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EL VALOR DE LA VIDA por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, les traigo el capítulo nuevo y aquí Shun si cuenta lo que vio ese día en la visión, espero que les guste lo que viene

Capítulo 18.- Verdades a la luz de la luna

 

El Grupo había avanzado un largo trecho ese día, habían dejado atrás todas las montañas nevadas y ahora estaban descendiendo a los valles de Ilyria, el sitio en donde acamparon ahora estaba cerca de una laguna allí podrían abastecerse de agua limpia para ellos y sus caballos, Shun cenó en compañía de su hermano y como la noche anterior compartieron la tienda de campaña, al día siguiente ya llegarían al campamento de los regentes y eso tenía algo preocupado a Shun que al no poder dormir había salido de su tienda de campaña y estaba sentado junto a uno de los fuegos que se habían armado para cocinar los alimentos

- Con frío? – Saga tampoco podía dormir y al caminar por el campamento vio al muchacho de cabellos y ojos verdes sentado frente a la fogata calentándose las manos

- Un poco, no puedes dormir?

- No… tus palabras no me dejan dormir y me puse a pensar, tenías razón con lo que me dijiste esta tarde pero llegué a una conclusión, si tu no hubieras dicho nada yo no habría roto mi promesa – dijo Saga sentándose junto a Shun que se acomodó de mejor manera para conversar frente a frente

- Lo se… por eso lo dije – dijo Shun con un suspiro que le pareció a Saga de resignación

- Eso es lo que no entiendo, porqué me liberaste de mi promesa si tu ya no quieres seguir viviendo el tipo de vida que has vivido hasta hoy, si ya no quieres ser el oráculo de nadie… para qué me liberaste de mi promesa?, no lo entiendo, no le dijiste a Ikky que lo que mas querías era una vida tranquila? – Saga miró profundamente a Shun que sonrió y acarició su rostro al contestar:

- Te lo explicaré entonces, recuerdas la noche en la que me caí a la pequeña laguna en la cascada?

- Claro que me acuerdo si casi te ahogas – respondió Saga encogiéndose de hombros

- Sabes por qué me caí?

-  No… - y esto era cierto, Saga no tenía idea de por qué el oráculo se cayó al agua y casi se ahoga tomando en cuenta que esa pequeña laguna no era profunda, un niño pequeño hubiera salido ileso

- Yo… los dioses me mandan las visiones en el agua, yo estaba mirando la superficie de la laguna y una visión vino a mi, fue una visión tan poderosa que me dejó sin sentido, si tu no hubieras estado ahí podría haber muerto

- Te ha pasado antes? – Saga nunca había considerado esto, no se había puesto a pensar en lo que las visiones le hacían a Shun, nunca le había preguntado si era doloroso o no, o si sentía algo en especial o no, nadie se lo había preguntado…

- Si… pero eso no es lo importante, lo importante es la visión, al principio fue muy hermosa… me vi a mi mismo en un prado verde rodeado de flores, a lo lejos podía ver una escultura magnífica de una quimera la que era blanca entera y parecía de mármol, era el tipo de escultura que resalta en una ciudad y estaba en una colina para que todos la pudieran ver, el clima era algo cálido y el sol brillaba sobre mi cabeza, a mi derecha estaba una casa que tenía un jardín lleno de árboles frutales y habían dos niños que corrían por el prado persiguiendo conejos – cuando Shun dijo esto sus ojos brillaron y sonreía de una forma muy especial

- No entiendo, por eso perdiste el conocimiento y casi te ahogas en el agua?

- No… no entiendes, esos niños que corrían por el césped eran sin duda alguna mis hijos, ambos tenían los cabellos y los ojos verdes, un niño y una niña de no mas de cuatro años y yo llevaba en el vientre a un tercero, cuando lo vi mi corazón se llenó de alegría, es lo que siempre quise, lo que siempre soñé, una vida tranquila alejado de todo y de todos – Shun suspiró con tristeza y bajó la cabeza

- Pero si esa es la visión de tu futuro cuál es el problema?

- Que mi futuro viene con un precio…

- Cuál es el precio?

