Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

AMANTES por crystalwall

[Reviews - 82]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola, les traigo el capítulo nuevo, espero que les guste lo que viene

Capítulo 10.- Sentimientos reales… la verdad sobre Hades, la verdad sobre James

 

Tres semanas habían pasado desde el accidente de James, tres semanas en la que Seiya cortó toda comunicación con todo el mundo y se dedicó a trabajar, a pensar, a descansar, a pasear a su perro y a dormir temprano, en ese tiempo Seiya pensó mucho en el futuro que quería para él mismo, consideró sus opciones y ahora al verse libre y sin ninguna influencia externa se dio cuenta de algo muy importante, él quería una familia, hijos, paz, estabilidad, quería trabajar, no quería pasar su vida encerrado en su casa atendiendo a su esposo, él quería viajar, irse de farra eventualmente pero mas que todo lo que había pensado, Seiya no quería estar solo, Seiya quería una pareja a su lado, alguien que lo amara sin ponerle limitaciones, alguien que lo amara y lo comprendiera, que no se impusiera ante él en todas las cosas, quería alguien que le dejara ser él mismo y no intentara amoldarlo en ninguna forma, inevitablemente era su muy fogoso amante el que le venía a la cabeza y ese era el punto complicado en su vida … rayos…

 

Como fue Seiya el que cortó las comunicaciones con todo el mundo, fue él mismo el que las reanudó y su primera llamada fue a su amante, le llamó para contarle que había enviado los papeles de su divorcio a su abogado y que pronto estaría legalmente divorciado, Seiya le dijo que amaba este punto de su vida, le dijo también que le encantaba la relación que ellos tenían y que no quería que eso cambiara, le dijo que deberían tomarse el tiempo suficiente para acoplarse realmente con todo lo que ello conlleva y le dijo también que lo amaba con pasión y sin reservas, el pelinegro se sorprendió cuando escuchó la noticia y en esos momentos le hubiera gustado estar en Tokio, ahora estaba en Estados Unidos, Hades había ido a inspeccionar las fábricas y las cadenas de distribución de las empresas americanas con las que había estado haciendo negocios últimamente pero al escuchar el tono y todo lo que el castaño le dijo, Hades se sintió un poco mas tranquilo, y por mas o menos una semana la pareja se comunicó por teléfono y skipe

 

Un miércoles, Seiya estaba en su oficina ocupado en sus trámites varios cuando recibió una visita bastante inesperada, el castaño estaba con la mirada en unos papeles cuando una coca cola se apreció delante de él, Seiya levanto los ojos y sonrió de la sorpresa, ahí estaba Hades impecablemente vestido, luciendo sobriamente un traje de diseñador, el pelinegro se agachó y lo besó en los labios

- Qué haces aquí?, no llegabas el domingo? – preguntó el castaño levantándose de su sillón y rodeando el escritorio para abrazar apropiadamente a Hades y besarlo en los labios nuevamente

- Pude adelantar mi viaje y vine lo antes posible, llegué ayer en la noche pero ya era muy tarde como para llamarte, te extrañé pequeño, no sabes cuánto – el mayor estrechó al mas joven contra su pecho y acarició suavemente su espalda, Seiya aspiró profundamente y se sintió en casa, el aroma del perfume de Hades tenía ese efecto en él

- En serio me extrañaste?

- Claro que si, me he sentido muy solo estas últimas semanas aunque el hecho de que me llamaras si alegró mi viaje y me dio un motivo para volver, me gustaría asumir que tu también me extrañaste verdad?

- Claro que te extrañé

- Y para que veas que si pensé en ti te traje especialmente un regalo como prueba de que siempre estuviste presente en mi mente cuando estuve lejos - Hades señaló la coca cola que estaba en la mesa, Seiya tomó la lata y vio que su nombre estaba grabada en ella, sonrió y meneó la cabeza

- La mandaste a hacer?

