esa misma mañana había intentado hacerlo sin atreverse siquiera a dar un paso y con el corazón latiendo tan fuerte.
“Voy a quedar como estupido” pensó mientras tomaba su jicarita para echarse agua (ya que los pobres santos se bañaban a mentadas de madre; sin regadera)- NO, no, no, y NO¡NO lo voy a hacer!- dijo hablando otra vez en voz alta, tenía pensado continuar (con uno que otro insulto para sus celestinas) cuando la voz de alguien lo llamo.
- ¿MU, estas ahí, MUUUUU
Mu asomo la cabeza por la puerta del baño y grito- ¡Estoy ocupado¿Quién es?
- soy yo Shaka- se escucho un grito que venía de afuera
- ¡Ya vooooooooy, espera- Mu cerro la puerta del baño y tomo su toalla para empezar a secarse “¿Shaka¿Qué querra?.
Cuando al fin estuvo vestido y presentable salio de cuarto (aproximadamente 5 minutos después) e inmediatamente se encontró con Shaka que lo saludo con una sonrisa.
- Hola Mu¿Cómo estas?
- Muy bien Shaka, dime ¿Qué se te ofrece?.
- perdona que te moleste, solo venía a entregarte esta carta, es para tu maestro, por favor dásela cuando lo veas- dijo Shaka entregándole un bonito sobre que olía muy rico.
- Así lo haré Shaka- Mu la tomo en sus manos y se la acerco a la nariz para percibir mejor aquél dulce aroma- mmmmmmmm, huele muy bien.
- ¿Tu crees?- preguntó Shaka.
- si- Shaka incremento la sonrisa- ¿Qué piensas hacer en estos momentos Mu?- le preguntó de repente Shaka.
- pues…tengo pensado comer¿Quieres un poco?.
- ¡Claro, me encantaría- Shaka parecía estar muy feliz.
- En ese caso vamos a la cocina- le dijo Mu mientras se dirigía hacía la dichosa habitación. Shaka lo siguió con la mirada y mientras caminaba detrás de Mu le dijo- Tu también hueles muy bien.
- Es natural, me acabo de dar un baño- decía Mu al momento que ponía a calentar una pequeña cacerola donde tenía sopa.
- Bueno si, hueles a limpio pero…- Shaka camino hacía él para acercar su rostro hasta su cuello, donde aspiro profundamente- también hueles a una deliciosa loción- Shaka se enderezo frente a Mu y mirándolo fijamente agrego- el aroma es muy agradable…exquisito.
Por alguna extraña razón Mu sintió una especie de corriente eléctrica subir desde sus pies, pasando por su espalda, hasta su cabeza. Shaka le regalo otra sonrisa más y luego se dirigió hacía la mesa donde tomó asiento mientras le preguntaba a Mu:
-¿Por qué no la usas siempre?
- porque casi siempre olvido ponérmela- contesto Mu sonrojado al recordar la verdadera razón compuesta por cuatro letras; desde luego no se lo diría a Shaka (suficiente tenía ya con sus dos celestinas) jamás le respondería “Me la puse para conquistar a un hombre que funge como mi tutor, porque hoy tengo pensado hacer un numerito para caer en sus brazos”.
- AAAAAAAAAAAAAAHH, ya veo- dijo Shaka en tono suspicaz.
- toma, la hice yo, espero que no sepa tan horrible, desde que mi maestro esta tan ocupado, yo tengo que hacerme mi propia comida, y…bueno, mejor pruébala- le advirtió Mu a su compañero.
Shaka miro el tazoncito con una cosa extraña y grumosa de un color indefinido entre naranja o rojo diciendo- no creo que sepa tan mal.
Mu se sirvió otro tazón y se sentó a lado de Shaka, esperando a que probara la sopa lo miraba expectante, el otro tomó la cuchara que Mu previamente le había arrimado y dijo- bueno aquí vamos- estaba a punto de probarla cuando…
- ¿MU¿Estas aquí, estaba pensado que sería buena idea desa…- se escuchó la voz de Saga dentro del templo que ahora ya se encontraba en la cocina del aprendiz (muy confianzudo el muchacho) con una cacerola en las manos y que había dejado de hablar cuando se dio cuenta de que sus planes para el desayuno, no podrían llevarse a cabo por cierta interferencia de cabello rubio, que con una cuchara en el aire lo miraba sorprendido por estar ahí - Creo que llegue tarde, ya estas desayunando, bueno mejor regreso después, disculpen la molestia- se disculpó Saga al interrumpir el desayuno de los jóvenes solo porque le habían nacido de repente las ganas de comer con Mu (o mejor dicho las ganas de no estar en su templo, para que ningún Afrodita volviera a asaltarlo con besos pasionales), así que ya se disponía a regresar por donde había entrado.