- Cuando la visión de esa tarde pacífica en la que yo sonreía feliz y disfrutaba de mi vida y de mi libertad, vi a lo lejos, cruzando el mar, vi a Hades envuelto en una bola de fuego, muerte y destrucción a sus pies, él estaba sentado en un trono de hierro forjado de las espadas de los que habían caído en batalla ante él, no había vestigios de los otros reinos, solo sangre y fuego por doquier, al verlo yo no podía respirar, el ambiente era asfixiante y mis pulmones se comprimían porque él me estaba buscando, por eso perdí el conocimiento y me caí al agua

- Hades ganará la guerra? – preguntó Saga aún sin poder creerlo, él estaba convencido de que las fuerzas aliadas ganarían la guerra, por lo menos eso era lo que todos ellos esperaban, sus ejércitos eran mayores a los del Averno pero… Hades era un enemigo de cuidado, un comandante sin corazón que sería capaz de sacrificar a cuantos hombres tuviera que sacrificar para lograr sus objetivos

- Si… si me envías a donde me quieres enviar, inevitablemente Hades ganará la guerra, yo seré feliz lejos de todo y de todos pero el mundo como lo conocemos no será el mismo, Hades reinará sobre todo el continente hasta hacerlo polvo dejándolo estéril y árido, la oscuridad reinará y la luz los abandonará, los campos se perderán, la gente y los animales morirán de hambre y sed, el dolor y el sufrimiento se extenderá a cada alma de todas estas tierras y un gran desierto rojo se extenderá consumiéndolo todo, entiendes ahora porque accedí a que rompieras tu promesa? – Saga escuchó todo lo que dijo Shun con atención pero… era demasiado, Hades era solo un hombre…

- Pero… discúlpame pero no puedo creer lo que me estás diciendo, solo por el hecho de que tu estés lejos en una de las ciudades libres de Volantis, cruzando el mar, nosotros perderemos la guerra y se acabará el mundo? – allá era a donde Saga había pensado enviar a Shun, a las ciudades libres con suficiente dinero para que viva tranquilo y feliz y no vuelva a poner un pie en ningún reino del Este

- Si… está escrito en las estrellas, está escrito en las profecías de mi pueblo, de mis ancestros, mi sangre está maldita y si yo no lo hago, el peso de lo vaticinado lo cargarán mis hijos y yo no quiero que nadie sufra lo que yo he sufrido, en especial un hijo mío

- Si tu llegas a una de las ciudades libres, Hades no dará contigo – dijo Saga con mucha seguridad pero Shun meneó la cabeza, eso era lo que habían pensado sus antepasados y fue cierto que por muchos años su línea de sangre permaneció oculta pero no fue menos cierto que a la final dieron con su abuela y luego dieron con él, matando gente inocente en el proceso, el destino de sus padres y ancestros Shun no lo quería para nadie, nadie mas debería morir por él

- Si me encontrará, a menos que vea mi cuerpo inerte a sus pies nunca se convencerá de que morí, no dudes que bajo las piedras me buscará hasta encontrarme, es mi destino y mi maldición, es el destino de nuestra sangre, si no soy yo será alguno de mis hijos, o los hijos de mis hijos y yo no lo voy a permitir, esa profecía acaba conmigo, yo soy el último descendiente del Rey Hyperión de Elíseo y así como tu tienes responsabilidades pues yo también, pueda que de involucrarme en esta guerra el futuro que vi de una vida tranquila rodeado de paz y naturaleza aún se pueda cumplir, solo los dioses lo saben, a mi me dejan ver solo un poquito de lo que engloba los misterios del universo, yo soy solo su instrumento pero cumpliré mi parte, demasiada sangre ha sido derramada y esto ya no puede continuar, hay que ponerle un alto y ahora es el momento, lo dicen las estrellas – Shun levantó la mirada al cielo en el cual las estrellas brillaban esa noche

- No eres solo un instrumento

- Si lo soy… y lo he aceptado, pero el problema no está en el don sino en cómo se lo usa, yo no lo pedí pero lo tengo y ahora que está en mis manos el usarlo, pues lo quiero usar para traer paz para todos, es lo que tu quieres verdad?

- Si… así es…

- Entonces todo estará bien, no me estás obligando a nada, yo me estoy dirigiendo a mi destino, el que tengo que cumplir porque es para lo que nací, si en mis manos está el acabar con el Averno pues lo haré y nada me dará mas gusto que hacerlo a tu lado, es simple… - el tono de voz de Shun era sereno y tranquilo, Saga tenía la impresión de que Shun ya lo había pensado y lo había decidido, por lo que con una ligera sonrisa el príncipe respondió:

- No Shun… no es simple, es admirable…

 

Shun sonrió como no había sonreído en algún tiempo, el estar tan cerca de Saga lo hacía sentir cómodo, esto nunca le había pasado, Hades nunca había permitido que nadie se acerque lo suficiente a él como para que Shun pudiera desarrollar confianza o cariño hacia alguien, Seiya fue con la única persona que lo pudo hacer y como consecuencia el castaño había tenido una muerte horrible, al pensar en él, el rostro de Shun se ensombreció

