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El fuego en mí por Daggett

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Notas del capitulo: aviso: extrema violencia en este, el penúltimo capítulo

Episodio 22

El fuego en mi: Primera parte

Unos años atrás…








Un Alex mucho más niño arreglaba su equipaje para salir de vacaciones. Escuchó que alguien tocaba la puerta.- adelante, esta abierto.



El mayordomo de la familia, el viejo Al, como todos le decían, entraba con aire triunfal.





-¿que pasa, Al?





-solo vengo a apurarlo, sus padres ya están afuera esperándolo….también el joven Max.





-¿Max?





-aha-… asintiendo con una sonrisa.





-pensé que no iba, él no quería salir con nosotros.





-el joven Max es muy testarudo, a pesar que ya casi tiene un año viviendo aquí, pero le he encontrado una debilidad.





-¿cuál?- levantando una ceja en forma interrogante.





-usted, joven Alexander.





El niño se sonrojó y el viejo Al se acercó y le revolvió el cabello con cariño.





-es la verdad, Joven Alex, yo solo tuve que decirle al joven Max que usted se sentía muy triste por tener que dejarlo aquí.





-¿y que dijo?-… preguntaba el niño muy esperanzado.





-lo citaré tal como me dijo-… el viejo Al se aclaraba la garganta, ante la risita traviesa de Alex…- “este, bueno…creo que me hace falta un poco de sol. Dile a los señores…este quiero decir, mis padres y a Alex que iré…pero solo por eso, nada más”.





Alex sonrió ante la imitación altanera que representó el viejo Al. Se sentó en la cama suspirando. Al se disponía a salir, pero estando en la puerta, antes de salir volteó para decirle al pequeño…-nunca lo dude, joven Alex…Max parece muy duro y testarudo. Pero tiene una debilidad, y esa debilidad es usted. Max nunca le negara nada…usted es su debilidad.





El pequeño Alex sonrió mientras el viejo Al cerraba la puerta….hoy iba a ser un buen día.






Presente….






El auto avanzaba por la carretera, ya estaban por llegar a su destino. Alex podía escuchar los gritos ahogados de Kyle dentro del maletero del auto .…l iba en el asiento de atrás mientras Max conducía y Dante iba en el asiento del copiloto.








-por favor, Max…ya debe faltarle el aire, debemos sacarlo de ahí.





Ante la inútil suplica, Max y Dante se miraron un momento para después reír con burla.











-Diablos, Max…te desconozco. ¿Que rayos te hizo esa mujer en la estación?








Max detuvo el auto violentamente. Dante tuvo que poner las manos en la guantera para no irse a estrellar contra el cristal. Alex vio como Max volteaba…sus ojos estaban negros, una fuerza invisible hizo que Alex se acercara al castaño…





-cuando hables de Diana, debes hablar con respeto…ella es mi familia…es mi todo.








Dante arrugó las cejas ante tal confesión, aunque no era ni la mitad de la angustia que sentía Alex, quien de forma brusca, fue de nuevo devuelto a recargarse en el asiento. Max volvió a poner en marcha el auto.





-comparto la angustia de tú hermanito-… se atrevió a intervenir Dante. — me gustabas más cuando pensabas por ti mismo.





-mi mente fue liberada…ahora pienso por mi mismo…ahora, estoy en contacto con mi verdadero yo, ¿y sabes?...me gusta.








El menor escuchaba muy atento la plática, ahora estaba seguro…ese no era Max.





-pero, Max…cuando lleguemos con Diana va a quitarte tus poderes y luego te matará…si no lo hizo antes, fue para que le entregaras al niño, ella se ha encaprichado con él. (Señalando al chico confundido de atrás)





-yo no cuestiono las decisiones de mi tía…no soy como tú.





-¿a que te refieres?





-a tú pasada traición








Dante dejó de mirar a Max para ver la calle mojada por una pequeña brisa. La tarde estaba cayendo por fin…-sé lo que hice, no me arrepiento.





-¿no lo haces? Eres un tonto.





-Max…deja al niño con el auto y vayámonos lejos. Si llegamos con Diana, tú destino es morir.





