La Luz entra por los pequeños espacios que deja la cortina. Taehyung despierta e intenta levantarse cuando, unos delgados brazos se lo impiden. Jungkook duerme a su lado con la mayoría de su cuerpo pegado al suyo, e intenta levantase sin éxito. Hace un movimiento brusco y el maknae se despierta
–¿Qué hora es? –Pregunta perezoso.
–Todavía es temprano pero tenemos que bajar para encontrarnos con los demás –responde Taehyung–. Me iré a duchar. –Dicho esto, se levanta para irse pero la mano del maknae lo retiene.
–Hyung –empieza nervioso y sin mirar a la cara al mayor–. ¿Nos podemos duchar juntos? Así bajamos antes –se escusa tras la pregunta.
–Claro bebe, vamos.
Taehyung restriega con cuidado la espalda del menor, los dos están desnudos en el reducido espacio de la ducha; pero al único que pronto le dará un infarto, de lo nervioso que está, es a Jungkook. Las manos de Tae recorren suavemente a un maknae que poco a poco se excita imaginando las cosas que podría hacer con su hyung. El mayor nota lo que está pasando en la hombría del menor y sin miramientos la aprieta haciendo que Jungkook suelte un ruidoso gemido.
–¿Q...qué haces, hyung? –Dice con esfuerzo mientras aguanta los jadeos que quieren salir de su garganta, gracias al vaivén que le está proporcionando Taehyung con su mano.
–Somos amigos y a tu edad es normal que estas cosas pasen –responde el mayor con naturalidad–. Como eres mi dongsaeng es mi deber ayudarte.
Jungkook no dice nada, la mano de Taehyung aumenta el ritmo y al pequeño se le hace cada vez más difícil aguantar sus gemidos.
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–¿Por qué tardan tanto? –Dice exasperado Yoon Gi.
–Les habrá surgido algún problemita –responde Ho Seok riendo; pues él había ido a despertar a sus amigos y, no encontrando a nadie en las camas se disponía a irse cuando unos gemidos provenientes del baño llamaron su atención.
<<No me puedo creer lo rápido que es este chico. Y pensar que todos lo toman por inocente>> pensó en ese momento y salió de la habitación para no molestar.
–Y hablando del rey de Roma, aquí llegan por fin –anunció Nam Joong cuando los dos miembros de BTS, que faltaban, aparecieron.
–Lo lamento –se disculpó Kookie haciendo una reverencia.
–El hotel tiene Spa así que hemos decidido ir Suga y yo –anunció el líder ignorando la disculpa–. Creo que a partir de aquí cada uno puede hacer lo que quiera, no hace falta que me pidan permiso-. Rap Monster terminó de hablar y con un movimiento se fue junto con su amigo.
–Jiminie, Jin y yo tenemos cosas que hacer –dijo Ho Seok giñándole un ojo al maknae y dedicándole una mirada que se supone que decía “buen trabajo”.
Otra vez había quedado solos, el menor agradecía que Hobie-hyung cumpliera con lo que le había dicho, diligentemente.
–¿Qué quieres hacer kookie?
–Mmm... ¿Qué tal si vamos a comer a algún lugar?
–Bien, he visto un restaurante aquí al frente que dicen que es muy bueno.
Los dos chicos se encaminaron al lugar, Taehyung iba contando lo alegre que estaba de tener un descanso y el menor solo aprestaba atención y, de vez en cuando asentía. Llegaron y se sentaron en una mesa próxima a la ventana, todavía no se habían encontrado con alguna fan y eso les hacía tener un respiro.
–¿Qué desean? Preguntó una camarera, tras acercarse.
–Dos desayunos, por favor. –La camarera apuntó y se marchó dedicándoles una sonrisa a los dos chicos.
–Después de desayunar podemos dar una vuelta –sugirió Kook.
–Claro.
El habiente aunque era bueno no dejaba espacio para más conversación. El maknae tenía un millón y una preguntas en la cabeza y, a la que más le daba vueltas era a cómo podría acercarse más a su hyung.
<<Podemos comer, ir a dar un paseo pero, ¿cómo sigo acercándome más después de la situación del baño?>>. Y de pronto una bombilla se volvió a prender encima de su cabeza.
–¿Qué es lo que te hace tanta gracias? –Preguntó alegre Taehyung.
–Oh, esto...–Y fue salvado por una camarera acercándose con lo que habían pedido.
–Aquí tienen su pedido.
–Gracias –respondieron al unísono.
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Caminaban por un parque, ya el sol se escondía en el horizonte y algunas parejas iban agarradas de la mano por el paseo. Tae y kook llevaban todo el día juntos y habían decido no mencionar el asunto del baño. Se sentaron en un banco y contemplaron la puesta de sol.
Taehyung alzo su vista al cielo y se sumergió en sus pensamientos, ignorando que el que estaba sentado al lado suyo ideaba otro de sus pequeños planes.
<<He tocado a mi querido dongsaeng, ¿qué se me estaba pasando en la cabeza en ese momento?>> Suspiró V por sus pensamientos.
–Hyung –llamó el menor–, juguemos a algo.
–¿A qué quieres jugar?
–El último en llegar a ese árbol –señalo con una enorme sonrisa el árbol a cinco metros de ellos–, es un tonto. –Y salió corriendo sin darle tiempo al mayor a reaccionar.
–Espérame, ¡tramposo! –rio V y salió detrás del menor.
Los dos chicos corrían y Jungkook que iba delante se tiró al suelo intentando que pareciera lo más real posible.
–Ahh, mi pie – empezó a lloriquear.
–¿Estás bien? –Se arrodilló Taehyung cuando llego al lado de su amigo.
–Creo que me he doblado el tobillo –se quejó.
–Volvamos al hotel –habló preocupado el mayor.
–Creo que no voy a poder caminar –dijo el maknae y una pequeña lágrima cayo por su mejilla.
Taehyung cargo a la espalda a su amigo y emprendió el viaje de vuelta al hotel.
<<Podría ganarme un premió y todo, de lo bien que actuó>> pensó Jungkook con una gran sonrisa.
La espalda de Taehyung era reconfortante y su ropa tenía un aroma a limón que envolvió a Jungkook. Al pequeño le estaba entrando sueño y con un último pensamiento su vista se nublo del cansancio.
<<Creo que puedo empezar con el segundo paso Hobie-hyung>>.