- Bueno… ya estaba en Estados Unidos no?, una llamada a la fábrica no fue un problema, no sabes las ganas que tenía de verte, aunque te debía la visita a tu oficina y déjame decirte que no está mal, aunque la mía es un poco más grande – bromeó Hades y le guiñó un ojo al castaño que dejó caer sus defensas al destapar la coca cola para tomar un sorbito, Hades sabía como suavizarlo y ponerlo de buen humor

- Seguramente tu oficina es mas grande que la mía, pero me alegro que hayas vuelto, aunque si recién regresaste tu empresa debe estar patas arriba, así que de dónde sacaste tiempo en tu apretada agenda para venir a verme?

- Bueno pues, vine con regalos a sobornarte – dijo Hades y señaló la coca cola en las manos del castaño que la miró y dio otro sorbito

- Ok., a quién tengo que matar? – Seiya se encogió de hombros cuando dijo esto, Hades sonrió, levantó el mentón del castaño suavemente para besarlo con pasión en los labios, cuando el beso se rompió le susurró en la oreja:

- A mí, quiero que me mates de placer, lo malo es que no puedo ahora pero más tarde si

- No, ya en serio, qué pasa? – preguntó Seiya con una sonrisa en los labios, Hades lo besó una vez más y le dijo en tono muy casual:

- Tengo una cena hoy en la noche y me gustaría mucho que me acompañaras, es una cena de cierre de negocio con los americanos y ellos llevarán a sus parejas, me preguntaron si podía llevar a la mía y yo dije que tenía que preguntar primero, por ende el soborno, qué dices?, quieres venir conmigo a la cena?, no te vas a aburrir te lo prometo, no se hablará de negocios en la mesa y es un grupo pequeño de 8 personas, solo seremos cuatro parejas en ese restaurante que me dijiste hace tiempo que querías ir, no me vas a dejar ir solo, verdad?

- Mmmm… como me trajiste el mega súper híper soborno, no puedo negarme, a qué hora es?

- A las 8, si quieres puedo mandar un auto por ti para que te lleve al hotel, me esperas un ratito, nos cambiamos de ropa y vamos juntos

- No, tengo que ir a casa, allá están todos mis trajes formales como los tuyos, en el hotel estaban solo los trajes que me pongo para ir al trabajo

- Eso no es problema, llama a Gloria y dile que te lleve un traje al hotel o cómprate uno en la boutique del lobby, aunque si quieres ir a tu casa pues ve a tu casa, nos encontramos en el lobby del hotel a las 7:45, te parece mejor?

- Si, eso suena mejor, gracias por el soborno pero te agradezco más la visita – Seiya abrazó a Hades rodeando su cuello con los brazos y lo besó una vez más, Hades estrechó al castaño contra su cuerpo y lo abrazó posesivamente, y en eso estaban cuando el jefe de Seiya entró a la oficina sin anunciarse y dijo todo incómodo:

- Cielos… lo siento, no quería interrumpir

- Aioros, no… yo lo siento – dijo Seiya sonrojándose y cubriendo su boca con la mano, que bochorno… que bochorno…, en cambio Hades sonrió y estiró la mano para saludar al jefe del castaño con una sonrisa

- Es un gusto verlo Hades, cómo está? – saludó Aioros todo cortés al pelinegro que lo saludó cálidamente

- Muy bien gracias Aioros, y usted?

- Bien bien, solo venía a dejarte estos contratos Seiya, siento haber interrumpido

- No hay problema, ya me iba, hasta la noche mi niño, hasta luego Aioros, ha sido un gusto verlo – Hades besó a Seiya en los labios una vez más, pero fue un beso cortito, estrechó la mano de Aioros y salió de la oficina con una sonrisa

- Es la primera vez que viene? – preguntó el castaño jefe de Seiya a su empleado que asintió, aún estaba sonrojado

- Si, me trajo una coca cola – dijo el joven castaño mostrándole a su jefe la lata grabada con su nombre, Seiya iba a guardar esa lata con su vida

