Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El amor más puro. por kozzha

[Reviews - 68]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola!!! 

Salen nuevos personajes :3, quienes serán??? :O

Muchas tendrán la duda de Aomine, ésta será respondida en el próximo cap, no quiero hacerles spoiler. 

Muchas gracias a todas por leer, como todos los fics que he subido, éste tbn ha sido muy bien recibido. 

Besos mil. 

A mediodía, una fuerte nevada cayó en la capital de Japón, eso imposibilitó a los profesores del Hoikuen   Hiyoko de realizar las actividades al aire libre y por supuesto, que los niños salieran al recreo. Para distraer a los niños, cada profesor se dedicó a hacer miles de cosas a sus correspondientes alumnos. Precisamente el profesor Tatsuya se encontraba cantando con sus alumnos una canción cuando el tímido Taiga apareció en el aula.

-Disculpe, Himuro sensei-susurró el muchacho.

-¿Qué sucede, Taiga?-el aludido centró sus ojos grises en la entrada del aula.

-Yo...-jugó con sus dedos-Bueno...es que-balbuceo cohibido-Quisiera saber si podría prestarme al señor oso.

-¿Eh? ¿Quieres al señor oso?-pestañeó confundido-Bueno, no tengo ningún problema- se encogió de hombros.

-Muchas gracias, sensei.

Himuro se fue hacia un armario empotrado y mientras buscaba al señor oso, los alumnos de Tatsuya miraban con ojos curiosos a un sonrojado Kagami. El señor oso resultó ser un títere de mano en forma de oso.

-Aquí tienes-le tendió el pequeño títere.

-Muchas gracias-Kagami sonrió y antes de salir del aula hizo una pronunciada inclinación.

-¿Para qué lo querrá?-se encogió de hombros e hizo a un lado ese asunto y continuo con la canción que estaba cantando junto a los niños.

 

 

Kuroko estaba improvisando un cuento con ayuda de su títere en forma de conejo  cuando llamaron a la puerta.

-Adelante-dijo escueto.

-Puedo...¿Puedo pasar??-preguntó Kagami, tímido.

-Por supuesto que sí, Kagami-kun.

-¿No interrumpo?-el pelirrojo entró dando pasos tímidos mientras que sus manos se encontraban escondidas detrás de su ancha espalda.

-Para nada-negó repetidas veces con la cabeza-¿Que se le ofrece?-preguntó Kuroko.

-Yo...-carraspeo-El señor oso y yo quisiéramos preguntarle algo.

-¿El señor oso?-el profesor arqueó una ceja.

-Si-Kagami barrió  a los alumnos del profesor quienes miraban expectantes aquella escena, Taiga tragó saliva y sacó de detrás de su espalda ambas manos, en una tenía al títere que Tatsuya le había prestado, éste sostenía una caja pequeña con un  anillo. Kuroko abrió los ojos de sorpresa y no pudo evitar sonrojarse.

-Ku…Kuroko sensei usted…usted aceptaría…-balbuceó el muchacho con el rostro completamente rojo.

-Taiga onii-chan se le va a confesar a Kuroko sensei-susurró una niña a su compañera de al lado.

-No es una confesión, Riko-chan, es una proposición…le va a proponer matrimonio-le dijo la otra niña.

-¡Oh!-la niña de nombre Riko se llevó ambas manos a la boca.

Todos los niños comenzaron a cuchichear, uno se aventuró a decir.

-Buena suerte, Taiga onii-chan.

Y olvidándose por completo de que los niños estaban ahí, Taiga prosiguió.

-¿Aceptaría casarse conmigo?-acercó al señor oso al títere del profesor el cuál se llamaba Momiji-chan.

-Kagami-kun…-musitó Tetsuya, incapaz de responder-Yo…

Al ver que Kuroko dudaba, Taiga comprendió y cabizbajo asintió.

-Entiendo…-tomó la caja y la guardó en el bolsillo del pantalón. Se quitó al señor oso y lo guardó en la otra bolsa.

-Espere, Kagami-kun-la pequeña mano del profesor le detuvo-Yo…yo…-apretó los labios y su sonrojo aumentó-Yo acepto casarme con usted…

-¿En serio?-Kagami pestañeó, incrédulo.

-Sí-asintió cohibido.

-¡Kuroko!-exclamó feliz, alzando al muchacho quién ante la inesperada acción, lanzó un grito-Te amo-y le dio un beso.

-Kagami-kun, aquí no-replicó Tetsuya.

El pelirrojo reaccionó y miró a los niños presentes, éstos comenzaron a  aplaudir.

