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I force you to Love Me por Kalooz Doriianz

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Notas del capitulo:

¡Ni Hao! ¿cómo estan?

Yo me congelo completamente por el frío ;u;

 

Había dicho que actualizaría el sabado junto i force you to be happy peeeeeeeeeeero pues mejor de una vez :'3

 

disculpen horrores de ortografía :3

 

Ojalá les guste :)

 

pd: ambos fics se desarrollan en busan, no entiendo porque en el capi anterior puse que estaban en seul, duuuhh, ya lo arreglé como quiera :A disculpen :3

YongGuk

 

 

“¿Qué carajos estás haciendo aquí Zelo? ¿Estas bien?”

“Fuiste tú quien prometió regresar y explicar algo ¿No? Suéltame”

Capítulo 2

Las personas cambian.

Las personas cambian porque así es el proceso de vida que debemos llevar naturalmente. Cuando eres un niño piensas como niño y cuando eres adulto piensas como tal. El mundo funciona de esa manera; Para la gente que vive contigo día a día esos cambios se vuelven nulos, pero para aquellos a quien no has visto en años serás una persona distinta, incluso hasta irreconocible.

Y podría jurar que el chico delante de mí es otro, que es un completo desconocido. Pero mirándolo fijamente me puedo dar cuenta de que es el mismo niño travieso que conocí alguna vez.

Choi JunHong

Pensé en él desde que HimChan mandó las fotos del tal Zelo. Las miré y las miré hasta que de pronto supe que había algo familiar en su aspecto. Ahora que lo tengo delante de mí tengo caigo en total certeza.

Y el cambio es tanto que no pude evitar reírme.

“Eres raro, hyung” Me dijo con un gesto de ¿Desprecio? Muy contrario a la primera vez que lo conocí.

Manejé hasta la casa de JongUp y luego persuadí a Chan de que bajara ayudarle, todo con la intención de dejarlo varado ahí. Si claro, ‘varado’, sabía que debían hablar de sus asuntos, así que no me importó llevarme su auto.

A quien no tomé en cuenta fue al pequeño demonio que se impacientaba en el asiento trasero

“¡¿Qué maldita sea estás haciendo?!”

“Tranquilo Zelo, te dejaré en casa como dije” traté de calmarlo inútilmente, no hacía caso

“¡Pero no quiero ir a mi casa! ¡Debía quedarme con HimChan Hyung en la suya!”

Y recién notaba dos cosas: la primera es que en serio está convencido de ser un chicle con Chan, y la segunda es que no me recuerda en absoluto, aunque no tiene la culpa, yo le gano por 7 años, él aun era joven en aquel entonces.

“¿Por qué debías hacer eso? ¿No eras de aquí? ¿De Corea?” sabía la respuesta, pero quería hacérselo notar

“Sí soy de aquí, pero no tengo dónde quedarme si no es con HimChan”

¿A qué se debía eso? ¿Sólo porque le ‘gusta’? “Pues no va a ser así, sabes que esos dos tienen cosas de qué hablar”

“No me importa ¡Regresemos!”

“Eres bastante berrinchudo”

“¡Eso no te importa!”

Se entretuvo pateando mi asiento desde atrás y traté por todos los medios de no caer en furia. Excusaba sus berrinches diciéndome cosas como que la pubertad tiene la culpa y que le hacía falta madurar.

Debía dejar el auto en la empresa para que HimChan no se quedara a pie todo el día de mañana. Estacioné el auto en donde siempre lo hace el conejo y luego bajé las cosas de JunHong para cambiarlas a mi camioneta. Toqué el vidrio de la ventana y ni si quiera me volteaba a ver, seguía enojado.

Entonces comencé a convencerlo de que no se podría quedar ahí, que moriría de frío y de hambre antes de que pudiera amanecer –que aunque no fuera cierto, parecían hacerle pensar mis palabras- y al final, rechinando los dientes de enojo salió de mala gana del auto.

Sonreí para mi mismo, era un poco cómico que ese angelito pequeño de antes decidiera convertirse en un gruñón y en un chiquillo bastante rebelde, además de creativo. Ya se le hacía que lo secuestraba y luego pedía recompensa por él.

El camino era un poco malo, la lluvia que dijeron llegaría hasta mañana decidió azotar Busan en esta noche, así que manejé con mucho más cuidado.

“¿Entonces iremos a tu casa?” le dije sin voltear a verlo. Ese debía ser su plan B por si ocurría algo. No me contestó y aprovechando una luz roja giré mi mirada para encontrarme con la suya. Aunque la acción se vio truncada porque el peliazul estaba completamente dormido. Tomé la chamarra que llevaba en la parte trasera de la camioneta y se la puse encima.

Pude haberlo llevado hasta su hogar, pero irrumpir en la paz de la estricta familia Choi a las 1:30am no parecía una idea muy grata, además no iba a recorrer todos los edificios pertenecientes a esa familia estando mi casa a 15 minutos.

