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EL QUE SE FUE por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, les traigo el capítulo nuevo, aquí vemos lo que pasa con Seiya y Saga, un pequeño vistazo a su futuro antes del gran final, espero que les guste 

Capítulo 21.- Contraveneno

 

Una mañana de sol Seiya viajaba tranquilamente en el asiento del pasajero del auto de su esposo, Saga le había dicho que le tenía una sorpresa, Seiya sabía que en algo andaba Saga pero no tenía idea en que.  El castaño estaba acariciando su abultado vientre ausentemente mientras charlaba con Saga de todo y nada, el médico le había dicho que tenía que tomar su vida con tranquilidad hasta que llegue el momento de su alumbramiento, Seiya estaba casi de seis meses de gestación y había tenido muchas molestias, varias veces había tenido que ser hospitalizado, su estado era algo delicado pero Saga se había dedicado a cuidarlo con la ayuda de su suegro y su cuñada

- A dónde estamos yendo? – preguntó el castaño todo intrigado

- Ya te dije que es una sorpresa y te va a gustar, yo lo sé – respondió Saga todo críptico dando vuelta en la autopista y regresando por donde habían venido, Seiya frunció el ceño cuando regresaron a la urbanización de la casa de su padre, estos meses habían estado viviendo en casa de Aioros

- Te olvidaste la sorpresa?

- No no no… necesitaba hacer tiempo hasta que la sorpresa esté lista

- Oye… te pasaste la entrada – dijo Seiya señalando el portón de la casa de su padre

- No, no me he pasado nada, todo está fríamente calculado, no estamos yendo a la casa de tu padre

- A dónde estamos yendo?

- A nuestra casa – dijo el peliazul con una maravillosa sonrisa cuando entró por un portón de una casa que estaba dos calles más abajo, era una casa hermosa de tres pisos, sus jardines eran super amplios y había espacio para parquear un mínimo de 10 autos, Seiya miró la propiedad con ojos muy abiertos

- Como que nuestra casa?

- No podemos seguir viviendo en la casa de tu papá eternamente, aunque a él eso le hubiera encantado, entonces cuando empecé a buscar departamento tu papá insistió que quería ayudar

- Nosotros no podemos pagar esto

- No… no podemos, pero tu abuelo dijo que nunca nos dio regalo de matrimonio entonces nos compró la casa

- Y tu aceptaste? – Seiya arqueó una ceja cuando preguntó esto, una de las condiciones que Saga le puso a Seiya cuando se casaron era que no quería aceptar nada de su familia, él sabía que todos ellos tenían mucho dinero pero Saga no quería sentirse comprado, por eso las relaciones de Seiya con su familia se había enfriado un poco pero a raíz de su accidente y de que ambos estuvieron hospedados en casa de Aioros, todo eso había cambiado, Saga los había tratado más y los llegó a conocer y a tomar cariño, Saga se dio cuenta que la familia de Seiya era en verdad adinerada pero que lo que menos querían era comprarlos ni mucho menos, lo que ellos hacían lo hacían de corazón

- Bueno… no era lo que hubiera hecho en realidad pero… tu papá se siente muy solo, Seika ya mismo se casa y se va a ir a vivir en Europa, Aioros estaba muy triste la otra noche, imagínate que me hizo jurarle que nuestro hijo tiene que aprender a tocar el piano, luego me dijo que nos agradecería en el alma si no nos fuéramos a vivir lejos, tú quieres un perro y… yo solo quiero que tú seas feliz, he visto cómo te gusta tener a tu familia cerca y ellos son muy simpáticos – Saga se encogió de hombros cuando dijo esto

- Gracias mi amor… gracias gracias gracias – Seiya abrazó a Saga y lo besó todo efusivo, si había algo que a Seiya le hacía falta era tener más cerca  a su familia y ahora Saga se lo había concedido, esto era genial

- No tienes que agradecerme, ahora vamos adentro que todos nos están esperando

 

