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La cuenta regresiva, la vida sin ellos por DanyNeko

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Notas del capitulo:

Bueno. Yugi, Ryou y Malik empezarán una nueva vida, ahora todos juntos en Domino, empezarán las clases, llevaran una vida normal como estudiantes, el único problema con eso es que ellos no son chicos normales, son hikaris y sin sus yamis no está completa su vida. Tendrán que superar muchos sentimientos antes de tomar su decisión. Tendrán que aprender a vivir sin ellos. Será una prueba para sus almas. ¿Serán capaces de superarla?

Yugi-oh! No me pertenece si fuera así esto lo estrían viendo como capítulos en televisión xD.

 

-31 Dic- (N/A: día después de mi cumple=D)

─Yami!

─Bakura!

─Marik!

Efectivamente, como lo deben haber supuesto estamos en el último día del año y nuestros adorable hikaris estaban en el museo a las siete y media de la mañana para traer a sus yamis para despedir la noche vieja y recibir al año nuevo todos juntos.

Al final la pandilla había decidido, gracias a Mokuba e indirectamente a Joey,  celebrar el año nuevo en una especie de cabaña -obviamente lujosa- que los Kaiba tenían a las afueras de Domino y al día siguiente irían todos al templo para recibir al año nuevo.

Flash Back

Joey había ido a visitar a Mokuba, por pedido del pelinegro, el chico le estaba pidiendo a su hermano que le dejara hacer la despedida del año con todos, antes de obtener una respuesta el chico tuvo que ir a hacer algo por lo que ahora Joey se encontraba solo con Seto. El castaño se paró de donde estaba para ir a sentarse al lado del rubio.

─ ¿qué? ─pregunto a la defensiva cuando lo vio acercarse.

Seto lo tomo del mentón ─ya lo sabes, le daré permiso a Mokuba si tú vas ─Joey se quedó callado perdido en los zafiros que el chico tenia por ojos ─ Y ¿Qué dices?... ¿acaso el gato te comió la lengua… cachorro? ─dijo con una sonrisa irónica.

─Iré –dijo en voz baja.

─ ¿Cómo? No te escuche ─jugó con él.

─Dije que si iré ─bajo la cabeza para que sus mechones cubrieran su rostro ruborizado.

Seto saco su lengua para rozar con ella los labios del rubio logrando que el tono de su cara igualara un jitomate maduro y justo antes de que Mokuba regresara Seto volvió a su puesto original.

─Listo ¿Entonces hermano? ¿Qué dices? ─Joey aún estaba algo sonrojado cuando llego, lo que capto el interés del chibi.

─Está bien Mokuba. Puedes hacerlo ─acepto con los ojos cerrados y su típico porte serio

─Yei! Gracias Seto.

Joey suspiro disimuladamente con una sonrisa.

Fin de Flash Back

(N/A: advertencia, las siguientes líneas contienen lemon/escenas sexuales/contenido para mayores -xD- Quienes no deseen enterarse de la escena pueden bajar hasta el próximo anuncio en negrillas. Los que continúan… ¡Disfrútenlo! Es el primer lemon que escribo 0///0)

─Te he extrañado tanto ─dijo Ryou luego de haber llegado a casa con Bakura, ambos estaban en la habitación ─te quiero ─con la cara colorada Ryou se puso a horcajadas de Bakura para besarlo, el mayor lo abrazó atrayéndolo lo más posible a su cuerpo.

Bakura metió una mano dentro de la camiseta de su luz acariciando la piel de su espalda, erizándolo, haciendo que el chico pegara un respingo, el beso se hacía más intenso logrando que Ryou empezara a mecerse sobre Bakura, el calor empezaba a crecer, la leve nevada que caía afuera no afectaba en lo más mínimo a los dos albinos.

Unos momentos después las manos de Bakura empezaron a juguetear con los borde de la camiseta de Ryou haciendo amago de levantarla. El menor se separó un poco de su yami para mirarlo a los ojos y asentir, subió un poco los brazos dándole a entender que tenía su permiso para quitarle la prenda. Bakura se sorprendió un poco pero ni tardo ni perezoso alzó la tela hasta sacarla por la cabeza de su luz.

Ryou recogió sus brazos apenado, cubriendo parte de su pecho. Sin poder sostenerle la mirada mucho tiempo al mayor, sus ojos se desviaban de vez en cuando hasta que Bakura empezó a besar su cuello y sus manos acariciaban la nueva piel expuesta, rozando cada centímetro, como queriendo grabarlo en su memoria, Ryou se estremeció, no solo por la caricia en la sensible piel de su cuello, sino por la delicadeza con la que su yami recorría su piel, las caricias de Bakura solían ser firmes y dominantes, lo enloquecía al llevar la voz cantante y demostrarle todo el placer que ambos podrían experimentar. Pero ahora estaba yendo suave y delicado, y lo enloquecía con la lentitud y la dedicación de sus caricias… Definitivamente TODO en su yami le encantaba.

No queriendo ser el único en esas condiciones Ryou retiro ágilmente la chaqueta del mayor para luego jalar un poco la camisa indicando que quería quitársela, cuando se separaron en busca de aire fue el mismo Bakura quien se la sacó ágilmente.

─Eres hermoso pequeño ─le dijo mientras dejaba un camino de beso hasta llegar a uno de sus pezones donde su lengua se entretuvo endureciendo el suave botoncito rosa haciendo a Ryou gemir. La húmeda lengua del yami se dirigió a enrollarse en la sensible piel de otro pezón haciendo que Ryou aumentara el movimiento sobre el regazo de su oscuridad, la tensión en el pantalón de Bakura era notable y logró que Ryou se sonrojara más.

En un arrebato Ryou tomo el cabello de Bakura suavemente para alzarle la cabeza y plantarle un beso desesperado que logro que su yami se moviera hacia atrás para acostarse y darles la vuelta para aprisionar a Ryou entre el colchón y su cuerpo empezando a embestirlo con fuerza teniendo las piernas del menor enroscadas en sus caderas.

─Ah! Ah! Bakura!

Ryou deslizo sus manos por la espalda de su yami hasta llegar al borde de su pantalón y las regreso hasta el frente para desabotonarlo, Bakura puso una mano sobre las de Ryou ─si sigues así no creo poder detenerme hikari ─ le aviso serio.

Ryou le miro un momento a los ojos ─ ¿y si no quiero que te detengas? ─Bakura le miro sorprendido ─ Bakura… quiero que me hagas tuyo ─pidió en voz baja totalmente colorado.

─ ¿estás seguro? No es necesario que hagas esto si no estás listo. Tu ya eres mío… y yo soy tuyo ─le dijo con cariño.

─Estoy seguro ─dijo con determinación.

─Te quiero ─le dijo Bakura antes de besarlo y llevar sus manos a la cama para apoyarse y dejar que su hikari le soltara el pantalón para luego quitárselo a patadas quedando en un sexy bóxer negro.

