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Daughter of the forbidden por K-08

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Secretos.

Mi padre de 12 años junto a un mayordomo vestido todo de negro… ¿un mayordomo?... mire la parte de atrás de la fotografía y habían esta inscripción.

Ciel phantomhive… Sebastián michaelis…

Miro la fotografía con extrañeza y por alguna razón siento emoción ante la imagen de la fotografía, pero mi padre jamás me digo sobre el mayordomo que aparece en la fotografía me pregunto porque. Rápidamente tomo el juego de ajedrez y salgo del ático. Al llegar de nuevo a la sala, pongo el tablero en una mesa que había ahí, me acerco a mi padre

-padre mira la fotografía que encontré- le muestro la fotografía y mi padre se pone pálido, su mirada se puso ¿melancólica?

-¿Qué foto encontraste Nadia?- pregunta soma y se acerca para ver la fotografía, él también se sorprende al ver la foto 

-¿Por qué se sorprenden? Si solo es Sebastián michaelis…- mi padre me mira confundido

-¿Cómo sabes su nombre?- me pregunta, su mirada se ve claramente enojada

-está escrito… ¿Quién es…?- interrumpo mi pregunta al ver como mi padre rompe la fotografía en mil pedazos, siento como mi corazón salta de su lugar y siento algo parecido a una inmensa tristeza, soma esta callado al igual que lau- ¿Por qué lo hiciste?- mi voz se quiebra

-no es importante- eso me enoja, odio esa frase…

-¡Estoy harta de esa maldita frase!-grito furiosa, primero no me quiere decir quien es mi madre y ahora destruye una fotografía que para mí era especial… ¿especial? Pero ¿Por qué? Si solo es mi padre con un mayordomo…. ¿Por qué la fotografía es tan importante para mí?, eso me confunde

-no me grites Nadia- dice mi padre en tono serio y frio

Lagrimas salen silenciosamente por mis ojos, soma se trata de acercar pero lo alejo con una cachetada

-¡no me toques!- grito alterada… ¿Por qué me siento así?, mi padre se levantó de su asiento e hizo algo que me dejo helada… me dio un cachetada. Mi padre jamás me ha pegado, veo como de inmediato me lanza una mirada arrepentida, pero yo salgo huyendo de la mansión…

Quiero huir de este sentimiento de soledad… me adentro a un bosquecillo que está cerca de la mansión, rápidamente entro al bosquecillo, empiezo a correr, tropiezo un par de veces pero me levanto, eh corrido tanto que siento como el aire quema mis pulmones y el costado me duele pero no importa , tropiezo con la raíz de un árbol y caigo a los pies del mismo, mi cabeza me duele al igual que los ojos ya que eh llorado todo el recorrido… escucho los casquillos de un caballo  al alzar mi mirada se me nubla…

-señorita ¿está bien?- es la voz de un hombre, pero no lo puedo ver bien, este al no tener mi repuesta me toma en brazos… cuando por fin puedo ver a la persona que me hablo, me llevo una sorpresa, era un hombre de cabello azabache y ojos de un profundo color rubí, me sonrojo un poco por lo apuesto que es el hombre y porque me está cargando en brazos-Nadia…- me sorprendo al escuchar mi nombre

-¿Cómo me conoce?- pregunto desconcertada

-a bueno yo… conozco a tu padre…- lo miro con recelo, el nota mi mirada y sonríe

-¿Qué haces aquí sola en el bosque?- muy buena pregunta, yo tampoco lo se

-solo quería bueno…- se me quiebra la voz al pensar en que mi padre me había golpeado, el sujeto solo me abraza, extrañamente me siento segura en los brazos de este hombre…

-no volveré a preguntar… - me dice

-¿Cómo se llama?- le pregunto aun abrazado a el

-Sebastián michaelis- mis ojos se abren de la sorpresa… ¡es el ex mayordomo de mi padre! Es una muy rara y extraña coincidencia

-¿usted es el ex mayordomo de mi padre?- pregunto, el hombre me mira sorprendido pero luego sonríe con naturalidad

-si…- dice mientras vuelve a montar el caballo, sonrió quizá él sepa algo de mi madre…

-¿enserio? O que bien, ¿Cuándo dejo de trabajar con mi padre?- el sujeto me miran ansioso

-cuando él tenía 20 años- me dice mientras desvía su mirada, excelente de seguro sabe quién es mi madre

-¿usted sabe quién es mi madre?- pregunto ansiosa, la mirada de ese sujeto se vuelve nerviosa hasta cierto punto sospechosa