Me estacioné y bajé primero todas las cosas para llevarlas adentro, luego con sumo cuidado cargué al gigante hasta el interior de mi habitación. Durante el trayecto me preguntaba ¿Qué rayos le habrían dado de comer para que creciera tanto? Con sus pies tumbaba varias cosas de algunos muebles, y de ellas se rompieron algunas junto con mi espalda.

Decidí que haría más ejercicio de ahora en adelante.

Lo dejé ahí sólo por un momento, debía ir por un vaso de agua y subir un poco la temperatura de la casa, realmente hacía frío.

Aún restaba trabajo por hacer, tenía que revisar los documentos de otras agencias de diseño con quienes formaríamos equipo para los futuros festivales de este mes. Las cosas se venían encima como siempre. Encendí mi computadora y comencé a accionar sobre ello, pero me faltaban algunos papeles, por lo que fui por ellos a mi habitación.

Abrí con cuidado la puerta y me hice para atrás del susto, tuve que ver una segunda vez para reconocer que aquel cuerpo sentado sobre la cama era Zelo y no un monstruo. Entré y le pregunté qué hacía, pero no me contestó nada. Lentamente comenzó a deshacerse de la ropa y yo entré en shock

“Hey Zelo, ¡¿Qué estás haciendo?!” le repetí lo mismo un par de veces pero el chico seguía en sus asuntos. Abandonó la chaqueta, la camisa, los pantalones ¡incluso hasta los calcetines! dejándome notar que el chico había crecido demasiado bien durante estos años.

Sonreía con los ojos cerrados, luego tomaba las cobijas y se escondía en ellas.

Y con ello comencé a golpear la pared y a cubrir mi boca, ¡joder! el pobre chico resultaba ser sonámbulo. Quería carcajearme de ello también pero lo despertaría. Me acerqué en silencio y saqué una pijama del mueble junto a la cama, lo moví un tanto para despertarlo pero siempre se volteaba a otro lado, ignorándome.

Después de minutos me resigné y me fui de ahí deseándole buenas noches, mientras sonreía aún.

Las siguientes horas fueron agotadoras, tanto trabajo iba a dejarme inconsciente. Por unos momentos traté de descansar y en esas oportunidades buscaba un tanto de información del chico. Me di cuenta de algunas pequeñas cosas.

Por fin las 10am se dejaron lucir en el reloj. Con el trabajo listo me di el lujo de darme una ducha bastante larga, hoy no tendría que llegar tan temprano como ayer. Tardaría a lo mucho como 1 hora y salí al cuarto restante donde algunas veces dejaba ropa ahí. Efectivamente encontré unos pantalones y una camisa de manga corta. Dejé la toalla en una de las sillas y ya iba a vestirme pero ‘Alguien’ me interrumpe en el acto.

“¿Qué haces aquí? Es muy temprano –le dije serio, pero como el frío acariciaba mi piel decidí cubrirme lo más pronto posible. Sería amable como siempre, pero me dio más vergüenza al ver que seguía mirándome de una forma extraña, como si le gustara lo que viera- ¿También me dirás que soy tu tipo ideal?” recordé como un flash lo de HimChan y le dije aquello en un tono defensivo a lo que él reaccionó mal como lo venía haciendo las últimas horas

“¿Por qué no tenía ropa y por qué estoy aquí?” preguntó en un tono alto

“¿No recuerdas a noche?”

“¿De qué tengo que acordarme?”

“No sé, quizás de que comenzaste a desnudarte a eso de las 2am y no me dejaste ponerte una pijama” se quedó pensativo analizando lo que le acababa de decir

“¿Qué hacías en ese cuarto conmigo a las 2am?”

“Fui por unos documentos, tenía que trabajar y justo ahora tengo que hacerlo también”

“Ya, que casualidad”

“¿Esperabas que hubiese pasado algo diferente?”

“Claro que no”

“Pero eso planeabas hacer en casa de HimChan, ¿No?”

“¿Por qué eres así conmigo?”

“¿Ser cómo?”

“Molesto, idiota, autoritario, y todo lo demás”

“¿Y tú si puedes ser berrinchudo, encaprichado, testarudo, gruñón, gritón, y todo lo demás?”

Me mandó una mirada asesina y apretó fuerte sus puños, le había sacado de quicio y por extraño que parezca a mí también. Pero no podía dejar que se fuera, es un chiquillo y sé que irá directo a donde ‘Chan esté y hoy no sería un buen día para recibir a Zelo. Hoy eran las pruebas de JongUp.

“Perdón, lo siento mucho… Si te vas no tienes a dónde ir, ¿Cierto? Quédate, no te voy a molestar más”

“¿Crees que con eso me vas a en contentar?”

“Si supieras lo que yo sé entenderías por qué quiero que te quedes quieto aquí en mi casa”

“¿Qué es?”

Iba a decirle lo de JongUp y de HimChan, pero una llamada entrante me detuvo en ese momento.

“Director Bang, La empresa ‘Song’ ah convocado una nueva junta para aclarar algunas cosas de los acuerdos que le entregué ayer. La junta será dentro de media hora”

Aparte mi celular y volví a hablar con Zelo: “Prometo que te explicaré, te lo juro si así quieres pero tendrá que ser después, necesito revisar una urgencia”

Hizo un mal gesto, pero yo tenía que correr de ahí.