─Te quiero mucho ─Ryou bajo la cabeza cuando sintió las manos de Bakura quitándole también su pantalón blanco dejándole con un bóxer gris claro - que a opinión de Bakura le hacía ver adorable y sexy- Bakura se alzó un poco separándose del delicado cuerpo que tenía debajo para admirarlo. Ryou le miraba con los ojos brillantes y las mejillas coloradas de pena, tenía los brazos recogidos y las manos en puños tapando sus pezones y parte de su pecho. La mandíbula de Bakura bajo ante la sensual y exquisita visión del cuerpo casi desnudo de su hikari.

─Eres precioso… y eres solo mío ─le dijo al oído con su voz ronca y sensual para luego dejar en su cuello algunas marcas rojizas con sus dientes y bajar en un camino de besos y mordiscos por su pecho hasta llegar al borde de sus bóxers donde empezó a acariciar sus piernas con sus manos separándolas levemente.

Subió una de sus manos hasta la intimidad del menor frotándola suavemente haciendo a Ryou sobresaltarse y morderse el labio inferior para acallar los gemidos  pues estaba apenado. Bakura se dio cuenta de esto y subió hasta su rostro sin descuidar el movimiento de su mano y mordió levemente el labio que su hikari apresaba para jalarlo y que este lo soltara ─no reprimas tus gemidos mi pequeño, quiero oírte ─le dijo sensualmente con su voz ronca logrando que el chico se estremeciera. Bakura apresuró el movimiento de su mano.

─Ah! Mmmm! Ba…Bakura Ahhh! Kura! ─Ryou cerró los ojos dejando a sus caderas moverse libremente contra la mano de Bakura.

─ ¿Kura? ─el mayor alzo una ceja con una sonrisa ladeada ─me gusta eso.

De un movimiento Bakura le saco el bóxer a su hikari descubriendo su miembro. En respuesta la cara de Ryou se ruborizo a un punto inimaginable para el propio chico, desde la raíz de su cabello hasta su cuello parecía un tomate. Totalmente apenado el chico llevo sus manos a su cara para cubrirla.

Bakura las retiro gentilmente ─no tienes por qué avergonzarte, eres hermoso ─le dijo para luego pasar su lengua gentilmente por su cuello aumentando la velocidad de los movimiento de su mano.

El cuerpo de Ryou comenzó a tensarse, un hormigueo que nacía en la boca del estómago le recorrió la columna vertebral antes de bajar de regreso a su miembro que era atendido por su yami, cada roce lo sentía más intenso ─Ahhh! Bakura yo… yo ah! ─entonces Bakura pasó su lengua por la punta del miembro de su luz… y Ryou exploto ─Bakura!!! ─el chico soltó un largo y alto gemido con el nombre de su amante a la vez que sentía su primer orgasmo drenarle las fuerzas del cuerpo y su semen manchaba la mano de su yami.

Luego de aquello cada uno de sus músculos entro en un estado de relajación total, su pecho bajaba y subía agitadamente intentando regular su respiración, su boca estaba abierta tomando grandes bocanadas de aire y una adorable sombra rojiza persistía en sus mejillas. Aquello había sido lo más intenso que había experimentado en sus 16 años de vida, pero conociendo a su yami, sabía que eso apenas era el comienzo.

Dirigió su vista al mayor que ahora estaba sentado entre sus piernas viendo con algo se curiosidad, parte de su esencia que cubría sus dedos. Ryou iba a decir algo, llamarlo al menos hasta que vio cómo su yami lamia aquella espesa sustancia blanca de sus dedos. Su cara paso por todo tono rojo que se pudiera imaginar al ver a Bakura lamer sus dedos hasta dejarlos limpios de su semen, a duras penas puedo sentarse cuando el chico estaba relamiendo de sus labios lo que quedaba.

Bakura lo miro con una gran sonrisa ladeada y un brillo de lujuria y deseo bailando en sus ojos café ─lo he dicho y lo repetiré, eres exquisito mi pequeño ─y sin darle tiempo a decir una palabra lo atrajo en un húmedo beso dejando al menor probar el sabor de su esencia en la boca ajena. Luego de separarse Ryou se recostó en el pecho del mayor unos segundos.

─Es mi turno ─le dijo en voz baja.

─ ¿Eh? ─antes de que Bakura se diera cuenta su hikari había hecho presión para tumbarlo en el colchón y estaba ahora besando su cuello mientras sus manos se encargaban de recorrer su pecho y abdomen. Ryou dio un mordisco entre su hombro y cuello que lo hizo gemir ─Ahhh! ¿Ryou? ─pero el hikari no contesto y se dedicó a bajar su rostro, acariciando con su lengua la piel de su yami como antes hicieron sus manos que ahora se encargaban de retirar la última prenda en el cuerpo de Bakura.

Luego de lograr desnudarlo sus labios se entretuvieron en uno de sus pezones, acariciando y enrojeciéndolo mientras una de sus manos jugueteaba con el otro. Bakura observaba complacido como su pequeño se dedicaba a experimentar con sus caricias en él, acariciando dulcemente su cabello a la vez que iba soltando algunos gemidos antes las exquisitas atenciones de su luz.

Luego de un par de minutos Ryou juntó su valor para seguir bajando hasta la entrepierna de su yami, apenas pudo contener la sorpresa en su rostro al verlo, era muy grande, ¿eso iba a entrar en él? Bakura vio con orgullo la expresión de su luz. Ryou se mordió un poco el labio inferior antes de llevar sus manos dudosamente al miembro erecto del mayor, lo rodeo desde la base para empezar a subir y bajar sus manos, como recordaba que Bakura le había hecho hace solo unos minutos, ya era un hecho que el sonrojo no quería abandonar sus mejillas.

Al principio Bakura disimulaba una pequeña mueca, era la primera vez que su hikari hacia algo así y sus movimientos eran algo torpes o bruscos y aquello le brinda un pequeño dolor placentero, se deleitaba viendo la concentración en el rostro de Ryou sin perder aquel sonrojo que lo hacía querer saltarle encima y poseerlo en ese instante. A medida que pasaban los segundos Ryou parecía agarrarle el truco a aquello y las caricias se volvían más suaves y placenteras llevando a Bakura a dejar su mente en blanco mientras débiles gemidos escapaban de su boca, su yadonushi aprendía rápido.

Sin preverlo siquiera, Ryou se inclinó para pasar su lengua por la punta del miembro de Bakura, tal como él había hecho antes de que terminara. Cuando escucho un ronco gemido de su otro yo se felicitó mentalmente por hacerlo bien y decidió retirar una de sus manos para recorrer toda la extensión del miembro con su lengua, lamiéndolo como si fuera una paleta.

Bakura gimió, sorprendido por las acciones de su hikari. Su dulce e inexperimentado niño estaba acariciando todo su miembro con su lengua de una manera exquisita, lenta y tortuosa que le estaba haciendo perder el control… y él tenía mucho autocontrol. Finalmente Ryou decidió acoger en su boca el miembro de su yami logrando que Bakura pusiera los ojos en blanco y sus caderas se movieran de forma instintiva contra el chico.

