El significado.
Tori.
La estaba besando. No había vuelta atrás, sus labios estaban sobre los míos, y me estaba muriendo. De felicidad, de temor, de… ¿Puedes sentir como tu corazón palpita deseando más y más, pero a la vez escondiéndose entre corazas por miedo a ser destruido?
Me separé de ella, lentamente, hecha un manojo de nervios y temor. ¿Por qué me había seguido el beso? ¿Por qué no estaba en su irritante actitud de por las mañanas? ¿Por qué? ¿Por qué...? ¿Por qué...?
Pero no pude hablar más, porque se abalanzó sobre mí y fue ella la que me llevó de la mano al paraíso, con un beso que me hizo levantar los pies del suelo, elevarme como nunca, parando mi mundo. Jade siempre paraba mi mundo, con su presencia, sus caricias matutinas, sus abrazos por la noche, el deseo de protegerme siempre... pero ahora me sentía más cerca que nunca de ella.
-Vamos, salgamos.- Dijo, arrastrándome de la mano, sin darme tiempo a nada.
-¿Qué? ¿Vamos? ¿A dónde?- Grité entre carcajadas, dejando que ella me guiara ciegamente. Podía confiar mi vida en sus manos sin pensármelo un segundo.
-Oh, vamos. ¿Desde cuándo se dicen las sorpresas?- ¿Sorpresas?
-¿De qué sorpresa hablas Jade? Pero si...- Mis mejillas se tiñen de carmín, mi cara ardiendo prácticamente, sintiéndose todo tan real que mi corazón latía en el centro de mi garganta.- seguro que no tenías nada planeado.- Miro detrás de ella, donde está el pequeño cachorro, girando sobre sí mismo.
-Ya bueno, por eso también será una sorpresa para mí...- Después de unas palabras se formó un silencio para luego estallar ambas en carcajadas. ¿Qué acababa de decir?- No te rías Vega, no me hagas ir a por las tijeras.- Su tono, aún jocoso y sonriente, no hacía nada más que incitarme a reír y reír.
-Oh, bueno, dime al menos a dónde nos dirigimos.- Replico, con una cara de niña pequeña a la que casi nunca se niega. En realidad espero que vayamos a un lugar donde no haya mucha gente ya que sabe que las multitudes me ponen muy nerviosa.
-Bueno...- Me coge de la mano y antes de que pueda hacer nada, entrelaza sus dedos con los míos, una sonrisa gigantesca formándose en nuestras caras. ¿Éste es el significado del beso? ¿Hemos dado un paso con una venda en nuestros ojos hacía... dónde? ¿Qué siente por mí?- Vamos a ir a por la comida que más te gusta, la comida China, y luego~- Hace un silencio teatral en el que ruedo los ojos por tanto misterio fingido.- Vemos una película.- Tomo una respiración profunda, con una sorpresa que en verdad no siento, pero sí me hace gracia que esté dispuesta a ver una película cursi conmigo, porque sabe que si me deja elegir la película será sumamente pastelosa y ñoña.
-¿Podemos ver “500 días”, por favor? O...- Antes de que pueda seguir, ella se da la vuelta y acaricia mi cabeza.
-Sí, sí, lo que quieras.- Y estoy desconcertada, con el corazón aún sangrante, lleno de heridas y traumado, a míl, mi mano unida a la suya, nuestras sonrisas enormes, y sin saber qué significa todo esto realmente.
¿Estamos juntas?
¿Estamos saliendo?
¿Qué somos?
¿Qué estamos haciendo?
-¿Vas a jugar conmigo?- Pregunto, a la nada, pero Jade se vuelve hacia mí, con una expresión de duda.
-¿Qué?- Pregunta, poniéndose bien su chaqueta negra.
-Nada, que tengo hambre.- Ella suelta una risa suave y me acerca más a ella.
-Tranquila, Tori, que ya vamos a llegar, te lo prometo.- Y mi corazón vuelve a latir rápido, más que antes si es que es posible.