- Te conoce bien entonces, bueno, ahora que ya no estás ocupado, déjame contarte lo que hablé con el departamento financiero, no vas a creer lo que me dijeron – Seiya charló con Aioros sobre unos contratos y luego le dejó toda la documentación para que Seiya siguiera el proceso, el castaño estaba de buen humor y a la salida de su trabajo se fue contento a casa a cambiarse de ropa y a encontrarse con Hades para ir a su cena

 

Ya en el restaurante, en contra de todo pronóstico, Seiya la estaba pasando muy bien, los americanos resultaron ser bastante simpáticos y como Hades lo había prometido no se habló de negocios en la cena, ahora estaban hablando de las maravillas que habían en los Estados Unidos, de todos los lugares que tenían que ir a visitar porque el viaje de Hades fue de negocios no de placer entonces no había visto nada de lo que América tenía que ofrecer a los turistas, a Hades le pareció muy atractiva la propuesta de ir a Las Vegas cuando el tema fue por lo casinos y los centros nocturnos, Seiya en cambio quería ver el Gran Cañón y aunque no lo hubiera admitido la idea de ir a Disney siempre le había llamado la atención y el Sr. Smith se había comprometido en ser su guía cuando crucen el océano y vayan para allá.

 

Hades disfrutó mucho la cena, hacía tiempo que no pasaba una noche como la que había pasado esta noche, Seiya también la verdad y al salir ellos estaban de muy buen humor, antes de ir a casa, decidieron ir a caminar por el parque que estaba al frente del restaurante y tomados de la mano caminaron bajo la luz de la luna.  Esa noche hablaron de muchas cosas que no habían hablado antes, de los sentimientos y miedos de Seiya de embarcarse nuevamente en una relación seria, y si no funcionaba???, Seiya no estaba dispuesto a pasar otra vez por lo que había pasado antes, esta vez no lo soportaría.

 

Cuando su matrimonio terminó, el castaño estuvo muy mal, quería morirse y eso no era lo extraño, eso era lógico, pero cuando empezó a pensar en las formas de hacerlo, fue cuando su amigo Hyoga intervino y le buscó ayuda psicológica, Seiya fue a terapia pero no estuvo mucho tiempo porque Hades llegó a su vida y las cosas mejoraron.

 

Hades lo escuchó con mente abierta, y luego de considerar todo lo que el castaño dijo, el pelinegro le aseguró que las cosas serían diferentes, que él era otra persona, que Seiya nunca más sufriría humillaciones por su causa ni mucho menos, que lo único que quería era hacerlo feliz porque la felicidad de Seiya representaba su propia felicidad también, que él encontraba paz y balance a su lado y que no quería dejarlo ir, que no podía vivir sin él

 

Seiya lo escuchó también y besó a su amante bajo la luz de la luna, con ese beso sellaron su nueva unión, con ese beso decidieron hacer una vida juntos y dejar de ser simplemente amantes, con ese beso unirían sus vidas por lo que esa noche no fueron al hotel, fueron a casa de Seiya, y pasaron la noche juntos acurrucados frente al fuego de la chimenea de la sala, tomando vino, haciendo planes, amándose y mimándose al calor del fuego, hablaron de una vida juntos, de hijos, viajes, una vida plena como una pareja sólida, lo que Seiya siempre quiso y Hades también

 

La mañana los sorprendió en el piso de la sala, Seiya estaba acurrucado en el fuerte pecho de Hades sobre la mullida alfombra y envuelto en varias mantas, el pelinegro despertó cuando sintió que le lamían el rostro y le pasaron pisando por encima, Hades abrió los ojos y sonrió

- Hola Max – el perrito ladró y volvió a lamer la cara del pelinegro que le rascó tras las orejas, Seiya se movió pero no se despertó y se viró al otro lado, el perrito saltaba emocionado y Hades le shusheaba para que no ladre y acabe de despertar a Seiya, así que se puso de pie y tomó los pantalones de pijama que Seiya le había dado la noche anterior, tomó a Max de su collar y lo llevó de vuelta a la cocina, allí estaban las muchachas del servicio, al verlo,  una de ellas dejó caer el vaso de jugo que estaba preparando para llevárselo a Seiya porque habían visto su auto en el garaje, no habían visto a la pareja en la sala aún