Moviendo a un lado su largo cabello Ryou inicio un suave ritmo de succión, sin saber si aquello estaba bien o no, lo único que quería era seguir escuchando los roncos y excitantes gemidos de Bakura. Ryou acelero un poco más aquella succión y Bakura soltó una especie de rugido, esa boquita tan caliente y húmeda junto a esa lengua traviesa…

─ ¿lo-lo hago bien Bakura? ¿Te gusta? ─pregunto tímidamente sacándolo de su boca unos segundos, regresando a masturbarlo de manera más fácil por la humedad de su saliva.

─ ¿gustarme? ¡Rayos hikari! Me estas volviendo loco ¡no pares! ─pidió entre gemidos bombeando sus caderas para aumentar el ritmo. Ryou le regalo una preciosa sonrisa antes de volver a introducirlo en su boca… ¡bendito sea Ra!  ¡Y bendito el momento en que los dioses le dieron a ese chico para ser su yadonushi!

Con más confianza esta vez, Ryou regreso a subir y bajar su boca por el miembro de Bakura que palpitaba de deseo, enrollaba su lengua alrededor mientras bajaba y al subir a la punta succionaba lo más que podía logrando que Bakura no tuviera control alguno sobre el primitivo movimiento de sus caderas contra la exquisita boca de su luz.

─Ah Hmmm! Ryou! Me encantas pequeño.

Cuando su cuerpo empezó a tensarse y Bakura supo se iba a correr, quiso apartar a su hikari pero en el momento preciso Ryou acelero el movimiento de su boca llevando a su yami al orgasmo antes de que este pudiera pronunciar palabra alguna, más allá del sensual gemido con el nombre de su luz, liberando su semen en la boca del chico que lo recibió gusto tragando todo lo que podía. Una pequeña cantidad se escurrió por sus labios.

Luego de eso Ryou se sentó a su lado, Bakura le miro mientras se recuperaba de aquella deliciosa liberación, sintiendo la humedad que bajaba hacia su mentón Ryou recogió con uno de sus dedos el espeso liquido blanco que había escapado de su boca, lo miro un poco ladeando la cabeza antes de llevar ese mismo dedo hacia su lengua para lamerlo.

Bakura puso los ojos en blanco ante aquella visión y se sentó al lado de su hikari ─eres un pequeño travieso ─Ryou le mostro su mejor sonrisa inocente ─ ¿estás seguro de que quieres continuar?

─Si

Bakura llevo su mano derecha hacia la boca de Ryou, estirando tres de sus dedos, el menor ladeo un poco la cabeza antes de abrir su boca para empezar a humedecer aquellos dedos, su lengua jugueteo un poco con ellos, como lo hiciera momentos antes en otra parte de Bakura que volvía a ponerse erecta, lista para tomar aquel inocente y exquisito cuerpo que insistía en entregársele… y bueno ¿quién era él para negarse?

Bakura retiro su mano de la boca de su hikari antes de mandar todo al diablo y entrar en él de buenas a primeras, pero no deseaba lastimarlo y esta era la mejor manera de suavizar el inevitable dolor que provocaría su unión. Guio a Ryou hasta recostarlo de perfil frente a él, tomo una de sus piernas y la paso sobre su cadera y llevo su mano a su entrada.

Primero su dedo índice bacilo haciendo círculos alrededor del pequeño agujero hasta que finalmente entro, despacio y con cuidado. Ryou pegó un respingo, no dolía pero era algo extraño e incómodo, cuando empezó a meter el segundo dedo Bakura se dedicó a besar a Ryou con pasión e insistencia para distraerlo de su intromisión… funcionó, Ryou aun sentía aquella incomodidad pero estaba perdido entre los embriagantes besos de su yami. Contento con eso Bakura empezó a mover sus dedos separándolos de apoco para dilatar la entrada, Ryou dejo ver una pequeña mueca de dolor cuando Bakura dejo sus labios unos segundos para ir a besar su cuello.

Finalmente metió el tercer dedo, ese sí que lo sintió Ryou, el pequeño albino giro su cabeza para morder la almohada ahogando los gemidos de dolor que la continua separación que hacían los dedos de Bakura en su entrada le provocaban, sentía como sus músculos cedían de apoco pero también sentía la ardiente lengua de su yami recorrer su cuello de forma exquisita logrando distraerlo un poco del dolor. Pasaron unos minutos así en los que el dolor iba cediendo de apoco.

Cuando lo considero oportuno Bakura retiro sus dedos de la entrada de Ryou ganándose un gemido de reproche que el menor no pudo contener por lo que desvió la mirada apenado, Bakura sonrió ante eso y guio al chico para ponerlo bocabajo y acomodarse encima de él, le separo los glúteos gentilmente y se posiciono. Ryou se tensó débilmente por la emoción y apretó entre sus manos la sabana

─ ¿listo? ─Ryou solo asintió ─relájate y si te duele mucho solo dímelo ¿sí?

─De acuerdo ─Bakura se inclinó para darle un suave beso antes de empezar a empujar en la tierna entrada de su hikari.

Cuando la punta del miembro de Bakura entro Ryou giro su cabeza para que su yami no viera las lágrimas que bajaban por sus mejillas, ya mucho le costaba tragarse los gemidos de dolor a medida que Bakura avanzaba, pero era soportable, nada que los exquisitos besos de Bakura en sus hombros y cuello no lograran suavizar.

Los ahogados gemidos y el llanto de Ryou fueron sustituidos por solo fuertes gemidos de placer al sentir a su yami llevar todo de su miembro dentro de su entrada, y de inmediato se dio cuenta que sus músculos se sentían estirarse más, y Bakura sentía que su miembro estaba muy apretado.

Bakura espero unos segundos a que el cuerpo de Ryou se acostumbrara mejor a su intromisión ─Dioses! Eres tan exquisito yadonushi… tan estrecho y cálido ─murmuro contra su cuello dándole una pequeña mordida haciéndolo gemir y sonrojarse más, finalmente luego de lo que le pareció una eternidad al mayor Ryou movió sus caderas levemente indicándole que se sentía mejor.

Entonces Bakura inicio su vaivén saliendo y entrando, primero suave luego certero y con firmeza en la cálida entrada de Ryou permitiéndoles a ambos disfrutar de la amplia gama de sensaciones que aquella unión les proporcionaba, más allá del placer y la lujuria en un trasfondo sentimental ambos se sentían completos, unidos más aun de lo que su poco desarrollado enlace se los permitió alguna vez. Podían decir que finalmente era uno.

Ryou se sentía perdido en un nirvana donde únicamente le importaba seguir unido a su amado yami disfrutando de cada una de las sensaciones que esas enloquecedoras embestidas le proporcionaban, esa plenitud, esa profunda unión. Sentirse querido y deseado por Bakura llenaba su corazón totalmente. Lo único en su cabeza era su yami y sus gemidos los demostraban.

─Ahhh Ahhhh Ba-Ba-Bakuraaaaa! Ah más! Más rápido ahhhhh! ─lo necesitaba, anhelaba sentir más, recibir todo lo que el milenario espíritu tuviera para darle. Enfatizando su petición Ryou empezó a empujar sus caderas al compás de las de su yami haciendo los embates más profundos y placenteros para ambos.