Saga se bajó del auto y con mucho cuidado ayudó a Seiya a bajar, luego lo cargó despacito y subió las pocas escaleras que los separaban del portón de la casa para ser recibidos por Aioros que estaba de pie en el marco de la puerta, Seiya entró a su nueva casa en los brazos de su esposo y encontró dentro a toda su familia, su hermana estaba allí, su papá, su abuelo, sus tíos, sus primos y además de todos ellos estaba Kanon también, todos se habían reunido para darle la sorpresa al castaño que emocionado los abrazó a todos mientras miraba curioso su nuevo hogar

 

Saga llevó a Seiya a todas las habitaciones, lo cargó de cuarto en cuarto y allí Seika iba explicando quién lo había decorado, quién había escogido los muebles, quién los había comprado, Seiya se sintió emocionado porque toda su familia había colaborado, el cuarto de juegos del segundo piso era fantástico, ese cuarto lo habían armado sus primos Ryuho y Alone, los dos muchachitos le prometieron a Seiya cuidar a su bebé y quedarse a dormir en su casa porque ahora el castaño tenía los mejores videojuegos y todas las comodidades del caso

 

Las salas y los ambientes abiertos de la casa los había escogido Seika, en el segundo piso había una salita que tenía una chimenea, allí Kanon había colgado la pintura que le había hecho a Seiya, la pintura estuvo inicialmente cubierta con una sábana y a Seiya se le fueron las lágrimas cuando Kanon la develó, era la pintura más hermosa que Seiya había visto en su vida, ese era sin duda el mejor regalo que Kanon le pudo haber dado en la vida…

 

La habitación del bebé la habían escogido Saga y Aioros, los muebles eran muy hermosos y sencillos, todo estaba decorado en tonos blanco y verde claro, Saga dijo que como no sabían el sexo de su bebé era preferible tenerlo todo medio unisex hasta que vayan al médico y lo confirmen.  La habitación principal de la casa era muy hermosa, todos esos muebles los había escogido Saga y a Seiya le encantó, el castaño estuvo sentado un momento en la amplia cama mientras su esposo le explicaba muy emocionado el plan de cable y los diversos aparatos que tenía conectados al mega televisor que estaba empotrado en la pared

 

Seika había organizado un almuerzo para todos, por lo que los visitantes se quedaron hasta la tarde en la nueva casa de Saga y Seiya, el plan no era que ellos se quedaran allí desde ese día, la casa estaba lista para ser habitada pero Saga aún no había hecho las maletas ni mucho menos, pero Seiya en cambio insistió en quedarse a dormir esa noche en su casa nueva, por lo que esa noche Saga armó una pequeña maleta de lo indispensable y ahora estaba con su esposo en el que sería su nuevo hogar

 

En la noche, Seiya estaba acomodado en muchas almohadas en medio de su inmensa cama, a Seiya si le había parecido un poco grande su cama, era de tres plazas, eso era un cambio a lo que estaba acostumbrado, Saga estaba de pie frente al televisor con un sinfín de controles remotos, el peliazul estaba tratando de hacer funcionar los aparatos porque quería ver el fútbol pero la tecnología le estaba ganando

- Ya deja de jugar con eso y ven a la cama – dijo Seiya que estaba acariciando su pancita ausentemente con una sonrisa en los labios, el castaño se sentía feliz esa noche, había sido un día muy emotivo para él

- No quieres ver el fútbol? – contestó Saga que seguía sin tener éxito y no podía conseguir señal

- Si pero… si no hay como pues no hay como, prefiero escuchar música, además tengo frío en esta inmensa cama que tenemos ahora, no te pareció un poquitín grande?