- Que pasa? – Saga no lo resistió y acarició la mejilla de Shun que no se hizo el quite sino que sonrió con pena una vez mas

- Nada… solo, recordé a una persona que quería mucho, es todo

- El muchacho que nos trajo los uniformes de la guardia? – aventuró Saga como respuesta

- No… su hermano, Koga es el hermano menor de Seiya, Seiya era mi sirviente particular por algún tiempo pero… Hades lo mató

- Lo siento… por qué lo mató? – Saga preguntó por prudencia y curiosidad, Shun era muy hermético en lo referente a lo que vivió en el Averno y el príncipe de Gémini lo animaba a que siguiera hablando ahora que se tenían un poco de confianza

- No se si deba contártelo, tiene que ver con tu hermano – cuando Shun dijo esto bajó la cabeza, Saga sintió como su estómago se hizo un nudo y su sangre comenzó a hervir, él quería saber los detalles de la muerte de Kanon pero no se había atrevido a preguntar, ahora Shun le daba la oportunidad por lo que tomó la mano del pequeño peliverde y la apretó con suavidad para decirle:

- Cuéntame, yo… quiero saber

- Está bien… - Shun le contó todo lo que había vivido esa noche, las visiones que tuvo que ahora eran mas claras para él porque en su confusión inicial pensaba que era Kanon el protagonista de sus visiones pero ahora era obvio que era Saga, le contó sobre la alarma que sonó en el Averno y cómo las fuerzas armadas se movilizaron, le contó de cómo Hades lo había amenazado y castigado, de cómo lo bajó a rastras al calabozo cuando se dio cuenta que le estaba diciendo los datos equivocados, le contó de su encuentro con el príncipe Kanon y de luego como Hades para hacerlo hablar lo torturó por horas pero al no conseguir nada trajo al único amigo que tenía en ese infierno al que él y sus hombres despedazaron y violaron frente a sus ojos hasta finalmente matarlo de la manera mas cruel

- Por todos los dioses… - Saga no podía creer lo que Shun contaba, la crueldad de Hades no tenía límite, ahora entendía de mejor manera la actitud inicial de Shun, lo arisco que se mostraba y el desprecio que tenía por los miembros de la realeza

- Por eso también tenemos que ganar esta guerra, le prometí a Koga rescatarlo y sacarlo de ese infierno, Pandora, que también tiene un corazón gentil, con la ayuda de los dioses y de ustedes pudo salir pero… y el resto de buenas personas que están allí?

- Buenas personas?, la guardia de Hades está compuesta de los hombres mas crueles y sanguinarios de todas las tierras – dijo Saga y tenía razón en sus palabras

- No te lo niego, los hombres que forman la milicia de Hades son el resultado del brutal entrenamiento al que son sometidos y tienes razón, ellos son hombres sádicos sin corazón, eso es terrible pero… y los campesinos?, la gente que trabaja y es explotada en las minas?, los que crían caballos en las afueras de las ciudades?, los mendigos que no tienen a donde ir?, los niños?, todas esas personas que viven en el Averno porque no tienen otra opción?, ellos no son responsables de lo que hace Hades, ellos sufren por las decisiones que él toma, si vamos a esta guerra no podemos dejarlos de lado, así como tu quieres libertad y felicidad para tu pueblo, yo quiero libertad y felicidad para el mío – dijo Shun con un convencimiento único lo que sorprendió a Saga que preguntó:

- Tu pueblo es el Averno? – esta era la primera vez que Saga escuchaba algo así de Shun, Saga tenía la impresión de que escapar del Averno fue lo mejor que le pudo pasar al peliverde y tenía razón pero ahora que él ya estaba lejos no podía evitar el pensar en todos los que dejó atrás y que no merecían tan cruel destino en manos de un regente como Hades

- No, no el Averno, Elíseo… soy el último descendiente del Rey Hyperión, eso lo hace mi pueblo no?

- Pues si… su alteza – dijo Saga con una sonrisa divertida

- No te burles que estoy hablando en serio – respondió Shun sonriendo también

- Y así es como nacen las alianzas… Gémini y Elíseo unidos contra el Averno, aunque los otros reinos también están unidos verdad?

