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El fuego en mí por Daggett

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Episodio 2

 

Solos

 

Nancy y Robert  provenían de un largo viaje de negocios de 6 meses...El viejo Al los había ido a buscar al aeropuerto, ellos iban en la parte trasera del coche....Al observaba por el largo camino boscoso que tenía que recorrer para llegar a la alejada mansión, de pronto su visión se topó con la de una joven chica que parecía tener problemas con su auto.

 

-Señores, la chica de adelante parece tener problemas

 

-para y ayúdala-. Respondía Robert…- no tenemos prisa y además  eres el mejor mecánico.

 

Nancy asentía mientras  tomaba el brazo de su esposo...tenia muchas ganas de ver sus hijos, así es... hijos, pues Max ya era suyo tanto como Alex.

El viejo Al bajó del coche y se dirigió a la chica

 

-hola ¿puedo ayudarte?

 

La chica sonrió para responder. - Gracias, no cualquiera se detiene a ayudar, este camino es tan solitario...

 

Al levantaba la portezuela del auto para ver el problema...no se veía nada adentro, los cristales estaban totalmente polarizados.

 

-a propósito, me llamo Marina.

 

La chica le extiende la mano...cuando el viejo la toma, marina le da un rodillazo en el vientre al pobre Al, quien cae adolorido al suelo...sin poder levantarse...

 

Dentro del auto Robert y Nancy vieron la escena

 

-espera aquí-, reaccionaba Robert de manera protectora. -Creo que esto es un asalto.

 

Robert  salió del auto y lo siguió la mirada asustada de Nancy... -¿Por que hiciste eso? Gritaba el hombre, habían lastimado a aquel viejo que estimaba.

 

 

-Ah lo siento de verdad-. Respondía la chica, su voz sonaba falsa y arrogante, mientras sacaba un arma y le apuntaba directamente a la cabeza. Desde el auto, Nancy miraba con horror.

 

 

-¡¡Robert!! NOOOOOOOO

 

 

Marina dispara y Robert cae al pavimento sin vida...la mirada de marina se torna hacía Nancy...Esta como puede pasa a la parte delantera del coche y trata de arrancar, pero el viejo Al tenía las llaves...cuando Marina se acerca apunta a su corazón y dispara...

 

El viejo Al vio todo horrorizado y trato de pararse...Marina llegó hasta él y lo tumba de otra patada, se dirige a la ventana de atrás del coche, esta se medio abre...apenas y se dibuja la silueta de una mujer de cabellos de un intenso rojo

 

-Ya esta...ahora están solos

 

La mujer de adentro sonrió de forma maligna...-Muy bien Marina...tú parte terminó, te llevó mucho tiempo averiguar donde estaba el chico y al final lo conseguiste-...la mujer hizo una pausa, parecía estar tramando lo que seguía. Marina desde afuera esperaba sus próximas instrucciones, estas no tardaron en llegar. -ahora comienza la segunda parte del plan...

 

 

-¿Y el viejo?- Mientras preguntaba, la chica fuera del auto miraba al viejo Al con lastima.

 

- tráelo acá...

 

Marina levanta al viejo adolorido y lo lleva a la ventana...cuando estuvo ahí la mujer de adentro saca una daga, la pone en su cuello y le dice...- No es...nada personal.

Hundió la daga en el cuello del anciano. Marina subió al auto y ambas se alejaban de la escena del crimen.

 

 

 

Max caminaba por los largos pasillos de la universidad rumbo a la salida...iba con su habitual grupo de amigos, ya afuera cada uno cogió su propio automóvil y se marchaba. Cuando Max estaba por subir al suyo un joven moreno se acercó a él.

 

-Hola me llamo Dante... tú debes ser Max-. Le extiende la mano...

 

-así es-, Respondiendo al saludo.

 

Max no dejaba de notar lo agradable y por que no decirlo...apuesto joven. El ya había asumido su personalidad gay, aunque nadie la supiera.

 

-Soy nuevo y estoy retrasado, escuche rumores que tu eras el indicado para ayudarme...estoy atrasado con historia del arte.

 

-a veces doy tutorías en mis ratos libres.

 

-Bien...no soy un cabeza dura, solo necesito estar al corriente...

 

Max sonrió y Dante le devolvía la sonrisa...en eso estaban cuando el director de la universidad se acerco a ellos, venia con un oficial de la policía...

 

-Max, ha sucedido algo terrible... hablaba el director mientras veía a Max con compasión

 

Al joven le dio un vuelco el corazón, entonces  el oficial tomó la palabra

 

-tus padres murieron en la carretera, parece que los asaltaron...