- Tal vez ahora que somos solo los dos, ya pronto seremos tres y cuando nuestro bebé se pase de cama cuando se despierte en la noche o no pueda dormir, me vas a agradecer tener una cama mas grande, es que me niego a dormir en el sillón, si se ve cómodo pero me niego – Saga señaló un sillón que había comprado que era de esos sillones en los que podía ver cómodamente la tele porque se reclinaba y toda la cosa, pero ya para dormir… como que no…

- Mmmmm… pensando a  futuro… eso me gusta – dijo Seiya y sonrió al recibir a su esposo en sus brazos, Saga dejó el control remoto de la tele junto al aparato y se sentó de frente a Seiya a su lado, se agachó para besarlo mientras ponía su mano en su vientre

- Ya sabes mi amor, yo soy práctico ante todo, wow… se está moviendo mucho – Saga estaba sintiendo cómo su bebé se movía, cada vez que lo hacía le parecía un milagro, Seiya aún estaba delicado pero al parecer su hijito crecía fuerte en su interior

- Yo creo que no solo a nosotros nos gusta el fútbol, lo malo es que su pelota es mi riñón – dijo Seiya y sonrió poniendo una mano en su parte baja del vientre a la derecha

- Ya luego le compraremos pelotas para que juegue, con el patio que tenemos ahora hasta un caballo le podremos comprar, oye… y si tenemos una niña?

- Eso no tiene nada que ver, mi hija jugará lo que ella quiera, si quiere jugar fútbol pues jugará fútbol, puede ser campeona de equitación o ser basquetbolista, si es una vaga y no le gusta hacer ejercicio pues… ojalá herede el talento artístico que tienes tu y su tío Kanon, esa pintura es hermosa – dijo Seiya y le brillaron los ojos, Saga sonrió de lado, él también era buenísimo para un dibujo pero no se comparaba con su hermano, Kanon era increíble

- Pues si… - Saga suspiró y sonrió, el solo pensamiento de su futuro hijo le alegraba la vida

 

- Oye mi amor, qué tanto hablabas con mi abuelo?

- Ohhh… lo que pasa es que ayer fui a la fiscalía para ayudar a resolver el juicio que nos plantearon por ese lío de la patente, te acuerdas que te lo comenté?

- Si… pero no me dijiste que fuiste a la fiscalía

- Se me olvidó… de cualquier manera fui a la fiscalía y fue bueno que haya ido porque el caso casi se pierde, conseguí que el juez desestimara la causa, la acusación del demandante no tenía piso, pero ese abogado que tiene tu abuelo casi deja que la causa siga a la próxima instancia, el tipo fue sin preparación alguna y luego estaba histérico conmigo, entonces tu abuelo me ofreció hoy trabajo dentro del holding principal, sería uno de los abogados que están encargado de los asuntos legales mas pesados de todas las empresas y trabajaría directamente con tu tío Julián – dijo Saga acomodándose de mejor manera en la cama sacándose las pantuflas y tapándose también con la manta que tenía Seiya en sus piernas

- Ohhhh por eso me dijo mi abuelo que te convenza de aceptar su propuesta – dijo Seiya cayendo en cuenta de la magnitud de lo que le habían ofrecido a Saga

- Eso dijo tu abuelo?

- Si, me dijo que no sabía que fueras tan buen abogado y que ya sabe cómo fue que me convenciste de casarme contigo, que tuviste al juez comiendo de la palma de tu mano y que trabajando en la importadora de computadoras estás subutilizado

- Algo así me dijo a mi también cuando me propuso el empleo

- Y lo vas a aceptar? – preguntó Seiya todo curioso

- Quieres que te diga la verdad?, bueno… me gustaría quedarme en donde estoy porque es un trabajo fresco en el que no tengo tantas presiones y mi sueldo es aceptable, pero… lo que me ofrece tu abuelo es muy muy atractivo, es un trabajo con mayor responsabilidad, no voy a ser el jefe pero voy a triplicar el sueldo, voy a tener más estrés y lo malo es que no voy a poder verte entre el día porque voy a ir a trabajar en los edificios del holding

- Eso sería hasta que yo regrese a trabajar, como Seika ya se va a Europa mi papá quiere que me haga cargo de la chocolatería y de la exportadora de plásticos, me dijo que quiere retirarse en un futuro no muy lejano y que ya aprendí suficiente en la empresa de computadoras, él quiere que cuando yo regrese a trabajar lo haga en sus empresas – Seiya dijo esto suavemente, su padre se lo había venido diciendo desde hace unos días pero el castaño no se había animado a decírselo a Saga

- Aioros se va a retirar?