- Lo siento señor, por todos los dioses, mire nada mas, no se mueva, no se vaya a cortar el pie, lo siento, lo siento tanto – la que hablaba era una muchacha rubia bastante joven que estaba aterrorizada al ver a pelinegro que en contra de todo pronóstico sonrió y le hizo una seña con la mano para que no se preocupe

- Buenos días señor – dijo una mujer algo mayor, ella fue la única que sonrió al ver al pelinegro que se acercó a ella y le besó la frente, el resto de empleados prácticamente volaron de la cocina del susto

- Buenos días Gloria – dijo Hades y abrió el refrigerador, sacó el cartón de jugo de naranja y lo iba a beber del cartón pero Gloria le quitó el cartón y le dio un vaso, la mujer meneó la cabeza y acarició el rostro del pelinegro que tomó una pera del tazón grande de fruta y le dio un mordisco

 

El timbre de la casa sonó y Seiya gruñó, todo el mundo le iba a hacer escándalo esa mañana?, rayos…, el castaño se incorporó y se estiró para desperezarse y bostezó, su perro vino corriendo desde la cocina y se le botó encima, Seiya le rascó las orejas y lo abrazó, el castaño estaba medio dormido todavía, y no se levantó cuando la muchachita rubia fue a abrir la puerta dejando pasar a Hyoga, el que tenía muchos papeles en las manos y lucía angustiado

- No no, Max!!!!, no – el perro había salido corriendo y ladró amenazadoramente al rubio intruso que del susto soltó lo que tenía en las manos, es que no era para menos, era un rottweiler inmenso con cara asesina el que le ladraba amenazadoramente

- Seiya!!!!! – grito Hyoga retrocediendo hasta chocarse con la pared, el castaño llegó corriendo y agarró a su perro del collar parándose sobre él dejando al animalito entre sus piernas, el castaño se agachó y le empezó a shushear a Max para calmarlo hasta que el perrito dejó de ladrar y movió la cola tranquilo

- Lo siento, no le gustan los extraños, qué haces aquí a las seis de la mañana Hyoga? – preguntó Seiya haciéndose a un lado para que Hyoga pueda recoger los papeles y cuando lo hizo siguió a Seiya al comedor, la sala estaba hecha una revolución total y a Seiya le pareció mejor ir a la mesa, el castaño tenía a Max de su collar, su perro era un dulce pero era bien bestia también, ya había habido varias quejas de los vecinos y por eso Seiya lo mantenía en el patio y dentro de la casa

- Necesito tu firma en estos contratos, ayer en la noche me llamó mi jefe y me dijo que los necesitaba urgente hoy, como tú ya te fuiste anoche, tu jefe me los imprimió pero necesita tu firma y sumilla en las hojas, tu sabes lo intenso que es mi jefe por eso madrugué a verte

- Ok., ok., tienes un esfero?

- Si si, pero por favor no vayas a soltar al perro, casi me da un infarto

- Nahhhh, mi Max es un sol, verdad tú? – Seiya acarició la cabeza de su perro que ladró, se arrimó a Seiya y le lamió la cara, Seiya sonrió y le rascó las orejas al perro que se levantó y caminó tranquilamente por el salón rumbo a la cocina

- Ese sol tuyo da miedo, si regresa me defiendes, ahora firma esto por favor – Hyoga le puso los papeles a Seiya que los leyó y los empezó a firmar, el timbre de la casa sonó otra vez y fue la muchacha rubia a abrir la puerta, esa mañana estaba resultando ser muy movida, Seiya escuchó unos zapatos de tacón avanzar por el piso de tablón, el castaño levantó la mirada y suspiró con pesadez, esa no era forma de empezar el día

 