Mu que hasta ese momento había estado en Shock se levanto rápidamente en dirección hacía Saga diciéndole- No, no es molestia, ma…maestro- Shaka notó un ligero sonrojó en su compañero que continuo- sería un…un honor que nos acompañara a desayunar- decía mientras tomaba de las manos de Saga la cacerola y trataba de no temblar (demasiado), lo ultimo que deseaba era que su querido (adorado) maestro se fuera.
- ¿Están seguros de que no hay problema?- preguntó Saga mirando primero a Mu y luego a Shaka.
- Mu tiene razón, señor, sería un gran honor- contestó Shaka al momento de hacer la acostumbrada reverencia (porque con desayuno o sin el, Saga seguía siendo su superior)
- Siéntese por favor maestro- le dijo Mu señalando con la cabeza hacía la mesa. Y mientras Saga tomaba asiento a un lado del asiento que suponía de Mu para quedar frente a Shaka, Mu ponía la cacerola en la “estufa” preguntando- ¿Quiere que caliente lo que esa aquí?
- Si, traje algo para que no tengas que utilizar tu despensa- le contestó Saga.
Mu hizo lo pedido y después saco de su alacenita un tazón y una cuchara mas, que le dio a Saga y dijo- solo hay que esperar a que se caliente.
- pero no te quedes ahí parado, toma asiento, sigue comiendo tu…tu…- Saga trató de adivinar lo que los jóvenes estaban comiendo y de haber hablado muy rápido habría dicho algo así como “sigue comiendo tu engrudo o sopa grumosa”.
- Sopa- agrego Shaka.
- Si, come tu sopa- le dijo Saga tratando de sonreír y ya cuando Mu se hubo sentado, él mismo tomo su tazón y se puso de pie preguntando- ¿Tienes un poco mas de sopa?- al momento que comenzaba a curiosear por la estufa, encontrando la ollita con sopa.
Mu lo miro alarmado- ¡NO, digo Si…digo…no sabe muy bien.
- No creo que este tan mal, si Shaka puede comerla yo también, además yo tampoco soy muy buen cocinero.
- pues…- Mu no quería que Saga probara su comida, porque ni a él mismo le gustaba; con Shaka no había problema, después de todo si el rubio le hubiera dicho que sabía horrible, ambos habrían terminado riendo y burlándose de la “sopa” e inclusive tal vez Shaka se hubiera compadecido de él invitándole algo, para ese día, sin embargo Saga no era Shaka y Mu no podía decirle que NO a esos preciosos ojos.
- Lo que sucede es que aun no la probamos- dijo Shaka.
- En ese caso Shaka y yo seremos tus jueces- decía Saga (ya no tan convencido con la sopa que se había servido).
De haber podido Mu le hubiera arrebatado el tazón, pero se limito a quedarse sentado y muy nervioso, esperando que ambos invitados probaran su “sopa”, mirando de reojo a su maestro.
Saga tomo su cuchara diciendo- vamos a ver que tal cocinas- movió lentamente su comida (mucho menos convencido que antes) y después de que su cuchara diera unas 20 vueltas al tazoncito, la levanto hasta que le quedo frente a su rostro y la acerco hacía su boca (¿En que estaba pensando cuando se sirvió esa cosa?) e introdujo la cuchara en ella, saboreando su contenido.
Shaka que había decidido dejar que Saga fuera el primer catador, observo con detalle como este se había tardado bastante en probar la sopa con un gesto que cada vez denotaba mayor arrepentimiento, ahora su rostro lucia ligeramente pálido, sus pupilas habían disminuido de tamaño y parecía estar haciendo un gran esfuerzo para (desde su punto de vista) no escupir rápidamente aquello; tal vez no era muy buena idea probar la dichosa sopa, pero sería una grosería para Mu y no podía echarse para atrás enfrente de Saga.
- No eres tan malo Mu- dijo Saga haciendo un gran esfuerzo por sonreír; jamás imagino que Mu comiera esa cosa espantosa, sabía tan horrible que no le faltaban ganas para ir corriendo al baño a vomitar, incluso pensó seriamente en advertirle a Shaka que no comiera eso, pero ofendería a su pupilo, así que continuo- solo te hace falta practicar un poco.