-mmm, la verdad…- de repente algo interrumpe nuestra platica…

-¡Nadia!- es la voz de mi padre, al escucharla me siento enojada pero a la vez feliz

-¡Padre!- grito para que sepa que estoy ahí, no quiero preocuparlo 

 -¿Dónde estás Nadia?- pregunta con voz desesperada, de repente veo como el señor que me tiene en brazos me baja al suelo… ¿acaso quiere evitar a mi padre?, cuando está a punto de poner en marcha a su caballo, mi padre aparece…

El señor michaelis se congelo al igual que mi padre. Los miro algo confundida, la tensión se siente

-papa…- me acerco a él para sacarlo de su pensamientos, de inmediato me abraza yo le correspondo el abrazo

-perdóname Nadia- dijo con la voz quebrada y de verdad  preocupada, eso me hizo sentir mal

-perdóname tu a mí- dije aferrándome a mi padre, mientras él me tomaba en brazos, veía con recelo a su ex mayordomo

-gracias- susurro para el hombre, el solo hizo un gesto de incomodidad

-no hay de que señor phantomhive…- dijo con un aire formal que solo un mayordomo podría tener

-espero que mi bella hija no le haya causado molestias- dijo mi padre, yo los miraba, había algo en sus miradas que no podía discernir

-no su bella hija no me ha causado ningún problema, es más me ha sido grato conocerla…- dijo con un tono dulce, yo solo me sonroje ante la mirada algo molesta de mi padre

-vámonos Nadia- no puedo permitir que mi padre me aleje de la persona que me puede decir quien es mi madre, pienso en algo rápido

-padre, ¿Por qué no invitamos al señor michaelis a la mansión? Después de todo es tu ex mayordomo…- digo con una sonrisa, la más tierna de mi repertorio, con eso sé que convenceré a mi padre pero… su mirada denota frialdad y nerviosismo

-supongo yo que el señor michaelis tiene algo más importante que hacer…- es un trato demasiado formal considerando que llevan años de conocerse y años sin verse… esto es confuso  

-le digo la verdad… no tengo nada que hacer- el ex mayordomo de mi padre dejo ver una sonrisa burlona, mi padre lanzo un bufido molesto, no puede evitar reír

-está bien… solo por esta vez Nadia- me mira con severidad, yo solo esbozo una sonrisa de satisfacción.

Al llegar a la mansión, quien nos recibe es soma y agni que están por demás sorprendido

-señor Sebastián…- dice agni con la voz algo conmovida

-ha pasado mucho tiempo señor agni, señor soma- soma se escondido detrás de mi padre… será porque le tiene… ¿miedo?

-si en verdad mucho tiempo- soma seguía escondido ante la mirada algo divertida de mi padre, yo solté una carcajada, de repente un gran escalofrió recorrió mi cuerpo… era como un deja vu… ¿un deja vu? ¿Por qué?, mi mirada se empezó a tornar confundida.

-o vaya señor mayordomo, pensé que quizá murió en el bosque- es la voz de lau, mi padre y el señor michaelis lo fulminan con la mirada, yo solo los miro con una mueca divertida 

-bueno vayamos todos adentro- dice soma con una sonrisa nerviosa, le susurra algo a mi padre, este se sonroja, es rara la vez en que lo veo sonrojado

-padre ¿Por qué estas sonrojado?- digo con inocencia, sin afán de molestarlo, pero lau, soma, agni e incluso el señor michaelis sueltan una carcajada

-¡no estoy sonrojado!- me grita molesto… ¡oh! Que divertido, su mirada se vuelve seria- señor michaelis podemos hablar a solas- esto es interesante, el señor michaelis asiente con la cabeza y sigue a mi padre al interior de la mansión, estaba dispuesta a seguirlos pero algo me detuvo o más bien alguien me detuvo

-¿A dónde vas Nadia?- decía soma con una sonrisa burlona

-yo…yo también quiero ir- digo haciendo un berrinche, haciendo reír a soma, agni y lau

-condesa… el conde tiene asuntos que resolver con el señor mayordomo… ¿no es así? Ran Mao- Ran Mao solo asiente con la cabeza… ¿asuntos pendientes?...  ¿Qué querrá decir con eso? Antes de que pueda hacer otra pregunta soma me toma en brazos para llevarme al interior de la mansión…

                                                   ======

En una dimensión totalmente diferente. Un pelirrojo, de complexión algo femenina a pesar de ser hombre, leía un libro, sus ojos verdoso amarillento y sus lentes dejaban al descubierto que se trataba de un shinigami… Grell stucliff