- Sabes… la gente del Averno tampoco es mala, es solo… Hades… - dijo Shun algo pensativo, él no había tenido mucho contacto con nadie pero Seiya si y le contaba a veces historias graciosas de los trabajadores de las cocinas, de la gente que servía en el palacio, de la gente común que estaba dedicada a vivir sus vidas lo mejor que podían con lo poco que poseían

- Y Julián Solo, no te olvides de él, es un enemigo peligroso, has visto algo de él en tus visiones?

- No… solo lo vi delante de Pandora mientras ella moría en su sombra, pero eso ya no va a pasar así es que no se – Shun dijo algo pensativo

- Cómo funcionan tus visiones?, si te concentras en alguien puedes ver su futuro?

- No… nunca ha funcionado así, los dioses me envían partes y piezas de realidades, algunas se pueden cambiar y otras no, yo vi a tu hermano perecer a manos de Hades y a pesar de todo lo que hice para evitarlo eso igual pasó, por eso me pregunto… si yo no hubiera dicho nada, si no hubiera abierto la boca, Hades habría matado a Kanon?, es ese tipo de cosas lo que no me deja dormir en la noche – Shun suspiró con pesar y Saga lo giró un poco para mirarlo a los ojos y mientras le acariciaba la mejilla le dijo:

- Tu no tienes la culpa de lo que pasa a tu alrededor aunque lo hayas visto en tus visiones, cada cual es responsable solamente de lo que hace o no hace, sabes… no me gusta pensar que tenemos escrito nuestros destinos como cree mi padre, pero si me gusta pensar que tenemos un camino definido con varias opciones lo que nos lleva a diferentes lugares de acuerdo a las decisiones que tomamos – las palabras de Saga lograban calmar a Shun que siempre vivía lleno de culpas y de dudas, era lógico lo que decía el príncipe de Gémini pero Shun necesitaba escucharlo así que asintió y sonrió, se acercó un poco y apoyó su frente en el pecho del mayor que lo abrazó y le acarició los cabellos, la noche estaba silenciosa y solamente se escuchaba el sonido de la madera sucumbiendo a las llamas en la hoguera

 

Shun se sentía tranquilo en los brazos de Saga que le acariciaba los cabellos y luego bajó su mano a su espalda, Shun se separó un poco y miró los ojos azules del mayor que en vez de alejarse se acercó un poco mas, Saga no sabía por qué lo hizo pero Shun le atraía con tal fuerza que el príncipe de Gémini se sentía totalmente rendido ante él y con su mano levantó el mentón del menor y se acercó hasta posar sus labios en los labios del oráculo, Shun abrió mucho los ojos al inicio por la sorpresa, Saga movía con suavidad sus labios y el roce que sentía era magnífico, Shun cerró los ojos y aflojó el cuerpo dejándose llevar por el beso, se acercó mas al cuerpo del mayor para rodear su cuello con los brazos, Saga acarició su espalda y ladeó un poco mas su cabeza profundizando el beso

 

El corazón de Shun latía con violencia, nunca… nunca lo habían besado como lo estaban besando, Hades se había impuesto en contra de su voluntad y aquellos besos que forzó en él esa vez le resultaron dolorosos y humillantes, Saga en cambio le hacía sentir mariposas en el estómago y una corriente eléctrica que le recorría el cuerpo entero, la cual se intensificó cuando Shun abrió la boca dando paso a la lengua del mayor que le pedía entrada, y con suaves movimientos acariciaba su lengua jugueteando con ella

 

A la luz de la luna la pareja continuó besándose suavemente, disfrutando de estas dulces caricias que eran completamente nuevas para el más joven, a él nunca lo habían tocado de esta manera y le resultaba todo sumamente placentero y excitante, cuando el último beso se rompió ambos tenían las respiraciones algo agitadas, Saga vio con complacencia un ligero rubor en las mejillas de Shun que algo inseguro se mordió el labio inferior  mientras se acomodaba un mechón de cabello tras su oreja, a los ojos de Saga, Shun era la visión de la inocencia y el deseo, el príncipe de Gémini hubiera dado su reino entero por hacerlo suyo ahí mismo bajo la luz de la luna, pero era obvio para él que el jovencito era virgen, su inexperiencia le resultaba encantadora

- Saga… yo se que debería haberte preguntado esto antes pero… tu… tu… tienes compromiso con alguien?

