POV’S Yamamoto.
Cuando abrí los ojos, lo primero que vi fue ¿a mí mismo? ¿Estaba soñando? Lo más seguro es que fuera eso.
-Yamamoto…Sé que ahora mismo estás bastante confuso, o tal vez no te lo creas-se explicaba Tsuna con nerviosismo, ¿qué es lo que ocurría? ¿Por qué me veía a mí mismo?- Pero Gokudera y tú os habéis intercambiado los cuerpos…-respondió al fin, dejándome sin palabras.
Lo primero sería mantener la calma, respiré profundamente, recordando todo lo que había sucedido.
-¿C-cómo es que hemos acabado así?-pregunté con un hilo de voz, preocupándome por si los presentes en la habitación me escucharon, por una vez en mi vida estaba más que sorprendido.
-Por culpa del pervertido de Shamal-me respondió Gokudera con un tono de voz molesto, se notaba que estaba cabreado. Lo miraba casi con odio, y al ‘’verme’’ así, me asusté hasta yo.
-Cálmate Gokudera, ya encontraremos una forma de volver a la normalidad-traté de sonar con confianza en mis palabras, mas hasta yo estaba preocupado.
-Como si pudiera calmarme en una situación como esta-me dijo con cierta ironía, bueno en el fondo tenía razón, pero sino nos calmamos no íbamos a conseguir nada.
-Tomémonos esto con calma, y ya veréis como todo se arregla más rápido
-Yamamoto tiene razón, Gokudera-kun
-Si el décimo lo dice…
Fin POV’S Yamamoto.
Se pasaron casi toda la tarde ayudando a Shamal para encontrar una forma para volverlos a sus respectivos cuerpos, sin embargo aún no encontraban ninguna solución.
-Será mejor irnos a casa-dijo Tsuna, rompiendo un silencio un tanto incómodo.
-Sí, será mejor-así los tres se fueron a sus casas.
Yamamoto y Gokudera se despidieron de Tsuna una vez que llegó a su casa.
-Yamamoto…-lo llamó Gokudera mirándole- ¿Te podrías quedar en tu casa?-sonaba raro preguntarle eso, pero no quería estar solo en una casa que ni siquiera era suya.
-Está bien, sería raro irme a tu casa a dormir sin estar tú conmigo-rió Yamamoto sin darle mucha importancia al problema que tenían en esos momentos. A Gokudera le gustaba que fuera así, estaría más tranquilo con él, que estando solo. A pesar, de estar escuchando su propia voz, sabiendo que era Yamamoto quien decía aquellas palabras, no pudo evitar sonrojarse, rápidamente apartó su mirada para evitar que lo viera.
El resto del camino, no hablaron mucho más, aquel silencio, no era incómodo.
Cuando llegaron, Yamamoto iba a anunciarle a su padre de que un amigo se iba a quedar en su casa, pero Gokudera lo detuvo.
-Ya llegué, viejo-anunció Gokudera al cruzar la puerta, con la típica sonrisa de Yamamoto y su tono de voz- Un amigo se quedará esta noche a dormir.-rápidamente los dos jóvenes se fueron al cuarto del moreno, porque si su padre daba tema de conversación Gokudera no podría seguir fingiendo ser Yamamoto, eso hasta le costó.
-Gokudera hiciste muy bien de mí-se rió dicho esto.
Algunas veces sí que le sacaba de sus casillas.
-Cállate…-se sentó en el suelo mirando como Yamamoto se sentaba a su lado, aún no se acostumbraba a su cuerpo, ni verse a sí mismo, hasta a Yamamoto le resultaba raro, mas con su sonrisa lo podía ocultar todo.
Tras otro rato de silencio, el padre de Yamamoto los llamó.
-El baño está listo, si alguno de los dos se quiere bañar, está libre-les dijo desde la planta de abajo.
Yamamoto miró a Gokudera, ¿acaso quería que se bañara en su casa y con su cuerpo?
-¿Te quieres bañar tú, Gokudera?
-¡¿Yo?! ¡Ni loco!-negó rotundamente.
POV’S Gokudera.