- No exactamente, dice que quiere irlo dejando todo pausadamente, dice que quiere viajar y pasar algunas temporadas en Europa con Seika, pero para poder hacerlo necesita que yo asuma el control de las empresas

- Y tú que dijiste?

- Que aún faltan tres meses para que nazca mi bebé, lo bueno es que el holding tiene guardería y podré llevar a  mi pequeñito conmigo y traerlo a casa, si estamos los dos en el mismo edificio se facilitará todo no crees?

- Pues si, yo creo que debes hacer lo que te haga feliz, si quieres trabajar en las empresas de tu padre pues… yo estoy seguro de que te irá genial, no hay mejores manos que las tuyas

- Estás de acuerdo entonces?

- Claro amor… me gusta la idea de que estemos en el mismo edificio y de que podamos llevar a nuestro hijo con nosotros, al que me da pena dejar atrás es a Shaka, él se ha portado  muy bien con nosotros, ayer que lo vi te mandó muchos saludos

- Sorrento me llamó y me dijo que Shyru está encargado de todas mis cosas y que todo está saliendo más o menos bien, que habían contratado a otra persona en el lugar de Shun y que no ha habido problemas por ese lado

- Mmmm… - Saga no respondió nada pero Seiya se dio cuenta de que algo tenía su esposo en la punta de la lengua así que preguntó:

 

- Qué?, te enteraste de algo?

- Bueno… no sé si contártelo o no – dijo Saga todo dudoso, no quería enojar a su esposo, no le hacía bien a Seiya alterarse

- Cuéntame, que pasa? – Seiya estaba todo curioso, como no salía de casa pasaba aburrido y le encantaba enterarse de todos los chismes de la oficina que su marido le contaba

- Al parecer Shaka está de novio y las cosas van medias serias

- En serio?, pero eso es genial… o no? – Seiya frunció el ceño cuando vio la expresión de Saga

- Es que el novio de Shaka es Shun

- Shun???, en serio???, vaya… la piedra rodada cae en buen cimiento aparentemente, Shaka es muy bueno para él – dijo Seiya y se notó el resentimiento en su voz

- Seiya…

- No me digas que no es cierto porque si es cierto, Shun es… ay tu sabes cómo es – el castaño estaba molesto ante la sola mención del ex de su esposo

- Mi amor, lastimosamente tu solo has visto el mal lado de Shun, él no es una mala persona

- No te atrevas a defenderlo Saga – dijo Seiya y su tono fue muy frío

- No lo estoy defendiendo mi amor, es solo que Shun no es tan perverso como tú crees que es, eso es todo – contestó Saga en tono conciliador

- No creo que sea perverso o que destile maldad por los poros, yo creo que está totalmente desubicado en la vida y está obsesionado contigo, si está con Shaka ahora, supongo que lo debe amar por ende ya no debe amarte a ti pero… lo quiero lo más lejos posible de mí, de ti y de nuestro hijo, te juro Saga que si se atreve a acercarse a mi niño con malas intenciones… le paso con el carro, te lo juro – Seiya abrazó su pancita y sonaba muy serio cuando dijo esto

- No va a llegar a eso

- Eso no lo sabes, Shun está loco

- Tal vez un poco, pero para que estés tranquilo, Kanon me dijo que le dijo a Shun que no se acercara a nosotros y no lo ha hecho, Shaka en cambio me dijo que se fue de viaje y ahora está yendo a terapia, me dijo que quiere cambiar su vida y muchas cosas más, Shaka está contento y no hace más que hablar de él, no creo que Shun sea tan buen actor y lo tenga engañado, seguramente es verdad que están bien

- Pues que bueno – dijo Seiya pero su tono seguía siendo molesto, por lo que Saga se acomodó de mejor manera a su lado y lo acomodó en su pecho para abrazarlo, al besar sus cabellos le dijo:

- Si vez por qué no te lo quería contar?, no debes agitarte

- No me agito, es solo que no entiendo que un hombre como Shaka haya puesto sus ojos en Shun, espero de todo corazón que no le haga nada malo – dijo Seiya y meneó la cabeza, el castaño se movió un poco en la cama para cambiar de posición pero eso se le dificultó un poco por lo que fue Saga el que giró sobre si mismo, tomó la mano de su castaño esposo y la besó, luego en tono calmado dijo:

- Shun no es una mala persona, además de la canasta que nos mandó, Kanon me contó que fue al hospital a verte cuando estabas en terapia intensiva, me dijo que lo había visto muy arrepentido y genuinamente preocupado por ti y por nuestro bebé, repitiendo sus palabras, Kanon me dijo que Shun se estaba dando contra las paredes por el remordimiento, que hasta un rato de esos mientras hablaban se le fueron las lágrimas

- Y tú le crees?  - Seiya no pudo ocultar su sorpresa, él obviamente no creía el arrepentimiento de Shun ni mucho menos

- Me gustaría hacerlo, no solías decir tu mismo que no es bueno guardar resentimientos y que todo sería mejor si creemos en la buena fé de las personas? – Saga acarició la mejilla de Seiya que bajó un poco su pose defensiva y respondió:

- Eso era antes de conocer a Shun, él me atacó sin razón

- Él no sabía que estabas de encargo, si lo hubiera sabido no te hubiera tocado – dijo Saga con convicción

- Tu no lo puedes saber

- Si… si lo puedo saber, Seiya… no te he contado esto porque la verdad no tenía motivos de contártelo pero… no todo lo que pasó es culpa de Shun

- A qué te refieres? – Seiya frunció el ceño cuando preguntó esto, él no pensó que Saga le guardara mas secretos con respecto a su relación con Shun

- Shun es una persona sensible, en esencia buena y dulce

- Si claro… yo sé que tan dulce puede ser – dijo Seiya con puro sarcasmo

- No lo juzgues tan duramente, tu no sabes todo lo que ha tenido que pasar

- No no no… no me puedes lanzar tu carta de: “Tu creciste en una familia privilegiada y no tuviste que pasar penurias”, no es mi culpa el tener una familia que si me quiere – reclamó Seiya molesto, a veces cuando discutían, Saga le decía que él no sabía las penurias de la vida porque nació en una familia adinerada con padres cariñosos que no le hicieron pasar necesidades, a veces Seiya se sentía podrido por eso, precisamente porque no era su culpa, cada cual nace en la familia que puede

- No estoy hablando de penurias de ese tipo, Shun… cuando estábamos juntos él… perdió un bebé

- Un bebé?, tuyo? – esa noticia le cayó como balde de agua fría a Seiya que abrió mucho los ojos y se abrazó a sí mismo

- Si, Shun perdió un bebé mío, y eso lo golpeó durísimo, cayó en una crisis depresiva tenaz de la que hasta ahora no se puede recuperar, Shun no empezó a ir a terapia ahora, él ha ido por años, no fue su culpa la pérdida del bebé, no fue culpa de nadie lo que pasó pero Shun se puso muy mal… muy muy mal

- Por todos los dioses…

- Su dolor fue tan grande que me alejó a mi, a su hermano, a todo el mundo, casi pierde la carrera en la Universidad, se enfermó de todo porque no comía y no dormía, eso fue terrible, él sufrió muchísimo por eso, y es precisamente por todo esto que puedo afirmar que si Shun hubiera sabido que estabas de encargo, nunca te hubiera tocado, él solía decir que ese tipo de dolor no se lo desearía ni a su peor enemigo, entiendes ahora un poco por qué Shun es cómo es?, una pérdida tan grande como la que él pasó lo marca de por vida, lo cambia irremediablemente

- Por eso… por eso tu no querías continuar con los tratamientos, por eso tu no querías que yo… tu no querías que yo sufriera lo mismo, es eso, verdad?