- Vaya, tienes el descaro de traer a tu amante a la casa de mi hermano???, eres una basura, yo no sé qué vio James en ti, le he dicho más de una vez la clase de ficha que eres pero mi hermano está ciego por ti, debes ser muy hábil en la cama para que lo tengas embobado como lo tienes – la muchacha tenía el rostro enrojecido de la rabia, era muy hermosa pero ahora se veía amenazante

- Buenos días para ti también – dijo Seiya y volvió a bajar la mirada para seguir firmando los papeles, Hyoga se sentía muy incómodo, ella lo había señalado como el amante de Seiya, y no sabía si explicar o no la situación, aunque Seiya parecía no estar interesado

- Y te atreves a saludarme tan campante???, si estás ahí prácticamente desnudo, eres un cualquiera eso es lo que eres – la muchacha lo miró con asco, Seiya no le prestó atención, si era cierto que estaba ligerito de ropa pero eso no era un crimen, a la final estaba en su casa y recién se levantaba de la cama por lo que estaba usando boxers y la camisa que Hades había estado usando la noche anterior, a Seiya le gustaba mucho el perfume del pelinegro y por eso usualmente se ponía su ropa

- Bueno… esta es mi casa, y yo puedo estar como yo quiera – dijo Seiya sin levantar la vista, él seguía firmando los papeles y se encogió de hombros, él no le iba a dar importancia a su cuñada, esta no era la primera vez que ella irrumpía en su casa solo a insultarlo

- No será tu casa por mucho tiempo, hablé con James y me dijo que seguirá con los trámites del divorcio lo antes posible, que quiere deshacerse de ti y que no quiere volverte a ver más en la vida, que eres su peor equivocación y que no ve la hora de librarse de ti, que no mereces nada de nada y que quiere dejarte en la calle de donde nunca debió haberte sacado, y es mas… te lo digo para que lo vayas sabiendo y no te hagas ilusiones de poder volverte a meter en su cama, mi hermano tiene un nuevo amante, él mismo me lo dijo  – dijo la muchacha con profundo odio

- Y cuándo te dije eso Pandora? – Hades estaba de pie cruzado de brazos apoyado en el marco de la estancia, Max estaba a su lado sentado a los pies de su amo como buen perro

- Tu… estás aquí?, por qué estás aquí? – Pandora se puso pálida al ver a su hermano mirarla con desagrado, Hades estaba usando solo pantalones de pijama y lucía en verdad molesto

- Es su casa también – dijo Seiya en tono conversacional

- Pero tú me dijiste, tú me dijiste que te ibas a divorciar James, yo vi la ropa regada en tu cuarto de hotel, tú tienes a alguien más, tú mismo me lo dijiste – reclamó la muchacha sin entender

- Bueno, en todo lo que has dicho de Seiya en una sola cosa tienes razón, él si tiene un amante, pero resulta que su amante soy yo, el que estaba en mi habitación de hotel esa tarde era Seiya, ahora que ya volví a casa las cosas serán diferentes, pero para que estés tranquila si me voy a divorciar de Seiya, pero solo para volverme a casar otra vez con él – el tono de Hades era cortante y muy molesto, Seiya sonreía disimuladamente y seguía firmando los papeles mientras que Hyoga tenía la mandíbula en el suelo, él nunca había conocido a James, Seiya solo le había hablado de él, ni en sus sueños más salvajes se le ocurrió que el amante de Seiya pudiera haber sido su propio esposo

- Pero… hermano, esta basura te engaña, yo mismo te di sus fotografías y este de aquí es su amante, yo misma los vi – Pandora señaló a Hyoga que iba a abrir la boca a defenderse pero Seiya puso su mano sobre la mano del rubio para llamar su atención y cuando Hyoga lo miró, Seiya simplemente meneó la cabeza, era mejor mantenerse al margen de los líos de Hades y sus hermanos, esas peleas eran épicas

- No, este muchacho de aquí se llama Hyoga y es amigo de  mi esposo desde la infancia, tiene novio al que también he conocido y ambos son muy simpáticos, tu fabricaste esas fotografías, tú me hiciste creer que mi esposo me engañaba, tú me envenenaste en su contra y yo tontamente caí en tu engaño, por tu culpa lo perdí pero ahora que lo he recuperado no voy a cometer los mismos errores otra vez, lárgate de mi casa Pandora, lárgate y no vuelvas

