Entraron al edificio con calma, Murasakibara entendía la situación, no quería forzarlo a nada de lo que pasara en esa habitación que pronto podría convertirse en algo bueno o malo dependiendo de las reacciones de esos dos sujetos que no tenían ni la más mínima idea de cómo tratarse.
—Vuelvo enseguida — dijo Akashi abriendo la puerta de la habitación.
El hospital pertenecía a la familia de uno de sus compañeros de Teiko; Midorima Shintaro, su padre estaba recostado en la cama viendo hacia el gran ventanal que le proporcionaba una vista muy bonita hacia el cielo.
—Seijuro…— notaba su presencia pero ya no sabía si realmente estaba en ese lugar solo era una más de sus alucinaciones.
—Padre, ¿Cómo te encuentras? — la pregunta le dolio.
—Igual —
— ¿Necesitas algo? —
—Fue mi culpa, fue por mi maldita culpa…— susurro aprontándose su pecho, Akashi no sabía cómo reaccionar, en el fondo él era su padre y por más que lo negara en realidad había cambiado.
—Fuiste un mal hombre, me quitaste a mi madre, te opusiste a mi boda, durante mucho tiempo hiciste de mi vida un infierno intentando que fuera solo lo que tú querías que yo fuera, no me veías ni como un empleado yo no era nadie para ti…— recrimino acercándose — Lastimaste con tus comentarios a la persona que amo, quisiste terminar con nuestros planes haciendo lo que estaba en tus manos para lograrlo, eres frio, patético, sin corazón , odioso, malvado, manipulador, egoísta… —se estaba desahogando en ese momento, quería decirle lo que siempre quiso , decirle que para él no había sido un padre — Pero esto no fue tu culpa, así que no tienes que…— pero de lo que se estaba culpando en realidad no era su culpa.
—Mi nieto está muerto, al fin pude hacer las cosas bien y lo único que logre fue destruir a la única familia que tenia…— estaba destrozado, Akashi en su vida había visto a su padre de esa manera tan miserable, pero podía entenderlo.
El día en que Natsuki fue secuestrado estaba bajo el cuidado de su abuelo, quien lo adoraba y consentía como si fuera su hijo, ese niño había traído paz al corazón del padre de Akashi, por fin después de tanto tiempo intentaron ser una familia.
—No fue tu culpa, yo también estaba ahí, incluso Atsushi está ahí, todos estábamos ahí y nadie pudo hacer nada, después de todo no soy absoluto como creía…— su padre seguía sin poder contenerse.
—Lo siento, perdóname por favor…— ¿Cuán grande podía ser el dolor de su padre para estar pidiéndole perdón de esa forma?
—No hay nada que perdonar, es hora que me vaya — dijo intentado salir lo más pronto posible de la habitación.
—Dile que gracias —alcanzo a decir antes de que cerrar la puerta.
Al salir Murasakibara solo podía ver como su esposo intentaba mantenerse firme, seis meses de confinamiento realmente lo habían ayudado.
—Vamos a casa — pidió.
—Claro — respondió tomándolo de la mano.
El hijo de ambos había sido secuestrado y pocos días después encontrado muerto carbonizado por el fuego en una bodega abandonada, en el fondo agradecía que hubiera muerto antes debido al humo, no podía imaginarse a su hijo sufriendo mientras se quemaba vivo, no podía con esa imagen en sus recuerdos, no querían seguir con ese tipo de lamentos a sí que decidieron que debían salir adelante, pero juntos sin dejarse atrás.
—Mi padre dice gracias —
—Yo solo lo hago por ti Aka-chin — al ver esa pequeña sonrisa en los labios del grandote no pudo evitar sentirse mejor.
— ¿Llamaste a los demás? —
—Sí, pero ninguno estaban en condiciones de contestarme el teléfono — aseguro mientras subían al lujoso auto.
Ellos no eran los únicos que la estaban pasando mal en ese momento pero no podían preocuparse por otros si ellos mismos aun no podían superar su pérdida.
**Ministerio publico**
—Oye Satsuki-chan ¿Cómo se encuentran tus conocidos? — pregunto el jefe de la policía.
—Que yo sepa están reintentado hacer sus vidas — aseguro la chica mientras llevaba unas documentos de un lado a otro.
—Por supuesto — entro de nuevo a su oficina.
Por su parte la chica no podía parar de hacer lo que ella sabía: Recolectar información, ella estaba ahí en esa gran celebración cuando sin previo aviso alguien se llevo a varios niños del lugar, aun podía recordar la cara de angustia de sus amigos al notar que sus hijos no estaban por ningún lugar.
—Yo tampoco pude hacer nada — dijo para si la chica apretando los folders que tenía en sus manos. Una vez más como si no fuera suficiente saco el folder color azul de su escritorio, a eso se había reducido su vida, a un triste folder lleno de información que ya no tenía importancia.
Lo abrió con calma pasado el primer expediente.
Nombre: Akashi Natsuki
Sexo: Hombre
Edad: 4 años
Padre: Murasakibara Atsushi.
Madre: Akashi Seijuro
Desaparecido el 20-05-2014
Lugar: Parque de los Cerezos, Japón.
Encontrado muerto tras un incendio el 25-05-2014.
Lugar: Barrio bajo del puerto Oeste, Japón.
Causa de muerte: Asfixia por el humo del incendio.
Tomo fuerza para pasar la hoja.
Nombre: Midorima Takeshi
Sexo: Hombre
Edad: 4 años
Padre: Midorima Shintaro
Madre: Takao Kazunari
Desaparecido el 20-05-2014
Lugar: Parque de los Cerezos, Japón.
Encontrado muerto tras un incendio el 25-05-2014.
Lugar: Barrio bajo del puerto Oeste, Japón.
Causa de muerte: Fue ha aplastado por una de las paredes del edificio, donde ocurrió un incendio de grandes proporciones.
Nombre: Kagami Masaru
Sexo: Hombre
Edad: 3 años
Padre: Kagami Taiga
Madre: Kuroko Tetsuya
Desaparecido el 20-05-2014
Lugar: Parque de los Cerezos, Japón.
Encontrado muerto tras un incendio el 25-05-2014.
Lugar: Barrio bajo del puerto Oeste, Japón.
Causa de muerte: Asfixia por el humo del incendio.
Nombre: Aomine Loise
Sexo: Mujer
Edad: 4 años
Padre: Aomine Daiki
Madre: Kise Ryota
Desaparecido el 20-05-2014
Lugar: Parque de los Cerezos, Japón.
Encontrado muerto tras un incendio el 25-05-2014.
Lugar: Barrio bajo del puerto Oeste, Japón.
Causa de muerte: Desconocida.
Nombre: Kiyoshi Taisei
Sexo: Hombre
Edad: 4 años
Padre: Kiyoshi Teppei
Madre: Hanamiya Makoto
Desaparecido el 20-05-2014
Lugar: Parque de los Cerezos, Japón.
Encontrado muerto tras un incendio el 25-05-2014.
Lugar: Barrio bajo del puerto Oeste, Japón.
Causa de muerte: Desconocida.
Cerro de nuevo el expediente, ya no había razón para torturarse, sabía que sus amigos estarían bien, ellos eran fuertes, ellos podrían rehacer su vida una vez más.
Recogió sus cosas apresuradamente, olvido que tenía una cita con el departamento de investigaciones para seguir con el caso, a pesar de haber pasado cerca de seis meses, esa tragedia no sería tan fácil de olvidar, mucho menos por los implicados quienes exigían justicia.
Encontraría a los culpables así fuera lo último que hiciera en su vida.