Y Bakura no se contuvo en darle a su pequeño lo que pedía ─ Ah Ryouuuu! –las embestidas de Bakura aumentaron en fuerza y rapidez llegando a tocar un punto específico en el interior de su luz logrando que el delicado cuerpo empezara a temblar y sus gemidos aumentaran el volumen.

Los músculos de Ryou se tensaron alrededor del miembro de Bakura llevándolo a lo último de su resistencia, Bakura sentía próximo su orgasmo igual que Ryou.

─Oh RA! ─mordió el cuello de Ryou justo antes de explotar en su interior. 

 ─Kura! Bakuraaaaaa! ─Ryou también exploto gimiendo el nombre de la única persona que ocupaba su mente, su corazón y ahora también su cuerpo.

Ambos albinos gritaban extasiados del placer, Bakura a gritos y Ryou gimiendo fuerte el nombre del espíritu. Bakura dio unos pocos embistes más antes de dejarse caer al lado de su niño aun sin salir de su interior.

─ ¿Cómo te sientes?

─Feliz… y completo.

─Yo también.

─Te quiero Kura

─jajaja y yo a ti hikari.

Bakura jalo las sabanas para cubrirlos a ambos. Ryou se felicitó mentalmente por haber programado el despertador para salir a tiempo y finalmente se quedó dormido entre los brazos de su yami aun unido a él.

(N/A: fin del lemon, los que no lo leyeron pueden retomar su lectura normal desde este punto =D)

-o-

─Mira Yami y dime si te gusta ─Yugi le mostro a su yami una larga y -para el mayor- extraña tela de color violeta negruzco.

Yami tomo lo ofrecido entre sus manos y los estiro para verlo por completo con gran curiosidad, era un largo kimono masculino del color antes mencionado con un obi de color magenta, como las puntas de su cabello, con diseños de espirales en blanco.

─ ¿Qué es esto Yugi? Recuerdo haber visto algo parecido una vez en tu armario.

─Sip, es un kimono y es ropa tradicional japonesa, se usa en festivales y algunos eventos especiales ─explico ─el primer día del año se tiene la costumbre de ir a un templo con esta ropa para ver el festival y rezar por el año que empieza. Y quedamos de acuerdo en ir todos juntos ─Yami asintió ─también irán Kurumi y los demás, por eso fui con Ryou y Malik a comprar los kimonos, el mío del año pasado ya no me queda, Malik necesitaba uno y Ryou quería uno nuevo, así que buscamos también para ustedes… entonces vi este y… no sé, pensé que quizás te gustaría ─le dijo algo colorado.

─Es bonito, me agrada el color.

─Anda pruébatelo ─pidió Yugi con una sonrisa empujándolo juguetonamente por los hombros hacia el baño.

─Está bien aibou ─le devolvió la sonrisa.

─Yugi ¿Cómo se pone esto? ─Yami salió del baño con el kimono puesto a excepción del obi por lo que la prenda estaba algo floja.

─jijiji déjame ayudarte Yami ─el tricolor mayor se quedó boquiabierto cuando vio a su hikari acercase, el chico traía puesto su nuevo kimono también, la tela era del mismo color magenta del obi de Yami, es decir, como las puntas de su cabello mientras que el obi era de color morado-azulado. Yugi le dio una sonrisa y tomo la tela, paso un extremo alrededor del cuerpo del mayor por su cintura para luego pararse a su espalda y anudarlo.

─Oye… ¿po-por qué te pusiste el tuyo?

─ ¡Ah! Es que quiero tu opinión ¿Me queda bien? ─Yugi le sonrió con los ojos cerrados antes de extender sus brazos y dar un lenta vuelta sobre sí mismo para Yami lo observara por completo ─ ¿Qué dices Yami?

El tricolor mayor se obligó a sí mismo a cerrar la boca y calmarse antes de dar una respuesta ─Yugi ─ Yami se acercó hasta envolverlo entre sus brazos, en ese momento Yugi abrió los ojos para verlo, ladeo la cabeza sin quitar su sonrisa observándolo con sus grandes y brillantes ojos a la espera de su respuesta ─te queda perfecto aibou, te ves precioso ─le dijo en un murmullo casi al oído antes de besarlo en la mejilla.

Yugi se sonrojo ─ ¿de verdad lo crees Yami? ─pregunto apenado.

─Por supuesto que si mi aibou.

Yugi le agradeció con una brillante sonrisa antes de besarlo en los labios.

-o-

─…Entonces en la mañana del primer día del año iremos a un festival en un templo, o algo así me explicaron los chicos ─le relataba Malik a su contraparte mientras buscaba algo en su armario ─mira son estos –le enseño el par de kimonos que había comprado con sus amigos ─elegí este para ti, espero que te guste.

Marik lo tomo, el kimono era de color bronce con diseños que parecían alas (N/A: un pequeño espiral del que salían tres líneas al costado) a tono más claro y un obi dorado claro.

─Ve y pruébatelo a ver ─le pidió señalando la puerta del baño.

─Como digas ─respondió sonriente, Malik se notaba muy feliz y emocionado con todo esto y eso le gustaba, nada mejor que ver a su hikari feliz.

Con algo de dificultad Marik se puso aquella prenda pero no supo qué hacer con el obi, por lo que, antes que hacer el ridículo poniéndoselo como no era, decidió pedir ayuda.

─Oye hikari ¿y esto como se usa? ─preguntó saliendo del baño con la tela en sus manos.

─Se amarra atrás por la cintura Marik ─le explico mientras iba y se lo ponía él mismo un poco sonrojado por lo guapo que se veía su yami con aquella prenda ─listo ¿Qué tal?, y dime ¿Qué te parece el mío? ¿Te gusta? ─Malik se separó un poco dejándole apreciar a Marik el kimono dorado que cubría su cuerpo con algunos pequeños pétalos amarillo pálido como decoración y el obi era del mismo color cobre del kimono de Marik.

─Me agrada ─dijo mirando su propio atuendo ─pero tu... ─dijo acercándosele lentamente ─te ves demasiado adorable ─dijo en un seductor susurro ─debo recordar no perderte de vista ni un segundo, te me podrían robar hikari ─dijo antes de apoderarse de sus labios en un beso arrebatador, de esos que a Malik le quitaban el aliento hasta dejarle las mejillas coloradas, de esos que tanto le encantaban.

-o-

Luego de dormir un par de horas y de un baño caliente juntos -tras una larga insistencia del mayor- la pareja de yami y hikari albinos estaban conversando sobre lo que se haría en año nuevo.

─Y en la mañana iremos al festival del templo Tsukimine ─le dijo Ryou mientras se levantaba a coger algo de un cajón.

─ ¿es el mismo al que íbamos antes? –quiso saber el espíritu.

─Sip, escuche que le hicieron algunos cambios y ahora está más bonito… por cierto ¿recuerdas la ropa que usaba para ir?

─Si… un kimono ¿no? ─dijo con una sonrisa recordando lo lindo que se veía su hikari con aquella peculiar prenda.

─Así es, mira, espero y te guste ─Ryou le extendió frente a sus ojos un kimono rojo con detalles negros en forma de rombos parecidos a los dijes de la sortija, de obi igualmente negro con blanco.