- James… por favor

- No, ya he escuchado tus mentiras y tu veneno por mucho tiempo

- Tu… tu eres el causante de todo esto – la muchacha gritó señalando a Seiya que levantó las manos como diciendo: “A mí que me registren”, pero no hubo necesidad de que Seiya dijera nada porque Hades respondió:

- Lo único que ha hecho Seiya es amarme, él ha aguantado muchos desplantes de ustedes, ha aguantado muchas humillaciones mías, y muchas cosas más, pero no más Pandora, no más… Seiya es mi esposo y si no le das el lugar que le corresponde, olvídate que somos hermanos

- Pero James…

- Nada!!!, a menos que te racionalices Pandora, no tenemos nada mas de que hablar

- Este regalado solo está tras tu dinero, que no lo ves?

- Y si así fuera qué?, a la final es mi dinero y Seiya me hace feliz, si quiere quedarse con todo pues es lo justo

- Es la herencia de nuestros padres

- No… la herencia de nuestros padres tú la has malgastado, tu que ahora ya no tienes casi nada, o que crees?, que podías esconderme tus finanzas para siempre?, yo lo sé todo Pandora, tú has despilfarrado toda tu herencia, Julián también, solo yo he hecho producir mis negocios, pero si el dinero es lo que te preocupa, quédate con mi parte también, el dinero es lo que a mi menos me importa

- Yo puedo mantenerte si quieres – dijo Seiya como quien no quiere la cosa, Hades estaba en verdad molesto pero lo que dijo su esposo le hizo sonreír

- Es cierto, Seiya trabaja y puede mantenerme, ahora que ya lo hemos aclarado todo, lárgate de una vez y no vuelvas

- Te vas a arrepentir, tú y tu maldito puto se van a arrepentir – Pandora tomó sus cosas y salió atropelladamente de la casa de James, el pelinegro se llevó las manos a la cara y se restregó los ojos, esa no era forma de empezar el día, y tan feliz que se había levantado esa mañana pero… Pandora tenía la habilidad de acabar con su paciencia

 

Seiya acabó de firmar los contratos que Hyoga le había dado y se puso de pie, fue hasta donde estaba su esposo y lo abrazó, James lo abrazó también y besó sus cabellos

- Siento mucho que hayas tenido que ver eso Hyoga, mi hermana lastimosamente está loca, bueno… si me disculpan me voy a dar un baño, espero que no hayas quemado mi ropa – le dijo Hades a Seiya que sonrió pícaro y meneó la cabeza

- Si estuve tentado a quemarlo todo pero lo pensé mejor, supongo que siempre esperé que volvieras

- Genial, hoy tengo un día pesado en la oficina y eso va a estar terrible, quieres ir a comer alitas en la noche?, desde ahora veo que una cerveza luego del trabajo me caería bien, Pandora va a molestarme el día entero, y Julián también – dijo James y meneó la cabeza

- Alitas?, tu remedio para los problemas con tus hermanos son alitas de pollo? – a Seiya le pareció muy divertida la propuesta de su esposo

- Si, mientras mas mejor, quieren tu y Shun venir con nosotros?, hay mucho que celebrar – James miró directamente a Hyoga cuando dijo esto, el rubio asintió sin saber que mas decir

- Genial… - dijo Seiya todo divertido mirando la confusión de Hyoga, su rubio amigo no entendía nada, James besó a Seiya en los labios y con una seña se despidió de Hyoga que le contestó con la misma seña, Seiya volvió a su puesto en la mesa del comedor y le pasó una mano a Hyoga delante de los ojos, el rubio aún estaba en shock aparentemente

- Hey… despierta – dijo Seiya  a su rubio amigo que meneó la cabeza y recogió sus papeles

- Por qué no me lo dijiste?