-no…mi destino es llegar al lado de Diana, con Alex.








De nuevo, la vista de Dante se posó en la silueta de Max, quien lucía muy sereno, para él, era evidente que el control de Diana sobre Max era irrompible. Este no era Max…ese chico se había ido y jamás volvería. Dante lo sabía y solo había un solo camino que seguir, pues estaba seguro que después que Diana consiguiera los poderes de Max y tener consigo a Alex…él seguiría en la lista y no pensaba terminar así, antes tenía que vengarse, como lo había trazado en su plan original.





-esta bien, Max…que así sea…








Del bolsillo, Dante sacó un artefacto eléctrico de defensa personal y atacó a Max. El castaño no lo vio venir y en pocos segundos se había desmayado por el choque eléctrico. El auto que ahora estaba a la deriva se tambaleaba por la solitaria carretera de forma peligrosa. Dante trataba de controlar el volante pero era inútil, una peligrosa curva se acercaba y el auto cayó al vacío rodando varias veces….





A pocos metros del auto estaba el cuerpo de Kyle, pues en la primera vuelta que el auto había dado, la portezuela del maletero se abrió, su cuerpo fue expulsado hacía afuera. El rubio comenzó a moverse dificultosamente, tenía rota la nariz y por ella expulsaba un hilo de sangre. El chico se levantó del suelo y miró hacia el auto que estaba totalmente volcado, de inmediato pensó en Alex.





Kyle se acercó al auto, las ventanas estaban rotas, fue fácil ver a Alex, ya estaba despierto y tratando de salir. La escena era algo rara, Alex vestía aún el pijama, mientras Kyle quien solo estaba en bóxer padecía el frío.





-Alex, ¡¡estas bien!!





-ayúdame a salir…





Kyle estiró un brazo, el cual Alex tomó y fue así como logró salir sin problemas. Pronto recordó que Max estaba adelante…





-ayúdame a sacar a Max, por favor…Kyle.





-pero, Alex…tú hermano esta fuera de control.





-no lo voy a dejar morir…








El tanque de gasolina estaba chorreando, Alex sabía que estaba a punto de volar y tenía que sacar a Max de ahí.


Cuando Alex y Kyle se acercaron,se dieron cuenta que Dante no estaba ahí…Dante ya había salido, pronto escucharon una cínica voz detrás de ellos.





-déjenlo ahí…él debe morir





Alex volteó y trató de írsele encima a golpes, pero Dante sacó un arma y apuntaba a los chicos mientras sonreía…-¡¡quieto ahí niño!!... Max debe morir, con ello Diana nunca tendrá sus poderes…es una doble venganza, pues…tampoco lo tendrás tú-. Kyle tomó por la cintura a Alex, para evitar que este hiciera una locura cegado por la rabia…








-eres un maldito…debiste morir aquel día en el fuego.





-mira quien habla, te apuñalé para que murieras desangrado y mira…pero, no importa, esto termina ahora.





Dante apuntaba con el arma al corazón de Alex y disparó…Alex cerró los ojos y cuando los abrió de nuevo, Kyle estaba frente a él y le tomaba de los hombros…-Alex- dijo el rubio a media voz…-tus ojos son hermosos-.Kyle se arrodilló y se llevó la mano al pecho, Alex se inclinó y lo detuvo en su caída. El rubio miraba con intenso amor a los ojos de Alex…





-Kyle…no…no debiste.





Kyle parecía querer decir algo, pero ya no pudo hacerlo, cerró los ojos para no abrirlos jamás…








-lindo…muy lindo-… se burlaba Dante…- ahora sigues tú…y también el maldito de tu hermano…pagará el no haberme amado.