“Cuando salga  a la hora de la comida vendré a hablar contigo, ¿Esta bien?” dicho aquello y un “Regreso al rato” me despedí del peliazul.

 

A duras penas llegué a la empresa. Faltaban 8 minutos exactos para entrar en junta y corrí como si no hubiera un mañana. Como era de esperarse todos ya estaban ahí y saludé cordialmente antes de entrar en sesión.

Hasta ahora, había sido la junta más larga en toda mi vida como director. A juzgar por los archivos de la empresa, ya habíamos trabajado con ‘Song’ tiempo atrás. Entré a mi oficina y me senté en la incómoda silla de cuero que tenía detrás de un escritorio infestado de documentos. Mis padres mintieron totalmente cuando dijeron que una empresa diseñadora sería un negocio fácil.

Busqué más información en los documentos de antes, y así como lo había pensado, la señora Song efectivamente era familiar de Zelo. Para ser preciso, su madre.

Mi investigación iba dirigida a en cuál de tantas direcciones podría ir y dejar a Zelo, después de todo supongo que han de estar preocupados por él si no regresa a casa después de viajar. Sin embargo, no fue la única información que había encontrado, sino que, al platicar con algunas personas cercanas a esa familia, supieron decirme más detalles.

Ahora tenía una ligera idea del porqué JunHong no planeaba regresar a casa.

“Sr. Bang, ¿no saldrá a comer?” Me dijo mi secretaria sacándome de mis pensamientos. Le había dicho a Zelo que iría por él y la hora de la comida fue ya hace dos horas.

Maldición

Tomé mi chaqueta y bajé de inmediato. Para cuando iba a correr, me di cuenta de que la madre de Zelo se encontraba en la sala de estar que había en recepción. Decidí saludarla una vez más por cortesía.

“Sra. Song ¿Pasó algo? ¿Puedo ayudarla?”

“No, Bang –dijo fría como siempre. Desde que la conozco ese ha sido su forma de hablarme- Esperaba a mi marido para que viniera por mí, y justo acaba de llegar. Nos veremos luego”

Realicé una reverencia y esperé a que saliera del edificio. Cuando supuse que ya se había ido fui al estacionamiento a buscar mi camioneta. Justo cuando la vi, miré hacia los lados para cruzar y llegar hasta ella, pero venía una gran limosina saliendo del lugar. Reconocí el logotipo, pertenecía a la familia Choi.

Detuve mi paso, luego me di cuenta de que HimChan estaba del otro lado con JongUp en el auto, supuse que estaba todo bien ya que iban juntos. Me quedé viéndolos desde lo lejos, de pronto, vi cruzar una sombra, una sombra en la que enfoqué más mi vista y me di cuenta que era la persona menos indicada para estar ahí.

Corrí en su dirección y tomé su brazo para halarlo contra mí, evitando que aquella limosina llegara a lastimarlo. Ambos caímos al suelo pero en un lugar seguro y la limosina que se había detenido, siguió su paso para irse de ahí.

“¿Qué carajos estás haciendo aquí Zelo? ¿Estas bien?”

“Fuiste tú quien prometió regresar y explicar algo ¿No? Suéltame”

“¿Cómo llegaste aquí? ¿Seguro que estás bien?”

“Ya te dije que si”

Me levanté del suelo y extendí mi mano para ayudarlo. Cuando se levantó tenía un ligero raspón en una de sus piernas.

“Vamos adentro” Le dije y de manera extraña accedió. La recepcionista preguntaba qué había pasado y le dije que solo tardaríamos un momento, que no era nada. Subimos a mi oficina y busqué algunas cosas para curarle la herida que gracias al cielo no era nada grave.

“Me tratas como un niño”

“Para mí lo eres” saqué algodón y con un poco de alcohol limpié la zona.

Tomé solo unos minutos y ya todo estaba bien.

“Menos mal que solo fue eso” le sonreí a lo que él desvió su mirada.

Realmente no podía imaginar cuál situación hubiera sido peor, el que efectivamente hubiera sido arrollado por sus padres o que se hubieran dado cuenta de que Zelo estaba ahí.

“G-gracias…” me dijo bajito pero aun audible

Volví a sonreír por escuchar aquello y también por saber que ninguna de las dos había pasado y que se encontraba sano y salvo.

 

Suspiré aliviado…

 

“Vamos Jun'”

 

 

 

Notas finales:

 

Si bien "to be happy" es medio trágico, decidí que "to love me" sería misterioso ewé

uuuyyyy, guk conoce a Zelo de antes... ¿porque? ya lo verán....

 

Para las que leen el himup, ojalá hayan notado la relación de este capi con el capi 9 xD! -a nadie le importa~-

 

ok, bueno... Si hago otro capi en el transcurso de estos días actualizaré el sabado para que se empareje de una buena vez con el himup xD!!!!!!!!

 

Muchas gracias por aceptar esta idea y por los rw :D me esforzaré para que sea tan bonito como lo es el otro fic nwn

 

Gracias por leer :D


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