─ ¿Es para mí? ─pregunto tomándolo.

─Si, yo mismo lo elegí cuando fui a comprarme uno nuevo ─le explico ─ ¿Por qué no vas y te lo pruebas? Y yo te enseño el mío para que me digas como me queda ─dijo con una bella sonrisa.

─De acuerdo yadonushi ─habiendo acompañado a su luz por tanto tiempo, Bakura ya sabía cómo debía ponerse aquello, así que se lo acomodo, amarro el obi y salió del baño.

Al regresar a la habitación su hikari lo esperaba ya cambiado, sentado en la orilla de la cama con una brillante sonrisa que no desaparecía de su rostro desde que despertó desnudo en los brazos de su yami hacia algún rato, al verlo salir Ryou se levantó para exhibir su atuendo a su yami. Bakura no perdió detalle alguno de lo adorable, encantador y mil cosas más que lucía su querido niño. El kimono de Ryou era celeste con algunas nubes blancas como decoración y el obi blanco, en el costado derecho de su cabello un broche en forma de estrella color azul adornaba su pelo.

─Te queda muy bien ¿Qué tal? ─a los ojos de Bakura su niño parecía un precioso ángel.

─Te ves encantador yadonushi ─dijo rodeándolo con sus brazos desde atrás, creando un perfecto contraste entre las telas roja y celeste de sus kimonos.  

-o-

(N/A: en este punto quiero hacer una aclaración, todos van a pasar año nuevo en el lugar antes descrito al comienzo del cap y, recordando los eventos de la celebración de navidad, Kaiba decidió anunciar de ante mano que todos podrían quedarse a dormir -aunque nosotros ya sabemos porque lo hace ¬w¬- por eso los chicos se llevan en un bolso sus kimonos para el día siguiente)

-o-

─Date prisa Kura, la limosina ya llego ─llamaba Ryou desde la planta baja. Iba vestido con una camisa de botones y manga larga azul claro, unos pantalones blancos y zapatos gris claro.

─Ya voy ─anuncio con cansancio ─ ¿seguro que esto es todo? ─mostro el morral que tenía en manos. Bakura llevaba una camisa azul oscuro con pantalón negro y zapatos de igual color, se veía muy elegante y guapo a opinión de su luz.

─ ¡Claro! Solo nos quedaremos una noche ─dijo sonriente tomándole la mano para salir de la casa, cerró la puerta y ambos subieron. Apenas Bakura dejo el morral en el piso del vehículo Ryou subió sus piernas sobre las de su yami y le paso los brazos por el cuello para atraerlo hacia si en un dulce y apasionante beso. El mayor se sorprendió un poco ante la espontaneidad de su hikari en esa acción pero contesto rápidamente a la deliciosa caricia en sus labios.

Ryou apenas y se dio cuenta cuando la limo se detuvo frente a la casa de Malik, se obligó a su mismo a separar a Bakura de su cuello para salir en busca de su amigo, provocando que el mayor torciera el gesto y se cruzara de brazos mientras esperaba el regreso de su hikari. La presencia de los egipcios solo significaba el alto a su diversión, su hikari no le dejaría hacerle nada enfrente de esos dos.

Toc Toc.

─ ¡Ya voy! ─se oyó la agitada voz de Malik del otro lado de la puerta ─Ese debe ser Ryou, es hora de irnos Marik ─llamó el peli-cenizo menor ─ ¡Hola Ryou! ─saludo con una sonrisa al abrir la puerta y abrazarlo, el albino menor pudo ver a Marik tras de él con un bolso en una de sus manos que alzo una mano a modo de saludo, Ryou respondió al gesto retirando una de sus manos de la espalda de Malik para saludarlo. Malik iba vestido con un sweater color crema y chaqueta marrón a juego con su pantalón y zapatos beige. Marik iba vestido parecido, pero con camisa negra y la chaqueta más abierta.

─ ¿están listos? Vamos ─dijo Ryou cabeceando hacia el elegante vehículo

─ ¡Hai! ─Malik jalo a su yami por la muñeca para sacarlo de la casa y cerrar antes de subir a la limo. Se notaba emocionado aunque algo acelerado.

Al estar en la limo los cuatro, ambos yamis se saludaron con un movimiento de la cabeza y un bajo ‘hola’. Ryou entonces noto un pequeño detalle.

─Nee Malik ¿estás bien? ─el aludido lo miro extrañado ─tus mejillas están algo rojas ─señalo con un dedo índice su rostro.

Malik dio un pequeño brinco y se llevó una mano a su mejilla sintiéndola caliente, Ryou le miraba fijo, el egipcio menor moví una mano enfrente de su rostro nerviosamente restándole importancia al asunto ─Estoy bien, tranquilo, no es nada.

Ryou le miro un poco más antes de encogerse de hombros ─si tú lo dices ─Bakura mientras, miro a Marik con una ceja arqueada y una sonrisa ladina, el egipcio mayor solo le regreso la sonrisa antes de desviar la mirada. Ryou le sonrió un poco a su amigo antes de recostarse en el hombro de Bakura y aspirar disimuladamente su exquisito aroma.

-o-

Yugi movió un poco las cortinas de la ventana de su habitación cuando escucho un bocinazo cerca de su casa, viendo como Ryou y Malik se bajaban de una limo negra con dirección a su puerta.

─Vamos Yami, ya llegaron por nosotros ─dijo con una sonrisa. El pequeño tricolor llevaba una camisa morado claro con una chaqueta negra y pantalones de un morado negruzco con zapatos negros.

─Okey ─ Yami por su parte llevaba una elegante camisa manga-larga negra de botones y una chaqueta azul oscuro, pantalones negros igual que sus zapatos.

Ambos tricolores bajaron de la mano con Yami llevando una pequeña mochila, iban por las escaleras cuando sonó el golpe en la puerta. Se apresuraron a abrir. El abuelo ya se había ido a la casa de Naomi.

─ ¡Hola chicos! ─saludo Yugi con una sonrisa.

─ ¡Hola Yugi! ─Ryou y Malik lo abrazaron ─Hola Atem.

─Hola.

─Vengan ─así con las tres parejas de yami-hikari en la limo el conductor tomo rumbo a las afueras de Domino, tal como lo había indicado Mokuba. Adentro del vehículo los tres portadores de los artículos milenarios iba conversando animadamente, sus yamis solo los observaban con una sonrisa al verlos tan felices. 

-o-

La fiesta fue muy divertida y alegre, el lugar era precioso, un gran salón, varias habitaciones, por fuera estaba iluminada y decorada, el jardín era precioso: montones de arbustos con distintos tipos de flores, un par de fuentes iluminadas, un pequeño estanque y muchas luces. El salón tenía un amplio balcón que daba vista al bello panorama de dicho jardín.

La cena no fue para menos, un enorme y delicioso pavo con gran variedad de aperitivos, hacia algo de frio gracias a la leve nevada de la tarde pero dentro del lugar el ambiente era cálido y festivo. En la cocina del lugar un gran tazón con uvas esperaba la hora indicada.