Yamamoto me miraba. Eso significa…¡Mala señal! Ya me imaginaba que me diría algo así como ‘’venga, Gokudera báñate’’ Pero ¡¿este estaba loco o qué? ¡Ni loco me bañaría estando en su cuerpo!
Cuando me lo preguntó, ya notaba como mis mejillas ardían, es que ¡era incapaz de bañarme con su cuerpo! Pero claro, algún día me tendría que duchar.
-Venga, Gokudera no seas tímido-se levantó y me cogió en modo princesa. ¿Este quién se creía que era para cogerme así? Además, aún estando en mi cuerpo ¿Cómo tenía tanta fuerza? No me lo explicaba.
-¡No, suéltame!-empecé a patalear para que me soltase, me estaba llevando al baño, pero, antes de que eso pasase, me agarré fuertemente al quicio de la puerta para que no me llevara dentro. Él dejó de hacer menos fuerza, y me pareció verle reírse, oh mi paciencia se estaba agotando…
¡Lo mataría, sin duda! Pero no quería dañar mi cuerpo, así que lo haría cuando volviera al mío.
-¿Y si nos bañamos juntos?-propuso con una sonrisa deslumbrante, no me iba a convencer tan fácilmente.
-¡Tampoco!-seguí agarrándome a la puerta.
-Pero si estoy en tu cuerpo, ¿qué más da que nos duchemos juntos?-preguntó desconcertado. Si nos ducháramos juntos, notaría mi nerviosismo, eso daría resultado a que ¡se daría cuenta de que lo amo! Prefiero ducharme solo.
-Está bien, me ducharé, pero solo-Yamamoto me soltó y salió del baño.
-No tardes, Gokudera-me dijo tranquilamente, yo cerré la puerta tras mi espalda.
Suspiré, ¿cómo iba a ducharme? ¡Le vería las partes íntimas a Yamamoto! Me iba a dar algo, sinceramente…
Bueno, me tengo que duchar, si no miro abajo, no pasará nada ¿no? Dijo esto, para tranquilizarme e intentar no verle a Yamamoto nada, ya que era su cuerpo.
Empecé a quitarme la camiseta lentamente, bastante rojo, y solo empezaba. Hoy me iba a dar un infarto, ¡seguro!
Una vez que me quité la camiseta, suspiré, una prenda menos. Ahora los pantalones…Los fui deslizando lentamente, con los ojos cerrados, no quería ver nada, como si me chocaba contra una pared, ¡me daba igual!
Volví a suspirar cuando me los quité, ahora solo quedaban los bóxer. Mi respiración cada vez iba más de prisa, al igual que mi corazón. Mantuve mis ojos cerrados, mientras me los quitaba.
Una vez más, suspiré, ya no me quedaban prendas, ahora solo quedaba ducharme. Abrí los ojos lentamente procurando no mirar hacia abajo…No mirar hacia abajo…No mirar…
Me lo repetía una y otra vez, mientras me metía en la bañera, me tumbé con cuidado en ella, relajándome, ese día fue muy agotador, y eso que todavía no había acabado, ¿qué iba a ser de mí?
Fin POV’S Gokudera.
POV’S Yamamoto.
Me pareció gracioso verle agarrado al quicio de la puerta, así que no pudo soltar leve risa. Le propuse que nos bañásemos juntos, pero no quiso. ¿Por qué será? A veces no le entendía bien del todo. Estaba en su cuerpo ¿qué malo tenía? Él se veía todos los días.
Me tumbé en mi cama, esperando a que este saliera del baño. No pudo evitar pensar en cosas indebidas…¡Estaba en su cuerpo! Además, quería verle, sin… ¡Aaaah! ¡Takeshi idiota, para de pensar en esas cosas!
Totalmente rojo me tapé con la almohada la cara. Aunque, pensándolo bien, una pequeña miradita no hará daño a nadie ¿verdad?
¡No, no! Debía controlarme y no mirar…
Esto de estar en el cuerpo de Gokudera será muy difícil, y también debía evitar que la gente se percatase de esto, intentaré hacer de él. Fácil, no iba a ser, eso lo sabía.
Fin POV’S Yamamoto.
Gokudera terminó de ducharse, cogió una toalla y…repentinamente, la vista se le fue abajo, Gokudera sin poder evitarlo, soltó un grito…