Después de un largo día donde muchas verdades se revelaron se encontraban dos cuerpos en desnudos en el cuarto de baño
-Ah ah Hashirama mmm sigue si –gemía un moreno de cabellos largos mientras acariciaba su cabeza
Se encontraba Madara y Hashirama en la gran tina de baño; entre las piernas de Madara se encontraba Hashirama degustando el miembro de su gruñón marido
-Oye termina con lo que empezaste –se queja al no sentir la boca de su marido
-No te desesperes –lame desde la base hasta la punta –no pienso dejarte así
-Hump
POV HASHIRAMA
Bese sus delgados pero antojables labios con una lentitud que sé que lo desespera, a él le gusta fuerte salvaje duro pero quiero hacerlo disfrutar. Disfrutaba de ese beso lento degustando su sabor a menta, le beso la mejilla, los ojos, la nariz, la barbilla, el cuello sus hombros sigo bajando hasta llegar a sus pezones
-Ahh mmm
Escucho sus sonoros jadeos y eso me prende más, tantos años de conocerlo me sé su cuerpo de arriba abajo sigo descendiendo por sus costillas vientre y esa pequeña cicatriz apenas visible en su vientre, la beso delicadamente llego a la altura de su despierto muy despierto pene que se eleva como la espuma de la leche hirviendo. Chupo la punta y poco a poco me la voy metiendo toda a la boca
-Hashirama ahh si aggnn ah ah gggnnn ahh
¡Joder! Me encanta que gima de esa forma mientras se la chupo fuerte como a él le gusta, no resistiré mucho ni el tampoco
-Madara
Le beso atrás de la oreja, sé que eso lo enloquece. Le doy tres dedos para que los chupe
-Ya sabes que hacer Dara-chan
-Humm
Miro como los chupaba como su lengua pasa por cada uno eso me es tan sensual mirar su rostro sonrojado y como prácticamente se traga mis tres dedos en su boca. Saco mis dedos de su boca porque si no me correría con solo verlo ¡ah rayos!. Meto con cuidado un dedo en su estrecho ano, lo giro saco-meto repetidas veces y lo escucho gemir en mi oído y eso me encanta, me fascina que haga eso. Teniendo ya los tres dedos dentro de él los muevo rápido, los giro y los abro, si a mí azabache le fascina que lo haga así; lo beso en los labios y me posiciono en medio de sus piernas
-Abrete para mi Madara
-Maldito no me hables de esa forma ahh
-Porque
-Eres am nnggmm ah ah
-Dime porque Madara
-No
-Dime
Meto más adentro mis tres dedos e intento abrirlos
-¡AH! Maldito
Siento como clava sus uñas en mi espalda
-Me lo dirás o quieres que te lo saque a latigazos
-Ah mm me gusta
-Que te gusta
Le chupo el cuello
-Tu voz
-Mi voz
-Si tu voz, cuando me hablas de esa forma ahh
Paso la mano por atrás de su espalda para agarrar un botecito de lubricante y untarme en mi pene y en su ya ensanchado ano. Lo jalo de las caderas para que solo quedara recargado con sus brazos a la orilla de nuestro enorme jacuzzi
-Listo
Lo miro a los ojos llenos de deseo y lujuria… de excitación y sin pensarlo dos veces lo penetro de una solo estocada.
-¡AH! Hashi am nngg ah ah
Deja caer su cabeza hacia atrás, el gesto de su cara, su ceño fruncido y su respiración entrecortada, coloco mis manos en su cintura saliendo y entrando con fuerza nuevamente dentro de el
-Ah Hashirama ma… maldito ah
-Sé que te gusta de esta forma
Lo penetraba una y otra vez escuchando sus alaridos por todo el cuarto de baño, me gustaba que me pidiera más porque sabe que eso le daría. Soy débil ante sus suplicas su mirada sus gestos; sus manos apretaban la orilla de jacuzzi, su ano apretaba deliciosamente mi pene no aguantaría mucho tiempo. Lo tomo de su espalda para levantarlo y que enredara sus brazos en mi cuello. Lo pego a la pared envistiéndolo seguidamente, lo puedo sentir, como se retorcía entre mis brazos sé que unas cuantas estocadas más también él se vendría y no falle; solo unas cuantas más ambos terminamos.
-Hashirama maldito –respiraba agitado –te corriste dentro
-No pude evitarlo, fue placentero como me apretabas –aun con mi cabeza escondida en su plano pecho
-Ya salte
-Aww yo quería estar más tiempo así
-No podemos
Con cuidado salgo de su interior mirando cómo se escurría mi seme de su interior, verlo parado dándome la espalda con el chorro del agua cayendo por su cuerpo, la marca de mis manos en su estrecha cintura sin dudarlo me pego a él metiendo dos de mis dedos por su ano abriéndolos como tijeras
-Oye que haces
-Así saldrá más rápido –le beso el hombro y apoya sus manos a la pared permitiendo que el agua cayera directamente en su espalda baja.
Después de un rato más en el agua nos acostamos en nuestra cama disfrutando uno del otro en un simple abrazo, de un momento a otro se me viene a la mente una idea algo descabellada pero maravillosa idea.
-Oye Dara-chan
-Que quieres
Estábamos abrasados de cucharita, tenía pegada su espalda a mi pecho y mis manos en su cintura el abrasaba una pequeña almohada
-No te gustaría tener otro bebe
-Q…que –se le atora el aire en su garganta comenzando a toser
-Sí que me dices… otro bebe, fue maravilloso verte con tu vientre lleno
-Cada día estás más tonto –escondió su cara en la almohada
-Vamos no es taaaan difícil
-Ya no tenemos la edad Hashirama, sabes que fue algo difícil lograr a nuestros niños. Pasamos por mucho antes de casarnos y estabilizar las empresas
-Lo sé pero ver a nuestros hijos convivir con niños más pequeños, se me vino a la mente otro bebe
-No lo sé Hashirama… deja me lo pienso bien dame tiempo
-Cuanto necesitas hasta mañana… hay, hay no pues hasta mañana no –siento como me aprieta mis costillas de un abrazo.
-Cállate y déjame dormir
-Como tú digas… mi hermoso Uchiha gruñón
Y así terminamos dormidos abrazados uno al otro.