Dante apuntó de nuevo, esta vez al rostro de Alex, pero antes de apretar el gatillo cambió la dirección, ahora apuntaba al tanque chorreante de gasolina, la explosión mataría a Max y a Alex…


Dante disparó, pero Alex alcanzó a correr. Cuando el auto estallo, el cuerpo de Alex fue lanzado por los aires debido al impacto. De inmediato se levantó, todo su cuerpo estaba adolorido y lastimado…miró con horror lo que antes era el auto. Ahora estaba totalmente vuelto en llamas, hasta el cuerpo de Kyle había desaparecido por el impacto. Sabía que Max no había despertado y nunca logró salir. Alex se derrumbó, se arrodilló frente a los despojos del auto. Finalmente Max le había dejado…Max estaba muerto, Kyle estaba muerto. No pudo resistirlo, comenzó a llorar silenciosamente.








De pronto sintió un jalón por el cabello…





-eres duro de morir, maldito niño…








Dante levantó por los cabellos a Alex, quien estaba débil y no podía defenderse.





-¡¡TE ODIO MALDITO…TE ODIO, DANTE!!





-jajaja, de nada te sirve odiarme…eres un niño insignificante, no entiendo como Max te amaba.








Dante quien todavía sujetaba a Alex por el cabello, tomó el brazo derecho de su enemigo y lo torció hacía atrás, provocando un aullido de dolor por parte de Alex.





-eso, sufre maldito…voy a decirte algo-. Dante acercó sus labios al oído de Alex para susurrar….-Max nunca dejó de amarte, en la pelea en la estación del tren, Diana ganó y tomó posesión de la mente de Max…tú Max no murió en la explosión hace un rato, tú Max murió ayer a manos de Diana.





Después de la dolorosa confesión, Dante soltó a Alex, empujándole con fuerza. Alex cayó de espaldas golpeándose con las rocas del suelo, el chico lloraba, pero de forma silenciosa, no tenía ninguna intención de levantarse.





Dante sonrió, sacó de nuevo su arma y apuntó al chico que estaba en el suelo, estaba apunto de jalar el gatillo cuando el arma comenzó a quemarle la manos, tuvo que soltarla cuando vio despedir fuego de ella, cuando el arma cayó al piso ya estaba en vuelta en llamas.





-como es posible… ¿Max?








Cuando Alex escuchó aquel nombre, rápidamente se levantó del suelo…ahora tanto él como Dante miraban hacía el auto en llamas, oyeron un golpe, un pedazo de acero se derrumbó para dar paso a una silueta envuelta en llamas, dicha silueta comenzó a caminar en dirección hacía ellos.





-no…esto…no es posible-… dijo Dante, sus ojos se llenaron de miedo al ver como Max, envuelto en llamas se acercaba a él.





Max pasó a un lado de Alex y continuó hacía Dante, quien ya comenzaba a retroceder, pero pronto ya no pudo hacerlo, una fuerza invisible lo obligaba a quedarse quieto. Cuando Max estuvo frente a él, el fuego que lo rodeaba terminó. La piel de Max estaba sin ningún rasguño, pero la ropa había desaparecido, consumida por el fuego. Dante y Alex miraron a un Max desnudo, en cualquier otra ocasión hubiera sido excitante…hoy no lo era.





-en lo dicho, Dante-…hablaba por primera vez Max…-eres un traidor.





Max levantó la mano y con ella el cuerpo de Dante, cuando su mano volvió a descender, también lo hizo el cuerpo de Dante, quien impactó en las rocas perdiendo el sentido.





-¿Mmmm…Max?-. Preguntaba un temeroso Alex.





Max no respondió, en cambió caminó hacía el desmayado Dante. Sacó el teléfono móvil e hizo una llamada.





-Diana, de nuevo Dante quiso traicionarte, pero lo puse fuera de combate. Manda a Rocky por mi y por tú regalo…Alex.





Alex bajó la mirada comprendiendo…Dante tenía razón, su Max ya había muerto.








En pocos minutos, el auto de Rocky sonaba el claxon anunciando su llegada. Abajo en el barranco, Max tomaba de la mano a Alex y comenzaron a subir. Max ahora tenía puesta la ropa de Dante, quien su cuerpo desnudo se arrastraba detrás de ellos.











********************











Diana estaba sentada en el amplio asiento de su elegante sala, la casa estaba ubicada a las afueras de la ciudad, un lugar muy exclusivo. Por primera vez en mucho tiempo ella no vestía de rojo. Sus ropas ahora eran negras, una blusa de manga corta, apenas le cubría el ombligo. Usaba también un pantalón ceñido, todo de negro. Su cabellera roja sobresalía aún más.


