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El fuego en mí por Daggett

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Episodio 13

Lucy, Thomas y… Kyle







Max caminaba por aquel lujoso departamento, pero ahora estaba envuelto en llamas, todos sus bellos muebles , cortinas, todo estaba consumiéndose por el fuego.
Miró hacia el gran ventanal, estaba destruido…alguien había escapado por ahí, aunque a esa altura nadie hubiera sobrevivido. De pronto escuchó un sollozo, por aquel pasillo que daba al sótano, donde encontró a Alex herido. Tuvo el impulso de caminar pero alguien tocó su hombro sobresaltándolo y despertó…



-¡¡que haces fuera de la cama!!

-buenos días para ti también, Max



El mayor recapacitó, no debió ser tan brusco, pero le molestó terminar aquel sueño…




-perdóname, Alex…pero sabes bien que no debes moverte, puede abrirse tú herida

-estoy bien, además hoy vuelvo al colegio, más bien, quiero decir…volvemos

-¿Cómo sabes?

-Lucy me dijo que los días que estuve inconciente nunca fuiste a la universidad, ella siempre te encontró junto a mi.

-tú amiga es muy…”observadora”

-anda ya y dame un beso de buenos días.



¿Acaso Max podía negarse? Realmente no, el chico comprendió que nunca podría negarle nada..
Max se levantó y se sentó en la cama, atrapó a Alex entre sus brazos y lo derribó, sentándole en sus piernas y cumplió su deseo…besarlo

Alex apenas podía tomar de los hombros a Max, mientras este metió sus manos por debajo del pijama del menor, quería sentir su piel…el beso cambió a uno más apasionado, Max devoraba la boca sin piedad de Alex y este se dejaba hacer, siempre dejándose llevar hasta donde Max quisiera.
El mayor terminó de besarle y luego pasó a su cuello, dándole pequeños mordiscos para luego llegar a su oreja y entonces le susurró.-¿como estuvo tú beso de buenos días…?

Alex se estremeció y se acurrucó en los brazos que lo apresaban, ya nadie podía negarlo, la relación se estaba volviendo más pasional, Alex lo deseaba tanto como Max.
El amor entre ellos estaba creciendo más…y en este punto, Max comprendió que nada ni nadie le separaría de él, aún se lamentaba haber sido infiel, pero ahora supo que ya no podría aunque lo intentara…el pertenecía a alguien, el pertenecía a Alex.


***************



Un rato después, Max acomodaba la corbata del uniforme de Alex, ambos de pie frente al espejo del cuarto del menor.

-ya estas listo, debemos irnos… (Decía Max mientras anudaba la corbata)

-gracias.


El menor se volteó y capturo un beso de Max, este le correspondió como siempre…tomándole en un abrazo fuerte.
Alex terminó el beso con mucho pesar, casi sin darse cuenta, habló

-OH Dios, en verdad…ahora ya no quiero irme, separarme de ti…


Después de terminar de decirlo, Alex se sonrojó de vergüenza, realmente estaba pensando en voz alta.
La mirada de Max se dilató, también estaba pensando lo mismo, estaba seguro que si en este momento se lo pedía, Alex en verdad no iría al colegio.
Desgraciadamente, siendo el mayor, tuvo que hacerle caso a su conciencia…


-anda ya… (Tomando a Alex de la barbilla) hemos faltado mucho…pasaré por ti y luego haremos lo que quieras, comer, ir al cine, estar juntos, lo que tu quieras.


-esta bien (devolvió una sonrisa, de esas que inquietaban a Max)


Se dieron un último beso (por esa mañana) y ambos bajaron con sus mochilas de vuelta a la vida escolar…



***************



Alex caminaba por la entrada del colegio, todo era bullicio…alumnos con el elegante uniforme negro y corbata roja deambulaban por todos lados.

El chico andaba con paso lento, debía cuidarse la herida en el abdomen, aunque ya casi no le molestaba…
Entonces la vio, su eterna amiga que estaba sentaba en una banca con la pierna elegantemente cruzada, esta le hizo una seña para que se acercara.
Ya estando juntos, la chica se levantó y abrazó a su amigo…


-bienvenido al infierno de la preparatoria…

-gracias-. Respondió el chico, aún sin soltarse del abrazo

-en verdad amigo, me da mucho gusto que estés aquí, te visitaba en el hospital, pero no el mismo, este en nuestro habitad.


