-Intentaron robarme, & bueno, también intentaron abusar de mi.-Dijo temblando.
-¿Qué? ¿& no me llamaste?.-Lo miró enojado.
-Sólo fue rápido, me hizo la marca, & proveché para patearlo entre las piernas & escapar.-Susurró.
-Bien, es suficiente, no quiero más explicaciones.-Lo pegó contra la pared helada, haciendo que este arqueara la espalda.
-Asami.-Jadeó al sentir la erección del mayor contra su miembro.-¿Por... por qué tan...?.-Murmuró.
-¿Por qué tan grande?.-Rió Asami mirándolo.
-Siempre lo dices de manera vergonzosa.
-Tu lo preguntas.
-Ahora responde, estúpido.
-Porque te extrañé, estúpido.-Murmuró.
-Asami.-Lo miró sorprendido & el rostro del mayor se acaloró enseguida al darse cuenta de la forma en que lo había dicho.-Así que me has extrañado.-Llevó su mano a miembro erecto, & lo tomo firmemente.
Asami comenzó a besarlo aprisionándolo más contra la pared mientras el agua caliente caía sobre ellos. Bajó sus labios a sus pezones, los mordisquió con suavidad mientras acariciaba sus piernas. Volvió a sus labios a besarlo intensamente, jugueteando con la lengua, haciendo que al menor se le cayera la baba. De verdad se veían hermoso. El cuerpo gigante de Asami mojado, su pelo empapado pegado a su rostro, sus ojos miel rasgados de placer, sus perfectas facciones blancas se afligian al sabor del otro; El cuál estaba débilmente exitado. El pelo rubio hacia atrás mojado, sus ojos verdes desbordando toda la exitación, todo el placer, toda la lujuria que le provocaban las caricias del otro.
-Aguanta, Akihito.-Susurró Asami al ver como el menor tiraba más de su miembro, pidiendo que entrara en él. Tomo el miembro del menor masturbándolo intensamente, con devoción. Lo cargó en sus brazos, recargándolo contra la pared nuevamente & lo penetró.
-¡Asami!.-Gritó con una furia llena de placer.
Se movió con una agilidad impresionante, mejor aún que otras veces, lo rozaba con fuerza, con furia, como si lo estuviese castigado por algo.
-Ah... Asa... ¡Asami!.-Gemía mientras el mayor le apretaba las caderas embistiéndolo, una & otra vez hasta que llegaron al climax justos.
Asami lo cargó & lo llevó a la habitación, lo dejó descansar un momento & nuevamente comenzó a besarlo con lujuria, con pasión, con deseo. Lo dió vuelta & elevó sus caderas volviendo a penetrarlo.
-Asami, du...duele.-Susurró.
-Haré que tengas una erección en un segundo, aguanta.-Murmuró acariciando sus pezones mientras se movía lentamente. Acariciaba el miembro de Akihito & vio como este empezaba a erectarse & disfrutar la penetración. Se movía más brutalmente, con satisfacción, con deseo, el calor se propagaba cada vez más & por fin, una vez más, llegaron al climax.
-Asami.-Murmuró sintiendo un vacío al sentir como Asami salía de él.
-Ven.-Lo abrazó manteniéndolo en su pecho.-¿Puedo hacer algo?
-Si.-Susurró cansado acostándose boca arriba cerrado los ojos & lo abrió sosprendido al sentir el rostro de Asami apoyado en su vientre.
-¿Crees que podrá escucharme?.-Susurró apoyando la mejilla.
-Si es así, que verguenza, me ha escuchado gemir & a ti jadear.-Susurró acariciando el cabello de Asami.
-Cierto.-Rió un poco.-¿Tu que crees que será?.-Se acostó a su lado.
-No lo sé, pero eso no importa.
-Tienes razón, pero admito que me gustaría que fuera un niño.-Se acostó sobre el pecho del menor.
-Mh, lo imaginé.-Susurró. Estaba sorprendido con la actitud de Asami.-¿Te pasa algo?
-No.-Susurró abrazándolo & le dedicó una pequeña, pequeñísima sonrisa de "Todo está bien".
-Bien.-Sonrió.
*-Una hora después-*
-A ver, déjame decir “Asami” dentro de tu boca.-Dijo Akihito colocándose encima del mayor.
-¿Qué?.-Asami rió inconscientemente.
-Me encanta esa risa, espero escucharla más seguido.-Susurró & Asami largó una pequeña carcajada.
-Es que en verdad me has tomado por sorpresa.
-Vamos, en serio, quiero escuchar cómo se escucha.
-Escuchar cómo se escucha, suena lógico.-Rió un poco más.-Se te ocurre cada cosa loca.
-Vamos Asami, por favor.-Insitió de manera infantil.
-Bien, acércate.-Sonrió conteniendo otra carcajada.
Akihito se inclinó sobre Asami & el mayor abrió la boca esperando burlescamente, que el menor se acercara.
-Asami.-Pronunció con pereza.
-Dime.-Dijo con dificultad al no poder cerrar la boca.
-Quiero una naranja.
-¿Qué?.-Comenzó a reír nuevamente. Akihito tenía tantas ideas, decía tantas cosas, & eso sacaba ese lado divertido de Asami.
-Se me antoja una naranja.-Susurró acostándose a su lado.
-¿& de dónde se supone que saque una naranja?
-De la heladera.
-No hay nada allí.
-¡Entonces compra una!.-Le dijo elevando la voz.
-Que niño insoportable.-Se levantó colocándose el bóxer.
-Deja, ya se me pasó.-Sonrió.
-¿Estás hablando en serio?
-Si, Asami.
-Voy a acomodar unos papeles así mañana puedo ir después de almorzar a la oficina.
-Bueno, me quedaré aquí.
-¿Seguro? ¿Podrás dormir?
-Lo intentaré, no es que no pueda vivir sin ti.
-Algo así.-Asami sonrió sensualmente & se fue.
Asami estaba tranquilo sentado en su gran sillón, en bóxers, revisando los papeles que tenía para el día siguiente. Akihito apareció por la puerta de la sala como un niño pequeño, restregándose los ojos.
-¿Qué pasa?.-Preguntó Asami mirándolo. Pero el menor no respondió, solo se acercó & se sentó encima de este, acurrucándose en su pecho desnudo.-Akihito, ¿Qué pasa?
-“Bestia no te quiere, pero quiere que seas suyo para siempre.”
-Que yo sepa, eso es una canción.-Rió Asami.
-Me ha llegado a mi celular.-Susurró escondiéndose en su cuello.
-A ver, ¿& eso que tiene?.-Lo separó un poco de su cuerpo para verle el rostro.
-Es que me han estado mandando mensajes de ese tipo. Diciendo que tú me odias, que solo soy un objeto, que soy despreciable.-Sollozó.
-Malditas hormonas.-Murmuró Asami casi audible al escuchar los sollozos del menor.-Tú sabes que no eres un objeto, que no eres despreciable & que no te odio.-Lo abrazó.
-Pero no me respondiste cuándo te dije que te amaba.
-Sabes que es difícil para mí, Akihito.-Susurró acariciándole la espalda.
*-El timbre sonó, & ambos se miraron-*
Akihito se envolvió con una manta & se sentó en el sofá mirando la puerta, mientras Asami se ponía una bata para abrir. Una mujer alta, elegante, entró sin permiso & abrazó a Asami del cuello, depositando un sensual beso en sus labios. El corazón de Akihito se encogió de inmediato, no pudo respirar normal, la garganta se le retorció & sintió la amargura en su vientre.
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