- Claro que si, yo vi y sufrí en carne propia lo que pasó con Shun y no quería que tu pasaras por lo mismo, no quería que nuestra relación se acabara, no quería que tu sufrieras, lo que menos quiero en este mundo es que sufras algo tan terrible como lo es la pérdida de un hijo

- Pero… pero… él perdió el bebé… y tú lo dejaste? – Seiya estaba impactado por lo que estaba escuchando

- No, claro que no… las cosas no fueron así, fue una temporada muy dolorosa para los dos, yo no lo dejé, yo me quedé a su lado e hice todo lo que pude por él, por meses lo cuidé y lo consolé hasta que la situación fue insostenible para los dos, fue Shun el que se fue de la casa, fue Shun el que lo terminó todo, fue Shun el que me dejó a mí – Saga tomó la mano de Seiya cuando dijo esto, el castaño lucía pálido

- Ok., pero respóndeme una cosa y no te atrevas a mentirme Saga, cuando nos conocimos… tu no me llamaste enseguida, me llamaste luego de un par de meses, Saga dime la verdad, cuando nos conocimos tu… tu aún estabas con Shun?, aún él vivía en tu casa? – el corazón de Seiya latía con violencia, hasta ese momento el castaño estaba convencido de que Shun no tenía razón para odiarlo, ahora se estaba enterando que las cosas no eran tan blanco y negro como él las imaginaba

- La noche que nos conocimos… si, cuando salimos por primera vez… no, cuando te invité a salir todo había acabado entre Shun y yo, y es más… habían pasado algunas semanas desde que Shun se mudó antes de que saliéramos la primera vez

- Pero… pero tú siempre dices que te enamoraste de mi esa noche, en la lluvia… - Seiya hablaba con dolor y confusión, estos detalles de la historia no lo sabia

- Y es verdad, me enamoré de ti cuando me sonreíste bajo la lluvia, no sabía tu nombre pero tus ojos me hechizaron, me enamoré de ti y en esos momentos era un amor imposible porque yo no podía actuar sobre los sentimientos que estaban naciendo en mí, esa noche charlamos, tomamos café, nos reímos juntos pero por más que yo me estaba muriendo de ganas de besarte no lo hice, no podía hacerlo mientras Shun siguiera en mi vida, no podía faltarte de esa manera a ti… ni a él tampoco

- Shun sabe esto?, por eso me odia?, él cree que yo te robé de su lado?, se lo dijiste? – Seiya sentía una angustia horrible, él nunca pensó que en su vida pudiera haber sido “el otro”

- No Seiya… nunca se lo dije, mis problemas con Shun fueron muy graves y muy profundos, tu no tuviste nada que ver con eso, mi relación con él estaba muerta mucho antes de que yo te conociera y es más, ni relación con Shun hubiera terminado mucho antes si Shun no hubiera estado tan frágil luego de la pérdida del bebé

- Te quedaste con él por lástima entonces?

- Si… no me enorgullece pero… si… - Saga estaba muy serio en este punto, Seiya lo miraba y tenía un nudo en la garganta, él no sabía todo esto, por esto Shun lo odiaba… por esto Shun lo odiaba…, así que Seiya cerró los ojos y respiró profundamente, luego miró a Saga a los ojos y tomó su mano al decir:

- Dioses Saga… prométeme, prométeme que eso no nos va a pasar, prométeme que si se acaba el amor entre los dos, tú no te quedarás conmigo por lástima, todo podría soportar menos que me veas con lástima o con culpabilidad, prefiero que me odies a que me tengas pena, prométemelo Saga

- Si te hace sentir mejor está bien, te lo prometo, pero eso no va a pasar porque te amo con toda mi alma, te amo Seiya, tu eres mi vida, con total seguridad puedo decirte que nunca he amado a nadie con la fuerza con la que te amo a ti, mi vida solo tiene sentido porque tú estás a mi lado

- Me lo dices en serio?