Los chicos se separaron, se miraron a los ojos por un momento…en verdad se querían, siempre juntos desde niños y así seguirían siempre, grandes amigos hasta el final.
La chica le guiñó un ojo antes de separarse para decir:


-bueno, basta de sentimentalismo… (Agitando su largo cabello rubio) tenemos muchas cosas que hacer, las clases han estado…


La chica no alanzó a terminar, fue interrumpida por un tercero…


.-¡¡muy bien!! Se han separado, ya era hora, estaba empezando a sentirme celoso…


Ambos chicos voltearon…Alex estaba desconcertado, pero Lucy amplió su sonrisa.
Alex comprendió que quien había hablado era Thomas y junto de él, estaba aquel chico que había ayudado a Lucy con sus deberes…Kyle.




Inmediatamente Lucy se colgó al cuello de su novio…


-Mira, Alex…creo que no conoces a mi novio, el es Thomas.


Alex extendió la mano a aquel chico pelirrojo de ojos azules, aunque eran más parecidos a una tormenta, alto y muy esbelto.


-que tal, muchas veces estuve apunto de golpearte por no separarte de Lucy


Alex solo sonrió…de inmediato cambió su vista al otro chico.


-y este otro es el inseparable amigo de mi novio- Continuó la única chica del grupo.


Esta vez, Alex solo saludo levantando la mano, no tenía intención de dársela a aquel chico, siempre le cayó muy mal, siempre le sorprendía mirándolo para luego sonreír…si, eso le molestaba.

-¿que pasa, a mi no vas a saludarme de mano? ¡Vamos!


Kyle extendió la mano para saludar a Alex…kyle era un chico de mediana estatura, justo como Alex, de cabello completamente rubio que caía apenas sobre sus hombros.
Alex miraba aquellos ojos de color verde, brillaban con mucha sinceridad y entonces decidió corresponder al saludo.


-discúlpame, pensé que no tenía que ser tan ceremonial-. Se disculpaba Alex.

-oh no, yo solo pido el mismo trato que le diste a mi amigo-. Respondió el rubio dándole un codazo a Thomas.

Thomas y Kyle se miraron en complicidad y Lucy pudo notarlo, pero realmente ella no podía hacer nada, no podía revelar el secreto de Alex.



-Sean amables con él, acaba de salir del hospital-. Intervenía la chica.

-no te preocupes, amor… seguro que Kyle lo que menos quiere es molestarlo-. Respondía su novio de forma despreocupada.



Alex y Kyle se miraron hasta que el segundo rompió el contacto, sonriendo a su amiga. Kyle trató de acaparar de nuevo su atención argumentando:


-¿sabes? Aunque no lo creas, mucha gente preguntó por tú ausencia…

-¿en serio? No lo creo… soy el más impopular en este lugar.

-aunque no lo creas o no te des cuenta…mucha gente se fija en ti-. respondió el rubio.

-mi hermano si era popular…

-ah claro, quien no recuerda a Max Dumas…- dijo el pelirrojo novio de Lucy.

-yo no…-. Interrumpió Kyle… - el único Dumas que conozco eres tú-. Señalando a Alex.

-mi hermano fue un buen estudiante, muy popular y estoy orgulloso de él.


Kyle se encogió de hombros para decir…- si tú lo dices...


-¡chicos! Ya tenemos que entrar a clases-…. Interrumpía Lucy

-adelántense…yo tengo que visitar la oficina del director para entregarle mis justificantes de faltas.

Lucy se encogió de hombros y tomó de la mano a su novio y se alejaron.


-espera, Alex, te acompaño…


Alex retrocedió para mirar a Kyle, le confundía la amabilidad de quien nunca en toda su estancia en el colegio le dirigió la palabra.


-no, gracias…ya sé el camino.


Kyle quedó parado a un metro de Alex…


-vaya…no sabía que no te agradaba.

-no es eso…te agradezco que hayas ayudado a Lucy con mis deberes, pero en verdad no tenias que hacerlo.

Ante esas palabras la mirada de Kyle cambió…pero Alex no supo descifrarla.


-yo…yo no lo hice para que me agradecieras, simplemente quise hacerlo.


Alex comenzó a enojarse, era verdad…no soportaba a ese chico y se lo iba a demostrar.