-Will ya releí esto un millón de veces…- dijo el pelirrojo con una voz chillona y estrepitosa

-sigue buscando grell- contesto un pelinegro de apariencia seria, con los ojos de un color verdoso amarillento, ese shinigami era William T. spears

-pero… llevo una década leyendo este libro dame un descanso- aventó el libro en una actitud totalmente infantil

-jiji otra década mas no hará daño- un peliblanco de aspecto algo misterioso hizo acto de aparición, era undertaker un ex  shinigami, el pelirrojo tomo de inmediato el libro con una actitud nerviosa

-dime Will ¿Cómo nos convenció de cuidar a la hija de ese mocoso?- susurro grell para que solo William lo escuchara, este dio un suspiro

-cuida tus palabras… - undertaker dejo ver su verdosa mirada, esa mirada denotaba seriedad, eso hizo que el pelirrojo diera un suspiro

-¡OH!- el pelirrojo casi se desmaya por tal mirada

-que problemático…- William lo sostuvo para aventarlo a un cómodo sofá que había

-tu esposo es demasiado fácil de seducir- dijo en una sonrisa burlona, cosa que enojo a William

-no es mi esposo- dijo acomodándose la gafas en señal de total incomodidad

En ese momento la puerta se abrió dejando ver  un pelirrojo idéntico a grell, solo por el cabello que estaba más corto y a su lado una pelinegra de aspecto desinteresado idéntica a William, ambos chicos aparentaban 17 años.

-entonces me dirás que estos niños los trajo la cigüeña- dijo burlón undertaker, ambos chicos eran hijos de grell y William, adoptados claramente, sin embargo grell los escogió tan idénticos a ellos que podía pasar como sus verdaderos hijos  

-Mina, Said ¿la encontraron?- pregunto a los shinigamis jóvenes, ellos se acercaron a su padre

-si la encontramos fisgoneando por la mansión phantomhive, mina se encargó de ella- Said era parecido físicamente a grell sin embargo tenia las actitudes de William

-pero la muy lista huyo antes de que la pudiera rematar… mama ¿estás bien?- se acercó a grell que aun permanecía desvanecido en el sillón, Mina era idéntica a William tenia ciertas actitudes de grell a la cual cariñosamente llamaba ‘mama’

-no importa, bien hecho- dijo regresando su mirada a un libro, el cinematic record de Nadia phantomhive, toda su vida escrita en forma de libro se encontraba ahí, siendo investigado- al parecer esto se pone interesante, encontró a Sebastián michaelis en el bosque y a regañadientes obligo a ciel phantomhive a llevarlo a la mansión-decía con una mueca seria   

-al parecer tuvo una pequeña pelea con su ‘mama’- Mina rio al leer el cinematic record de ciel phantomhive que le fue casi arrebatado por undertaker-. Undertaker ¿Por qué cuidad de la niña?- pregunto mina al enigmático peliblanco

-es mi ahijada- dijo simplemente- es solo un viejo favor que le debo a los phantomhive

-quizá porque es tu nieta- contesto Said tratando de reanimar a grell

-jiji no es mi nieta… por mucho que lo quisiera…- algo interrumpió la amena platica de los shinigamis

-vaya, vaya lamento interrumpir su amena platica…- dijo una adolecente de 14 años, su cabello era rubio amarrado a una simple coleta pero sus ojos era de un color carmesí, dando a entender que era una demonio

-¿¡TU?! Te deje malherida cómo es posible…- Mina fue callada por un certero golpe que no vio venir de la rubia

-vamos querida solo estaba jugando- dijo con una sonrisa algo burlona, Mina en un movimiento ágil saco su guadaña que era casi parecida a la de undertaker, una gran cuchilla puesta estratégicamente sobre una vara, empezó a pelear con la rubia pero esta parecía divertirse, Said se unió a la pelea con su guadaña, que era igual a la de mina solo que esta tenia doble cuchilla

La pelea se veía bastante pareja hasta que undertaker intervino y en un movimiento dejo fuera de combate a la rubia, con un movimiento brusco undertaker la sujeto por el cuello haciendo que perdiera el aliento

-bien acabamos con esto ¿Quién te mando?- dejo ver ese semblante frio que pocas veces dejaba ver

-es algo estúpido preguntarlo… - respondió la niña con soberbia a pesar de que está siendo sometida    