 

Max se llevó las manos a la cabeza y las lágrimas corrieron...

 

-¡¡¡No puede ser!!!  NOOO

 

-lo sentimos- dijo el oficial.  -sabemos que tienes un hermano menor, debes avisarle y luego venir a la estación de policía a reconocer los cuerpos. Dante miraba a Max con preocupación...el director y el oficial se marcharon dejándolos solos...Dante puso sus manos en los hombros de Max, el sabia mejor que nadie lo que era quedarse sin padres.

 

-Puedo ayudarte en algo...

 

Max negó con la cabeza y sin decir nada subió al auto y arrancó...por el retrovisor vio que Dante no se movió y seguía con la mirada al auto...mientras Max se alejaba rumbo al colegio de Alex,  no dejaba de pensar-que le voy a decir, Dios como le digo, mi pequeño Alex. Las lágrimas seguían corriendo y el camino fue amargo hasta que llegó. Como siempre lo vio sentado junto a su amiga Lucy...se limpió los ojos, respiró profundo y caminó hacia su pequeño. Alex no lo vio venir y quedo sorprendido cuando lo tuvo frente a él. -tengo que hablarte de algo...importante.

 

 

Alex miró con extrañeza a su hermano mayor. Lucy sabía que no era vista con buenos ojos, así que decidió retirarse.

 

 

-bueno, yo los dejo...

 

La chica se alejó...entonces Alex miró a su hermano, su corazón palpitaba a gran velocidad...se lo veía en los ojos. No era nada bueno...entonces Max se sentó junto a él y volvió a tomar  aire.

 

-Hermano, tus...nuestros padres…

 

El  pequeño no necesitó oír nada más...sus ojos se abrieron y el dolor comenzaba a aparecer

 

-Lo siento, ellos venían a casa y parece que los asaltaron...

 

Alex tenia una expresión  de terror, se llevaba las manos al rostro...las lagrimas no salían pero estaba en estado de pánico. Max abrazó a su pequeño hermano que no decía nada, solo permanecía petrificado

 

-Tengo que llevarte a casa,  luego tengo que ir a la morgue

 

Alex permanecía con el rostro impávido y con dificultad formulo unas palabras

 

-¿Y ahora, estoy...solo?

 

-¡Como dices eso! me tienes a mi...siempre me tendrás.

 

Alex seguía muy serio, nunca en su vida se planteó la posibilidad de que sus padres murieran tan pronto...Max tomó del brazo a su hermano y lo llevaba casi cargando al auto. Dentro, Alex se  recargó en la ventana. Su mente daba vueltas y vueltas...se preguntaba como seguir a partir de ahora...estaba metido en su dolor que no se daba cuenta que su hermano mayor estaba destrozado. Max conducía y cada que podía echaba una mirada a Alex....

 

No hubo funeral...Nancy y Robert habían dejado estipulado que no habría funerales...sus cuerpos fueron cremados y sus cenizas depositadas en la cripta familiar...ahí los familiares y amigos de los fallecidos daban el pésame  al Pequeño Alex...Max nunca fue bien visto por los demás...era el hijo adoptado,  para ellos Max no era nadie...el mayor se había acostumbrado a esos rechazos, no había desahogado su dolor.  Terminando los servicios

Se dirigieron a casa, no estarían solos...con ellos iba el hermano de Robert... Nigel....quien no veía con buenos ojos al mayor.

 

Cuando llegaron  Nigel pidió hablar con ambos, se sentaron en la gran sala...Alex y Max juntos...Nigel frente a ellos, que en todo momento solo se dirigía a Alex.

 

-Alex, vamos a llevarte a Londres con nosotros...la familia de tu padre cuidaremos de ti.

 

Max sintió un vuelco en el corazón cuando escuchó aquello...no podía apartarlo de él...no ahora...

 

-Mi lugar es aquí, con mi hermano-... respondió el menor con convicción

 

-con todo respeto para Max, pero sabes bien que no lo es...yo administrare tus bienes

 

Entonces el mayor decidió intervenir...

 

-Mi hermano se queda conmigo...

 

Alex le sonrió, pero Nigel no se daría por vencido tan fácil.

 

-Muchacho, su lugar es con los nuestros...

 

-Su lugar esta aquí, esta es la casa de sus padres...yo soy su familia

 

Alex le tomó la mano y la apretó, sintió tanta seguridad. Nigel se levantó, había perdido una batalla pero no la guerra....