- Porque sonaba muy extraño, cómo te decía que mi nuevo amante era mi esposo?, hasta a mí me dolía la cabeza a veces cuando trataba de racionalizarlo, en especial cuando James hablaba de sí mismo en tercera persona y como si no se conociera, o cuando me decía que era mi amante, que no quería saber nada de mi esposo o de mi matrimonio, al inicio no entendía por qué lo hacía, ya luego con el pasar de los días las cosas empezaron a fluir entre él y yo nuevamente y… pensándolo bien tiene mucha lógica

- Qué cosa?

- Bueno… te conté como estuvo mi separación con James verdad?

- Si, me dijiste que él te había acusado de engañarlo, que quería tenerte encerrado en la casa y vigilado las 24 horas del día, que te trataba súper mal y que tú te querías morir

- Si, eso lo resume bastante bien, James tiene un carácter del diablo, nunca llegamos a los golpes pero creo que nos faltó muy poco, él… él fue muy ofensivo conmigo, me dijo cosas que… que es mejor olvidar y no repetir, me botó de la peor manera y yo en verdad que me quería morir, se fue de la casa pero con todo y eso los problemas seguían, Pandora, mi dulce cuñada a la que acabas de conocer, me venía a insultar bastante seguido, Julián, el otro hermano de James, no se metía mucho en los problemas, pero fue él el que le dio a James unas fotos mías en posiciones comprometedoras y contigo

- Conmigo?

- Si, contigo, eso fue lo que acabó de enloquecer a James que vino a casa una noche y tuvimos la pelea mas agria de toda mi vida, esa fue la noche en que te llamé para despedirme y tu viniste a quitarme el frasco de pastillas de las manos, te acuerdas? – preguntó Seiya y Hyoga asintió, el rubio aún se estremecía al pensar en esa noche, su amigo siempre había sido muy sociable y alegre, pero a raíz de que se casó se había desaparecido de la faz del planeta, ahora que había vuelto a aparecer lo hizo en un estado bastante frágil, su matrimonio lo había dejado en ruinas, Seiya no se parecía a quien solía ser y esa noche estaba dispuesto a quitarse la vida, Hyoga se quedó con él la noche entera asegurándose de que no haga ninguna estupidez y lo convenció de buscar ayuda

- Claro que me acuerdo, pero… de eso, cómo fue que… cuándo lo volviste a ver?

- Una noche en un bar, esa tarde había mandado a ver sus cosas de la casa y yo… yo me sentía muy mal, fui a tomar un trago y él estaba en el bar, se acercó a mi, se presentó como Hades y me entabló conversación

- Por qué se presentó como Hades?

- Hades es su segundo nombre, James Hades Hoffman, cuando yo lo rechacé en el bar, me llamó por teléfono más tarde en la noche, me dijo que él estaba consciente de sus errores, de todo lo que me hizo sufrir sin causa, que se había dado cuenta de que sus hermanos habían mentido con respecto a mí, y que él sabía que no lo iba a perdonar, que él sabía que no merecía mi perdón, pero… estaba convencido de que podríamos tener una segunda oportunidad si él me enamoraba otra vez, si empezábamos de cero, como si en verdad fuéramos extraños en un bar, me propuso que nos conociéramos otra vez, lo que el planteaba era un nuevo inicio realmente

- Una solución bastante inusual

- Yo le propuse ir a terapia pero él me dijo que no, que no creía en lo de contar sus problemas a nadie y a terapia se negó a ir, pero me gustó lo que planteó, porque ahí pudimos conversar de muchas cosas que antes no pudimos

- Como qué?

- Me preguntó de mi trabajo y no sonó agresivo sino más bien interesado, me dejó explicarle el por qué quería trabajar y me escuchó, con mente abierta escuchó lo que yo quería decir y lo pudimos hablar, antes se había negado a conocer a mis amigos y a ti te odiaba con pasión, él pensaba que eras mi amante y quería asesinarte, es mas, te mandó a seguir a ti, a mí y ahí fue que se dio cuenta que tu tenías novio y yo no estaba haciendo nada malo

- Nos mandó a seguir?