-no me quites el tiempo Soraya- undertaker estaba a punto de darle el golpe de gracia pero… la rubia en un movimiento saco la espada demoniaca y empezó a luchar con undertaker- jiji justo lo que esperaba de ti- la pelea era demasiado pareja, pero Soraya no parecía interesada en matar a undertaker, en un movimiento se puso en guardia para arrebatarle el cinematic record de Nadia a William, cosa que no logro, así que opto por herir a undertaker ese objetivo lo logro y tomo el cinematic record de ciel phantomhive

-muchas gracias undertaker- hizo una reverencia con una sonrisa burlona y antes de que Mina y Said reaccionaran la rubia había huido con el cinematic record de ciel phantomhive

-¡maldición!-mascullo undertaker poniéndose de pie con una mueca de dolor, la rubia había herido su costado y su orgullo

-esto será muy problemático- dijo mina ayudando a undertaker

-tendré que avisarle a Sebastián…- dijo con dificultad, si bien el corte que le había hecho la rubia no lo mataría si lo dejo gravemente herido…

Nadia corría grave peligro…

                                                  =====

Me encontraba jugando ajedrez con soma, mi padre a un seguía hablando con el señor michaelis… ¿de que estarán hablando? Quizá de mi madre, me empiezo a poner inquita cosa que nota soma

-oye Nadia ¿quieres pastel de chocolate?- pregunta con una sonrisa totalmente nerviosa, no quiero pastel de chocolate, quiero saber de qué hablan mi padre y el señor michaelis  

-no… tengo mucho sueño… puedo ir a mi habitación- digo con un bostezo muy bien fingido después de todo ya es de noche, antes de que soma diga algo yo me adelanto- iré a darle las buenas noches a mi padre….

Salgo corriendo antes de que soma me detenga, con sigilo camino al estudio de mi padre y pego mi oído a la puerta, no escucho claramente la conversación pero escucho algo

-Nadia ha crecido bastante- es la voz de mi padre… no es la voz del señor michaelis- es muy hermosa…- me sonrojo un poco

-cuidado con tus palabras michaelis- mi padre ríe… si está riendo, que raro conociendo lo celoso que es…

-¿tiene prometido?- eso hace que me sonroje más, después de todo el señor michaelis es guapo   

-jamás comprometería a mi niña, ella es solo mía- sonrió, ese es mi padre, celoso

- ¡Que posesivo! Yo que la quería como mi prometida- me sonrojo como un tomate, se perfectamente bien de que es una broma pero…

-tu michaelis tienes dueño… - escucho como si alguien se levantara, dueño… ¿a qué se refiere mi padre con dueño… no sería dueña? Quizá escuche mal, como la conversación no es interesante para mí, toco la puerta porque de verdad tengo sueño

-adelante- entro con una sonrisa, veo que mi padre se ve contento, sin pesarlo corro a sus brazos y le doy un beso en la mejilla

-ya me voy a dormir- mi padre acaricia mi cabello con suavidad

-si descansa Nadia- me da un beso en la frente

-buenas noches señor michaelis- el señor michaelis sonríe tomando mi mano para darle un beso, en un impulso yo bese su mejilla… ante esta acción me sonroje y Salí corriendo del estudio de mi padre… ¿Por qué hice eso? Me repetía mentalmente, me encerré en mi recamara, como pude me quite el vestido y el apretado corset, para ponerme mi camisón de dormir y mi bata, mire un rato por la ventana… había un eclipse lunar, lo sabía por el color marrón de la luna, miro hacia el bosque y veo unos ojos carmesí… ojos carmesí… ojos carmesí… ¿Qué es esto? Siento mis sentidos adormecerse, me muevo contra mi voluntad, abro la ventana… no sé qué hago solo quiero ir a esos ojos carmesí que me miran con burla, salto…

Misteriosamente caigo de piel sin hacerme ningún daño, pero sigo yendo hacia esos ojos carmesí, es como si me llamaran, como si me hipnotizaran. No quiero ir, no quiero ir, pero mis sentidos están adormecidos, todo lo estoy haciendo contra mi voluntad… no quiero

-vamos Nadia… tengo un cuento que contarte- esa voz… otra vez siento el deja vu… la luna empieza a verse carmesí, es como si ese color tuviera un efecto en mi… siento mis ojos arder… ¿Qué está pasando?...

Llego a un lago y es ahí donde mis sentidos recobran vida… frente a mi esta una chica de 14 años con el cabello rubio y los ojos de un carmesí destellante, como los ojos del señor michaelis

-hola Nadia- me sorprendo al escuchar mi nombre…

¿Quién es esa rubia?  


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