Su mirada azul estaba clavada en la puerta principal apunto de abrirse…por ella entraban Max y Alex de la mano, este último con una mirada triste y vacía. Detrás de ellos venía un desnudo Dante que venía siendo empujado por un muy orgulloso Rocky.





Diana se levantó y se acercó directamente a Dante…-lo sabía- Muy seria. -yo solo tenía que esperar a que sacaras las garras…de nuevo.





Dante la miraba con profundo odio, no habló…tan solo la escupió a la cara de forma despectiva. Diana se limpió el rostro sin ninguna ceremonia. Volteó para mirar a Rocky -llévalo a donde sabes-. El chico se sonrió, por fin llegaba su hora.





Ahora Diana miraba a hacía donde Max y Alex…-Max, dame a Alex…èl se merece ver esto. El castaño de inmediato soltó la mano del menor para que Diana la tomara, pero Alex caminó delante de Diana sin esperar nada…





-por favor…has lo que tengas que hacer, ya quiero que todo termine.





Diana asintió levemente, antes de irse con Alex se dirigió a Max…quédate aquí, espérame-. El aludido asintió gustosamente.








La pelirroja conducía a Alex por el interior de un pasillo. Al final bajaron por unas escaleras. Una vez abajo Alex reconoció que estaba en una especie de cárcel. Había dos celdas, en la primera había una chica…-hola Nina-. Saludó Diana. En la segunda celda estaba Dante todavía desnudo, Rocky afuera, disfrutando mucho.





Diana pidió la llave a Rocky, después hizo una seña para que Alex entrara. Cuando Rocky iba a hacerlo, Diana se lo impidió….-Rocky, tú ve con Max…vigílalo.





-pero Diana, yo quiero ver…





La chica le respondió con una dura mirada a lo cual Rocky tuvo que salir e irse. Acto seguido, Diana cerraba la celda. Alex aún no entendía que hacían encerrados ahí los tres. Dante solo miraba a Diana…





-me gusta tú mirada, Dante…al fin sale a flote lo que en verdad sientes por mi.





-¿asco?- respondía Dante, aún su voz conservaba la altivez y el cinismo de siempre.





-asco es lo que siento yo por ti…tanto a ti como a Marina les di todo, ambos resultaron unos traidores.





-me aburres.





-ya estoy por terminar, despreocúpate…





-quiero informarte algo…si yo muero, algo muy grave te pasará. Al momento de confirmarse mi muerte. Aparecerán pruebas de todos tus crimines. Todos esos niños inocentes.





-¿debo creer eso?- preguntaba la chica mientras sonreía…-es un truco muy viejo.





-créeme…yo estaría muerto, pero desde el infierno disfrutaré verte hundida. Esa será mi venganza sobre ti.





Diana entrecerró los ojos mirando a Dante. Comenzaba a dudar…











Dante rió divertido y esta vez miró a Alex con burla…-aaah, si el niño esta aquí…perdona por no ir al velorio de tú novio, el rubio.








Alex apretó los puños, estaba por lanzarse sobre Dante, pero Diana lo detuvo…-espera, Alexander, pronto le borraremos la risa a esta rata.





-no me asustan…








Diana sacó de la bolsa del pantalón un extraño aparato con un botón rojo. Sin mucha ceremonia lo oprimió. De pronto, la pared detrás de Dante se abrió, este volteó para mirar pero solo encontró oscuridad y una terrible peste. El chico trataba de enfocar la vista para ver dentro del cuarto que se abría pero era inútil…Diana comenzó a sonreír, disfrutando. Alex solo se tapaba la nariz por el horrible olor.


Pronto se escucharon unos torpes pasos, Dante arrugó las cejas sin comprender, los pasos cada vez se hacían más cercanos, hasta convertirse en una silueta, en un momento más, Dante pudo verlo…retrocedió dos pasos horrorizado antes la visión del cadáver andante de Marina…








-¿ya no sonríes, Dante?- preguntaba, Diana.