- Claro que si Seiya… tu eres la persona más generosa, tierna, divertida y sexy que hay sobre la faz del planeta y estoy completa y perdidamente enamorado de ti, ahora… si te conté todo esto es básicamente porque no quiero esconderte nada, pero también para que entiendas un poquito a Shun, cuando tú estabas en el hospital créeme… si lo hubiera tenido en frente de mi lo hubiera matado, pero fue Kanon el que me tranquilizó y me hizo recordar todo esto, yo he intentado perdonarlo y seguir con mi vida, me gustaría que hicieras lo mismo, no es bueno que guardes rencor, yo creo que deberíamos perdonar y olvidar todo ese asunto, tú estás bien y nuestro bebé crece bien en tu vientre, es mejor ni pensar en esto, hay que dejarlo atrás, Shun no es parte de nuestras vidas y nada de lo que hizo ha causado daño permanente – Saga puso su mano en el vientre de su esposo que aún un poco contrariado le contestó:

- Ok., de perdonarlo ya lo perdoné pero no me pidas que olvide todo lo que pasó, eso no puedo Saga, me creo buena persona pero a eso no llego

- Cuándo lo perdonaste? – Saga preguntó intrigado, ellos no habían hablado de Shun en mucho tiempo y si le sorprendía el hecho de que Seiya lo hubiera perdonado

- Esa noche… esa noche en la que estaba en terapia intensiva y tú estabas a mi lado sentado en el suelo, cantándome una canción y tomando mi mano, esa noche en la que sentía que el dolor me iba a partir en dos, esa noche fue la que perdoné a Shun – dijo Seiya haciendo memoria, cuando habló se abrazó a sí mismo, Saga podía notar el dolor en el tono de Seiya, Seiya le había dicho muchas veces que esa fue la peor noche de su vida

- Por qué?, por qué lo perdonaste justo esa noche?

- Porque esa noche también sentía que mi bebé se perdía, sentí que mi bebé moría dentro de mí, entonces le ofrecí a todos los dioses que si tenían compasión de mí y me dejaban conservarlo, que si mi bebé nacía con bien, yo… yo perdonaría a aquel que tanto daño me hizo, me pareció un trato justo, no crees? – Seiya acarició su pancita una vez más

- Y lo vas a perdonar sin olvidar lo que hizo?, qué tipo de perdón es ese?

- El que puedo ofrecer ahora, mi bebé aún no nace y faltan tres meses, todo está bien y rezo todos los días porque las cosas sigan bien, todo lo que me contaste de él y de cómo terminó tu relación es en verdad denso pero… eso no justifica todo lo que hizo, no olvides que fue Shun el que lo complicó todo para mí y para mi bebé, si está arrepentido pues ojalá le dure y se racionalice, espero que si está con Shaka lo sepa valorar, él es un buen hombre que se merece lo mejor de la vida – esto dijo Seiya y lo dijo en serio, él apreciaba a su jefe por sobre cualquier cosa

- Entonces si le deseas felicidad a Shun?

- Solo porque estamos hablando de Shaka también – dijo Seiya pero su tono se suavizó al decir esto, Saga sonrió y besó a Seiya en los labios, el peliazul sabía que su muy temperamental esposo lo que necesitaba era tiempo para poder dejar todo en su pasado, cuando su hijo naciera, Seiya sería capaz de olvidarlo todo, ahora aún estaba delicado y en tratamiento, estaba en cama y había tenido que ser hospitalizado algunas veces en estos últimos cuatro meses, era lógico que no pudiera perdonar a Shun al 100%

 

A la mañana siguiente Saga acompañó a Seiya a su chequeo médico, era su chequeo de rutina, el médico de Seiya lo tenía muy bien controlado y al realizar el chequeo a su paciente se mostró complacido, los exámenes de sangre que se había hecho Seiya estaban dentro de lo normal, su presión también, la sorpresa vino cuando le hicieron el ecosonograma en 3D, allí los sorprendidos padres pudieron ver claramente que no era un bebé sino dos los que venían en camino, eso los futuros padres no se lo esperaron, y luego del pánico inicial sintieron una inmensa alegría, dos bebés… dos…

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado y nos vemos en el gran final el lunes, ahí vemos el futuro de todos, qué pasará cuando se encuentren cara a cara???

Eso es el lunes en el final


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