 

Esa noche Max no durmió...en su pecho sentía una gran opresión...Alex tampoco pudo dormir...se sentía culpable por esos sentimientos hacía su hermano...y pensaba ¡si Max lo supiera se asquearía y seguro me dejaría ir con el tío!.

 

Al siguiente día Nigel arregló que el testamento se leyera...a Max le pareció imprudente...era claro que todo lo que le importaba a Nigel era el dinero.

 

El abogado fue muy claro...Robert  y Nancy dejaron toda su fortuna, negocios y propiedades a sus hijos en partes iguales. Ni a uno más,  ni a uno menos...Max seria el encargado, el abogado y el contador tendrían que darle cuentas a él...hasta que Alex cumpliera la mayoría de edad...

 

Nigel se levantó indignado. Max comprobaba cuanto le habían querido sus padres adoptivos...pero su mayor felicidad era comprobar que él tenía la custodia de Alex hasta la mayoría de edad y ese prepotente ni nadie más podrían quitárselo. Alex estaba muy conforme, no sintió envidia en la resolución pues a pesar de quererlo como algo más, tenía que reconocer que ante la ley era su hermano y se sentía culpable por eso sentimientos extraños, con Max pasaba lo mismo ¡si ambos supieran!

 

 

Por la tarde ninguno de los notó que el tío se había marchado furioso...

 

Max  daba instrucciones a la servidumbre mientras Alex miraba en su sillón a la luna que comenzaba a aparecer aquella tarde, pero el cielo se nubló y comenzó a llover muy fuerte...

 

Max subió a su cuarto, se dio un baño y se quedo en boxers...

 

En su cuarto, Alex se puso su pijama...su madre siempre iba a desearle buenas noches...el se enojaba pues ya estaba grande para eso...pero en esta noche lluviosa echó de menos esos momentos como nunca, en eso estaba cuando el primer trueno apareció.

 

Max acostado en su cama, la TV estaba encendida pero él no la veía, solo pensaba en que otra vez se sentía solo...desde el orfanato no sentía nada igual...pero sacudió su cabeza -¡no puedo pensar así!, debo ser fuerte por él-...levantó el brazo extendiendo la mano, el control se movió y se dirigió directo a sus manos, entonces apagó la TV...Max había dominado muy bien sus dones, aunque no sabía que por derecho familiar tenía otros más.

 

Justo en ese momento la puerta se abrió y entró Alex. -No puedo dormir, ¿puedo...?

 

-Ven-. Max extendió los brazos para invitarlo a entrar.

 

Alex  se sentó a  la orilla de la cama, a su vez el mayor se sentó en medio.

 

-Gracias por oponerte a tío Nigel...aunque, si quisieras deshacerte de mi yo...

 

El mayor se acercó y pasó un brazo al hombro del menor

 

-No digas tonterías...para mi no eres una carga... ¡por dios! Yo soy el que no merece nada de esto...

 

-Nuestra vida va a cambiar mucho...

 

-No tengas miedo...yo me encargare de todo...

 

 

 

Max recostó a su hermano en su pecho. -Yo te protegeré...yo...

 

 

 

-No, no me protejas, seamos un equipo, no me ocultes problemas...no cargues con todo.

 

Se miraron casi un minuto...y ambos se acostaron de frente...mirándose de nuevo. Max trataba recordar buenos tiempos con su familia adoptiva. -¿Recuerdas nuestras primeras vacaciones juntos?.

El menor sonrió, por supuesto que lo recordaba…

 

 

 

-En Londres, precisamente en casa del tío Nigel... recuerdo lo mal que te trataban todos en esa casa, claro a escondidas de nuestros padres...me pedías que callara pero no pude.

 

-Y  a causa de eso papá se enfureció y nos fuimos a terminar las vacaciones a un hotel de lujo...

 

-Te querían mucho...no soportaron que te hicieran desprecios...

 

Ambos sonrieron juntos al recordar a sus padres...pero entonces Alex recordó que ya nunca los volvería a ver, no pudo más y la tristeza le embargó. Tenía un nudo en la garganta que no había querido dejar escapar

 

-Vamos, Alex...déjalo salir

 

Alex comenzó a llorar. -Voy a extrañarlos mucho

 

 

-Yo también…Pero no estas solo...estoy contigo

 

-estamos solos...Max, ¿quien cuidará de nosotros?

 

Y así, abrazados durmieron juntos en la misma cama por primera vez.

 

Juntos, pero...tan solos.

 

 

 

 

Continuará...

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