Alex también reconoció a la chica, el mismo presenció el como Diana la había vuelto a la vida. Pero ahora el cadáver de Marina estaba más descompuesto, apenas y podía caminar. Las cavidades de los ojos estaban llenas de gusanos, lo mismo pasaban en la boca, ya no quedaba mucha piel en sus manos.





-Diana….por….favor….quiero….comer…aaaghhh





Dante estaba aterrado, sabía lo que eso significaba…





-ahora puedes comer Marina-…confirmó Diana….-puedes comerte a Dante…es tuyo, como siempre quisiste.





-NOOOOOOOOO





El grito de Dante solo provocó la carcajada de Diana. Mientras Alex… por extraño que pareciera, estaba impávido, ninguna expresión en su rostro.





Marina se acercó a Dante, caminaba con mucho trabajo, Dante negó con la cabeza y la empujó lejos de él. El débil cuerpo de marina cayó de bruces pero de inmediato comenzó a levantarse.


Dante trató de correr, pero Alex por fin reaccionó y tomó a Dante por sorpresa, le asestó una patada en el estomago y el chico cayó de rodillas al piso. Marina comenzaba a acercarse.Alex, quien estaba lleno de odio contra él, le aprisionó las manos para que Marina pudiera acercarse…





-anda, vamos…¡¡¡comete a este maldito ya!!!








-NOOOO…¡¡SUELTAME MALDITO NI–O!!





Marina terminó de acercarse, se arrodilló ante Dante, abrió la boca, Dante veía con horror como los dientes de la chica muerta estaban afilados, era una especie de depredadora lista para devorar. Marina se acercó al cuello de Dante, quien no pudo hacer nada, pues Alex lo tenía bien sujeto….Marina abrió la boca y mordió el cuello de Dante, desgarrándolo, llevándose un buen bocado de carne en la boca.





-AAAAAHGGGG….





El grito de dolor de Dante fue monstruoso, Marina volvió por otro bocado, mientras Alex acercaba su rostro al desgraciado chico…-quiero verte morir, muere, muere, ¡¡MUERE!!





Diana se acercó y apartó a Alex…-tranquilo, ya no puede escapar, Marina lo ha hecho suyo, como siempre quiso.





El cuerpo de Dante temblaba en el suelo, un charco de sangre comenzaba a rodearlo. Las manos huesudas de Marina le acariciaron el desnudo vientre, para después hundirse en el y sacarle las entrañas. Dante volteó la cabeza para mirar a Diana una última vez….el moribundo chico estiró el brazo y extendió la mano para que Diana la tomara, esta solo se cruzó de brazos para observar como a Dante se le escurrían las lágrimas, dio un último suspiro y murió mirando a Diana.





La pelirroja abrió de nuevo la celda, tomó un bote de gasolina que estaba cerca, entró de nuevo y roció al cadáver de Marina que seguía comiendo del cuerpo de Dante. Diana encendió un cerillo y lo arrojó a donde estaba el horrible espectáculo, ambos cuerpos se prendieron rápidamente. El cuerpo reanimado de Marina cayó sobre el de Dante, muriendo de nuevo. Ambos se consumirían juntos.





Diana tomó a Alex del brazo para sacarlo de ahí…





Una vez afuera, Diana se puse frente a Alex…-Alexander…acabas de ver como Marina y Dante, mis favoritos…pagaron su traición.





Alex bajó la cabeza, quería perder el contacto con la realidad. Pero Diana no lo permitió, le tomó con las manos ambas mejillas…-quiero que seas mi nuevo favorito, Alex…quiero tenerte siempre conmigo.





Alex asintió, tomó las manos de Diana que aún estaban en sus mejillas…-quiero ser tuyo, lo acepto…ya nada me importa.








Era cierto, Alex había perdido todo contacto con la realidad. Ahora experimentaba un estado de abandono.


Diana sonrió y tomó la mano del chico alejándolo de las celdas. Alex lo aceptó… ya no le importaba nada, Max se había ido, Kyle estaba muerto y ya se había vengado de Dante.





continuará...


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