- Yo???, no… mi hermano estaba comprometido en matrimonio con Mu de Lorién, por costumbre yo debería haber asumido ese compromiso pero Mu me liberó de él, me dijo que una vez que ganáramos la guerra en contra del Averno no sería necesario mas compromisos matrimoniales para mantener a los reinos unidos, la verdad Mu me quitó de encima un gran peso, él me agrada mucho pero no… no hubiera sido feliz si me hubiera casado con él, tu si te ibas a comprometer con Hades…

- En contra de mi voluntad, si no me hubieran secuestrado esa noche yo iba a saltar del balcón… ya lo tenía decidido, Hades me dijo que… me dijo que esa noche yo… te juro que iba a saltar del balcón – la incomodidad de Shun al decir lo que dijo le dio a entender a Saga que Hades le había dicho a Shun que esa noche lo haría suyo, Saga cada vez que conocía mas detalles sobre el Rey del Averno, mas crecía su odio hacia él

- Bueno… ya no tienes que preocuparte mas por Hades, él está muy lejos de aquí y ahora estás bajo nuestra protección, yo no dejaré que nadie te haga daño y supongo que el poderoso Fénix de Virgia tampoco, es mas… me atrevería  aventurar que si él supiera que te besé esta noche, mañana me arrancaría la lengua para dársela a los perros – Saga sonrió y besó nuevamente los labios de Shun aligerando el ambiente, Shun correspondió el beso y allí en la quietud de la noche la recién formada pareja compartió besos y caricias hasta que escucharon el sonido de un cuerno a lo lejos, Shun saltó algo asustado pero Saga lo abrazó y le susurró en la oreja: - No te preocupes, es solo el cambio de guardia, te acompaño a tu tienda?, es tarde y mañana tenemos un largo camino hasta el campamento de los regentes

- Es verdad, por un momento me olvidé de donde estaba y a donde iba – dijo Shun y acarició el rostro de Saga que al ponerse de pie lo abrazo nuevamente y lo besó una vez mas

- Mañana conocerás a los regentes y ya todos reunidos podremos empezar una nueva estrategia de ataque y defensa en contra del Averno – Saga tomó de la mano a Shun y caminó con él la corta distancia hasta su tienda de campaña, allí lo tomó en sus brazos y lo besó una vez mas, los labios de Shun lo atraían como nada lo había atraído en su vida, sus ojos lo habían cautivado completamente desde antes que lo miraban con temor y aún así no pudo evitar notar lo hermosos que eran y ahora con mayor razón ya que lo miraban de una manera completamente diferente

- Buenas noches mi príncipe – dijo Shun en un susurro que hizo temblar las rodillas al fiero príncipe de Gémini

- Buenas noches… mi Shun… - Saga buscó sus labios otra vez y cuando se rompió el beso Shun entró a la tienda con una canción en su corazón, se acostó junto a su hermano pero no podía dormir, su corazón latía con fuerza y una felicidad como nunca antes la había sentido le embargaba, cerró los ojos y la imagen que tenía en su cabeza de su futuro feliz en un prado lleno de flores cambió un poco, la estatua de la Quimera había desaparecido dando paso a una edificación enorme con torres y altas murallas, Shun estaba en los jardines de un castillo, sus hijos ya no tenían los cabellos verdes sino azules y Shun ya no estaba solo sentado en el pasto mirándolos jugar, ahora el joven se vio a si mismo acostado en el verde césped con la cabeza apoyada en las piernas de Saga de Gémini, tenía una cicatriz que le cruzaba el rostro desde sobre el ojo derecho hasta la mejilla izquierda pero era él, lucía sereno y contento mientras le acariciaba su abultado vientre, Shun sintió a la criatura que esperaba moverse en su interior y Saga sonrió al sentirlo también, se incorporó y lo besó en los labios…

 

Shun despertó a la mañana siguiente y se sentía optimista, estaba en camino a cumplir su destino y todo iba aclarándose para él, el sol brillaba fuerte sobre las cabezas de la pequeña caravana que avanzaba hacia el campamento de los Regentes y una suave brisa les daba la bienvenida a los valles de Ilyria, Shun cabalgaba junto a Saga e iban rumbo a lo desconocido, el futuro aún les deparaba muchas sorpresas pero ellos las enfrentarían con entereza

 

Notas finales:

Y esa fue la visión de Shun, esa es la razón por la que Shun no acepta irse, no solo está pensando en su vida sino en la de sus hijos y básicamente en la de todos al quedarse

Nos vemos el viernes en el capítulo nuevo que se llama: "Los regentes", ahí Shun ya llega al campamento de los Reinos de la Alianza y pasará la primera prueba de fuego, no se pueden perder lo que viene

Muchas gracias por leer y nos vemos en este fic el viernes y mañana en un nuevo capítulo demi otro fic que empecé a publicar ayer que se llama: "No puedo perderte"

Saludos, bye 


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