12 minutos para la media noche, la primera uva. Un deseo conjunto “que finalmente estemos juntos”

5 minutos, la octava uva. De fondo sonaba:

Las campanas de la iglesia están sonando 
anunciando que el año viejo se va... 
la alegría del año nuevo viene ya 
los abrazos se confunden si cesar

Faltan cinco pa’ las doce
El año va a terminar
Me voy corriendo a mi casa
A abrazar a mi mama

1 minuto, la última uva.

Todos estaban acomodados en el balcón. Yugi y Yami juntos en un sillón mediano, igual que Ryou con Bakura y Malik con Marik. Joey está sentado junto a Mokuba y seto en un sofá. Tristán, Duke, Tea y Serenity en otro. Unos segundos más y… En el cielo estallaron miles de fuegos artificiales iluminando el lugar.

La última campanada del reloj sonó, indicando las 00:00 horas, Año Nuevo.

 El lugar se llenó de abrazos, los yamis abrazando a sus hikaris, Duke y Tristán abrazándose, Joey y Tea, Joey y Mokuba, Tea y Serenity. Los yamis dándose la mano es ‘señal de paz’. Yugi frunció el ceño cuando Tea abrazo a Yami, lo mismo que Yami cuando la castaña abrazo a su hikari, hasta que Joey le salto por detrás con Tristán igualmente para abrazarlo, todos deseándose feliz año. Incluso Seto abrazo con notable cariño a su hermano.

Los tres hikaris se abrazaron cariñosamente ─Puedo decir que ha sido un gran porque eh pasado grandes momentos con ustedes ─dijo Malik con cariño.

─Digo lo mismo ─Ryou sonrió.

─Si, son mis mejores amigos ─les Yugi sonrojado. Los tres reforzaron el abrazo.

El espectáculo de luces y colores duro alrededor de 5 minutos más.

─Joey, tengo sueño ¿me acompañas a mi cuarto? ─pregunto Mokuba frotándose un ojo.

─Claro chibi, vamos ─como hace una semana Joey tomo al pelinegro en brazos, sin decir nada Seto se levantó para llevarlos a la habitación correspondiente.

─Que descanses chibi, feliz año ─dijo el rubio con cariño arropando al niño que había caído dormido al instante… o eso parecía.

Cuando Joey se levantó Seto lo tomo de inmediato por la cintura desde atrás ─Feliz año nuevo, cachorro.

─Fe-feliz año Kaiba ─murmuro el rubio con la cabeza desviada.

─ ¿Cómo dices? ─Seto apretó el agarre, y soplo tentativamente su cálido aliento en el cuello de Joey para luego depositar un suave e imperceptible beso.

Joey se estremeció, pero tomando valor se dio la vuelta entre los brazos del castaño para plantarle un beso –feliz año nuevo, neko.

Seto mostro un gesto arrogante antes de plantarle otro beso ─este año serás mío ─sentencio con seguridad antes de soltarlo y salir de la habitación. Joey se quedó ahí de pie un poco más tratando de calmar su acelerado corazón.

-o-

─ ¿Qué haces Yugi? ─pregunto Yami quien había seguido a su hikari al verlo apartándose de los demás.

─Llamo a casa de Kurumi para desearles feliz año a todos –le explico con una sonrisa y su móvil en manos.

mochi mochi ─se oía música, gritos y una gran algarabía de fondo.

─ ¡¡Feliz año Kurumi-chan!! ─dijo Yugi.

¡Ah! ¡Feliz año nii-chan! ─dijo Kurumi con emoción.

─ ¿Cómo estás? ¿y los niños? ─

Estoy bien gracias, y los gemelos están por aquí, deseándole feliz año a todos jeje

─ ¿me los pasas? Quiero darles el feliz año.

¡Okey!... ¡Shouta! ¡Keita!

¿mochi, mochi? ─respondio Shouta, Kurumi había puesto el altavoz para que ambos oyeran.

Yugi también puso el altavoz ─ ¡Feliz año Shouta, Keita! ─le hizo unas señas a Yami.

─Feliz año niños ─dijo el mayor.

¡Tío Yugi, tío Atem! Feliz año nuevo! ─dijeron los dos a coro con entusiasmo.

Los tricolores se sonrojaron un poco, Yugi aún no se acostumbrara a que los chicos llamaran a Yami tío ─ ¿Qué tal todo por allá? ¿Se comieron las doce uvas? ─pregunto con ternura Yugi.

¡Hai! ─respondieron ambos ─el abuelito también ─dijo Shouta ─y tía Kurumi casi se ahoga con una jajajaja ─contó Keita.

─Jeje ¿Por qué me da de que la asustaron o algo así? ─jugó Yugi.

Porque nos conoces bien tío ─respondió Shouta con una risita nerviosa.

Yugi y Yami rieron ─ ¿el abuelo esta por ahí? ¿Me lo pasan por favor?

¡Okey! ─Keita fue a llamar al abuelo ─dales el feliz año al tío Ryou y al tío Malik de nuestra parte ─pidió Shouta antes de entregarle el teléfono al abuelo Solomon.

─ ¡Feliz año nuevo Abuelo! ─dijeron ambos tricolor al unísono.

¡Yugi, Atem! Feliz año nuevo muchachos ─deseo el anciano ─ ¿Qué tal todo? ¿Se están divirtiendo?

─Si abuelito, todos nos estamos divirtiendo mucho ─respondió Yugi ─ ¿esta one-san?

Si, esta con tu tía, ya te las paso ─Yugi torció el gesto cuando su abuelo hablo en plural. Yami lo abrazo en respuesta.

¿hai? ─hablo la peli-magenta junto a su madre.

─Feliz año nuevo Akari one-san, tía Naomi ─deseo Yugi.

─Feliz año ─dijo también Yami, aunque en un tono más serio.

¡Feliz año chicos! ──regreso la joven madre.

Feliz año ─dijo fríamente la mujer mayor (N/A: Mi&Orvii&yo: vieja amargada *susurro* ¬¬**… xD)

Akari resoplo algo molesta por el tono de su madre ─te paso a Kurumi.

Yugi ¿siempre nos veremos mañana en el templo? ─pregunto la chica ilusionada.

─Sí, sí. Nos encontraremos allá. Cálmate.

Bien, y tienes que tomarte una foto conmigo. ¡Hasta mañana! ─sin darle tiempo a decir nada más la peli-azul colgó.

Yugi suspiro cerrando su móvil ─esa prima mía ─susurro.

Yami sonrió ─aibou ─le susurro cariñosamente mientras lo abrazaba ─te quiero ─puso una de sus manos sobre la cabeza del menor para apoyarla en su pecho.

─Yami ─Yugi se sonrojo un poco pero se dejó hacer dócilmente, sus ojos brillaban de felicidad ante el trato de su yami ─y yo, te quiero mucho ─se acurruco tiernamente en su pecho ─este año, no importa cómo, te traeré de regreso ─dijo en voz baja antes de alzarse para sellar esa promesa con un beso dulce y tierno.

-o-

Afuera una fría brisa soplo intempestivamente, Ryou se estremeció abrazándose a sí mismo ─que frio ─comento para sí.

Dos segundos después Bakura ya lo tenía envuelto en sus brazos desde atrás ─ ¿así está mejor yadonushi? ─susurro en su oreja.

