-Eso fue lo que escuche, Hae.
Me volvió a decir Min algo intimidado ante mi tono, pero es que simplemente no podía creerlo. ¿Acaso es enserio? ¿Qué no es suficiente? ¿Por qué me tienen que pasar estas cosas? Se supone que ya estaba enterrado, se supone que habíamos quedado en algo, se supone... se supone que esto había terminado.
-¿Sabes el motivo?
Le pregunté a Min rápidamente, pero en vez de responderme sólo dejo su mirada fija en mi rostro, como si intentara saber lo que haría, como si intentara saber lo que pienso, como me siento. Y creo que lo logró al ver como sus ojos se apagaban y volvían a tener ese toque de compasión. No de nuevo, otra vez no, no quiero volver a pasar por estos momentos.
Sin esperar más por una respuesta salí del baño, Mi clase había empezado desde hace rato pero era más importante esta conversación. Al fin de cuentas, no creo que me reconozca, han pasado varios años sin vernos.
Desafortunadamente eso no era lo que mi corazón pensaba y se negaba a aceptarlo en sus momentos de rebeldía, en esos momentos donde siempre tenía que venírseme a la cabeza él.
Sentí un golpe en el hombro para después escuchar como hojas caían al piso y se regaban por esté. ¡Genial!
-Disculpa.
Dije agachándome para recoger como pude las hojas que habían quedado esparcidas, ¿si ves lo que haces donghae? ¡Todo por estar pensando en él!
Vi como empezaba a ayudarme a recoger las hojas para luego pararnos. Le tendí las hojas mientras lo veía por primera vez, ¡rayos! Sentía como toda mi sangre huía de mi rostro y mis ojos se abrían como platos. ¡Así que era cierto! Traté de ocultar mi rostro y estaba listo para salir lo más rápido posible pero él me detuvo.
-¿Donghae?... Hae.
Dijo sin poder creerlo, acercándoseme para terminar envolviéndome en sus brazos. Su olor. Como extrañaba sentirme así de cerca, sentir como me abrazaba, sentir como me hablaba pero sin escuchar lo que decía.
No había cambiado nada, la verdad es que yo tampoco pero pensé que tal vez el si iba a tener un aspecto más estilo su padre pero me equivoque, sigue siendo el mismo de antes, sólo se tinturo el pelo. Sin embargo, las lágrimas empezaron a deslizarse por mis ojos y mi corazón dolía. Me sentía destrozado por dentro, las heridas se abrían de nuevo y mis lágrimas seguían saliendo, pero esta vez Eunhyuk me miraba preocupado, sin rastro de su sonrisa. Deslizando sus dedos por mis mejillas tratando de secar las lágrimas que seguían cayendo por mis ojos.
Los recuerdos seguían recorriendo mi mente, mi cabeza iba a explotar si seguía así, mis sentimientos se estaban mezclando y por más que quería que parara me era imposible dejar que mi corazón palpitara así de rápido con el ahí.
¿Cómo puede actuar así? ¿Acaso no se da cuenta de lo que me está haciendo? ¿Acaso es tan inmaduro para no ver la clase de situación en la que estamos?
- Donghae. No llores.
Dijo mientras acercaba su boca a mi cara y sus labios eran los que se deslizaban por mis mejillas, haciendo un camino con ellos, haciéndome cerrar los ojos y rendirme ante lo que debía hacer, dejar que mi corazón dominara.
Esto es lo que soy, esté soy yo, y simplemente esto es lo que quiero. Quiero poder recuperar todo este tiempo y poder estar con Eunhyuk sin importar todas las consecuencias que esto me traiga porque estoy enamorado de Eunhyuk como loco desde hace tanto tiempo que no puedo seguir pensando en el que dirán sino que esta vez seguiré mi corazón.