-Lo siento-bajó al profesor quien tenía el ceño fruncido. Sacó la caja de nuevo y le puso el anillo a su prometido-En la noche celebraremos-y le guiñó el ojo.

-Kagami-kun-musitó Kuroko más abochornado que nada.

 

 

Kise salió del aula arrastrando su pierna derecha, la razón, una pequeña niña de tez tostada y ojos azules que se había pegado como sanguijuela a su pantorrilla.

-Aominecchi, en serio. Necesito ir al baño-se quejó el rubio. Como respuesta, la niña se aferró aún más a la pierna de su profesor. Kise hizo un puchero y caminó con sumo cuidado hacia el aula de su salvador, Himuro Tatsuya.

Cuando irrumpió en el aula de su compañero, el profesor estaba ensayando el silabario hiragana con los niños.

-Himurocchi-chilló Kise, asomándose por la puerta.

-¿Qué sucede, Ryota?

-Aominecchi no quiere dejarme ir al baño.

-Ya veo-asintió el moreno y caminó hacia le entrada del salón. Se hincó para quedar a la altura de la niña y con sus bella sonrisa dijo-¿No quieres esperar aquí a Ryota sensei?-la niña le miró con ojos curiosos-Tengo algunas paletas que puedes comerte mientras Ryota va al baño-Himuro sacó una paleta de su mandil y se la enseñó a la pequeña, ésta abrió los ojos y sin pensarlo dos veces, soltó la pierna del rubio y tomó la paleta de caramelo. Himuro sonrió complacido mientras que Kise lanzaba un suspiro de alivio.

-Ahora vuelvo por ella-y dicho esto, salió corriendo hacia el baño.

Himuro llevó a la niña a su escritorio y la sentó en la silla, le acercó unos crayolas y una hoja de papel y la puso a dibujar mientras su profesor regresaba.

-Himuro sensei-una vocecilla le hizo dejar a la niña y bajar la mirada. Detrás de él estaba un niño moreno que peleaba con su flequillo negro.  

-¿Qué sucede, Kazunari?

-Pelo…él pelo molesta a Kazu-dijo ceñudo.

-Entiendo-asintió Himuro y buscó en el bolsillo de su delantal. Sacó una goma para el cabello, se hincó y recogió el flequillo del niño-Listo-dijo satisfecho de su labor-¿Estás bien  así?

-Sippy, Kazu está bien así-y le dedicó una bella sonrisa.

-Me alegro-Himuro se enderezó y vio cómo su alumno regresaba a la mesa en donde le esperaban sus amigos. Sin poderlo evitar Himuro recordó a cierto alumno que tuvo muchos años atrás. La madre del niño adoraba el cabello de su hijo, por lo que siempre se lo dejaba largo. El niño, de nombre Atsushi, siempre se quejaba de su cabello pues le estorbaba, por eso Himuro siempre tenía gomas para el cabello y como lo había hecho con Kazunari, Tatsuya siempre le recogía el estorboso flequillo. El moreno esbozó una sonrisa nostálgica-ya han pasado tantos años…-musitó.

-He terminado, sensei-gritó un niño de cabello negro y lentes, quien alzaba su mano.

-¿Eh?-el profesor pestañeó. Sacudió la cabeza y caminó hacia la mesa en donde estaba el niño-Muy bien Soichi, muy bonita letra-le felicitó.

-Gracias, sensei.

A los pocos minutos regresó Kise.

-Muchas gracias, Himurocchi-dijo el rubio sonriente.

-No es nada.

-Desde que inició el curso, Aominecchi no me suelta para nada-y bajó los hombros.

-Por lo que veo le agradas mucho a Sakura-dijo el moreno al ver como la niña de piel tostada corría hacia su profesor y se aferraba a su pierna de nuevo. Kise sólo atinó a asentir.  Caminó  hacia la puerta arrastrando la pierna y antes de salir dijo en un susurro.

-¿Ya sabes la buena nueva?

-¿Eh?-Himuro se acercó a su colega para escuchar mejor.

-La buena nueva.

-No, ¿Cuál es?-preguntó curioso.

-Kagamicchi le propuso matrimonio a Kurokocchi.

-Ah…eso…

-Si. Pero lo mejor de todo es que Kurokocchi aceptó-y los ojos claros de Kise brillaron-¿No es lindo?

-Pues si-admitió el moreno.

-Ahh…-suspiró-el amor está en el aire, ¿No crees?-Tatsuya sólo se limitó a encoger los hombros-Bueno, tengo que regresar con mi clase-le guiñó el ojo a su compañero y con Sakura Aomine aferrada a su pierna izquierda.

-El amor está en el aire…-repitió Himuro y soltó una risilla ante la buena noticia-Un par de solteros menos en el Hoikuen.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).