Ryou se dio la vuelta para acurrucarse en su pecho ─sí, gracias Kura ─respondió en voz baja rozando su rostro mimosamente en el cuello del mayor antes de darle un pequeño mordisco sin que nadie los viera.

─mi pequeño travieso ─Bakura ahogo un jadeo.

─ ¿de qué te quejas? ─dijo a modo de juego moviendo el cuello de su camisa para descubrir varias marcas rojas en su piel, marcas de dientes y chupones. Bakura las observo con orgullo. Ryou le saco la lengua guiñándole un ojo mientras se acomodaba la prenda.

─Esas marcas dicen que eres mío y solo mío ─Bakura agacho su cabeza para hablarle al oído antes de volver a morderlo por sobre la tela.

─Ah! No hagas eso aquí ─se quejó ahogando su gemido en el hombro de su yami.

─tú lo hiciste primero ─le recordó.

─Yo lo hice más suave ─reclamó el menor.

─ehhhhh, pero te encanta ¿o me equivoco?

─Baka ─Bakura lo calló con una ardiente beso ─claro que me gusta.

─Está haciendo frio ─se quejó Malik acomodándose la chaqueta.

─En la cocina hay sopa ─informo Seto fingiendo desinterés… como de costumbre.

─ ¿Por qué no la repartimos? ─le propuso Yugi al egipcio levantándose de su asiente.

─Sí ─Malik lo siguió.

Tal como había dicho el castaño en la estufa había una gran olla de sopa, Yugi la puso a calentar a fuego bajo mientras él y Malik sacaban unos vasos desechables grande para servirla ─ ¿Cuántos vasos son? ─pregunto Malik.

─Mokuba ya está dormido, así que son 12 ─respondió el tricolor mientras apagaba la estufa y tomaba el cucharon para servir. Luego de llenar los doce vasos los pusieron seis y seis en dos bandejas para llevarlos.

─ ¿Quién quiere sopa caliente? ─anunciaron regresando a la sala con las bandejas.

─gracias viejo ─Yugi le ofreció los vasos a Yami, Joey, Seto y Tristán.

─Aquí –Malik le llevaba a Marik, Duke y las chicas ─ ¿Eh? ¿Y Ryou?

─En el balcón con Bakura ─le respondió su yami.

Malik soltó una risita ─ ¿no iremos a interrumpir algo?

Yugi le empujo juguetonamente por la cadera con una sonrisa ─llámalo antes de acercarnos por si acaso ─Malik rio más.

─ ¡Nee Ryou! ─le llamo el egipcio.

Bakura y Ryou se dieron la vuelta ─ ¿no quieren sopa caliente chicos? ─ofreció Yugi.

─ ¡Hai! Perfecto para el frio ─Ryou tomo uno de los vasos de Yugi. Malik le ofreció otro a Bakura ─Gracias Yugi.

─Gracias Malik ─dijo de mala manera por haberlos interrumpido.

─Delicioso ─dijo el albino menor luego de beber un sorbo. Yugi le sonrió y tomo su vaso para hacer lo mismo, dejando la bandeja a un lado, igual que Malik. Sus yamis también salieron al balcón.

-o-

─Hasta mañana ─se despidieron Tea y Serenity yéndose a dormir cerca de las dos de la mañana, para ese entonces Joey y Tristán estaban medio dormidos en un sofá balbuceando tonterías. Yugi y Ryou estaban cabeceando recostados en el pecho de su respectiva oscuridad bostezando de vez en cuando y Malik tenía la cabeza recostada en el regazo de Marik.

─Buenas noches hermana ─se despidió Joey levantándose algo tambaleante ─yo también iré a dormir.

─Sí, tienes razón ─Tristán intento levantarse, pero tenía tanto sueño que volvió a caer sentado.

─Santos cielos, déjate ayudar Tristán ─pidió Duke pasándole un brazo por la espalda ─oye Kaiba…

─Al fondo a la derecha la tercera puerta ─dijo el castaño cerrando la mini portátil que tenía en piernas para levantarse de su sillón y mirar al par de tricolores ─ ¿ustedes también?

Los yamis intercambiaron miradas ─si ─respondió Yami.

─Síganme… tú también perro.

Joey hizo lo pedido sin decir nada, lo cual resulto extraño a los demás, pero se lo acreditaron a la gran somnolencia del rubio.

Malik se levantó de su posición y Ryou y Yugi lo imitaron, estaban lo suficientemente despiertos para andar solos y, aunque a Ryou le gustara, no iba a dejar que Bakura lo alzara en brazos frente a todos.

Seto los guio hasta la habitación, igual que la vez pasada era grande y con tres camas ─gracias Kaiba ─dijo Yugi, el castaño solo movió una mano en respuesta ─que descanses Joey ─le sonrió.

─Tú también Yuu ─respondió revolviéndole el cabello con una mano ─hasta mañana a todos ─dijo cuando vio que el CEO comenzaba a andar.

─Hasta mañana ─respondieron los otros dos hikaris y Yami. Joey fue tras Seto.

─Soy yo o Joey está demasiado tranquilo alrededor de Kaiba en comparación ─Yami asintió al comentario de Malik ─quizás es que está muy dormido pero…

─No, yo opino que esos dos… ─hablo Ryou sentándose en la cama del medio.

─Se llevaran mejor muy pronto ─termino Yugi con una sonrisa siguiendo al albino.

Malik los vio extrañados parpadeando un par de veces antes de soltar un bostezo ─repítanme eso cuando este en mis cinco sentidos ─se dejó caer de espaldas en el colchón entre Yugi y Ryou ─ahora tengo sueño.

─jejeje ─Ryou le acomodo los mechones de la frente con cariño ─no eres el único.

─cierto ─apoyo Yugi recostándose al lado de Malik.

Ryou los miro sonriente y fue hacia el morral que Bakura había dejado en la cama de al lado ─iré a cambiarme ─tomo su pijama y se metió al baño que daba la habitación.

Los seis se cambiaron por turnos y finalmente se acomodaron para dormir ─que agradable ─Ryou se acurruco entre las mantas. A los pocos segundos Bakura se recostó a su lado.

─Tienes razón ─Yugi hizo lo mismo apegándose al costado de Yami.

─Apagare las luces –Malik era el más cercano al botón de los focos ─ Que descansen.

─Hasta mañana ─respondieron las otras dos parejas. Malik apago las luces y se regresó a la cama dejando que Marik lo acomodara encima suyo.

Por su parte Yami entrelazo una de sus manos con la de su hikari y lo abrazo con la otra, acercándolo lo más posible, cuidando que ningún de los dos pasara frio.

Luego de unos minutos Bakura se movió para ponerse encima de Ryou, le tapó la boca para que no despertara a los demás y, haciendo a un lado el cuello de su pijama empezó a chupar y morder su cuello, reafirmando las marcas que ya portaba ─¿qué…? ─alcanzo a susurrar Ryou, en un tono tan bajo, que si Bakura no hubiera estado tan pegado a él ni lo hubiera oído.