Mu que solo estaba esperando el momento en que Saga comenzara a tomar agua y dijera algo así como “¡ESTO SABE HORROROSO!”, se sintió mejor por haber escuchado aquellas palabras y tratando de no sonrojarse no se percato de que Saga movía levemente la cabeza cuando miraba a Shaka haciéndole entender que no probara la sopa.
Sin embargo el pobre Shaka no tuvo más opción que probar el engrudo que había preparado Mu, sabiendo ya de antemano que no sería muy bueno…eso es lo que pensó…
Porque la realidad es que el sabor era realmente peor de lo que pudo alguna vez imaginar, tuvo que levantar su servilleta (lentamente) y llevarla hasta su boca para no escupir¿Cómo había podido Saga comer aquello, es más ¿Cómo podía Mu cocinar esas cosas, por el bien de cualquier persona el patriarca debería prohibirle cualquier intención de siquiera tocar la estufa.
- Si Mu, la sopa no te quedo tan mal.
Mu sonrió débilmente y se dispuso a probar su platillo. Saga y Shaka se miraban ligeramente alarmados cuando Mu se metía una gran cucharada (de su propia medicina) de su sopita a la boca¿Qué pasó después?...
Mu tan solo se quedo quieto un momento, su semblante denotaba asco, miro su plato fijamente y después asustando a sus invitados se puso de pie repentinamente, golpeando débilmente la mesa con las palma de ambas manos, luego recogió los tazones de Saga, Shaka y el suyo propio, y sin que los primeros pudieran decir ni pió se dirigió con ellos hacía su lavabo, donde tiro el engrudo ese diciendo:
- ¡GUACALA¡ESTO SABE HORRIBLE!- se giró hacía unos sorprendidos invitados diciendo- Disculpen, que los haya hecho comer esa cosa, agradezco mucho que me dijeran que no sabía tan mal- termino la frase sonriendo sinceramente.
Saga y Shaka suspiraron aliviados y el segundo le decía sonriendo a Mu- bueno, no todos nacemos con aptitudes culinarias, apuesto que a la próxima estará mejor.
- Si, eso espero- decía apenado Mu para después dirigir la vista hacía Saga, como esperando su respuesta.
- Yo también creo que la próxima vez te quedara mejor- Saga sonrió levemente y eso para Mu fue suficiente.
- Entonces será mejor que comamos la que trajo usted maestro- dijo Mu con un ligero sonrojo.
- bueno, pero de una vez les digo que no soy muy bueno en eso de la cocina.
Shaka estuvo tentado de decir “mientras no sea Mu, no hay nada peor”.
Y así Mu saco tres platos para servir el guisadito que Saga había preparado; para su gusto no olía nada mal, de hecho olía delicioso, ya se le estaba haciendo agua la boca mientras lo servia y una vez que se sentó lo comprobó “sabe delicioso, perfecto en todo lo que hace”.
--------- Unos minutos después-------------------
Saga, Shaka y Mu, comían silenciosamente en la cocina, aunque el platillo de Saga resultó ser muy rico, ni Shaka sentía confianza en el caballero de géminis, ni Saga sentía lo mismo por el aprendiz de Virgo, eran dos desconocidos, y ninguno tenía la intención sincera de entablar una “amistad” con alguien de ese cuarto que no fuera Mu.
Así pues el ambiente era incomodo, aunque Mu no le dio mucha importancia, en primera porque tenía mucha hambre, en segunda porque estaba sentado al lado de SAGA y se encontraba un poco perdido en sus pensamientos.
----------------------------Silencio incomodo…
- y dime Shaka¿Qué has estado haciendo?- pregunto de pronto Saga.
- entrenar- contesto secamente el rubio.
- aaaaaaaaaaahh- agregó Saga…
--------------------------Otro silencio incomodo…
- y¿Cómo esta su hermano?- esta vez interrumpió Shaka.
- Bien, esta muy bien- contesto Saga.
- que bueno.
-------------------------- Una vez más un silencio incomodo…
- Disculpa Shaka¿Me puedes pasar las servilletas?
- Claro…tome…
-------------------------- Adivinen…si, otro GRAAAAAAAN silencio incomodo.
Y los tres (sobre todo Shaka y Saga) hubieran seguido de esa misma manera entre grandes silencios, durante varías horas más cuando de repente por la puerta principal se escucho una voz que llegaba dando de gritos a los cuatro vientos y llamando a Mu; que por fin pareció despertar de su introspección...
¿Quién será la persona que interrumpio¿Se habran terminado los silencios incomodos?...
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