-Escucha, Kyle…dejemos esto, nosotros no somos amigos, mi amiga Lucy es novia de tu amigo, pero eso no quiere decir que nosotros lo seamos. Siempre mirándome, siempre burlándote de mi y ahora esto…


Kyle bajó la mirada…por un segundo Alex se mostró arrepentido.


-esta bien, Alex…solo quería ser agradable, quizá sea verdad lo que se dice de ti, que eres un chico con dinero, mimado y arrogante.


Los ojos negros de Alex brillaron de furia, nunca le importó lo que pensaran de él y esta vez no iba a ser la excepción. Miró por última vez a Kyle, colgó su mochila al hombro y se dirigió a la oficina del director.


Estuvo media hora metido en aquella oficina, después se dirigió con la consejera, donde recibió un discurso de más de quince minutos acerca de que no importaba si estuvo medio muerto en un hospital…”tienes que ponerte al corriente”…aun escuchaba la molesta voz de la consejera.

Al llegar a la segunda clase, ya que la primera la había perdido, se sentó junto a Lucy…su amiga pudo notarlo, su amigo no estaba de buenas.


Al final de las clases, Lucy y Alex caminaban por el pasillo rumbo a la salida…



-vaya, no sabia que Kyle te era tan desagradable…

-no me gusta, es todo…no debiste dejar que te ayudara con mis deberes.

-de verdad, le dije que no…pero me lo pidió delante de Thomas y bueno, me avergonzaba negarme.


-ya, no hablamos más de eso, Lucy


Ambos quedaron en silencio, hasta que la chica decidió de hablar del gran evento (según ella) que ocurría el fin de semana.


-bien, Alex…este fin de semana en mi cumpleaños, me costó mucho trabajo convencer a mis papas para que se largaran y me dejaran sola con mis amigos, en fin…tanto tu como el cabeza dura están invitados.

-¿Alguna vez vas a llamar a Max por su nombre?

-¡Diablos! ¿Tiene un nombre?

-muy graciosa…

-¿cuento con tu presencia?

-ahí estaremos.




La plática tuvo que interrumpirse, en la salida, Thomas y Kyle estaban sentados en una banca, este último estaba sentando en el respaldar de la banca.

-no quiero dejarte solo, Alex…el cabeza dura no ha llegado.

-no importa, Lucy…ahora tienes novio, mi pequeña ha crecido.


La chica sonrió amigablemente, se despidió de Alex con un beso en la mejilla y fue por su novio. Alex observó como la parejita subía a una moto, no pudo evitar el pensar lo que dirían los conservadores padres de su amiga si la vieran montada con el pelirrojo en una moto.

Suspiró y comenzó a caminar rumbo a la calle, tenía que esperar a Max…pasó de largo donde aún estaba Kyle, Alex no le miró y no pudo darse cuenta que aquel chico de mirada verde no le perdió de vista.

En el acto, el coche de Max apareció, el apuesto universitario se bajó y ayudó a su chico a subir.

-vamos, Max…yo puedo subir solo…

-se puede abrir tú herida…


Ambos se sonrieron y el auto se puso en marcha


Kyle no los perdió de vista hasta que se alejaron…



********************




-baja la velocidad…me recuerda a aquel día.


Alex no pudo evitarlo, aún recordaba cuando en ese mismo auto viajaba malherido, cuando Max le llevaba al hospital.

-disculpa-… Respondió Max, Bajando un poco la velocidad…-¿fue un mal día?-.prosiguió.


-regular, tengo mucho que estudiar para estar al corriente.

-bueno, yo estoy igual…


En un alto, Max tomó la mano de Alex…el menor le sonrió ante el gesto.


-bien, Alex…por el camino de la derecha llegamos a casa…

-ah (respondió Alex sin saber cual era el punto de la conversación)

-y la izquierda…el camino a un día en que el tu y yo estemos juntos, después de tantas presiones lo merecemos.


-pero, Max…tengo mucho que estudiar…

-lo sé

-Y tú también

-vaya que lo sé.

-pero…como dices, lo merecemos…

-si, si, si…

En este punto de la conversación, al alto cambió y era hora de avanzar, los automóviles que venían detrás comenzaron a protestar con el claxon y con palabras altisonantes.

-bueno…supongo que un día más no empeorará todo

-comienzas a entender.

-que mas da… ¡¡a la izquierda!!


- ¡¡ese es mi chico!!


Por fin el auto avanzó y el tráfico volvió a fluir…



continuará...

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