─Mío ─susurro dando una última lamida a todo el largo de su cuello, Ryou tuvo que ahogar un gemido y sus mejillas se sonrosaron levemente, en venganza, tomo dos de los dedos de la mano de Bakura que seguía en su rostro y los introdujo en su boca chupándolos, lamiéndolos y jugueteando con ellos, como horas antes hiciera con otra parte de Bakura, pronto sintió la tensión en el pantalón de su yami contra su vientre bajo ─me estas provocando pequeño ─le advirtió sensualmente el mayor. Bakura le dio a Ryou un suave embiste.

─No, no ─susurro juguetón, apartando la mano de su boca ─a dormir Bakura ─sentencio dándose media vuelta para darle la espalda.

─pequeño travieso ─le mordió la oreja y Ryou se quedó lo más estoico posible ─ ¿te atreves a provocarme y luego a ignorarme? ─dijo con fingida indignación, pero Ryou ni caso le hizo ─moooo yadonushi ─se quejó con un puchero.

─Vas a despertar a los demás ─le callo, acomodándose bocarriba ─ven, recuéstate ─movió la cabeza del mayor para ponerla en su pecho con ternura ─descansa Bakura ─susurro con cariño, dando un tierno beso en su frente. Bakura solo sonrió un poco antes de abrazarlo para dormir así, recostado en su querido hikari.

-o-

Joey seguía a Seto sin decir palabra alguna, si su corazonada no erraba sabía que iba a terminar durmiendo en la habitación del castaño… con él, si bien era cierto que ya había terminado en aquella -vergonzosa- situación una vez, en aquel momento había estado medio ebrio y ahora carecía de aquel factor… realmente no sabría decir si eso era bueno o malo

Flash Back
─Dices… ¡¿Qué dormimos juntos?! ─’intento’ gritar Joey, puesto que aún le dolía la cabeza.

─Oye, cálmate un poco perro ─dijo con su tono normal antes de tomarlo del mentón y acercase para verlo a los ojos ─yo no me aprovecharía de un pobre cachorro ebrio… bueno, quizás no por el momento ─dijo alejándose para volver a recostarse en su cama.
Fin de Flash Back

Joey se sonrojo ante tal recuerdo, agito la cabeza para sacar aquello de su mente por lo que no se dio cuenta que Seto se había parado y término tropezando contra su espalda.

─ ¿Qué te pasa? ¿Tanto sueño tienes que no ves ni por dónde vas? ─se burló el castaño.

─Oh cállate Kaiba ─bufo ladeando la cabeza mientras el castaño abría la puerta de su habitación dejándolo pasar primero. Joey entro algo tímido observando el lugar. Seto cerró la puerta y le puso seguro antes de ir a rodear al rubio con sus brazos.

─ ¿Estamos de nuevo con eso de llamarme por mi apellido? ─le dijo al oído, poniéndolo nervioso ─ ¿debo recordarte como me llamabas aquella noche? ─continuo tentativamente cerca de su cuello.

─Neko ─susurro el rubio girando la cabeza al otro lado, pero Seto lo tomo del mentón y los hizo mirarlo, el castaño le vio con una ceja alzada, desafiándolo con la mirada a que lo repitiera en voz alta ─ ¡Neko! ─repitió Joey cerrando los ojos con fuerza cuando se vio imposibilitado a retirar la mirada de los centellantes zafiros del CEO. Su rostro estaba colorado.

─Muy bien cachorro ─Seto tomo con firmeza el rostro del rubio para plantarle un apasionado beso a su ‘presa’

Sin separarse Seto guio a Joey hasta el borde de la cama haciéndolo tropezar con esta para que se cayera en el lecho con él encima. Luego de dejarlo casi sin aire Seto se levantó tomando algo de un tocador que había en el lugar y pasándole una mochila que el rubio había traído consigo, dejándola en la sala antes de tomar dirección al baño privado ─cámbiate, vamos a dormir cachorro.

Joey se cambió deprisa para evitar cualquier momento incomodo con el CEO y guardo su ropa para dejarse caer sobre el colchón con un brazo tapando sus ojos de la luz “¿Qué es lo que en verdad quiere Kaiba conmigo? ¿Esto es un juego para él? ¿Seré solo una mascota de muchas que podría conseguir? ¿Qué es lo que quiero yo realmente?

En ese momento Seto salió del baño con un pijama de invierno blanco con gris y se le quedo viendo a Joey unos instantes.

─ ¿Qué te pasa? ─pregunto yéndose a sentar a su lado en la cama.

Joey apenas movió el brazo para mirarlo ─ ¿a mí? Nada ─se hizo el desentendido.

Seto lo miro con una ceja arqueada, pero inteligentemente resolvió que no conseguiría sacarle nada al rubio en ese momento ─ya estas tonto y medio por el sueño, anda vamos a dormir ─con gran facilidad lo movió y se acomodó para arroparlos con las mantas, palmeo un par de veces para apagar las luces y pronto sintió como Joey se acurrucaba en su pecho “tal como un cachorro en busca de calor” pensó en CEO.

Joey se acurruco un poco más cuando sintió uno de los brazos del castaño en su espalda “encontraré mis respuestas, hasta entonces, sin importar el resultado, disfrutaré de esto

Notas finales:

Disculpen por la demora!! *hace una profunda reverencia* como ya saben por mi casa tuvimos un desafortunado accidente con un camionsote y los cables del internet y la TV… y como si fuera poco a los maldit*s, hijos de p*rra, de mantenimiento se les dio por poner el arreglo a 72 horas del incidente… Los muy hijuemadres me arruinaron mi cumple y encima se demoran más de lo dicho TnT buaaaa
Pero bueno. Gracias a todooooos todiiiiiiiitos todoooos por el gran apoyo que ha recibido este fic, la verdad cuando inicie nunca pensé que a la gente le gustaría tanto las locuras y tonterias que yo escribo, realmente gracias por seguirme a mi y a mis historias, por todos los comentarios y los favs. Por todo, os amo un monton y feliz 2015! =D
Contadme en los comentarios ¿Cómo celebráis noche vieja, año nuevo?

Un próspero año nuevo, con pavo casero incluido y un abrazo del personaje que escojan para:

-Mi gran Amiga Miraku
-Mi gran Amigo OrviiKii y Sky
-Mi prima felina Panteritamimosa
-Ryo Akiyama
-Arace-chan
-Jessie Salamander
-Ariadoneazul
-Akari Saquiel
-Ryouka SmGa
-Rina_Jaganshi
-LoyalRose
-A los anónimos
Y a todos aquellas personas que me leen aunque no dejen review… Un cálido saludo de año nuevo =D

Nos leemos luego gente!!!!!

 Pd. Si los moderadores de la página leen esto, les pido por favor que en la lista de los personajes de Yu-Gi-Oh! Incluyan a Yami Bakura y a Yami Marik!!
Únanse a la causa y publiquen la petición en sus historias, entre más seamos, más posibilidades tendremos de ser oídos… o leídos xD

Bueno, creo que eso es todo por ahora.

Aquí estoy porque eh venido
Porque eh venido, aquí estoy
Y si no le gusta mi canto
Como eh venido. Me voy!

Nos leemos


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