- Si, eso lo hizo luego de que se fue de la casa, yo le había prometido, le había jurado que no tenía ningún amante pero él no me creyó, pero supongo que lo puse a dudar y ahí decidió asegurarse, fue bueno que me mandara a seguir porque se dio cuenta que yo decía la verdad y ahí empezó a dudar de todo el resto de cosas que le dijo su hermana

- Cuándo te dijo esto?

- Ayer cuando caminábamos por el parque después de cenar, me pidió perdón otra vez y me dijo que quería volver a casa, que estaba podrido de vivir en el hotel, que desde que yo volví con él, el hotel no le fastidiaba tanto pero que extrañaba su casa, su cama, a Max y a Gloria

- Vaya… nunca se me hubiera ocurrido algo así, pero cómo funcionó todo esto, tu te referías a él como Hades… me engañaste completamente déjame decirte – dijo Hyoga algo molesto en medio de su sorpresa

- Eso fue a petición suya, él me dijo que quería que lo mirara como otra persona, quería enamorarme nuevamente, quería que lo viera con nuevos ojos y por eso se presentó ante todo el mundo no solo ante ti como Hades, él me dijo que lo de un nuevo inicio era en serio y funcionó, porque me enamoré de él otra vez, yo lo amaba pero qué quieres que te diga?, me conquistó otra vez, como él mismo me dijo, al hacer todo esto me hizo acuerdo las razones que tuve para haberme enamorado de él antes, así que luego de todo este relajo, anoche James volvió oficialmente a casa

- Vaya… solo a ti se te ocurre tener de amante a tu propio esposo – Hyoga meneó la cabeza, nunca antes había escuchado una cosa así, pero… si eso permitió salvar el matrimonio de su amigo pues… todo sea por la paz y felicidad de Seiya

- Ya vez por qué te decía que todo era complicado?, pero… de cualquier manera, las cosas con James están geniales, lo único malo es que se acabó de pelear con su familia, y eso si está grave

- Ya oí

- Si, es que si hay algo que James no tolera es que le mientan o le engañen, y Pandora con Julián hicieron exactamente eso, lo engañaron con respecto a mí y le metieron millón ideas en la cabeza, eso James no les va a perdonar nunca, o por lo menos eso me dijo, James es todo dulce cuando lo conoces y él se abre a ti, él ama incondicionalmente y haría todo por ti, pero si ese no es el caso… la gente lo ve como un energúmeno, todo el mundo le tiene miedo porque tiene un carácter de los mil diablos y se enoja fácilmente, realmente si es complicado de tratar pero yo lo amo, él me ama y por fin estamos juntos sin juegos de por medio, no que no me haya gustado jugar pero no es lo mismo, yo quiero una vida normal, una familia, un hogar, y ahora al fin lo tengo, y él me ama – dijo Seiya una vez mas con una sonrisa única de felicidad en su rostro

- Si… él te ama

- Si, él me ama, pero bueno, yo también me voy a bañar sino no llego a la oficina

- Ok., yo me voy también, por favor acompáñame hasta afuera, no me vaya a comer ese perro que tienes

- Ay no seas miedoso, Max es un sol

 

Hyoga salió y se subió a su auto, Seiya lo despidió con una seña desde la puerta, con la otra mano tenía a Max bien sujeto aunque el perrito luchaba por escaparse, varias mañanas a Seiya le había tocado correr por la calle tras su perro cuando se le escapaba pero no quería hacerlo esta mañana, el castaño suspiró cuando cerró la puerta y Max caminó derrotado hacia la cocina, James ya bajaba por las escaleras de mármol vestido y listo para desayunar, atrapó a su esposo y lo besó en los labios, Seiya sonrió y abrazó a su esposo aspirando profundamente, siempre le había gustado su perfume…

 

Notas finales:

Kaleb... tenías razón

Ya solo falta el final, nos vemos el miércoles con el fin de la historia, muchas gracias por leer y nos vemos pronto, saludos, bye 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).